Que cada uno Crea lo que Quiera?

Recuerdo que un compaero me deca: Que cada uno crea lo que quiera. Si te sientes bien siendo cristiano, Por qu no?, pero a m eso no me va. A primera vista esta forma de pensar parece tolerante, pero pensndolo bien no tiene pies ni cabeza. Es cierto, cada uno es libre y nadie puede decidir por otro. Pero para escoger bien no es necesario navegar por las diferentes corrientes de pensamiento y hacerse su propia opinin, pues sta no dejar de ser una opinin ms. Lo que uno debe preguntarse es si Dios mismo se revel al hombre. La Biblia afirma que s. Por lo tanto, para tomar buenas decisiones en la vida, es necesario leer la Biblia, principalmente los evangelios. stos no nos hablan de una filosofa o de un conjunto de reglas morales, sino de una persona llamada Jess. Por la fe aprendemos a conocerle, no como un personaje del pasado, ni siquiera como un modelo a imitar, sino como nuestro Salvador y Seor. Si bien es cierto que no todos los creyentes tienen su encuentro con Dios de la misma manera, todos reconocen haber ido a l por medio de Jesucristo. La gracia y la verdad vinieron por medio de Jesucristo. A Dios nadie le vio jams; el unignito Hijo, que est en el seno del Padre, l le ha dado a conocer (Juan 1:17-18).

Estad Firmes en la Fe Abraham envi un siervo suyo a su pas a buscar una esposa para su hijo Isaac. Dios permiti que encontrase a la joven que corresponda a los deseos de su seor. Aceptara Rebeca dejar a su familia y su pas para irse con un desconocido? Su hermano y su madre le preguntaron: Irs t con este varn?, y ella respondi: S, ir (Gnesis 24:58). Ella no conoca ni a su futuro esposo ni el lejano pas adonde ira. Rebeca simplemente crey lo que aquel mensajero le deca. Su decisin fue dictada por su fe. Muchos siglos despus Rut, una joven viuda sin recursos, dej todo, familia y pas, para seguir a su suegra, que quera volver junto a ese Dios del cual se haba alejado. Y cuando sta quiso persuadirla de que no la siguiese, Rut le respondi: A dondequiera que t fueres, ir yo tu Dios ser mi Dios (Rut 1:16). Ester arriesg su vida para pedir al monarca persa la liberacin de su pueblo. Despus de dudar un poco, lo cual comprendemos bien, mand decir a Mardoqueo: Entrar a ver al rey y si perezco, que perezca (Ester 4:16). Abraham, Moiss (Hebreos 11:8, 24) y Daniel (Daniel 1:8), llamados tambin a tomar una decisin difcil, no temieron seguir en el camino de la fe. Ante tan gran nube de testigos,

corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jess, el autor y consumador de la fe (Hebreos 12:1-2).