Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
NICOLAS DE HIDALGO
SISTEMA ENDOCRINO
Introducción
También se hablara de las hormonas que son secretadas por estas glándulas y
cual es la función que realizan en el organismo animal y su importancia de que sean
segregadas por las glándulas endocrinas.
El objetivo del trabajo es que el lector entienda que es el sistema endocrino, cual
es la función que realiza, que conozca que glándulas lo conforman y que sepa cuales
son las hormonas que secretan dichas glándulas y cual es su función en el organismo.
Endocrinología general
Las hormonas son sustancias químicas secretadas por varias células en los
líquidos corporales, que ejercen influencia en otras células (Banks, 1996).
Las hormonas son por lo general secretadas por las glándulas endocrinas en
cantidades muy pequeñas, especialmente si se comparan con las secreciones
procedentes de las glándulas exocrinas (Sisson y Grossman, 1996).
Por lo tanto, una glándula endocrina puede tener una hiperfunción o hipofunción,
que afectara a la fisiología de otros órganos, tejidos o glándulas dentro de rodo el
organismo (Sisson y Grossman, 1996).
Las glándulas que componen el sistema endocrino son: hipófisis, pineal, tiroides,
paratiroides, timo, islotes pancreáticos, adrenales y gónadas (testículos y ovarios). El
hígado y el páncreas tienen una función exocrina y otra endocrina (Sisson y Grossman,
1996).
Las glándulas endocrinas o glándulas sin conductos son aquellas que descargan
sus productos secretores en la sangre, la linfa, o el liquido tisular, que los transportan
hasta los órganos diana, susceptibles para responder a las instrucciones que estos
productos representan (Wensing, 1999).
Al ultimo tipo corresponden los órganos con una función primaria bastante
diferentes, pero que incluye componentes endocrinos; los riñones, el hígado, el timo, el
corazón y tracto gastrointestinal, son los mejores ejemplos (Wensing, 1999).
Hipófisis
La hipófisis se ha considerado como la “glándula maestra”, por la gran cantidad
de hormonas que libera al torrente circulatorio para regular, directa o indirectamente, la
mayor parte de las funciones del cuerpo.
Hipófisis (glándula pituitaria) está compuesta por dos partes de diferente origen
embriológico, la neurohipófisis, y se halla situada como un pequeño órgano impar en la
fosa hipofisaria, entre el cruce de los nervios ópticos en el quiasma óptico y el cuerpo
mamilar, ventral al diencéfalo (Köning y Liebich, 2005).
La glándula esta revestida directamente por una cubierta de dura que sirve
también de techo a la depresión; la dura se extiende desde su borde abrazando y
circunscribiendo al tallo hipofisiario desde todos los lados; esta organización hace
extremadamente difícil poder sacar el encéfalo con la hipófisis unida durante la autopsia
(Wensing, 1999).
No se sabe que la pars tuberalis tenga alguna función endocrina definida, pero el
lóbulo intermedio está presente en la mayoría de los vertebrados y funciona para
producir la hormona estimulante de los melanocitos o de los melanóforos, que controla
la pigmentación de la piel.
Hipófisis
Adenohipófisis: Neurohipófisis
Lóbulo infundibular
Adenohipófisis
Lóbulo anterior
Se cree que las células llamadas cromófobas son un precursor inactivo de las
que producen las hormonas de la adenohipófisis.
Las células cromófobas son pequeñas y redondas con escaso citoplasma y sin
gránulos evidentes al observarse mediante microscopio de luz. Al observarse por medio
de microscopia electrónica, son evidentes pequeños gránulos. Estas células pueden ser
en realidad células cromífilas en estado de degranulación parcial, y forman un
reservorio del que se originan otras células granuladas específicas (Banks, 1996).
Las células basófilas son más grandes que las acidófilas y presentan gránulos
positivos a la tinción de PAS (Banks, 1996). Las basófilias son: gonadotropas FSH que
producen FSH; gonadotropas LH que producen TSH y corticotropas que producen
ACTH.
Entre los tipos celulares acidofilos cuentan, en los bovinos, las células α, que
elaboran la hormona somatrotopa (STH), que actúa directamente sobre el
metabolismo y el crecimiento, y las células ε, que producen la hormona luteotropa
(LTH = prolactina), que frena la maduración de nuevos folículos en el ovario y tiene una
portación decisiva para el curso normal de la gestación (Krahmer y Schröder, 1979).
A los tipos celulares anfófilos pertenecen las células ξ, que producen la hormona
adrenocorticotropa (ACTH), de la que depende la función de la corteza adrenal, y las
células σ1 productoras de la hormona luteinizante (LH) o estimulante de las células
intersticiales (ICSH). Estas se encuentran también en el lóbulo infundibular (Krahmer y
Schröder, 1979).
Son del tipo basófilos las células β, que se hallan principalmente en el lóbulo
infundibular, y las σ2 (Krahmer y Schröder, 1979).
El origen y el curso de los vasos que irriga la adenohipófisis varia entre las
especies domésticas, pero todos forman un sistema portal hipofisiario (Banks, 1996).
Las arterias hipofisiarias rostrales constituyen un anillo arterial alrededor de la
eminencia media y dan origen a las arteriolas que irrigan al hipotálamo, incluyendo el
tallo infundibular (Banks, 1996).
El sistema portal hipofisario, que está formada por asas capilares primarias,
venas y plexos capilares secundarios, proporciona la principal irrigación sanguínea a la
parte distal (Banks, 1996).
Lóbulo intermedio
Lóbulo infundibular
Esta formado igualmente por cordones epiteliales, pero en esta caso hay menos
capilares que en el lóbulo anterior. Sin embargo, por aquí cruzan numerosos grandes
vasos. Se encuentran folículos más o menos abundantemente llenos de coloide
(Krahmer y Schröder, 1979).
Además de las células β ya citadas, pueden hallarse otras de citoplasma
finamente granulado, cuya importancia no se conoce bien todavía (Krahmer y Schröder,
1979).
Neurohipófisis
Infundíbulo
Lóbulo posterior
Lo componen las neuristas de los núcleos del hipotálamo citados mas arriba,
además de plexos nerviosos, vasos y neuroglia. Las células de glía son más o menos
ricas en prolongaciones, se llaman pituicitos y deben ser las responsables de la
síntesis de las proteínas portadoras (neurofisinas) de las dos hormonas oxitocina y
vasopresina, las cuales pasan al torrente circulatorio una vez liberadas, es decir,
desligadas de las neurofisinas (Krahmer y Schröder, 1979).
La oxitocina estimula la contracción del musculo liso del útero y de las células
mioepiteliales de la ubre. La vasopresina estimula la vasoconstricción y promueve la
reabsorción de líquidos por los riñones (Wensing, 1999).
Epífisis
Glándula pineal o epífisis es una parte del diencéfalo y se localiza como órgano
impar alargado en el epitálamo. Su tamaño presenta grandes variaciones dependientes
a la especie pero tambien son individuales (Köning y Liebich, 2005).
Glándula tiroides
El tiroides deriva del endodermo, es decir, del suelo del intestino cefálico. Es un
órgano impar mas o menos lobulado (Krahmer y Schröder, 1979).
La forma de los lóbulos varia en las distintas especies. En los équidos es oval, en
el toro triangular, en los pequeños rumiantes alargada y cilíndrica y en los carnívoros,
alargada y plana (Climent, et al, 1998).
En los pequeños rumiantes los lóbulos tiroideos tienen forma de huso o de rodillo
y están situados en posición dorsolateral con respecto a la tráquea, a la altura del
primer cartílago traqueal, a menudo falta el istmo (Köning y Liebich, 2005).
La glándula madura esta cubierta por una capsula e tejido conectivo, que se une
con los órganos vecinos. Es de color rojo-ladrillo generalmente y presenta una textura
bastante granulosa a causa de la multitud de folículos que la componen (Wensing,
1999).
La glándula esta irrigada principalmente por la arteria tiroidea craneal, que nace
de la arteria carótida común y se curva alrededor del polo craneal (Wensing, 1999).
Los vasos linfáticos del tiroides se dirigen a los nódulos linfáticos cervicales o
directamente hacia el tronco traqueal (Köning y Liebich, 2005).
Glándulas paratiroides
Las paratiroides III descienden por el cuello con el timo en desarrollo y llegan a
descansar en varios niveles, por lo general cerca de la bifurcaciones carotideas, aunque
en el caballo lo hacen mucho mas lejos, en dirección caudal, en el pueden incluso
alcanzar la entrada del tórax (Wensing, 1999).
Gato
Perro
Cerdo
Pequeños rumiantes
Caballo
Conviene saber que las paratiroides se tiñen de un azul intenso tras la inyección
intravenosa de azul de metileno, lo que facilita su localización (Climent, et al, 1998).
Glándulas adrenales
Son masas glandulares formadas por una corteza de origen mesoblástico, y una
medula de origen ectoblástico. Sus células proliferan y se hunden en el mesenquima
subyacente (fig. 9) formando un acumulo de color mas oscuro que las células vecinas
(Climent, et al, 1998).
Las glándulas adrenales son pares y se sitúan junto al techo del abdomen, cerca
de la unión toracolumbar. Son retroperitoneales y habitualmente se localizan
craneoventralmente al riñón correspondiente, mas mediales al caballo (Wensing, 1999).
Las glándulas adrenales son cuerpos sólidos firmes que se fracturan con
facilidad cuando se doblan. La superficie fracturada o seccionada muestra la división
entre una corteza externa y una medula interna. La corteza, cubierta por una capsula
fibrosa, es de coloración amarillenta y esta estriada radialmente; la medula, mucho mas
oscura, tiene una apariencia mas uniforme (Wensing, 1999).
El paraganglio aórtico abdominal está compuesto por varios grupos celulares que
se localizan en la proximidad de la aorta abdominal. Existen diferencias de posición
entre los individuos y entre distintas especies animales (Köning y Liebich, 2005).
Páncreas
Las células de los islotes se derivan del endodermo; se separan del sistema de
conductos en desarrollo y se establecen como células endocrinas (Banks, 1996).
Los tipos celulares básicos de los islotes son células alfa y beta (Banks, 1996).
Las células alfa son poligonales con núcleos con una distribución basta de
heterocromatina (Banks, 1996).
Las células beta son estructuralmente similares a las células alfa, pero sus
gránulos son solubles en alcohol (Banks, 1996).
LITERATURA CITADA
Climent S., Sarasa M., Muniesa P., Latorre R. 1998. Manual de anatomía y embriología
de los animales domésticos. Aparato digestivo. Acribia. España. p.p 433
Banks W. J. 1996. Histología veterinaria aplicada. 2° ed. Manual moderno. México D.F.
p.p. 750.