La liquidación de Luz y Fuerza del Centro es un golpe contra la industria
eléctrica nacional. La energía eléctrica es un servicio público y un bien de todos los mexicanos. Sin embargo, los gobiernos panistas han buscado convertirlo en un negocio privado, por eso hoy el 40 por ciento de la electricidad la producen empresas privadas y se le venden a la CFE a precios elevadísimos; esto ha provocado que las tarifas domésticas se hayan elevado en más del 100 por ciento.
Días antes de la liquidación, el gobierno entregó el manejo de mil
kilómetros de fibra óptica de LyFC a la empresa WL Comunicaciones, representada por Diego Fernández de Cevallos y cuyos dueños son los también panistas Fernando Canales Clariond y Ernesto Martens, ex secretarios de Energía de Vicente Fox.
El gobierno federal dice que es culpa de los trabajadores la ineficiencia y
el alto costo de la empresa, pero no dice que no ha invertido en modernizar ni mantener los equipos, que las tarifas las fija Hacienda y que los 40 mil millones de pesos de subsidio que recibía, se destinaban íntegros a la compra de luz a la CFE que la vendía por encima del costo. También señala como privilegios los sueldos y prestaciones, pero no dice que el salario promedio de los electricistas es de 6 mil pesos.
*El decreto que extingue a Luz y fuerza del Centro es inconstitucional.
El cierre y la ocupación policíaca de Luz y Fuerza, el despido de más de 50 mil trabajadores y el desconocimiento del SME, violan la Constitución, la Ley Federal del Trabajo y el contrato Colectivo de Trabajo. La Electricidad es un Servicio Público fundamental que es regulado por la Constitución.
¡Todos a defender los derechos del pueblo!
ORGANÍZATE Y LUCHA. ¡VAMOS A RESCATAR A MÉXICO! MOVIMIENTO EN DEFENSA DE LA ECONOMIA POPULAR, EL PETRÓLEO Y LA SOBERANÍA NACIONAL
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