Sunteți pe pagina 1din 19
punisse. 16.2 LA TENTATIVA 10.211 Fundamento de Ia sancién del delito tentado a punicién del de! kn relacién con el fundamento de la punicién del delito tentado, ¢y, posiciones que procuran una explicacién con base en argume, Ste NOS gh” tivos, subjetivos o bien de c a racter mixto. Asi, por ejemplo, en e| ae ; : me, de los casos la tentativa es materia de sancion pe nal, Comoquiera ety ue p, su intermedio el bien juridico ha sido puesto en riesgo, efectivo o cong. por lo que, en dicho orden de ideas, existié seriamente una posibitiqag ad de AS Posturay @ Seguin et cua, muestr al lesién o dafio. A su turno, en cambio, por regla general, para |, subjetivas la explicacién vendré dada por un punto de vist en el hecho tentado se manifiesta una voluntad Contraria Entre jue el peligro de la norma, valga decir, al ordenamiento juridico en cuanto tal ' anto las posturas mixtas serdn aquellas que, lo 1 a lesion, + 546 pare oben uric, thn ar an ti, cat linet a in, A : te procede, pr ende,» continual aa la puibllded ela torttiva vo ban ented at hv, a sas punts de pari wa et vali de rotegido en tn respective norma pen Det in tentativa debe ser sunionada sat a on ella poco fat para la vealizacin PEinlota de to elemontos estructuraes del tipo penal objetivo, sisinein ‘ie un Hewgo proxi de esd ue pe {que ast las cosas, evidencia la existen fara el respective bien jurfdico: se trata, por ello, de una situacion a todas faces objetivamente peligrosa™™. {Aqui la valoracién del peligro para el bien jurico, claramente, s¢ und con base en términos exclusivamente causalistas, conforme a aug 1 mundo roid {Que en su momento tuvieron los estudios relacionados con wusalidad. Inicialmente, esto so intant6 desde pers izacién dot hecho, os decir 0 vista do por las reglas de la peetivas de interpretacién posteriores a la real ‘do se quiso hacer esto mismo desde ol punto os dol auto, val ex post, Ms t a bservador imparcial puesto en las mismas condicion decir, a partir de un criterio ex anto™. sncia det punto de partida, ats . y como consecuet ‘actos que apenas sirven, in este orden de id referido, es elaro que par para 1a preparacion del dito devienen habida cuenta mxigen un comienzo de ejectucion de 18 conducta punible en si mi ‘derada, comienzo de ejecucion que ¢ ‘et que verdaderamente repr n riesgo de YesiGn para ot bien juridico, ‘eoria “ol comionzo do 1a {Gon rastn sefiala Farré ‘Trepat que pare ost) © ca : ia voluntad del autor, sino tentativa no se hizo depend. 1oaicarier de ki Mon in sic del bien juriico,disingwléndon Ijecutivos y considerando que s6lo os ‘animos ndependiontemente de ta dificle ‘do actos y aquellos yerados ostos vil> a estas posiciones los n completamente impunes, Esto de que estas teorias © 1 do tn pon 0 18 José Ramin, “Pundamant “Temi, 1999. pp: 8Y 5S nt oct jrapraenc Darel och + Bat mento de la punibilidad en Mectamente objetivo, Par ive bien jurSdloc: 99 tata. per alia, do une enc ee Pees objetivamente peligrosa™, Tw POF elo, de una sieuacién a todas ‘Aqui la valoracién det peligro para ot bi ton juridico,claramente, se pro- por las reglas de la causalidad. tnictalrr pectivas do interpretacién posteriores a oa oe ae eee realizacion del hecho, es decir ex past. Mis tarde se quiso hacer esto mismo desde el punte de vise de un observador imparcial puesto en las mismas condiciones, decir, a partir de un critario ex ante™, mort Eneste orden de ideas, y como consecuencia del punto de partida, ars ferido, es claro que para estas posiciones los actos que apenas sirven para la preparacién del delito devienen completamente impunes Esto, habida cuenta de que estas teorias exigen un comieneo de ejecucién de 1a conducta punible en si misma considerada, comienzo de ejecucién que es 1 que verdaderamente representa un riesgo de lesién para el bien juridico Con razén sefiala Farré Trepat que para esta teoria “el comienzo de la tentativa no se hizo depender, légicamente, de la voluntad del autor, sino e una cierta proximidad con la lesin del bien juridico, distinguiéndose ‘entre actos preparatorios y ejecutivos y considerando que séio les cltimos conforman la tentativa””*. Lo anterior, independientemente de la dificul- tad que surge a la hora de diferenciar entre dicho tipo de actos y aquellos, que cronolégicamente apenas si le han precedido, considerados estos «l- para la realizacién posterior Duce Anes Monn ee de injusto punible, Dcho en otros términos, lo afirmado con antrinigg Signifca que ls actos preparatoros lejos se encuentran de poner eng el respectivo bien juriico, razén por la cual en consecueneia, no deben ae objeto de represién penal. “Afiidase a lo anterior que, desde una posture abjetiva,tampocohataig lugar a sancionar la llamada tentativa inidonea, y queda reservada ‘i6n tinica y exclusivamente para aquellos actos que serian adectados » {déneos para la produccién 0 consumacién de ta conducta punibe, Yq que en verdad, en aquellos supuestos de inidoneidad, no existirfaningss peligro para el interés abjeto de proteccién penal, motive por el cual se explicaria la ya aludida impunidad. Asimismo, una teoria objetiva permite diforenciar, para efectos puni. {lvos, entre conato y consumacién, y se debe 0 se puede (dependienda dg si la rebaja es obligatoria o facultativa) rebajar la pena cuando el deine no alcanza su perfeccién, pues, en estos casos, es claro que el injusto os ‘muicho menor que cuando se realiza planamente el tipo penal ~ Teorias subjetivas. Cosa completamente distinta a lo que se viene de observar sucede en las lamadas teorias subjetivas, pues, como lo sefiala 1a doctrina, “el fundamento de la punicién de la tentativa se encuentra, segiin las teorias subjotivas, en la voluntad del autor objetivamente mani. festada de cometer un delito. Es decir, en la voluntad del autor contraria al Derecho”. Lo que importa en las teorias subjetivas, en este orden de cestimaciones, es la mala conciencia del autor, su mala voluntad, en algunos casos, como evidente y clara manifestacién de su poligrosidad social, desu proclividad al delito; de suerte que lo trascendental estaria configurado por ‘el mero desvalor de accién, el cual, en consecuencia, constituiria por si solo ‘una buena raz6n para la punibilidad del respectivo comportamiento, Lo anterior, t6rminos, significa que la pregunta de si el bien juridico anew ese eos es eats wa contrasia alas normas 0a los valores ético-sociales, Juncus 2 ‘con arreglo a la ~ Teorias mixtas. Finalmente, como se anticipé desde un principio, también existen en relacién con el fundamento de la punicién del delito limperfecto, posturas que a la vez que tienen en cuenta criterias objetivos, hacen lo propio con criterios subjetivos, a efectos de justificar plenamente dicha cuestién. Para este tercer grupo de teorias, a razén de merecimiento de pena estaria relacionada con la puesta en riesgo del bien juridico que in de una voluntad contraria a se mezclan pues en estas teorias ingredientes cexplicar la imposicién de la sancién penal en ‘cuenta dinicamente el aspecto objet ‘surgir de una posicion que tenga en inietnnnn onset tin © subjetivo de la conducta”™. Asi, es nece: iva Configurar el injusto penal teniendo en cuenta, a la vez, el desvalor dg ‘accion y ol desvalor de resultado ‘Ahora bien, dentro de estas teorfas mixtas resaltan, entre otras, tas siguientes: en primer lugar, la tesis del “plan objetivo para la cual hab ya tentativa cuando la voluntad delictiva se manifiesta 0 Se expresa en Iq fceién que segan el plan concreto del autor conduciria a la realizacién de la descripeidn tipica. En segundo lugar, existe la “eoria del autor”, para a ‘cual la puesta en peligro para el bien jurfdico radica en la expresa volun- tad del agente de realizar el hecho punible. También se ha destacado la “vearia del comienzo inmediato de la realizacién tipica” la cual exige que ‘el autor haya dado inicio a los actos descritos en el respectivo tipo penal. En cuarto lugar, se habla dela “teoria de la irretractabilidad”, seqiin la cual cision criminal exteriorizada en el hecho, de por si, es ya irretractable, Pero, sin duda, la teoria que jalona hoy por hey la discusién, por lo menos fn el contexto alemén, es la “teoria de la impresién”, en donde a criterios ‘bjetivos y subjetivos se suman otros de necesidad de pena, de suerte que no basta con la puesta en marcha de la voluntad criminal y el subsiguiente peligro para el bien juridico, pues, ademas de ello, se requiere que en el resto de los coasociados se haya visto afectada la confianza en la vigencia de las normas*™ En el caso colombiano, importa también precisario, una postura mixta hha predominado desde antafo, lo mismo en la doctrina que en la jurispru- ddencia, situacién que perdura bajo la vigencia del Cédigo Penal de 2000, Esto se sostiene ya que ol articulo 27 del citado cédigo exige, en primer lugar, la realizacién de actos de ejecucién, de donde se sigue que no son objeto de sancién penal los actos meramente preparatorios, es decir, aque- los que sélo sirven para la facilitacién de la realizacién futura del injusto; asimismo, y jendo asi lo anterior, facitmente se puede ‘asposicdn existen criterios de tipo otjetive Serrancipio, la punicién det delito tentade Sate, que las tesis objetivas, como se dijo o eMeamienzo de ejecucién de la condueta yy Set hecho, asf como la realizacién de actos a fatiicto™:, amén que establecen rebajas Stople conato"™, toda lo cus ‘Shsagrado en el tenor lit ihn ontorme al roe ecuads pars a consumacon baits de po oigern en ane de Sogn vine do ver, hall certo i dl articulo 27 del Codigo Penal de 2000 rer, ademas de lo antero,eisten también de ote lade enero de ago atin, los cuales, en este orden de ideas acosegen pea pas tec mi tern de fname sa ena the, Al fects, repérese que la norma de que se tare habia ee Giese BT eit C.F dn 2000, roanraps tnsions of ctr pe tuetarelo 22 dal C. Pde 1960 deacon “naquivocammies dace ‘is conmumacin do la conduct pumila, lo cua he ado none por tigi sector dela docrinn ono sentido que one Ciige slave ensign Iaventatva qe ha sido levada 0 cabo con dlo dete de priser grado ost colo esa intnsided dol querer, en elect, ewarfainoyuvecarante Srpida ala consumacin de In conduct pun, eorcerpendendo pe femme i intencn oon a resultado supa tealizacin foe iarnumpia forbear ence la vohinia del sets, Aunque fo rv enue dicho rerio también admin oto pode inerpretacin, a sabe, que lege [ner colobano resaliaodertaca a inporvancia dal plan oavidualrnnte trrdo por el aut, como exprestmente we eige en guns lilies frees at por ejemplo, en el Codigo Penal alemén (SE), en donde 9 perdgrae 22 enuableco que “intent un hecho penal quien, do acuerdo con Su repesentacion del hecho, e disponeiniediatamente a a ealizacién pe Por lo demés, y sumado a lo anterior, repérese asi mismo que, por otra parte, el inciso segundo del articulo 27 del Cédigo Penal de 2000, en donde ira del desistimiento malogrado o fracasado, resalta evi- dentro de la estructura ee oe peemipprnperer lar, no son ajenos ‘wntado se hace en el Cédigo Pens ‘80 sostuvo, una posicion de cont punicién de esta figura. Asi las casas, no convencen las posiciones xq. Eivamente gubjetives, pues yerran al estructurar el injusto de la tentatiyg Gnicamente en la mala voluntad del agente, en el solo desvalor de accign ‘oon un concepto de injusto personal a ultranza; a su tUrno, las direerig, hes objetivas se equivocan al no otorgar relevancia alguna al componentg ‘Subjetivo dentro de la estructura del injusto penal. Que el injusto tiene por igual componentes objetivos y subjetivos es algo que también vale parg Ja conducta tipica que, por factores externos que impiden ta realizacén completa de los elementos del tipo penal objetivo, apenas alcanza la fase do ejecucién, En consecuencia, razones metodol6gicas y de derecho positivo sugieren {que lo mas apropiado es partir de las denominadas posiciones o posty. ras eclécticas, esto es aquellas que tienen en cuenta criterios subjetivos ¥ objetivos al momento de hallar un fundamento s6lido que explique la unibilidad del delito tontado, pues, como lo sostiene la doctrina nacional, todos los estuerzos del derecho penal por explicar el compor- tamionto humano con base en un soo frente siempre han fracasado Los actos humanos no se conforman con un mero aspecto, como el saber humane lo deberia tener claro; la accién humana —para resi ‘ira al mximo-no es soo lo interno, ni tampaco apenas Io extern Ia conducta humana tiene, como minimo, estos des camponentes, 10 subjetivo y 10 objetivo, y el derecho penal debe asumir esa verdad, Admitiendo que la naturaleza del injusto penal no se puede perilar por fuera dela acc del hombre con todos sus ingrediontes Gnticos y axioldgicos. ¥ la tentativa, como toda condueta humana, debe seguir tura tipica del delito tentado primer lugar, el dolo igencia de actos de ee nes ajenas @ seitede soguidamente So tentative slo admite la moda Ga primer elemento dentro de la est, elaconado Con el aspecto subjetiva, PO penal de tentativa Deesta suorte, es bas. del conato, lweexistonci tai ot sueto ha actuad con doo, eae Pee is rete 1a entation 2610 adniiia ta pms a cn ae aes eae y ‘Seramente imprudentes, pues, como lo sehalala doctrina “solo cae sme me Ye inp se necho en un tipo penal determinado™™ mets ee 'Sahemerpameuebemree te tee area as ee aes oe eee Diels one eae es ee ae eee Sele nel se irra eteaT a Con todo, segiin ya se advirti6, se discute sila tentativa admite las dis tintas clases de doloo si, por el contrario, s6lo cabria en relacién con alguna 22 del Cédigo hhechos consti- uve Angus Mone SS to de primer grado a dole directo de segundo grado 0 de consecumnig, aero, erat gan su apartado final adopt 8 modi cone dean to venta Pues bien, sondo allo as, cabe tema, ‘fue 1o sus enn doctina nacional que en In @r308, seh vege aaaanenree es atria te tentativa es perfectamente pose hablar Glas ros casos de dla acabadas de refer, mists GUE, Como 50 ving de ver se enewenran rfundias en el ckadoartcul 22 = La tontativa como limite minim de la intervencion peal: La ex. geoca de atone ajecnclén Desde los prticos, Cuno Manes, so acu Toor del teens par tferenciar as stints ets que debe tomar el sje sto de aconducta pune st, con el finde stable Calls do lla Inceresan al derecho penal cules, pore conrato, eben

S-ar putea să vă placă și