Avior: MIRES, Fernando. nM permanente, las revoluciones soci Ed. Ed. Siglo XI, México, 1988, “Cuba: entre Marti y las monjaiias”. les en América Latine, 3, CUBA: ENTRE MA Pocos procesos histéricas han ejercido tanta fascinacida como Ja revolucién cuoana, Basta slo recordar a las generaciones iticas que durante los adios sesenta siguieron con pasion la gesta de aquellos barbudos que sin cas armas que unos poces fusiles y con una increible voluntad lograban a0 sélo derrocar una dictadura, sino ademés desafiar a la potencia nulitar més grande del planeta y establecer las bases para un nuevo régimen social. Partidos y movimientos nat " marxistas y cristianos se sentfan atraidos por al. lar la odisea de en que Castro se irenzaba en durisimas aquellos poderes de la izquierda internacior (dea de una revolucién continental no. yrmar la oLas en 1967, verdadere int luciéa latinoamericana: desde la sierra boliviana, luchando contr elércitos y su propia ana, tremenda 2 incluso viajaban bacia Cuba como quien cree haber encon- trado el paraiso perdido, Pero quizd por so | bana dejaba poco a poco de ser entendida po ? coavertirse’en victima de proyecciones e ideologiss cuyo punto de origen no se encontraba en Ia isia. ‘tin hoy, varios alios después de la gesta cubana, en-la de por si abundante légice que la cubre. pesas no deben hacernos olvidar que Is cubans, independien- temente de las proyecciones que alcanzé en su tempo, fue una revoluciéa latinoamericana y, aunque parezea clemeatal decirlo, cubena. Lo expuesto significa que 2 esa revolucién hay que analizarla a partir de su ubicuidad en procesos co- miunes a diversos paises latinoamericanos, por uaa parte, y 2 partir de sus particularidades especificas, por otra. ea) w e is a 1S “oOsounSpe eqn9 wa optiins way 1 weep Bf anb reuous Igey PPuspuadepu; ej ap oporrad rearwop anborq yap so1zoxm ean ‘ojdurafa od ‘sopemos suede vj sod opezussoeres oduzon tm odn 9p Sepeios ssuomela! seanse opm eqn) Ue anb 79 U9 opoliad um we gremo0 eEdsS fedepuT 9p Ens ey anb openuism somoy ve ‘=p empmop x sp enuo> ua eon sp “8p vj aod eqan] 2p opouad j3 nos St0dp sop se] ‘omaye wz “arqmou om: od opepany opis eigeq emuspuadopu zy tod eqon] oo 50{ m2 on’ Tenbe 2p axparoq oisendins ‘oueqny oweucrony, SMMINON SH x pane gene sans “2 oppzeg fop sepecesypes souopmey ap EArenoad aA nS & ‘and ‘oxoporig opaieg Jo o> $y] we opiams wiaey OmSIseG “Rp Te sand “weg EaHosTy DoPEN ye rorK Tap ROUTE saued 2] ex cg] ts eqummTye nse) jeplj onb oyenby 2, SEUIBIM, SSuO|STATp Trt sns opiqap aywaiodum 325 opensoriap vy wRopowto e| OpmENS Empeismp e] enuco seyon] ered opifms eq ab z{ ap ‘aseq Re Ge opecreime ‘[syuz[ape spm somarqusss onb ousiseqry> jap olenopnjonai oremde “pre Pp Jolin fe ejsaapasy eum af orusraraoy F3,, :0x0pox1g op ue cS] 9p oxs0e Op 9T TPL Obs omog “eqna ap waned uorDy 3p Upmeni um slusmyeal ef soared (s97) omy 9D or rseisqndod owes ‘es spaidux ome un exemem ap ‘openinoers Uey seioine sn8je anb £ s3ceunuce Je U9 sopolssd sorunste we weg onb ‘saremdod 4 sospemowiyp siwomenst “som oo opumuaredure s1sureoBp}oapy enuanote a: smommaoy j2 40d opeiasazda: reqndod £ otmniison 7 onb sopgsia9 oAIsDep eijnsat 2] sears wareiqap souzqno so] opuen TeIvemepmm) any vaiqure anb oj ‘Teuopen asiopres un ap uelewesdun os Sor 5 anb odmmen omsrm ye A ,somrpow, sayemos saseoazd op epusnsesucs ome2 wisidins’ epnapuadepe) x} ond ontmsd ‘anb of “(g6gt) wuedsa =p aroqy 9s onb ome=yreureomne] sped ummm 72 ny nb ap orpay Je ue uoPndx ns ENED SoTEPOS Seysn 92] o> asremam. opnd joedjoueure ¥ apuop ts eUNE] wUPET s3 vgn) Send ouepunsos zo1e} tm ‘sjed Yep eLiorsy y uo2 pepmuaues wT 189 SPIE FI BP SOUTTI92 $0] UD O;P 3s BUEGRD UOrIN[oaas Tj Onvand COMIDISTE osmo¥. TH NE YaOLeNY 2 NpETGVEL SAAN STA EO mee yea oepartidos obreros y socialistas. El primer partido socialista fue fundado en 1699. En 1900 surgio el Partido Popular. El Club de Propaganda Socialisia que después tomé el nombre aria con el pos para d de Cuba. Uno de los principales propagadores cialistas, sobre todo en su forma anarquista, fue ro Carlos Balifio, quien inicié su actividad politica como tra- bajador dei tabaco en Florida y después como director de La Tribuna del Pueblo, periédico revolucionario de Tampa. El primer congreso obrero fue celebrado el 16 de enero de 1892 con una asistencia de més de mil delegados. Si se tiene en Cuenta que tal congreso tuvo lugar en gieno curso de la gue- a contra Espatia y que debié enfrencar el cerco de las tropas enviadas por las autoridades coloniales, puede comprenderse mejor nuestre afirmacién relativa a la unidad originaria entre las luchas nacionales y las sociales. Entre 1892 y 1894 tuvieron jugar una serie de huelgas cuya i as ocho horas de Ja independencia Factores nacionales y sociales iba a posibilitar que los mo vimientos democraticos del futuro pudieran entenderse como depositarios de una tradicién comin. UN PUNTO DE PARTIDA: LA DICTADURA DE MACHADO +r acto fue la lucha por la independencia; in antimachadista; ef tercero, por su- Machado era el representante de una dictadura centroame ricana “cldsica” Con el término “clésica” queremos destacar los siguientes rasgos: primero, una estrecha subordinacién a Estados Unidos; segundo, el ejercicio militar del aparato del Estado; tercero, incapacidad congénita de las clases dominan- tes para convertirse en clases dirigentes. La estabilidad de la dictndura s6lo podia estar asegurada en tanto se mantuviera la cohesién interna de un de por si muy +A. Carrel y G. Fourniel, Cuba socialfste de A a Z, Paris, 1975, Fabio Grobarg, "El movimiento obrero cubano de 1925 a 1933. Sur. ‘gimiento det Partido Comunista”, en Boherma, mim 3, La Habana. 19 de enero de 1973, pp. 94102, CURA: ENTRE MARTE Y LAS MONTARAS 23 heterogéneo bloque de dominaciéa. Al mismo tiempo, dada la extrema dependencia econémica del pais, la perdida de cohe: sién de ese blogue estaba 2 su ver determinads por factores, "De acuerdo con io expuesto se entiende por qué el princinal factor desestabilizador de la dictadura de Machado fue la ¢r' sis de 1929, que afecté a Cuba con singular violencia. Solo un fue la baja en las exportaciones de azucar. Ea fos 200 millones de délares; en mente bajo de 172 centavos poi 072 en 1932 y mas tarde a 057 centavos; d 109 millones de pesos que tuvo la zafra de 1929, descendid fones en 1932. La crisis sélo podia traer consecuencias politicas. Por una parte, en el propio bloque de dominacién algunos sectores em- resariales comenzaron a desertar culpando a Machado de no proteger sus intereses frente a Estados Unidos, en tanto que otras lo culpaban de no integrarse atin mds 2 la economia norteamericana. Estos tltimos no vacilaron en la propia constitucién cubena, en donde era reconocido el derecho nor- teamericano a controlar ei derecho 2 i los bienes de s gaba a los norteamericanos los derechos para base militar de Guanténamo, que todavia subsist ‘Aunque esta vez Estado: bajador Summer Welles i internog, y si no logré remplazar 2 Machado por un presidente istoria de Cuba, La Habana, * Direceién politics de las FAR, 1968, p. 583. . BD. ZED 41452 §‘3 ry wouspuy ua ojosresep k mouspuadeg “Oiiajes Oy k BSOBIE) Srbuusfy OpuELIS! asepA ",OKUPIUD,, SP UROL] SP ARDY er tuo ,sobosiaoxd sopmemos,, sod sepesoiuos sopexotrs8 seBjanyy seuiea oany 616) 4 gigt sux svonze Top sedee) se] Op UO! szyered ean J28n| osra ope as aiuamestzaig “wopylod ee owios e8jany ¥] opuezinn wruse L161 apse snb opeciaekio vusig Anut arad oganbad 03390 95 "Zopod Te oust OpeyoEW £26 eIgod ¥] ap sage [2 ab sousw ypeU aeaz0508 p | O8e Ue seRed |p uy e "THES 301 3e20 sax0peleqeni owo> oxronpoid oszoard 18% “BUD Bp saYOperi0> OOO OF aueL arde 3p epoussa: =p euanbar 2s wyez ej sp SopoL. soojdize gon gz 1999430 vmod 2 ‘anb opuptaoy, “earasal sensed un Ise ueq 2psop someoiauree) duo sv] weqeuodas, anb epezaeposo e140 ap OTeU! wauepuns opefeqen weIqey ,soiorEInZe SORE Uo, Sopeurey, so} oidiouuid un Ua ,/ozuomtlios um @psap opt nStsep s1mnseq Offozresap im oprtay BIqEY ‘oliequie WIS “SOWID)TEqNS sopeIDOS SaIO1DaE se{ woo ‘asaiq Anu opoiiad on tod anbume oz SMIUNOR 81 4 HANES SENS <¥END “at “8 “ess ‘samy souang ‘oumo] mouipuy 2p UpaDdpuow v| Jog "BiIOI | 3P Bae] ey 3eIyA “olusypeNIGED [ap ase) “TUNTTH e| OU “exaUG e| so onisretioduay fo URE] otspMY op sesred $0] U2 anb zp oF qa 82 auto} &] 9p EAR] 9p siso} fedpuud e| eéns omy 3By Gta 'So6t oR BARN ‘zonZDUd puD K4osy) mis ‘eszeizeu09 9180} amb ‘ara2G0 0: opeypeyy 2p omierareaattap 2 sepeplanse uo ajusuraynan593) ‘and Tefoos osode sous uop jere2 oD caLIMa! % OMNI Or1291 un 4 Teo] winsnput vam sp oyouessp 2p opeisg tm sp Up!DentI0} B EqEDIdoId visioses BpusNyU) BI Woo opronse og ..IuOL oueniad jo eqrmasns anb sv Om10D ‘ ovoxanp [Sp 49pi| IH “SpLTED0g old Soqie) oiaprsead voy TREY TIE omaAy je ‘seaM|D opsenpy oulos seonNod semSy Sepelouos wepsss spndsap enb soiueipmase sounsye uoraiin apuop oLmisroamy jntepmsy opeiueipmise Jop Upsims eopjlod upperies: ove uy] wpremasardar asorpnd ond axed opuesd 2ypow asefp em, uo TeqeIMOD anb eqnD olllo> sasred 2 oper ‘senupBroUl> Soypaut $9101995 so} 2p saso: yAow So[ Up ens: SpuAP 0] Jod sa ou oIsy “pepisreantm ¥} ary OpepEW ep ENUOD Ue ERIN] e =p sopeztTeIE O20} 13 volunporeaa NoIDMIOATE YT ‘sopeoyp jap ‘wpouaysisas Bj © OPo1 axq0s Opiqap any ‘ouatTOUIaII0U O1SnS Te SepEINON S11 4 rnNY gE cyan er286 i (Cuma: ENTRE MagTt x LAS MONTARAS cada provincia. Sobre la base de uno de estos comandos habia surgido fa Federacién Obrera de La Habana, de donde 2 su vez surgiria Ia cxoc de 1925, La resistencia a Machado tomaria muy pronto un caricter ular y masivo. Expresién fiel de esa fueron sus pro- ideres. Uno de los mas significativos, sin duda, fue Tulio onio Mella, surgido del movimiento estudiantil ¥ después uuno de los fundadores del Partido Comunista —del cual aunca pudo ser dirigente debido a su extraccin social "burguesa”. Fue también fundador de la Federacion Estudiantil Universi- ‘aria y de la Universidad Popular José Marti. Mas que un jefe de partido, Mella ara sobre todo un generoso y romantico lider de masas. Sus actitudes anarquistas eran, por lo demas, inccultables. En cierta ocasién, cuando Machado prohibié que em la bahia de La Habana atracara el buque soviético Vo- Fozki, Mella se lanzé a las aguas levando a los marineros el saludo simbélico del “pueblo cubano”. Acusado, en otra oca- sién, de haber arrojado una bomba, fue hecho prisionero. En prisién mantuyo una buelga de hambre de 16 dias, redoblando Su popularidad desde le cdrcel, lecciéa que aprenderia muy bien Fidel Castro. Relegado a México, participé en la fundacién del Partido Comunista Mexicano. El 10 de enero de 1929 fue asesinado por encargo de Ia dictadura, De la misma estirpe romantica y aventurere que Mella era el joven abogado y poeta Rubén Martinez Villena. Al igual que Mella, habia participado en Ja fundaciéa del Partido Comunista Cubano. Varias veces enfrenté a las tropas de la dictadura al mando de pequefios comandos, ¢ incluso individualmente. Una vez, se ofrecis para pilotear un avién y bombardear objetivos militares establecides en La Habana, Ta fue'um activo agitador en los medios obreros y uno de los principales. orga- nizadores de la lelga geaerai pasd en las prisiones fue minando su de por si delicada salud. Murié muy joven, en 1934, de tuberculosis. Su legado fue una ie poemas y escritos de caricter libertario. todo lo contrario al tipico dirigeate >. Mis cerca se encontraban sin duda de Holmes, el lider del directorio. contra de Machado a lo largo de todo el. 9: Guiteras es considerado un precursor de la “idea’ rrilla y de las “acciones directas". El 29 de abril de lizando un precedente que después haria escuela, cuartel de San Luis en la provincia de Oriente al mando de un gmupo de jéveues armados. Aunque sus comcepeiones politicas cas: ENTRE MARTE Y LAS MONTARAST @i miembro mas destacado det gobierno que sucedio a ! tadura, desde donde impulsaria una gran cantidad de mas democritias. 4 primera vista es asombroso 2l 7a Que existe entre las figuras revolucionarias de cinta y las que surgirian ‘cincuenta, como José Ant Echeverria, Frank prontuario criminal de tudiantiles, asesinato de figuras politicas de renor el periodist André o el i fajismo como por ejem: ia idea de la huelga general de ‘eentco de todas sus politicas y estrategias. comenzé a nuclearse a partir de una Su apoyo al dietdor. 1a Iglesia tam vant ‘excepcién del pc que por er bid, pp. 2933.“U5 8 1m “do “souDW “aes wen “2 °n9 “do “sewoul “as 24] BITIONNSS B] ‘OWI9IG So] 9p UoRMATIM ein sp oxayed [a anb opmprep werqey SesTd jadapur ‘sand “osnnosd “ros Sor], remo, Wings wEBSS “sOreL ‘dd ‘eggl “siRed “"uPaTD uo ‘yeu aseq BUN TSB aaqmop71 “osnnt oteaes “zit “¢ “E96 “HOA CANN “asawdsnAoly ovedure; ‘spurap of Jog ‘soularxe soe ap ounsuu e ozysiies no uy dpaBear =oqny ‘seas w=q0Y KUNZ SEMEN SEPA ot 0 ‘s0se S059 tia atiins0 ajans Olio ‘o1og “SOLTEuOIOT}OKod sodniS soy £ voreuuiop 9p anboja angie Jap £01501 so} ante Eqpousiotu uofoisod wun ue asienns orpisap unsEW weg TED meen ESA ERE, soferogoqns soy onb onaism seouoius ‘opeysey ap soduran wo sopsuiseve sopeouo So| op WorDexONIaUTUOD He SIgeuMs U9TTEIO epeunuoye A Epo; ns opuemunuosd ou 9] 2 Ec61 9p o1s0e SP gi [9 Uproy "seanose Usig SPI UeI> TISMeG ep SePEpLAN ‘be Se], —seuOULL YENE JOPULOISTY To aqH:0se— OpETDeWY ap epre> &] ap ormaious fo eisey,-zejndod £ EaRETOUTEP UOTINION } ‘21 gy 9p ose: Te GoD oLreICnD ruaoso | Wo EpENw9 t nis efset] ean 2p opeyDEW ormany opeumey oyeimba oge> nary tn ser aooey © eqeaTate FTV TereHO o1701908 Zyoaay tient Bun OMISIOUISE OULIO} 25 eke1 op taimendas op } Pe eldord Uor ane “onSupoy ofgeg seisfyeioos se:su9paa; ap oxcores yo 0d Siuomerrenysio oprSinp ,soruo83es SSEGHAOTE, 12 O18 Sis onroipfo aise 9p sOHS9at Jog ‘he "euIN ‘conuapn upioniop £ ourpjes aofour :seidoad ap ojuoramdams [2 USIGUIE VoIsaRe & ‘seueuoTIN|onar sem Tanqyut se] ap redvoce wozorpnd saree: So EXAIMbES TE Te!D08 Gowemerper 9p opoyied ase Ug -olDue'e Tep Pepmae =| od EpeTDe; STuSMSULIOND OPIS PigeY OPEIDEW oP EPAD TT ‘sopran Sopa sg © squayy wpe joey anb coisrmas ap sensenea SofeUOmIP “Seou se] ¥ opor alos Opiqap woanus! ns seuope OpueLsrse yung] un se “over un se 08 sapads39,, :euBtsuoo aimecund Shoptesmensy ousaigod caano ye osndo 3s oWox2amp [> ‘seat Joy Seaanu ofeq oursrpetroear Jap UoRe|noNTea eon opualvasd penta} eqn 9p sioL9puadapL ¥| 3p SOPEIISeP $0] TeUIpa009 ape] oUNs Eso 398 eyod OU Spur sois0ad so) ap om *,sapads7D 723, [9p Of" 49s 9p 1 furosdiaos 2p ouvigoS un e1o ermbrewed £7 ‘ie o7E:9U0 cof ofa “sepads90 9p fant so}reD 20d oprBistp “onsep 3p wpe 2] 9p swisquoBevoid sspedoutid ‘weg ners) nowy SY =p iososoad To 08 SerrwoHIND SOT 0 ONMOL OLNT TH a1Q08 je opuefanua & ny 2p wEUOTINoxe2 uorDednase NoIm 70438 7. Na NoIOMTOATREVEENCO. us 08102 un opysauj6 opranpuo> ef /01%9 ‘eiDIp eun e xe20uap wed saIu ‘oiuniuos ys and orej> epepanb | | ‘ “signiaucomt seseer | ap osaapmrour mn 0d oysoSe ap zj Je Opeqitiep EL9s opeyD SEW “SoMOPIpUCO suse UF 4 EMpEDP z] sp epres wIuoxd e| 30d ssuoIDz[as seyniis good wer pepiveats ns sod! uero0u09 of 2% soperoyo so] “SLES ornjoaz Jeuopec epeomap eum avuauneTy weleZquoue ! ewe SMW ANON SLA aR sNES =¥END SMWINOW S71 X FU ENE svEOS. wareign eeeanei 30 CURA: ENTRE MARTE Y LAS Mawasis de 1929, se encontrab: lutamente incapaz de setvir de base para el desarrollo del empleo y de los medida en que el crecimiento demografico exigi Batista comprendié que su hora se acercaba en la medida en que el gobierno de Grau San Marun se desintegraba a causa de sus propias contradicciones internas. Mientras tanto, ei inescrupuloso ‘mi c osiciones en ales fueron asesinados despues de ren ‘cual motivo una enérgica protesta de la revista Bo Los hechos le dieron ia razén a Batista, Muy pronto miembros dei antiguo directorio estaban aislados politicam: en el gobierno. Por si fuera poco, debian soportar la opos! lultraizquierdista det rc que los'acusaba de ‘socialfa: Como anotaba un anali “EI gobi feras eran realizadas en nombre del pueblo, pero sin Participacién popular. A su vez, los trabajadores entraban en lun ripido proceso de despoli algo la correlacion de fuerzas. Por ejemplo, a él se debe la implantacion de Ia jomada de 8 horas; el establecimiento de tun salario minimo para los cortadores de cafia; la promulge cin de un decreto que establecia que el 80% de los traba- jadores deberian de ser cubanos (con I importacién obligada de fuerza de trabajo), y una serie de medidas que contemplaban la ampliacién de las libertades sindi- cales. Conjuntamente con estas reformas hubo otras que afec. julio Le Riverend, Historia econémica de Cuba, La Habana, p..631 (Barcelona, Ariel) "Fidel Castro, “La historia me absolverd”, en F. Castro, op. cit, Ps. + Robert J. Alexander, Organized labor in Latin America, Nue- va York-Londres, 1965, p. 156. (CUBA: ENTRE MARI! Y LAS MONTARAS tos Unachacstas, dou Chase Machattan Bante y Te peohibicién de compas ice por Gadanos no eabanos (Gr dese, por nor Mc eoy Por ultimo, Guterse propuso la formacign de una RSembiea Constituyeate que. abolera Sekerora une mucra,constnucion pli SeeereT Unidos no tsteben feces con el tuevo gobierno anes ie olorgaron su reconecimiento. Er goblrae taba puercecomo or dvs amas cercado desde todos los fentes Zyl srt sae coro lig rant del orden Ast we ecolick gue secre de la poblacio, stemortzados por Sol de Guneras 0 eneedeetdos Heate ala impotencia oie ences auxilio a los militares. es internas esa situa. ipado por et doné el gobierno y su cargo fue r to fendieta. Batista por eatonces sélo era una “eminencia gris” y 8 a que Mendieta y otros tteres suyos, fez y Federico Laredo Bru, realizaran inar 2 los sectores mas radicales. De No obst {a evoluclén. popular de 1933, y para muchos sectores pO- ‘ sere er su continuador, aunque en régimen supone afirmar que se aproxima se ha dado en denominar “bonapartismo”, Estado militar que surge asumiendo un papel las clases debido a la existeacia de una crisis he el poder.* ies del _gobiemo de Mendis Good Neighbor Pol = Acerea de los entret Bryce Wood, The maki YorkLondres, pp. 107-103. HE, Thomas, op. cit, vol 2, p. 887, = Acerca del “bonaparismo” véase Karl Marx, El 8 Brmario de Luis Bonaparte y La guerra civil en Francia, en MarxEngels, Gbras escogidas, tomo I, sin fecha (edit. Progreso}.i | i | ' t Ty “siomnorsaysod eonopid us ueupuod as onb ,sowsmoxses “3p,, Sopeumeyy So} ap Bx0ssoaue ‘sopIun sopEIsa ‘UD afaa2sooy, zod epesindu ,ou7sa4 wang,, foP e2nsTod B] OpIqop 10LaHxS FP a2 ofode onivesao Ooodure) rena uornjoraueruce © ued ear 9p wuOIsty Bj epo op voNEIDOWAP seu UI “OH6I OP luprompstod e| ap UEP e| uo uepreuMAD anb sem foam ¢¢61 9p Ozteus Ue ‘sosaIsiU! 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Sin embargo, en los momentos en que la dictadura militar hacia equilibrios para mantenerse en el poder, recibid inesperado regalo, si no del cielo, por lo menos de Mosed: apoyo que le otorgaron los comunistas. Ast, a partir de 1938, Batista pasd a ser considerado por el Pe como un gobernante democritico y progresista, independientemente de que en su Prontuario figuraban los asesinatos de varios comunisias. To. dos los que dentro del partido opinaron Jo contrario —y saen tanto brilla que elas dejan en sombra los errores heredados del pasado y que podrian ensombrecer yuestro gobierno. Ea el momento 0 que usted deja la presidencia, nosotros tenemos que rene. tirle que puede estar seguro de nuestra estimacion y respeto por vuestros principios de hombre democritico y progresista, Reciba nuestros saludos mas cordiales.” is comunistas pagarian la cuenta de su tan desati- En ef llamado a la Asamblea Constituyente de , dn conducida por el partido de Grau, el Partido Republicano Democritica, el Partido de Accién y el aBc abtuvo 45 asientos de un total de 81. Los comunistas apenas obtuvieron sels, Comenzaba asi a configurarse un bloque de oposicién politica a la dictadura sin los comunistas, lo que tendria enor. ‘mes consecuencias en el futuro. # Acerea del tema, véase Saverio Tutino, op. cit. pp, También K. S. Karol, Les guerrilleras au pouvoir, Paris elu, 3H. Thomas, op. cit, vol 2, p. 954. 55, Tutino, op. cit, p. 135, 25 CUBA: ENTRE Mgr Y LAS MONTASAS La FRAGUL DEMocRACIA Después de finalizado et gobierno de Bat ria de Cuba no vivid momentos demasiado ‘obtuvo algunas plazas gracias sobre todo a un paciente trabajo burocritico. Por otro lado, los militares, con Batista a la cabe za, volvian tranquilamente a los cuarteles @ la espera de un momento més propicio. que la comision \dara delegar mas responsabilidades a los banqueros, npresarios y a los tecnécratas de las provincias, y n0 a capital Evidentemente se queria desarticular el andamiaje central del sector oligarquico residente en La Ha-19 tu gees & ute me ‘nym cca SOS Py tn ooo any manag SED Ean a's BOL mp e Pepinnoe 2] tenoaout Seb y -usisud anb oxo jeuolmpes sopeniedss ovo a4 ne e1uod arb oun tr ‘Hoo ‘nim ap equrenn os dn asa vied reany os0d fame “ho uppedonsed t app ane on Sale ope uot ceuaop anb niapareatyo 0) onb oqo Oo 2p euepUadsp ap Opedd autos fy “asa sdk ‘usunousyue anb jenqze uowsuny ef seped 2 p so1qurere ap ‘Son 221 ap storages ‘scomna9jo soverede op afeinom je ered sexucid seaqay sesroafp A ou] ap sopeimy “woke: ap seiueld, eqn 182 woIsIDeTRISS as Op6] OP zHed B ‘ose somMbpena By “eDUSP ‘Bj Eun BID o]os EASE “ELNSMPMT ey Us oLePoUET opis wezaiqny sopemnumoe Soper ‘usqureze|dsep [ei o>odure| IS Uex0 0 seestainess io : 00 taped] vo uegeToe fofmo0|souratdaid soypnie ab ex ‘onaefa tata Sys Bo aes “tonae Aozoes Jo us opeaiongo CWUafmEZE|dsop fe OLae tod az SHNVINO SIT A HEY Suna cena tnt biel se9v61 Ue Lz BA 9€61 89 soz v opeleg wIqey “6761 uD Souegn> Sosed ap SoUOTTHUE SUS 9q “s1Uspusosep zaun eon wemBes winrmouBe eI we SeTeD “Houreazio SouoIsenut Se] anb aeoesyp ond ey oyaLETENy 19 TaoL 9 Is sono » 09 semeaprourea.i0N m 9s seueang, sei EGF ‘seTyainaa $07 30 avEma0%s reser & 661 ane erareonze pepaidoxd vl ap ommoraraze}dsop yo Ue 104 flop 28 ooo ‘ejuiouooe ¥| 2p ofafeonre 20%098 TeuOmIpEn fo rouopueqe © Types: ouestloUEs 0” yeudeD Jo Ib ErDpIsUOD 3s 18 aitopiaa opm eifnse! olpip oO], Temsnpat upmEAaIep Ou 9p oss20xd jo a02uife20] ereztueas0 anb wistqEide UD odsppaid rosea too soiso8 Un ap sqnD e> wawsH ef oP Suonber 96 spun sopeeg Us "Tespuna wusond epunEor Y| 3p spndsop “aiuesgo ON ys0!9hudtETTe Foronpord ap TAPE 3 soperorstaon sees “saqorol so] sp %460 [2 TonDIU sp Homanp “oud {9p 96001 [2 “ootonad ep seizeauyox se] 2P 9601 [2 ‘SIE “pjapa sepa! 9p £ pepminoep ap upmonpard F] ap 506 TP “Ez ‘Sicouze upsonpand vf op sap lt fe euesuaumestio8 prperdoad sen] Oprast IGE OU FIs! 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Em ollas co” menzaba a perfilarse un lider sindicalista Usmado Eusebio Mujai, quiea habia sido originariamente comunista, después trotsquista y que posteriormnte no vacilaria en poner las es: ‘tructuras sindicales al servicio de la dictadura de Batista. LA MORAL DE LA POLITICA. LA POLITICA DE LA MORAL Pese a sus innegables signos de cormupciéa, em la democracia Parlamentaria cubana habia también sintomas autorregenera- vos. Curfosamente, la oposicién al sistema imperante saldria de Jas propias filas del gobiemmo representada en un mistico per- sonaje: Eduardo Chibés. Cuando joven habia militado en el y, “The roots of cuban nationalism”, en R. ont it, 162 | com: ENTE suert ¥ LAs oNTASAs 239 directorio de Guiteras; en el pre era uno di de sus fracciones més radicales. En 1947 se de Chibas con el m1 Pero la simple apelacion a la moral publica surtio efecto en Jos sectores juveniles que vieron en Ia Ortodoxia un medio para contrarrestar la omnipotencia del partido de gobierno, De este modo Chibas creaba las condiciones para una oposicién de. ie derecho, vio tam. 850 acepté su pos- éndose cuestionado, se hizo patente simpatia hacia Ia Ortodoxia. Los ortodoxo: de ganar las elecciones proximas. Sin embargo, las esperanzas de los ortodoxos se vieron frus: jolpe de Es! llamado et “madrugazo” por ‘Ademds de impedir que la politica de Cuba se autorregenerara, el golpe de Estado tronchaba la carrera parlameataria del joven Castro, cuyas brillantes dotes permitian augurar el desaivollo de un gran estadista de. corte republicano.. wel escoba es un emblema clisico en el populismo latinoa:ne- ricano, Carios Ibéfiex en Chile y Tanio Quadros en Brasil tenlan también una escoba como. simboio. SH. Thomas, op. cit, vol. 2, p, 998. AAAS. |‘te meena ESP i i i | | “S12 ‘e961 “somo “uo mresay BHaSUOIRE ap puny oyLDuDURIE; SIAIpIOE eee 2p saus1q $0] Op £ epta Bf ap osonp is] Jap A eanno ‘Iz a9pog jap orresodo} es Bun ue OULsaIgO% Jap eNUOD Ua | Siu ee act Sen oop Sele wee age oe San oft acd Sata a Seu souowedinaoaid se] ap wun onb meve3suos 50 ajuesossray ‘oxopo119 opnied eucbenuehi 1wo ‘o1De}u09 eu0} 1 22 Stucipnise s0) 2p aiwapysezd opifaja-ony 9puep sueserd =1 9p ;BRISS C61 Uo SEIN weuy opewsy a Bn ap offy wie je ere sesmuisic 2 QISEN “oHIse pid won 21peu anb bya -uos@ un epunoat © gzuemios apuop BINS OlND;UNAGWD To Te ah.) 2 TE uptotsodo e ap sopeurey Toe SMNUNOW Sr1 A uaNe mene sens we ee ee ee 1961 "eaeqeH FT wag *d “yo-wdo tonse) an ‘onsiod uopeupigo) wulruna ein iauaygo ‘ered empeiatp e} 2p peppedeom ey rod epege} ofA 98 eusisiser T] “OsTTIY zaypupg oueyamy ansrinu 39 je tod sepiBenp wy sey £ ong sod epiStiyp vo e[ :s9peaaqy souorsere2io Sop wemins oon “uginy opfireg Jap osnyou] -opeyseW ep emperMp zy sivEMp foprainco eIgey otMed Te) ‘efouaIs|sa: ap sarerqTurered sodnsd soisuiuid so] UeHERIs pepisroAnU Busi z] 3p ‘onOLg "EET 1 Bjo ¥{ 22905 oP jqey orb Zan Bou ‘sivowerueping sepipied wie: ‘oupp | 9p Uppemeise: e| ap EDuaBpe ze] sp aseq By argos uBine wpod o19s peprun ye ‘zea ns y “BknS ENuCD UD OIE ‘qeuorseu eonqod peprun eon ered seziesovau sovorsrpuoD sel epreor9 9 ‘olmmwoul 280 ap snued e ‘snb wie orsisoid nigey ou Jopexorp Je anb 07 “souotsoeje se] Ereued ‘sruouresSy o1eq0y ap eniuco uo eqeSay bioe org sepeu oysy wiqey 0] ‘ott121905 7: ad ey “Tea: opemore wigey tismea Zo Sopsumgin ‘osazaueo ‘a1opis oMIASMoD ns eAUey !eoryqndss Bum zon eum FIQEH,, :0m5e JoPLI OLISHH To BEN OUwioD “eaEG no eppeonap [ey ys aod ap F] ejrmnsop opesy ap adqo# Ty - younnes avainNnaNoo ¥1 aa Na 1 SREVINOW SFT A paYW UNG vO oorA ant 4 52 cma: GRRE MARTE Y LAS MONTARAS los cludadanos, entonces, es que los tribunales ya no existen, é] los ba suprimido” En otras palabras: desde el momento en que los tribunales * sancionaban a la dictadura como legal, ilegitimidad. En consecuencia, lz revol ién, Aceptar la legalidad de Batista significaba trai clonar los principios democrdticos que la Ortodoxia suseribia. La tendencia de Fidel Castro era, consecuentemente, la mas democritica, por eso aparecia también como la mas radical smo, en su defensa de las tradiciones democraticas, Castro planteaba una ruptura con las conducciones po. 3s tradici Como deciaraba en un periédico clandes idor: "El momento es revolucionario y es la consagracién de les que tienen revolucién abre el paso al: mérito ver: dadero, a los que tienen valor e ideal sincero, a los que expo- nea el pecho descubierto.y toman el estandarte. A ud partido Fevolucionario debe corresponder una dirigencia revolucions- fia, joven y de origen popular, que salve a Cuba." Habia pues en los planteamientos del joven Castro una suer- te de dualidad nocontradictoria. Por una parte, la ruptura con la adicién surgiria como una respuesta directa a la rupture provocada de hecho por el golpe de Estado, pero por otra parte tal ruptura violenta y armada se realizaria como Ia unica posible de restaurar Ia democracia en Cuba. Ruptura y Unuidad no son aqui términos esencialmente antagéni tuptura, en la medida en que la dictadura obligaba a la rebe- lidn armada; continuidad, en razon de que la dictadura hacia imperativa ia restauracién de la democracia, Castro surge en el doble:- pay Tevolucionario y_restaurador, racion deberia ser reaiizada a uavés de la revolucisn,.* 0S SUPUESTOS DE LA LUCHA ARMADA, EL ASALTO AL CUARTEL MONCADA La primera puesta en.escena dé un plano-insurreccional que apenas estaba naciendo fue el asalto al cuartel Moncada, el 26 de julio de 1953. El centenar de jévenes que segufan a Fidel Castro, op: cit, p. 614. Mires, op. cit, p. 95. Castro, op. eit, Mires, op. cit, (CUBA: ENTE MET Y LAS MONTHS 03 iss Tot cn ec oa Cultinar en una insurreccién popular. Los objetivo: Seguramente Castro sobrevalord la dispo. revoluciona- ta del “pueblo” cubano. Pero tambien es cierto que Batiste no Si3 um gobermante muy querido, y acciones de masa en apoyo de los insurrectos no parecian en ese contexto algo inverted, Lo fundamental en la accién del Moncada ores mismos se cousideraban como uta. sin Yar, n0 como una vanguardia ai mucho mea ido dela revolucion™ 7 de Ia voluntad popular, lo que no debe sorprender demaace SHE Thomas, op. cit, vol 2, p. 1067 FE. Castro, op. cit, p 2, Castro, Fidel en Cr AAASF |Wd Pare uauon on anb ‘pemnjon epar ap & sonant “ur "Biases & upetiajoo se uoroaNp ns [°-], i0Lise ap sou “Tap! So we o ‘tomezmTeai0 B] ap 03521 fe oredsar veOUOIE ‘simotreanepes ‘epezqenuas £ epesieo wojyfiod uorssamp eam aos qrymamiajdmos 95 oueTuTACMT Top woxgioap! prinjdure ey ‘OfTENOFIN}onay ISHIEUOIDEN OIWOTENAOW [> £ TEUOHEN wuTEnoPnjoaay uopoy “BopeLioqr] uoPsy © TeIqMOU on Ae sure ang “sopopor ns e opuedniBe uoreny 96 souomeuel 30 seno ‘onusmusjaow fap ofdure revere fe opigad =: e105 9d eDeID0UNNp B] BAND Us T3Ia/qe1 souegro soj sopoi ered seiiaige ya1oy sod epesday opnzed un $9 ou [c52¥ Tz. “te Anu se1~129 un ots ° ofmiaow onan Te “BiUazen9 FOUR $0 vp OUISTTEAIIS “siuren soge $0] ep seifeuofonjore: seubiapest sm © ears "oiipjeopr uotsipen | © oped] eqenoane os Sand "CS kt emusnguos elopepzon kun ap eionpold. owes eu Img 9p 5 owwaRUAOY TP ‘eiHEIop of ues Opssnae ey Orne ao 97 onNaDaAON 3 sed ep sox 0 sp 5019p soojerputas se 2p envouniduns ep opeed od ee and ‘yelplsas peut P Od|rEIDONIEp Opisuss Jo wun ap eojroadsa 1 & odte> jap sag 33 “He ware oun wjaodosd outst) “sojruse spur Joma as oad pu zoqp [y ‘soueparomoo sogonbod yw aimnan fo Seon “soem! yur wun yO da wap {+ :s9] ‘ove fe soem anens ueqeieqen soqwauMb [Z ‘sopednoosep rm sovuspsres sue SWVANON 6Y1 4 HWY sR cyan ‘peut “8d “ap -wumgMe upponposss 7] ‘ONSTD “S reojofoo oper ua> zsjd, op o1mn 20d zede> so & seupipsop Sei/sepor ass nb oygond Po-s2-2sg! “ettdn Be Fee tepuos “sesso se] zepon supeiioo “pes Tis Toko un ad asresvuioue ered enverpds 9p Some A DAL ofete> e) “sorms sms uo rej se ap wes on °--23e Zaoimose “souoverd “ersppoued ty Svestep S08 “SPoped sopreuraron "sope0q sarong Siototsoyord te 2a 201 Say ap eBeyd oun aod sopere ‘Sepeep op sopeamage Seped so of wren 2p fy ra op solo ountap Fh th tuomjosd 4 sonnoew “3 ST, Scoop jes typed ey Goo yoende wh vapuan ob 22 gps welou snbiod ojeereuun oexpeo vn AGM "2 -ayjequrs Ta ‘eresofewn Te ‘ejreure Gapand ou anb soxnposd ad eee Cg barney sonsats 09 efzored sns 0d 2e5ed 2 seaop anb "elssarod © iow! prod epriauong = no i outtazed 'B| se ostesap ofn9 & p pe & ele rea oy sei lUpise ‘sopo} ‘samar sono soxvesg A seyetnsnps! 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En cada provincia y ea cada municipalidad, a ‘oridad era un coordinador. En cada sector existia . integrando los responsables de las mismas las correspon dientes direcciones provinciales y municipales” Ea i M261 surgio como un producto sui generis de aquellas condiciones determinadas por la lucha en contra de la dictadura. Extrafia combinaciéa de movimiento social, frente popular y partido imo extremo, Aun siendo una organi- zacién muy contradictoria, probé ser muy eficaz para las ext gencias del momento. Los SUPUESTOS DEL. DESEMBACO Después del asaito at Moncada, el segundo capitulo relevante de la revoluci : segaian vigentes en 1956, pues cl realizaria, al igual que el asalto, con base en ‘0 popular urbano estaba pron- ictadura. Tal creencia se habia porque estando en prisiéa idad desde los mas diversos de que la dictadura se habia visto de acabar con lo que ya era: el sim- ia De alti que el ripido retorno desde su exilio mexicano era.un asunto vital para el joven re- volucionario, maxime cuando antes de partir habia lanzado su desafiante consigna: "En el 56 seremos libres 0 martires.” Aun- desembarco la creencia de que un movimi to a levantarse en contra de | is. Castro, "Manifiesto. nui. 1 del 26s al pueblo de Cuba", en Pensamienia Critica, nim. 21, p- ‘7. AL Tabares, “Apuntes, 307 es necesario de- que en 1956 Castro no fue libre ni marti e 0 todo fo posible para que su pi igual que la idea de asaltar cuartel José Antonio Behe De manera similar al antiguo directorio, el nuevo saba en dos vertientes: Ja de la lucha ca ga amucarera queen forma d ‘masas. Fue important sobre todo porque ocurria en un momento en que en las exportaciones del azucar legaba a su fi uno de los millones de dolares en 1951 a 432 millones en 1955 y 555 en 1956," La crisis en las exportaciones de azicar hizo posible que muchos trabajadores cuestionaran al dirigente oficialista Fu sebio Mujal. Ademds, la de por si enorme desocupacion tendia Gérard PierreCharies, Génesis de la revolucién cuban, Mési <0, Siglo XXI, 1976, p. 139, nd 44456 | re* ow anbone ‘osaan ow “Or °d “apt -muvgn9 upromoaas.07 ‘ONC ae due ns op eqanad outo> ‘oun Jog veqredie wauioyo1 von ered saseq se] Teas ‘gop feuoisuoad -oureIqo# om) ys ab epegs ‘Anti s9 oxmatinsop fa ‘Seopmouons seLiayeur B o1tteN auBe orsounen Po * stand oxzo1go8 fo 10d oprdums sas v ouyupe: vuresBord'tn ap ofony “509 [8 SEE6T 9P TeIO30=Ty O81p95 Te Ua A oF f9P Lua oppotgese of ta2 opisnae op -yjod 2) 9p saxeim soy v sexsede [ Speruataidar oftosinadd 0 snperoip e| 8 seme sp sojau soy sop -fun sopeisg e upped eum spur ‘eqn ap soUrDIGT solunse SO] 2 wotoeu Uo 9p ofsuantavm) © UpjaeTpon t] seOAUT 0 Fer dor e ‘te soe 9p oases fo ug vinaxd eruespou qos oMs reWqRE ouaLIa) Jo us 9p jaded aso anb X ,eiprenguva,, 25} ‘gnsouiap 52] seiMS0$ of2g ap vO'e| csang jp sod opezqess jerouapisazg omefeg ‘SoWUSMEQUIOD So] Z TEIOU! vj UOIDIAjOADP + 2 ] 9p 52] omo9 sesopior2tn sere: -eq seunfy "exs0Is @] ua sanopisod sns sepyfosuos ap waren Solageduios sns £ ose ‘s¢6] ap prim wreuinid e wisey, ‘seseu sp uoDoumsur epee opussadss seueuom Se] UD OpE[sTe xa001 je ered oanprodun e Se] Seamus) sour ojos snbune ‘ofireqiza mig “tet oe SMMUNOR SY1 A LTE sMINE AnD | i | | | ‘soenee “Ad 'cy6} "say souang ‘72 “UH -vouauroounra, upreu v} 2p DuoIny “soueY OPIEPRY BBL 1 vO cep" IB" Dungno ptmones 77 ‘OEE “Awe ‘omar aydmas ns OUTS “EyD 61 @P PPE and Bisprsuoo 2 Sepemute sezrany se] © eD0AU0D fequatra|@ oul0D souIEAuGDUD ‘zopod ere UIE, B| Ue OMS Mossep fa "(sopruN seq opelarie xa) operedaid Sew ee ee Ears eee coercion? iar me are ahaa ol ws ct Bane grapes ema entra Heo one renee es eee ee ee ee “senosied ap WOT Orpoul yo “gc6] Us ‘Opwezmesfe Teimeume & SApUNOR sn x pore me :vand ‘0eee ana BIL HG 30 CURA: ENTaE SeARTE Y LAS MONTARUS frente n0 es necesario que los par gaba: "Para integrar se declaren insurrec: Hidos politicos y las izds el caudillo era mds radical que sus palabras, como él mismo lo ha insinuado después, mas lo que interesa constatar es que el documento se situaba exactamente en el contexto ideoldgico que imperaba en el periodo de resistencia 3 la di Ahora bien, si el 26 ponia ace también se preocupaba por establecer su identidad. pe Fespecto a l2s demis organizzciones de oposicidn. Tal pre Paciéa se manifiesta a fines de a las organizaciones oposi- toras. Para entender mejor el sentido de sus términos, deberos tener 2m cuenta que en ese entonces ia lucha en contra de Bo- Usta habia hecho grandes progresos. Por de pronto, le guerrilla habia. afirmado sus posiciones en la sierra y gracias a la incor. oracién de campesinos se estaba convirtiendo ea un verda. dero ejército regular. En Santiago de Cuba, como consecuencia del asesinato de Frank Pais, encargado de Jas tareas urba- has del insurrecciSn, decidiera poner él acento en sus principics mas que en la unided. En primer lugar, la carta desmentia que se hubiese firmado és Revolucionario Cu- aria La razon por la cual e126 a0 susctibia ra que alli se habian violado.principios ex. : como. por ejerapio cl encia extranjera en los astatos cubanas. Ser la primera orpenizacion que dave tan sentido abiertamente antimperialisia a a ouesttOn nacional, Tgualmente el 26 volvia a reckazar con fueten la posibiteed de que después de la caida de Satista se estableciert tna junea militar. asi se ponia en guardia en contra de aquellos "bid, 9. 108 coma: ENTRE AMARTH Y Lis MONTASAS an sectores que veian en un nuevo golpe no sélo una solucién 6 rechazaba de plano la posibilidad de que despues de la caida de Batista los revolt. ciouarios fueran incorporados al ejército ofici i 264 reciama para niblico y reorganizar la republica."* Para Fidel Castro y tos muy clares: ‘por una parte, que sélo contra ef dictador sino contra un torial y, por otra, que el 26 no postulaba sdlo Ja ocupaciéa del | poder’ formal sino del poder real. Y por si hubiera algunas dudas, Ia carta sefalaba en sus frases finales: "Entiéndase bien que nosotros hemos renunciado 2 posiciones burocrati en ei gobierno, pero sépase de wna vez por ia del 26 de Julio no reaunciard jamas a orientar y dirigir al pueblo, desde la clandestinidad, desde la Sierra Maestra, o desde las tumbas donde estan mandando institutos armados de lave para entender la insistir en la necesidad de proponiendo ef nombre del magistrado Manuel Urrutia Lleo; pero sobre todo insistia en Ja necesidad de preparar una huelge insurreccional de masas, en ese momento verdadera obsesién de Fidel Castro. EL FRACAS® be ta HUELOA INSURPRCCIONAL ¥ SUS CONSECUENCIAS La realidad, sin embargo, era mas dura que cualquier obse sién. La huelga general, convocada por el 26 para el dia 9 de abril de 1958, fracasé estrepitosamente. Después del fracaso, la evaluacién realizada por el 26 fue predominantemente formal y tecnicista. Como suele ocurrir dirigentes intermedios: David Salvador, encargado obrero de la organizaciéa; Faustino Pérez, del aparato militar, y René Ramos Latour del organizative. Pero, si nos atenenios a las 469| ' | | | i “Yer “8 ap *--puwgne upomonas vy “ons ‘6 dT aim do ‘ereaend a “sonoe 950 op ound sata [3 ugwisode ap sanopezucai ornar 20 9¢ 120 svoriyiog Sy2NVEWY Se7 A “24 ortaqe ajgmos um ap opeiop egeiso a1quioy asa epnp a ‘ofag euosiad ns ap upiooakoad adams eum ow: a‘ path op opeis | emg ‘ous sod 9p “uoizeajenaas Fy “exon : ans Uorary Seuegin seanuoniss se {uige op sured © yoy “em tf ap oust omins fous oem a9 onb atuemeprdey onns 87 To "upisoaamnst e| bp oftaroe Te opemre ohtotaom! on ome symstzerets0 Oplasstcg eet sae SngaNon sr x oe mn cD “wpe “ddl “4161 “odurayy onsonyy ‘cone “up!207 -epouryy sepusiim 9p oronpard upiqure pronj ‘sésear ap osode ‘noo evn wrong vj e sey ofode uo> sesem op ¥ajeny] FI ap osed jo “Dep 59 ‘97 Top UoTSeUDHO B ue OrquTED Te and FTE OG “reir aymauoymenTaopaid ouaLa) un wy yz Tap Sear SEL opuezejdsop ‘eqLurens e] ap esinoo ua emaspéeM vAtsmajO EM Fexteai qqusya opeuorueyeans Fisneg un ‘Puqe ep Sendsoq ssto(8o] Seu ¥] exo eapeuroye epunses ve] onb Ten Soup op Bireareoue os pepyvas widosd v7 “exzen’ ¥] oxarid Fee ‘souTmp sono ue ‘egeayuBis anb of ‘sexopefeqen so] ep uppedonred ey exed se2n un ‘uorosumsmt eidord e] 2p onoaresap fap znzed v “rear [q ‘ajqisod via 00 BA SemyTE StISe 8 enb oj ‘oymaranaom 13 (uoo Yop [e101 UoeEaLOS! wun oproyramis zriqeq anb pefeqen so} 2p opnred um we 9¢ [e ARroAN0D TeV jnye sop anb sear Ue? oD SO1STTLIINE so} ‘o[f> 9p Saridsog “gz J2 Jod opesuaumtredce omp Seu Sedox Jo ony Tuge ap wBjeny v 9p ostoex Je onb onsT) [sPld eHTp Uozer Woy “eeIMOW e| ap sapreqx SO| nb saxasq0 so] anu> upusteds) spur wom; ‘onb seisiunus “02 50] © opusdnpmt ‘ssuoprziues10 seno © oye 10d opuesed osazoid yap upEaApuoD wlan e] Opis IHIGNH*ys WO opERI= eno 10d ‘eondxe ‘umias azod ‘sor aigo ep saroizes soisen op enedums £ ofode Fa 09 eqrU0D ‘ous! 04 “souegn> ssuopefegen $0] 2p vopsiod uorsznpuo> 2] Bi oppied yo Tu em ou 97 fp anb croqes © “owsigord Top potese F] meqroo: ou aif fep seqered semp se] une orad 9 2]q8I0x0UI Peprrear wun F o1mAH OpesesEN PIQeY soza1go seius8ump So] 9p eramnuane ronsjod ry -eomse z| ap cmom “ow 2 Us opeereqsep eIgey 98 ‘sEMADaIBIgo UoECTIEBIO ‘3p vuLio} ns ‘souem sns U9 OME sp 9Z [> soUM eared ob orerede oyqeprasio; je ‘seistyzsind souppdsane> op f ousian, -lqns ap sopemyes ueqeso owusyureuapeonssap ns < soanered ‘sid sns onb eqensourep —aroypiong fe ¥yquose— eSyeny =] 2p SiHpoe Ty, ‘Soptnyaid spm ofonm um seuR{gaId so; amb 2p Fmans Sourep sou “erexony 24) yep souoPenaide seidord swminon st x pa sua cn. ae‘ au (CUBA: ETRE MARTE Y LAS MONTARAS castigo de los culpables, los derechos de los crabajadores, el ta libertad, el cumplimie: les y el proceso econdmico institucional del pul Por illtimo, cabe destacar que los puntos de desa- 10 entre el 26 y las otras organizaciones, como por ejem- fo ia indepeodencia con relacién a Estadas Unidos y al ejér ‘aparecen con una intensidad muy moderada. A Estados Unidos s6lo se le pedia muy cortésmente que no apoyara a Badsta, y los mili armados de la republica, sino contra Batista, nico abstaculo @e la paz."" orias decisivas, como in de Emesto Guevara. Aqi . Mucho menos que un acuerdo, itimo momento un golpe de Estado nombrando como presidente al magistrado doctor Car Piedra y formando una junta militar provisional al ver que victoria se le escapaba de las manos. Cassro reaccioné de lamando a una huelga general. ia esperada al fin, siguiendo la consigna central del momento: golpe de Estado no” Pero, aun en esos momen- tiempo precioso. £1 2 de enero designaria en ese puesto al co- mandante rebelde Camilo Cienfegos_ Las alianzas con las demas organizaciones de la oposicién no atarian las manos al 26 para seguir actuando de manera in- 1 Mhidem. H DBideme 327, Bell Lara, op. cit, p. 15. ® [bidem. com: ENTRE suUETt Y Las NONTERAS 35 dependiente. Prueba de ello es que, al mismo tiempo ex que era suscrito el Pacto de Caracas, el 26 concertaba aliansas Con los comunistas. Estos, en ef la gran coalicién democra clusién habia facilitado que separaban al entone: de las demas organizaciones politicas. Debido entre otras cosas a que durante la década de los cincueata no estabaa tant Freamente sometidos a una linea internacional, los com Pudieron actuar de manera mucho mas realista que en ‘sado y concertar, pragmaticamente, algunos acuerdos punta: Jes con el 26. Para éste, a su ver, el concurso de los comunistas ya pensaba seguramente en esa pers jucion chocara con los intereses nor 26 puede ser conside- toma del pod fuerza militar y extrema Por si quedaban dudas toda ‘acerca del talento de Castro, él se enicargé de despejarlas poco antes de Ia toma del poder. Ello ocurrié cuando el Directorio —precisamente la organizacién mas cercana y parecida al 26— pretendié rel vindicar para si la revolucién, ccupando ei Palacio Presiden. Gial. Una inteligencia menos politica que la de Fidel Castro comenzando a revolucién hubiera respondido violentame: con una lucha fratricida. Ea camb mentos un diseurso axtremadem! ‘mds que el pueblo. ¥ Io or si alguies cree que la gané él, 0 si alguna tropa cree que la gand ella.” * ~ La politica de alianzas —primero dentro del propio 26, en se- guida entre estas y otras organizaciones insurreccionales ge. melas como el Directorio, después con partidos como ef Orto- oxo y el Auténtico, con sectores del ya derrotado ejército, con los comumistas, con los sindicaios, con los campesinos, cte— Pertenece, segin nuestra opinisn, a esas obras de arte que producen revoluciones y que ¢ su vez son producidas por éstas. MF, Castro, La revolucicn cubana.... eit. p. Ml. Ao AL AB.‘O §> “(661 9P osm ap 11) eUEIBY waLOFSY 2p ho] BIOUEIE., 5 ISL @ "4p -onsupsy us vgny “Ensupey ‘exomnd vj anb feomer sew o1weyseq any A ‘E961 ap sugnio0 ue oBnmoid os ewetde emioya: ap Aa] epunses Ct «, ,elooze * ofegen yo us austreoanp ueqedionimd vue) eunsye op ont. A sauopensrunmpe ap spaen v seuof sus siueunrsanp uegefeqan PO sepefdoadxs weiss ‘gest ap suiLid ¥ Woo opranae oq p A jeuoIseu CLONE) yo idoxd 999 sown uosiad eustur SEDUIy C6 6ST ey —sred Te Ua opensoeje OMNI Jo— spel SP ‘unSeg “voromnusouo> eulauix ns e9 BWna1q ‘Oud wesS ono [2 ‘ojans Jap worDeTeuOeUSSp z] ap fe o1umMt ; “OLI 4 "S161 “1X of ‘SORFW Van) ue D}10180 uprompocss 97 “epaeiy ase eS ee 21050, £97 donSear> 1 SelitA Se] Tr ony jap emg soo Teo], TIL FOpUPMouy — sudong Seer eee ee ese (2% TEL » jonBs s2 opsoyroqu2 mum ‘sopsayoqus op some Us) venonzy vraisnanz 7 ¥ SKOYINONIA SYNYOREEEVALNON SYSSUANS ue SHIMANO sr 4 pont sen :vano Bion ‘ogy Jo uopousojiue.) siuowooe MJ “UleISI00g pre Pg eget “Tesmonroy “oop Oveng ‘ouoqno viouauadse 0) couelBy puscojay ‘opuopanly oMoaIy “B61 "THX OTIS. “ODDaH “Og Me DuvsiD uptanjonas D7 "epauly OFS Seu "SUI TOP TAY a, sump eroompuedop 9p rocomeTnaus £6] SFC 0 ap session ESIUUOISS Op “og “Senofmenso seas Sp Wowsssod ue ‘epren Tad > Bap upjoezeoojes wy epsesy|dun eanoaye vires EuIojai ‘un "eqnig owlo. Terpimea opeaiow fop 21usipuadsp we) orm -nize sped tn to :embues se uoze! ey “eLTEsBe wuLO}A! €] LTO soptun sopersg U2 epusysisa: cue) ofmpoud vundura “eon ‘pid to osnd ousoigo8 onanv 9 anb seauiojas Saldana! se] ap ‘metg erouy “souEStroureeLi0U sooiifod & soaruTouosD sosasayt ‘209 uoRoIpenvos us enue sond ‘TeuopeU sar9EIE OLsoIqe tn spmape 70001 © osed sepod Jap ewe} =p sendsaq -(U9!DE|qad F ap euokeu | ap Soferos SsuorDeoYpuatay s¥] Uo EGET Os Sond) somndod & (eureiazareyzed epersouap ep UoTepmarsr ej aod £ empeiorp Ean op enua> oo eyIN|) canROOWP Dare un plus} Bgey UoFIM/oKa e] sped fop eMIOY Ul LICHT ‘SuEREO x SOMTSSED SMPANON Se1 1 Hom gELNE FreND * one38 CORA: ENTRE ARTE Y LAS SeONTASLS pues establecis como maximo aquellas parcelas que no reba Saban las 67 hectéreas. “Con esta medida pasé a manos del Estado cubano el 70% de todas las EI sentido radical de esta segune por C. R. Rodrigues: “La iuevos gobermantes cubanos pensaron algu rspectivas de desat ‘un proceso capitalista Biemo no tuvo mas remedio que buscar sus fos entre los campesinos pobres y los trabajadores agri gue fa revalucién cubana hubiese caricter agrario, como fue'el caso il buscar en Cuba una “larga mar- Sierra Maestra (.. J" Para sobre todo, una base insurreccion en las ciudad Parece estar claro que més que eliminar awraria”, como formula CR Rodriguez, equ gobierno revolucionario era yanar el apoyo de las gran des masas campesinas. Asi se explica que ninguna de las dos Tesis que postal Paul M. Sweezy, en Cuba: anatomy of a re- olution, Nueva. York, 1560. ME. Castro, La revolucién cubana,.., cit. p. 390. "La primera: ley de-teforma agraria fue promuigada desde Ia sierra el. 10-de octubre de: 1958'y no fue sino una aplicacion de los articules. 90-y 91 de Ia Constitucién de 1940", jean Jacques Alpbandery, Cuba, el precio de la revolucidn, Buenos sires, 1974, peat. CUBA: ENTRE MTT ¥ Las MonTAwas 49 favorecidos con la supresin del pago de =n todas sus formas. De este modo no ¢s errémeo pagar a preferentemente en especies agrico- campesinos asentados en la tierra, por la cEPAL muestra que, de santidad mensual de desera- 000 desempleados parciales y los demas leados 0 trabajadores familiares sin remu- Lo que reivindicaban, pues, los ejércitos de desocupados agrarios no era el derec! fabria sido ldgico convertirlos en pequeios propieta- Flos. Por otra parte, las haciendas estatales surgieron en una New Haven, 198, p. °C. R Rodrigues, au ALA 4A eee eee eee eee eeewa ‘4 ede “noe wpa Hf oN “a S6/SE6} oltwgno laige ojniumiowt Yop “za “196 iui ‘amp dayton sng 24 pad Syed bz sinew exes “atari ¥8°@SP | -solepos some sey, “zanyspo “See senve onb om (msiqeuodumni) feooaey ose) ns uo sprope ‘nb oms ‘oraigo Jaropieo um gp ofaies ojos ou upromoner Td 1p do samy Me “{openasus witgmi so as peu anbime) wegestnd seers oun eoenmaen anbiod ‘eueuoronjona: se oton toyesued Ou soraage ne esadaz nb 6] nas anb OF 4¢., 2584 oe cot uo 2p Inge Spo 1b) 096 UD O1ISe> e niop stoprod soe Unio! sSuomoe se 3p 31 soiopse> 2p UORENE ep unjqny 9t of “euegeH! TT © oplaqeay OF i ap Wolof 8 ‘salopelegen se; ano Taste i Ug “ase ap ot X weeu 2p stuomeryashes | tio sopod jop wulos t} ap sendsap sepiiins chee go oiuarmAoK wn aot 3p sols} eqerae ion f i "OWnsIp oBje i : i creypouny 9p ‘euBemp e wzoine ou euysedures Uptonion=: ‘oidn eon ops efey ou eueqno uppanjonat e|anb ap otpou Ta j2.0p0) 2p oxiuan fp sia ouresf wa: Sos us enbiod gizmn20 Os Oro smo eq omstu jp omoD ‘opusnaliios BjostiBe o1isdx> 9p se] uoo onsniD zaumd 2p souoisuny sns reuiquuos wigap nse ‘oanpIama oTerede opragdmos £ casssteAys tm oxans je sauomentioysuen ap osspoid J2 oge> v SPADII Eivg ce eter oes us onmanes ¥ rss & eireaBe sparope any seindod-oo -pouap UpPMposal F :Ise OYDIp Q TEwopeT NoDN}OAa k EL sexe wmis0ya1 ance nofseyar eyDaNss & ATP oC“ ‘ap EpEIEpOP PeIsiIDUS B] OUBGND oUIDIGOR Te BLIDH ej 9p UDeTTTeUODET F] snj "UEMEISD B| ond souDW “ea}dumerop ap ozauma 20 K 018082 “0 agpedna SoUnaTe te Gulp waeES Sea s -osop 2] ap eemajgasd ye eoppastesd exsandsor ean ‘so00(srpU0® Us TpEnase ‘oaydt Sa amb LSI SP Tae & 9861 9p oxen s¥so Uo ‘UoreN] Sepusey serel “eLrEWBe eITDRAS? JeUOIIpEN See RR EMD Bot tone en op arate an ee ee ee HARA eMMoLc2” 9p TeUOFEN ofesnoy Ja “ugmmioaa! el a 3 Ee ges ee ee eePiered ree Spunin fap ise bdtnop Cogn Sondypoe ee TL 2P dyad oof sopegeey scaBprer Por aS popraapae oe opm sopions sri 4 aN ENG yan9 we mm Symiion ra jan mune runs32 una: en contradiccién con las propias los trabajadores. Por de pro brar las estructuras “mujal gedo a ser verdaderos soportes de como el 26 no tenia ningin enraizamiento profundo entre trabajadores, David Salvador, delegedo sindical del 2 que actuar pricticamente como interventor estatal en dicatos. Erradicados los mu; muy fuerte aun dentro del 26, y precisame de los representantes de esa linea. Asi, dentro sO que amenazaba repetir los tiempos idicales ocurridas durante el gobierno de Los comunistas emplearon una téctica bastante acertada den- iro de los sindicatos levantando una plataforma unitaria que contemplaba fa unidad con el 26, cl alcjamiento de todos ios sindic Ja burocracia y ‘a nuevas eleccfones, En vista de ios conflictos que se presentaban, Fidel Castro decidi6 intervenir personalmente en los sindicatos. El 17 de ‘gctubre de 1959 nombré ministro dei Trabajo a Augusto Marti- ez Sénchez (que no era aaticomunista) desconectando con ello a Iss posiciones anticomunistas del gobierno. su tribuna 2 los miem- del 26 En la prictica, Castro abria Ja puerta a los comunistas para que pasaran a acupai gue anteriormente habia ocupado la burocracia El Décimo Congreso de la Federacién del Trabaj Ingar ei 18 de noviembre n normal ya que existia una manifiesta presidn del Estado en contra de David Salvador y su grupo. Bstos jugaron su carta decisiva presentando la mocién de excluir a los comunistas de los sindicatos, la que fue rechazada por aclamacion. Sia embargo, muchos militantes del 26 votaron en favor de esa mocisn, y en medio de ese cadtico ambiente, proauncié Fidel Castro ua discurso. Con ironia records Castro que él algo tenia que ver con i 26. Trajo ai recuerdo la nula resistencia obrera al goipe de Estado de 1952 y el no apoyo al llamado 2 la huelga general en 1958. Culpé de eso a las direcciones sindicales establecidas Y seiald que la revolucién no estaba dispuesta a aceptar seme. Jamte liderazgo sindical. En caso de que la linea anticomunista %*R. Alexander, op. cit, pp. 168171 cumA: ENTRE DanRrt ¥ LAS MONTARAS cc) ganare Jas elecciones, planted que éI mismo se pondria al lado de la minoria, Esta cra una abierta intervencién, Liego Castro trazé una linea demarcatoria en extrema contra. rrevoluciéa y la extrema revolucién”® El dilema era, por lo demas, cierto, El congreso fue clausurado en una situacién de indetinicién, pues Salvador siguié en la directiva. Ni la enorme autoridad de Fidel Castzo fue suficiente paca quebi tura sindicalista formada durante tantos.aios. Pero ello reve. Jaba al mismo tiempo el problema central: el cardcter no-obre. to de la én reci Después del congreso, las estructuras sindicales fueron sis: tematicamente golpeadas desde el Estado, Es cierto que ea su desarrollo Ia revoluciéa ganaba a muchos trabajadores, pero no en cuanto clase sino en cuanto miembros del pueblo. Lx toma del poder de Ja clase obrera por parte del Estado —tal era en efecto la paradoja que estaba ocurriendo— se realize fundamentaimente mediante golpes de autoridad. En abril de 1960, David Salvador fue obligado a renuneiar. Poco @ poco los comunistas iban ocupando los huecos dejados por el 36 en su breve incursion hacia el interior del movimiento obrero. Mu. chos miectbros dei 26 se hicieron comunistas. Algunos since. ramente. Otros, quizd no. Los DESPLAZAMIENTOS POLITICOS Paralelamente a la incorporacién de los campesinos al proceso yal quiebre de las estructuras sindi endo lugar en Cuba desplazamientos socinies q ran en los curses Politicos. La popularidad de Fidel Castro a Ia hora de la toma del por der era inmensa. Esa popularidad se transformaria en apoyo social organico tan pronto se pusieron en prictica reformas gue mejoraban notablemente el nivel de vida de los sectores Sociales subalternos. Tan importantes como las reforraas agra Tas fueron en ese sentido las urbanas, iniciadas por la Ley de Alguileres, pa loseph Morray, La segunct revotucién en Cuba, Buenos Aires, 1965, p. 70. AAD AD §| | - BP csonswunu sns ¢ vpnuin janmey opensisee, “GASTSUSt “84g 2 "yo oo seo “ose Wepo do hetaoye pctupmua: onb sya: gpanb 9] o1 wan» ‘omomemae ‘Tebesl wopemepe e; ap open to ourzigad fe pmaisat tom BS wo ppmigoid as uoperge ay wae oponb Topod fo sonmenuy sot ea oe Sot p sone rpundes seque “Tea! Opor— omsep ep seisondeas 3p myer y ‘oastep ohfnee! onse sed op soapendsuos sewsanbso mee ‘Gb p amin cpisnse sige eee Se] sepinbn) edroupsd crumd 1s ug "opreees recs! onsstapites any By peasy 2p omssde pp soumeeu es ae - Sa ce an a 1mm ip 2S mBare SwaumpeIoI ordaae ou ‘opeysey ap oLiaiqos fo 91 “mEmp seiaymg e optuinco o| opumpioons indore org weiBy ouegoy ‘sonaixg yop k ceuoprey ony “seid feuotsinosd ottraiqo’ yap wfousisfea el 20d se SwoNoW sr A ae auneT vend “961 22 "729 wo SON oot sniwoo so] e eistpuayep onseD anb ep 21ustimrverpmsdapay oopyjod oped am‘.osomsay sem oyeox un oysoy By BUUOISTY B| SBA Seog “TEHOEN UPPSTULEp ap afa un up sopfyaauco otad op meqenuoou 26 ‘oysend -ord weraigny oj 2s enb 2g siegep top one LOWSTORWOS,, T2P PU ‘SoStuioua sn tod seysondia) ofont jap seffas se] amas onb srw ozmy ou ‘rIsRMUIOD Ge|s=ep 25 ANSE) opueM onb opow 2d “ense9 ap 10Ae) uD UquIso sted Je opor SED ‘oduran asa up ‘onb so euiajgord o2pm 1g ‘SeISHMUIOIALE OOD “E1009 Ns us geqeise anb So} & ‘sensiunuios owico sopefegas ero Onse), Tepig o> weqese anb soy “CHOSIATP vouT won Eun ‘onse) ‘| us Tsonduy er wore ‘auiearzou sot anb ap sai zuoqzy OqoDes ap vjeuTeIEND bf ua oppaons ejqey osy “susonu op vouoltes wun aquDmeyteN—N optieambe 8y Bune] eaupmy ug “solid bie upjoemoe Fy 9 a enspo of ose ese oiog “Sloqunde> miad&) VoD opelies Sida un & ouyureo fo seaeye wepared oueansn Tende> Pp By £ ompungue) jop uomepausa | “aiuwAuIopoUl UODNIOAR Sem op pepiniaisod & Uoo ueqedos anb soueneTednIe soioio08 Soundje\ap seuronbse so] uo siusumso3iod viqen U]2 SBUIP O| oq -souoliodozd sopow opemmesre eiqey eqn H anb OAL Teledse ene Te adjod omp un goundys vuegan wanoyes © eroraud opronpas os0 © eiuos ej srOpe wid f gyst Je wesopars an SOpeiofod: oo souzgan sa[qonuial 9p uppeidaiixe sajabrens ap opeiod! [ep 2ofes fp egemue onb oMpieq ovauioy [ap £2] @ epomp ony svasureraniaoy “ozed oBey ¥ sexe sme weed hoo anb ered souriepusure £0] © S9pEpTEI HOeRIO10 ar SPU “Spy -seife sym seuGdaie so] V ge UTE 0} OM 9p & SoTENsURD! Soobd gol 2p seus weqeied ssuamb ered ogge tm to Sepuniaia 3p sopteyine 30] soppnpal warn ESsoqmbIy op Aa7 Banas rouorm oomnod oiunuremdsop 19 SYSNON SIT a HAW aN sve vea 325 coma: ETRE MagTt Y LAs MoNTASlAS Los desplazamientos en el gobierno eran pralelos a aquellos que ocurrian dentro dei propio 426s. La verdad es que casi al dia siguiente a la toma del poder, Castro se habia quedado sin organizacién politica. El 26, quiz al igual que el antiguo directorio de Guiteras, se habia constituido solo para cumplir lun objetivo inmediato: en este caso derribar la dictadura. Pero debido a su heterogeneidad social e ideolégica, era una orex nizacién incapaz de constituirse en gobierno. Esta es quizas otra de las razones que presionaron a Castro para buscar apo- yo entre los comunistas. de las Fuerzas Armadas. Matos, Con Ia renuncia de Ma que puso en juego todo su prestigio ganado en la tra Batista, probablem: la débil esperanza de provocar luna division en el propio ejército, se alinearon detinitivamente Jos frentes. Castro hizo arrestar’a Matos por tropas coman- + dadas por Camilo Cienfuegos y luego Io aplasté politicamente Mamando a una gigantesca concentraciéa de masas donde se grité en favor de la ejecucién del antiguo combatiente. Matos no fue ejecutado, pero si fue condenado a largos aos de pri: sién, El nuevo poder se fue configurando como una suerte de en- cuentro entre parte de la direccién del Ejército Rebelde y los comunistas. Este encuentro tuvo lugar en el interior de un frente de transicién denominado Organizacianes Revrlucicns- Fias Integradas (ort) 2 A diferencias cor independientemente del Estado para luego asimilarse a Partido “leninista” de Castro comenzaria a gestarse en el Hor del propio aparato del Estado. Pero todo el desplazamiento politico descrita resultaria inex plicable si no se tomara en cuenta al mismo tempo el despla- zamiento de Cuba en el espacio internacional. Partido “leninista”, que se constituys i ‘el ssVéase Jacques Arnault, Cuba et le: marzisme. Essai sur ta revolution cubaine, Paris, 1362, pp. 174201, WotF, Mires, op. cit, p. 234. i i 1 coma: ENTEE Mazel. ¥ LAS MoNTARAS 327 El desplazamiento politico internacional La revolucién avanzaba a una velocidad extrzordineria convir- Hendo a opositores normales en contrarrevolucionarios, El boicot norteamerieano a las exportaciones obligaba al gobierno 4 tomar posesién de gran parte de la industria privada acele. rando el proceso de expropiaciones. Hacia octubre de 1960, los centros més importantes dos 0 estatizados. En Esta: varse preparativos similares vasién a Guatemala. En 1960, chazaba Ia cuota anicarera. De ron al mercado sovistico. Los mprometieron a comprar medio millén de toneladas aquales du! aos precio de mercado. AA fines de 1960 Cub: del Banco Mundial. Los empresarios cubs zaban un boicot a las inversiones. Ernesto rempiazado al banquero Felipe Pazos en bancos € industrias— redoblé el proce Estados Unidos dejé de enviar petréleo. petréleo ruso. Las empresas norteameri hegaron a trabsjaf'con petréles ruso. El gobiemo respondis expropiando a la Texas Company, la Standard Oil de Nueva Jersey, la Royal Dutch y la Canadian Schell Lida. A éstas se agregaron las compafias de electricidad de la toma del poder, el Estado cont todo el aparato productive, La revolucién habia ido ya muy por el clima de la guerre iria alternativas que elegir. Y eligio smnativa que le estaba, para salvar, por fo menos, parte de la revol entrada de Cuba en'el bloque socialista estaba —indepen temente de consideraciones ideolégicas— condicionada por la propia seguridad externa del pais. También hay que decir que, @ partir de esos momentos, comenzaria otro capitulo cuyos ‘acontecimientos ya no estarin tnicamente determinados por Jo que ocurra.en la isla. 4446.43foo -soonrpod somouiow £ sonopyp SeuraMp ses> op uptoouiqmen jetedss Ant of sateen eautimde! anse Toply eiuaien® to ap he “2p ssiny uoroana and reismdod sensperoiee ara “owp sonom! 2p eneisny “od oynay Sr geen ce Ment of elychat Ace te See Si ceo Lee sept oom ; a oh EE se eon wf apap npol oesese ate Sea Ros pS Sa ee ara co ere el es for aa tees 2uIa}s}5 O1daid fo u> wasti0 ap 1d Any BUN) or seuedans Seid uno wap ta : tig “so[eubsopm sostueadises ap aoe eee ‘taqes at sub eopstod upnbe © uoistnaoy op wesean dU] et paso ‘sopenruEaio muauoopUls manele 3p & supa modes se} ap uotsagpe ef fovmiee oop ee 1K upmemutop op snboja top seuviaesy Sento See Repou! ond —ouueusiousee Wisneg one peaks he eo Gig f narp ap souoraor eet an Sp Care ey og eee ‘Budi op taoroony # uomenuosoten op taped ee eee etorIpen sewn seambrgano sotises Te yepuLsnsuos pepredesa) ] omayunaom je spsop eqednsBe anb oougformay kn FeD0s onbog un aod (sopra sopmsy ap ofode £ +8] 103005 Fop oraMmopasd) jeuommpen odn sp rombs ‘ft empusip wun op uofMASAS By v9 gsaidso 9F 37 1 ue oxgyar tm ofnpard as ¢¢61 ap anzed v ‘opou ‘simp our yo eufoa ‘sconpinsiio soquvan Sazepr] eanpesaqp f] ap oluammreqesiap fo uo extrrop Prouenzodem tan Onm O70 ‘eonze f ofopesege: “exoigo OlWoquas0w Te “evs TeIh 9p ob ‘ind tm 9pesq “SeimIMa omolUy sp oUeAODNIoKay ONCII—: Spmmnoosano ony ‘eueusnegiiae ptnjota: 9p srte0dut Sem siospoonae jo sénansado eiepeqpemae wpfonfonas © PEpmnunuce oid ‘ose eum ap orem op extaap uotojsma0 an mestadn: ‘ond ‘aos wisneg sp enuoe vo ernoup a0] 9p e] A opeioen oP enuco ue emai soye so] 2p uponjoaa ey "eURe] LSaTY to Songun sone> Exmb tos sey peel OsIOO ,coLtoISTy ao, im op spesia eA “epedey t oradias eiStmpusdapat a 55 ofits [pp somnoid sot sp eanod enasoyes e] opesed fo dco pepmunaea sp noises! squauemad ns to opise! ousat ofredoporyarsy oraoud Top sarenmnsed sya soBse! 50) Sp oth SENOISOTONDD sYNAOTY SqMHNON SCT A jE gL :YED wa30 CORA: ENTRE 3ARIE LAS MONTARAS ‘Tanto el asaito al Moncada como el desembarco del Granma y los acontecimientos guerrilleros que tuvieron lugar hasta abril de 1958, fueron concebidos como partes de una estrategia irada en los heckos que pusieron fin a la dictadura irreceion de masas desatada por una huelga gen tbargo, el fracaso de la huelga general de abril de talmente al 1265 que los obreros no se icilmente por conducciones extrafias a ellos fo, el movimiento deberia concentrarse en qu reno donde era mas fuer lucha, éste se desplazé hacia [a transformacion de la gue: Frilla en un ejército popular. Los mome! de estatizar las estructuras sindicales que se habian formado ducante el periods dem yncada fue condenado por su wné al Hamado eficaz aparato organizativo despues .¥ del acercamiento de Cuba 2 la ‘Hasta la toma del poder, la revolucién tenia un carécter de mocratico (lucha en contra de una dictadura) y popular. Des- pués de la toma dei poder, gracias principalmente a la nacio halizacién de la tierra y de las industrias, pasé ademas a tener un cardcter nacional. Esa nueva fase acelerd ios desplazamien- tos internos de fuerzas, en los que perdié toda relevancia le de por si débil capa de propietarios y tecnécratas modernizan- tes y se forralecid ea el poder aquella fraccién de la clase po- cum: exTRe MagTI ¥ LAs MoNASas 33H IMtica representada por Fidel Castro y la jerarquia del Ejércite Rebelde, asociada le los comunistes y apoyada en de la poblacién popular. El hecho de que la revoluciéa cubana hubiera surgi periodo de fa Uamada "guerra fria”, la obligé a aptar bloques. Esa opcida convertiria a Cuba ea un tema de c taciéa mundial, diferencia fundamental con el destino revoluciones latinoamericanas que hablan ocurrido en sado. (4 44.4540 teal aac sae eens eee