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EL SISTEMA DE CITAS EN ESCRITOS ACADEMICOS Y PROFESIONALES DE DERECHO (Guta préetica sobre sus aspectos formales) Fernando M. Toller * y Juan Cianciardo “* {Publicado con el titulo cambiado a "Cémo citar en los Zscritos profesionales y académicos", en LL, Suplemento Actualidad, I Parte, diario del 7 de diciembre de 2006, pp. 1-2; IT? Parte, diario del dia 12, pp. 1-2; I11® Parte, diario de! dia 14, pp. 2-4; 1V® Parte, diario del dia 19, pp. 3-4; y V® Parte, diario del dia 21, pp. 3-4. También en LL. 2007-A-...)} inpice: 1. Importancia de citar correctamente y tres razones que pueden dificultarlo 2, Tres consecuencias negativas de citar de manera defectuosa 3. Propésito préctico de esta guia. 4, Formalidad y correccién sustancial de las referencias . 5 6 1. 8 Las citas y el argumento de fondo La coherencia interna en las citas Notas al pie, notas al final y referencias en el texto Modo de citar un libro. 9. Libros realizados por instituciones libros colectivos 10. Citas de elasicos 11, Referencias del niimero de ediciSn 0 de reimpresién del libr0.....eenneeen 12. Citas de un trabajo incluido como capitulo en un libre eolectivo 13, Cémo citar articulos de revista .. 14. Citas de articulos publicados en repertorios de doctrina y jurisprudenci 15. Nuevas citas de un libro, capitulo de libro o articulo ya citado 16, Modo de citar sentencias extranjeras 11. Gitas de fallos de tribunates internacionales. 18. Las citas de jurisprudencia nacional 19, Citas de normas 20. Modo de citar materiales doctrinales, legales y jurisprudenciales localizados en Internet .. 15 21. La cita de documentos localizados en bases de datos we 16 22; Consideraciones generales sobre el tipo de letra 18 23. Comillas y uso de paréfrasis 7 18 24, Aclaraciones sobre el uso de “cfr.” con relatiOn a autores, normas legales 0 sentencias rT) 25. Aclaraciones sobre el uso de “idem” e “ibid.” 20 26, Fluidez del texto y referencias en notas al pi 21 27, Citas extensas de autores, leyes 0 sentencias 2 28. Abreviaturas .... 2 29. Algunas sugerencias de libros y referencias sobre la investigacidn cientifca y el sistema de citas, con un comentario sobre su utilidad 23 Profesor Titular de Derecho Constitueional y Director del Doctorado en Derecho, Facultad de Derecho de la Universidad Austral. Dicta clases de Metodologia de la Investigacién Juridica en dicho Doctorade, "Profesor Titular de Filosofia del Derecho y Decano, Facultad de Derecho de la Universidad Austral. Dicta clases de Metodologia de la Investigacién Juridica en el Doctorade en Derecho y en dis- tintos programas de Maestri ‘Tons ¥ GlaNctanbo—EL SISTEMA DECITASEN ESCRITOS ACAMEMICUS Y PROFESIUNALES DE DEnRcHo 2 1, IMPORTANCIA DE CITAR CORRECTAMENTE Y TRES RAZONES QUE PUEDEN DIFICULTARLO Christopher C. Langdell, el Decano de la Harvard Law School que en 1870 restauré el método del caso para la ensefianza moderna del Derecho, en un discurso dado en 1886 con motivo de la celebracién del 250 aniversario de la fundacién del Harvard College realiz6 la siguiente afirmacién, qué devino eélebre: “[E]l derecho es una cencia, y todos los materiales disponibles de esa ciencia estin conte- nidos en libros impresos (.... [LJa biblioteca es el taller adecuado tanto de los profesores como de los estudiantes; (...) ¢s para todos nosotros lo que los laboratorios de Ia universidad son a Jos quimicos y fisioos, el museo de historia natural a los zodlogos, el jardin botdnico a los bo- ténicos”'. Langdell partia de la suposicién de que la ciencia del Derecho se construia mediante una induceién generalizadora, reduciendo todos los precedentes judiciales del common law aun sistema de principios generales. De estos prineipios, a su vez, podrian deducirse las normas a aplicar en cada nuevo caso conereto. De esta manera, se pondria orden cientifico y claridad en el case laze, algo necesario para el ejercicio de la abogacia’. A su vez, segtin el jurista espaiiol Alvaro D’Ors “el estudio del Derecho es un estudio de libros” *, Con esto queria decir que el método del Derecho es el del estudio de textos, como las humanidades, a diferencia del método de las ciencias sociales, que operan estu- diando la realidad factica. Més alla de los matices que podrian hacerse a los asertos de Langdell y de d’Ors, lo cierto es que una de las materias primas principales de la tarea de los hombres de Derecho son los libros de doctrina, los articulos de revistas, las sentencias publicadas en los reperto- ries y las normas recogidas en los digestos. En consecuencia, del correcto tratamiento de esas fuentes trascendentales de los trabajos juridicos deriva en parte la calidad y correc- cién del propio trabajo.que se realiza y se presenta ala comunidad juridica en forma de sentencia, de libro, de articulo de doctrina, de fundamentacién de un cuerpo normativo... Pero ese correcto tratamiento de las fuentes no es siempre cosa féeil, debido a varios factores. En primer lugar, porque en la actualidad los géneros cientificos del Derecho se han multiplicado, el mimero de las publicaciones juridicas es inmenso, y el acceso a la in- formacién se ha globalizado. Esto no sélo ha enmarafiado el tratamiento de las fuentes, si- no que —aungue sobre este aspecto no sea del caso extenderse aqui— también ha modifi- cado el ars iuris en sus diversas manifestaciones y en no pocos aspectos. Vayamos a la seguida dificultad para la correccién en las citas y notas. En algunos paises, como Brasil, el sistema oficial de apoyo a la ciencia tiene establecidos eriterios uni- formes para la elaboraci6n de las citas y las notas al pie de los trabajos cientificos. No ocu- rre asf entre nosotros. Tampoco poseemos criterios unificados en razén de la praxis misma de los autores, pues se verifiea una amplia dispersién en los modos de citar. Finalmente, en el trabajo profesional del abogado y del juez suele haber una prepon- derancia porla argumentacién en sf, con cierto descnido o desprecio de la cita. Esto ocurre incluso cuando se transcribe textualmente o se parafrasea una opini6n ajena, porque direc- ) “Harvard Celebration Speech”, Law Quarterly Review 3 (1887) 123, 124. + Sobre sus ideas eff. A Selection of Cases on the Low of Contracts. With references and citations. Prepared for use as a text-book: in Harvard Law School, (1# ed., 1870) 24 ed., Little, Brown and Co., Bos- ton, 1871, V-VIT * Cf. Una introduccisn al estudio del Derecho, Rialp, Madrid, 1963, 9 (con diversas reediciones) Tousen ¥ Cranciativo — EL sistEMa DE CITAs EN ESCRITUS ACADEMICUS ) PROFESIONALES DE DERECHO tamente se omite la fuente, o porque se lo hace de modo notablemente incorrecto. La con- fusién se retroalimenta, por otra parte, pues las dedicaciones exclusivas a] trabajo acadé- mico son escasisimas en el ambito del Derecho, y muchos de los jueces y abogados que leen © escriben a diario citas descuidadas son también quienes evan a cabo publicaciones cien- tificas en el Ambito del Derecho. 2. ‘TRES CONSECUENCIAS NEGATIVAS DE CITAR DE MANERA DEFECTUOSA. {Qué ocurre cuando un trabajo de Derecho tiene un sistema defectuoso de notas y ci- tas? Entre otros inconvenientes, como seguidamente se vera, dicho trabajo apareceré des- lucido y descuidado, entorpecerd la tarea de estudiarlo y quiz hasta viole los derechos de autor de otra persona. En primer lugar, si en un trabajo jurdico sus citas y notas est4n mal realizadas, dicho trabajo apareceré deslucido. La razén es que, 4 “una imagen vale mas que mil palabras”, de alguna manera la pulcritud en la presentacién de un escrito de Derecho también trans- mite y comunica seriedad, cuidado, esmero, dedicacién, acribia, y augura prima facie buen pensamiento, argumentaci6n, ideas... Unas notas a la ligera indiean, por el contrario, que posiblemente acompaiiardn a ideas no suficientemente sopesadas. En segundo lugar, mientras un trabajo con citas correctas es un servicio al lector, uno con citas y notas incorrectamente dispuestas dificultard su lectura y comprensién por par- te de quien quiere acceder al conocimiento o informacién que se intenta transmitir, y en- torpeceré la distincién entre la reflexién propia del autor y el aporte de las fuentes que ha utilizado. A partir de esto, si se trata de un texto que puede ser utilizado por otros estudio- sos se borrardn los vestigios para ir “tras las huellas” de las ideas hacia sus vertientes ori- ginales —in-vestigio—, en que consiste una parte de la investigacién. Por iiltimo, la deficiencia en la manera de dtar puede levar al descuido —si no ala apropiacién— de la propiedad intelectual de los autores utilizados para la elaboracién del trabajo que se presenta. Por eso, débe dejarse constaneia expresa y exacta de todas las opiniones ajenas tomadas como base para la elaboracién de un trabajo. La insensibilidad que muchas veces se advierte réspecto de la importancia que tiene el reconocimiento de cada aporte ajeno al trabajo propio quizé provenga de no haber caido en la cuenta de que —desde una perspectiva antropolégica, y mas allé de las importantes dimensiones éticas y legales del asunto— la propiedad intelectual es valiosisima. Se trata, en efecto, de algo muy cercano a la “mismidad”, es decir, x ese conjunto de pensamientos, ideas. miedos, proyectos y quereres que constituye —entre otros elementos— la identidad personal. En él reside parte de la riqueza de una persona, y de él surge la “diferencia” que puede aportar a quienes le rodean, 3. PROPOsrTO PRACTICO DE ESTA GUIA Por lo seiialado hasta aqui nos ha parecido de interés ofrecer en un formato senecillo y sintético algunos criterios que pueden ser utilizados como guia préctica para la elaboracién de cualquier trabajo juridico: desde los escritos tipicos de la profesién del abogado y del juez —demanda, contestacién de demanda, recursos, resoluciones y sentencias, dictéme- nes... —, a monografias y trabajos pricticos universitarios. trabajos de investigacién — "ESIONALESDEDeneckY "Toten Y CIANCIARUW—BLSISTEMA DEEITSS EN ESCRITOS AEADEMIENS Y especializaciones—, tesinas —maestrias— y tesis — doctorados—, incluyendo articulos de doctrina y libros de Derecho. No hemos pretendido agotar todas las posibilidades que la bibliografia presenta, sino dar los lineamientos generales, aplicables a la gran mayoria de las situaciones a las que un autor se enfrenta. Ante nuevas situaciones, datos bibliograficos. etc., deberd procederse en cada caso del modo que el sentido comin indique, introduciendo los datos que parezcan re- levantes. 4, FORMALIDAD Y CORRECCION SUSTANCIAL DE LAS REFERENCIAS En este trabajo vamos a concentrarnos en la correccién en los aspectos formales de las citas, y no en su utilizacién sustancial. Esto es, mds allé de que un autor esté o no bien re- ferido desde el punto de vista de la edicién, la pagina, etc., se encuentran los problemas re~ lativos a que un autor o sentencia sean trafdos a colacién con justeza, que estén introduci- dos en el momento oportuno, en una cantidad adecuada, que se armonicen y combinen convenientemente con el resto del diseurso, y, sobre todo, que se les haga justicia a su pro- pio pensamiento y doctrina, sin forzarlo que afirman en aras de las propias necesidades de argumentacién. Los distintos aspectos apuntados en el pérrafo anterior, que exceden el modesto pro- pésito de este trabajo, implican el oficio de escribir, que tiene gran semejanza al arte culi- nario: se trata de combinar sabiamente ingredientes a disposicién de muchos o de todos, de modo que la mano dispone de un modo particular esos elementos, articuldndolos a fin de que den lugar a un sabor nuevo, intrigante al principio, clarificante al final. Ese oficio de escribir, sin embargo, no se transmite facilmente a través de libros, sino especialmente me- diante el trabajo del maestro que recorre el tema de investigacién de su disefpulo con pa- ciencia infinita, y corrige una y otra vez esos primeros resultados del esfuerzo del princi- piante. El desarrollo de estas ideas es, por el momento, harina de otro costal, excediendo el propésito de estas paginas. 5. LASCITAS Y EL ARGUMENTO DE FONDO Antes de exponer los aspectos formales de las citas y notas quiz convenga reconocer que la importancia de las mismas no es, con todo, lo decisivo. El argumento de la autori- dad de un hombre ¢s el menos importante de los argumentos, como ensefiaban Boecio* y Tomas de Aquino’, Por eso, el segundo, comentando a Arist6teles, afirmaba que la proba- bilidad basada en la opinién de las autoridades en un ‘irea sirve como criterio orientador, pero no resuelve apodicticamente el problema planteado, pues podré usualmente alegarse autoridades contrarias’, Se trata, en definitiva, de que lo importante no es tanto quién lo dice, sino qué dice; se debe citar no por la importancia de quien se trae a colacién, sino por los argumentos racio- + Cf. Commentaria In Topica Ciceronis, I. 6, en Patrologia Latina, ed. Migne, vol. 64, p- 1166; De Differentiis Topicis, I, 8, en ibid., p. 1199. * Gtr. Summa Theologiae, I. q. 1, a. 8 arg. 1 y ad 2. en Opera omnia iussu Leonis XIII P. M. edi= ta, Romae, 1888, © Gfe. Expositio libri Posteriorum Analyticorum, lib. 1, leetio 1, n. 6, en Opera omnia iussu Leonis XIJIP. M. edita, Romae, 1882, ‘Totuet ¥ CLANCIAMDO — EL SISTEN A DE cITAS EN EscITHS ACAMENILS Y PROFESIONAL pe DERBEHO nales que expone. Por lo anterior, Io fundamental en un escrito de Derecho, en especial si es un trabajo cientifico, es que tenga ideas —al menos una idea—, bien razonadas, argu- mentadas, imbricadas, explicadas. aplicadas... 6, LA COHERENCIA INTERNA EN LAS CITAS Existen muchos, o al menos varios, sistemas correctos de citar y de realizar notas Aqui vamos a seguir el que a nosotros nos parece mis adecuado. Esti basado, en Io sus- tancial, en el modo més extendido de hacerlo en el Derecho continental europeo, con leves modificaciones, porquelo juzgamos claro y completo. Hay otras maneras de citar de modo completo, y el lector puede acogerse a cualquiera de ellas. En este punto corresponde introducir el primer consejo practico. Se trata de que, mas allé de los criterios que se expondrén a continuacién, existe un principio general que mere- ce ser remarcado: cualquiera sea el sistema que se adopte, es importante citar de manera uniforme. Una vez que se ha optado por un régimen de citas, debe respetarse ese régimen en todo el trabajo. De esta manera, para dar un ejemplo sencillo, si al citar libros se sigue Ja linea de poner primero la ciudad y luego la editorial, debe hacérselo asi en todos los li- bros que se citen a lo largo del escrito, articulo, trabajo u obra. La coherencia no sélo implica que un mismo tipo de fuentes deba siempre citarse del mismo modo, sino que también leva consigo que el modo de citar distintas fuentes debe tener una proporcién y relacién entre si. De esta manera, por ejemplo, debe referenciarse de modo distinto un libro y un articulo, porque son trabajos de distinta entidad, y es im- portante que en la nota el lector pueda diferenciarlos de un solo vis 7, NOTAS AL PIE, NOTAS AL FINAL Y REFERENCIAS EN EL TEXTO Es aconsejable que, siguiendo el sistema mas usual, las referencias que se hagan sean introducidas siempre en notas.a pie- de pagina. Este modo: de-citar sé ha generalizado por las evidentes ventajas que tiene para el lector, al que facilitan cubrir, en répida mirada 0 deteniéndose algo més, las referencias que se realizan, a la par que continiia la lectura. De acuerdo a Jo anterior, no conviene introducir notas y referencias directamente en el texto, entre paréntesis, como hacen algunos autores alemanes, porque traban la lectura y quitan claridad a la escritura. Lo que postulamos puede tener excepeién en Jas sentencias yy en los escritos judiciales presentados por abogados, donde la préctica de la redaccién con méquinas de escribir, muy anterior ala época anterior a la informatica, ha consagrado el uso de las referencias en el texto: Conviene, no obstante, sefialar por un lado que en las sentencias de los jueces de Estados Unidos, por ejemplo, son comunes las footnotes, y que, por otro, de la mano de los procesadores de texto, entre nosotros las notas al pie se han ido paulatinamente abriendo paso en los escritos tribunal icios. Tampoco es conveniente utilizar el sistema de notas al final, sea del capitulo, o sea del libro, como se hace en algunos libros anglosajones. La raz6n es que dicho sistema entorpe- ce la rapidez de la lectura, resultando sumamente molesto y cansador a la mayoria de los lectores, que deben optar por prescindir de las notas, 0 por remitirse permanenteménte al final del texto —a pAginas a veces dificil de localizar—. para enseguida volver al punto en que estaban leyendo. ‘Tone yGlaNctantn) EL SISTEMA DE EETASBN ESERITUN ACADBMIENS Y PROFESIONALES DE Denecwo 6 Por dltimo, debe decirse que las notas apie de pagina deben comenzar en la misma pagina donde esté la amada en el texto, pudiendo terminar parcialmente en la pagina s- guiente. En esta linea, las notas al pie deben tener cierta proporcién con el texto. Por esto, no ¢s aconsejable que haya alguna pagina donde no exista texto, sino sélo continuacién de una larguisina nota al pie precedente de la pagina anterior. 8. MoO DECITAR UN LIBRO Para la cita de um libro se debe seguir este orden y tipografia, segin cada elemento a introducir, todos los cuales deben ser introducidos: autor, titulo, editorial, ciudad, aiio de edicién, tomo o volumen en ntimeros romanos —si corresponde— y pagina de la referencia conereta. Asi, para dar ejemplos concretos, tendriamos: Ronald Dworkin, Taking Rights Seriously, Duckworth, London, 1978, 324. Plerre FréMonD, Le Droit de ls Photographie, Dalloz, Paris, 1973, 228. Carlos Covomeo, Cédigo Pracesal Civil y Comercial de la Nacién, Abeledo-Perrot, Buenos A- res, 1969, If, 185. Obsérvese que el apellido del autor va en un tipo de letra denominado “versalitas”, que no es otra cosa que letras maytisculas, pero de uno o dos puntos menos que la primera letra maydiscula. De esta manera, al mirar las notas a pie de pagina, el lector puede encon- trar répidamente los apellidos de los autores citados, o profundizar en los datos exactos de cada articulo 0 libro citado. Es sencillo introducirlas: estn en todos los procesadores de texto informéticos. Antiguamente se utilizaban las maytisculas, pero hoy dia casi todas las editoriales las evitan, porque resaltan demasiado y quitan elegancia a las notas. ‘También es correcto poner la primera letra del nombre de pila, con un punto, antes del apellido. Nosotros preferimos poner el nombre completo, porque poner sélo Ia inicial puede implicar, en muchos casos, escamotear el nombre al lector, que no necesariamente conoce- ré de quién se esté escribiendo. La regla expuesta cambia cuando el propio autor firma siempre sus trabajos s6lo con sus iniciales, como es el caso, entre otros, de HLL.A. Hart. Si el autor se cita a sf mismo con varios nombres de pila, debe consignarselo como él ‘mismo se autodenomina, poniendo iniciales en el segundo nombre, si él asf lo realiza. ‘También puede ser correcto, en el caso de los libros, el omitir directamente los nom- bres de pila, citando en nota sélo el apellido, pues la referencia completa se encuentra en la bibliografia final. Eso no serfa correcto, en cambio, en los articulos de revista que no evan hibliografia final, justamente porque no existiria esa posibilidad de consulta en el listado de autores. No parece correcto invertir en las notas el orden occidental usual con que se designan las personas; primero el o los nombres, luego el o los apellidos. De esta manera, en rigor no debe ponerse, como es corriente, primero el apellido y luego el o los nombres de pila o la inicial 0 iniciales. Para esto existen dos razones, que confluyen: la primera es que no ¢s un modo natural de lamar a nadie, y la segunda es que este modo de disponer estos elementos sélo tiene sentido en una lista de bibliografia. donde se ordena por orden alfabético de ape- idos de autores. De esas listas bibliogrificas la inversién ha saltado a las notas, pero esto no debe ocurrir. Si el nombre del autor ha sido referido en el texto del trabajo directamente relaciona- do con la nota, en la cita al pie puede comenzarse directamente por el titulo del libro. sin ‘TOLLER Y CIANCIANDO— EL SISTEMA DE CITAS EN ESCRITOS ACADEMICOSY PROFESIONALES DE Denwco 7 necesidad de reiterar sus datos, Podria reiterdrselos, sin embargo, si en el texto se hizo re- ferencia solamente al apellido, poniendo en nota su nombre y apellidos completos. Obsérvese que, a diferencia de lo que se verd en el caso de los articulos de revista, el t- tulo del libro siempre va en cursiva, y nunca leva comillas. De este modo, se facilita que el lector puede distinguir si se cita uno u otro de este tipo de literatura juridica. Dentro del titulo sélo van en maytisculas las palabras que Hevan maytsculas en medio de un escrito; Jo propio hay que hacer en Jos titulos de los artfeulos de revistas. La misma regla se sigue en franeés ¢ italiano. Lo inverso se sigue en inglés: todas las palabras que no son articulos suelen ir en mayéisculas. Si el libro no trae los datos de editorial, lugar de edicién o fecha, se deberd sefialar, respectivamente; s/e—“sin editorial”, o “edicién del autor”, en algunos casos—, s/ly s/f. Algunos consignan, antes del niimero de tomo 0 volumen, las abreviaturas t. 0 vol. Entendemos que, al igual que con respecto a las paginas, no son necesarias esas referen- cias, pues el lector entiende con facilidad de qué se trata. Es asimismo correcto poner p. o pag. antes del niimero correspondiente. Sin embargo, no necesario, pues todos saben que el tiltimo miimero hace referencia a la pagina. En esta propuesta se ha preferido eliminar esa referencia, en aras a la brevedad. En cambio, si, por alguna razén, quiere remitirse a un pardgrafo, niimero, linea u otro modo de dividir el tex- to, debe introducirse la abreviatura o simbolo correspondiente: par., §, n.,lin., ete. No parece necesario introducir otros datos que pudiera traer el libro, como la coleccién a la que pertenece dentro de la editorial, o datos de este tenor. Si debe consignarse el tra- ductor, del siguiente modo: Rudolf von INeRING, L’esprit du Droit Romain dans les diverses phases de son développement, trad. de la 3* ed. alemana de 0, de Menlenaere, A. Maresq, Paris, 1877, Ill, § 43, Obsérvese que en el ejemplo anterior se cita el parégrafo, no la pagina. La razén es que se trata de un libro clésico, con-muchas ediciones on diverses idiomas. Por eso, conviene ubicar al lector para que pueda encontrar la referencia cualquiera que sea la edicién que Posea, mas que citar la pégina de una edicién concreta, que posiblemente sea muy dificil de localizar. 9. LIBROS REALIZADOS POR INSTITUCIONES Y LIBROS COLECTIVOS En ocasiones puede ocurrir que no hay una persona que sea el autor, sino que se trata de una publicacién de la que se hace responsable una institucién. En este caso hay que proceder del siguiente modo: ASSOCIATION OF AMERICAN LAW ScHOOLS, Law Deanship Manual (Report of the AALS Special Committee on the State of the Law School Deanship - Approved by the Executive Committee of tive Association of American Law Schools), Washington, D.C., 1993, 24. Si existen autores de partes concretas del trabajo, pero no hay un coordinador concre- 10, ni una instituci6n que se haga cargo de la totalidad del trabajo, y se va a citar el libro completo, sin referir a uno de los trabajos, corresponde hacer asi la cita: AAW; El sistema de medidas cautelares. IX Reunién de Profesores de Derecho Pracesal de Jas Universidades Espafiolas, Eunsa, Pamplona, 1974, ‘TOLLER Y CIANCIARMO—EL SISTEMA DNECITAS EN ESERITUS ACAMEWICOS Y FROFESIONALES br Denecuo 8 10. Crras DE CLAsICOS Antes de pasar al siguiente punto conviene sefialar que las reglas anteriores son para libros editados mas 0 menos en los iltimos siglos. Los trabajos clisicos, en cambio, esto es, las obras de los autores antiguos, medievales y del renacimiento, normalmente tienen un sistema especial de cita, que varia en cada caso. Los sistemas de citas de libros clasicos no hacen alusién a la edieién y pagina que se tiene a la vista, sino a su divisién interna en libros, titulos, capitulos, questiones, lecciones, niimeros, ete. A veces dichas referencias vienen dadas por la pagina y linea de la edicién critiea més reconocida con relacién a cada pensador. Por lo anterior, cuando se cita la edicién conereta que se ha tenido a la vista es sélo para orientar al lector sobre si ha trabajado 0 no con traducciones, 0 para que conozca qué edicién en idioma original se trabaj6, pero el punto concreto que se cita viene dado no por la pagina de esa edicién, sino por esos sistemas especificos a que se acaba de al udir. U1. REFERENCIAS DEL NUMERO DE EDICION 0 DE REIMPRESION DEL LIBRO Si no se tratara de la primera edicién de una obra, sino de la segunda, tercera, quinta, 0 lo que fuera, se introduce el dato luego del titulo y antes de la editorial, del siguiente mo- do: ‘Antonio E. PEREZ Lufio, Derechos humanos, Estado de derecho y Constituclén, 4° ed., Tecnos, Madrid, 1991, 284-286, Normalmente, cuando la obra ha sido revisada, conviene citar de la tiltima edicién de la misma. Por otra parte, si existe una edicién eritica, como sucede con algunos elasicos, si se ha editado una edicién donde se han estudiado con detalle las fuentes del autor, se ha depurado el texto de interpolaciones posteriores, ete., conviene citar por esa edicién. Cuando un libro es citado por una edicién cercana, pero ha sido eserito tiempo antes, y el texto es el mismo de la primera edicién, conviene sefialarlo, a fin de que el lector pueda conocer de cudndo data Ia edicién del trabajo original: Juan Bautista ALsenor, Bases y puntos de partida para fa organizacién politica de la Republica Argentina, (12 ed., 1852) Sopena, Buenos Ares, 1957. En casos de obras clasicas, con muchas ediciones, como las Bases de Alberdi, conviene poner también el capitulo, u otro modo de subdivisién que posea, para que el lector que quiere buscar la cita, pueda hacerlo con cierta facilidad, dado que usualmente poseeré otra edicién: Juan Bautista ALBeRor, Bases y puntos de partide para la organizacién politica de la Repiblica Argentina, (3° ed., 1852) Sopens, Buenos Aires, 1957, cap. XXIII, p. 190. Siguiendo la misma lines, cuando se cita un trabajo que tiene reediciones y reimpre- siones, hay que proceder del siguiente modo: duan Francisco Linares, Razonabilidad de las leyes. El “debido proceso” como garantia inno- minada en la Constitucion Argentina, (18 ed., 1943) 28 ed. 1970, 1? reimpr., Astrea, Buenos A res, 1989, 160. ‘Toney GANCIARDO—EL sisTENA DE UITAS EX ESeRITOS ALADEMICUS Y PROFESIONALES WE DenzcHO 9 12. CITAS DE UN TRABAJO INCLULDO COMO CAPITULO EN UN LIBRO COLECTIVO Para la cita de un articulo o trabajo que figura como capitulo en un libro donde han escrito varios autores se debe seguir este orden y tipografia, segtin cada elemento a intro- duciz, todos los cuales deben ser introducidos: autor del capitulo, titulo del trabajo, nom- bre de quien edité, dirigié o coordiné la obra colectiva, titulo del libro, editorial, ciudad, afio de edicién, y paginas. En los trabajos en inglés y en Espaiia normalmente quien orga- nizé la tarea figura como “editor” —(ed.)—, mientras que en nuestro medio suele consig- narselo come “coordinador” —{coord.)—. De esta manera, si se quiere citar completo a un articulo, sin referir a una pagina determinada, se procederd de la manera que seguidamen- te se indica, poniendo la pagina de inicio y la de finalizacién: H.LA. HaRT, "Positivism ant the separation of Law and Morals", en Ronald DWORKIN (e¢,), The Philosophy of Law, Oxford University Press, Oxford, 1988, 17-37. Renato RAB6!-BALDI CaBantuLas, "A manera de introduccién: El Derecho como saber préctico y los derechos humanos como su titima ratio", en idem (coord.), Los derechos individuales ante ef interés general. Anélisis de casos jurisprudenciales relevantes juez, Abaco de Rodolfo Depalma, Buenos Aires, 1998, 15-37. ° Si se quiere citar una pagina conereta de un trabajo de estas caracteristicas, debe pro- cederse asf, indicando dénde comienza el trabajo y dénde esta la cita concreta: Jack GorrscHAtx, “Consistent with security...” A History of American Military Press Censor- ship", en Theodore Kuprenman (ed.), Censorship, Secrecy, Access, and Obscenity, Meckier, West- Port - London, 1990, 259 ss., 273. Cuando se trata de la cita de un comentario a un articulo de un Cédigo corresponde seguir este orden y tipografia, segtin cada elemento a introducir, todos los cuales deben ser introducidos: autor del comentario, titulo del trabajo, nombre de quien edité, dirigié 0 coordiné la obra colectiva, titulo de la obra, editorial, ciudad, afio de edicién, tomo 0 ve- lumen en nimeros tomanos —si correspande— y paginas: Aida KEMELMAJER DE CanLucct, "Art. 1071 bis", en Augusto BeLLUSCIO (dir.) y Eduardo ZaNONRt (coord.), Cédigo Civil y leyes complementarias. Comentado, anotado y concordado, Astrea, Bue- nos Aires, 1984, V, 72-84, 13. COMO CITAR ARTICULOS DE REVISTA Para la cita de un articulo de revista se debe seguir el orden y tipografia que sugeri- ‘mos, segiin cada elemento a introducir, todos los cuales deben ser introducidos: autor, titu- Jo del articulo, revista, volumen, aio de edicién —siempre entre paréntesis, a diferencia de los libros—, y pagina. No es necesario, en cambio, poner los datos de editorial de la revista y de ciudad de edicién. Si se quiere citar completo a un articulo, sin referir a una pagina determinada, se procederé de la manera que seguidamente se indica, poniendo la pagina de inicio y la de finalizacién: Oliver Wendell Homes, "The Path of the Law", Harvard Law Review 10 (1897) 457-478, William GesreIN, “The Classical Tradition of Dialectics and American Legal Education”, Journal of Legal Education 31 #3-5 (1962) 399-423, Vincenzo ScAL:st, "Lesione della identita personale e danno non patrimoniale”, Rivista dl Dint= £0 Civile 30 (1984-1) 432-453, ‘Ton y Glanctatin Bs SISteMs HELATAS ED RSCRITOS ACADENIENS 1 PROBESIONALES bE DenecHo — 10 Eduardo Gancia o€ Evrenaia, "Reflexin sobre la constitucionalizacién de las medidas cautele- res en el contencioso-administrative”, Revista Espafiola de Derecho Administrative 76 (1992) 615-632 Germén J. Broaat Campos, “El derecho @ la jurisdiceién en Argentina”, Revista Iberoamericana de Derecho Procesal (1964) 611-647. En cambio, si se quiere citar una pagina concreta, se consigna la pagina de inicio del articulo y pagina de la referencia especifica que se quiere realizar: Lon L FuLuer, "The Case of the Speluncean Explorers", Harvard Law Review 62 (1949) 616, 624, Jeon Beauté, “Etats-Unis, Liberté de la Presse et Sécurité Nationale: & propos de I'arrét de la ‘Cour Supréme relatif aux documents du Pentagone”, Revue du Droit Public et de la Science Poll- tique 90 (1974) 721, 724, Luis Prievo Sancis, “El constitucionalismo de principios, Zentre el positivismo y el lusnatura- lismo?", Anuario de Filosoffa del Derecho 13 (1996) 125, 133. Si el nombre'del autor ha sido referido en el texto del trabajo directamente relativo a Ja nota, no hay necesidad de reiterarlo en la cita al pie, sino que puede procederse del mis- mo modo que se ha explicado al tratarse de las citas de libros. 14, CITAS DE ARTICULOS PUBLICADOS EN REPERTORIOS DE DOCTRINA ¥ JURISPRUDENCLA En el caso de nuestros repertorios, en cambio, por el modo usual de citarlos, si no se va a citar una pagina concreta, sino todo el artfculo, es suficiente consignar sélo la pagina donde comienza el trabajo: Miguel M. PADILLA, “Aptitud de los considerandos de una sentencia para agraviar derechos subjetivos",-LL. 1990-B-800, Santos CiFuenTes, “Derechos personalisimos. Sobre una ponencia elaborada como programa de posible legisiacién orgénica sobre la materia con algunas otras consideraciones", E.0. 106- 773 (1984). Jorge W. PEYRANO, “La medida cautelar innovativa come anticipo de la sentencia de mérito", J.A, 1993-11-796, En el caso de nuestros repertorios més importantes, las citas de paginas coneretas de- herian realizarse del siguiente modo: ‘Alfredo Jorge Di Ioalo, "Noclones sobre la teoria general de las medidas cautelares”, Li. 1978-B-825, 827-828. Eduardo Abel FeRNAnDez, “El amparo. Vision actual del amparo y sus fuentes legislativas”, E.D, 181-1261 (1999), 1264-1265. Eduardo N. o€ LAzzans, "Prateccién cautelar del derecho a Ia intimidad”, 1.A. 1990-1-904, 908- 907. Antes de pasar al punto siguiente corresponde sefialar que, siempre que se encuentre ‘ya publicado el toino correspondiente. en el caso de los repertorios argentinos la cita de ar- ti alos conviene hacerla a la publicacién del volumen, con paginas concretas, y no del dia- rio 0 cuadernillo que lo precedié. Tounes ClaNGlARbO —EL SISTEMA DEGITAS EN ESCRITOS AGADEMICOS) PROMESINALES DE Denzcnw — 11 15. NUEVAS CITAS DE UN LIBRO, CAPITULO DE LIBRO 0 ARTICULO YA CITADO Cuando se trata de volver a citar un libro o articulo que ya se ha citado anteriormente en cel trabajo, bastard lo siguient Dworkin, 324. ‘Covoméo , Il, 239. Por tanto, cuando en el mismo trabajo se vuelve a citar un autor y a su obra, sea libro © artfoulo, no se reiteran los datos de titulo, edicién, revista, ete., sino que sélo se pone el apellido y la pagina correspondiente. La razén es que se sobreentiende que se tratara del trabajo ya citado. Otros autores optan, y es correcto, por poner op. cit. —obra citada, en latin—, tras el apellido del autor y antes del mimero de pagina. Nosotros preferimos obviarla, en aras a la brevedad de las notas. Cuando en un mismo trabajo se citan varias obras 0 articulos de un mismo autor, en la segunda y subsiguientes citas de cada una de ellos, se debe poner el apellido'del autor y, tras la coma, la primera o dos primeras palabras del titulo —distinguiendo si se trata de un libro de un articulo de revista, por usar cursivas, en el primer caso, y comillas y letra normal, en el segundo—, seguidas de puntos suspensivos, luego coma y el niimero de pagi- na, de modo que se pueda distinguir en cada caso qué obra o articulo se esté citando. Se procedera, por tanto, de este modo, respectivamente: Dworkin, Taking..., 324. Prieto Sancis, “El constitucionalismo...", 133. Ciruentes, ‘Derechos...", 775. 16. MoDo DE CrTAR SENTENCIAS EXTRANJERAS Con respecto a las referencias de jurisprudencia del Derecho comparado, no se pueden dar reglas generales universalmente aplicables, salvo que se debe respetar el modo de citar las sentencias y repertorios que sea usual en el pais o sistema donde cada fallo se ha emiti- do. Algunos abrevian el tribunal que los dict6; en otros paises esto se induce del tipo de re- Pertorio que se cita. En algunos sistemas se pone sélo el afio, entre paréntesis; en otros se pone la fecha exacta en que se lo dicté. En la gran mayoria de los paises se pone el nombre de las partes, mientras que en otros se pone solamente un mimero. La siguiente seleceién puede dar una mfnima idea de la diversidad en el modo de citar 1a jurisprudencia sogiin los paises, a la vez que da una semblanza del sistema general que adoptan cada uno de los sistemas mas importantes del Derecho comparado: Chapman ¢. Sélections du Reader's Digest, Trib. ar. inst. Pans (réf.), 14 nov. 1980, D. 1981~ 163 ‘American Cyanamid Co. v. Ethicon Ltd. (1975) A.C. 396, HL, Lovell v. City of Griffin, 303 U.S. 444 (1938). Worrell Newspapers of Indiana, Inc. v. Westhafer, 739 F.2d 1219 (7th Cir. 1985). Asf, tenemos en primer lugar una sentencia del Tribunal de gran instancia de Paris, dictado en el especial sistema de référé, tipo de juicio répido, con su fecha, y la cita del Re- ‘Tower y Clanctattn —EL SISTEMA DECIFAS EN ESCIETUS ACADENICOS Y PROFESIONALES DE Derecho — 12 weil Dullos-Sirey. Jurisprudence. En el segundo caso, tras el nombre de las partes, el nom- hire del afio entre corchetes, como es tipico en Inglaterra, la cita del repertorio —Law Re- ports. Appeal Cases—, la pagina donde comienza el fallo y las iniciales del tribunal que lo dicté: la House of Lords. A continuacién, los nombres de las partes, el néimero de tomo, la referencia a los United States Reports —euya sola mencién implica que se trata de la Corte Suprema de los Estados Unidos—, la pégina donde comienza el fallo y el afio en que fue dictada la sentencia. Cuando no se trata de la Corte Suprema, en Estados Unidos la identi- ficacién del tribunal viene dada por el repertorio —en el caso consignado, F. 2d implica la segunda serie del Federal Reporter— y por los datos que se sefialan junto al aiio en que se la dicts —en ese caso, que se trata de 1a Corte de Apelaciones Federal del Séptimo, Circuito— Si se quiere citar una parte conereta, en Inglaterra y Estados Unidos se pone, tras la pagina donde comienza el allo, el ntimero de pagina concreta de la afirmacién que se cita: Carroll v. President and Commissioners of Princess Anne, 393 U.S. 175, 181 (1968). Gouriet v. Union of Post Office Workers, [1977] 3 All E.R. 70, 83, HL Sigue este muestreo una sentencia del Tribunal Constitucional alemén, eon la abrevia- tura de su repertorio particular —Entscheidungen des Bundesverfassungsgerihts—. pais donde no se suele poner nombre de las partes, el mimero del tomo y el niimero de la pagina donde comienza la sentencia, finalizando con el aiio en que fue dictada. Sigue una senten- cia del Tribunal Constitucional espaiiol y del Tribunal Supremo de Espaiia. En el primer caso las sentencias tienen niimero, no nombrés, y se los cita por distintos repertorios —en este caso, por el Boletin de Jurisprudencia Constitucional—, con tomo, aiio y pagina. En el caso del Tribunal Supremo se consigna la fecha de la sentencia, la Sala, y se lo cita nor- malmente por el Repertorio de Jurisprudencia Aranzadi, con aiio y nimero de sentencia. En el caso italiano, que es el que sigue, no se abrevia el nombre del tribunal, la sentencias se denominan por ntimero, y se cita luego el repertorio de que se trate —en este caso, Il Foro italiano—. BVerfGE 33, 52 (1972). STC 52/1983, B.3.C. 27 (1983) 820, STS del 7 de febrero de 1962, Sala Civil, R.J. Aranz. (1962) n° 672. Corte Costituzionale, §, 284/1974, Foro it. 1975, 1, 263. Cuando se quiera citar una concurrencia o una disidencia, debe hacérselo de esta ma- Bonnard v. Perryman, {1891} 2 Ch. 269, 288, Kay, L.., en disidencia. Schering Chemicals v. Falkman Led., [1982] 1 Q.8. 1, CA, Lord Denning, en disidencia Whitney v. California, 274 U.S. 357, 37 (1927), Brandeis, J., en concurrencia, con la ade hesién del juez Holmes. United States v. Morison, 844 F.2d 1057 (4th Cir. 1988), Wilkinson, 3., en concurrencia, Conviene sefialar, antes de pasar al punto siguiente. que si el nombre del fallo ha sido escrito en el texto del trabajo, en la nota puede comenzarse directamente por los datos de su publicacidn, sin necesidad de reiterar aquello. Empero, podria reiterarse el nombre del fallo si en el texto se lo denominé mediante una forma abreviada, y en la nota quiere con- signarse la caratula completa del caso, o ambas partes, etc. ‘ToLLER Y CLANGIARDO —ELSISTEMA DE CITAS EN ESCIRITOS ACADEMICUS Y PROFESIONALES DE Denzcno — 13 17, CITAS DE FALLOS DE TRIBUNALES INTERNACIONALES En primer lugar, se ejemplifica con dos fallos donde se consigna que e! tribunal que lo dieté es la Corte Europea de Derechos Humanos —en Espaiia referido usualmente como STEDH: Sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos—, el nombre del fallo, el afio en que se lo dict6, el repertorio donde esta publicado y el miimero de volumen, si se lo cita por la edicién oficial, el miimero de volumen, la cita del repertorio y Ia pagina de ini- cio, si se lo hace por los European Human Rights Reports. E.CH.R, Tolstoy Miloslavsky v. United Kingdom, (1995) Series & n° 323. E.CH.R,, Leander v. Sweden, (1987) 9 E.H.R.R. 433, Si se quiere citar una parte conereta de los fallos de ese tribunal de derechos humanos, se cita el mimero de pardgrafo, poniendo par. 0 E.CH.R., Lingens v. Austria, (1986) Series A n° 103, § 42. Para citar Ia Comisién Europea de Derechos Humanos, debe hacérselo del siguiente modo: Application N° 13166/87 Times Newspapers Ltd. and Neill v. United Kingdom, Report of July 12, 1990, Series A n® 217, 40 y ss. En cuanto al Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas, el modo de citar es el siguient Society for the Protection of Unborn Children Ireland Ltd. contra Stephen Grogan y otros, sentencia del TICE del 4 de octubre de 1991, (C-159/90, Rec. 1991, p. 4733). Como se ve, tras el nombre de la causa y la fecha, se consigna el niimero del fallo y la ita del repertorio oficial, denominado Recopilacién de la Jurisprudencia del Tribunal de Justicia y del Tribunal de Primera Instancia (C.E.). En cuanto al sistema interamericano de derechos humanos, debe procederse del é- guiente modo, segzin se trate de la Comisién o de la Corte: Comisién 1.0.}., Caso Martorell v. Chile, Informe N° 11/96, del 3 de mayo de 1996, publica- 0 en Informe Anual de la Comisién Interamericana de Derechos Humanos 1996, Secretaria Ge neral de la O.E.A., Washington D.C., 1997, pp. 241-263, Corte LLD.H., Garantias judiciales en estados de emergencia (arts, 27.2, 25 y 8 Convencién Americana sobre Derechos Humanes), Opinién Consultiva OC-9/87 del 6 de octubre de 1987, Serie AN® 9. Corte I.0.H., Sentencia Velésquez Rodriguez, de! 29 de Jullo de 1988, Serie C, N° 4. Para citar un punto concreto de las resoluciones de la Comisién o de las sentencias u opiniones consultivas de la Corte Interamericana se hace referencia al pardgrafo donde se contiene la idea o aspecto a citar. 18. LAS CITAS DE JURISPRUDENCIA NACIONAL En el caso de la jurisprudencia argentina, el modo més usual de eitarlo indiea que debe iniciarse con la abreviatura del tribunal que la dict6, indicando, en su caso, la instancia de que se trata, la sala o el nimero de juzgado, luego el nombre de las partes —o de “la” par- ‘Tough ¥ ClANctARDO— EL SISTEMA DE-EITAS EN BSCILTOS ACANEMICOS Y PROFESIONALES DE Dswsctio — 1 te, en Ios casos en que en la carétula no hay un demandade—, el repertorio, el niimero de tomo, la pagina donde comienza y el aiio de dictada la sentencia: C.S.1N., "Ekmekajian c/ Sofovieh", Fallos 315:1492 (1992). C.S.IN,, "Rey ¢/ Rocha", Fallos 112:384 (1909). C.S.IN,, "Sir", Fallos 239:459 (1957), LL. 89-531 y3.A, 19581I-476. Cém. 28 Penal Mar del Plata, “Pouyssegur’, 1.A. 1966-11-506. CApel.cwv. y Com, Mar del Plata, Sala II, “Ramos c/ Salazar’, £.D. 168-372 (1996). CNCiv. y Com. Fed., Sala 28, “Salvo Aragén c/ Artear", S.A. Canal 13, E.D, 177-420 (1998). CNCiv., Sala H, "Rossetti c/ Dun y Bradstreet S.R.L.", Lit. 1995-£-293. , Sala B., “Yusin ¢/ Organizacién Veraz S.A.", J.A. 1997-1-45. Adm, Fed., Sala I, “Bacre c/ Estado Nacional", €.0. 139-443 (1989). CNCrim. y Corr., "Muruzueta", LL. 117-497 (1965) Juzg. 1 Inst. Mar del Plata, *Pouyssegur’, 3.A. 1966-11-506. Juzg, Nec, 12 Inst. Crim. y Corr. Fed. N° 4, “Cavallo", 18-11-1996 (inédito), Juzg. Nac. 18 Inst. Crim. y Corr., *Muruzueta”, LL. 117-497 (1965). En los ejemplos se ha optado por poner los nombres de las partes sin cursivas y cor comillas, como es el modo més usual en el pais. También puede ser correcto hacerlo sin comillas y en cursiva, como es costumbre en el mundo anglojajén. Debe hacerse notar que la carétula de los casos suele ser mas extensa que la mencién escueta que le termina dando nombre al fallo. Asi, el famoso caso “Siri”, es en realidad “Si ri, Angel s/interpone recurso de habeas corpus”, pero todos esos datos no suelen ser necesa No parece tampoco necesario poner la fecha conereta de casa sentencia, ya que cone afio es suficiente. La excepeién se encuentra cuando el caso no ha sido publicado en un re pertorio, situacién en la cual debe consignarse, ademis de su cardcter de inédito, la fecha concreta en que se lo dictd, de modo de facilitar su localizacién en la oficina de jurispru dencia del tribunal correspondiente. Algunos autores, en fallos importantes, como es aqui el caso de la sentencia “Siri” consiguan no s6lo un lugar de publicacién, sino los distintos repertorios donde se lo publi 6. En caso de sentencias de la Corte, siempre que se pueda debe citarse la coleccién de Fa os. Por otra parte, entendemos que, aunque los repertorios no suelan citar sus propias re ferencias de ese modo, conviene indicar siempre el aio en que se dicté el fallo o el aio de repertorio en que figura el mismo, para facilitar la identificacién temporal que realice € lector, que no necesariamente podra referir a aiios, ni atin a décadas, el nimero de un tom de sentencias de la Corte Suprema, o de una referencia de los antiguos tomos de La Ley « de Jos actuales tomos de El Derecho. Debe aqui seftalarse también que, siempre que ya esté el tomo correspondiente publ cado, en el caso de los repertorios argentinos la cita de sentencias conviene hacerla a la pu blicacién del volumen, con paginas coneretas. y no del diario o separata que lo precedié. Si se quiere citar un punto conereto de Ja sentencia, puede referirse a la pagina del re pertorio donde se encuentra publicada. De todos modos, si los tuviera y fueran suficiente mente breves para realmente orientar al lector, es preferible remitir al considerando, para grafo o apartado de la sentencia, Esta opcién suele ser mejor ya que, como frecuentements el caso est publicado en distintos repertorios, el lector puede ir a buscar la referencia er ToULE 1, CLANGIARDO— EL SISTEMA DE CITAS EN ESCRITOS ACADEMGOS Y PROFESIONALES DE DERECHO 15 una publicacién distinta, Por eso. le es més indicativa la mencién de los considerandos, pa- rigrafos, capitulos © apartados, que la mera mencién de una pagina de un repertorio con- creto: C.S.1.N. "Camacho Acosta ¢/ Grafi Graf S.R.L.", LiL. 1997-£-652, consid. 6 2 12. NCiv. y Com. Fed., Sala 22, *Servini de Cubria", E.D. 148-646 (1992), consid, 11. Juzg. Nac. 1* Inst, Cont.-Adm. Fed. N° 6, "Bacre c/ Estado Nacional", E.D. 134-554 (1989), consid. 4. Cuando se debe citar una decisién “en concuzrencia” —o “por su voto”— 0 una disi- dencia, debe hacérselo de esta manera: C.S.1.N., *Ponzetti de Balbin ¢/ Editorial Atléntida S.A.", Fallos 306:1892 (1984), consid. 8 del voto de la mayoria, C.S.I.N., *“Servinl de Cubria", Fallos 315:1961 (1992), juez Boggiano, por su voto, consid. 10. C-S.1.N., “San Miguel", Fallos 216:607 (1950), juez Casares, en disidencia, consid. 10. 19, CRTAS DE NORMAS Las citas y referencias de normas legales no tienen demasiada dificultad. A diferencia de la bibliografia 0 de las sentencias, que requieren el dato exacto de su publicacién, afio, pagina, etc., los textos legales son més simples de cita En primer lugar, puede ser conveniente, pero no necesario, remitir al tomo de un re- pertorio o digesto legislativo donde la norma se haya publicado. Esa conveniencia dismi. nuye conforme crece el rango de la norma que se cita, pues en este caso su localizacién se va haciendo progresivamenté mas sencilla. Por esto, normalmente bastard con citar el ndimero de la ley 0 norma de que se trate y el rgano que la dicté o el rango normativo que ostenta, En el caso de las leyes puede ayudar al Fector consignar ef'aiio de la disposicién, en es- pecial si se trata de normas antiguas, donde puede.ser dificil situar el aio 0 atin ladécada de su sancién, En cuanto a los decretos, tras su mimero y una barra separatoria siempre debe seiialarse el afio en que fue dictado. Normalmente basta con escribir sélo los dos ilti- mos miimeros del aiio. En ocasiones puede ser conveniente agregar el nombre como la ley sea usualmente co- nocida, o una breve explicacién de la materia que trata. En el caso de normas con rango legislative nacional y provincial, en caso de denominarlas por el nombre que el uso les haya dado, conviene acompafiar el niimero exacto de la ley. Esto no se hace necesario, y hasta puede ser una falta de elegancia, cuando se trata de un eédigo, donde la mera men- cién del mismo es suficiente, sin que resulte necesario citar la ley que lo adopts y puso en vigencia. En cambio, s{ puede ser conveniente sefialar la ley si se trata de mencionar algin articulo concreto de ese cédigo que se ha visto agregado, modificado 0 derogado. 20, Mopo DE CITAR MATERIALES DOCTRINALES, LEGALES Y JURISPRUDENCIALES LOCALIZADOS EN INTERNET Sobre el modo de referirse a materiales publicados en Internet se ha escrito y hablado mucho en los iiltimos afios. De esta manera, han proliferado distintas guias para realizar “TouLen yClaNcIARD) —EL SISTEMA DEGIPAS EN ESCRITOS AcADEMICDS Y PROFESIONALES DE Deneck — 16 esta tarea. Aqui daremos sugerencias que nos han parecido précticas y concretas, y que cubren la mayor parte de las posibilidades de referencias juridicas. En primer lugar, hay que sefialar que muchos materiales en Internet no son otra cosa que una imagen en formato “pdf” o, menos frecuentemente, “jpg”, de algo publicado como libro, capitulo de libro o articulo de revista. En este caso, se puede citar directamente la publicacién en papel, con todos sus datos, incluyendo la pagina. Cuando no ocurre lo expuesto en el parrafo anterior, la solucién pasa por citar con la mayor cantidad de elementos coincidentes con el modo en que se lo haria si el texto a refe- rirse estuviera impreso en papel: autor personal o institucional y titulo, en el easo de arti- culos o libros digitales, tribunal, nombre del fallo y aiio, en el caso de sentencias, ete. Una vez que se ha realizado lo anterior, corresponde sefialar que el material se encuen- tra en Internet, citando la direccién URL completa, que indica el lugar exacto de publica cién del texto. A continuacién, debe ponerse la fecha en que se accedié a ese material en Internet. Esto tiltimo es importante, para que lector pueda conocer, a partir de la buena fe del autor, euindo algo estuvo disponible en la red, dado que muchas paginas modifican sus nombres, se dan de baja, cambian sus contenidos, ete. Por este motivo, conviene “bajar” a Ia propia computadora cualquier material de Internet que se vaya a citar, para guardar una copia adecuada, En consecuencia, algunos ejemplos de citas de materiales en Internet pueden ser los siguientes: House of Lords, Regina v. Bartle and the Commissioner of Police for the Metropolis and Oth- ‘ers (Appellants) Ex Parte ‘Pinochet (Respondent) and Regina v. Evans and Another and the Commissioner of Police for the Metropolis and Others (Appellants) Ex Parte Pinochet (Respon- dent) (On Appeal from a Divisional Court of the Queen's Bench Division), Judgments of 24 March 1999, Browne-Wilkinson, LJ., apartado sobre “Universal jurisdiction”, en http://www. publications. parliament.uk/pa/ld199899/ldjudgmit/j4990324/pino2.ntm (disponible el 12-VII- 2006). : S.C.B.S., "S. , M. d. C, Insania”, Causa Ac. 85627, del 09-11-2005, en htto://www,eldial.com nuevodial/050214-a,as0 (acceso el 10-11-2005). S.C.B.S., "R,, LiM., "NN Persona por nacer. Proteccién. Denuncia”, Causa Ac. 98.830, del 31- VII-2006, documento de Word en http://www.scha.aav.ar/home,asp (Noticias / Fallos y resolu- clones) (acceso el 1-VIII-2006). Ken Samp.es, “The Socratic Method” (1998), en Stand to Reason, http://www.strora/free studies/socratichtm, (disponible en internet el 15-1X-2005). FACULTADES DE DERECHO, Libro Blanco de Ja Licenciatura en Derecho - II Convocatoria de Ayu- das de la ANECA para ef Disefio de Planes de Estudios y Estudios y Titulos de Grado - Licenciado en Derecho, Vigo, junio de 2005, pp. 5-18; puede consultérsela en http://derecho. usal.es/libroblanco/05PartePrimera. paf (acceso el 14-VII!-2006). 21, LA CITA DE DOCUMENTOS LOCALIZADOS EN BASES DE DATOS Cuando se trata de citar documentos que estén en formato digital, disponibles en ba- ses de datos en CD-Rom 0 en Internet, corresponderd seguir el sistema de cada base, que usualmente es un sistema numérico: J. P. Shaver y D. W. Ouiver, "The Effect of Student Characteristic - Teaching Method Interac- tions on Learning to Think Critically", Paper Presented at the Annual meeting of the American Educational Research Association, Chicago (February 1968), en ERIC, Document # ED-229-284. ‘ToLLett YCLANCIAR HO — EL SISTEMA DE CITAS EW ESCRITOS ACADENICOS) POFESIONALES De Densco — 17 ‘Una vez dentro del trabajo, se deberd hacer referencia concreta a sus parigrafos, capi- tulos, subdivisiones, etc., con el fin de guiar al lector en la cita conereta que se realiza. Muchas bases de datos estadounidenses que contienen sentencias, articulos y trabajos a texto completo, sefialan los datos de la pagina inicial de la publicacién original en el vo- Jumen de papel, ¢ introducen en el texto digital corchetes con mimeros, que sefialan cada corte de pagina posterior del trabajo publicado. De este tipo es, por ejemplo, la base de da- tos de articulos y fallos LexisNexis. En cuanto a jurisprudencia, sigue este sistema, entre otras, la base de datos USSC+, que contiene las sentencias de la Corte Suprema de los Es- tados Unidos..En estos casos se cita directamente el articulo o la sentencia, con la referen- cia exacta a la pagina del volumen o la revista donde se contiene la afirmacién que quiere sefialarse, que esti seiialada por esos corchetes, haciendo abstraccién de haberla obtenido en formato digital. Consideremos, entonces, cémo referirse a ideas contenidas el siguiente parrafo, obteni- do en la base de datos estadounidense LexisNexis: *[#288] IIT. LEGAL REGULATION OF THE MARITAL RELATIONSHIP A. Historical Regulation of the Marital Relationship ‘At the turn of the century until the passage of the Married Women's Emancipation legislation during the period of 1916 to 1928, 266 a wife fell under the authority of her husband and was required to obtain his authorization, concurrence or consent to certain civil acts. n267 She was deemed to suffer a civil incapacity coextensive with her need for her husband's authorization. Historically, the incapacity of the married woman had little to do with age or maturity of juda- ‘ment; it wes based on the notion that "the husband was the head of the family n268 and there- fore had an interest in supervising his wife's activities." 269 Even after the passage of the ‘emancipation legislation, wives who were under eighteen years of age or interdicted remained Under their husband's authority until 1974. n270 Even though the husband's marital power and the correlative incapacity of the wife existed for patrimonial reasons rather than personal rea- sons, both the power and the incapacity were treated as matters of public order rather than pri- vate order. The patrimonial reasons consisted of assuring that the husband was indeed the “head.and master” of the community. and of protecting third. parties from confusion n271 as to his authority during the existence of the community regime. n272 Hence, the incapacity of the wife and resulting marital power of the husband were treated "as a part of the law of marriage Proper rather than as [*289] part of the law of matrimonial regimes,” n273 more as a personal ‘effect rather than as a patrimonial effect of marriage”. Cualquier idea de ese parrafo, anterior al ntimero 289, deberé ser citada del siguiente modo: Cfr. Katherine Spas, “The Last One Hundred Years: The Incredible Retreat of Law from the Regulation of Marriage”, Louisiana Law Review 63 (2003) 243, 288. En el parrafo transcripto, cada mimero antecedido por la letra “n” hace referencia a una nota a pie de pagina, Si se tratara, por ejemplo, de una sentencia de la Corte Suprema, podria querer citarse algo del siguiente parrafo: “L417 U.S. 427] The power of Congress to create and, of course, to continue the bank was the subject of the preceding part of this opinion, and is no longer to be considered as question- able. ‘That the power of taxing it by the States may be exercised so as to destroy It is too obvious to be denied. But taxation is said to be an absolute power which acknowledges no other limits than those expressly prescribed in the Constitution, and, like sovereign power of every other de- ‘Tout ¥ Clanctakno Eh, SISTEaa DEGITAS EN ESERETOS ACADEIICOS Y PROFESIONALES DE Deneeno — 18, scription, is intrusted to the discretion of those who use it. But the very terms of this argument ‘admit that the sovereignty of the State, in the article of taxation itself, is subordinate to, and may be controlled by, the Constitution of the United States. How far it has been controlied by that instrument must be a question of construction. In making this construction, no principle, not deciared, can be admissible which would defeat the legitimate operations of a supreme Govern- ‘ment. Tt is of the very essence of supremacy to remove all obstacies to its action within its own sphere, and so to modify every power vested in subordinate governments as to exempt its own operations from their own influence. This effect need not be stated in terms. It Is so involved in the declaration of supremacy, so necessarily Implied in it, that the expression of it could not make it more certain. We must, therefore, keep it in view while construing the Constitution. ‘The argument on the part of the State of Maryland is not that the States may directly resist a law of Congress, but that they may exercise their [17 U.S. 428] acknowledged powers upon It, ‘and that the Constitution leaves them this right, In the confidence that they will not abuse it. Ante esto, se podria proceder del siguiente modo: Sobre la esencia de la supremacia, como el poder de remover todos Ios obstéculos a su ac- clén dentro de su propia esfera y de modificar todo poder de que se encuehre investido un 9o- bierno subordinado que lo exceptie de su influencia, ver’ McCulloch v. Maryland, 17 U.S. (4 Wheat.) 316, 427 (1819). Podrfa ocurrir que en la base de datos se consignen los datos de publicacién original de un articulo o sentencia, pero no se traigan luego en corchetes, 0 de otro modo, los cortes de pagina del texto publicado en papel. En estos casos conviene citar los datos que se poseent autor, titulo, tomo, pagina inicial, y hacer luego la referencia al capitulo y apartado, del siguiente mod Ver Augusto M. MoRELLO, “Test de constitucionalidad para acceder a la tutela judicial preven- tiva en resguardo del derecho 2 la privacidad, frente a la libertad de prensa’, L.L. 2002-A-754, ‘apartado IIL. 22. CONSIDERACIONES GENERALES SOBRE EL TIPO DE LETRA No se debe utilizar nunca negritas o palabras resaltadas en el texto del trabajo. Sélo son admisibles en titulos y epigrafes. Este criterio se inspira en la idea de que el destinata- rio de un trabajo juridico es alguien que conoce el Derecho, y por lo tanto no necesita que el autor le seiiale de un modo tan impositivo lo que es importante. Dicho de otro modo, la utilizacién de resaltados puede ser vista como una subestimacién del lector. Ademés, resta elegancia al texto. Lo dicho corre también para las palabras subrayadas si se trata de li- bros o artfculos; podrian ser aceptables, en cambio, en.escritos judiciales. La cursiva debe emplearse cuando se hacen transoripeiones de otro idioma. En general, es preferible traducir el texto y no incluir el original; si se lo incluye, agregar siempre la versién traducida, Puede también usarse cursivas para remarear una palabra o una idea. En este caso, conviene ser sobrio, y usarlo sélo cuando sea necesario, teniendo presente, mutatis mutan- dis, lo dicho en el primer parrafo de este epigrafe. 23. COMILLAS ¥ USO DE PARAFRASIS Las citas textuales deben ir siempre “entre comillas” y no en eursivas. En todos los ca- sos en que no se utilice comillas al referir la doctrina de un autor 0 sentencia, debe usarse ‘Toten V ClaNclanbo—ELSISTEaAa D& CFFAS EN ESCIITUS AGAnfaNtcOS Y PROFESIONALES DE Doxecwn — 20 modo preciso —con exactitud— la pagina, el considerando o el pardgrafo, segiin sean los casos, a los cuales se remite. Puede ocurrir, no obstante lo dicho en el parrafo anterior, que se estén haciendo remi- siones a una fuente completa —libro, articulo, sentencia—, en general, cuando realmente Ja idea o doctrina a que se alude esta tematizada en toda ella. En este caso habré que po- ner passim, que, en latin, significa que la idea a que se hace relacién se encuentra temati- zada, tratada o desperdigada a lo largo de todo el trabajo: Para una visién contraria ala que se sostiene en el texto puede verse Berharé ScrLinx, Abwagung im Verfessungsrecht, Duncker & Humblot, Berlin, 1976; y Reinhold Hess, Grun- ‘drechtskonkurrenzen. Zugleich ein Beltrag zur Normstruktur der freiheitsrechte, Duncker & Humblot, Bertin, 2000, passim. Finalmente, cuando en el texto doctrinario, legal 0 jurisprudencial se cita textualmen- te —cosa que, en principio, es mejor evitar, por resultar fatigosa y poco elegante—la nota al pie debe comenzarse poniendo directamente el nombre y apellido del autor con los de- més datos, el ntimero de norma, o los datos de Ja sentencia, sin “ofr.”, “véase”, o palabras de este estilo, y debe agregarse ademas la pagina exacta de la cita, 25. ACLARACIONES SOBRE EL USO DE “IDEM” E“IBID.” En los casos en que se cita el mismo autor y la misma obra de la nota inmediatamente anterior, o de la misma sentencia, o del mismo cuerpo legal, se debe poner sélo ibid., que es la abreviatura de ibidem: del mismo, o de lo mismo, en el mismo lugar, con el agregado de la pagina distinta o del articulo normative cuyo niimero cambia. También puede usarse ibid. si se trata del mismo autor y la misma obra, o de la misma sentencia, en la misma pa- gina. Tratindose del mismo cuerpo normative, puede usirselo si la nota siguiente refiere al mismo articulo. Si se trata del mismo autor de la referencia anterior, pero de distinta obra, © del mismo tribunal, pero distinto fallo, se deberia poner idem, seguido del nuevo titulo, sus datos y su pagina de referencia, Es también correcto, siempre que se guarde la coherencia en el uso, utilizar idem para “mismo autor y misma obra de la referencia anterior”, o “mismo tribunal y sentencia de la referencia anterior”, pero con una pigina distinta, que se debe consignar, e ibidem sélo pa- ra “mismo autor, mismo trabajo y misma pagina de la nota anterior” o “mismo tribunal, sentencia y pagina de la nota anterior”. Ahora bien, a diferencia de las referencias bibliogréficas, puede usarse idem o ibid., del modo ya expuesto, si los datos de la sentencia figuran en la nota inniediatamente anterior. Si los datos de tribunal, nombre y publicacién de la sentencia figuran en momentos ante- riores del trabajo, pero no en la nota inmediatamente anterior, convendré reiterarlos, cosa que no ocurte con relacién a la cita de libros y artfculos ya citados. Si se utiliza la palabra completa, ibidem, no se debe poner acento, que no leva el Latin Debe sefialarse, no obstante, que actualmente tanto idem como ibidem —admitiendo su abreviatura ibfd— Son palabra reconocidas como castellanas por el Diccionario de la Real Academia, Si se les va a poner acento, no debe ponérselas en cursiva, pues se tratard de castellano, no de latin. De todos modos, atin cuando actualmente estan reconocidas, el amplio uso que de las mismas se hace en la literatura cientifica de todo el mundo, siempre en cursivas. siempre en latin, hace recomendable seguir esa tradicién, escribiéndolas, por tanto, sin acento y en cursivas, ya que se trata de un idioma extranjero.. ‘TOLER 9 ClANCIAgM —IBL SISTEMA DE CEPAS EN USCRITHS AEADEMNEDSY PHOFHSIONALES DE Denecuo 21 En cambio efr., si bien es una expresi6n latina, por estipulacién de la costumbre y el uso comin no se pone en cursiva. 26. FLUIDEZ DEL TEXTO Y REFERENCIAS EN NOTAS AL PIE A la hora de insertar una referencia conviene tener en cuenta que interesa el problema real, las cosas que se estén exponiendo, y s6lo en funcién de eso lo que piensan distintos autores acerca del tema. Muchas veces esto es perdido de vista, dando lugar a eseritos en- gorrosos, que abundan en demasia sobre opiniones y comentarios, y aclaran poco sobre cémo es la realidad que supuestamente el trabajo estaba lamado a dilucidar. Por esto, mas vale, siguiendo aquello del Derecho minero, que permite seguir el filén “veta en mano, al plantearse un escrito debe seguirse en todo momento los vericuetos del problema, Hevando directa y agilmente al lector que sigue el texto, a la vez que con pro- fundidad, por los aspectos que es preciso abordar. Los autores, sentencias y demis referen- cias que abonan los temas deben ir en las citas al pie, no en el texto. De este modo, el texto fluird sin obstrucciones, a la vez que el trabajo tendré altura cientifica y un conveniente aparato eritico. Por la mista raz6n, no conviene en el texto introducir practicamente autores. Sélo al- gunos pocos merecen ser incluidos alli. Estamos hablando de pensadores como Aristételes, Locke o Montesquieu, o juristas como Savigny, Ripert o Carrara 0, més cereanos a noso- tros, hombres de Derecho de la talla de Salvat; Soler 0 Couture. Todo el resto, esto es, casi todos los autores, deben ir a las notas. Més aun, en la gran mayoria de los casos, también los elasieos irdn referidos sélo en nota, y en el texto sélo hab: nalmente se pens6 que...”, 0 “muchos han entendido que...”. referencias como “tradicio- Algo similar ocurre con Ja jurisprudencia, y aun con Ja legislacién, Pueden insertarse sus referencias en el texto, pero sélo cuando sea necesario, sin estar cortando el discurso con alusiones que pueden ir directamente a las notas. 27. CKTAS EXTENSAS DE AUTORES, LEYES 0 SENTENCIAS Cuando se hace conveniente una cita textual de un autor, de una ley 0 de una senten- cia y, ademés, la misma es extensa —miis de dos o tres renglones—, ¢s conveniente no in troducirlas directamente en el texto, sino que debe darse a dichas referencias un trata- miento distinto. De esta manera, se evita que la lectura se vuelva farragosa, a la vez que se enaltece el texto que se va a referir y se facilita al lector la distinci6n entre lo que dice el autor del trabajo y lo que cita Para lo expuesto © suele poner todo el texto con sangria a la izquierda, utilizar un menor tipo de letra, y escribir con un menor interlineado. El siguiente es un ejemplo de es- te tratamiento diferenciado de un fallo: “{€]I Tribunal acepta que el margen de apreciacién disponible al Estado demandade para de- terminar la necesidad social imperiosa en el presente caso, y pare elegir los medios para conse- Suir el propésito legitimo de proteger la seguridad nacional, es amplio" Se expone a continuacién la cita extensa de un autor: E.CH.R,, Leander v. Sweden, (1987) Series A n° 116, § 59, ‘Touner ¥ CLANCIALDO — BL SISTEMA DECITAS EN RSCIETOS ACADENICHS Y MHUFESIONALES DE De "Quizé, no digamos la decadencia, sino la perturbacién de nuestros estudios, derivada de es- ta separacién tan poco natural entre el proceso y la justicia a la que el mismo debe seguir, ha comenzado el dia en que se ha formulado la teoria del derecho abstracto de accionar, desde e! momento en que se ha comenzado a ensefiar, y 8 construir sobre ello bellisimas teorias, que la ‘accién no sirve par dar la razén a quien la tiene, que la accién no es el derecho, correspondien- te a quien tiene razon, de obtener Justicia, sino que es simplemente el derecho a obtener una sentencle cualquiera que sea, un derecho vacio que queda igualmente satisfecho aun cuando el Suez no le dé la razén a quien la tiene y la dé a quien no la tiene. (...) Si la ciencia juridice no sirviese (...) para sugerir los métodos para conseguir que el derecho, de abstracto se transforme en realidad concreta, y @ distribulr, por decirio asi, el pan de la just cia entre los hombres, la ciencia juridica no serviria para nada... (...) {E}! proceso debe servir para conseguir que la sentencia sea justa, o al menos para conseguir que la sentencia sea me- ‘hos injusta, o que la sentencia injusta sea cada vez més rare. Esta es la finalidad sobre la que se deben orientar nuestros estudios; y no puede decirse que para esta finalidad sirvan siempre los virtuosismos conceptuales” *, Por diltimo, como se dijo, se puede esto utilizar para la transeripcién de normas juridi- cas, como aquf ocurre con el nuevo art. 9 del Code Civil francés, de acuerdo a la redaccién que le dio la ley del 7 de julio de 1970: “Todos tienen derecho al respeto de su vida privada. Los jueces pueden, sin perjuicio de la Feparacién del dafio sufrido, prescribir todas las medidas, tales como secuestro, decomiso y otras, destinadas a Impedir o hacer cesar un atentado a la intimidad de ta vida privada; estas medidas pueden, en caso de urgencia, ser ordenadas en rérérs". E] mismo criterio aqui expuesto para las citas extensas en el texto, conviene que sea seguido en las notas al pie de pagina. De esta manera, si en una nota se debe introducir una frase extensa de un autor, de una senteneia, 0 de una norma juridica,’es més elegante y amable para el lector que, dentro de la misma nota, se realice ese punto y aparte, con sangria a la izquierda, etc., que ya se ha expnesto. No es menester en las notas, en cambio, utilizar un mimero de letra menor al del propio formato de nota al pie. 28. ABREVIATURAS Conviene sélo usar abreviaturas cuando el trabajo es extenso y se va a usar muchas veces algunas referencias de revistas o cuerpos normativos. Si no es asf, en articulos o tra- bajos pricticos, 0 en referencias ocasionales, es preferible no abreviar los datos, porque confunden y complican al lector. La excepeién son los repertorios de jurisprudencia, cuyas abreviaturas son de uso comiin, lo cual las eonvierte en practicamente obligatorias. Merece la pena sefialar aqui que en el Derecho anglosajén se usan innumerables abre- viaturas, muchas veces de repertorios antiquisimos. Muchas veces es relativamente senci- lo darse cuenta de a qué se refiere una abreviatura. Otras veces es imposible hacerlo sin la consulta de una guia altamente especializada, por lo cual existen numerosfsimos libros de referencia, algunos de los cuales se consignan en el epigrafe siguiente. Piero CaLAMANDREI, “Proceso y justicia”, en Derecho Procesa/ Civil, rad. de Santiago Sentis Me- lendo, €.1.£.8., Buenos Aires, 1962, IIt, 201 y ss., la clta en 209-211. ‘ToLLEHt CLANCIARDO — Bu stsTeMA DE CITAS EN EscRITOS AcADENICOS Y PRORESIONALES DE Deneene — 23 29, ALGUNAS SUGERENCIAS DE LIBROS Y REFERENCIAS SOBRE LA INVESTIGACION CIENTIFICA ¥ EL. SISTEMA DE CITAS, CON UN COMENTARIO SOBRE SU UTILIDAD El sistema de citas y notas que se ha expuesto anteriormente recoge lo que es mas 0 menos usual en Ia bibliografia europea, a lo cual se Je han hecho algunas modificaciones que se han juzgado convenientes en aras de su funcionalidad. Para redactarlo hemos ape- lado al propio uso que nosotros hacemos del sistema de citas. No hemos seguido, por tanto, autores o bibliografia para elaborar estas recomendaciones. No obstante lo sefialado en el pérrafo anterior, se ha considerado conveniente ofrecer una lista breve de libros y trabajos relativos a la metodologia de la investigacién cientifica, en particular relativos a la investigacién juridica. Se lo ha hecho con la intencién de que el lector interesado en estas teméticas pueda realizar nuevas indagaciones sobre los sistemas de citas-y de notas 0, més allé de los mismos, pueda inquirir sobre otros aspectos relativos a la investigacién y la eseritura de trabajos juridicos. ALBAREDA, José Maria, Consideraciones sobre la investigacién cientifica, Consejo Superior de Inves- tigaciones Cientificas, Madrid, 1951. [Se trata de un trabajo dificil de conseguir, que mantiene vigencia a pesar del tiempo que ha pasado desde su elaboracién. Contiene consejos de fondo y de forma}. ABA LECAL TECHNOLOGY RESOURCE CENTER, “Helping Lawyers Solve the Technology Puzzle — Universal Citation”, en hitpi/www.ahanet org/techMtre/research/cttatio/home html (acceso el 14 ‘VIII-2006). [Sitio de Internet de la American Bar Association, con diversos links y referencias a emo citar materia les juridicos disponibles en Internet y en distintas bases de datos electrénicas) ARMSTRONG, J. D. S. (Joanne D. S.) y Christopher A. KNOTT, Where the Law Is: An Introduction to Advanced Legal Research, West, St. Paul, 2004. {El libro se propone guiar al lector en la biaqueda de informacién y en Ia cita de lo hallado con vistas @ Ininvestigacién ea Derecho}, ASSOCIATION OF LEGAL WRITING DIRECTORS (corporate author) — Darby DICKERSON (ed.). ALWD Citation Manual: A Professional System of Citation, 34 ed., Aspen Publishers, New York, 2005, [Con mas de 600 paginas en la reimpresién de 2006, se trata del actual competidor del famoso Bluchook (ver més abajo) con relacién al complejo sistema de citas juridicas estadounidenses, ya que es claro, tractive y ficil de usar. Contiene también el modo de citar materiales de Derecho comparado. Ha sido aceptado como regia para el modo de citar por los profesores de mas de noventa Facultades de Derecho on Es jados Unidos, por muchas revistas juri 1 y por distintos tribunales, Su primera edicién es del '© 2000, Ha sido escrito, bajo la direccién del Prof. Dickerson, de la Stetson University, por la Asocia- cidn que nuclea a los profesores que enseitan Legal FFriting en ‘escuelas de Derecho, Viene con un Teacher's Manual y varios CD con PowerPoints y otros materiales} BAHRYCH, Lymn y Marjorie Dick ROMBAUER, Legal Writing in a Nutshell, 34 ed., West, St. Paul, 2003, [Es un interesante trabajo, que aleanzé ya tres ediciones, que pretende asisti a los abogados como “es critores profesionales”. Cuenta con una gufa para profesores) BRADNEY, A., FISHER, V., MASSON, J., NEAL, A., y NEWELL, D.. How to Study Law, Sweet & Maxwell, Londres, 1986. [edicado a los modos de localizar y citar las fueutes del Derecho inglés, uo el estadounidense, Ti versas reediciones, hasta Ia 5* edicign revisada de 2005] edie ‘Toren v Clancianito—B SISTEMA DECHTAS EN ESCIITOS ALADENICOS ¥ PROFESIONALES DE DE CASTAN TOBENAS, José, “Reflexiones sobre el Derecho comparado y el método comparativo”, Re- vista General de Legislacién y Jurisprudencia 203 (1957) 237-285 y 533-585. [El Derecho comparado es, indudablemente, una herramienta relevante para una buena investigacin jurfdica, Este articulo es un trabajo antiguo, pero no pasado de moda. Allf el viejo Castén, uno de los {grandes civilistas espafioles del siglo que se fue, realiza un anélisis completo del interés, funciones, ori- genes, desarrollo, ineas doctrinales seguidas, elementos esenciales, etc, del Derecbo comparado y de lat distintas posiblidades metodol6gicas para reslizarlo, criticando eficazmente aquellas que no son ade- euadas, por no conducir con éxito hacia el fin que propio de este modo de hacer Derecho. Contiene par tes mas eruditas, y otras més pritcticas. Son de especial interés las pp. 237-240, 277-282, 533549 y 55% 585). CLARY, Bradley G. y Pamela LYSAGHT, Successful Legal Analysis and Writing: The Fundamentals, ‘West, St. Paul, 2003. [Et trabajo tiene por finalidad guiar a estudiantes de primer afio de Derecho en el anlisis y la escritura juridicas. Cuenta con un capitulo dedicado a las citas y notas —pp. 91-130—] COHEN, Morris L. y Kent. C. OLSON, Legal Research in a Nutshell, 8 ed., West, St. Paul, 2000 [Se trata de un trabajo de metodologia de la investigacién, didéctico y completo, con amplias referencias a los modos de rastrear fuentes en los Estados Unidos). D’ORS, Alvaro, “Las publicaciones cientificas”, Revista Chilena de Derecho 18 (1991-3) 451-460. — Nuevos papeles del oficio universitario, Rialp, Madrid, 1976. — Papeles del oficio universitario, Rialp, Madrid, 1961. [EI primero de los trabajos se refiere a los modos de anotar y citar, entre otros temas. Los dos restantes son colecciones de distintos articulos referidos a la universidad, con consideraciones interesantes y originales sobre el trabajo intelectual]. Eo, Umberto, Cémo se hace una tesis. Técnicas y procedimientos de estudio, investigacién y escritura, Gedisa, Barcelona, 1982. [Libro muy popular, con diversas reimpresiones, en el que se dan consejos acerca de la elaboracién de luna tesina de licenciatura, vilidos para cualquier disciplina cientifics. Es también de provecho para quien realiza una tesis doctoral, sempre que se tenga presente que est4 escrito con Ia finalidad de ayu- dar alas monografias obligatorias en Italia para terminar las earreras de grado, y de que muchas suge rencias estan pensadas antes de le popularizacién de los procesadores de texto informéticos} GUITTON, Jean, Bl trabajo intelectual. Consejos a los que estudian y a los que escriben, trad. de F. J. Fuentes Malvar, 2 ed., Rialp, Madrid, 1981. TEI vitulo del libro define su contenido. El trabajo esté repleto de sugerencis que Hevan al lector a com frontar su propia metodologia de trabajo con la que el autor propone. Sin dudas, uo trabajo de gran calidad} HARVARD Law REVIEW ASSOCIATION AND OTHERS, The Bluebook: A Uniform System of Citation, 18% ed., Harvard Law Review Association, Cambridge, Mass, 2005. [Se trata de una publicacién de la Harvard Law Review Association en conjunto con Ie Columbia Law Review, la University of Pennsylvania Law Review y The Yale Law Journal. Quicnes editan esas - vistas, y este guia de citas, son estudiantes de Derecho, aunque para actualizar el Bluebook contratan bibliotecarios profesionales. Su nombre alude a su ya clisico color azul de las tapas. Es de alta comple- jidad, conteniendo més de cuatro centenares de péginas sobre cmo citar distintos materiales anglos2- jones y de todo el mundo, Es seguido desde 1926, su primera publicacién, por Ja mayoria de las revistas juridicas estadounidenses y la Corte Suprema de ese pais ha preseripto que todo escrito que se presente dante sus estrados debe citar de acuerdo a esa guia. Se ha hecho tan popular que el verbo blusbooking alude a la accién de citar de euerdo a sus re las. HERRERA, wrique, Practica metodolégica de la investigacién juridica, Astrea, Buenos Aires, 1998, ToLLER Y CIANCIAKDO—EL SISTEMA DE CITAS EN ESCRITOS ACADEMICUS} PHOFESIONALES DK DerecHo — 25 [Libro en el que se tocan las diversds etapas de uns investigacién juridica: planificacién, relevamiento y clasificacién del material, utiizacién de los recursos imforméticos, etc. Son especialmente relevantes pa rael tema de este articulo las pp. 246-257). JACOBSTEIN, J. Myron, MERSKY, Roy M. y Donald J. DUNN, Fundamentals of Legal Research, 1 ed., Foundation Press, New York, 1998. {El objetivo de este importante trabajo, de més de othocientas paginas, es brindar herramientas para la investigacion necesaria para “fundamentar las decsiones jurid 2". Cuenta con isformaci6n amplia acerca del rastreo de fuentes, su tratamiento, ete. MARTIN, Peter W., “Introduction to Basic Legal Citation (LIT 2006 ed.)", en htepu/www law. cornell.edulcitation, (disponible el 12-VITI-2006). [Disponible fi tadounidense, préctica y simple, basada en el Bluebook}. mente en Internet, es una guia sencilla sobre la metodologia de citas en el Derecho es NUBIOLA, Jaime, El taller de la filosofta. Una introduccién a la escritura floséfica, 4* ed., Eunsa, Pamplona, 2006. {Si bien esté escrito penss .do en los autores de Filosofia, este libro contiene diversos consejos de gran utilidad, perfectamente aplicables qui ‘scribe sobre Derecho]. PRINCE, Mary Miles, y Doris M. BIEBER, Prince's Bieber Dictionary of Legal Citations: A Reference Guide for Auorneys, Legal Secretaries, Paralegals, and Law Students, 6% ed., William 8. Hein & Co., Buffalo, N.Y., 2001. [Obra ct cho estadual norteamericano, Designado como complemento del Bluebeok, con euya 11” edicién, de la ual la Profesora Prince fue Coordinadora de Edicidn, se encuentra encuadernade en conjunto. Muchas cuatrocientas paginas. Muy usado, con muchos ejemplos de modos de citar Dere~ referencias al modo de citar fuentes electrSnicas y no impresas]. SANDLER, Héctor Rail, Cémo hacer una monografta en derecho, La Ley, Buenos Aires, 2003, [EI libro obtuvo el primer premio en un concurso organizado por la Universidad de Buenos Aires con el lema *;Cémo elaborar una monografia en derecho?”. Resultan de especial interés para este trabajo las pp. 37-60 y 105-113} SQUIRES, Lynn B. y Marjorie Dick ROMBAUER, Legut Writing in-arWutshett, West, St. Paul, 1982. [En este trabajo se procura guiar a los abogados en el oficio de escribir. Se concentra, sabre todo, en Is sintaxis} DUNKEL, Victor, Legal Practice Handbook: Legal Research Law-finding and Problen- solving, Black- stone Press Ltd., London, 1992. [Se trata de un trabajo de ciento cincuenta paginas, con amplias referencias a los modos de buscar y tar informacién en el Derecho anglosaj6n)} UNIVERSITY OF CHICAGO LAW REVIEW & UNIVERSITY OF CHICAGO LEGAL FORUM (eds.), The University of Chicago Manual of Legal Citation, Lawyers! Cooperative Publishing Co. ~ Ban- croft-Whitney Co.~ Mead Data Central Inc.,s/l (,Rochester, N.Y.?), 1989. [sta guia fue publicada por primera ver en 1986 en la Facultad de Derecho de la Universidad de Chi cago, luego de que uno de sus principales profesores, el jues Richard Posner, crticara el Bluebook en su ensayo “Goodbye to the Bluebook". Es llamado también el Maroon Book (Libro Marrén). Ha sido uno de los principales esfuersos por simplificar el proceso de cita del Derecho norteamericano (tiene slo 63 Pp) y por destronar al Bluebook de Harvard, Columbia, Pennsylvania y Yale. No logré demasiada aceptacién, y ha quedado reducido al dmbito de la University of Chicago Law School} Warr, Robert, Concise Legal Research, 3+ ed., The Federation Press, Leichhardt, NSW, 1997. (El libro ya con varias ediciones expone el modo de buscar informacién y citar o ballad en Nueva Ze- Janda, Canad. India. Estados Unidos v.con menos detalles, en la Unin Europes. \ Toubes y ClaNciakin —EL SISTEMA DE TAS EN ESCRITOS ACADEMICOSY PHOFESIONALES De Denrcnw — 26 WITKER, Jorge, Cémo elaborar una tesis en Derecho. Pautas metodolégicas y téenicas para el estu diante o investigador del Derecho, Civitas, Madrid, 1991 (reimpr. de la edicién de 1986). [Trabajo de ciento cincuenta paginas, inicialmente publicado en México, donde para graduarse los es tudiantes de Abogacia deben escribir una monografia final. Fue reeditado en Madrid, tras ser adaptado por Germén Porras Olalla a [a legislacidn espaiiola). ZWEIGERT, Konrad, y Hein KO12, Introduction to Comparative Law, 34 ed., trad, inglesa de Tony ‘Weir, Clarendon Press, Oxford, 1998. [Excelente obra. El primero de los autores fue, hast casi el final desu vida, el Director del Max Planck Institute for Foreing and International Private Law, quisée Ia institucién dedicada a la investigacin | ‘del Derecho privado comparado més importante del mundo. Kote, por.su parte, es quien ba sucedido, hasta el presente, a Zweigert en la direccién del Instituto. Las pp. 1-31 del libro tratan sobre el concep: to, las fanciones y los fines del Derecho comparado. Estas, junto a las pp. 32-47, relativas al método pa ra realizar Derecho comparado, son especialmente interesantes y representan el nicleo metodoldgico de libro. Estos autores proponen el método posiblemente més riguroso y fructifero —a la ver que arduo— tes “fami de realizar andlisis juridicot comparativos. Posteriormente se exponen largamente las dies lias” del Derecho en el mundo y se tratan, de acuerdo a Ja metodologia que proponen, diversas iustitu- ciones de Derecho privado},

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