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    REVOLUCION FRANCESA ™ 2 Rewudion Francess EL DESPOTISMO DE LA LIBERTAD Girondinos y montafeses (1792-93) La rvalidad entre la Gironda y la Montata, pese @ 50 comin pertenencia burguese, reviste, cuencia de las opciones politieas, un invieguble verse, ter de clese. Le Gironda, pontavor de la. burguesis egociante, pretende defender Is propiedad ¥ le ike jad econdmica contra las limitaciones que reslameben los sans-culottes: reglementacion, tesaciGn, requisa, curso forgoso del papel moneda. Los gironcinos, im buldos del sentimiento de las jerarauies sociale, sem ‘lan un rechazo instinvo ante el pueblo: reservaben Bera su clase el monapalio gubemamentai. Estigmath Zando 8 jacobinos y montaneses en un Liamamiento 8 todos ios republicanos de Francis, Brissot eset fn octubre de 1782: que ties desorganizadores sog aquellos que quieren rivelaro todo: ropiedades, bie ‘estar, precio de los productos, aiversos servicios a prestar a le sociedado. Robespierre habla contested or adelantsdo en el primer numero de les Lettres @ 465 commettants {Cartes a sus comitentes), el 30 de Septiembre 1792, denunciando a los falsas patriotes gue s6lo quieren constituir la Repabiica pare sf mis: ‘mos, que slo pretenden gobernar en benefcio de los Fitosy. Los montaheses, y sobre todo los acobinos, ce esforzaron por dara la realised nacional un comtenide Positive capaz de atraer a las masss populares, Ssint. lust, en su discurso sobre las subsistence, ei 29 co noviembre de 1782, subrayé la necesided ade sqear pueblo de un estado de incertidumore y de miscris ue le corrompen; tpodéis dar en un momento une Dattia al pueblo francés: deteniando los estragos Je s rovibice buguess 0 cemocsaio populr? 76 le Inflacién, garantizéndole su subsistencie, uniendo ‘estrechamente su felicidad y su liertady. Robespie, se todavia fue més claro, el 2 de diciembre de 1730, su discurso sobre los problemas frumentarios en Eure-et-Lnir De todos los derechos, l primero es el de exit. Por 'o tana, Is primers ley soc es aquela gue gursmie’y ‘odes los miembros del sasadad lx mecios pare orcs ‘odes las dongs eg:in suborcnacas a votre Las necesidades de Ia guerra y su sentida nacio- nal llevaron @ los montafeses 2 acercarse a los tone. evlottes: le situacién de la Repdbiica exigfa medides extreordinaries que solamente se coneebian con el ‘apoyo popular: se trataba une vex més Ge ganarlo a ‘través de una nueve orientacién social, El proceso y la muerte dal rey volvieron inexpiable Sonflieto entre a Gironds y Ia’ Montaha, al preciser {os periles de le nueva realidad politica, Saint lost fue e! primero en plantear el problema del luis Ge Luis XVI dasce la éptica nacional: ¢ueremas la rept ‘ica, la independencia, 1 unidad... Lis KVI debe sor juzgedo como un enemigo extranjeron (13 de noviern. bre oe 1782), Le ejecucién del rey, el 21 de enero de 1783, al asester un golpe decisivo al sentimients ‘onératico, acebé de lberar la idea de nacion de so forma real, Hizo imposible todo compromiso entre los ‘epleidas y los tapelantess,paridarios del liamamien {0 al pueblo pera salvar @ Luis XVI propuesto por Ver, ginaud. Empehindose.en salvar al rey, os girondines espereban circunscribir el confleto ton Europa. Se inclinaban asi, consciente o inconscientemente, hacia al compromiso con la aristocracia: actitud ingore, euente Dor parte de unos hombres que, en noviembre Ge 1792, habian preconizado la guerré de propegen, 98. Ala nacidn,identifcada con la epablice y basada st 16 Le Revolucion Francesa fan la solidaridad reforzeds entre le burguesia monta Fess y el pusblo sens-culotte, la sjecucidn del rey no le dejé més salida que la victoria. Las derrotas de marzo de 1793, ta insurreccién de la Vendée y el peligro que produjo sellaron el destino do la Gironda. Esta ge negé hasta el final 2 cualquier coneesién. Vergniaud proclamabe aun el 13 da marzo dde 1793 que tla igualdad para el hombre social no es sélo la de derechosy; esto er@ mantener la primacia dé Te propiedad y de le riqueza. Las jornadas del 31 de ‘mayo al 2-de junio de 1783, en las que las secciones parislensas eliminaron a las girondinos de la Conven fién, presentan un doble aspecto nacional y socal dJaurbs ha negado su cardcter de clase: los girondinos habrian perdido aseneliamente (por su) espiriu oe partido reéucido @ espiritu de faccion y de cemarilay Eso es cierto si nos limitamas a considerar el aspecto parlamentario de esas jomadas; pero el papel de la Sans-culotterie pafisiense y la ellminacion de la ale burguesia subreyan su contenido social. Esas jomna~ as, que fueron un sobresalto revolucienario, consti- tuyen también un reflelo nacional, une reaccion defen ‘Say punitive contra una nueva manifestacién del ‘complot arstocratico, £1 desarrollo del movimiento Seccionerio de los departamentos habia aclarado de antemano este aspecto: bajo la méscara de Is oposi= Edn girondina, en Burdeos, en Marsella, més aun en Lyon, la contrarrevolucion arstocrética volvie a pasar aig ofensiva, £1 federaliamo, extension de la guerra Civil uya iniciativa habie sido tomade desde mayo de $798 por el movimiento seecionario, prasenta el mise imo Goble aspeeto, Su contenido social es todavie més fuerte que su tendencia poltica. La persistencia de os particularismos regionales lo exalica en parte, pero lo Seplica més todavie Ia soldarided de los intereses Ge clase la insurreccion federaliste egrupé @ los partida- figs del Antiguo Regimen, las feullants que seguian e ePepiblce buruess 0 democraie poner? 7 apegados al sistema censatario, a le burguesia preo- ccupads por la propiedad y la libertad de benefcios Por adhesién a los principiog del 1789 y por su preo- cupacién por la independencia nacional, los girond nos rechazaron Ia alianza vendeana ¥ la llamada al lextranjero: pero, por su desconfianza en las masas Populares, por su repugnancia a integrals en ung racion ampliada, no dejaron de hacer el juego de la aristoeracia y 8 ia coalicin. Montaheses, jacobinos y wsins-culottesy (1793-34) Apenas sliminads la Gironda, la Convancién,dii- ide shora por ios montaheses, se vio entre dos fue- 908. Mientras le converrevalucién veciia un nuevo iimpulso ce la revuelts federalista, el movimiento Popular, exasperado por la carestia y Ie sca ‘aumentaba su presién. La organizacién gubernamen- tal se mostré Inepta para dominar la situecién: Dan- on, en 8 Comité de Salvacién Publica, negociaba en ver de luchar. Miontras la Montaf, prisionere ya de Sus contragicciones, vacilaba, las masas populares, impulsacas porsus necesidadesy sus ocios, imponian las grandes medidas de selvacién pUblica, ia primers e las cuales fue, e! 23 de agosto de 1783, el levert=- ‘miento en masa. Un gobierno revolucionario parecié indispensable para diseiplinar la presién popular y ‘mantener ia allanza con Ia burguasia, que era le nice {que podls proporcionar los cuadros necesarios. Sobre esta doble base social, sans-culatterie y burguesla ‘montafesa y jacobina, ol gobiemo revolucionaria fue corganizéndose pieza por pieza de julio e ciciembre de +1793: gus dirigantes mas clarivicentes intentaron sa vaguardar 3 cuslquier precio la unidad revolucionaria el antiguo tercer estado, es decir, la unided nacional A partir de 88 momento se pisntearon dos seros? roblemas a lo largo del afo Il. Un probleme aolitica. gedmo coneiliar el comportamiento propio de los Sans-culottes con las exigencies de le cictadure reve, clonaria y las necesidades de la defense nacional? Dicho de otra forma: zcdmo resolver el problems ce las relaciones entre la democracis popular y el godin Re revolucionario? Un problema de tipo sotial:yeomo soneiliar las espiraciones y las reivindicaciones teon micas de los sens-culottes con las exigencies de la ‘burquesia que sigue siendo el elemento crigente de la Revolucién? Dicho de oira forma: gecmo resolver el Droblema de las relaciones entre las mases populares y las clases dominantes? Pero, zesteba en manos de los hombres de! gobierno la posibilidad de superar Iss Contradicciones inherentes 2 esta coslicién? el pelt re nacional ias acalié un momento. Ere de prover Que, al afirmarse la victoria, volverian al primer diane. “La presion popular se mantuvo con fuerzs haste el toto de 1783. Arrancd a Is Convencisn, @ quien ro le agradaban, y's sus reticantes Comités, las grandes medidas revoiucionarias:el § de septiembre, cl Terror se pone af orden del dia: el 11 se adopt el maximo nacional de los granos; el 17 se vota la ley Ge los se Pechosos: el 29 de septiembre, por tina, se insti {uye el maximo general, es decir. economia crigids, Victoria popular, pero también éxito gubernamental: ls legalised ha quedado salveguardad, el terror legal se Impone sobre la accién directa, El Comité de Selves ion Pblice resistié, supo ceder a tiempo y en un {geno elegido por él: su autorided sali robustecids 1b oposicién popular extremista fue anicullade en ip persona de los fandticos, se impuso al silencio a la ‘oposicién en la Convencién en al gran debate del 23 de septiembre, se detuvo le descrstisnizacion el 6 oe Giciembre con ta evocacién solermne de le libertad de culos, en tanto se afiemaba le victoria repusiice: ePepibiee burgess 2 democroce popular? 79 ‘na en Wattignies sobre os austriacos [16 de octubre) yen Mons sobre los vendeanos (13-14 de eiciembre} 81 10 de octubre de 1793, en el informe de Sain 8% la Convencién habia declarado al gobieme do Francia, revolueionerio hasta fa pee el 14 Fimaris sel aho Il (4 de diciembre de 1793), adopts el decreto oe onstitucién del gobierno revolucionario. La logis de Jos acontecimientos llevaba a raconsthvir la centval resi6n, a restablecer la estabilidad administrative, ‘eforzar la autorided gubernemental, todes elles core Giciones necesarias para esa victoria tan perseguida or el Comité de Salvacidn Publica, Pero se Sabie ‘cabado la libertad de accién del movimiento popular Al subordinerlo tooo a las exigencias de la Gefen 2 nacional, f Comité de Salvacign Pablise prétendi ro ceder ni tes reivindicaciones de les ‘mascs « expensas de le unidad revolucionarta, nia las reslama clones de la. burguesie moderada expensee Go io economia drigid® necesaria para sostener le quorrs © 8 expenses del Terror que le garantizabe la obedioncis de todos. Pero, caénde haller exactamente un puste Ge equilibrio entre esas exigencias contvadietories? a liquidacion de ios fanticos, el renzo la des- eristlanizavidn, jos ataques sordos contra les organisa. cianes populares, sobre todo contra tas. socledades seccionatias, seflalaron, en el otoho de 1792, Ie voluntad del Comité de Salvacién Publica de tomar cistancias respecto al movimiento populer al que has. {2 e8¢ momento habia seguide més que dirigido. Pero Precisamente con todo ello se ponia a merced dela Convencién y favorecia Ia ofensiva de sus adversarios en Ia Asamblea y en la opinién publics. Danton habis ‘apoyado a Robespierre contre los descistien eadores, ‘no sin segundas intenciones: se trataba de sfolar ee fesortes del gobiemo revolucionario. La police in ulgentex de Danton se oponia en todos les puntos 6] Programs popuisr apoyado por Hébert y sus amigos se 20 Le Revalactn Frances ordeleros: terror extremo, maximo aumentado, g core litranzs, Ataque gubernamental contra la des- a sfanisacién, atenuacion dol Terror en los departa- Grentos 2 partir de enero de 1796: indicios de que el Gomité de Salvacion Publica, sin proseribir a los extre- Sistas, pretendia al menos reducirios cada vez més. Qu labor de Zapa contra a democracia seccionarie Seid dentro de esa linea: as! habria moderado el Terror eetervndole como medio de gobierno. Le actitus Gabernementalfavoreci le ofensive dantonista contra Gl sistema terrorist ii lucha entre las facclones se desencadand en el mismo momento en que {2 crisis de les subsistencias, Gr nal del invierno de 1793-94, se agravd brusce- ay dite: la situacion en Paris empeor6; parecié proba- ie\ued explosion popular. Al sumarse fs crisis police yal'malestar social estalaron las contradicciones det YiSteme: las consecuancias serian irremediables pare SPinovimiento popular, pare el gobierno revolucions- io. y en cltima instancia para le propia Revolucion. GRANDEZA Y CONTRADICCIONES DE LA REPUBLICA DEL ANO II ‘Tendencias sociales y préctica potion del movimiento popular’ De junio al invieno del afto 1793, el movimiento de la sens-culotterie habla permitide la consolidacion Gel gobierno revolucionario y la establizacién de le Aepiblca burguesa 0 democrecie popular? ‘ at ictadura jacobina de salvacién plblica, al mismo tiempo que imponie @ una Convencién reacia unas medidas destinadas a mojorar la suerte de las masas. 'SI nos remitimos 2 la composicién de! personal politico de las secciones parisienses en el afo I, asi Gomo al papel del faubourg Saint-Antoine en el movi- friemto ée la Revolucién, comprobamos que la var- ‘uardia revolucionaria no estabe formada por un pro- Fetariado de Fabrica, sino por una coalicién de peau fos patronos y de obreros que trabalaban y vivian con bls, De ahi se derivan ciertos rasgos del movimiento popular, un cierto comportamiento, asi como algunas Eontradicciones resultantes de una situacin ambigua, Er mundo del trabajo asté caracterizado en su conjun- to por la mentalidad de la pequefa burguesia artese- hal y como esta participa de la mentalidad de le bur- (gussle. Los trebojadores, ni por el pensamiento ni por FP accién, no constituian un elemento independiente, No estabiecian una relacién directe entre el valor dei ‘abajo y el nivel del salerio el salario se fijabe en rela- Bin @ Yos precios de las. subsistencias: le funcion Social del trabajo no estaba clara, Los sens-culottes ol afa il no pusieron en e! centro de sus preocup- Glones sociales los problems de la produccién y del trabajo: fueron mucho més sensibles a sus intereses Se consumidores. Si bien exigieron la tarife de los pro- dustos, la reivindleacién de la lists de precios quedé fen algo excepcional. La fijacion de precios fue recie~ fade con mayor empeho por los militantes'parisien~ Ses, por cuanto’ en sus sesciones respectives tenian ‘gue soportar no solamente la presiGn de los trabajado- ‘es sino también la da una masa considerable de ind Gentes atenazados par el hambre: e principios de te Frimavera de 1794 habla alrededor de un indigente Socortide por eads nueve habitantes de Paris, pero en al Faubourg Saint-Antoine la relacién era de tno por ede tres. LY cudntos pobres vergonzantes? Sl ham 20 2 Le alton Frances bre constituye la argamasa de categories ten diversas como el artesano, el tendero, el obrero, el buscavidas, Sealigados por un interés comin contra el gran comercionte, el empresario, el acaparador nable © Durgués, el término sens-cufotterie puede parecer impresiso frente al vorebulario sociol6gico actual: en tBlacn @ les condiciones sociales de la época, res- onde ® una realidad concreva. Sin duda no hay que Exelir otros méviles del comportamiento papular: o Séio hacia la nobleze, la creencia en el complot aris {oerdtico, la volumad de acabar con el privegio y betablecer le igualdad resl de derechos. En thtima ins- ancia se reducen #12 exigencia del pan coticiano, Sis que se unid confusamente, en muchos 250s, la feivindicacion police. «Bajo el reino de Robespierre weyegin el sbanista parisino Richer, el .© pradial del ‘dhe ill 20.de mayo de 1795} la sangre covtia y no {aaba el pan. El comportamiento terrorista estabe Indisolublemente ligado a la reivindicacién social las espiraciones sociales populares se concrete ron a través de las luchas relvindicatives. En 1783, tnaximo de los granos se reclamé pare armonizar el precio del pan con los salarlos, es decir pare permitir Givir 2 los sans-eulottes: el derecho 6 je existencia fue Jnvocedo como un argumento a favor. La reivindica- ‘den sociel precedié y suscit6 Is justfieacién tedrica fue, a su ver, reforaé le lucha. Aqui no podemos bus: Car un sistema coherent. El igualitarisme constituye {a caracteristica esencial: las condiciones de existen- {da deben ser las mismas pare todos. Al derecho total Ue propiedad, generador de desigualdad, los sans- ‘culottes oponen el princinia de la igualdad de posesio- ‘be ahi llegan con toda faciided a le orice del fibre ejercicio Gel derecho de propiedad. El propio derecho jamés es cuestionedo: pero los sans-culottes, {Que son pequetios productores indapendientes, lo fun- Germentan en el trabajo personal. A quienes atecan es (CRApUONCE OO ee Ee «los rcos y @ los altos personajes. £12 de septiembre 5071793, en el paroxismo del empuje popular, le seo Sion de los sans-culottes, delante del Jardin des Plan Fae" pide 2 la. Convencidn no solamente que fje tos Boneficios de la industria y los del comercioy mediante pe tgsacion general, sine también que imponge un mé- veno'a ae fortunes ¥ aque ol mismo individuo solos Uinte pueda poser un mdximon. ; Cusl ceria este? Corresponderia ala pequelia propiedad artesanal y seeere tue nadie pueda tener més de un teller, una Windus, Estes medidas radicales tharian desaparecer ovo a poco la desigueldad demesiado grande de las Fortunes y crecer el ndmero de propietariosa. En nine an owe momenta de [a Revolucién encontramos un Rtnutacion tan clare del iGeal social popular: ideal a Ipimedida de los ertesanos y tenderos que componian {ge euadros de la sans-culotterie. Ideal también 2 le fnedida de la masa de consumidores y de pequenos productores vrbanos, hostles tanto a todos los vende- Sores cirectos 0 indirectos de subsistencies como @ fodos los empresarios cuyes inicietivas capitaistas ‘oemian el riesgo de reduces a la categorie de trabo~ {fdores asolariados dependientes. Ideal, enfin, que en Uh voluntad por limita las consecuencias de la propi Gad privada manteniéndole, se oponis profundamente 9 de la burguesia que dirigia fa Rlevolucién. Les tondencies pollticas de Ie sans-culottere se oponian igualmente a les concepciones burguesas. La SeSerania ceside en el pueblo: de ese principio se dec te todo el comportamiento politico de los miltantes Populares, para quienes se trata no de una abstraction Pep de la vealidad conerete del pueblo reunido en sus sierableas de seccién y en ejercicio de todos sus Sgrachos: los més consciontes tendian al gobierno Grecto. En materia legislative reivindicaben Y practi- cers Negedo el c2s0, la sencién de les leyes por Guebio. Por desconfiar del sistema representative, él a Le Revolcisn Francesa roclemaban el control y la revocabilidad de los elegi- 0s, £1 puablo, legislador soberano, es también juez soberano: cuando les mesacres de septiembre de 3792, se organizaron tribunales populares. El poder de lag armas constitule, por dltimo, un atributo esen~ tial de le soberania: el pusblo debe ester armado: en fl 2ho Ill el desarme de los miltantes seccionarios Simbolizd su caida politica. El pueblo en armes y fecuperando al ejercicio de sus derechos meciente Is insurreccién: aplicacién extrema del principio de la soberania popular. £1 pueblo manifest6 con la insu- freccién su omnipatencia soberane y delegé de nuevo bl ejercicio de la soberania a sus mandatarios revesti- {dos do su confianza: asi ocurrié el 2 de junio de 1783. 1B organizacisn seccionaria daba une singular e' ccacia @ ees tendencies. Aprovechando las intitucio- hes municipsles ereadas por le Asamiblea constituyen- te, pero insufldndales un contenido nuevo, utiizendo Tos comités cevolucionarios Impuestes a le Conven- cidn, forjando eon las saciedades seccionarias del oto- fio de 1793 un instrumento especiicamente popular. los militantes sans-culottes dieron al movimiento de las masas parisienses una organizacién a le vez flexi ble y eficer. De le primavera al otoho de 1783 dio Drueba de sus aptitudes en la lucha contra los mode Fades y facili en gran medida Ie instauracién del {Gobierno revolucionaria, Oe julio de 1782 a septiem- Bre de. 1783 la permanencie de las seaciones (la ‘Asemblea general se reunia cada dis alas cinco cons tituyd une de las bases de ese sisterna polttico. Supri- mids por et decreto ce 9 de septiemare, que reducia Tes sesiones 2 dos por semana, después por década, Teaparecié por medio de las socledades seccionaries. Estas, garentizando la permanencia y la continuidad, tendioron a sutituir a lo largo del invierno del afo Il 2 las Asambieas generales, reduciéndolas = un papel de registro. De todas las instituciones seccionarias, los w Pepilica burguess © democracis popular? a comités revolucionarias son los que mejor simbolizan 1 poder popular. Aparecioron esponténeamente en algunas secciones perisionses después del 10 de {agosto de 1782 y se generalizaron en la crisis de mar go de 1793, La Convancidn los legalizé el 21 de mar- zo. Sus competencias, en un principio reducides, so ‘mpliaron répidamente, La ley de los sospechosos de ST'de septiembre de 1793 consageé los poderes que de hecho se hablan arrogado: en cade comuna 0 sec- tién de carne elaboraron la lista de sospechosos y textendiaron las drdenes de arresto. La definicién muy amplia que de la sospeche dio la Comune de Paris Contriouy a acrecentar sus poderes: los comités, fiberdndose de la tutela de las esambloas generales, escapande poco a poco @ le de la Comuna, llegaron 2 controlar toda Ie vide de la seccién, ‘las secciones pzrisienses, que disponian de le fuerza armada y nombraban a sus oficiales, se autose- mministraban, elegian 2 sus magistrados y 2 sus comi- 13s, constitulan asi, en el interior de la capital, otros tentos organismos auténomos. Como caracian de una institueién central, la supleron por la correspondencia ten tiampo normal, por la fraternizacién en periodo de Crisis: ast eventajaban 2 le municipalidad persiense. ‘Ante esta organizacién existis el peligro de que des- bordara a los comités de gobierno, y que tendia & Gestrur, en provecho de la. sans-culotteri, el equi- librio social gobre el que se basabe el gobiemno revo- lucionario, Gobierno revolucionario y dictadura jacobine De tados modos, el gobierno revolucionario px mero 2 reforeé lentamente # lo largo del verano ds 1783, después se constituyé defiitivamente por el ‘decreto de 14 frimario af Il (4 de diciembre de 85 Le Revol in Frances 1793), sobre la base de principios muy distintos de fos de la democracia popular La teoria del gobierno revolucionario lo hizo Saint- ust en su informe del 10 de octubre de 1793, y Robespierre en sus Informes sobre los principios del gobierno reolyclonaro 28 do deriv‘ de 178) y Sobre Jos principios de moral poltica que deben gular 2 2 Convenojon {5 de febrero de 1794). Es una carac- teristica signfiestive el necho de que en ninguno de sos informes se haga mencién del principio de sobe- ania popular: esta se concentré en la Convencién, ‘tinico centro Impulsor del gobiernos. Los comités {gobiernan bajo su control. De hecho, slo dos ejarcen tectivamente el poder: el Comité de Selvacion Publ ca, sen el centr de a elecucina ese reserva pense miento del gobierno, propone a la Convencién nacio- ral las medidas principalesn: y el Comité de Seguridad ‘general que tiene thajo su inspeceién concreta todo Io Felativo @ las personas y @ la policie general. {gobierno revolueionario es un gobierno de guerra:aLa Fevoluci6n es la guerra de la libertad contra sus eno- migoss. Su objetivo es sl de clmentar la repiblica después de Ie vietora se volveré al gable:no constitu clonal, erégimen de le libertad victoriose y pactficas. Porque hace la guerra, tel gobierno revolucionario necesita uns aetvided enreordnrin, debe facuar Como un rayon: no se puede ésometer al mismo rég men a la paz y 2 la guerra, a la salud y a la enferme- ado. 61 gobierno, por lo tanto, tiene en sus manos le fuerza coactiva, es deci. 6} Terror. «La fuerza sélo fest hecha para proteger el crimen?» El gobierno revo- lucionario sélo debe a los enemigos del pueblo lax ‘muertes. Pero ghTerror esté dnicamente al servicio de la repablica: la virtud, principio fundamental del gobierno democrético o popular, constituye la garen- {ie de que el gobierno revolucionario no se orienteré hacia el despotismo. Le virtue, tes decir —segtn

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