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EL USO DE LA CARPETA PORTFOLIO EN LA ENSEÑANZA UNIVERSITARIA

Soledad Domene Martos. sdomene@us.es


Margarita Rodríguez Gallego margaguez@us.es
Juan Jesús Gutiérrez Castillo. jjesusgc@us.es
Avda. Ciudad Jardín 21-22 41018 Sevilla
Departamento de Didáctica y Organización Educativa
Universidad de Sevilla

Resumen
Este trabajo presenta una experiencia realizada en la Universidad de Sevilla con
los alumnos/as de 4º de Pedagogía, en la asignatura de Organización Escolar durante el
curso 2000-2001.

Pretendíamos facilitar el aprendizaje de los alumnos/as a través de la elaboración


de una carpeta portfolio individual fundamentada en la complejidad de la información
que los alumnos/as tendrían que manejar así como en la cantidad de producciones que
realizarían a lo largo del curso.

El programa de la asignatura estaba confeccionado basado en una metodología


modular basada en capacidades. Se pretendía que el alumno expusiera, indagara y
resolviera problemas de cada uno de los descriptores del temario, mediante
explicaciones, estudio independiente y/o aprendizaje cooperativo en sesiones grupales
de clase.

La elaboración de la carpeta se realizó a través del desarrollo de tutoría entre


iguales con alumnos/as de la titulación de maestros que ejercían de tutores con los
alumnos/as de Pedagogía.

A final de curso se realizó una valoración de la experiencia, resultando positiva


en la mayoría de los casos y reflejándose cuantitativamente en la calificación de las
pruebas de cada uno de los estudiantes que realizaron la carpeta de una forma
significativa con respecto a los que no optaron por su realización.

Palabras clave: carpeta portfolio, tutoría entre iguales, capacidades

DESARROLLO

Objetivos.
La experiencia se propuso con dos propósitos fundamentales. Por una parte
pretendíamos fomentar el trabajo colaborativo entre estudiantes, a través del desarrollo
de tutorías entre iguales, considerándola cómo una posible estrategia para favorecer la
motivación de los alumnos/as así como un medio facilitador del aprendizaje.
Por otra parte la elaboración de la carpeta portfolio a través de la cuál el
estudiante pudiera aprender a organizar el material de la asignatura, que tal cómo estaba
planteada suponía manejar una gran cantidad de información, así como de las
producciones que tendrían que elaborar a lo largo del curso; promoviera la
autoevaluación del alumno; reflexionara sobre los cambios y el desarrollo operado a lo
largo del tiempo; fomentara la responsabilidad hacia su propio aprendizaje; reflexionara
sobre el curriculum aprendido; estimulara el trabajo autónomo; reflexionara sobre las
estrategias que apoyan su aprendizaje y reflexionara sobre las metas que deben presidir
futuras experiencias. Todo ello supondría a nuestro juicio un aumento del rendimiento
del alumno/a que se reflejaría en las calificaciones obtenidas al final de curso.

Descripción del trabajo


Durante el curso 2000-2001 se desarrolló la asignatura de Organización Escolar
en el cuarto curso de la Licenciatura de Pedagogía de la Universidad de Sevilla, en un
grupo de 120 alumnos/as, que se planteó auspiciando los nuevos derroteros que para la
enseñanza superior se vislumbraban en esos momentos, desde la declaración de la
Sorbona (1998), Bolonía (1999) y que se han ido concretando en las declaraciones de
Praga (2001) y Berlín (2003).

El programa de la asignatura estaba confeccionado pensando en el desarrollo de


capacidades y fundamentado en el trabajo autónomo del alumno/a y así se estructuraba
y secuenciaba señalando cuales eran las capacidades que se pretendían desarrollar a
través de actividades específicas así como la información básica que deberían manejar
para la realización de dichas actividades. Se agrupaban por módulos a través de los
cuales los estudiantes expondrán, indagarán y resolverán problemas de cada uno de los
descriptores del temario, mediante explicaciones, estudio independiente y/o aprendizaje
cooperativo en sesiones grupales de clase. (http://tecnologiaedu.us.es/villar)

Se estructura en tres grandes módulos con cuatro temas cada uno. Los temas se
trabajaban a través de tres descriptores, y para cada uno de ellos se pretendían
desarrollar dos capacidades con la realización de dos actividades, una en forma de ficha
y la otra cómo producción libre de acuerdo con la actividad propuesta. Para cada uno de
los descriptores se señalaba un material básico de lectura, que en algunos casos era uno
o dos capítulos de un libro, un texto de legislación o un artículo de una revista. La
evaluación del alumno/a se realizó a través de una prueba escrita en dónde el alumno/a
entregaría ya elaborada una de las fichas de alguno de las capacidades a desarrollar y
una composición escrita relativa a las producciones que habían trabajado con
anterioridad y que se supone habrían de recordar y redactar en la prueba. Suponía por
tanto el manejo de gran cantidad de material, desde los propios textos a leer hasta las
fichas y producciones que realizarían los alumnos/as a lo largo del curso.

Se propuso por tanto la elaboración de una carpeta portfolio como actividad


voluntaria, y que tendría como objetivos los señalados en el punto anterior.

La secuencia y el orden de la carpeta vendrían marcados con las indicaciones


que se ofrecieron a los alumnos/as y que se corresponderían con las que aparecían en el
programa de la asignatura, considerando el proceso seguido para la elaboración de cada
una de las actividades propuestas en este.
Para la formación de los alumnos/as en la elaboración de la carpeta se entrenó a
un grupo de ocho alumnas de la diplomatura de magisterio del curso tercero que en ese
momento realizaban tareas de colaboración con la profesora. A cada una de ellas se le
asignó un grupo de alumnos/as de pedagogía al que orientaban, asesoraban y revisaban
cada una de las carpetas que iban elaborando durante una hora a la semana, con la
asistencia de la profesora que supervisaba las carpetas de cada grupo. En la carpeta
deberían incluir y ordenar según iban avanzando en el desarrollo de la asignatura y
según el orden del programa por módulo, tema, descriptor y capacidad-actividad,
incluyendo:

1.- Página inicial con el título de tema, descriptor y capacidad-actividad, así


como la referencia de los textos para leer.
2.- Borradores de las producciones elaboradas.
3.- Ficha
4.- Actividad de desarrollo
5.- Textos trabajados o resumen de ellos.

A lo largo del curso esta forma de ordenar el material supuso que tanto la
profesora como los propios alumnos/as, pudieron comprobar los avances que iban
realizando en el desarrollo de la asignatura, a la vez que suponía la motivación de los
alumnos/as que debían completar la carpeta para unas fechas determinadas por las
sesiones de revisión que se realizaban semanalmente. En estas sesiones se resolvían
problemas y se compartían ideas y opiniones con compañeros/as de titulaciones afines,
que suponían la ampliación y el enriquecimiento de sus aportaciones personales.

Participaron en la experiencia 58 alumnos/as de los 120 matriculados lo que


suponía un 48,3% del total y no realizaron la carpeta 62 alumnos /as (51,7 %)

N %
Alumnos/as con 58 48,3
portfolio
Alumnos/as sin 62 51,7
portfolio
Alumnos/as 120 100
matriculados
Tabla Nº 1. Población del estudio

La presentación de los datos obtenidos los hemos presentados de acuerdo con los
resultados tanto de la primera convocatoria como de la segunda, considerando los no
presentados en cada una de ellas y una descripción final de las calificaciones globales
sumando datos de las dos convocatorias. Las calificaciones con las que hemos trabajado
son sólo las correspondientes a la prueba escrita que se realizó a final de curso, en
primera convocatoria y en septiembre, en segunda convocatoria.

Del total de alumnos/as matriculados se presentaron a la primera convocatoria


71 alumnos/as es decir un 59,2 % del total. De estos, 55 alumnos/as (45,8 %) habían
realizado la carpeta y 16 (13,3 %) no. Dejando desierta la convocatoria 3 (2,5 %)
alumnos/as que habían realizado la carpeta y 46 (38,3 %) que no la habían realizado.
N %
Alumnos/as Con 55 45,8
presentados portafolio
Primera Sin 16 13,3
Convocatoria portafolio
Alumnos/as Con 3 2,5
No portafolio
presentados Sin 46 38,3
portafolio
Total 120 100
Tabla Nº 2. Alumnos/as presentados a Primera Convocatoria

Los suspensos y aprobados en la primera convocatoria se distribuyen según la


tabla Nº 3 , dependiendo de si habían realizado o no la carpeta portfolio.

N %
Alumnos/as Con 6 8,4
suspensos portafolio
Primera Sin 4 5,6
Convocatoria portafolio
Alumnos/as Con 49 69
aprobados portafolio
Primera Sin 12 16,9
Convocatoria portafolio
Total 71 100

Tabla Nº 3. Alumnos/as aprobados y suspensos en Primera Convocatoria

De los 71 alumnos/as presentados, aprobaron 61 alumnos/as, de los cuales 49


(69%) habían realizado la carpeta y 12 alumnos/as (16,9 %) no.

Resulta significativo el gran número de alumnos/as, 46 alumnos/as, es decir un


93,9 % del total de no presentados, que no se presentaron a la primera convocatoria y
que no habían realizado la carpeta enfrentados con los que no se presentaron a esta
convocatoria con la carpeta elaborada, 3 alumnos/as es decir un 6,1 % del total de
alumnos/as no presentados.

N %
Alumnos/as Con 3 6,1
No portafolio
presentados Sin 46 93,9
Primera portafolio
Convocatoria
Total 49 100

Tabla Nº 4. Alumnos/as No Presentados Primera Convocatoria


Con respecto al número de suspensos y aprobados obtenidos en las segunda
convocatoria podemos observar en la tabla Nº 5, que se presentan al examen menos de
la mitad de los alumnos/as, es decir 19 alumnos/as, que se corresponden con un 32,2%
,del total que podrían acceder a esta convocatoria. De estos solamente suspende un
alumno/a con la carpeta elaborada frente a cuatro que suspenden sin haber elaborado la
carpeta.

N %
Alumnos/as Con 1 5,3
suspensos portafolio
Segunda Sin 4 21
Convocatoria portafolio
Alumnos/as Con 6 31,6
aprobados portafolio
Segunda Sin 8 42,1
Convocatoria portafolio
Total 19 100

Tabla Nº 5. Alumnos/as suspensos y aprobados con respecto al total de alumnos/as


presentados al examen de la segunda convocatoria

Las calificaciones obtenidas por los alumnos/as en la primera convocatoria y


diferenciando los alumnos/as que realizaron la carpeta o no, son altamente significativas
en cuanto que los alumnos/as con carpeta han obtenido 7 sobresalientes (5,8 % del total
de alumnos/as matriculados/as), 31 notables ( 25,8 % del total de alumnos/as
matriculados/as) y 11 aprobados (9,2 % del total de alumnos/as matriculados/as). Con lo
que podemos decir que han superado la asignatura en la primera convocatoria 49
alumnos/as que han elaborado la carpeta, que se corresponden con un 40,8 % del total
de alumnos/as matriculados. Enfrentadas se encuentran las puntuaciones o mejor dicho
el alto porcentaje de ausencia de alumnos/as que no han elaborado la carpeta portfolio
en la primera convocatoria elevándose a 46 (38,3 % del total de alumnos/as
matriculados). Solamente han superado la asignatura en esta convocatoria 12
alumnos/as de los que no han elaborado la carpeta, que se corresponden con un 10 %
del total de alumnos/as matriculados.
N %
Con Sobresaliente 7 5,8
portafolio Notable 31 25,8
Aprobado 11 9,2
Suspenso 6 5
No 3 2,5
Calificaciones Presentado
Alumnos/as Parcial Total 58 48,3
Primera Sin Sobresaliente
Convocatoria portafolio Notable
Aprobado 12 10
Suspenso 4 3,3
No 46 38,3
Presentado
Parcial Total 62 51,7
Total 120 100
Tabla Nº 6. Calificaciones con y sin portafolios Primera Convocatoria

Con respecto a la segunda convocatoria los datos que nos ofrece la tabla Nº 7,
son similares a los que se presentaron en la tabla anterior con respecto a la primera
convocatoria. Es relevante de nuevo el escaso número de alumnos/as no presentados y
que no tienen carpeta elaborada. En el caso de los alumnos/as con carpeta el porcentaje
de participación en la prueba es casi del 100 % sólo, solo hay un alumno no presentado
en esta convocatoria con la carpeta elaborada.

N %
Con Sobresaliente
portafolio Notable
Aprobado 6 10,2
Suspenso 1 1,7
No 1 1,7
Calificaciones Presentado
Segunda Parcial Total 8 13,5
Convocatoria Sin Sobresaliente
portafolio Notable 1 1,7
Aprobado 7 11,9
Suspenso 4 6,8
No 39 66,1
Presentado
Parcial Total 51 86,4
Total 59 100
Tabla Nº 7. Calificaciones con y sin Portafolios segunda convocatoria

Si consideramos las puntuaciones globales, es decir teniendo en cuenta las dos


convocatorias, podemos observar en la tabla Nº 8 que todos los alumnos/as que realizan
la carpeta portafolio se presentan a una de las convocatorias, excepto uno, y que de
estos solamente 1 alumno/a no supera la asignatura. Siendo los alumnos/as que la
superan con distintas calificaciones como vimos en la tabla Nº 6, 49 alumnos/as ( 40,8
% del total de alumnos/as matriculados) En el caso de los alumnos/as que no realizan la
carpeta superan la asignatura 20 (16,6 % del total de alumnos/as matriculados), quedan
4 suspensos (3,3 % del total de alumnos/as matriculados) y de forma significativa no se
presentan en ninguna de las convocatorias 39 alumnos/as suponiendo un 32,5 % de los
alumnos/as matriculados.

A finalizar las clases se diseño un pequeño cuestionario de preguntas abiertas, en


dónde se le pedía a los alumnos/as que habían realizado la carpeta portfolio que
contestaran a las cuestiones siguientes:
1.- ¿Crees que la elaboración de la carpeta te ha facilitado el aprendizaje de los
contenidos de la asignatura?
2.- ¿Te ha supuesto mucho tiempo y esfuerzo la elaboración de la carpeta?
3.- ¿ Te has implicado más en el desarrollo de la asignatura al tener que revisar
semanalmente la carpeta portfolio?
4.- Valora la relación establecida con otros alumnos/as de la Diplomatura de
Maestros

En general las respuestas de los estudiantes han sido satisfactorias con respecto a
la elaboración de la carpeta. La mayoría declaran que si no hubieran utilizado este
método para organizar el voluminoso material de la asignatura no hubieran podido
trabajarla. A la misma vez les ha facilitado el poder autoevaluarse con respecto a las
producciones realizadas ya que debían revisarlas cada semana.

Si les ha supuesto un esfuerzo en cuanto al número de horas que han dedicado a


la asignatura semanalmente, pero que se alegran una vez terminada puesto que tienen
todo el material para examen organizado y estructurado, tarea que en otra asignaturas
sólo realizaban al final de curso cuando se aproximaba el examen.

En cuanto a los contactos semanales con otros compañeros que no son de su


grupo ni de su carrera, ha sido fructífera para todos ellos/as, indicando que les gustaría
poder trabajar en otro momento con ellos, ya que estudian dentro de la misma facultad y
sin embargo no tienen ningún encuentro preestablecido. Los enfoques, las propuestas, el
encuentro con la realidad educativa es distinta en los dos casos, pero complementaria.

Conclusiones
La utilización de la carpeta portfolio según los resultados obtenidos ha sido
ampliamente positiva. Ha propiciado confianza en el control y el nivel de aprendizaje
por el propio alumno/a, reflejándose en el alto índice de participación en cada una de
las pruebas bien fuera de primera o segunda convocatoria, así como en la calificación
obtenida por los estudiantes. Las puntuaciones obtenidas por los estudiantes que
realizaron la carpeta son más altas de una forma significativa con respecto a los que no
optaron por su realización, que sólo consiguieron el aprobado. La experiencia les había
resultado ampliamente satisfactoria, desde la facilidad y mejora del aprendizaje tanto
del contenido de la materia como de las relaciones establecidas con compañeros de otras
titulaciones afines.

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