Sunteți pe pagina 1din 6

Profesor: Mariano Moreno

Alumno: Pedro J Asensio Gálvez


Curso: 2ºBCT
1.) Autor: Pío Baroja
1.1) Biografía
Pío Baroja nació en San Sebastián y vivió, durante casi
toda su vida, en Madrid. Allí estudió Medicina y se
doctoró con una tesis sobre El dolor. Su ejercicio como
médico fue breve, en Cestona. Vuelve a Madrid donde
entra en contacto con escritores como Azorín, Maeztu,
que le llevan a entregarse a la literatura, su gran vocación.
Publica sus primeros libros en 1900 tras una serie de
colaboraciones en diarios y revistas. Sigue una etapa de
intensa labor que conjuga con viajes por España y
Europa. En 1911 publica El árbol de la ciencia. Hasta
entonces había publicado ya, además de cuentos, artículos y
ensayos, diecisiete novelas que constituyen lo más importante de su producción. Su
fama se consolida y su vida se consagra a escribir volviéndose cada vez más sedentaria.
En 1935 ingresa en la Real Academia. Durante la Guerra Civil pasa a Francia, pero en
1940 se instala de nuevo en Madrid. Muere en 1955.

1.2) Estilo
Pío Baroja afirmaba que la novela era una especie de cajón de sastre en el que todo
cabía; que no era necesario un planteamiento previo, sino que lo más importante era la
naturalidad conseguida mediante la espontaneidad a la hora de escribir. Esta es la
impresión superficial que producen muchas de sus novelas: episodios y acontecimientos
puestos unos detrás de otros, anécdotas, divagaciones y digresiones, multitud de
personajes ocasionales. En realidad, no era tan espontáneo como él afirmaba; sí se
preocupaba de la construcción narrativa y, en general sus novelas tienen una sutil línea
estructural, de características muy sui generis.
La técnica narrativa de Baroja es sobre todo realista, basada en la observación de
ambientes, situaciones y personajes de la vida real, pero vistos a través del particular
subjetivismo del autor, lo que confiere a su obra un carácter impresionista.

1.3) Obra
Pío Baroja fue el más importante novelista contemporáneo por sus extraordinarias dotes
de narrador. Su influencia posterior ha sido enorme y los novelistas de la posguerra
siempre le reconocieron como su maestro. Fue un escritor fecundísimo. Sus novelas son
más de sesenta. Él mismo agrupó muchas de sus novelas en trilogías (34), pero estas
clasificaciones, con alguna excepción, frecuentemente carecen de relación entre las
obras que las integran. Hay que destacar las distintas trilogías:
- Tierra Vasca formada por La casa de Aizgorri(1900), el Mayorazgo de
Labraz (1903)y Zalacaín el aventurero(1909)
- La lucha por la vida: La busca (1904), Mala hierba (1904) y Aurora Roja (1905)
- La raza: A ella pertenece El árbol de la ciencia, La dama errante y La ciudad de la
niebla.
Además escribió cuentos, novelas cortas, libros de viajes, biografías, ensayos,...
Resultan también destacables sus Memorias, tituladas Desde la última vuelta del
camino, siete volúmenes que constituyen un importante testimonio de la personalidad
del autor y un excepcional panorama de toda una época.
2.) Ensayo
El tema elegido para el ensayo, es La trayectoria vital de Andrés Hurtado,
personaje protagonista de El Árbol de la Ciencia.

El Árbol de la Ciencia es una obra publicada en 1911 cuya acción transcurre


entre los años 1887 y 1898. En ella se puede ver una verdadero reflejo de la sociedad
madrileña de la época, su ambientes. Además, plantea muchas de las inquietudes
científicas y filosóficas de esos años desde los puntos de vista de Andrés Hurtado y su
tío Iturrioz, hombre de una generación anterior, mucho más realista que Andrés.

Ésta obra es en parte autobiográfica, ya que podemos identificar a Andrés


Hurtado como el propio Baroja y a Iturrioz como a su tío Justo Goñi. En las
discusiones que mantienen Iturrioz y Andrés, éste último le plantea todas sus dudas y
cuestiones filosóficas, políticas y científicas. Por supuesto también tratan los temas
como el de la guerra de Cuba.

Hay que aclarar que la acción y su desarrollo se sitúan en los mismos años en
que Baroja fue estudiante de medicina y médico rural, es decir, desde 1887 hasta 1896,
que vuelve a Madrid. Son estos los años los que Baroja reconstruye unos veinte años
después de haberlos vivido y estructura la novela siguiendo los mismos periodos que
tuvo en su vida.

La trayectoria vital de Andrés Hurtado se estructura en dos grandes secciones.


La primera sección, va dedicada a su tiempo como estudiante. En la segunda se narra la
vida de Andrés Hurtado como adulto.
A lo largo de los diez primeros capítulos de la primera parte del libro transcurre
su periodo de estudiante. Baroja describe a Andrés como a un personaje triste, y
muchas veces solitario “En casi todos los momentos de su vida Andrés experimentaba
la sensación de sentirse solo y abandonado”.

El árbol de la ciencia comienza con Andrés en la puerta de la Escuela de


Arquitectura, en Madrid. Va a cursar la carrera de medicina y allí se encuentra con un
viejo conocido Julio Aracil. Los estudiantes de la época no son tan diferentes de los de
ahora, el comportamiento es el mismo del de los de aquella época prácticamente,
aunque por supuesto hoy en día abundan mucho más los problemáticos, aunque eso es
otro tema y nos vamos desviando del asunto, según Baroja “ha habido siempre en
España una siempre una simpatía y respeto por lo viejo e inútil” refiriéndose a los
profesores mayores que llevan ya muchos años en la enseñanza y claro no están al día
en cuanto a descubrimientos porque fue una época de grandes avances en cuanto a
medicina se refiere.
La familia de Andrés era muy numerosa y su relación con su padre era horrible
no se soportaban.

Durante sus estudios en la Universidad, es cuando empieza a interesarse por el


mundo filosófico). Un nuevo tropiezo (ilusiones puestas en Letamendi) lo decide a
iniciarse en las lecturas de Kant y Schopenhauer (que posteriormente influirán de forma
decisiva en su vida).

Los años de carrera para Andrés fueron transcurriendo con más pena que gloria.
Conoció a Montaner, un amigo de Julio Aracil y los tres juntos fueron pasando los
cursos hasta que consiguieron terminar la carrera. Entonces, Aracil invita a visitar en
Hospital San Juan de Dios, para asistir a un curso de enfermedades venéreas, a Hurtado
el hospital le daba escalofríos, además estaba lleno de pobres, mendigos, en general
gente sin hogar. A estos los médicos no les prestaban la atención necesaria, estas y otras
muchas razones quebrantaban el sentido humanitario del protagonista.
Después de su experiencia en esas practicas, Hurtado pasa de los exámenes de alumno
interno en el hospital general.
Pero en el fondo estas experiencias sólo le llevan a aumentar su confusión interior y a
debatirse (políticamente) entre la doctrina revolucionaria y la inacción.

A través de Lulú, con quien establece una gran amistad, descubre nuevas
atrocidades (Doña Virginia y sus muchachas, relación entre Niní y Aracil,...). Para él, su
relación no puede llegar a más de lo que es (una amistad).

Cuando Luisito cae enfermo, Andrés se sume en una gran depresión. Este hecho
hiere nuevamente las esperanzas que tiene puestas en la Medicina (impotencia ante la
posibilidad de hallar cualquier tratamiento). Finalmente la muerte del pequeño le
conduce a la duda ante la ciencia y a las más oscuras ideas sobre la vida.

Andrés ya no sabe que hacer con su vida y decide visitar a su tío Iturrioz para
hablar filosóficamente y conversar acerca de su futuro, no sabe si ser o no médico ni
como reconducir su vida. Pero finalmente encuentra un puesto de médico en Alcolea de
Campo (pueblo ficticio inventado por Baroja que posee las características propias de un
pueblo manchego) y se traslada como médico rural.

Durante su estancia en Alcolea del Campo descubre la influencia de la religión


católica en los habitantes del pueblo y que hay un gran caciquismo que enfrenta a dos
bandos a los liberales y a los carlistas.
Nos es muy bien acogido en el pueblo, y mantiene una gran rivalidad con el otro médico
del pueblo, el doctor Sánchez. La rivalidad se debe a que Sánchez deseaba que Andrés
sufriera lo que él había sufrido cuando estaba el otro médico.
Las costumbres del pueblo eran como califica Baroja “españolas puras; es decir, de un
absurdo completo”. Su único entretenimiento en el pueblo era asistir al casino, pues
detestaba las corridas de toros; en el casino charlaba con los pueblerinos.
También respecto al tema de la sexualidad y pornografía en el pueblo era algo
paradójico, el propio protagonista dice “En Londres, al agrandarse la vida sexual por
libertad de costumbres, se achicaba la pornografía; en Alcolea, al achicarse la vida
sexual, se agrandaba la pornografía”.
Poco a poco Andrés iba generando una mala reputación, los vecinos le consideraban
orgullo, violento, malhumorado y antipático. Y el incidente con la mujer del Garrota
fue la gota que colmó el vaso y Hurtado decidió abandonar Alcolea de Campo y
regresar a Madrid.

De regreso a Madrid aparecen nuevas desilusiones. Andrés se desespera al


comprobar con qué indiferencia responde la gente a la derrota de España en Cuba y
Filipinas. El único trabajo que pudo encontrar fue el de médico de higiene, algo que en
principio no le desagradaba, pero “comprobó que el trabajo no era para él”.
Tener que revisar a prostitutas y gente sin recursos no era lo suyo, además
también veía como los ricos iban adoptando una moralidad cada vez más respetable y
los pobres como iban asumiendo que eran pobres y así se quedarían, una mentalidad
muy derrotista que a Andrés no le gustaba.

Todo no fue malo en su regreso a Madrid, se reencontró con Lulú, que ahora
poseía una tienda y no le había ido nada mal. Hurtado cree que el amor es un engaño,
un estado ficticio como resultado de “la confluencia del instinto fetichista y del instinto
sexual”. Pero ni con tales teorías consigue ocultar su amor hacia ella y al poco tiempo
se casan; comienza entonces una nueva vida para Andrés.
Ahora ya no trabajaba como médico de higiene sino en algo más tranquilo como
la traducción de libros, en esta época, vivió sus años más felices junto a su mujer.
Desgraciadamente, la tranquila vida del matrimonio se ve turbada con el
embarazo de Lulú. A partir de entonces, Andrés empieza a tener miedo. Es un miedo al
destino, a la vida misma. Hasta que ocurre lo peor: el hijo que esperaban nace muerto, y
la madre fallece tres días después. Andrés cansado de luchar, se queda sin fuerzas y se
suicida, poniendo punto final a su vida y a la obra.

Finalmente podemos sacar en conclusión que la vida de Andrés Hurtado, seria la


vida típica de un joven español de ideas liberales, que ve a la sociedad madrileña como
estancada, como si para ella no pasar el tiempo, y también critica los grandes atrasos de
la sociedad española en general , incluyendo a los pueblos, todavía más atrasados. Y la
propia sociedad vence a Andrés, cuando ya se ve la luz al final del túnel y está tan cerca
de la felicidad, su vida sufre un vuelco inesperado que no puede soportar.

3.) Bibliografía
BAROJA, Pío: El árbol de la ciencia, Letras Hipánicas, Barcelona, 2007.

BIOGRAFÍAS Y VIDAS, [en línea]. Disponible en Web:


http://www.biografiasyvidas.com/biografia/b/baroja.htm [Consulta: 12-11-2010]

INSTITUTO CERVANTES, centro virtual Cervantes (en línea). Disponible en Web:


http://www.cervantesvirtual.com/FichaAutor.html?Ref=2945 [Consulta: 07-11-2010]

RINCON CASTELLANO,[en línea]. Disponible en Web:


http://www.rinconcastellano.com/sigloxx/baroja.html [Consulta: 12-11-2010]

S-ar putea să vă placă și