Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
RICARDO PALMA
Los nombres tradicionales de las calles de una ciudad son muy importantes ya
que fueron puestos por el pueblo como expresión de su voluntad soberana, sin
el concurso de autoridades ni sustentados en normas legales.
Como lo afirmara nuestro célebre tradicionista, "el pueblo, que para eso
de bautizar no necesitaba permiso de preste, ni de rey, ni de roque, ni de
alcornoque" (Palma 1968: 579).(*)
Es importante tener en cuenta que Palma confiesa que "a pesar de nuestras más
prolijas investigaciones, nos ha sido imposible descubrir el [origen del nombre]
de las diez calles siguientes": Comesebo, Contradicción, Expiración, Malambo,
*Nota.~ En lo sucesivo, cuando nos refiramos a esta ohra, se indicará únicamente el número de la I)ág-inarcsj)cctiva.
74
tesar ealama Parcan
Don Raúl Porras Barrenechea afirma que "Palma se revela en sus Tradiciones
criollo auténtico, indisciplinado, enemigo de la autoridad, irreverente en
cuestiones religiosas, oposicionista por temperamento, malévolo y gracioso"
(Porras 1954: 12).
También reconoce este célebre autor que "La historia de Lima le ha embebido
particularmente. Nadie como él para desentrañar el origen de los nombres
75
La antiguas calles de Lima en las Tradiciones de Ricardo Palma
Cabe señalar que Palma no hace ninguna referencia a varias calles importantes,
como la de la Peña Horadada. En el caso de esta última muchos embusteros,
en la actualidad, le atribuyen tradiciones que no existen y don Ricardo Palma
se convierte así en un lugar de referencia falsa, mentirosa, producto de la más
vil ignorancia.
Afligidos.- ("JirÓn Cailloma" cuadra 1). En "La Faltriquera del Diablo" Palma
afirma que "La calle de Afligidos se llamÓ así porque en un solar o corralÓn
de ella se refugiaron muchos infelices, que quedaron sin pan ni hogar por
consecuencia de un terremoto" (398-399).
Aldabas.- ("JirÓn Azángaro" cuadra 2). En "La calle de las Aldabas" cuenta
que "ContratÓse la fabricaciÓn de aldabas con un famoso discípulo de
Vulcano, cuya fragua estaba situada en un solar que forma el ángulo opuesto
a las esquinas de Beytia y Melchor Malo. El herrero adornó su puerta, por vía
de muestra [... ] con varias aldabas, y desde entonces quedÓ bautizada esa calle
con el nombre con que la conocemos" (574-575).
Aparicio.- ("JirÓn Azángaro" cuadra 1). En "La Faltriquera del Diablo" dice que
"Cuando Pizarro fundÓ Lima, dividiÓse el área de la ciudad en lotes o solares
bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta o jardín.
76 César ColO1na Porcan
Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el nombre del
vecino más notable", una de ellas es la calle de "Aparicio" que se llama así por
el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398). Asimismo, en "De
asta y rejón" dice que "En una de las casas de la calle de Aparicio vivía por los
años de 1760 la señora Feliciana Chaves de Mesía" (609)
Arco.- ("Jirón Callao" cuadra 6). En "Entrada de virrey" afirma que la procesión
que conducía a un nuevo representante de la Corona avanzaba hacia la ciudad
y "pocos minutos después avanzaba el coche del virrey, y al llegar al arco (hasta
hoy conserva su nombre la calle del Arco) se acercaba el mayordomo de la
ciudad". Allí se realizaba la ceremonia de recibimiento (538). Además, en
"María Abascal" cuenta ella que se fue a vivir con su esposo a "la calle del
Arco, donde con modesta decencia arreglaron una casita" (956).
77
La antiguas calles de Lima en las Tradiciones de Rica1'doPalma
Azaña.- ("Jirón Puno" cuadra 3). En "La Faltriquera del Diablo" dice que
"Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes o solares
bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta o jardín.
Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el nombre del
vecino más notable", una de ellas es la calle de "Azaña", que se llama así por el
apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
BalTaganes.- ("Jirón Virú" cuadras 3,4, Abajo el Puente). Palma, en "La Faltriquera
del Diablo", afirma que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad
en lotes o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta
o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el nombre
del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Barraganes", que se llama así
por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Bejarano.- ("jirÓn Puno" cuadra 2). En "La Faltriquera del Diablo" dice que
"Cuando Pizarra fundÓ Lima, dividiÓse el área de la ciudad en lotes o solares
bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta o jardín.
Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el nombre del
vecino más notable", una de ellas es la calle de "Bejarano", que se llama así por
el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Belén.- ("Jirón UniÓn" cuadra 10). En "El hábito no hace al monje" cuenta
que "En la calle de Belén había por esos años una casa de modesta apariencia,
con dos balconcillos mariscos o de celosías" (575-576).
Beytia.- ("JirÓn Azángaro" cuadra 3). En "La Faltriquera del Diablo" dice que
"Cuando Pizarra fundÓ Lima, dividiÓse el área de la ciudad en lotes o solares
bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta o jardín.
Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el nombre del
vecino más notable", una de ellas es la calle de "Beytia", que se llama así por
el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398). Asimismo, en "La
calle de las Aldabas" cuenta que "Con trató se la fabricación de aldabas con un
famoso discípulo de Vulcano, cuya fragua estaba situada en un solar que forma
el ángulo opuesto a las esquinas de Beytia y Melchor Malo" (574-575).
Bodegones.- ("Jirón Carabaya" cuadra 3). En "El obispo Chicheñó" cuenta que
unos comerciantes "arrendaran un vasto almacén en la calle de Bodegones"
(681-683); y en "La casa de Francisco Pizarra" indica que "El primer año de
la fundaciÓn de Lima (1535), solo se edificaran treinta y seis casas, siendo
las principales [..] la de García de Salcedo, en Bodegones" y otras casas (35).
79
La antiguas falles de Lima en las Tradiciones de Rifardo Palma
Boza.- ("Jirón Unión" cuadra 8). En "La Faltriquera del Diablo" dice que
"Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes o solares
bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta o jardín.
Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el nombre del
vecino más notable", una de ellas es la calle de "Boza", que se llama así por el
apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Bravo.- ("Jirón Arica" cuadra 7). Palma, en su tradición "La Faltriquera del
Diablo", cuenta que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad
en lotes o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y
huerta o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por
80
César Cala111aPanan
el nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Bravo", que se
llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Cádices.- ("Jirón Lampa" cuadra 11). Asimismo, en "La Faltriquera del Diablo"
dice que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el áre<1de 1<1ciudad en lotes
o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta
o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el
nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Cádices", que se
llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Calonge.- ("]irón Cailloma" cuadra 3). También en "La Faltriquera del Diablo",
Palma cuenta que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad
en lotes o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y
huerta o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fl¡eron conocidas por
el nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Calonge", que se
llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Carmen.- (Carmen Bajo: "Jirón Junín" cuadra 10; Carmen Alto: "Jirón Junín"
cuadras 11, 12). En "La segunda Inquisición" registra a "Ana María, conocida
por la Petaquilla, vendedora de pan en la calle del Carmen, frente al callejón
de las Palomitas, denunciada de mezclar en cantares profanos los nombres de
Jesús y de María" (1289).
81
La antiguas calles de Lima en las Tradiciones de Ricardo Palma
Carrera.- ("Jirón Lampa" cuadra 4). En "La Faltriquera del Diablo" dice que
"Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes o solares
bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta o jardín.
Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el nombre del
vecino más notable", una de ellas es la calle de "Carrera", que se llama así por
el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Chaves.- ("Jirón lea" cuadra 7). Asimismo, en "La Faltriquera del Diablo",
cuenta que "Cuando Pizarra fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes
o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta
o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueran conocidas por el
nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Chaves", que se
llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Coca.- ("Jirón Carabaya" cuadra 4). En "El que más vale no vale tanto como
Valle vale" dice que "es fama que en la calle de la Coca, en la casa llamada del
Piélago, que fue morada del Último rector [jesuita de Lima], existe un pasadizo
que conduce a los subterráneos" del convento de San Pedro y San Pablo (595).
Cocharcas.- ("Jirón Huánuco" cuadra 9). En "María Abascal" cuenta que "Por
los años de 1807 existió en la calle ancha de Cocharcas (hoy de Buenos Aires),
la más afamada picantería de Lima, como que en ella se despachaba la mejor
chicha del Norte y se condimentaban un seviche de camarones y unas papas
amarillas con ají que eran cosa de chuparse los dedos" (955).
Concha.- ("Jirón lea" cuadra 3). En "La Faltriquera del Diablo" dice que
"Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes o solares
bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta o jardín.
Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el nombre del
vecino más notable", una de ellas es la calle de "Concha", que se llama así por
el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Doña Elvira.- ("Jirón Huanta" cuadras 11, 12). En "La Faltriquera del Diablo"
afirma que "La calle de Doña Elvira se llamó así por una famosa curandera, que en
tiempo del virrey duque de la Palata tuvo en ella su domicilio. Juan de Caviedes,
en su Diente del Pamaso, nos da largas y curiosas noticias de esta mujer que
inspiró agudísimos conceptos a la satírica vena del poeta limeño" (398).
83
La anti[!;uas calles de Lima en las Tradiciones de RiCa1'do Palma
Escribanos, portal de.- (Plaza Mayor). En "Un cerro que tiene historia" recuerda
que "En la noche del 11 de febrero de 1696 se desbordó el brazo de río que pasa
por el monasterio de la Concepción, llegando el agua hasta la plaza mayor. En
las tiendas de los portales [... ] subió el agua a media vara de altura, y como casi
todas eran ocupadas por escribanos que tenían los protocolos en el suelo, y no
en estantes, por lo caro de la madera, pudriéronse documentos cuya reposición
fue, si no imposible, muy difícil. Desde entonces se trasladaron los escribanos a
otras calles, legando su nombre al Portal que habían ocupado" (42). Además, en
"Los polvos de la condesa" cuenta que el virrey conde de la Monclova mandó
construir los portales de Botoneros y de Escribanos, en la plaza mayor (354); en
"De potencia a potencia" se refiere a una corrida de toros en la que el arzobispo
escapaba en su calesa, y "Llegada a la esquina del portal de Escribanos, detúvola
el cochero" (328); y en "Carencia de medias y abundancia de medios" menciona
a un "almacenero del portal de Escribanos" (732).
Espaderos.- ("Jirón Unión" cuadra 5). En "La casa de Francisco Pizarro" indica
que "El primer atlo de la fundación de Lima (1535), solo se edificaron treinta y
seis casas, siendo las principales la del tesorero Alonso Riquelme, en la calle de
la Merced o Espaderos" y otras casas (35). Asimismo, en "La casa de Francisco
Pizarro" indica que la casa de Francisco Pizarro se encontraba "en la calle que
forma ángulo con la de Espaderos (y que se conoce aún por la de Jesús Nazareno)
y precisamente frente a la puerta lateral de la iglesia de la Merced" (35).
Faltriquera del Diablo.- ("Jirón Chili" cuadra 1, hoy plaza San Martín). En
"La Faltriquera del Diablo" cuenta que existía "por los atlas de 1651 una calle
solitaria, pues en ella no existían más que una casa de humilde aspecto y dos
84 César ColO1na Paread
o tres tiendas [... ] Tan desdichada era la calle que ni siquiera tenía nombre".
Agrega que "Habitaba la casa un español, notable por su fortuna y por su
libertinaje". En trance de morir, lo confesó un fraile, quien decía "He sacado
esa alma de la faltriquera del diablo. Y popularizéíndose el suceso y el dicho
del reverendo, tuvo desde entonces nombre la calle que todos los limeños
conocemos" (399).
Fano.- ("Jirón Lampa" cuadra 8). Palma, en su tradición "La Faltriquera del
Diablo", dice que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad
en lotes o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y
huerta o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por
el nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Fano", que se
llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Gallos.- ("Jirón Arequipa" cuadra 2). En "El Demonio de los Andes" señala
que la casa de Francisco de Carvajal, apodado así, se encontraba en "el ángulo
de las calles conocidas hoy con los nombres de la Pelota y de los Gallos. El
terreno fue sembrado de sal, demolidas las paredes interiores y en la esquina de
la última se colocó una lápida de bronce con una inscripción de infamia para
la memoria del propietario. A la calle se le dio el nombre de calle del Mármol
de Carvajal" (81). Además, en "No hay mal que por bien no venga" se refiere
a "Un pobre zapatero, que vivía en la calle de los Gallos" (230).
Gato.- ("Jirón Azángaro" cuadra 4). En "La Faltriquera del Diablo" dice que
"La calle que impropiamente llaman muchos del Gato, no se nombró sino
de Gato, apellido de un acaudalado boticario" (398). Además, en "A nadar,
peces" menciona a un personaje que dice que "Con dos mil pesos ponemos una
botica que le eche la pata encima a la del Gato" (843).
Gradas.- (Plaza Mayor).- En "Una moza de rompe y raja" se refiere a una mujer
que tenía "un tenducho o covachuela de zapatos en la calle de Judíos, bajo
las gradas de la Catedral" (969). También, en "Ño Veintemil" menciona las
"covachuelas, en las gradas de la Catedral y calle de Judíos" (667).
85
La antiguas calles de Lima en las Tradiciones de Ricardo Palma
(Jranados.- ("Jirón Cuzco" cuadra 8). En "La Faltriquera del Diablo" recuerda
que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes o
solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta
o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el
nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Granados", que se
llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Gremios.- ("Jirón Callao" cuadra 4). En "Los judíos del prendimiento" cuenta
que "En cierta casa de la calle de Gremios y clavado en la puerta principal,
para que lo leyesen los transeúntes, apareció una mañana del año 1636
un pergamino" avisando que en la casa habitaban judíos, los cuales fueron
capturados y procesados por la Santa Inquisición (363).
Hoyos.- ("Jirón Paruro" cuadras 7, 8). En "La Faltriquera del Diablo" dice que
"Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes o solares
bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta o jardín.
Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el nombre del
vecino más notable", una de ellas es la calle de "Hoyos", que se llama así por el
apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Huevo.- ("Jirón Tacna" cuadra 5). También, en "La Faltriquera del Diablo",
recuerda que "En tiempo del virrey conde de Superunda, a pocos metros después
de la ruina del Callao, encontraron en un corral de gallinas un cascarón del
que salió un basilisco o pollo fenomenal. Por novelería iba el pueblo a visitar
el corral, y desde entonces tuvimos la que se llama calle del Huevo" (399).
Juan de la Coba.- ("Jirón Abancay" cuadra 1). En "La Faltriquera del Diablo"
afirma que "La calle de Juan de la Coba debió su nombre al famoso banquero
Juan de la Coba" (399).
Juan Pablo.- ("Jirón Azángaro" cuadra 6). También en "La Faltriquera del
Diablo", dice que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad
en lotes o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y
huerta o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por
el nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Juan Pablo",
que se llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Juan Simón.- ("Jirón Unión" cuadra 11). Palma, en su misma tradición, "La
Faltriquera del Diablo", cuenta que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área
de la ciudad en lotes o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran
patio y huerta o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas
por el nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Juan Simón",
que se llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Judíos.- ("Jirón Huallaga" cuadra 2). En "La Faltriquera del Diablo", Palma
afirma que "Cuando la Inquisición celebraba auto público de fe, colocábanse
en la esquina de la que, con ese motivo, se llamó calle de Judíos, un cuadro con
toscos figurones, que diz representaban la verdadera efigie de los reos, rodeados
de diablos, diablesas y llamas infernales" (399). Además, en "La gatita de Mari-
Ramos que halaga con la cola y araña con las manos" menciona a un mayordomo
de Palacio que "Tanto llegó a fastidiar a los pulperos de la esquina del Arzobispo,
esquina de Palacio, esquina de las Mantas y esquina de Judíos [... ] que acordaron
no venderle más huevos" (728); en "Los caballeros de la capa" cuenta que a
un conquistador "le Confiscaron su fortuna", "dejándole por vía de limosna
el desmantelado solar de Judíos" (54-55); y en "Una moza de rompe y raja!" se
87
La antiguas calles de Lima en las Tradiciones de Ricardo Pahua
refiere a una mujer que tenía "un tenducho o covachuela de zapatos en la calle
de Judíos, bajo las gradas de la Catedral" (969). También, en "Ño Veintemil"
menciona las "covachuelas, en las gradas de la Catedral y calle de Judíos" (667);
en "Don Tadeo López, el condecorado" dice que "En la calle de Judíos existe
todavía un callejón que todos los limeños conocemos con el nombre de callejón
de López" (883); en "De menos hizo Dios a Cañete" cuenta que de jóvenes,
don Ambrosio O'Higgins (muchos años después virrey del Perú) y don Juan
Domingo González de la Reguera (que fue arzobispo de Lima), "Alquilaron en la
esquina de Judíos una covachuela casi fronteriza al portal de Botoneros" (757);
en "El pleito de los pulperos" menciona a los bodegueros establecidos en las
esquinas de las Mantas, Santo Domingo, Arzobispo y esquina de Judíos o del
Jamón, en la plaza mayor" (741); y, por último, en "La segunda Inquisición"
registra a "Don Tadeo López, librero e impresos en la calle de Judíos, denunciado
en 1812 de propagandista de impiedades (1289).
La Riva.- ("Jirón lea" cuadra 4). Asimismo, en "La Faltriquera del Diablo",
dice que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes
o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta
o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el
nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "La Riva", que se
llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Lártiga.- ("Jirón Camaná" cuadra 4). En "Un litigio original" narra el gran
pleito entre el conde de Sierra bella y el marqués de Santiago. El primero,
estando en la calle de Lártiga, le ordenó a su cochero que volteara a la
izquierda, hacia la calle de Lescano. "Al doblar ésta la esquina de Lártiga, se
halló de sopetón con el carruaje del marqués de Santiago, también en actitud
de torcer la bocacalle de Lescano" (488-489). El pintor don Teófilo Castillo ha
inmortalizado esta escena, con un famoso óleo. Además, en "La Faltriquera del
Diablo" dice que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad
en lotes o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y
huerta o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por
el nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Lártiga", que se
llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
gran patio y huerta o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron
conocidas por el nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de
"León de Andrade", que se llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa
en esa calle (398).
Llanos.- ("Jirón Urubamba" cuadra 6). En "La Faltriquera del Diablo" dice que
"Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes o solares
bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta o jardín.
Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el nombre del
vecino más notable", una de ellas es la calle de "Llanos", que se llama así por
el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Manita.- ("Jirón Tacna" cuadra 1). En "La calle de la Manita" dice que "Al
costado del colegio del Espíritu Santo [... ] hay una calle completamente
deshabitada, pues en ninguna de sus aceras se ve casa ni covachuela". Por
la sombra que proyectaba un farol ubicado allí, "Un miedoso creyó ver en
esta sombra la forma de una mano, otro que talla vio peluda y un tercero le
descubrió las garras. Y tanto se habló de esto, que todo el vecindario de Lima,
nemine discrejJante, se persuadió de que el diablo andaba suelto y haciendo de
las suyas por lo que, desde entonces, se conoce con el nombre de calle de la
Manita" (675-676).
Mantas.- ("Jirón Callao" cuadra 1). En "La casa de Francisco Pizarra" indica
que "El primer año de la fundación de Lima (1535), solo se edificaron treinta
y seis casas, siendo las principales [... ] las de Juan Tello y Alonso Martín de
Don Benito, en la calle de las Mantas" y otras casas (35); y en "La gatita
de Mari-Ramos que halaga con la cola y araña con las manos" menciona a
un mayordomo de Palacio que "Tanto llegó a fastidiar a los pulperos de la
esquina del Arzobispo, esquina de Palacio, esquina de las Mantas y esquina
de Judíos [... ] que acordaron no venderle más huevos" (728). Además, en
"Predestinación" dice que "Existía por aquellos años [fines del siglo XVIII], en
90
César ColO1na Porcan
mitad de la calle de las Mantas, una casa de dos pisos con ínfulas de callejón,
casa que conocimos convertida en fonda y posada" (816); en "El caballero
de la Virgen" menciona "una familia que habitaba en la calle de las Mantas"
(296); en "¡Que repiquen en Yauli!" se refiere a un mulato alcohólico quien "al
llegar a la esquina de las Mantas se escondió bajo la alcantarilla de la acequia"
(1062); y en "Entrada de virrey" afirma que la procesión para recibir a un
nuevo representanre de la Corona "se dirigía por la calle de las Mantas hasta
la plazuela de San Sebastián" (538). Hay que agregar que en "El pleito de
los pulperos" menciona a los bodegueros establecidos en las esquinas de las
Mantas, Santo Domingo, Arzobispo y esquina de Judíos o del Jamón, en la
plaza mayor" (741); y en "Entre Garibaldi... y yo" cuenta que el francés don
Carlos Ledos "estableció una agencia mercantil en la calle de las Mantas".
Allí fue el gran héroe Garibaldi a buscarlo por haber escrito contra el rey don
Carlos Alberto (1121- 1123).
Mi cariño verdadero
diera a alguna de las tres;
mas lo fuerte del caso es
que yo no sé a cuál más quiero.
Cada una es como un lucero,
las tres por demás bonitas,
congojas danme infinitas,
y para hacer su elección
no atina mi corazón
entre las tres Mariquitas" .
Matavilela.- ("Jirón Lima" cuadra 3). En "La Faltriquera del Diablo" dice que
"Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes o solares
bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta o jardín.
Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el nombre del
vecino más notable", una de ellas es la calle de "Matavilela", que se llama así
por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Mendoza.- ("Jirón Chiclayo" cuadra 3). En "La Faltriquera del Diablo" dice
que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes o
solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta
o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el
nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Mendoza", que se
llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
I)ubreuil, "la única modista francesa que había por entonces [1853] en la calle
de Mercaderes" (1129).
Merced.- ("Jirón Unión" cuadra 6). En "La casa de Francisco Pizarro" indica
quc "El primer año de la fundación de Lima (1535), solo se edificaron treinta y
seis casas, siendo las principales la del tesorero Alonso Riquelme, en la calle de
1<1Merced o Espaderos" y otras casas (35). Además, en "Sabio como Chavarría"
cucnta que el año 1772 "un italiano o francés, llamado Francisquín, estableció
l'n la calle de la Merced un café (el primero que tuvimos en Lima)" (734-735).
Mercedarias.- ("Jirón Ancash" cuadras 10, 11). En "San Antonio del Fondo"
menciona a la calle "Mercedarias", en donde se encontraba el "callejón del
Fondo" (1092).
Mestas.- ("Jirón Huanta" cuadra 10). En "La Faltriquera del Diablo" dice que
"Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes o solares
bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta o jardín.
Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el nombre del
vecino más notable", una de ellas es la calle de "Mestas", que se llama así por
el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Negreyros.- ("Jirón Azángaro" cuadra 5). En "La Faltriquera del Diablo" dice
que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes o
solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta
o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el
nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Negreyros", que se
llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Núñez.- ("Jirón Ayacucho" cuadra 2). Palma, en "La Faltriquera del Diablo",
cuenta que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en
lotes o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y
huerta o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas
por el nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Núñez",
que se llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Además, en "Anales de la Inquisición" dice que "Formando ángulo con la
calle de Filipinas, en Lima, se ve hoy mismo, en la calle de Núñez, una casa de
anchuroso patio, la cual es conocida por los limeños con el nombre de la casa
de Olavide" (1268).
Orejuelas.- ("Jirón lea" cuadra 6). También, en "La Faltriquera del Diablo",
Palma afirma que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad
en lotes o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y
huerta o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas
por el nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Orejuelas",
que se llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
l'l1 lotes o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y
huerta o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por
d nombre de! vecino más notable", una de ellas es la calle de "Ortiz", que se
llama así por e! apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Otárola.- ("Jirón Tambo" cuadra 1). En "El rey de! monte" recuerda que
"la calle que se llama de Otárola debió su nombre a un acaudalado chala o
mozambique" (africano) (903); mientras que en "La Faltriquera de! Diablo"
dice que "Cuando Pizarra fundó Lima, dividióse e! área de la ciudad en lotes
II solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta
II jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por e!
nombre de! vecino más notable", una de ellas es la calle de "Otárola", que se
llama así por e! apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Palacio.- ("Jirón Unión" cuadra 2). En "La casa de Francisco Pizarro" indica
que "El primer año de la fundación de Lima (1535), solo se edificaron treinta
l
y seis casas, siendo las principales [... la de Nicolás de Ribera e! Viejo, en la
esquina de Palacio" y otras casas (35); en "La gatita de Mari-Ramos que halaga
con la cola y araña con las manos" menciona a un mayordomo de Palacio que
96
César Coloma Porcari
Pampa de Lara.- ("Jirón Cuzco" cuadras 10, 11, 12). En "Un libro condenado"
dice que la calle de la "Pampa de Lara" estaba poblada por "hampones, tahures,
bajamaneros, proxenetas, pecatrices y demás gentualla de pasaporte sucio y
verguenza traspapelada" (322).
Pando.- ("Jirón Carabaya" cuadra 7). En "La Faltriquera del Diablo" recuerda
que "Cuando Pizarra fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes o
solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta
o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el
nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Panda", que se
llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Pastrana.- ("Jirón Lima" cuadra 6). También, en "La Faltriquera del Diablo",
cuenta que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en
lotes o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y
huerta o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas
por el nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Pastrana",
que se llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Pdota.- ("Jirón Camaná" cuadra 6). En "El Demonio de los Andes" señala
que la casa de Francisco de Carvajal, apodado así, se encontraba en "el ángulo
de las calles conocidas hoy con los nombres de la Pelota y de los Gallos. El
terreno fue sembrado de sal, demolidas las paredes interiores y en la esquina de
1:1 última se colocó una lápida de bronce con una inscripción de infamia para
la memoria del propietario. A la calle se le dio el nombre de calle del Mármol
de Carvajal" (81).
hace poco más de veinte años, veíanse en la plaza mayor de Lima, dos cruces
de madera incrustadas en la pared. Una de ellas estaba sobre el arco del portal
que conduce al callejón de Petateros" (105); y en "Un cerro que tiene historia"
cuenta hasta 1537 la misa dominical se celebraba en la plaza mayor, en altar
portátil que se colocaba frente al callejón de Petateros" (43). También, en
"La venganza de un cura" menciona "la picota o rollo que vecino a la horca
existía frente al callejón de Petateros" (1105); y en "El castigo de un traidor"
dice que "en la puerta de palacio se colocó la caballería del virrey; frente al
callejón de Petateros, la caballería de milicias; en las gradas de la Catedral, las
dos compañías del comercio" (584).
Pilitricas.- ("Jirón Ocoña" cuadra 2). En "La Faltriquera del Diablo" dice
que "ingenuamente confesamos que, a pesar de nuestras más prolijas
investigaciones, nos ha sido imposible descubrir" el origen del nombre de la
calle de "Pilitricas" (399).
Polvos Azules.- ("Jirón Santa" cuadra 1). En "La Faltriquera del Diablo" cuenta
que "Polvos Azules llamóse la calle en donde se vendía el añil" (398). Además,
en "Una aventura del virrey poeta" cuenta que la viuda de un decapitado por la
justicia española vivía en "una casa con fondo al río en la calle de Polvos Azules"
(307); y en "Entre Garibaldi. .. y yo" cuenta que "La casa de Malagrida fue la que
forma el ángulo de las calles de Palacio y Polvos Azules, con grandes almacenes
en la parte baja". En ella vivó el gran héroe italiano Garibaldi (1124).
Pregonería.- ("Jirón Arequipa" cuadra 4). En uno de "Los refranes mentiroso", "El
gozo en el pozo", don Ricardo Palma recuerda "el conventillo o casa llamada de la
Pregonería", en el área en que se encuentra la parroquia de San Marcelo (144-145). ,
J
99
La antiguas calles de Lima en las Tradiciones de Ricardo Palma
Rastro de San Francisco.- ("Jirón Ancash" cuadra 2). En "La Faltriquera del
Diablo" afirma que "Rastro de San Francisco y Rastro de San Jacinto nombráronse
aquellas en donde estuvieron situados los primeros carnales o mataderos públicos"
(398). Además, en "El mejor amigo ... un perro" se refiere a una dama que fue su
"vecina en el Rastro de San Francisco" (858); y en "Anales de la Inquisición"
cuenta que la beata Agustina Angela Carranza "iba, un día lluvioso, por la calle
del Rastro, y que por cuestión de acera tuvo reyerta con un fraile francisco. Este
cogió a la beata del brazo y la hizo caer sobre el lodo de la calle" (1230).
personaje que vivía en "un pequeño cuarto con puerta a la calle de la Recoleta"
(658); en "¡ ¡Buena laya de fraile!!" habla de un personaje que "vivía en casa de
un amigo en la calle de la Recoleta" (917).
Sacristía de Santa Ana.- ("JirÓn Huanta" cuadra 7). En "Más malo que
Calleja", al referirse a la "calle de la Sacristía de Santa Ana", indica que "es
calle ancha como conciencia de diputado ministerial" (902).
San Agustín.- ("Jirón lea" cuadra 2). En "Predestinación" señala que "El teatro
actual había sustituido a otro que, desde 1602 hasta 1661, existió en la calle
de San Agustín, en la casa conocida aún por la de la Comedia Viej a" (814).
En "Tajo o tejo", una de sus "Tradiciones en salsa verde", afirma que "El único
teatro que, por los años de 1680, poseía Lima, estaba situado en la calle de
San Agustín, en un solar o corralón que, por el fondo, colindaba con la calle
de Valladolid" (Palma 1973: 26). Por último, en "Anales de la Inquisición"
cuenta que la beata Agustina Angela Carranza "yendo un día por la calle de
San Agustín la enamoró el pulpero de la esquina" (1234).
San Antonio.- ("Jirón Lampa" cuadra 6). En "¡Buena laya de fraile!" afirma que
"La casa que habitó Pezuela, antes de ser virrey, fue la llamada hoy de los Ramos,
en la calle de San Antonio, vecina al monasterio de la Trinidad" (917).
San Bartolomé.- ("Jirón Ayacucho" cuadra 9). En "Más malo que Calleja" cuenta
que "venía por la calle de San Bartolomé" un grupo de soldados de un regimiento
español "y se lanzaron sobre el paisanaje, hiriendo a roso y velloso" (902).
••
101
La antiguas calles de Lima en las Tradiciones de Ricardo Palma
San Carlos.- ("Jirón Azángaro" cuadra 8). En "María Abascal" don Ricardo
!'alma cuenta que "El arzobispo cedió a la Abascal [María Abascal] dos
habitaciones en la casa de pobres que en la calle de San Carlos posee el
;lrZobispado" (957-958).
San Francisco, callejón de.- ("Jirón Amazonas" cuadra 1). En "El encapuchado"
dice que "Por el mes de noviembre del año 1651 era preciso estar curado de
espantos para atreverse a pasar, después del toque de queda, por el callejón
de San Francisco. Entonces, como ahora, una de las aceras de esta calleja,
larga y estrecha como la vida del pobre, la formaban casas de modesto aspecto,
con fondo al río; y la fronteriza era una pared de gran altura, sin más puerta
que la excusada del convento de los padres seráficos". Menciona además a un
acaudalado comerciante que "vivía en una casa del susodicho callejón de San
Francisco, vecina a la que hoyes templo masónico" (394-395).
San José.- ("Jirón Junín" cuadra 3). En "Una tarjeta de visita" afirma el
tradicionista que la casa del marqués de Fuentehermosa estaba ubicada en "el
ángulo de las calles de San José y Santa Apolonia" (908).
San Juan de Dios.- ("Jirón Unión" cuadra 9, hoy plaza San Martín). En
"Conversión de un libertino" cuenta que en el cataclismo de 1746, "un jinete
[... ] cruzó el Rastro de San Jacinto y la calle de San Juan de Dios" y llegando a
la iglesia de la Merced, entró a caballo hasta el altar mayor, gritando "¡El mar
se sale!", anunciando el maremoto del Callao (574).
San Sebastián.- ("Jirón lea" cuadra S). En "Un virrey hereje y un campanero
bellaco" cuenta de las "idas y venidas nocturnas por la calle de San Sebastián"
del virrey conde de Alba de Aliste, el cual, por miedo al campanero de San
Agustín, no pasaba por esa plazuela "cuando le ocurría ir de galanteo a la
calle de San Sebastián (405); y en "La procesión de ánimas de San Agustín",
al referirse a este asunto, dice que "Dos viejas declararon con juramento,
que desde la calle de San Sebastián habían visto las luces de los cirios" de la
procesión (487).
Santa Apolonia.- ("Jirón Lampa" cuadra 3). En "Una tarjeta de visita" recuerda
que la casa del marqués de Fuentehermosa estaba ubicada en "el ángulo de las
calles de San José y Santa Apolonia" (908).
Santo Cristo. - ("Jirón Huay las" cuadra 1). En "La segunda Inquisición" registra
a "Cipriano (no se sabe el apellido)", que "vive en la calle del Santo Cristo,
denunciada por brujerías" (1289).
Suspiro.- ("Jirón Jauja" cuadra 4). En "La Faltriquera del Diablo" dice
que "ingenuamente confesamos que, a pesar de nuestras más prolijas
investigaciones, nos ha sido imposible descubrir" el origen del nombre de la
calle del "Suspiro" (399).
103
La anti[!;uascalles de Lima en las Tradiciones de Ricardo Palma
Tobal.- ("Jirón Cuzco" cuadra 9). En "La Faltriquera del Diablo" dice que
"Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes o solares
hastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta o jardín.
Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el nombre del
vecino más notable", una de ellas es la calle de "Tobal", que se llama así por el
apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Toma, callejón de la.- ("Jirón Arica" cuadra 1). En "La misa negra", al tratar
sobre la beata Ña San Diego, recuerda que vivía, "me parece que la estuviera
viendo, en un cuartito del callejón de la Toma, como quien va para los baños
de la Luna, torciendo, a mano derecha" (833).
Trapitos.- ("Jirón Abancay" cuadra 2). En "Un pronóstico cumplido" cuenta que
el 19 de febrero de 1564, "después de la media noche descendía un embozado,
con ayuda de una escala de cuerda, de un balcón situado en el ángulo que hoy
forman la plaza de la Inquisición y la solitaria calle de los Trapitos" (177).
Villegas.- ("Jirón Cailloma" cuadra 6). En "La Faltriquera del Diablo" dice que
"Cuando Pizarra fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes o solares
bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta o jardín.
Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el nombre del
vecino más notable", una de ellas es la calle de "Villegas", que se llama así por
el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Yaparió.- ("Jirón Cañete" cuadra 3). Don Ricardo Palma en su tradición "La
Faltriquera del Diablo", afirma que "ingenuamente confesamos que, a pesar
de nuestras más prolijas investigaciones, nos ha sido imposible descubrir" el
origen del nombre de la calle de "Yaparió" (399).
Zamudio.- ("Jirón Cuzco" cuadra 6). En esta misma tradición, titulada "La
Faltriquera del Diablo", Palma cuenta que "Los bizcochitos de la Zamudio
105
¡,lIlIlIti,!!:uas calles de Lima en las Tradiciones de Ricardo Palmll
·rt'" Inl 1IIIIIiI;1 una pastelera de este apellido, que quedó por nombre de la
1," ( WH),
~••III. ("/111111 11cayali" cuadra 5). También, en "La Faltriquera del Diablo",
ltUI11 111'11111 <1111'
"Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad
1ft
,""'111 .!¡I!'l'Shilstante
11111'.l'I,lIdil\'
',' Iksde entonces
MI espaciosos
casi la para
mitadque
de cada casa fueron
las calles tuvieraconocidas
gran patiopory
_, tlllllll'lI'
IIIIlnll dl'l1,II'IlL'llido
11_11'"1 vl'l'ino másdenotable", una tuvo
alguien que de ellas es laencalle
su casa esa de "Zavala",
calle (398). que se
NUI",'
Iloy Antes
dil'n 1Iltal fama a una pastelera de este apellido, que quedó por nombre de la
Iltlll'" (398).
!'¡,irate.- ("Jirón Junín" cuadra 4). Asimismo, en "La Faltriquera del Diablo",
IllIrllla que "Cuando Pizarro fundó Lima, dividióse el área de la ciudad en lotes
tI Sl llares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y huerta
tI j;¡rdín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueron conocidas por el
Illllllhre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Zárate", que se
ILlIlla así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
1':lvala.- ("Jirón Ucayali" cuadra 5). También, en "La Faltriquera del Diablo",
I':dma cuenta que "Cuando Pizarra fundó Lima, dividióse el área de la ciudad
\'11 lotes o solares bastante espaciosos para que cada casa tuviera gran patio y
hllerta o jardín. Desde entonces casi la mitad de las calles fueran conocidas por
\'1 nombre del vecino más notable", una de ellas es la calle de "Zavala", que se
llama así por el apellido de alguien que tuvo su casa en esa calle (398).
Nota.-
Hoy Antes