Sunteți pe pagina 1din 11

ESCUELA NORMAL SUPERIOR DE CD. MADERO, TAM.

– MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
ASIGNATURA: BASES JURÍDICAS Y LEGISLACIÓN EDUCATIVA EN MÉXICO FECHA: 21 DE ABRIL DEL 2007
ASESOR: MAESTRO JOSÉ GUADALUPE PADRÓN MELÉNDEZ ENSAYO: FEDERALISMO EDUCATIVO
ALUMNO: ABEL SANTIAGO MARTÍNEZ

FEDERALISMO EDUCATIVO EN MÉXICO

INTRODUCCIÓN

Es sabido que la administración pública tiene diversas tareas y compromisos que la colocan
ante responsabilidades sociales y que superan el simple ámbito de las tareas recurrentes
que cotidianamente desempeña. Unas veces de manera expresa, otras de manera implícita,
esta tiene que prestar precisamente el servicio especializado en la administración de los
bienes públicos, de los bienes que deben servir para el beneficio de la sociedad en su
conjunto y hacerlo de la mejor manera.

Este trabajo tiene como finalidad analizar el Federalismo educativo en México, para ello se
abordan brevemente algunos tópicos inherentes que tienen que ver con antecedentes
históricos y época actual. Las condiciones de instauración del régimen político, el contexto
que obligó a adoptar un federalismo mal entendido en la letra y un centralismo en los hechos,
y que durante todo el periodo de vida independiente ha resultado en un sistema de toma de
decisiones públicas generalmente alejado del sentir y vivir de los ciudadanos.

Obviamente se analiza el tema educativo, muestra el desgaste propio de un monstruo


sociopolítico en el que los receptores del servicio escasamente pueden influir en su
administración, en su supervisión, en su desempeño, dada la gran madeja de intereses en
juego. Especialmente del ámbito educativo se señala el esfuerzo que, al parecer con cierta
seriedad, inició el gobierno de la república a través del Acuerdo Nacional para la
Federalización Educativa de 1992, y los detalles de su aplicación que a la fecha no ha
aterrizado en los municipios, los que siguen siendo ajenos al desempeño de la escuela
pública, así como a los criterios de asignación de maestros, de construcción escolar, o de
las necesidades de cobertura, entre otros.

El federalismo que coincide con las vías democráticas, tiene que culminar, para ser efectivo,
en un municipalismo de hechos, en un municipalismo de carne y hueso, de facultades y de
dineros, de eficacia gubernamental y de honestidad política tal que redunde en una
1
ESCUELA NORMAL SUPERIOR DE CD. MADERO, TAM. – MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
ASIGNATURA: BASES JURÍDICAS Y LEGISLACIÓN EDUCATIVA EN MÉXICO FECHA: 21 DE ABRIL DEL 2007
ASESOR: MAESTRO JOSÉ GUADALUPE PADRÓN MELÉNDEZ ENSAYO: FEDERALISMO EDUCATIVO
ALUMNO: ABEL SANTIAGO MARTÍNEZ

generación de confianza social, básica para emprender los retos de una modernización
integral del hábitat humano por excelencia, la comunidad y el municipio mexicanos.

O sea, que el federalismo auténtico de México, o la aplicación del nuevo federalismo que
propuso el Presidente Zedillo desde su primer año de gobierno, debería de concluir en la
redistribución del poder, concretada en la ampliación de facultades legales cuando sea
menester a los estados y municipios, de la dotación de recursos económicos, materiales, de
la asesoría profesional para la elaboración de planes estratégicos de desarrollo a nivel
regional o municipales, y la formación de una cultura donde la responsabilidad la asuman
todos y cada uno de lo mexicanos y se revierta el lastre de todo esperarlo del gobierno y de
cuanto no se logra culpar a este monstruo del imaginario político que tenemos los
mexicanos.

2
ESCUELA NORMAL SUPERIOR DE CD. MADERO, TAM. – MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
ASIGNATURA: BASES JURÍDICAS Y LEGISLACIÓN EDUCATIVA EN MÉXICO FECHA: 21 DE ABRIL DEL 2007
ASESOR: MAESTRO JOSÉ GUADALUPE PADRÓN MELÉNDEZ ENSAYO: FEDERALISMO EDUCATIVO
ALUMNO: ABEL SANTIAGO MARTÍNEZ

DESARROLLO

La educación es una actividad eminentemente social que ha permitido preservar la cultura,


asimilar y desarrollar la ciencia, ampliar el estado de las artes, afianzar la libertad y socializar
al individuo. México, con su rezago económico manifiesta la escasez de recursos humanos
calificados y el bajo desarrollo cultural de nuestros pueblos, obliga a regresar al pasado para
encontrar en los orígenes un sentido de utilidad social a la educación. Esto debiese permitir
reintegrarle su función como instrumento de movilidad social en favor del bienestar de la
amplia mayoría de los mexicanos. Esto afecta negativamente el proceso educativo,
propiciando que disminuya en gran medida la capacidad de los educadores en cada nivel de
enseñanza para transmitir conocimientos; asimismo, ha propiciado que funcionarios sin
escrúpulos y mucho menos vocación de servicio ocupen posiciones directivas y que aún
exista un alto índice de población analfabeta.

El establecimiento de un sistema educativo público en México se remonta hasta mediados


del siglo XIX, cuando las tendencias liberales de la época de la Reforma se impusieron en la
Constitución de 1857, la cual asignó la responsabilidad de la educación, sobretodo al nivel
elemental a los estados que formaban la Federación. En el contexto revolucionario,
Venustiano Carranza impulsó desde 1915 la municipalización de varios aspectos de la
actividad pública, incluyendo la educación, lo que quedó plasmado en la Constitución de
1917 con consecuencias negativas inmediatas para las escuelas, cuya operación regular no
podían asegurar los municipios, que en una amplia mayoría no contaba con recursos
suficientes.

No fue sino hasta Vasconcelos que los esfuerzos por establecer y encadenar
coherentemente entre sí una visión del mundo y del hombre, un conjunto de valores, una
teoría del conocimiento y una teoría educativa empezaron a estar muy cerca de formar una
verdadera filosofía educativa lógicamente organizada. La iniciativa de transferir la
responsabilidad de la educación al nivel federal recibió el apoyo entusiasta del magisterio, lo
que llevó a la creación de la SEP en 1921. Varios estados de la República firmaron
convenios con el gobierno federal, según los cuales cada entidad mantenía el control del
3
ESCUELA NORMAL SUPERIOR DE CD. MADERO, TAM. – MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
ASIGNATURA: BASES JURÍDICAS Y LEGISLACIÓN EDUCATIVA EN MÉXICO FECHA: 21 DE ABRIL DEL 2007
ASESOR: MAESTRO JOSÉ GUADALUPE PADRÓN MELÉNDEZ ENSAYO: FEDERALISMO EDUCATIVO
ALUMNO: ABEL SANTIAGO MARTÍNEZ

sistema educativo preexistente y seguía asegurando su sostenimiento, en tanto que la SEP


debería de asumir la responsabilidad de ampliar el sistema educativo en las áreas
previamente no atendidas. De esta forma surgieron los sistemas educativos duales
(estatales-federales) en casi veinte entidades del país.

El proceso se interrumpió durante la década de 1925 a 1935, y se reanudó al final del


sexenio del presidente Lázaro Cárdenas, pero con una concepción centralista más marcada,
que hizo que las entidades que firmaron convenios con la Federación respecto a sus
sistemas educativos lo hicieran en términos diferentes, cediendo a la SEP tanto el control de
los elementos preexistentes, como la responsabilidad de las futuras ampliaciones de los
servicios educativos. Así surgieron los sistemas casi exclusivamente federales de las
entidades federativas mexicanas restantes.

Por más de tres décadas, de 1940 a principios de los años setenta, el sistema educativo
nacional funcionó con un enorme subsistema federa en las 32 estados de la República, y una
veintena de subsistemas estatales, obligados también a seguir los planes y programas
establecidos por la SEP, desde que las modificaciones a la Constitución hechas en el
sexenio cardenista confirieron al Congreso de la Unión la facultad de decidir sobre la
educación, por encima de los estados de la Federación.

Esto permite valorar tanto el tamaño del reto federalista adoptado desde el siglo XIX como
los esfuerzos sociales que todavía se necesitan para cumplir con el elevado costo de un error
histórico que desde el primer momento chocó con la realidad de entonces y la realidad
actual. Para adecuarnos al modelo federal, todavía es preciso seguir modificando la realidad
de nuestra vida política, y esto es necesario para la democratización en amplias zonas del
ámbito sociopolítico del país. Un ámbito legal federalista y una práctica política centralista,
este es el resultado de nuestra evolución política en la que los imperativos de la realidad se
impusieron a los imperativos del deseo, del suelo, del ideal despegado del terreno político.

4
ESCUELA NORMAL SUPERIOR DE CD. MADERO, TAM. – MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
ASIGNATURA: BASES JURÍDICAS Y LEGISLACIÓN EDUCATIVA EN MÉXICO FECHA: 21 DE ABRIL DEL 2007
ASESOR: MAESTRO JOSÉ GUADALUPE PADRÓN MELÉNDEZ ENSAYO: FEDERALISMO EDUCATIVO
ALUMNO: ABEL SANTIAGO MARTÍNEZ

La centralización de la escuela pública que posteriormente se dio y con la que vivimos, es


una expresión nítida de la fuerza con la que la perversión federalista se ha venido
imponiendo en todo el país.

Con todo, la historia de la escuela pública en el tiempo que siguió a la creación de la


Secretaría, tuvo el enorme mérito de haber actuado con lealtad al concepto federalista,
porque un número muy grande de nuevos docentes fueron distribuidos en la mayoría de los
municipios del país para enseñar lo más elemental: leer, escribir, operaciones aritméticas
básicas e historia, con el fin de combatir la ignorancia que habían dado lugar, entre otras, a la
guerra cristera. Es el periodo glorioso de la escuela pública mexicana, la escuela rural
mexicana que, todavía hoy, se enarbola como una época de enorme legitimación política
para el estado mexicano. Este es, a la vez, el periodo en el que el estado ha estado más
próximo a una muestra de auténtico federalismo.

De esta forma podemos conceptualizar al Federalismo como un sistema político y de


gobierno basado en el reparto del poder y las competencias entre una entidad estatal central
y otras que voluntariamente se subordinan a este, guardándose márgenes variables de
actuación. Se aplica también el concepto de federalismo al sistema en el que varios estados
que, rigiéndose cada uno por leyes propias, están sujetos en ciertos casos a las decisiones
de un gobierno central. 1

Por lo tanto, el federalismo surge propiamente de la unión de entidades con el objeto de


conformar una república representativa, democrática, federal y soberana, enfatizando
siempre que esta, la soberanía reside originalmente en el pueblo.

En México se viene dando desde principios de los años noventa una renovada polémica
acerca del tema federalista. Así es como se ha acuñado el concepto de “nuevo federalismo”,
el cual pretendería una redistribución de recursos, facultades y atribuciones a favor de las

1
Bobbio, N. Diccionario de Política, Siglo XXI, México, 1981

5
ESCUELA NORMAL SUPERIOR DE CD. MADERO, TAM. – MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
ASIGNATURA: BASES JURÍDICAS Y LEGISLACIÓN EDUCATIVA EN MÉXICO FECHA: 21 DE ABRIL DEL 2007
ASESOR: MAESTRO JOSÉ GUADALUPE PADRÓN MELÉNDEZ ENSAYO: FEDERALISMO EDUCATIVO
ALUMNO: ABEL SANTIAGO MARTÍNEZ

entidades federativas, y tendiente a una paulatina descentralización de la toma de


decisiones.

El nuevo federalismo, como parte del discurso del expresidente Zedillo pretendería crear
mayores espacios de participación política en los estados, donde el conjunto de
comunidades contribuya más a la búsqueda y aplicación de soluciones eficaces a los
problemas de la propia entidad y de sus comunidades, teniendo como propósito fundamental
que tanto los estados como los municipios cuenten con atribuciones más amplias para poder
llevar a cabo los programas prioritarios de desarrollo y, como consecuencia, exista una mejor
distribución de recursos entre los entes gubernamentales.

Como notamos, el federalismo no es nuevo en México, desde el inicio de la vida


independiente de México los mexicanos comenzaron a plantear la necesidad de encontrar un
modelo de gobierno que permitiera dotar de autonomía y capacidad de decisión a las
entidades componentes del nuevo país para su régimen interno. El federalismo fue la
respuesta, pero su implantación habría de costar grandes sacrificios.

Con todo y su implantación en los textos constitucionales sucesivos, en la realidad lo que se


dio fue un modelo de relaciones institucionales centralizado, que desde su origen se dio a la
tarea de dotar de facultades administrativas, financieras, jurídicas, políticas, económicas y
militares al gobierno federal en detrimento de las entidades.

El federalismo, la forma de organización política federal, es la que constitucionalmente


impera para la nación mexicana. Así pues, real o sólo formal, el hecho es que las decisiones
públicas se toman bajo una figura jurídico-política que las legitima y da sentido y que es
precisamente la del federalismo.

Ahora bien, una vez contextualizado al Federalismo, veamos como se encuentra el


federalismo educativo; por cierto, su importancia radica básicamente en que es el sector que
llega de manera directa a un mayor número de gente y en los que es más palpable el
contacto entre los gobernados y el gobierno. La mayor parte de la sociedad, por medio de las
6
ESCUELA NORMAL SUPERIOR DE CD. MADERO, TAM. – MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
ASIGNATURA: BASES JURÍDICAS Y LEGISLACIÓN EDUCATIVA EN MÉXICO FECHA: 21 DE ABRIL DEL 2007
ASESOR: MAESTRO JOSÉ GUADALUPE PADRÓN MELÉNDEZ ENSAYO: FEDERALISMO EDUCATIVO
ALUMNO: ABEL SANTIAGO MARTÍNEZ

escuelas públicas mantiene un contacto frecuente con la autoridad. No exagero al afirmar


que a través de los servicios educativos, gran cantidad de familias establecen quizás el único
lazo posible que llegan a tener con las autoridades durante toda su vida.

La importancia de este sector de gobierno no pasa por un asunto menor, como se mencionó,
desde 1824 se estableció constitucionalmente que es facultad exclusiva del estado promover
la ilustración, siempre y cuando no se perjudique la libertad que tienen las legislaturas para el
arreglo de la educación pública en sus respectivos estados.

En el año de 1973, conscientes ya de la errática conducción de la escuela pública, los


gobiernos federales iniciaron un proceso de revertimiento de la centralización educativa. Un
proceso gradual de desconcentración se habría puesto en marcha con la creación de cuatro
unidades de servicios descentralizados que cumplían funciones de administración de
personal, adquisición y distribución de materiales y procesos de información.

Así mismo, las dimensiones y complejidad del sistema educativo nacional hicieron que se
planteara la cuestión de su descentralización. Primero a través de medidas prácticas para
que trámites administrativos, que previamente sólo podían hacerse en la capital del país, en
lo sucesivo pudieran efectuarse en varios lugares, y luego, en marzo de 1978, con la
creación en cada estado de una delegación de la SEP, que se transformó después en
Unidad de Servicios Educativos a Descentralizar –USED-, el proceso avanzó en varias
etapas de desconcentración.

Al comenzar el sexenio 82-88, el expresidente Miguel de la Madrid anunció que uno de los
ejes de su gestión sería justamente la descentralización de la vida nacional, y ofreció en
particular transferir a los Estados el manejo de sus sistemas educativos, asegurando que ello
sucedería sin afectar los intereses del SNTE. Sin embargo, el sexenio terminó sin que el
ofrecimiento se cumpliera.

A mediados del sexenio 88-94, cuando se temía que pasaría una administración más sin
avances significativos en cuanto a descentralización, se firmó el Acuerdo Nacional para la
7
ESCUELA NORMAL SUPERIOR DE CD. MADERO, TAM. – MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
ASIGNATURA: BASES JURÍDICAS Y LEGISLACIÓN EDUCATIVA EN MÉXICO FECHA: 21 DE ABRIL DEL 2007
ASESOR: MAESTRO JOSÉ GUADALUPE PADRÓN MELÉNDEZ ENSAYO: FEDERALISMO EDUCATIVO
ALUMNO: ABEL SANTIAGO MARTÍNEZ

Modernización de la Educación Básica (ANMEB), entre el gobierno federal, los 31 estados de


la República y el SNTE, el 18 de mayo de 1992. Precedentes políticos necesarios para
promulgar la Ley General de Educación (LGE) el 9 de julio de 1993.

Sobre esto me pregunto, ¿qué es lo que incorporó la nueva Ley General de Educación de
1993 que hace aparecer al estado mexicano como consciente del error de interpretación en
la adopción del federalismo?

La Ley General de Educación de 1993 contiene una reforma del artículo tercero
constitucional producto del Acuerdo del 92, en el que se legisla la facultad de la federación
para de determinar los planes y programas de estudio de la educación primaria, secundaria
y normal para toda la República Mexicana , aunque preescribe que, al hacerlo, considerará la
opinión de los gobiernos de las entidades federativas y de los diversos sectores sociales
involucrados en la educación; lo que ya es decir algo, porque el derecho a opinar
específicamente sobre la materia, derecho que al ir acompañado de la fuerza legal para ser
escuchados los gobiernos estatales, abre la posibilidad de intervención en los criterios de
asignación de prioridades, recursos y programas de desarrollo educacional.

Por otro lado, la ley de marras procede a redefinir las facultades en materia educativa
exclusivas de la federación (art. 12 y otros), las exclusivas de los estados (art. 13 y otros), y
las concurrentes de la federación y los estados (art.14), capital de intervención local que se
había perdido en las leyes reglamentarias precedentes.

Ciertamente de ubicarnos en una postura de mayor exigencia, estas modificaciones legales


no implican una entrada plena en el federalismo educativo, apuntan hacia allá pero no llegan
aún a la meta. De hecho hay que percatarse que la desconcentración en el ámbito educativo,
llamada para este caso “federalización”, se detiene en cuanto que transfiere a los estados,
hasta la fecha, funciones operativas y de administración y control político y de recursos
materiales mínimos, pero los limita en cuanto a normatividad, dirección, planeación o
vigilancia.

8
ESCUELA NORMAL SUPERIOR DE CD. MADERO, TAM. – MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
ASIGNATURA: BASES JURÍDICAS Y LEGISLACIÓN EDUCATIVA EN MÉXICO FECHA: 21 DE ABRIL DEL 2007
ASESOR: MAESTRO JOSÉ GUADALUPE PADRÓN MELÉNDEZ ENSAYO: FEDERALISMO EDUCATIVO
ALUMNO: ABEL SANTIAGO MARTÍNEZ

De tal forma que si nos remitimos a la Ley General de Educación en su artículo 26, dice que
los gobiernos estatales “proveerán lo conducente para que cada ayuntamiento reciba
recursos para el cumplimiento de las responsabilidades a su cargo”, sin embargo, vemos que
el federalismo descentralizador cojea aún de manera que es preciso corregir llamando la
atención acerca de que como el federalismo tendría que concluir en el municipalismo para
recuperar toda la fuerza de una nación a favor de los más elevados propósitos de desarrollo
de la nación. La meta final del impulso del nuevo federalismo, es el municipio, la lucha, es el
municipalismo.

La eficiencia administrativa no es ajena a la eficiencia en el contacto humano personalizado y


responsable. El municipalismo es la vía del auténtico movimiento democrático para, otra vez,
federalizar a la federación.

CONCLUSIÓN

Complejo tema, para los neófitos algo complicado, sin embargo por el interés de conocer
acerca de la política educativa de nuestro México, bien vale la pena. Sin desconocer los
avances de la descentralización educativa en las últimas décadas, parece claro también que
falta mucho por hacer. En este sentido es importante subrayar dos ideas:

1) Además de los niveles federal y estatal, los sistemas educativos tienen, por lo menos,
otros dos: el nivel municipal (que podría hacerse coincidir con el nivel de la zona escolar) y el
de la escuela individual. Importa mucho entender que hay decisiones que resulta apropiado
tomar en uno u otro de esos niveles, y que en los sistemas educativos la cantidad e
importancia de las cosas que sólo pueden manejarse adecuadamente en el nivel inferior, el
de la escuela individual, es muy grande, por lo que cualquier sistema debe tener en cuenta la
necesidad de que las escuelas desarrollen la capacidad de manejarse en buena parte como
sistemas autónomos, al tiempo que todos los demás niveles de la pirámide (desde la zona
escolar y el municipio hasta la Federación, pasando por el nivel estatal) se organicen para
brindar un apoyo que permita que cada escuela funcione bien.
9
ESCUELA NORMAL SUPERIOR DE CD. MADERO, TAM. – MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
ASIGNATURA: BASES JURÍDICAS Y LEGISLACIÓN EDUCATIVA EN MÉXICO FECHA: 21 DE ABRIL DEL 2007
ASESOR: MAESTRO JOSÉ GUADALUPE PADRÓN MELÉNDEZ ENSAYO: FEDERALISMO EDUCATIVO
ALUMNO: ABEL SANTIAGO MARTÍNEZ

2) Derivada de la anterior, que subraya que, para ser adecuado, un proceso de


descentralización tiene que incluir una dinámica que vaya de la base hacia la cúspide,
además de la que descienda de arriba hacia abajo. Los cambios de tipo normativo y
estructural, que van delegando o, más bien, devolviendo diversas facultades del nivel
federal al estatal y, eventualmente, al municipal, deben complementarse con las
actividades de desarrollo de capacidades por parte de las instancias de la base del
sistema, las escuelas.

De tal modo que el municipalismo tiene, en el horizonte de su modernización presente y


futura, que librar una lucha en contra del centralismo que se ostenta federativo, para ganar
espacios de decisión que le devuelvan la confianza social que el gobierno federal ha perdido,
pero sobre todo pugnar por la devolución de una dignidad en el trato económico para poder
ejercer toda la eficiencia y la escrupulosa responsabilidad con los gobernados de que sea
posible.

El federalismo de hoy, de principios del siglo XXI, se le llame como se le llame: “nuevo” o
“auténtico”, lo que necesita realmente es ser simplemente federalismo, y eso significa que las
responsabilidades, el poder, los recursos económicos, las atribuciones legales, los deberes
éticos ante el gobernado, se tienen que repartir, que la capacidad de decidir tiene que ser
compartida entre los niveles de gobierno que configuran la topología del poder en México.

Una distribución menos radicalizada a favor del centro sobre los municipios en el aspecto
hacendario es urgente y necesaria; una planeación del desarrollo que en lo que toque y
afecte a los municipios no se haga sin su pleno acuerdo es indispensable en la mayor parte
de los asuntos económicos y comerciales; un sistema de educación en el que se reconozca a
las instituciones de educación superior de los estados y municipios mayoría de edad
intelectual para que engarcen sus propios proyectos de crecimiento, expansión y desarrollo a
las necesidades, recursos y potenciales de su territorio debe ser asumido por las autoridades
educativas; delegar a los municipios mexicanos y sus autoridades plena, completa,
intervención en los asuntos de la seguridad pública para que ya no se vea a los presidentes

10
ESCUELA NORMAL SUPERIOR DE CD. MADERO, TAM. – MAESTRÍA EN EDUCACIÓN
ASIGNATURA: BASES JURÍDICAS Y LEGISLACIÓN EDUCATIVA EN MÉXICO FECHA: 21 DE ABRIL DEL 2007
ASESOR: MAESTRO JOSÉ GUADALUPE PADRÓN MELÉNDEZ ENSAYO: FEDERALISMO EDUCATIVO
ALUMNO: ABEL SANTIAGO MARTÍNEZ

municipales encogerse de hombros ante el reclamo de sus gobernados, pues carece de


facultades, de recursos, de gente, de equipo, de todo.

Este panorama invoca la necesidad de revolucionar y de reestructurar la educación poniendo


nuevos cimientos, siendo imprescindible una revolución que fuera más allá de los parches y
los remiendos, cuyo primer paso es armonizar el contexto legal de acuerdo con la realidad
imperante; entre lo establecido jurídicamente en las normas y en lo que en la práctica se
venía realizando. De ahí, que un primer objetivo fuera el de hacer viable la convergencia
entre la instrucción legal y la real, así como en otros tiempos ocupó la atención el vínculo
entre ambas instancias para el Estado.

Revolucionar la educación equivale a combatir desigualdades sociales y regionales, sobre


todo las existentes entre el sector rural y el urbano; permitiendo que la educación, mediante
una creciente participación democrática, vuelva a ser el medio capaz de suprimir o reducir
desigualdades de origen.

Se requiere una revolución en materia educativa que cambie los usos y las prácticas
imperantes de la actividad educativa; que sea un movimiento caracterizado políticamente
para buscar la participación de la sociedad en su conjunto y la solución de los problemas que
afectan a la misma.

De esta forma doy por terminado mi trabajo, agradeciendo su atención.


Abel Santiago Martínez

11

S-ar putea să vă placă și