Rol del profesor Jefe en la Orientación

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Funciones del profesor jefe:

Es el pilar en el cual se sustenta el logro de los más importantes objetivos de la Orientación Educacional.
Con esta aseveración se resalta, en su verdadera dimensión, lo que es la labor docente ejercida por le profesor jefe en el proceso educativo
que tanto beneficia a los estudiantes.

Tradicionalmente se refiere al profesor jefe como el docente encargado y responsable de un curso, en todo lo concerniente al proceso
orientador de quienes lo componen. En esta perspectiva y estructura el profesor jefe se transforma en el motor del trabajo que se realiza
en el Consejo de Curso, desarrollo de unidades de orientación y actividades complementarias, con las cuales se favorece el desarrollo
integral de los educandos.

El profesor jefe se transforma de esta manera el primer orientador de su curso, dado que debe implantar el programa de orientación,
asimismo conocer más profundamente a sus estudiantes, los que se convertirán en objeto de especial atención, en lo individual y grupal.

El profesor jefe debe cumplir varias funciones que debe permitirle proporcionar a sus alumnos un clima de convivencia favorable tanto
para el desarrollo personal como colectivo.

Esta acción debe estar sustentada en un marco de adecuadas relaciones interpersonales en donde existe una mutua aceptación profesor –
estudiante. Esta relación está bien caracterizada cuando:

• Los estudiantes son considerados en todo lo que valen.

• Existe confianza plena en los educandos, en la realización de tareas que les son asignadas por sus profesores.

• Existe mutua simpatía.

• Profesor y estudiante, tanto en sus deberes como derechos, actúan tal como son.

Es fundamental que el profesor jefe infunda en su curso una alta moral, para que adquiera los valores del establecimiento como propios y
que, considerándose capaz de hacerlo, trabaje arduamente para llegar a ellos.

Esta moral y cohesión grupal debe verse reflejada en la sala de clases y fuera de ella, con la actitud, espíritu de superación, disciplina y
responsabilidad, estarán demostrando que verdaderamente el consejo de curso y todas las labores del profesor jefe son fructíferas.

El curso, estudiantes y profesores, propenderán a convertir el ambiente del aula, como en el de un verdadero hogar.

Frente al curso, el profesor jefe, más que un inspector que controla, debe ser un guía, un asesor, debe transformarse en un líder
democrático; más que imponer sus ideas, deberá encauzar positiva y adecuadamente las ideas del grupo, en el fondo deberá imponer
discreta supervigilancia, sobre todo en los asuntos que atañen a su curso, deberá estar siempre presente, para orientar correctamente las
situaciones que se plantean a diario al interior del grupo que está bajo su responsabilidad.

Esta laboriosa e incansable acción debe estar respaldada con su ejemplar rectitud y calidad profesional, digna de la que corresponde al
verdadero formador de niños y jóvenes.

El trabajo que realiza el profesor jefe en el aula deberá estar previamente planificado, con claros sistemas y metodologías de trabajo y una
permanente evaluación que entregue la información necesaria que permita tomar adecuadas decisiones. También es responsabilidad del
profesor jefe, recoger todo tipo de información acerca de sus estudiantes, el conocimiento de aspectos biológicos, psicológicos, socio
económico y pedagógico, ya que serán de gran utilidad para ayudar a sus educandos en la solución de situaciones problemáticas que se le
presenten.

En el consejo de curso tendrán que trabajar todos los estudiantes, para obtener un beneficio común, ante esto el profesor jefe, ejercerá una minuciosa
observación que le permitirá corregir algunas deficiencias que se presentan en el desarrollo de cada actividad. En este sentido se preocupara de que
nadie se margine del trabajo y cuando esto suceda deberá estar alerta, para averiguar las causas de dicho comportamiento.
Además, el profesor jefe, refuerza su acción procurando la participación activa de los padres y apoderados y no hay nada más cierto, que
estos agradecerán la oportunidad que se les brinda en beneficio de sus hijos; “Un profesor jefe que se preocupa de sus estudiantes, recibe
el sincero afecto y colaboración de los padres”.

Básicamente el profesor jefe debe enseñar a valorar, a conocerse, a aceptarse, lo que contribuye grandemente para que el educando, su
hijo espiritual, pueda proyectar sus ideales y vocación en beneficio de toda la comunidad nacional, para que trabaje por el bien común.
Dado que el profesor jefe es la primera instancia de orientación para sus estudiantes, debe promover, motivar y propiciar adecuadas
situaciones de aprendizaje basadas en una buena relación psicológica y un claro proceso de comunicación.