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Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 1

INDICADORES PSICOPATOLÓGICOS EN TÉCNICAS PROYECTIVAS.

Autor: ELSA GRASSANO.

Cáp. II “Breve delimitación teórica de neurosis, psicosis y psicopatías”

El diagnostico diferencial de grados de psicopatología tiene por objetivo


determinar, mas allá de las modalidades clínicas de comunicación, las características
cualitativas de estructuración y funcionamiento del aparato psíquico a través de la
investigación de los logros o perturbaciones que presentan las funciones mentales que
establecen relaciones con el mundo externo y con la realidad psíquicas.
Las categorías diagnosticas de grados de patología se refieren fundamentalmente
a la diferenciación entre neurosis y psicosis; me interesa considerar tb la psicopatía
como otra categoría diagnostica.
El pasaje evolutivo de los niveles primitivos de funcionamiento mental a los
niveles neuróticos se asienta en la posibilidad de establecer vínculos objetales
continentes. En establecimiento y asimilación de objetos internos con la cualidad de
símbolos dentro del yo promueven la integración y el crecimiento.
Estos objetos internos son motor y a la vez parte del desarrollo correlativo de
funciones psicológicas, q determinan cambios cualitativos para la vida mental. El
pasaje niveles neuróticos supone el cambio de un nivel de funcionamiento mental c
predominio de mecanismos violentos de identificación proyectiva evacuativa, ecuación
simbólica y pensamiento concreto a un creciente desarrollo de las funciones de la
percepción y discriminación de la realidad externa y psíquica, de las funciones de juicio
de realidad, manejo simbólico y progresiva adquisición de sentido de realidad.
La represión como mecanismo adaptativo marca la posibilidad de clivaje entre la
vida CC y la vida ICC. Tal clivaje se refiere a una membrana permeable, que, aunque
posibilita la separación de ambos aspectos de la realidad psíquica, permite al yo
conectarse con fantasías o recuerdos funcionalmente reprimidos. (Proceso primario-
proceso secundario)
Como mecanismo adaptativo mantiene operativamente disociadas las fantasías
ICC, que de ser CC en forma permanente imposibilitarían el contacto con la realidad.
Favorece el buen funcionamiento psíquico mediante el olvido de lo trivial, lo accesorio
y secundario.
Bion investigo esta cualidad de funcionamiento de la mente humana, a la que
delimitó como el área psicótica de la pdad. Considera la psicosis y la neurosis como dos
modos de funcionamiento mental que coexisten en toda pdad. Toda pdad, aun la más
integrada mantiene áreas de funcionamiento psicótico, en las que dominan mecanismos
de identificación proyectiva hostil y desorganizativa.
Bion plantea la noción de parte psicótica como un modo de funcionamiento
mental que se caracteriza por un ataque hostil y violento al aparato psíquico. Bion
afirma que en la psicosis esos ataques están dirigidos al ap psíquico y tienen por objeto
destruir todas las funciones destinadas a mantener el contacto con la realidad externa e
interna: percepción, memoria, atención, juicio de realidad y funciones de vinculación.
M. Klein formuló los orígenes del desarrollo psicótico como el producto de la
interacción de un monto exagerado de envidia constitucional, con le presencia de una
madre o sustituto incapaz de empatía las necesidades biológicas y psicológicas del niño.
Bion retoma estas formulaciones y privilegia la interacción entre un bb con un alto
monto constitucional de envidia y una madre incapaz de metabolizar las intensas
situaciones de pánico. El miedo a la muerte del bb no puede ser contenido por la madre,
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que además lo despoja de su sentido de vida, y lo devuelve al bb como un terror de igual


intensidad y carente de sentido. La intensidad del dolor psíquico, unida a la incapacidad
de tolerar la frustración, lleva a un ataque activo a la parte del ap psíquico que contiene
la percepción de dolor y de necesidad. Se ataca este aspecto y toda función psíquica
capaz de establecer ligamen con la realidad externa e interna en un intento de evitar el
dolor, pero a costa de la destrucción del ap psíquico.
En la neurosis el ap psíquico ha logrado organizarse en función de los
mecanismos adaptativos de represión. Los fracasos evolutivos están centrados en
alteraciones parciales en la resolución de la conflictiva inherente a la situación depresiva
infantil; cada modalidad neurótica elaboró distintos métodos defensivos tendientes a
evitar el dolor de esta situación, a través de nuevas disociaciones y parcializaciones del
objeto. La instalación de la situación depresiva corresponde al momento de desarrollo
de las funciones de discriminación, juicio de realidad, principio de realidad e instalación
de la represión como mecanismo evolutivo; marca, por lo tanto, el momento de pasaje
de la psicosis a la neurosis.
En la neurosis el conflicto central es la necesidad de instalar y reparar al objeto
bueno total en lucha con sentimientos ambivalentes que amenazan este logro. En la
psicosis el problema esta centrado en la necesidad de construir un ap mental como único
medio para salir del encierro persecutorio, pero al mismo tiempo cualquier función
psíquica es temida, por su cualidad de despertar conciencia de dolor y enfermedad, y
necesita ser sometida a nuevos y activos ataques hostiles, envidiosos y despojantes.
Faltan las pre-condiciones mínimas para establecer contacto con la realidad, para
desarrollar vínculos y cualquier función de síntesis e integración.
Las psicopatías ofrecen problemas diagnósticos y pronósticos específicos debido
a que como estructuración clínica pueden encubrir tanto personalidades psicóticas como
neuróticas, de cualquier modalidad. La pdad de base es la que en estos casos determina
el pronostico; la evolución es muy diferente si se trata, por ejemplo, de una psicopatía
defensiva de un cuadro histérico que fracasó como técnica defensiva, o si la psicopatía
encubre una pdad esquizofrénica o melancólica que evidencia un déficit de formación e
integración del ap psíquico.
El elemento central y común a las distintas personalidades psicopáticas es la
utilización de la comunicación y el contacto con otras personas, a fin de identificar
proyectivamente en ellos las ansiedades y conflictos que el yo no puede elaborar. El
psicópata necesita siempre uno o más depositarios que sufran en su lugar los conflictos
que mantiene escindidos de su pdad. Necesita proyectarlos y mantenerlos depositados
activamente dentro del otro para evitar todo peligro de reintroyeccion. Las funciones de
juicio y sentido de realidad pueden aparecer como logradas, desde un punto de vista
clínico, pero el código de valores y los significados que en función de este le adscriben
a los hechos de la realidad y a las relaciones interpersonales está seriamente alterado.
Manejan un código propio, al que subyace una alteración en la discriminación de bueno
y malo. Los impulsos seriamente hostiles y envidiosos orientan toda su actividad en el
logro de venganza y reivindicación.
El mecanismo central es la identificación proyectiva inductora, el conflicto o
emoción podrá corresponder a cualquier modalidad o punto de fijación, desde un
sentimiento de exclusión o celos hasta situaciones de disgregación o confusión. El
pensamiento y el lenguaje psicopáticos mantienen, desde un punto de vista formal, las
características lógico-formales propias del desarrollo adecuado del proceso secundario.
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Conceptualización de los test proyectivos desde la perspectiva de la teoría de las


relaciones objetales.

Los distintos test proyectivos ofrecen estímulos de estructuración ambigua o de


formas muy definidas pero poco usuales. El ps observa a partir de las respuestas del
sujeto su capacidad para dar forma, organización y sentido emocional a ese aspecto de
la realidad que el estimulo proyectivo representa. Cada producción proyectiva es una
creación que expresa el modo personal de establecer contacto con la realidad externa e
interna dentro de una determinada situación. Así toda producción proyectiva es el
producto de una síntesis personal.
Las laminas que el entrevistado debe integrar en un relato o la hoja en blanco en
la q debe dibujar operan como objetos que deben ser recreados. El entrevistado atraviesa
durante esta experiencia una intensa situación emocional, que comienza con el contacto
con ese objeto incompleto, que debe reconstruir a través de un intenso trabajo de
búsqueda de significados y establecimiento de nexos.
En este sentido cada producción puede concebirse como resultado y evidencia de
los intentos logrados y fracasados, en forma total o parcial, de la capacidad de
integración y reparación.
La hostilidad contra los objetos internos y contra la capacidad de pensamiento,
unión e integración interfiere la creatividad y da lugar a creaciones proyectivas con
distintos grados de fracaso en su integración, que se evidencia por desarticulación,
disgregación, empobrecimiento, ausencia de vinculación, ausencia de movilidad
emocional, falta de vitalidad.
Las tendencias organizativas y desorganizativas coexisten con diferentes grados
y cualidades en toda la pdad y de hecho dan lugar a áreas de producción adaptadas y
desorganizadas. La comparación de distintos aspectos de la producción de un mismo
entrevistado en cuanto al predominio de producciones desintegradas y rotas en relación
con otras enteras y armónicas nos dará información sobra áreas de adaptación y
enfermedad y sobre posibilidades de crecimiento o por el contrario de estereotipia o
regresión.
Diferenciaciones de las cualidades y características de las producciones
correspondientes a configuraciones psicóticas, neuróticas y psicopáticas:

 En las producciones correspondientes al funcionamiento psicótico es donde con


mayor claridad y dramatismo podemos observar el fracaso del entrevistado por
lograr producciones con algún grado de sentido e integración. El producto
proyectivo (la historia, el dibujo) adquiere características de objeto roto,
desintegrado, desarticulado y desvinculado. La lamina o la hoja en blanco opera
como disparador para la identificación proyectiva de aspectos minúsculos y
fragmentados del cuerpo y ap mental del entrevistado y da lugar a producciones
confusas y fragmentadas, con carencia de los mecanismos de ordenación e
integración propios del proceso secundario. El ataque activo a la capacidad de
percibir la realidad se evidencia en la incapacidad de “ver” la lamina y en el
desarrollo del proceso contrario: la lamina como objeto de realidad pasa a ser
poblada de partes minúsculas y disgregadas, que no están en la lamina sino que
son producto de la proyección de partes de la pdad el entrevistado (ojos, dedos,
piernas, animales, etc), o bien los personajes enteros son rotos y fragmentados.
La hoja en blanco pasa a tener un tratamiento similar: fragmentan la hoja en
muchas partecitas o hacen muchos dibujos de partes del cuerpo, objetos, partes
de animales que no tienen entre si relaciones lógico-formales, sino que
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evidencian la necesidad de evacuar mínimos fragmentos persecutorios e


informan sobre los intensos procesos de splitting que llevan a la confusión y
desintegración.
El daño de las funciones de percepción, discriminación, juicio y test de realidad
impiden el ajuste perceptual o la posibilidad de rectificación. Son frecuentes las
experiencias alucinatorias durante la toma de test.

 En las producciones con cualidades neuróticas está mantenida la percepción de


la realidad, el juicio de realidad y la adscripción de sentido o significado a la
realidad percibida. las tendencias desorganizativas afectan áreas de la pdad,
ocasionando inhibiciones, bloqueos, síntomas, pero sin alterar en forma notoria
la percepción e interpretación de la realidad. En la producción proyectiva esto se
evidencia en test verbales por omisiones o bloqueos en algunas de las laminas o
en zonas de éstas relacionadas con conflictos específicos, o por sobrevaloración
de aspectos de los objetos y minimización u omisión de otros (inteligencia,
bondad o belleza, etc) o privilegios de algún área de funcionamiento sobre otras
(sentir-pensar-actuar).

El entrevistado crea historias c la finalidad de impactar, paralizar, despertar


curiosidad, en suma, movilizar emocionalmente al entrevistador. Esto se evidencia por
la presencia de historias exageradas pero “que dicen poco”, no expresan emociones, no
aclaran la interacción, los personajes son incapaces de expresar emociones,
dependencia, empatía. La actitud emocional poco comprometida evidencia la
disociación emocional. Las dificultades para adecuarse el interrogatorio indican las
fallas reparatorias.

TEST DESIDETARIVO
Indicadores diferenciales de psicosis, psicopatía y neurosis.
Nueva hipótesis de abordaje al test.
Revisión del concepto de simbolización. Indicadores.

Para desarrollar indicadores diferenciales de respuestas psicóticas, neuróticas y


adaptativas en el Desiderativo, necesito plantear una nueva hipótesis de abordaje del
test.
En un trabajo anterior sobre las defensas en el test desiderativo, postulamos un
nuevo enfoque del test, que nos permitió investigar índices diagnósticos y pronósticos a
partir de las defensas. En ese trabajo partimos del contexto vincular establecido a partir
de la consigna (¿que es lo que mas le gustaría ser si no pudiera ser persona?) y
planteamos:
“La consigna le pide al examinado de manera explicita y directa que renuncie a su
identidad humana y le brinda la posibilidad de asumir otras identidades no humanas”.
“Implícitamente lo enfrenta con la muerte, en especial con la propia. El entrevistador es
el portador de la muerte, el objeto del que proviene la amenaza”.
“Tomando en cuanta esta situación vincular, se nos hizo evidente que las dificultades
para diagnosticar las defensas residían en que éstas no aparecen aisladas en el test, sino
que toda la verbalización expresa la organización defensiva ante el ataque implícito en
la consigna”.
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A través de las respuestas, verbales y corporales, que nos ofrece el examinado,


podemos observar el esfuerzo defensivo del Yo para recuperarse y absorber el impacto
sufrido y su modalidad defensiva prevalente.
El nuevo abordaje nos reveló la eficacia de este test para el diagnóstico de las
fantasías ICC defensivas predominantes en cada sujeto.
La primera parte de este test produce un impacto emocional intenso, porque propone
fantasear con la idea de la propia muerte, que es probablemente el conocimiento mas
resistido. El grado de desorganización que sufre el entrevistado depende de la tolerancia
y aceptación ICC o rechazo frente a este reconocimiento.
La segunda parte: ¿Qué es lo que más le gustaría ser…? O ¿Qué es lo que menos le
gustaría ser…? ofrece la posibilidad de asumir distintas personificaciones en la fantasía.
Es este juego de personificaciones fantásticas el que otorga cierto matiz lúdico al test.
Esta segunda parte propone como método para elaborar las ansiedades movilizadas
un trabajo de “creación” o de “recreación” de símbolos. La realización del test pone a
prueba, por lo tanto, la capacidad de simbolización, que en la vida mental es el método
de mayor eficacia para la resolución de ansiedades tanto depresivas como paranoides.
Subyace a cada elección, y a cada rechazo desiderativo, un complejo proceso de
selección Icc de vínculos y aspectos valorados y rechazados y de selección y de
búsqueda en el mundo interno de objetos de la realidad capaces de representarlos. Estos
objetos adquieren la capacidad de contener en si, la identificación proyectiva de los
vínculos y funciones seleccionadas. La respuesta desiderativa es producto de este
complejo proceso interno, y en este sentido cada elección es una creación personal, que
se vale se símbolos universales, pero que son nuevamente recreados para contener en
si, tanto la biografía como la historia personal de relaciones de objeto.
Cuando mayor es la capacidad del entrevistado para reparar su mundo interno
apelando a un trabajo de creación de símbolos, mayor será la posibilidad de modificar
las ansiedades movilizadas por la consigna. Esto se evidenciará por una creciente
capacidad para lograr respuestas altamente simbólicas y condensadoras de su situación
emocional. Los fracasos en esta capacidad se evidenciarán en distintas inadaptaciones al
test: bloqueo, secuencias desorganizativas, incongruencia entre el objeto y las
características asignadas.
El entrevistado vive y en realidad re-vive una situación de amenaza a su identidad,
de reiteración de una situación de pérdida y duelo. La posibilidad de enfrentarla y
modificarla o sucumbir al peso de la ansiedad depende de la capacidad para
reestructurar el mundo interno a través de la creación de símbolos representantes del yo
y de los objetos que está amenazado de perder.
La capacidad o incapacidad para lograr respuestas adecuadas (crear objetos-
símbolos) informa sobre el desarrollo logrado en el proceso de simbolización y, por lo
tanto, sobre el grado de integración del yo.

Proceso de simbolización. Diferencia entre símbolos, ecuación simbólica y seudo


símbolo.
Desarrollo evolutivo normal y patológico.

Concepto de símbolo. Proceso de simbolización.

Un símbolo es todo objeto, representación plástica, abstracta o verbal, que adquiere


capacidad representativa de otros objetos, representaciones y experiencias emocionales
(simbolizado), sin confundirse con éstos, en base a una ligazón constante de significado
(relación simbolizante).
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El objeto que adquiere la cualidad de representar a otro puede ser tanto una
representación plástica como una idea, un concepto abstracto, una palabra.
Cuando el proceso simbólico fracasa, nos encontramos (para tomar un ejemplo
dentro del lenguaje) con las reproducciones verbales imitativas, estereotipadas pero
despojadas de significado, de ciertos niños esquizofrénicos.
El símbolo logra sintetizar en si mismo, por sus cualidades plásticas, verbales o
abstractas, un contexto de significado y adquiere, en función de esto, la capacidad de
representar o rememorar. La construcción de cada símbolo mental supone un largo
proceso de múltiples y variadas experiencias de contacto emocional c la realidad. El
símbolo condensa estas experiencias y abstrae aquellos elementos emocionales comunes
a diversos vínculos con distintos objetos y en distintos tiempos y espacios.
En este sentido los símbolos son emergentes creativos de un largo proceso evolutivo
y conjugan en si situaciones vitales universales con la historia personal de relaciones
objetales, dando lugar a creaciones únicas.
M. Klein da fundamental importancia al proceso de simbolización, porque lo
considera el motor del desarrollo y la evolución mental, la base del interés por la
realidad psíquica y externa y el fundamento de la capacidad de reparación y
sublimación. Estructuralmente inscribe la simbolización en el yo como una función
basada en la capacidad yoica para establecer relaciones simbolizantes.
Todo símbolo adquiere sentido y significado siempre dentro de contextos
emocionales, dentro de relaciones vinculares especificas, por lo tanto, todo objeto-
símbolo supone la simbolización de una relación vincular.

Ecuación simbólica y seudosímbolo.

El fenómeno de equiparación entre el representante simbólico y lo simbolizado fue


denominado por Hanna Segan ecuación simbólica y abarca todos los procesos de
identificación y confusión entre el símbolo (sea éste una palabra, un objeto de la
realidad o una imagen) y la situación simbolizada.
La ecuación simbólica corresponde a los primeros intentos evolutivos de
simbolización. La posibilidad de establecer identificaciones entre objetos distintos se
fundamenta en la capacidad de que dos objetos distintos sean equiparados debido a un
vínculo afectivo de interés.
Es de utilidad hacer referencia al concepto de seudosímbolo, como fenómeno
intermedio entre símbolo y ecuación simbólica.
Refiriéndose a la psicopatía, los autores observan que estos pacientes utilizan
aparentemente símbolos, pero éstos, aunque tienen formalmente las características del
símbolo, conservan para el paciente el significado de ecuaciones simbólicas. Las
palabras no son utilizadas para comunicar experiencias emocionales, sino que son un
modo de acción, un vehiculo de acción para promover emociones y/o acción en los
otros. Las palabras son concebidas como objetos concretos portadores de emociones
violentas. Del mismo modo, los mensajes de los otros no son tomados en un sentido
simbolico, sino tb como acciones (órdenes, presiones) y las utiliza como acciones.

Proceso de simbolización. Desarrollo evolutivo normal y patológico.

En el desarrollo evolutivo normal el proceso parte en su momento inicial del


concretismo e indiferenciación entre el símbolo, lo simbolizado y el yo simbolizante,
hasta el logro de símbolos diferenciados que capacitan al yo para la relación con la
realidad psíquica y externa y sientan las bases para el desarrollo del pensamiento verbal.
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El logro de representaciones simbólicas supone cierto grado de madurez e


integración del yo basado en el pasaje de los mecanismos primitivos de identificación
proyectiva evacuativa al desarrollo progresivo de las funciones de percepción y
discriminación de la realidad, y del establecimiento de la introyección como mecanismo
central para la elaboración de las ansiedades derivadas de las relaciones de objeto. A la
vez el logro de estas representaciones simbólicas marca un cambio central en la vida
mental: los múltiples y diversos recuerdos de imágenes, ideas, que amenazan con
sobrecargar el ap psíquico pasan, a través de procesos de discriminación, síntesis y
abstracción, a estar contenidos y condensados en los símbolos.
Los primeros intentos del bb de establecer orden en la realidad y crear nexos entre
sus primeros objetos y los nuevos toman la forma de ecuaciones simbólicas.
El yo en este momento de la evolución aun no es capaz de desarrollar funciones de
cotejo y juicio de realidad; no es, por lo tanto, capaz de discriminar entre fantasía y
realidad, interno y externo. No logra aun conocer al objeto con sus características reales,
sino que lo construye en función de sus experiencias emocionales, cambiantes y polares.
La introyección permitirá rectificar progresivamente las fantasías a través de la realidad,
pero en este primer momento sus posibilidades de rectificación son escasas.
Las primeras concepciones sobre el pecho, están ecuacionadas y confundidas con las
emociones y sensaciones corporales. Por otra parte, los nuevos objetos de interés del
mundo externo son equiparados concretamente con el objeto pecho original, y la
representación interna en imágenes está equiparada con la presencia real del objeto. La
ecuación simbólica marca, en este sentido, el comienzo del desarrollo evolutivo del
proceso simbólico, que dará lugar, en el desarrollo normal al símbolo como producto de
la elaboración depresiva.
Correlativamente a la equiparación indiferenciada de los objetos de la realidad con
partes del yo y del objeto, subyace la equiparación de las representaciones mentales del
objeto con el objeto mismo. Las intensas ansiedades paranoides y tb depresivas que
movilizan al yo en la búsqueda de objetos de la realidad para ecuacionar con los objetos
primarios, dan lugar, en el contexto de la realidad psíquica, a la recreación de imágenes
del objeto. En un primer momento estas representaciones no tienen el sentido de tales,
sino que están confundidas y ecuacionadas con el objeto real.
Durante las primeras fases del desarrollo mental, así como en el desarrollo adulto
patológico, la ausencia del objeto no es concebida como tal, sino como una presencia
mala. El objeto malo como construcción mental es un objeto necesitado presente que
priva. La ausencia del objeto, evidente ante una situación de frustración, es una
presencia dolorosa: de hambre, de malestar, de tensión o de dolor, pero en suma, una
presencia mala. Para evadir esta relación hostil con un pecho malo presente, el yo
recurre a la gratificación alucinatoria de deseos, que implica remplazar la presencia
mala (ausencia) por la presencia del objeto idealizado.
En la gratificación alucinatoria de deseos domina la creencia mágica de
recuperación real del pecho, sobra la base de imágenes sensoriales de experiencias
satisfactorias con el objeto real. Tienen por finalidad negar la ausencia del objeto y la
frustración. El pecho alucinado no es para el bb una representación mental del pecho,
sino que es el “pecho”; la representación plástica (imagen) ocupa el lugar del objeto
simbolizado (pecho), conformando la experiencia mental que Hanna Segal denominó
“ecuación simbólica”.
Si la frustración prosigue paulatinamente, la presencia mala se impone y aquí el yo
puede resolver la situación de angustia por dos caminos: tolerar la frustración y buscar
métodos de modificación primitivos, apelando a su capacidad para provocar el
acercamiento del objeto pecho necesitado, o evadir la percepción de la necesidad
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dolorosa. Si la presión persecutoria es intolerable para el yo, puede encontrar como


salida patológica el ataque a la parte del ap mental que contiene la percepción de
necesidad (hambre por ejemplo).
En este modo de funcionamiento mental la representación del objeto asume la forma
de ecuación simbólica, y si el monto de ansiedad es intolerable, toda representación, ya
sea plástica o verbal, adquiere el significado de una violenta evidencia de que el objeto
no está presente. Se transforma en una presencia mala que desencadena una situación
emocional desesperante y da lugar al ataque hostil de la representación y de la función
simbolizante.
El reconocimiento de la ausencia del objeto necesitado y valioso es la precondición
que impulsará al yo a reconstruirlo en el mundo interno, a través de representaciones
simbólicas inicialmente plásticas (imágenes) y luego verbales (representaciones de
palabras, ideas, conceptos).
Así como la diferenciación entre presencia y ausencia es la precondición y el motor
para la construcción simbólica, los símbolos logrados aumentan la capacidad del yo
para tolerar nuevas experiencias de ausencia, de frustración por separación del objeto
necesitado.
En la evolución normal el logro de representaciones simbólicas deriva de la
elaboración de la situación depresiva infantil, e implica un momento evolutivo con
significativos cambios en la vida emocional e intelectual del bb, sobre la base de
procesos de integración y síntesis.
Es la situación de dolor por la ausencia de un objeto ahora re conocido como
necesitado la que promueve el intento de recreación interna del símbolo. En este caso la
representación esta diferenciada de la presencia concreta del objeto original, aunque en
su creación están sintetizadas múltiples experiencias reales de contacto con el objeto.
El símbolo (palabra mama) ya no es la violenta evidencia de que el obj no está ahí,
sino un modo de evocación y recuperación de experiencias emocionales buenas, un
modo de mantener la ligazón interna con el objeto necesitado y una esperanza de
reencuentro con el objeto en la realidad.
En este momento, la actividad de formación de símbolos y la actividad lúdica toman
un papel predominante. El bb busca en la realidad objetos sustitutos representativos de
los objetos internos con la finalidad por una parte, de desplazar sobre éstos los impulsos
hostiles de los que necesita preservar a sus objetos (primeras infantiles) y, por otra parte
y conjuntamente, de elaborar en esta nueva actividad lúdica los temores depresivos y la
culpa. La nueva actividad tiene funciones elaborativas y reparatorias para el objeto y
pata el yo.

Los procesos de simbolización, sublimación y reparación están estrictamente


vinculados y conforman aspectos de un mismo desarrollo. La sublimación supone una
actividad simbólicamente reparatoria de los objetos originales. La reparación del objeto
interno esta basada en la capacidad de reconocerlo como un objeto total, valioso y
necesitado, pero autónomo, y el mantenimiento de una relación de amor, aun frente a
experiencias de frustración y perdida (simbolizarlo).
M. Klein delimita la importancia de la capacidad del yo para tolerar la angustia
como condición para una simbolización exitosa; un monto excesivo (para el yo) de
angustia persecutoria de origen interno (envidia constitucional) en interacción con
déficit de la madre real (falta una madre o sustituto capaz de entender las necesidades
del bb) interfiere la capacidad de simbolización produciendo distintos grados de
patología (detención, bloqueo, inhibición de distinto orden).
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Refiriéndose a esto en un trabajo anterior a su conceptualización de envidia, M.


Klein dice: “Una cantidad suficiente de angustia es una base necesaria para la formación
de símbolos y fantasías, pero para que este proceso puede llevarse a cabo es necesaria
una adecuada tolerancia de la angustia”. “Una prematura y excesiva defensa del yo
contra el sadismo impide el establecimiento de la relación con la realidad y el desarrollo
de la vida de fantasía”.
En trabajos posteriores M. Klein enfatiza la importancia de la envidia en el
desarrollo patológico de la simbolización. El poder destructivo de la envidia
constitucional para el desarrollo emocional deriva de la intolerancia a los objetos
capaces de dar satisfacción, “lleva a arruinar lo bueno que posee el objeto como un
modo de suprimir la fuente de la envidia”. “Transforma en mala a la fuente misma de
todo lo bueno, de la que depende el bb y, por ende, impide la realización de buenas
introyecciones”. Impide establecer una disociación adecuada con una buena
discriminación de bueno y malo, en la medida en que lo bueno es malo por intolerancia
envidiosa. Esta discriminación es indispensable para el logro posterior de la síntesis
depresiva que dará origen al símbolo maduro.

Indicadores diferenciales:

Fundándome en esta conceptualización de simbolización, sistematizaré indicadores


centrados en la investigación de dos áreas de desarrollo del ap psíquico:
1. Capacidad de discriminación (entre interno y externo, fantasía y realidad, bueno
y malo). Funciones de juicio y sentido de realidad.
A través de los siguientes indicadores:
1. Captación concreta o simbólica de la consigna. Secuencias progresivas o
regresivas (discriminación entre realidad y fantasía)
2. Congruencia entre las características del objeto elegido y las características
adscriptas (discriminación yo/no-yo, realidad/fantasía).
3. Relación emocional diferenciada o indiferenciada con el objeto elegido o
rechazado. Distancia emocional (discriminación yo/no-yo).
4. Capacidad o incapacidad para diferenciar el objeto-símbolo de otros objetos de
la realidad (relimitación corporal).
5. Adecuada e inadecuada diferenciación de elecciones positivas y negativas.
Adecuada o inadecuada adscripción de cualidades buenas y malas
(discriminación entre bueno y malo, amor y odio).

2. Desarrollo del pensamiento simbólico: creatividad y sublimación.


1. Posibilidad de diferenciar en el objeto las características centrales de las
secundarias (capacidad de análisis, síntesis y abstracción)
2. Capacidad de aprendizaje creativo durante el test. Creación de objetos-símbolos
capaces de transmitir información (creatividad, reparación, sublimación).

1. Capacidad de discriminación y vínculo emocional diferenciado.

1er. Indicador: Captación concreta o simbólica de la consigna. Secuencias


progresivas o regresivas (discriminación entre realidad y fantasía).

La consigna que verbaliza el ps enfrenta al entrevistado con la posibilidad simbólica


de morir y moviliza por lo tanto las ansiedades y defensas inherentes al reconocimiento
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de la propia muerte. La consigna tb ofrece la oportunidad de preservar o deshacerse de


aspectos vinculares a través de un juego de sucesivas personificaciones en la fantasía.
La respuesta al test y la elaboración del impacto emocional con distinto grado de
adaptación o patología dependen de la capacidad para metabolizar la idea de la muerte
personal y enfrentar el duelo por el yo, los objetos internos y externos q este
conocimiento moviliza.
Pero para que la consigna desencadene el juego de personificaciones tendientes a
elaborar la ansiedad de muerte es necesaria una precondición: que el entrevistado este
psicológicamente capacitado p interpretar el sentido metafórico o simbólico de la
consigna.
Si ha logrado un suficiente grado de integración q lo capacita para diferenciar
fantasía y realidad y para utilizar el lenguaje y el pensamiento verbal de un modo
simbólico, podrá tomar la consigna como un “como si” y fantasear las sucesivas
personificaciones sin sentirlas como un riesgo para su identidad. Cuando las funciones
de discriminación y juicio de realidad están dañadas y en el plano del pensamiento
domina el concretismo, el entrevistado toma la consigna en forma literal y concibe al ps
como alguien que lo amenaza concretamente, o que le anuncia un peligro inminente o
que lo obliga a pensar en morir, y esto equivale a morir. En cualquiera de estos casos
observamos fracaso y graves alteraciones de la capacidad para asumir personificaciones,
porque asumir cualquier personificación no humana es concretamente “dejar de ser
humano” y por lo tanto morir.
En los procesos psicóticos francos la interpretación literal de la consigna da lugar a
un completo fracaso en la elaboración simbólica que se expresa en:
1. Desconocimiento aparente de la consigna; ésta parece no haber sido escuchada
por el entrevistado que responde con:
 Bloqueo absoluto y actitud de retiro autista
 Respuestas incoherentes, desorganizadas verbalizaciones extrañas,
neologismos.
 Verbalizaciones extensas con gran carga emocional
 Necesidad de volver a escuchar reiteradamente la consigna; en algunos
casos tratan de escribirla como intento patológico de mantenerla bajo
control.
2. Respuestas francamente paranoides contra el ps. y/o contra el test (el
entrevistado se niega a contestar, se siente burlado, tomado como un chico,
agredido por el ps)
3. Respuestas llorosas y de autodescalificación (el entrevistado insiste en que no
puede, no sabe, etc)
4. Gran dispersión (miles de ideas) y bloqueo en el desarrollo tanto de la
racionalización como el test en su totalidad.

Cuando el entrevistado logra discriminar la tarea del test como una actividad que se
desarrolla en el plano de la fantasía puede asumir distintas personificaciones y crear
nuevos símbolos a partir de objetos reales. Esta tarea provee al sujeto de una nueva
oportunidad de poner a prueba su creatividad y, por lo tanto, su capacidad para
reconstruir el mundo interno a través de las progresivas reintegraciones de vínculos
deseados, discriminados de los vínculos negativos.
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2do Indicador: Capacidad de discriminar las cualidades reales del objeto.


Congruencia entre características reales del objeto elegido y las adjudicadas en la
racionalización desiderativa.

Este indicador nos permite discernir la posibilidad del entrevistado para conocer la
realidad, sobre la base del adecuado juicio de realidad y de la diferenciación lograda
entre mundo interno y externo. La percepción distorsionada de la realidad se evidencia
en respuestas en las que las características adjudicadas el objeto no coinciden con las del
objeto real. Esta distorsión es consecuencia de mecanismos de identificación proyectiva
evacuativa, que borran la diferenciación e impiden el conocimiento de la realidad.
Cuando analizamos un Desiderativo diferenciamos símbolos de ecuaciones
simbólicas examinando si las características y/o funciones que se le adjudican al objeto
elegido o rechazado corresponden a cualidades que pueden adscribírsele o si son
arbitrarias. Si son arbitrarias el entrevistado sabe que “él lo imagina así”, “que para el
siempre representaron”, o sea si alude a que es una fantasía o si, por el contrario cree
que realmente el objeto las posee.
En toda producción desiderativa encontramos ciertos desvíos de la realidad. En las
producciones neuróticas, éstos se expresan habitualmente como omisiones en la
descripción de ciertos rasgos que el objeto real posee. Rara vez encontramos
descripciones “objetivas”, por el compromiso emocional con el que el entrevistado
trabaja. Por otra parte, una descripción exactamente objetiva, que supondría una intensa
disociación de los afectos, no es lo que entendemos como respuestas “sanas” (por la
disociación de afectos). Es adaptativo el énfasis de ciertos rasgos y la omisión de rasgos
secundarios, siempre que se respeten las características centrales del objeto.
En cambio, el “forzamiento” en el objeto real de rasgos que éste no posee indica
siempre patología porque señala zonas de confusión yo-no yo, aunque responda a un
área restringida dentro de una organización neurótica.
Las producciones neuróticas se caracterizan por: déficit de producción, que se
expresa a través de omisión o parcialización del objeto.
Las distorsiones de las cualidades reales de los objetos en los cuadros neuróticos
están circunscriptas, pueden rectificarse, no abarcan toda la producción y se caracterizan
por:
1. La distorsión se refiere a un aspecto del objeto; las características generales del
objeto, de ubicación, forma, uso, están respetadas.
2. Aparece en alguna de las respuestas, habitualmente en la primera positiva y/o
primera negativa, y está conectada siempre con situaciones de alto contenido emocional.
Estas situaciones altamente afectivas pueden estar relacionadas con: A – Intensa
ansiedad persecutoria movilizada por el impacto inicial de la consigna, del que luego
podrá recuperarse. B- Por la movilización de situaciones históricas no asimiladas por el
yo. C- Encontramos distorsiones cuando estamos en presencia de una fobia. En este
caso aparece bruscamente en las respuestas negativas (habitualmente en la primera) una
respuesta muy cargada emocionalmente. Al objeto rechazado se le adjudica un grado de
maldad exagerado, que llama la atención porque generalmente se trata de animales u
objetos que, en realidad, no ofrecen tanta peligrosidad. El entrevistado da muchas
verbalizaciones emocionales del tipo “que asco, que porquería, son espantosos”. Estas
elecciones contrastan, por otra parte con el resto, en que el entrevistado muestra un
adecuado ajuste a la realidad. En estos casos, el proceso de simbolización se logró, con
excepción de estas áreas (fóbicas) en las que algunos objetos de la realidad han sido
transformados, por ecuación simbólica, en representantes concretos de aspectos
terroríficos, vinculados con la agresión y la sexualidad.
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 1

La distorsión o arbitrariedad de características en los procesos sicóticos abarca toda


la producción o alterna con una producción clisé muy empobrecida. No hay posibilidad
de rectificación.
Se expresa en:
 Verbalizaciones cuya relación con las características reales del objeto es escasa
o nula.
 En un contexto de respuestas muy pobres, populares y con descripciones
desiderativas escuetas: porque me gusta, xq es útil, xq hace bien, podemos
encontrar alguna respuesta positiva totalmente distorsionada (presencia de
delirios), o bien respuestas delirantes a partir de algunos datos de realidad, o
respuestas negativas con un énfasis exagerado en el sadismo pero, a diferencia
de las fobias, con una gran complacencia en la descripción de las cualidades
sádicas

Distorsión en los cuadros psicopáticos. En las psicopatías podemos encontrar


alguna respuesta con predominio de ecuación simbólica como evidencia del sistema
subyacente de creencias delirantes. El entrevistado no es capaz de rectificar estas
respuestas y presenta en este sentido cualidades semejantes a los de los cuadros
psicóticos. Sin embargo, estas distorsiones pueden no evidenciarse en toda la
producción. En cambio, un tipo de distorsión peculiar y propio de estas personalidades
es la distorsión en la interpretación de la realidad: las cualidades adjudicadas al objeto
respetan las características reales de éste; pero en cambio se observa distorsión o bien
en el sentido o la finalidad que el entrevistado atribuye a esas características, o bien en
la finalidad por la cual él desearía poseer esas características.

3er. Indicador: Relación emocional diferenciada con el objeto elegido o


rechazado (distancia emocional).

Sabemos que el entrevistado necesita elaborar una experiencia emocional intensa,


referida al reconocimiento de la propia muerte, y que el método de elaboración que el
test le ofrece es la recreación de objetos-símbolos.
Suponemos que solo si el entrevistado logra conectarse simbólicamente con la
noción de muerte podrá recuperarse de esta situación de microduelo a través de una
progresiva creatividad. Esta creatividad es parte del intento reparatorio tendiente a
recrear su mundo interno.
Podemos pensar en distintos modelos de respuesta emocional frente a esta
situación de ansiedad que nos indicarán el grado de tolerancia a la angustia, la
capacidad de enfrentamiento con el duelo y por lo tanto la posibilidad de modificar la
situación a través de la simbolización.

a. Adecuada distancia emocional: el grado de tolerancia y compromiso emocional


se manifiesta por un clima de preocupación, introspección reflexiva e interés por el
aspecto creativo y tb lúdicro del test. Esto evidencia que el entrevistado sabe que está,
como persona, comprometido y contenido en los objetos que elige o rechaza. Los
procesos de disociación son menores y por lo tanto el entrevistado puede reconocer el
aspecto de creación personal, a la vez que los elementos reales del objeto: si elige un
perro sabe cuales son las características de éste; pero tb sabe, de un modo intuitivo, que
no habla del perro sino de su versión de éste, y que por lo tanto la elección es un
mediador para comunicar experiencias emocionales.
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 1

Comprende que el objeto elegido es una creación personal (símbolo) a partir de


datos de la realidad (las características reales) que puede describir en forma completa,
pero enfatizando los aspectos que siente comunes entre él y el objeto. También alude a
que la caracterización del objeto esta realizada desde su perspectiva, su modo de
percibir la realidad, a través de frases del tipo de: “para mi representa”.
Los grados de patología en cuanto a acercamiento emocional se evidencian por
excesiva distancia o excesivo acercamiento; en ambos casos lleva al déficit creativo y a
fallas en el proceso de simbolización.
b. Excesiva distancia emocional: es una defensa ante el impacto de la consigna.
Subyace una alteración del sentido del test, que es tomado o bien como un ejercicio
intelectual, o bien como un entretenimiento. En el primer caso las respuestas son
correctas pero formales, populares, escuetas, con baja creatividad personal. En el
segundo, el entrevistado manifiesta exagerado entusiasmo y enfatiza el aspecto lúdrico,
entretenido o divertido de la tarea, da respuestas populares, infantiles, con énfasis en
objetos alegres y con movimiento. En el primer caso dominan mecanismos de
aislamiento, en el segundo, maniacos, pero en ambos está presente la negación del
impacto emocional y la baja relación con los objetos elegidos. El entrevistado apela a
los símbolos creados culturalmente, al simbolismo convencional. En la medida en que
evita el compromiso emocional, es incapaz de crear o recrear, a partir de los datos de
realidad y de los símbolos universales, creaciones personales y nuevas.
Evidencian por lo tanto bloqueo y restricción de la capacidad simbólica.
Estas producciones señalan áreas de patología, centradas en inhibición de la
creatividad y la capacidad de sublimación, pero no indican por si mismas
organizaciones psicóticas. Pasan a ser indicadores de psicosis cuando coexisten con
otras respuestas con las características de distorsión descriptas anteriormente.
c. Excesivo “acercamiento” emocional (perdida de distancia con el objeto):
1. Dentro de los indicadores de pérdida de distancia emocional encontramos algunas de
las respuestas psicóticas: el entrevistado toma la consigna como una amenaza de muerte
y responde con conducta paranoides, respuestas llorosas, bloqueo.
2. Se expresa a través de verbalizaciones en las que el sujeto asume explícitamente la
personificación y se refiere al objeto elegido en primera persona. Este tipo de
verbalizaciones evidencia la pérdida de diferenciación yo/no-yo: el objeto deja de ser un
representante simbólico y pasa a ser el sujeto.
3. La perdida de distancia se evidencia tb en la adscripción de características al objeto
de un modo rígido, que no admite lugar para la posibilidad de error, que no acepta el
criterio de otros que puedan oponerse y no toma en cuenta otros rasgos del objeto
elegido.Esta modalidad verbal evidencia la presencia de ecuaciones simbólicas. Se
relaciona clínicamente con estructuras delirantes; tb está presente en las fobias, pero en
ese caso solo en una o dos elecciones.

4to. Indicador: Capacidad para diferenciar el objeto-símbolo de otros objetos de


la realidad (relimitación corporal).

La mala delimitación del yo respecto de la realidad externa puede evidenciarse a


través de los indicadores anteriores (congruencia, distancia emocional), pero tb por el
grado de delimitación del objeto-símbolo que el entrevistado logra a través de la
caracterización de éste.
a. Características del objeto-símbolo en la realidad: interesa determinar
aquí si el entrevistado tiene a elegir objetos q tienen una clara
delimitación física o por el contrario objetos con límites difusos, que no
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 1

se recortan con claridad del medio ambiente, porque no poseen una


estructura física diferenciada. Ej: respuestas como agua, aire, algas,
nubes, nieve, etc. Este tipo de elecciones indican mala delimitación y
diferenciación del yo con respecto a los otros objetos y refieren mayor
patología cuando están presentes como elecciones positivas.
b. Capacidad de especificar claramente los objetos-símbolos y describirlos
en forma completa: interesa acá determinar si el entrevistado puede
delimitar objetos específicos o si se refiere a categorías generales,
amplias, que impiden delimitar claramente. Ej: ave, pájaro, un mineral
útil, etc. La delimitación indica el grado de reconocimiento y
delimitación de la identidad con relación a la identidad de los demás. La
presencia de categorías generales expresa la tendencia a confundirse con
la identidad de otros y adscribirles o adscribirse características similares
en función de algún rasgo común.

En los cuadros psicóticos clínicos coexisten con respuestas con alto grado de
incongruencia, arbitrariedad, ecuaciones simbólicas evidentes, respuestas verbales y
emociones extrañas.

5to. Indicador: Adecuada o inadecuada diferenciación de elecciones positivas y


negativas. Adecuación de adscripción de cualidades buenas y malas (discriminación
bueno y malo; amor y odio).

Evolutivamente, la disociación del yo y del objeto en pares de cualidades opuestas


(idealizadas y persecutorias) es una precondición para la posterior síntesis depresiva. La
imposibilidad de lograr buenas disociaciones de objetos (buenos, malos) conduce a
situaciones de confusión.
Dentro de la alteración o patología de la disociación, la de mayor gravedad para el
desarrollo y crecimiento corresponde a la indiscriminación bueno y malo. Esta
distorsión primaria, en tanto permanece inmodificable, interfiere la integración (síntesis)
y por lo tanto el desarrollo de la reparación y la simbolización.
El factor determinante de esta distorsión es la envidia excesiva que lleva el yo a
arruinar la fuente de satisfacción. Lo bueno, se transforma en malo, en tanto la
intolerancia envidiosa lo transforma en fuente de sufrimiento. El objeto bueno no llega a
ser reconocido en sus rasgos reales (juicio de realidad, pecho que alimenta), sino que
pasa a ser confundido con el impulso hostil-envidioso y transformado por ecuación
simbólica en un objeto terrorífico. Esta distorsión específica lleva a estados de
confusión clínica, o bien a confusiones circunscriptas a la adscripción de cualidades
idealizadas a objetos o vínculos destructivos (objetos o personas que dañan).
Es una distorsión que indica siempre patología, esta referida a un modo de
funcionamiento psicótico y se halla siempre presente en las psicopatías. Como en los
otros indicadores, este modo de funcionamiento puede coexistir con organizaciones mas
maduras o corresponder al modo de funcionamiento general del entrevistado.
La indiscriminación entre que es bueno y que es malo para el yo se evidencia en el
Desiderativo del siguiente modo:
a. A través de un tipo de producción muy sorprendente que responde a
mecanismos de aislamiento y anulación, pero a los que subyace este
déficit de diferenciación: el sujeto rechaza en las tres negativas los
mismos objetos que eligió en las tres positivas ya sea por los mismos
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 1

rasgos o por otros que antes no mencionó, indicando esto presencia de


áreas psicóticas muy abarcativas de la pdad.
A veces esta producción aparece en cuadros psicopáticos; en estos casos
subyace la misma indiferenciación, pero es diferente la actitud del
entrevistado y su finalidad: el entrevistado “hace gala” de su posibilidad
de buscar los pro y los contra “elegí sol porque da calor, podría ahora
decirle que rechazo el sol porque se quema en su propio fuego”.
b. Las respuestas populares con racionalizaciones del tipo: son útiles, son
lindas, etc. tb son indicadores de esta patología porque muestran la
necesidad del entrevistado de recurrir al criterio valorativo cultural
formalizado por carencia de un sistema de valores propio.

Cuando en una sola elección negativa observamos sobrecarga de contenidos


destructivos en objetos que en realidad son inocuos en verbalizaciones con un estilo
altamente afectivo(es horrible, no lo soporto), estamos en presencia de una fobia y, por
lo tanto, el sector de funcionamiento mental con predominio de ecuación simbólica esta
restringido a un área de la pdad.
En las psicopatías, además del tipo de producción con predominio de mecanismos
de anulación, podemos observar: en las respuestas positivas y negativas pueden
mantener ajuste realista a las características de bueno y malo desde un punto de vista de
sentido común, pero en cambio la distorsión aparece en la finalidad de poder o
destrucción que le adjudican a las cualidades “buenas” de los objetos.

I. Desarrollo de pensamiento simbólico.


Creatividad y sublimación.

1. Posibilidad de diferenciar características del objeto discriminando las centrales de


las secundarias. (Capacidad de análisis, síntesis y abstracción).

Cuando los procesos de análisis, síntesis y abstracción funcionan adecuadamente,


el entrevistado puede diferenciar objetos buenos de objetos malos (análisis) en función
de la síntesis (síntesis) de cualidades centrales (abstracción) que los definen como
creativos o destructivos, pero sin una excesiva distancia entre lo deseado y lo temido
(precondición de procesos de síntesis)
Análisis, síntesis y abstracción son partes del proceso interno por el cual el
entrevistado logra su verbalización, y están muy interrelacionados.

Capacidad de análisis.

Podemos inferir la capacidad de análisis a través de la observación:

a. De las secuencias positivas en relación con las secuencias negativas.


Observamos si el entrevistado es capaz de diferenciar cualidades
“buenas” y “malas” y de establecer estas disociaciones en función de
rasgos centrales creativos o dañinos de los objetos. Esta capacidad
analítica de disociación fracasa en el funcionamiento psicótico y da lugar
a producciones confusas: adscripción de rasgos positivos a objetos
negativos y viceversa, incapacidad para delimitar las razones de las
elecciones o rechazos, o producciones escuetas y pobres con
disociaciones extremas como modo de control de la confusión. La
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 1

comparación de positivas y negativas indica polos extremos referidos a


fantasías de reparación y destrucción omnipotentes, o bien de poder
omnipotente versus invalidez total.
b. La capacidad analítica se puede investigar en cada una de las elecciones
o rechazos desiderativos, observando si: el entrevistado puede describir
en detalle cada uno de los símbolos elegidos y delimitar el símbolo del
resto de la realidad. La posibilidad de lograr un análisis detallado del
objeto y a partir de allí desarrollar los motivos q fundamentan el rechazo
o la elección depende del predominio de las funciones de percepción de
la realidad sobre la fantasía. En los procesos psicóticos vimos que esta
posibilidad fracasa por el uso excesivo de identificación proyectiva que
da lugar a evacuaciones que perturban la percepción.

Capacidad de síntesis.

La inferimos en parte de los indicadores anteriores:


a. Cuanto mayor es la distancia entre “bondad y maldad” de los objetos,
mayor dificultad para lograr síntesis de afectos y de aspectos disociados
de los objetos. Cuando la adjudicación de cualidades buenas y malas esta
distorsionada, la posibilidad de síntesis esta dañada desde su base.
b. Cuanto mas detenido es el análisis de los rasgos positivos y negativos de
cada objeto, mayor es la posibilidad de síntesis e integración.
c. Se evidencia a través de la riqueza o pobreza de las elecciones: las
respuestas “originales” en cuanto a elección de objetos poco populares
indican siempre una gran posibilidad de síntesis, porque evidencian un
intenso trabajo inconciente de selección e integración, de los que surge,
como producto, un símbolo con alta condensación. Estas respuestas
originales son poco frecuentes y dentro de una producción podemos
esperar una o dos.

El logro de respuestas altamente simbólicas informa sobre la capacidad potencial


del yo para desarrollar adecuadamente el proceso de simbolización, aunque este proceso
este clínicamente interferido o bloqueado en el entrevistado.
Las síntesis e las producciones psicóticas son arbitrarias, en función de análisis
fracasados por el ataque a las funciones de percepción que impiden el conocimiento de
los objetos de la realidad. La síntesis que implica definir a un objeto como bueno o
malo, por ejemplo, parte de percepciones erróneas y distorsionadas.

Capacidad de abstracción.

Deriva de la capacidad para diferenciar las características centrales de las


secundarias (análisis) y a partir de allí poder privilegiar lo central y esencial del objeto
como motivo de la elección o el rechazo. Al mismo tiempo implica comprender
(abstraer) el sentido del test, que supone seleccionar objetos para transmitir
simbólicamente cualidades o funciones personales.
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 1

2. Capacidad de aprendizaje creativo durante el test. Capacidad de crear objetos-


símbolos capaces de transmitir información. (Creatividad, reparación y sublimación)

La posibilidad de realizar un aprendizaje creativo durante el test se basa


fundamentalmente en la capacidad reparatoria, que posibilitara la re-creación de
objetos-símbolos. Estos objetos-símbolos tienen capacidad p mitigar el impacto de la
consigna en la medida en que permiten recrear y reinstalar, a través de los objetos
elegidos, los vínculos y aspectos necesitados o temidos.
Cuando cada elección es el producto de una elaboración profunda de la situación
de micro duelo promovida por la consigna, y es, por lo tanto, resultado de un proceso
activo de análisis, síntesis y abstracción, la ansiedad tanto paranoide como depresiva
logra una parcial elaboración. El yo recupera la confianza en su capacidad para
reconstruir el objeto y el mundo interno, puede reconocerse como alguien vivo y de este
modo recuperarse de la fantasía de muerte.
Cuando las respuestas están apoyadas en las necesidades defensivas de evitar el
contacto con la muerte y el duelo que ésta implica, las elecciones tendrán pocas
cualidades creativas y poca capacidad de modificar la ansiedad subyacente, dando lugar
a secuencias desorganizativas.

TEST DE RELACIONES OBJETALES DE H. PHILIPSON.


Indicadores diferenciales de psicosis, psicopatía y neurosis.

Desarrollaré indicadores a partir de la producción del test de H. Philipson para el


diagnostico de neurosis, psicosis y psicopatías como configuraciones clínicas
diferenciales, pero tb como modos de funcionamiento mental que pueden coexistir en
una misma pdad.
Los indicadores tienen por objetivo investigar el grado de desarrollo logrado en
tres áreas de funcionamiento mental que considero centrales para la diferenciación de
grados de patología:
1. Capacidad de discriminación (mundo interno/ mundo externo, realidad/
fantasía, bueno/malo). Incluye funciones de:
a. Juicio de realidad.
b. Sentido de realidad.

2. Capacidad de pensamiento simbólico-abstracto:


a. Capacidad de análisis, síntesis y abstracción
b. Noción de causalidad emocional.
c. Capacidad para establecer relaciones simbólicas con la realidad.

3. Capacidad de insight y elaboración:


a. Reconocimiento de la realidad psíquica
b. Reparación y sublimación.

1. Capacidad de discriminación.

JUICIO DE REALIDAD.

Criterio: necesitamos delimitar el grado de ajuste o distorsión que cada persona


presenta en su contacto emocional con la realidad. La adecuación a la realidad supone la
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 1

percepción de los hechos tal como ocurre y la adscripción de un clima emocional


congruente con la trama de relaciones interpersonales observada.
En la medida en que cada lámina del test representa una parte de la realidad, la
interrelación entre los ajustes y distorsiones preceptúales de cada registro individual en
congruencia con el clima emocional adscripto nos ofrecerá información sobre el
desarrollo logrado en la función de juicio de realidad.
Los índices de mayor eficacia para delimitar las alteraciones del juicio de realidad
los ofrece la observación del ajuste o distorsión perceptual que cada entrevistado
evidencia en cuanto al contenido humano, contenido de realidad y al clima emocional
descrito, que manifiesta la percepción del contexto de realidad de cada lámina.
La adecuacion o fracasa en la adscripción de significados emocionales y
relacionales nos informa sobre el desarrollo logrado en cuanto al sentido de realidad.

Indicador 1: Ajuste perceptual (distorsiones, omisiones, adiciones).

Nos permite delimitar la capacidad de discriminación entre mundo interno y


mundo externo, realidad y fantasía, en la que asienta la función de juicio de realidad,
contrapuesto al predominio de mecanismos de identificación proyectiva evacuativa que
borran la diferenciación interno/externo y realidad/fantasía, y provocan alteraciones en
las funciones de juicio y cotejo de realidad.
Las perturbaciones de producción que informan mas claramente alteraciones en
las funciones de juicio de realidad son las distorsiones perceptuales. La distorsión
perceptual evidencia mecanismos de identificación evacuativa, que borran las
características del objeto real.
Estas distorsiones pasan a ser indicadores de seria patología cuando toman gran
parte de la producción e indican procesos psicóticos clínicos cuando están presentes en
la mayoría de las láminas.
Cuando la distorsión se extiende a las láminas de la serie B, estamos frente a
patologías muy severas y de mal pronostico, porque es la serie que ofrece la mayor
delimitación y por lo tanto la presencia de distorsiones indica el fracaso de los
mecanismos de adaptación mínimos a la realidad.
Si la distorsión perceptual está presente solo en una o dos laminas, podemos
inferir que esa persona puede perder temporalmente funciones de discriminación en
situaciones que adquieren un grado de saturación emocional muy alto.
En la distorsión perceptual de características psicóticas, los contenidos
visualizados o adjudicados a la lamina son totalmente arbitrarios y pueden no mantener
ninguna relación manifiesta con el estimulo real. En este caso la distorsión de la
realidad q la lámina ofrece supone conjuntamente un mecanismo de adición perceptual
arbitraria.
Las adiciones perceptuales indican siempre áreas de patología de índole psicótica,
del mismo modo que las distorsiones. Varía la gravedad de acuerdo, por una parte, con
la cantidad de adiciones en el registro total: si toma todas las laminas, alguna seria o
alguna lámina, y por otra parte, con la claridad: si se adicionan personas u objetos
completos o por el contrario partes del cuerpo, partes de animales, objetos con
construcciones extrañas y sin vinculación entre si.
Las omisiones perceptuales indican zonas de conflicto, pero por si mismas no son
evidencia de áreas psicóticas, ya que pueden responder a mecanismos neuróticos de
negación o evitación. La omisión para a ser una expresión de perturbación psicótica
cuando abarca todo el estimulo (negación de la lamina) y coexiste por lo tanto con
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 1

distorsión perceptual y adiciones múltiples. Para determinar hasta que punto estas áreas
omitidas, que están ligadas a partes de la pdad, están disociadas del resto, importa
observar la capacidad del entrevistado para re-integrar estos aspectos en el
interrogatorio o en el examen de límites.

SENTIDO DE REALIDAD.

Criterio: Las alteraciones de sentido y de juicio de realidad están estrechamente


relacionadas. Cuando hay alteraciones del juicio de realidad, el sentido de realidad está
inevitablemente perturbado desde su base; y en la situación contraria tb hay correlación:
una grave alteración del sentido de realidad puede promover la necesidad de “forzar” las
percepciones de la lámina, adjudicándole características q no posee, para justificar la
proyección de fantasías y evitar que las reconozca como propias.
Pueden presentarse tb alteraciones no graves del sentido de realidad (del
significado que se le atribuye a lo que se percibe tanto de la realidad interna como
externa) en casos en que el juicio de realidad y el test de realidad están mantenidos.
Sentido de realidad: capacidad p atribuir a los elementos humanos y objetos
materiales de la lámina un significado coherente con el contexto de realidad de la
lámina.

Indicador 1: Actitud durante la toma del test.

Compromiso emocional y colaboración en contraposición a actitudes


desconfiadas, despectivas o excesivamente entusiastas.
A partir de la actitud emocional del entrevistado en la situación proyectiva
podemos inferir el significado emocional que ésta adquiere para cada caso particular y
determinar si el sentido adscrito a la situación mantiene congruencia con el sentido real.
Tres grandes grupos de alteraciones del significado de la situación de test:
 Actitudes paranoides francas: el test es tomado como interrogatorio policial, un
truco, una trampa para volverlo loco; o bien autoreferencias, que se expresan en la
fantasía de que las laminas fueron hechas por el ps para el entrevistado en
particular y que cada lamina se refiere a un problema concreto de la vida del
paciente.
 Actitudes suficientes, burlonas y despectivas: el test es tomado como un desafío
intelectual al que el ps lo somete. En estos casos la producción tiene por finalidad
impactar, deslumbrar, promover confusión y disminución intelectual en el
entrevistador, tomado como supuesto contrincante.
 Actitudes extremadamente entusiastas y eufóricas frente a un estimulo como el
test de Phillipson, que presenta situaciones interpersonales de alto monto
emocional. Conciben el test como un juego de contar cuentos, ajenos a la vida
emocional personal. (defensas maniacas).

Indicador 2: Adecuada percepción del contexto perceptual o distorsión.

La distorsión de las cualidades emocionales tristes, agobiantes o persecutorias,


emanadas de las características de la lámina, indican alteraciones en la interpretación
de la realidad.
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 2

Indicador 3: Características de la estructura de la historia.

Congruencias o incongruencias entre las características del contenido humano y de


realidad con el contexto de realidad. Planteo y resolución de conflictos:
 Un elemento central a tomar en cuenta es la capacidad p elaborar historias con
sentido común o carente de éste. Diferenciamos entre personas con capacidad
p elaborar historias de relaciones humanas, conflictos y desenlaces realistas, de
otras que plantean situaciones raras, poco comunes, conclusiones arbitrarias,
explicaciones estereotipadas, soluciones mágicas, poco posibles o imposibles
en el contexto humano, o bien historias muy coherentes pero muy alejadas del
tiempo en que vive el paciente.
 Las distorsiones pueden estar proyectadas en personajes de la historia:
personajes que se enojan o se aíslan por razones que no se conocen, que tienen
conductas arbitrarias o raras, que mal entienden o creen no ser queridos.
 El predominio de serias alteraciones de sentido se manifiesta en historias
estereotipadas, iguales a pesar de las diferencias notorias de las distintas
láminas. Esto evidencia la dificultad de conocer la realidad y el forzamiento de
la misma por interpretaciones rígidas producto de conflictos internos.
 Indiferenciación o confusión bueno-malo: la imposibilidad de establecer una
adecuada disociación de los aspectos del yo y de los objetos en el desarrollo
evolutivo impide la integración, produce estados mentales de confusión y
altera desde su base la interpretación de la realidad. La indiferenciación entre
lo bueno y lo malo es resultado de intensos sentimientos envidiosos que llevan
al yo a denigrar y atacar justamente al objeto necesitado y dador. Forma parte
del área o funcionamiento psicótico.

II. Capacidad de pensamiento simbólico (contrapuesto a pensamiento concreto).

a) Capacidad de análisis, síntesis y abstracción


b) Noción de causalidad
c) Capacidad p establecer relaciones simbólicas con la realidad.

Criterio: El predominio del pensamiento lógico-abstracto y de la capacidad para el


manejo simbólico del mundo interno y externo se evidencia en Phillipson:
1) En primer lugar, por la posibilidad de entender el sentido de la situación de test
y el test mismo como un objeto representante de la realidad externa y a la vez
capaz de actuar como mediador de la realidad interna, sin ser confundido con
ninguna de las dos.
2) En segundo lugar, por la posibilidad de dar respuestas globales (síntesis) en las
que se pueden integrar las personas de la lamina con el contenido de realidad y
con el contexto de un modo significativo
3) En tercer lugar, por la capacidad de desarrollar por partes (análisis) las razones
emocionales que promovieron conductas (causalidad) y buscar soluciones
tendientes a resolverlas.
4) En cuarto lugar, por la posibilidad de centrar la atención del relato en los
vínculos humanos presentes en las laminas (abstracción de lo central) y concebir
la historia como una creación que, aunque esta sugerida por los datos de la
realidad de la lamina, es una creación personal derivada de una perspectiva
propia
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 2

5) En último término, por la posibilidad de analizar los tres momentos: pasado,


presente y futuro como tiempos diferentes pero unidos en un tema central.

CAPACIDAD DE ANALISIS, SINTESIS Y ABSTRACCION.

Capacidad de análisis y síntesis

Indicador 1: Ajuste o distorsión perceptual

Cuando el ataque a las funciones yoicas de percepción de la realidad externa es el


elemento dominante en la vida mental, la lamina es objeto de violentas identificaciones
proyectivas que anulan desde la base la posibilidad de funciones de análisis, síntesis y
abstracción

Indicador 2: Análisis detallista con finalidad defensiva.

Descripciones detenidas y detalladas de cada elemento de la lámina, pero con


incapacidad de dar verbalizaciones globales que permitan definir la situación desde la
perspectiva emocional.
Acá las funciones de análisis están circunscriptas a lo que “se ve” en la lámina, el
entrevistado evita establecer relaciones entre las personas y sobre todo evita adscribir
algún clima emocional. La función de síntesis fracasa y el análisis cumple la función de
control de las emociones. Predominan mecanismos de aislamiento.
El refugio en el análisis cuidadoso es de peor pronóstico (pre-psicótico) cuando se
centra en el contenido de realidad especialmente.

Indicador 3: Síntesis apresuradas con finalidad defensiva.

Presenta características opuestas al indicador anterior, pero tiene una misma


finalidad, que es el control rígido de las emociones: el entrevistado percibe bien la
situación global, pero no puede luego explicitar los roles de cada persona, el interjuego
de relaciones, los pasos en la resolución del conflicto.

Indicador 4: Historias alternativas

Cuando en la producción observamos historias que presentan asociaciones


dispares o personajes que tienen ante si distintas alternativas para resolver sus
conflictos, estamos frente a alteraciones de las funciones de síntesis. Dominan, frente a
intensos sentimientos ambivalentes, mecanismos de aislamiento y anulación que
impiden la integración (síntesis) y que desde la perspectiva clínica se expresan como
dudas obsesivas o confusión
Dentro de este mismo indicador, encontramos las producciones con dos historias
alternativas totalmente opuestas en cada lámina. En este caso la síntesis está
evidentemente alterada, dominan también mecanismos de aislamiento y anulación.
Como elemento diferencial observamos como la disociación es mas extrema. Puede
estar acompañada por fantasías omnipotentes compensadoras, centradas en
exhibicionismo de la capacidad imaginativa. En este caso, el entrevistado necesita
mostrar que es capaz de idear situaciones opuestas a partir de una sola representación.
(Psicopatías)
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 2

Indicador 5: Estilo verbal

Otra evidencia del desarrollo o fracaso logrado en la capacidad de análisis y


síntesis la obtenemos por la observación del estilo verbal del entrevistado: la capacidad
o incapacidad para estructurar historias completas con, pocas frases significativas, en las
q logre integrar en los personajes pensamientos, acciones y sentimientos. Esta
posibilidad de opone a verbalizaciones detallistas con ausencia de afectos, descripciones
confusas o descripciones globales pobres.

Capacidad de abstracción.

La capacidad de abstracción deriva en forma directa del logro o fracaso en la capacidad


de análisis y síntesis. Con fines didácticos agrupo a continuación los indicadores
referidos a capacidad de abstracción.
Criterio. La capacidad de abstracción se expresa en Phillipson por la posibilidad de
referir lo central dentro de cada lamina (las relaciones humanas) y desarrollar un tema
de relaciones objetales coherentes con el contendido y el contexto. Está directamente
relacionado con la capacidad de síntesis. Se manifiesta por:

Indicador 6: Posibilidad de centrar la historia en los personajes humanos.

Capacidad p discriminar (abstraer) dentro de la lamina lo central y lo accesorio.


Predominan descripciones cuidadosas del contenido de realidad.

Indicador 7: Capacidad de abstraer rasgos humanos.

Capacidad de describir personajes con capacidad de sentir, pensar y actuar, a


diferencia de personajes deshumanizados que solo actúan o están, pero q impresionan
como maquinas, títeres o robots, en la medida en que no se incluyen sentimientos o
conflictos emocionales.

Indicador 8: Capacidad el para organizar relatos centrados en la situación emocional


durante el pasado, el presente y el futuro.

Esto se opone a descripciones detallistas o a producciones en las que se incluyen


muchos personajes para avalar las razones del desarrollo de la historia y que producen
relatos pobres, o confusos, pero en los que falta el desarrollo esencial que la consigna
busca.

Indicador 9: Posibilidad de extraer un tema y desarrollarlo.

A diferencia de historias y finales alternativos o con alternativas opuestas.


Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 2

NOCION DE CAUSALIDAD EMOCIONAL.

Criterio. Noción de causalidad emocional significa capacidad p ligar estados mentales o


actitudes con conflictos emocionales o sentimientos. Esta directamente relacionado con
la capacidad de insight, y supone conexión con la realidad psíquica. Abre la posibilidad
de comprensión empática con otras personas, al mismo tiempo que la capacidad p ligar
o establecer ciertas conexiones mínimas de causa-efecto en las relaciones
interpersonales.

Indicador 1: Descripción emocional de los personajes en la historia.

Posibilidad de explicar los sentimientos y pensamientos de los personajes,


humanizandolos. La patología se expresa por descripciones de actividades, acciones o
conductas que no se explican en la historia. (Los personajes, salen, entran, hablan, pero
no tienen descripción emocional).

Indicador 2: Posibilidad de ligar estados emocionales con vínculos amorosos o


agresivos.

La patología se expresa por abruptas emociones no explicables por el contexto


verbal o que pueden llegar a inferirse pero no están explicitadas.

Indicador 3: Concatenación de pasado, presente y futuro.

Posibilidad de crear hipótesis acerca de las situaciones vinculares que llevaron al o


los personajes a la situación en que están en la lámina. Capacidad para crear hipótesis
sobre desenlace. La patología se expresa por bloqueos en la elaboración de hipótesis
sobre el pasado, el presente o el proceso de desenlace.

Indicador 4: Causalidad realista

Posibilidad de establecer nexos realistas entre la conducta de cada personaje con


la respuesta de los demás.
Podemos encontrar producciones en las que el entrevistado intenta establecer
nexos causales, pero éstos son estereotipados, dependientes de seres extraterrestres o
poco realistas.

CAPACIDAD DE ESTABLECER RELACIONES SIMBOLICAS CON LA


REALIDAD

Criterio. Se expresa por la capacidad de percibir la lámina como un objeto que


representa situaciones humanas que pueden movilizar conflictos o experiencias
personales. Cuando la lámina es ecuacionada con el propio sujeto, pasa a ser tratada
como un objeto de alto poder persecutorio, que debe ser negado omnipotentemente o
bien aniquilado por medio de distintos mecanismos de destrucción y control.
Los fracasos en la capacidad simbólica se expresan con mayor dramatismo en las
psicosis clínicas, resultando producciones pobladas de objetos despedazados y bizarros,
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 2

bloqueos absolutos, conductas extrañas respecto de la lamina (tocarla, darla vuelta,


rasparla, etc.)
Cuando la patología no es tan evidente las fallas simbólicas se expresan por:

Indicador 1: Bloqueos en la capacidad para crear historias y establecer vinculaciones


emocionales.

El entrevistado no puede tomar a los objetos de la lámina como continentes para


proyectar y desplazar sus vínculos internos y produce relatos escuetos, formales, con
poco o nulo compromiso emocional.

Indicador 2: Perdida de distancia emocional

La lámina es sobrecargada, como efecto del incremento de identificación


proyectiva, o bien pasa a confundirse con el yo o con objetos cercanos, o bien despierta
reacciones emocionales intensas y desajustadas de enojo e indignación (paranoia), de
llanto (melancolía) o exageradas exclamaciones emocionales de disgusto o rechazo.
En cualquiera de estos casos fracasa la capacidad p tomar a la lamina como
representante simbólico, y en su lugar pasa a estar ecuacionada con situaciones internas,
lo que se evidencia en reacciones de perdida de distancia emocional.
La determinación del grado de incidencia psicótica sobre la pdad total la inferimos
de la extensión o restricción de estos procesos (si toman muchas laminas y de distintas
series o una). Cuando se trata de una sola lámina, y además el material grafico no
contiene índices psicóticos, pensamos que la lámina movilizó un área limitada dentro de
una pdad neurótica.
En las psicosis el ataque al aparato perceptual, en sus funciones de percepción de
la realidad interna y externa, y el ataque a las funciones de vinculación imposibilitan el
logro de pensamiento simbólico.
Para las psicosis clínicas
1. La lámina no es vista o reconocida como una parte diferenciada de la
realidad externa, sino que es objeto de un violento ataque proyectivo que
provoca el fracaso de la posibilidad de análisis, síntesis y abstracción.
2. Los objetos enteros representados en la lamina (hombres, objetos
materiales) son distorsionados y rotos en pequeños subobjetos por la
intensidad de los mecanismos de splitting.
3. La lámina pasa a ser sentida como “contenido en la realidad” esos
objetos terroríficos proyectados, lo cual se evidencia en conductas
bizarras: tocar la lamina, darla vuelta, conductas alucinatorias durante la
toma del test.
4. Fracasa la posibilidad de hacer historias coherentes y causales.
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 2

III. Capacidad de insight y elaboración.

A. Capacidad de reconocimiento de la realidad psíquica. Capacidad de


elaboración
B. Capacidad de reparación y sublimación,

A. RECONOCIMIENTO DE LA REALIDAD PSIQUICA. CAPACIDAD DE


ELABORACION.

Criterio. Cierto grado de negación de la realidad psíquica va unida a un grado


correlativo de negación y ataque de la realidad externa. El reconocimiento de la realidad
psíquica supone un grado de desarrollo e integración del ap mental que posibilita su
delimitación del mundo externo. Las distintas defensas neuróticas y psicóticas tienen
por finalidad distintos grados de negación de la realidad psíquica como un modo de
evitación del dolor. La posibilidad de insight puede dar lugar o no a la modificación y
elaboración. La posibilidad de elaboración depende del grado de tolerancia a la
frustración y dolor psíquico que la experiencia de insight implica.
Podemos investigar el grado de reconocimiento o negación de la realidad interna así
como las posibilidades de modificación observando:

Indicador 1: Actitud del entrevistado durante la toma del test. Modificaciones o rigidez
de conducta.

El modo en que un entrevistado enfrenta la situación de examen psicológico nos da


información sobre su capacidad para reconocer o evitar el contacto con su mundo
interno. Si alguien desarrolla conductas escépticas y de desprestigio y supone que hacer
estas cosas es tonto, infantil o carente de sentido, esta persona no reconoce la existencia
de motivaciones emocionales en la vida adulta. Lo mismo podemos pensar del
entrevistado q se muestra muy adaptado y toma la tarea del test como un ejercicio
intelectual en el que él no está incluido emocionalmente, o del entrevistado que da
respuestas rápidas, populares y trata de sacarse de encima cuanto antes la tarea
proyectiva, sin comprometerse emocionalmente.
Un entrevistado con buena disposición a conectarse con su mundo interno muestra
signos de ansiedad al comienzo de la tarea porque sabe que las historias que crea son
productos personales en los que está comprometido como persona. Busca respuestas
personales y no populares, muestra cambios de rendimiento a lo largo del test, por
disminución de las ansiedades paranoides debido a la mayor seguridad sobre sus
posibilidades de crear y elaborar conflictos y por rectificación de sus temores ICC
iniciales frente al psicólogo. Estos cambios se expresan en:
a. Variación de respuestas emocionales, defensivas y conflictos en las distintas
laminas.
b. En reintegraciones y nuevas asociaciones durante el interrogatorio.

Indicador 2: Capacidad de plantear situaciones emocionales conflictivas y resolverlas.

La patología se manifiesta por:


a. Historias en las que no se plantean conflictos sino solo pantallazas situacionales
con exclusión de afectos.
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 2

b. Historias en las que se plantean conflictos serios, pero donde la causalidad está
puesta en situaciones ajenas a la voluntad, catástrofes naturales, crisis
económicas, mandatos divinos

La patología se expresa en historias con personajes con poco grado de


humanización, estereotipados, rígidos, iguales en las distintas historias.

B. CAPACIDAD DE REPARACION Y SUBLIMACION.

Criterio. Se manifiesta por los mismos indicadores desarrollados en insight, elaboración


y simbolización.
Cuando enfrentamos el entrevistado c cada una de las laminas del test, le ofrecemos
la posibilidad de externalizar sus conflictos y apelar posteriormente a sus recursos
reparatorios con los que cuenta p modificarlos. La capacidad de reparación podemos
medirla por:

Indicador 1: Actitud emocional frente a la tarea del test.

Para poder realizar una tarea efectivamente reparatoria, el entrevistado debe estar
dispuesto a revivir distintas situaciones vinculares, y x lo tanto a registrar variadas
emociones y reconocer sus posibilidades e incapacidades en los intentos de
modificación. No podemos hablar de capacidad reparatoria si el proceso pasa solamente
por el área intelectual, o si no se reconoce la producción como una creación derivada de
la conflictiva personal.

Indicador 2: Grado de reparación del objeto logrado. Objetos enteros, disociados,


rotos.
La historia como objeto.
La historia misma es la evidencia del tipo de objeto que ese entrevistado es capaz de
crear o recrear dentro de si.
La observación de la historia en si misma como objeto completo, entero o por el
contrario fragmentado, o disociado nos provee información sobre la posibilidad o el
déficit en la recreación simbólica (reparación y sublimación)

Los personajes como objetos


Los personajes humanos que cada entrevistado recrea nos indican el grado de
reparación o destrucción en que están los objetos internos y el yo del entrevistado.

Indicador 3: El tipo de vínculos emocionales dominantes: amorosos o destructivos.

El clima emocional en el que se desarrollan las historias nos da una muestra del
clima emocional interno. La capacidad de amor, el reconocimiento de la dependencia y
la necesidad de otros, la preocupación por el daño que la agresión puede provocar a los
objetos queridos corresponden al clima inherente al proceso reparatorio. Se opone a esto
la hostilidad, la suficiencia, la necesidad de autoabastecimiento, los personajes
envidiosos y envidiados, que atacan relaciones. Temáticas de destrucción sádica
(homicidio) o autodestrucción (suicidio). Bloqueos emocionales absolutos relacionados
con intentos de negación de la realidad psíquica por temor a los impulsos seriamente
destructivos que ésta contiene.
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 2

LOS TEST GRAFICOS.

Indicadores diferenciales de psicosis, psicopatías y neurosis.

Test de la pareja humana- Test del Árbol- HTP.

Los test gráficos adquieren un papel central dentro del psicodiagnóstico porque son
los que detectan, con mayor precisión, los niveles profundos de integración y
estructuración. La posibilidad de control intelectual y de enmascaramiento disminuye
marcadamente en estos test en relación con los test verbales. Por esta razón son los q
permiten determinar con mayor precisión las características estructurales y de
integración de la pdad. Son los primeros que detectan desordenes psicóticos, así como
los últimos que se modifican, aun en personas q han logrado cambios cualitativamente
importantes en sus manifestaciones clínicas.
Los intentos de enmascaramiento CC, cuando aparecen, son más evidentes en los
test gráficos, como es el caso de los entrevistados que dibujan monigotes o figuras
esquemáticas. En estos casos el ps debe pedir un nuevo dibujo, ahora de figuras
completas, aunque el monigote es de por si fuente de información acerca de una
conducta defensiva, basada en dejar de lado toda participación emocional.
El dibujo surge en la evolución como expresión de la necesidad infantil de
recreación de los objetos internos y del mundo interno, sentido profundo que conserva
en la vida adulta. La producción grafica revela la concepción y los conflictos inherentes
al manejo espacial, a las funciones y al interior del cuerpo propio, así como tb a las
ansiedades y fantasías dominantes respecto al cuerpo de otras personas, construidas a
partir de las primitivas relaciones de objeto.
Los indicadores que desarrollé investigan las cualidades de la producción grafica en
las áreas de pdad y/o configuraciones clínicas neuróticas, psicóticas y psicopáticas. A
partir de dos áreas centrales en la diferenciación de grados de patología, enunciaré
indicadores que permitan diferenciar un continumm de modos de funcionamiento
mental, a partir de modalidades primitivas con predominio de identificación proyectiva
patológica, ecuación simbólica y concretismo en el plano del pensamiento a niveles de
mayor diferenciación intrapsíquica y logrado ajuste a la realidad, en función de los
mecanismos obsesivos de regulación que posibilitan el desarrollo del juicio y sentido de
realidad y del pensamiento lógico-abstracto.
Agruparé los indicadores dentro de dos áreas de investigación centrales para la
diferenciación de áreas de patología:
1) Integración del aparato psíquico y desarrollo de funciones de discriminación:
delimitación de mundo interno y mundo externo. Juicio y sentido de realidad.
Tendencias organizadoras o desorganizadoras.
2) Desarrollo de funciones simbolizantes: pensamiento lógico-abstracto, reparación
y sublimación.
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 2

1. Integración del ap. psíquico y desarrollo de las funciones de discriminación.

Delimitación de mundo interno y mundo externo. Juicio y sentido de realidad.


Tendencias organizadoras o desorganizadoras.

a. Delimitación y relación del objeto grafico con el mundo externo representado


por la hoja en blanco y los otros objetos graficados.

El pasaje de los niveles psicóticos a los neuróticos se pone de manifiesto en los gráficos,
por una parte A) a través del tratamiento que reciba la hoja como representante
simbólico del espacio externo: nos interesa observar si el entrevistado puebla este
espacio con objetos diferenciados y en interrelación, o si por el contrario expresa su
vivencia de pánico a través de fragmentaciones minúsculas de la hoja, efecto de una
necesidad compulsiva de llenar y tabicar ese lugar vacío con objetos aglomerados que
producen un efecto confuso, y B) a través de las características estructurales de cada
objeto grafico logrado, sus cualidades armónicas o desarticuladas: si logra objetos que
por su tamaño, ubicación, trazo y tratamiento cualitativo adquieren cualidades de
objetos realistas, precisos, completos, armónicos o por el contrario, parcializados,
difusos, desarticulados y extraños.
Ambas líneas están interrelacionadas y apuntan al problema de delimitación y
estructuración de la identidad. Sin embargo, clínicamente importa esta diferenciación,
ya que si bien cualquier material grafico que represente una hoja fragmentada en
pequeñas zonas, cada una de ellas con un dibujo pequeño, indica la presencia de
mecanismos de splitting patológicos. El diagnostico varia si cada uno de estos dibujos
corresponde a partes del cuerpo, animales extraños, partes de objetos o si relata escenas
con seres humanos completos y objetos de la realidad.
La posibilidad de usar la hoja en blanco como fondo p estructurar objetos recortados
con cualidades diferenciadas y representantes de objetos reales completos (personas,
casas, árboles) indica logros en la diferenciación e integración de la pdad.
La capacidad de conservar la Gestalt, y dentro de esta un adecuado tratamiento e
integración de las partes, está en relación directa con los logros de discriminación de
mundo interno y mundo externo y de diferenciación de los distintos aspectos de la pdad.
Del mismo modo, la posibilidad de integrar en forma adecuada las distintas partes del
grafico nos informa, por una parte, sobre el estado de las funciones de percepción y
juicio de realidad, y por otra, sobre la capacidad o fracaso para integrar pensamiento,
sentimiento y acción. La posibilidad de delimitar y diferenciar, “recortar”, al objeto
gráfico a través de líneas precisas y completas nos informa sobre los límites de la
identidad. Las líneas difusas y las aberturas indican zonas de indiscriminación por
predominio de identificación proyectiva.
Los rasgos adaptativos se refieren a la capacidad p delimitar y recortar al objeto
grafico, pero tb de proveerlo de aquellas partes que realizan funciones de interrelación y
comunicación, tales como, en la figura humana: los ojos, las manos, la boca; en la casa:
las puertas, las ventanas, etc.

b. Plasticidad y movimiento versus estereotipia y deshumanización.

Los indicadores de adaptación se expresan por representaciones graficas, con


cualidades originales personales, a diferencia de las producciones defensivas del tipo de
monigotes en figura humana, o esquematizaciones y representaciones clisé en
cualquiera de los gráficos.
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 2

Dentro de la producción de figuras humanas, son índices de adaptación:


I. La capacidad de proveer a las distintas representaciones humanas rasgos
diferenciales, tanto sexuales como psicológicos; en cambio a medida que
aumenta la patología, las figuras pierden diferenciación entre si y presentan
tratamientos semejantes en la caracterización corporal, sexual y facial.
II. La presencia de movimiento expansivo armónico es otro indicador de
importancia; la mayor patología se relaciona por movimiento coartado o
impedido expresado por figuras en actividad pero rígidas, duras, tensas, hasta
producciones humanas desvitalizadas, deshumanizadas, con aspectos de títeres o
robots, que evidencian ausencia de fuerza muscular y diversos ataques al aparato
motor (piernas o brazos ausentes, rotos, mal insertados, etc).
Las alteraciones de movimiento presentes en la neurosis corresponden a movimiento
coartado; son expresión de mecanismos patológicos de control obsesivo o de represión,
y corresponden a gráficos en los que la Gestalt se conserva.
La ausencia de movimiento con cualidades psicóticas está más relacionada con
ataques al aparato motor, y produce gráficos desarticulados y rotos.
En las psicopatías se destaca el movimiento corporal con cualidades de amenaza y
desafío.

c. Adecuación o inadecuación lógico-formal de las figuras graficas.

Desarrollo logrado por las funciones adaptativas de contacto con la realidad. Logro
de nociones espaciales: frente, perfil, tamaño, ubicación y perspectiva.
El logro evolutivo, por una parte, de mecanismos obsesivos de control y
rectificación y, por otra, conjuntamente, el desarrollo paulatino de las funciones de
percepción sientan las bases para el logro de nociones temporales y espaciales. Durante
el desarrollo infantil cristalizan nociones espaciales referentes al tamaño relativo de los
objetos, nociones de interrelación de las partes constitutivas de los objetos, nociones
diferenciales frente y perfil y nociones de perspectiva que alteran la forma del objeto e
Impiden visualizar partes de éste aunque estén presentes; conjuntamente surge la
capacidad motriz de representación tridimensional.
El logro o fracaso en la adquisición evolutiva de estas acciones se expresa en la
construcción del objeto gráfico tanto de la figura humana como de la casa y el árbol.
 La ubicación y el tamaño de cualquier objeto grafico nos informa sobre la
ubicación del yo respecto del mundo externo en términos de autoestima:
seguridad, inseguridad, megalomanía.
Los rasgos adaptativos se refieren a figuras centradas y de tamaño medio. La
ubicación izquierda está relacionada con excesivo retraimiento; en cambio, hacia la
derecha expresa negativismo y conductas antisociales. (Con excepción de personas
zurdas)
La excesiva disminución de tamaño está relacionada con sentimientos de
minusvalía, inhibición intelectual y social y bloqueo, e indica conflictiva de naturaleza
neurótica. En la patología con cualidades psicóticas o psicopáticas, los gráficos
adquieren un tamaño desmedidamente grande en relación con la hoja, que representa el
mundo en el que se incluyen. O si predominan figuras chicas es en una hoja con un
espacio “llenado” y “ensuciado”. El mundo y el yo están disgregados en mínimos
fragmentos o bien expandidos, pero en ambos casos fracasa la percepción realista.
 Nociones de interrelación, frente, perfil, perspectiva y tridimensionalidad: en
las producciones adaptadas o de predominio neurótico, las personas están de
frente o de perfil y las partes corporales presentan una inserción adecuada.
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 3

Del mismo modo la casa mantiene clara delimitación de sus partes. Las casas
están representadas en forma tridimensional y se evidencian nociones de
perspectiva que impiden visualizar partes de la casa.
En los procesos psicopáticos las figuras humanas presentan confusión perfil-frente
que se evidencia en contorno de la cabeza de perfil (nariz marcada) y los ojos de frente
o cara de perfil. La inserción de los miembros es arbitraria o regresiva (los brazos o
piernas salen del cuello o cabeza). Falta delimitacion entre la zona del tronco y la zona
genital, que aparece representada como un círculo o un rectángulo del que parten las
piernas. Son frecuentes las transparencias de órganos del interior del cuerpo.

Control obsesivo adaptativo y patológico.

“El pasaje al control omnipotente se manifiesta en el grafico a través de dibujos


excesivamente estáticos, inmóviles, despersonalizados:
1. Gráficos empobrecidos, vaciados, por predominio de mecanismos de
aislamiento y anulación
2. Excesivo reforzamiento de los limites, excesivo sombreado o rayado, que traen
como consecuencia figuras sucias, o bien figuras rígidas e inmóviles

El dibujo de la casa y el árbol puede ser un grafico desorganizado o bien


precariamente organizado, o mostrar incremento del sobre detallismo
Tal control, en la medida en que no es adaptativo, fracasa, y las figuras adquieren
características inusuales y desorganización de la Gestalt.

Mecanismo de regresión.

“La regresión es la reactualización de vínculos objetales correspondientes a


momentos evolutivos ya superados en el desarrollo individual. El yo claudica frente a
situaciones actuales que no puede resolver y apela a modalidades de relación
evolutivamente mas primitivas, que en su momento fueron eficaces para mantener el
equilibrio”
La regresión puede implicar una modificación estructural de la pdad (que se
reorganiza en un nivel más primario), o puede limitarse a afectar determinados vínculos
o funciones.
Como mecanismo normal se expresa cotidianamente en el dormir y en el soñar;
evolutivamente, la regresión esta unida a la necesidad de progresión, ya que nunca se
evoluciona de manera lineal, sino que se producen pequeñas regresiones al estado
inmediato anterior”.
Procesos tales se presentan como consecuencia natural de situaciones dolorosas,
llegando a ser indispensables p su elaboración.
Cuando la regresión se pone al servicio de yo, hace posible la conexión con
fantasías ICC que lo favorecen y enriquecen, constituyendo la base de los procesos
creativos.
La regresión patológica implica una regresión estructural, reversible o no, a puntos
disposicionales perturbados en el desarrollo.
En la tarea psicodiagnóstica nos interesa determinar cuales son las posibilidades de
regresión, cuales son las posibles situaciones tensionales desencadenantes y a que nivel
de organización (neurótica o psicótica) conducirá tal regresión.
Indicadores psicopatológicos en técnicas proyectivas 3

LA REGRESION EN LOS TEST GRAFICOS

1. A través del análisis de la secuencia de gráficos:


a) Reactivación de características mas regresivas y progresiva desorganización
en la secuencia de gráficos
b) Incremento y exacerbación progresiva de control obsesivo, unido a un mayor
empobrecimiento y confusión del objeto logrado.
2. A través de elementos de un mismo grafico:
a) Presencia de zonas rotas, derruidas o arbitrarias, raras
b) Perdidas de equilibrio: figura humana, casa o árbol cayéndose o en peligro
de derrumbe
3. Por la dirección del movimiento de las figuras (hacia la izquierda) o hacia
abajo (en pendiente).

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