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Consta de una parte objetiva y otra subjetiva.
La parte objetiva consta de 3 elementos:
1) La situación típica.
2) La ausencia de una acción determinada.
3) La capacidad de realizar esa acción.
Artículo 195 CP: “el que no socorriere a una persona que se halle desamparada y
en peligro manifiesto y grave, cuando pudiere hacerlo sin riesgo propio ni de terceros,
será castigado con la pena de multa de tres a doce meses”.
Situación Típica: Se refiere a la omisión propia. Ha de estar determinada
expresamente en la Ley. Es decir, necesita el tipo penal (por ejemplo, omisión del deber
de socorro, que se castiga porque está en el Código Penal).
- Las normas prescriptitas dan lugar a un tipo de omisión.
- Las normas prohibitivas dan lugar a un tipo de comisión.
Por ello decimos que en la omisión debe existir una situación típica, es decir, un
precepto legal.
Ausencia de acción determinada: Esto es en parte una consecuencia de lo anterior.
Cuando se omite la acción que establece la norma prescriptita (no por cualquier tipo de
acción). El tipo penal acota la conducta que debe realizarse (que no se puede omitir).
Capacidad de acción: Sólo se puede imputar una omisión a la persona que tenga
capacidad para realizar la acción que prescribe la norma. (por lo tanto, si en un
accidente existen dos heridos que no se pueden mover ni socorrerse mutuamente, aquí
no existe omisión). Es decir, se refiere a capacidad tanto física como psíquica.
De la omisión del deber de socorro: Artículos 195 y 196 CP.
Art. 195 CP:
- Situación típica: persona que se halle desamparada y en peligro manifiesto y
grave.
- Ausencia de acción determinada: no socorriere.
- Capacidad de acción: Cuando pudiere hacerlo sin riesgo propio ni de terceros. Y
si no puede, apartado 2: si no puede, debe pedir auxilio.
La parte subjetiva, la omisión propia admite la versión dolosa y la imprudente,
caso de estar esta última legalmente prevista. La dimensión cognoscitiva del dolo exige
que el sujeto sea consciente de que concurren todos los elementos del tipo objetivo. La
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dimensión volitiva del dolo consiste en la expresión de la voluntad de no realizar la
acción exigida, es decir, como volición del tipo objetivo.
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bienes jurídicos, es el responsable de que tal peligro no se realice. En este sentido se
encuentra en posición de garante, pues le corresponde el control de quien depende la
indemnidad de los bienes jurídicos.
3.- Responsabilidad por la conducta de otras personas: suele entenderse que en
determinadas condiciones, quienes tienen el deber de vigilar a otras personas, se hallan
en posición de garante respecto de los males que éstas puedan causar. Se piensa, como
caso básico, en el deber de vigilancia de los hijos menores por parte de sus padres.
Producción de un resultado:
Posibilidad de evitar el resultado: hay que añadir que para que haya comisión por
omisión, se exige además del resultado y de la posición de garante, la capacidad de
evitar el resultado en el autor.
Tal poder faltará cuando la acción positiva indicada de nada sirva para evitar el
resultado, porque de todas formas vaya a producirse.
Las peculiaridades del tipo subjetivo:
Vale para la comisión por omisión lo dicho respecto del dolo para los delitos de
omisión pura. La única particularidad es que, como es lógico, el dolo deberá abarcar no
sólo la ausencia de la acción debida, sino también la posibilidad y necesidad de
evitación del resultado mediante aquella acción. Además, habrá de extenderse a la
situación que determina la presencia de posición de garante, en tanto que la conciencia
de que la misma da lugar a que dicha posición de garante integra únicamente el
conocimiento del significado antijurídico del hecho, y su ausencia no constituirá error
de tipo, sino de prohibición.