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Alberto Monchablon Espinoza 1
Resumen
Palabras clave
Summary
Key words
Introducción
Clasificaciones y descripción
2) movimientos reactivos: son los originados como reacción a una causa externa. Son
movimientos espontáneos automatizados por el uso, no necesitando de una decisión
volitiva previa, por ejemplo: atender la puerta cuando suena el timbre, abrir un sobre
que recibimos, atender el teléfono etcétera. Ejemplo: Si el movimiento reactivo
aparece súbitamente y sin causa externa: es el movimiento en cortocircuito de Kleist.
3) movimientos reflejos: son de naturaleza innata frente a estímulos del mundo. Por
ejemplo: huir ante el dolor, la amenaza, el peligro; acercarse o detenerse frente a lo
opuesto: placer, ausencia de peligro.
4) movimientos expresivos: son los originados por motivos anímicos o sea de la vida
afectiva. Tienen su máxima expresión en la musculatura del rostro. Lo volitivo solo
puede excitarlos o inhibirlos. Tanto los movimientos reactivos como los expresivos
están aumentados o disminuidos en los trastornos psicomotrices.
Por otra parte, y básicamente, en la psiquiatría hay dos grandes grupos de trastornos
de la motricidad: la agitación o excitación psicomotriz y la inhibición psicomotriz. Por
ello se exponen en el cuadro Nº 2 y Nº 3 respectivamente estas situaciones. Como se
observará son estados clínicos de larga historia, ya que, quizá la agitación catatónica,
por ejemplo, formaba parte de la antigua frenitis aguda hipocrática. También lo era así
la catalepsia, uno de los síntomas básicos de la catatonía aguda.
Por ello se deriva naturalmente el síndrome catatónico agudo -la principal inhibición
aguda psicótica- que se expone a continuación en el cuadro Nº 4. (Kahlbaum).
Cuadro Nº 1
Cuadro Nº 3
Hipercinesia, hipocinesia, acinesia, estupor
Respecto de la agitación catatónica, los pacientes gritan, golpean, quieren huir, corren
ciegamente contra las puertas y paredes, atacan a otros pacientes y enfermeras, van
de un lado a otro, saltan, revuelven la ropa de la cama, hurgan con los dedos,
etcétera. En ocasión de interrogar a un paciente que sufrió una crisis hipercinética
grave, dijo que sintió que todo su cuerpo estaba preso de una agitación e inquietud
que no podía controlar y que por ello se había angustiado mucho. Acá la angustia
surge como una cuestión secundaria. Al día siguiente la paciente estaba
perfectamente bien.
Vinculadas a las estereotipias tenemos: los amaneramientos, que sería una costumbre
motriz fija y sin sentido.
Cuadro Nº 4
Síndrome Catatónico 2
Dentro del círculo endógeno es dable observar algún que otro episodio catatónico de
mayor o menor duración y gravedad, no implicando que se trate de una enfermedad
mental determinada, ya que, esta reacción cerebral aguda, en donde seguramente hay
un umbral, la pueden presentar tanto pacientes del grupo maníaco-depresivo como del
grupo esquizofrénico. Dentro de este último, en el denominado no-Sistemático, está la
Catatonía Periódica, que quizá sea la forma endógena periódica (acinética-
hipercinética), con más carga familiar (Stöber). Entre ambos grupos el maníaco-
depresivo y el esquizofrénico están las psicosis cicloides, en donde la psicosis de la
motilidad, enfermedad endógena bipolar motora, no maníaco-depresiva, presenta a
veces graves inhibiciones psicóticas. La única diferencia entre una fase acinética
aguda de la motilidad y la catatonía aguda es que, esta última, es más grave
clínicamente y, presenta generalmente, negativismo, aunque lo cuasi patognomónico
de la catatonía es la presencia simultánea de acinesia e hipercinesia.
Como vemos es muy amplio el espectro de síntomas catatónicos, sin embargo son
pocos los síntomas básicos o fundamentales. Debe además aclararse, que es muy
diferente el síndrome cuando es agudo que cuando es crónico y/o sistemático (de
hecho son dos síndromes completamente diferentes).
Todo paciente que recibe medicación neuroléptica, puede presentar los siguientes
efectos adversos motores agudos, y eventualmente crónicos, en una secuencia de
gravedad creciente:
3º) Temblores: fino distal en ambas manos, hasta el temblor postural generalizado en
todo el cuerpo. A veces el temblor en las manos es más grosero impidiéndole tomar
una tasa, por ejemplo. Son situaciones en donde de tratarse de síntomas adversos
leves deben medicarse con biperideno, sino deberán suspenderse los neurolépticos
utilizados y cambiar por otros. De un típico a un atípico.
4°) Acatisias agudas: éste problema se trata por un lado de una queja subjetiva de
intranquilidad en las piernas o, mostrándose como un temblor variable en ambos
miembros inferiores hasta la imposibilidad, para el paciente, de permanecer sentado
en su silla mientras los entrevistamos. La acatisia genera en la familia inquietud y
preocupación, transformándose a veces en una tortura para todos, sobre todo cuando
ven deambular al mismo incesantemente. Evaluar cada caso y cambiar de
neuroléptico, previo tratamiento con antiparkinsonianos anticolinérgicos.
5º) Síndrome Neuroléptico Maligno (SNM): es la complicación más grave por el uso de
neurolépticos. Es una catatonía acinética rígida aguda hipertérmica. Hay que
suspender los neurolépticos e implementar tratamiento específico (lorazepam,
bromocriptina, dantrolene). (25- Monchablon).
Tartamudez
atípicos).
El simulador
Este paciente es un gran problema para la medicina legal. Dado que a veces se tratan
de personalidades psicopáticas, estos son capaces de llegar hasta hacerse los
cuadripléjicos con tal de torcer una decisión judicial. Además de tenerlo en
observación directa e indirecta, el hecho es que no sigue sus parálisis el patrón clínico
habitual, pero hay muchos que aprenden a la perfección la simulación, como grandes
estafadores que son. Por ello no debe llamarnos la atención la fuga del paralítico. Por
ello estos pacientes deben estar bien estudiados y tomarse un tiempo mayor de
observación antes de emitir una opinión.
Las apraxias
Temblor
Mioclonías
Cuadro Nº 6
Conclusiones
Referencias bibliográficas
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36.- Yudofsky, S.; Hales, R.: “Neuropsychiatry”, Am Psy Press, 2d.Ed, Washington, 1992.
Notas al pie:
1
Médico Psiquiatra, Jefe del Servicio de Admisión del Hospital Neuropsiquiátrico Braulio
Moyano y Profesor Adjunto de Psiquiatría de la Facultad de Medicina de la Universidad de
Buenos Aires, Argentina. E-mail: amonchablon@aap.org.ar
2
Para un conocimiento acabado de este complejo problema psicopatológico sugiero la lectura
de los trabajos del Dr. J.C. Goldar al respecto y su libro “Introducción al Diagnóstico de las
Psicosis” (ver Bibliografia).
3
En el caso clínico publicado por Marietán, un paciente esquizofrénico de 18 años con tics
desde la infancia, mejoró notablemente la sintomatología motora con olanzapina, el problema
fue que surgió, como complicación completamente infrecuente, una neutropenia que obligó a
discontinuar, reapareciendo los tics.