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Nuevos daños a las personas.

Daño a la vida de relación, daño biológico y daño sexual

Jorge Mario Galdós


El interrogante de inicio:

¿En el derecho argentino existe un “tertium genus”, terceras categorías de daños

a las personas, resarcitoriamente autónomas del daño moral y del daño patrimonial?
Conclusión anticipada:

-Existen daños ontológicamente autónomos

-Autonomía conceptual no equivale a autonomía resarcitoria, distinta, adicional

y superpuesta al daño patrimonial y extrapatrimonial.

El porqué y el para qué de la cuestión:

Clasificación de :

I.Daños al patrimonio y

II. Daños a las personas


Daños a las personas:

1.Daño moral “clásico” (dolor, sufrimiento)

2.Daño biológico, a la vida de relación, al proyecto de vida, estético, psicológico,

daño juvenil, sexual, a la intimidad, a la calidad de vida

... y sigue el catálogo que superpone y acopla rubros.

Fundamentos de esta tésis:

-reparación plena del daño

-la presunción de daño rige sólo para el daño moral

-amplitud legitimatoria de los damnificados indirectos por daño moral

(Inconstitucionalidad art. 1078 Cód. Civ.: S.C.B.A., Ac. 85129, 16/5/2007,

“C.L.A. y otra c/ Hospital Zonal de Agudos Manuel Belgrano y ots.”)


La influencia del derecho italiano y sus tipologías de los daños a las

personas:

1.- Daño no patrimonial (“daño moral stricto sensu”; art. 2059 Cód. Civil de

1942)

2. Daño a la salud o daño biológico (tablas uniformes que no atienden al daño

productivo)

3.- Daño existencial (daño extrapatrimonial que no es “daño moral” en sentido

estricto)
Clasificación de Fernández Sessarego

Los daños a las personas como categoría autónoma comprenden:

1.el daño psicosomático (lesiones al soma, cuerpo o mente, que altera la unidad

del ser humano, generando indistintamente consecuencias patrimoniales y no

patrimoniales) y el “mal llamado daño moral” que constituye un daño emocional que

causa perturbaciones psíquicas, generalmente transitorias, no patológicas como

dolores y sufrimientos;

2. el daño al “proyecto de vida” o a la libertad fenoménica que es el que

repercute en el ámbito de la libertad de la persona.

En suma:

El daño psicosomático abarca

1) El “daño biológico” (vertiente estática, daño en sí mismo)

2) “Daño a la salud” ó “daño al bienestar” (vertiente dinámica)


Fundamentos de la inexistencia de daños emancipados en el derecho
argentino:

1- El daño es binario: extrapatrimonial o patrimonial


Un precedente de la Suprema Corte de Buenos Aires
“No resulta procedente la reiteración del pedido de reparación de la integridad
psicofísica como daño indemnizable independiente y adicional a las otras categorías –
daño patrimonial y extrapatrimonial- en las que el tribunal a quo consideró
expresamente comprendido el resarcimiento por el menoscabo que se involucra bajo
esa denominación” (S.C.B.A., L. 81159, “Caruso, Pablo Ceferino c/ Eland S.A. y
otras”, por mayoría, DJJ 164-125, con disidencia del Dr. Negri).

2- Ensanchamiento de la legitimación y del contenido del daño bipartito


tradicional
Clasificación de Jorge Mayo (Revista Derecho de Daños Nº. 6)
El daño moral comprende:
a) el “pretium doloris” que involucra el dolor físico de la víctima y el puro daño
moral, que se refleja en la pena, la tristeza y el sufrimiento –no físico- que
puede sufrir la víctima;
b) el daño a la vida de relación (privación de satisfacciones, pérdida de la
posibilidad de ejercitar ciertas actividades de placer u ocio, como las
artísticas y deportivas pero de cualquiera que afecte las satisfacciones
sociales o interpersonales de la vida);
c) el daño estético;
d) el “perjuicio juvenil” (dolor que provoca en una persona joven la conciencia
de su propia decadencia);
e) el perjuicio sexual o pérdida de las facultades sexuales.

El ensanchamiento del daño moral:


“el precio del consuelo”, de Héctor Iribarne es decir se trata de procurar la
mitigación o remedio del dolor por medio de bienes deleitables que mitigan la tristeza,
desazón, penurias (ED 112-280; “De los daños a la persona” y Revista de Derecho de
Daños Nº. 6 “Daño Moral” p. 197).
3- Ensanchamiento del contenido de la incapacidad sobreviniente.

-El art. 1086 Cód. Civ. autoabastece la tutela de la integridad psicofísica y opera

como una norma abierta y cuasi residual ya que con excepción del daño moral,

comprende todos los supuestos susceptibles de reparación patrimonial, incluso los

daños de salud y a la integridad física y psíquica. (Cam. Civ y Com. Azul, Sala 2,

3/3/05, “Esteban, Javier Marcelo c/Cupani, Cristina Elisa).

“La integridad psicofísica tiene un valor indemnizable “per se” que no sólo

comprende las efectivas y concretas ganancias dejadas de percibir, sino que además

incluye la afectación vital de la persona en su “mismidad”, individual y social, por lo

que a la víctima se le debe resarcir el daño a la salud que repercute en su significación

vital”. (Cam. Civ y Com. Azul, Sala 2, 13/2/97, “Viñas Ana M.c/ Pedersen Pablo G.”,

L.L.Bs.As.1997-99).
La incapacidad sobreviniente comprende:

1)la capacidad laborativa o productiva o sea la pérdida de ingresos o la

afectación a la concreta aptitud productiva o generadora de ingresos, rentas o

ganancias específicas (lucro cesante a acreditar en cada caso);

2) la capacidad vital o la aptitud y potencialidad genérica, es decir que no es

estrictamente laboral(daño emergente presunto);

3)el daño a la vida de relación o a la actividad social,estrechamente vinculado

con la capacidad intrínseca del sujeto (daño emergente presunto).


Dos casos dudosos

Los más “tradicionales” de los nuevos daños

-daño psicológico o psíquico

-daño estético
Daño biológico

El “leading case” que lo admitió:

El daño biológico o a la salud es el que afecta el equilibrio psicofísico y es

autónomamente resarcible cualesquiera fueran las consecuencias patrimoniales (lucro

cesante y daño emergente) o no patrimoniales (sufrimientos) de la lesión sufrida.

(Sentencia de 1º Instancia de la Dra. Highton de Nolasco, “García, Gustavo Alejandro

y otro c/ Dos Santos Goncalves, María Alcina s/ sumario”, ED 152-491)

Cuantificación

Taxista, 20 años $ 10.000 (daño físico, psíquico y estético) y $ 15.000 por daño

moral. Empleada administrativa (no trabajaba) $ 2.000 y $ 4.000 por daño moral.

Cám. Nac. Civ., Sala B, 11/2/93, “García Gustavo A. y ot. c/ Dos Santos

Goncalves María A. s/ sumario” ED 152-491.


La postura de la Dra. Highton de Nolasco.

“La indemnización por daño estético debe contemplarse en el resarcimiento del

daño moral ($ 6.000) porque no es un rubro autónomo y la víctima no presenta

secuelas incapacitantes, la pequeña cicatriz en el labio no posee características

anormales, no perturba la funcionalidad oral, no deforma el rostro ni la boca; o sea,

sin modificaciones estéticas”.(Voto de la mayoría)

Voto de Highton de Nolasco: “En ciertas circunstancias la lesión estética puede

conformar el concepto de daño biológico como independiente del daño material y del

daño moral. El daño biológico parte de la base de una integridad corporal que no

queda intacta y se proyecta sobre las esferas no laborales. Afecta el equilibrio psico-

físico, causa un daño a la salud o daño biológico que puede ser autónomamente

resarcible, cualesquiera fueran las consecuencias patrimoniales (lucro cesante y daño

emergente) o no patrimoniales (sufrimientos) de la lesión”.

Cám. Apel. Civ., Sala F, 23/11/1999, “García, José c/Microomnibus Norte S.A.

Monsa y otro s/ daños y perjuicios” y “Gonzalez Britos, Estanislaa y otro c/

Microomnibus Norte S.A. s/ daños y perjuicios”, inédito.


Jurisprudencia negatoria

-Cám. Nac. Civ., Sala G, 25/2/1998 “Montesi de Pons Marta R. y ots. c/ De

Guzmán Daniel M. y otros. Daños y Perjuicios” ED 177-275, voto Dr. Greco en

reenvío al fallo Cám. Nac. Civ., Sala G, 27/5/97 “Delbue Guillermo c/ Quezada Ríos

Oscar y ots. Daños y Perjuicios”

-Cám. Nac. Civ., Sala G, 14/3/2005, “Martínez Gabriel Angel c/ Aguas

Argentinas S.A. y otro s/ daños y perjuicios” voto Dr. Bellucci, en el Dial del 11/4/2005.

-Cám. Nac. Com., sala D, 2/6/2004, “G. de A.M. c/ Policlínico Central de la

Unión Obrera Metalúrgica”, RRC y S, 2004-574 con nota de Tallone.

Cuantificación $ 150.000 incapacidad total por daños neurológicos.

Otra jurisprudencia negatoria que se pronunció expresamente

-“La indemnización por daño biológico reclamada por la menor que fue víctima

de abuso sexual queda aprehendida en el rubro incapacidad sobreviniente, que abarca

tanto la capacidad laborativa, como la que se traduce en un menoscabo en cualquier


tipo de actividad que desarrollaba con la debida amplitud y libertad,” Cuantificación:

$ 60.000, otorgado en Primera Instancia como daño biológico, atendiendo a las

secuelas psíquicas de la menor de 6 años, además del daño moral .

Cám. Nac. Civ., Sala E, 14/5/2004, “S., R.C. c/ Alvarado Carrasco, Julio A.”

Revista Responsabilidad Civil y Seguros, Año VI, Nº. 9, Octubre de 2004-pág. 51.

Otro abordaje expreso negatorio

“La concepción del daño biológico invocado por la actora como una categoría de

daño autónomo, carece de fundamento y de trascendencia práctica en nuestro

derecho.”
“El llamado por la doctrina y jurisprudencia daño biológico no es otra cosa que

la repercusión de la minusvalía física en la vida de relación del sujeto, y se encuentra

comprendido en la incapacidad sobreviniente”.

Cuantificación

Víctima: Hombre, de 48 años, vivía en pareja, un hijo mayor, mecánico y

comisario deportivo en competencias automovilísticas.

- incapacidad (36,92%): $ 40.000;

- daño moral: $ 18.000.

- Se rechazó la pretensión autónoma (estimada por la actora en $ 20.000) del

daño biológico, por la diminución de su integridad psicofísica, independiente

de la capacidad laborativa.

Cám. Nac. Civ., sala J, 7/7/2005, “Olasagaste, Jorge Federico c/ Automóvil Club

Argentino y otros” RRC y S Noviembre 2005-134; voto Dra. Brilla de Serrat.

Otro precedente negatorio


Un caso de descarga eléctrica

La indemnización en concepto de daño biológico reclamada por quien fue

víctima de un accidente por electrocución queda comprendida en el rubro incapacidad


sobreviniente, pues éste abarca cualquier disminución física o psíquica que afecte

tanto la capacidad laborativa del individuo, como su vida de relación.

Cuantificación por el 80% del total. (Operario electricista, 32,64% por daños

físicos, 15% por daño psíquico y 2,25% por lesión oftalmológica);

-daño moral $ 32.000;

-daño estético $ 12.000;

- incapacidad sobreviniente: $ 36.000.

Cám. Nac. Civ., Sala M., 28/11/2005, “Brizuela, Juan c/ Telecom Stet France y

otro” R.R.C y S marzo 2006-97.

El daño biológico está incluido de facto en la indemnidad o


incolumnidad perdida

-“Y es daño, lo que altera la integridad física, por más que la curación y

readaptación en función de aquellos supuestos, sea más o menos plena, porque no


podrá devolverse al organismo alterado la situación de incolumnidad anterior al

accidente, lo que constituye perjuicio reparable”.

Cám. Nac. Civ., Sala B, 28/12/2001, “F., J.C.. c/ Hospital Alemán Asociación

Civil” R.R.C. y S. 2003-305.

-“El daño en sentido jurídico es la pérdida de la indemnidad anterior al

accidente, que constituye perjuicio reparable”.

Cám. Nac. Civ., sala B, 20/11/2004, “Martín de Martinez, Esther c/ Gobierno de

la Ciudad de Buenos Aires”, voto Dr. Sansó, JA 2005-I-fasc. 13, p. 61.

Cuantificación:

Incapacidad sobreviniente ( de un bebé de tres meses,rubro rechazado en

Primera Instancia), considerando (en el marco de las singularidades del caso) que la
indemnización de $ 650.000 por daño moral, al ser excesiva, contiene un plus que

incluye la minoración física y $ 250.000 como daño material por erogaciones futuras.

Cám. Nac. Civ., Sala B, 28/12/2001, “F., J.C.. c/ Hospital Alemán Asociación

Civil” R.R.C. y S. 2003-305.

El caso del jubilado

El actor reclamó “daño biológico-incapacidad psicofísica” pero no produjo

prueba.
Se indemnizó “la disminución de aptitudes necesarias para la vida diaria” (no se

dice el monto), como daño material por la incapacidad sobreviniente (ni lucro cesante

ni pérdida de chance) o sea: “El menoscabo que se proyecta en la actividad diaria que

realiza el damnificado, traduciéndose en un mayor esfuerzo para la realización de las

actividades domésticas, por ejemplo bañarse, lavar, cocinar, efectuar las compras,

trasladarse, etc.”

-Cám. 8va Apel. Civ. y Com. de Córdoba, 29/6/2006, “Baldasso Leonel Raúl c/

Cliba S.A. (Ingeniería Ambiental-Benito Roggio e Hijos S.A.-Ormas Ambiental S.A.

Ute) y otros Ordinario-Daños y Perjuicios. Accidentes de Tránsito-Recurso de

Apelación”, elDial-AA3885.

El infarto del transportador de caudales por estrés como enfermedad


laboral
-Corresponde declarar la inconstitucionalidad del art. 39 inc. 1º de la ley 24557 y

admitir la reparación con sustento en las disposiciones del derecho civil, en base a la

moderna doctrina del Derecho de Daños que habla del daño biológico y el daño a la

salud, al bienestar de la persona, surgiendo también de esta manera el principio de

cooperación, solidaridad y justicia.

Cuantificación (por el 60% de responsabilidad del demandado).Víctima: 42

años. 80% de incapacidad T.O;sueldo $ 1.300;

-incapacidad $ 150.000

-daño moral $ 30.000

Cám. Nac. Apel. del Trabajo, Sala VII, 14/8/2006, “Agüero, Alberto Argentino c/

Maco Transportadora de caudales S.A. s/ accidente-acción civil”, Microjuris MJD

8820.

Un precedente aislado que le confiere autonomía

Mala praxis médica por extirpación de un riñón sano.


Cám. Nac. Apel. Civ,, Sala K, 8/9/2006, “Martinez, Eduardo J. c/ Obra Social

Telefónicos”, RC y S 2006-XII-94; LL 3/1/2007, 2.

Cuantificación

Daño moral: $. 70.000

Daño psicológico: $. 20.000

Incapacidad sobreviniente: $ 52.000

Daño biológico: $ 40.000

-Incapacidad: “rubro económico o material” reasignación de tareas livianas, “lo

que le implicó la imposibilidad de acceder a los rubros extraordinarios que alude en la

demanda”.

- Daño biológico.Fundamentos dogmáticos:

-plena unidad psicosomática de la persona (Fernández Sesarego)

-el daño a la persona es omnicomprensivo de otros daños.

-la importancia del resarcimiento del daño a la salud en la órbita patrimonial o

moral) reestableciendo el equilibrio que gozaba la víctima antes del hecho (Zavala de

González).

Circunstancias de hecho comprobadas:

-el actor no presenta ninguna afección, puede realizar una vida normal, con

cuidados lógicos de quién tiene un solo riñón;


-debe evitar posibles traumas lumbares e inyecciones urinarias y “reserva

funcional renal”;

-Que aún cuando no se determinara un porcentaje específico discapacitante, no

puede soslayarse en comparación con el estado precedente del actor al hecho que en la

actualidad debe continuar su vida con un riñón menos, con las consecuencias

psicológicas que tal circunstancia trae aparejada, ocasionándose así indudablemente

una lesión a su salud que debe ser rearcida.

Cám. Nac. Civ., Sala K, 8/9/2006, “Martínez, Eduardo J. c/ Obra Social

Telefónicos” RRC y S, año VIII-Nº.12, p. 94.

Daño a la vida de relación


Comprende la dimensión social y espiritual de la persona humana y se refiere a

la imposibilidad o dificultad del sujeto disminuido en su integridad de reinsertarse en

las relaciones sociales o de mantenerlas a nivel normal. (Zavala de González).

En el derecho italiano el daño a la vida de relación es una noción amplia que

“comprende múltiples aspectos: la reducción de la capacidad de expansión y de


afirmación en las relaciones socioeconómicas, de la posibilidad de ubicarse, o sea, de

reinsertarse en las relaciones sociales y aún de mantenerlas en un nivel normal a causa

de la disminución sufrida; de adquirir determinada posición social; de la actividad

psicofísica del sujeto en el desarrollo de sus actividades complementarias, etc.”

(Kemelmajer de Carlucci).

El daño a la vida de relación es el que altera –minorando o suprimiendo-, la

aptitud relacional del sujeto en su vida cotidiana, individual y social.


El daño a la vida de relación o a la actividad social se refiere al ser y hacer del

hombre “para afuera”, en su interacción con los otros (su “otredad”), que igualmente

estará influenciada e incidida por factores laborales, de pertenencia comunitaria

social, de integración y participación en entidades de bien común, por la actividad

deportiva, cultural, artística, etc. de cada uno.

La vida de relación si bien también está sujeta a las singularidades de cada

persona, se ajusta a una media o standart genérico porque la actividad social y la

plenitud del ser humano, con sus matices, es siempre inherente a la persona.

La vida de relación es un componente importante y singular de las personas,

inherente a su ser y hacer, que atiende a la interacción del individuo en su conexión


intersubjetiva, que lo vincula, conecta y contacta con otras personas, cosas, situaciones

o vivencias y que puede producir consecuencias patrimoniales –en el rubro

incapacidad sobreviniente- o espirituales –en el daño moral-, o en ambas.

Pese a su autonomía conceptual carece de autonomía resarcitoria y debe ser

identificado e individualizado, y resarcido, pero dentro del daño patrimonial o del

moral o excepcionalmente –en ambos-.

El daño a la vida de relación dentro del daño moral


El daño a la vida de relación dentro del daño moral se lo incluye en el daño

moral por la privación de satisfacciones, la pérdida de la realización de ciertas

actividades de placer u ocio, como las artísticas y deportivas y cualquier otra que

afecte las satisfacciones sociales o interpersonales de la vida (Mayo).

El daño a la vida de relación en la Corte Suprema

En el ámbito de la incapacidad piscofísica


-“La pérdida casi total de la audición sufrida por el actor y sus graves secuelas

producen un serio perjuicio en su vida de relación, lo que repercute en las relaciones

sociales, deportivas, artísticas, etc. de la víctima”. (CS, 5/8/86, “Luján Honorio Juan c/

Nación Argentina”, Fallos 308:1111).

En el ámbito de la incapacidad psicofísica


-“Corresponde tener en cuenta las circunstancias personales del damnificado y

la gravedad de las secuelas que pueden extenderse no sólo al ámbito del trabajo, sino a

su vida de relación, incidiendo en las relaciones sociales, deportivas, etc.” (CS,

12/12/1989, “Ortiz, Eduardo Adolfo (menor); Ortiz, Enrique Angel c/ Empresa

Ferrocarriles Argentinos s/ daños y perjuicios”, Fallos 312:2413).

En el ámbito de la incapacidad psicofísica


“No sólo cabe justipreciar el aspecto laboral sino también las consecuencias que

afecten a la víctima, tanto desde el punto de vista individual como desde el social, lo

que le confiere un marco de valoración más amplio”(CS, 15/9/1987, “Velasco Angulo,

Isaac c/ Buenos Aires, Provincia de s/ daños y perjuicios”, Fallos 310:1827.)

En el ámbito del gran discapacitado y en el daño psicológico.


Víctima: casado, 35 años, con 5 hijos, empresario (importación de productos

menores), incapacidad del 90%.

-Incapacidad invalidante (reclamada como lucro cesante): $ 400.000

-daño moral: $ 400.000

-Daño psicológico: (las consecuencias psíquicas tienden a afectar toda la vida

relación del actor, especialmente el ámbito familiar): $ 11.524 (terapia personal por

dos años, $ 100 por sesión) y $ 4.800 (por terapia familiar)

CS, 30/5/2006, “Cohen, Eliazar c/ Río Negro, Provincia de y otros s/ daños y

perjuicios”

El daño a la vida de relación no es autónomo


El anciano enfermo internado en el geriátrico

-La vida de relación podrá minorar intereses patrimoniales:

“Por la imposibilidad de relacionarse con el prójimo que le apareje una

privación de ingresos o, más genéricamente, una mengua de naturaleza económica (p.

ej. el empresario cuyos negocios le exigen llevar una vida social activa, el viajante de

comercio que debe comunicarse con diversas personas para incrementar su clientela,

etc.)”

-La vida de relación podrá minorar intereses morales:


“Cuando se afecten necesidades del espíritu que asisten al sujeto y que ello prive

a éste de las satisfacciones que proporciona la conexión social con el prójimo, o de las

que se obtienen con un normal desarrollo de la actividad sexual, o de la actividad

deportiva –recreativa-, o de la actividad cultural pura, etc.”

Cám. Nac. Civ., sala D, 3/10/1995, “P., M.O. c/ Establecimiento Geriátrico La

Residencia S.R.L.”, voto Dr.Bueres , con nota aprobatoria de Roberto A. Vázquez

Ferreyra, LL 1996-E-1.

El daño a la vida de relación no es autónomo.


El niño atacado por el oso.
Víctima: 7 años, familia humilde, incapacidad física 66% TO y neurosis fóbica

grave del 80%.

-Incapacidad psico-física sobreviniente:$450.000(comprensiva expresamente de

la pérdida de chance y del daño a la vida de relación que no es autónomo: o es

material-dentro del lucro cesante- o daño moral).

-Daño moral $ 470.000 (comprensivo del estético)

-provisión de prótesis.

Cám. Fed. Apel. La Plata, Bs.As., Sala II, 11/5/2006, “B.A., S. y otra c/ C.J. y

otros s/ daños y perjuicios”, elDial-AA3806.

El daño a la vida de relación en la incapacidad


El daño a la vida de relación “está destinado a poner de relieve una comprensión

integral de la proyección existencial humana pues la incapacidad se refiere a un

conjunto de actos de desenvolvimiento productivo del sujeto, incluidos los cotidianos

que generan bienestar o proporcionan servicios a sí mismo y a la familia, y actividades

íntimas como lo son vivir en pareja, tener sexo libremente, procrear y cultivar el

contacto con terceros sin ser objeto de prevención o discriminación”.

Cuantificación

-Incapacidad total e irreversible( operario, de 24 años, soltero,de condición

humilde)$ 1.000.000,

-Daño moral: $400.000

Cám. Nac. Civ., Sala F, 4/8/1999, “Teles, Jorge R. c/ Perales Aguiar S.A.”,

RRCyS 2000-106.

Otro precedente del daño a la vida de relación en la incapacidad


El daño a la vida de relación “está destinado a poner de relieve una comprensión

integral de la proyección existencial humana pues la incapacidad se refiere a un

conjunto de actos de desenvolvimiento productivo del sujeto, incluidos los cotidianos

que generan bienestar o proporcionan servicios a sí mismo y a la familia, y actividades

íntimas como lo son vivir en pareja, tener sexo libremente, procrear y cultivar el

contacto con terceros sin ser objeto de prevención o discriminación”.

Cuantificación

Se otorgó $ 450.000 por incapacidad y $ 300.00 por daño moral,$80.000 por

gastos médicos( caso de una médica que contrajo H.I.V. mientras extraía una muestra

de sangre del hospital)

Cám. Nac. Civ., Sala F, 15/12/2000, “N.N. c/ Municipalidad de Bs. As.” RRC y S

2000-802.

El daño a la vida de relación en el daño moral


El peatón y la responsabilidad del Estado por omisión del poder de policía por

circular sin seguro obligatorio.

Víctima: 90% de incapacidad (pérdida de ambos miembros inferiores)

1. Incapacidad: $ 270.000

La lesión de la integridad física tiene diversos aspectos y comprende a más de la

actividad económica, otros relativos a la personalidad que hacen al ámbito doméstico,

cultural o social con la consiguiente frustración del desarrollo pleno, de la afectación

de la energía vital generadora de todas las actividades.

2. Daño moral (comprende el daño a la vida de relación rechazado en 1ra

instancia) $ 150.000

“Nunca podrá saltar, correr, bailar o entrar en el mar por sus propios medios.”

Cám. Nac. Apel. Com., Sala D, 30/9/2004,“C., L.E. c/ Ministerio de Economía y

Obras y Servicios Públicos”

El daño a la vida de relación en el daño moral.


“El daño a la vida en relación debe ser tenido en cuenta al receptar el daño

moral, pues no reviste un perjuicio autónomo del daño patrimonial o moral, sino que

debe encuadrarse dentro de alguno de éstos, según el caso”.

Cám. Nac. Apel. Civ., Sala L, 20/7/2007, “S. de N. E. y otro c/ Trenes de Buenos

Aires s/ daños y perjuicios”, MJJ13137; LL 2005-E-1005.

La vida de relación en las acciones de filiación (en el daño moral)


Cabe “merituar la entidad de los padecimientos íntimos que debió experimentar

el menor, especialmente a partir de la inserción escolar, al no contar con el apellido

paterno y no haber sido considerado hijo de su progenitor en ese y otros ámbitos de su

vida de relación”.

Cám. Nac. Civ., Sala I, 5/9/2002, “B., V.O. y otro c/ M.,L.A.” JA 2003-III-síntesis.

El daño a la vida de relación y el daño estético


La pérdida de piezas dentarias ha de producir menoscabo en la vida de relación,

ya sea por dificultades masticatorias que comprometen luego la digestión o por

repercusión estética afectando el aspecto del individuo.

Cám. Nac. Esp. Civ. y Com., Sala II, 17/2/88, “Barrionuevo, Ignacio Armando y

otros c/ Escalante, Ricardo Esteban y otros s/ sumario”, citado por Daray Hernán

“Accidentes de tránsito”, T. 2 p. 246.

El daño a la vida de relación y el daño psicológico


“Sólo debe indemnizarse el daño psíquico en forma autónoma, en tanto derive

“una incapacidad que importe una lesión de tal magnitud que implique una gran

alteración y perturbación profunda del equilibrio emocional de la víctima, cuya

consecuencia entrañe una significativa descompensación que afecte gravemente su

normal integración al medio social, caso contrario, debe subsumirse su consideración

dentro del daño patrimonial o el daño moral.

Cám. Nac. Civ., Sala L, 13/10/2004, “Lemos, Rubén c/ He Guo Ping y He Xiao

Jie Sociedad de Hecho y otros” JA 2005-I-302.


Daño sexual

El daño sexual es esencialmente el que incide en la función o goce sexual.

La “pérdida o disminución de la función o mejor del complejo de funciones de

los órganos sexuales, en sus componentes endocrínicos y exocrínicos, cuya finalidad

es: a) el desarrollo sicofísico del individuo que se traduce en la madurez sexual; b) la

reproducción; c) el placer de la libido” (Kemelmajer de Carlucci, Aída)

Un precedente del año 1939.


La atrofia de un testículo encuadra en el daño moral

(no resarcible; art. 1078 Cód. Civ. derogado ,por no derivar de un delito del

derecho criminal).

Cám. Civ. 2da. La Plata, 10/1/0/1939, “Costa Oscar Raúl c/ Velayos, Teófilo y

otro” JA 68-275.

No existió delito penal


La fallida operación quirúrgica de elongación peneana

Cám. Nac. Crim. Correc. Cap. Fed., Sala I, 23/3/2005, “B., M. del C. y otro s/

Sobreseimiento”, elDial del 29/4/2005.


¿La ablación de un testículo es un daño físico autónomo?

Víctima: 26 años, 20% por la pérdida del órgano y 10% por cicatriz, sin déficit

funcional

Incapacidad sobreviniente por daño físico $ 10.000

-Secuelas psíquicas y tratamiento $ 11.300

-Daño moral y estético $ 35.000(por mayoría,voto Dres Galmarini y Posse

Saguier).La minoría desestimó el rubro incapacidad física(Voto Dr. Burnichon)

Cám. Nac. Civ., Sala C, 29/6/2004, “G., R.A. c/ Longo, Guillermo” RRCy S 2004-

1664
La ausencia de consentimiento informado y la impotencia sexual

reclamada como daño moral ( $ 600.000)

Víctima: 57 años, con disfunción anterior, 35% incapacidad. T.O. por depresión

severa, con posible reversión (del 60% al 80%) con implantación de prótesis peneana

$ 50.000 por daño moral

Juzg. Civ. y Com. 27 Nom. Córdoba, 21/3/2003, “XXX c/ Sociedad de

Beneficiencia Hospital Italiano de Córdoba y otro”, LL Córdoba-2003-533.

El apresuramiento en la práctica quirúrgica y en el implante


Cám. Nac. Civ., Sala B, 23/3/1995, “A., C. c/ Centro Médico Santa Isabel S.A.”

LL 1996-C-233, aprobatoria de Eduardo L. Gregorini Clusellas.

Los rubros resarcitorios admitidos fueron los gastos del tratamiento piscológico;

la incapacidad sobreviviente, destacándose que el detrimento físico no resulta

superado por la aplicación de una prótesis que no puede suplir la disfunción; los

gastos sanatoriales; el costo del implante ($ 10.000) y el daño moral.

La penectomía y el daño moral


$ 70.000 (equivalente a la “máxima aflicción”)

Cám. Civ. y Com. Sala 4ta. Rosario, 28/3/2005, “G.F. c/ Heca y ot. s/ daños y

perjuicios” (por mayoría, voto Dr. Peyrano)


No es un daño autónomo y se incluye en el daño moral

La impotencia sexual que padece el actor(48 años,casado,cuatro hijos,dos

menores;únicao ingreso,de condición humilde,,miembro de las fuerzas armadas que

contrajo una tuberculosis urogenital)toda vez que el daño sexual carece de autonomía

y se vincula con el daño moral.

Cuantificación:

$ 50.000 por daño moral;$ 40.000 por incapacidad sobreviviente de entre el 66 al

80 % por ciento de la T.O ;$ 12.400 por daño emergente ; $ 15.000 por pérdida de

chance de ascenso laboral.

Cám. Nac. Fed. Civ. y Com. sala I, 21/3/2002, “J., S. M. E. c/ Ejército Argentino”

RRC y S 20002-767.
La extirpación del testículo por mala praxis médica contemplada en

ambos rubros

Víctima: 28 años, incapacidad física 30% y psíquica del 20% por la ablación

-$ 35.000 incapacidad

-$ 30.000 por daño moral(largos tratamientos,dos operaciones-la segunda por la

mala praxis de la anterior-,descalificaciones injuriantes en el ámbito laboral)

“El daño moral provocado por la pérdida de un testículo no puede ser el

equivalente a la mitad del precio de un televisor de plasma, o el equivalente al monto

de una computadora laptock que no sea de última generación. Fijar una cifra tan baja

para un daño tan elevado es hacer cargar a la víctima una parte del perjuicio, lo que

no se corresponde con una indemnización integral.”

Cám. Nac. Apel. En lo Civ. y Com., Sala III, “M.F.V. c/ Obra Social del Personal

de Seg. Com. Ind. E Invest. Priv. y otro s/ daños y perjuicios”(voto Dra. Graciela

Medina)Microjuris MJJ 9034-JA 2007-I- fasc 10


La alteración morfológica en el ámbito de la incapacidad

sobreviviente

Un fundamento dogmático

El actor no tiene por qué soportar una mutilación parcial aunque pueda ser

compensada, ello ha de originarle una limitación en la elección de ciertos trabajos que

importen un riesgo traumático que ponga en peligro a su testículo sano”

Cám. Fed. Civ. y Com., Sala I, 10/8/1984, “S., R.S. c/ Gobierno Nacional”, LL

1985-A-612, fallo 36757-S.


La alteración morfológica en el ámbito de la incapacidad

sobreviniente

Víctima: 48 años, contador, en relación de dependencia, incapacidad parcial

30% (retracción escrotal) sin secuelas ni afectación en la vida sexual

$ 10.000 incapacidad

$ 30.000 daño moral

La incapacidad comprende:la“incidencia en la vida de relación, en general, esto

es que de alguna manera frustre posibilidades económicas o incrementen gastos

futuros”; por ello “no cabe excluir que tales secuelas dificulten otras actividades

laborales y en su vida de relación en general, con cierta repercusión patrimonial”.

Cám. Civ., Sala I, 20/4/2004, “R.J.N. c/ Fernández Caputlo, Mario Luis s/ daños

y perjuicios”RRCyS Mayo 2005,pag 33


¿Patrimonialidad del daño sexual?

Las “profesiones ilícitas” y las profesiones inmorales.


No existe “privación de uso del cuerpo en las tareas que realizaba normalmente

(amamatar y actividad de recreación en general)

$ 5.000 por incapacidad del 5%

$ 40.000 por daño moral

CS, 20/3/2003, “Mochi Ermanno y ot. c/ Pcia. de Bs. As.” RRC y S 2003-75
La extirpación de un testículo en el daño moral

Victima:24 años

-Daño material y lucro cesante desestimados

-Daño psíquico (desestimado al reenviarlo al daño moral)

-Daño moral $ 45.000 (comprensivo del 40% incapacidad psíquica por depresión

severa)

-Gastos médicos $ 500

Cám. Nac. Apel.Civ., Sala G, 1/4/2003, “S.S.W c/ Sociedad Italiana de

beneficencia en Buenos Aires y otros s/ daños y perjuicios”Microjuris MJJ 2469


-El daño sexual es-conceptual o naturalísticamente- autónomo.

-La afectación a la salud sexual necesariamente debe integrar el resarcimiento

pero no constituye un “tertium genus”.

El daño sexual comporta –esencialmente- un daño moral o extrapatrimonial que

podrá concurrir con el daño patrimonial emergente (por gastos y erogaciones, pasados

o futuros, por asistencia médica, paramédica, asistencial etc.) o incapacidad

sobreviniente,total o parcial, concebida en su acepción amplia como alteración a la

integridad psíquica y física, no sólo laborativa sino también comprensiva de todas las

facetas de la persona (familiar, social, artística, deportiva, etc.).


Las cuatro fases típicas

Identificar,

deslindar,

categorizar

y cuantificar el daño.
Identificarlo: significa individualizar y precisar su contenido, dotándolo de

autonomía conceptual;

deslindarlo :significa tipificarlo y delimitarlo de los otros daños que puedan

tener parecidos, idénticos o equivalentes efectos nocivos;

categorizarlo :significa subsumirlo, según el caso, en una o en ambas órbitas del

daño patrimonial o extrapatrimonial, discriminando su incidencia en la repercusión

final de ese género.

Cuantificarlo:implica asignarle valor pecuniario.


Resulta inconstitucional una indemnización que no fuera “justa”, puesto que

indemnizar es (...) eximir de todo daño y perjuicio mediante un cabal resarcimiento

“lo que no se logra si el daño o el perjuicio subsisten en alguna medida”

CS., 26/6/67, “Provincia de Santa Fe c/ Nicchi Carlos Aurelio” Fallos 268:112,

considerandos 4 y 5.

Bibliografía:

- “Daños a las personas en la Provincia de Buenos Aires”

Revista de Derecho de Daños 2004-3 “Determinación Judicial

del Daño-I”, pág. 31.

-“Acerca del daño psicológico” en JA 2005-I-1197.

-“Daños a las personas” en RRCyS 2005-35.

-“Un caso de gran discapacidad en fallo ejemplar”, en

anotación a fallo Cám. Civ. y Com. Sala III, 20/2/2005,

“Lioi, Ester y otro c/ Estado Nacional Ministerio del

Interior”, en LL 2005-B-868.

-“Nuevos daños a las personas en la sociedad de riesgo”, en

libro Homenaje al Profesor Jorge Mosset Iturraspe, Santa Fe,

Ediciones UNL, p. 159.


- “¿Qué es el daño a la vida de relación?”, en Microjuris

(del 16/2/2005) MJD 2831.

- “¿Qué es el daño biológico?”, en Microjuris del 16/3/2006.,

MJD 2860

- “Un caso de daño sexual. Algunas consideraciones iniciales”

en Revista de Doctrina y Jurisprudencia de la Provincia de

Santa Fe, Editorial Jurídica Panamericana, Santa Fe, 2006,

Nº. 68, p. 37.

-¿Hay daño biológico en el Derecho argentino? en JA 2006-II-

1255 y en SJA 28/6/2006.

-¿Hay daño sexual? en RC y S 2006-129.

-Daño a la vida de relación, en LL 2006-D-921.

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