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Abril de 2009
La Secretaría de Ambiente de Córdoba, que dirige el Dr. Raúl Costa, trabaja con la
firme convicción de que la deforestación provocada durante años en el territorio
provincial hoy puede empezar a contrarrestarse aplicando sólidas y consecutivas
políticas de forestación y protección de nuestros bosques autóctonos.
Según datos de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación,
en el año 2006 quedaban en Córdoba 885.165 has. de bosque nativo, habiendo
sido deforestadas 93.930 has. entre el período comprendido entre 2002 y 2006 y
teniendo una tasa anual de deforestación de 2,52 %. En tanto, según indica un
informe sobre la Llanura Chaqueña elaborado por la Secretaría de Ambiente de
Córdoba, a través de la Unidad Ejecutora del Programa de Ordenamiento
Territorial de los Bosques Nativos de nuestra provincia, hasta el año 2008
quedaban en esta zona del noreste cordobés 42.756 ha. de bosque cerrado
(4,24%), 35.284 has. de bosque abierto (3,5 %) y 18.533 has. de arbustal-pastizal
(1,84%). La región comprende los departamentos más afectas por la deforestación
en Córdoba: Tulumba, Totoral, Río Seco, Río Primero, Ischilín y Colón.
La recuperación forestal
El área forestal dirige sus esfuerzos a la producción de árboles (autóctonos y
exóticos), para donaciones a municipios, escuelas, ONGs y fundaciones; también
trabaja sobre la promoción forestal, la evaluación de proyectos forestales y el
control y seguimiento de los mismos.
Los tres viveros provinciales producirán a lo largo de este año 1 millón y medio de
árboles que vienen siendo distribuidos en todo el territorio provincial, con el fin de
crear masas forestales en las zonas con problemas de erosión hídrica, inundación y
erosión del suelo, y contribuir a la recuperación paisajística por medio de la acción
conjunta y mancomunada de todos los actores sociales.
La entrega se realiza de manera planificada y ante un análisis previo de la zona a
forestar, el tipo de suelo, el índice de lluvias y el tipo de agua; y junto a ella, la
cartera de Ambiente brinda la asistencia técnica, seguimiento y control del correcto
desarrollo de las especies plantadas.
Como contraprestación, las instituciones y organismos beneficiarios de la iniciativa
deben cumplimentar la plantación, cuidados culturales y mantenimientos
(replantación de árboles secos, riego, abatimiento de plagas) posteriores a la
misma; y a la vez se comprometen a presentar informes periódicos de la
distribución de los ejemplares.
Los ejes de aplicación del programa son la recuperación paisajística, que prevé
acciones de forestación urbana, de rutas y caminos vecinales, y de las laderas de
las sierras; la fijación de médanos y el enriquecimiento del bosque nativo. Tiene
por objetivos disminuir la erosión hídrica y eólica en las zonas rurales y serranas;
formar cortinas cortavientos y marcadoras de índices de contaminación; proteger
las costas de los cursos de agua, exteriormente a la línea de ribera; dotar a
caminos y rutas provinciales de bolsones verdes y concientizar a la población
respecto de la importancia del recurso forestal urbano como indicador de la calidad
de vida.
Promoción forestal
Desde el punto de vista industrial, la forestación tiene un gran impacto en las
economías regionales debido a la importante mano de obra que genera, siendo
también sustento de diversas industrias anexas e incentivo de actividades
indirectas relacionadas con el sector. Córdoba posee un lugar
estratégico para la producción, industrialización y comercialización de productos
forestales y se inscribe también como un centro de envergadura para el consumo y
abastecimiento en mercados internos y externos. Además, toda la región cuenta
con la infraestructura necesaria para el desarrollo de esta industria, tanto en vías
de comunicación como en abastecimiento energético.
En este sentido, la política de la cartera de Ambiente se basa en la aplicación del
Programa Creando Riquezas (Decreto Provincial 641/05) y la promoción de la Ley
Nacional 25.080, de Inversiones para Bosques Cultivados, a la que nuestra
provincia adhirió mediante la sanción de la Ley Provincial 8855. Estas acciones se
encuentran direccionadas hacia las zonas de la provincia más afectadas por
disminución y degradación de los bosques nativos. En este sentido se evalúan los
planes de forestación y reforestación que se presenten; se controla el
cumplimiento de los planes aprobados; se inspeccionan y certifican las
plantaciones realizadas; y se controla el manejo silvícola dentro de pautas técnicas
establecidas, durante todo el turno de aprovechamiento.