Inmaculada de la Mata 2º Bach.

EXAMEN DE SELECTIVIDAD: PLATÓN

Modelo examen Andalucía 2007 D4

Opción A:

Texto 1
Comprende entonces la otra sección de lo inteligible, cuando afirma que en ella la razón
misma
aprehende, por medio de la facultad dialéctica, y hace de los supuestos no principios
sino realmente
supuestos, que son como peldaños y trampolines hasta el principio del todo, que es no
supuesto, y tras
aferrarse a él, ateniéndose a las cosas que de él dependen, desciende hasta una
conclusión, sin servirse
para nada de lo sensible, sino de Ideas, a través de Ideas y en dirección a Ideas hasta
concluir en Ideas.

Platón, República, libro VI.

COMPOSICIÓN FILOSÓFICA:

En los textos de Platón es imprescindible conocer el significado de términos como son,

en este caso, lo inteligible y lo sensible.

El mundo inteligible es aquel en el que se hallan las ideas, que son realidades
universales, simples, incorruptibles, eternas e invisibles, mientras que el mundo sensible
es aquel en el que habitan las cosas particulares, compuestas, corruptibles, perecederas y
visibles. En conclusión, el mundo inteligible es el de las cosas trascendentes y el
sensible el de las cosas inmanentes.

En este texto, Platón nos muestra su percepción de las ideas y el mundo inteligible.
Platón dice que la única forma de llegar a la conclusión de algo es reflexionar sobre las
cosas que no vemos, sin dejarnos llevar en ningún momento por lo que percibimos a
través de los sentidos, es decir, aquello perteneciente al mundo sensible. Según Platón,
el conocimiento supremo y verdadero solo podemos alcanzarlo a través de la dialéctica,
y esto conlleva seguir un camino de lo particular a lo universal y viceversa, de ahí
provienen los términos de “inducción” y “deducción”.

La dialéctica toma los supuestos como peldaños que conducen a lo no supuesto, es

decir, el principio de todo: las ideas. Tras aprehender las ideas en sí mismas, se debe ir
de una idea a otra sin recurrir a lo sensible. La finalidad de este progreso es la captación
del aspecto inteligible que guardan las cosas sensibles.
Este texto viene condicionado, al igual que todos los textos que reflejan una ideología,
por el contexto histórico de la época en la que fue creado. El contexto histórico que
enmarca los textos de Platón es el siglo de Pericles.

Lo dividiremos en distintos campos:

-Político: Implantación de la democracia por primera vez en la historia.

-Económico: Organización social en polis e influencia del comercio y la guerra del

Peloponeso.

-Social: Estaba implantada la sociedad esclavista, y muy arraigada en la ideología de

aquella época.

-Cultural: El desarrollo del teatro, valiéndose de la Tragedia, género cultivado

principalmente por Sófocles, Eurípides y Esquilo, a lo que se le añade el desarrollo de la
arquitectura y la escultura de Fidias.

-Filosófico: Debemos tener en cuenta los antecedentes de su ideología, que fueron los
filósofos presocráticos abstractos: Pitágoras, Parménides y Anaxágoras, cuyas doctrinas
en relación al orden del universo son contrarias a las de Demócrito, uno de sus
principales opuestos, pues mientras que Demócrito pensaba que las cosas sucedían al
azar, Platón defendía la idea de que había un plan para todo. Aunque por supuesto, su
principal influencia fue su maestro Sócrates, aquel que le inculcó la creencia de que
había que buscar las definiciones universales de todas las cosas. Obviamente. También
debemos tener en cuenta la influencia de la filosofía de Platón, principalmente en su
discípulo Aristóteles y a los neoplatónicos, como Hypatia en la antigüedad, y los
matemáticos en la actualidad.

Podemos comparar la filosofía de Platón con la de los sofistas, y en ellas encontraremos

semejanzas y diferencias. Por ejemplo, las dos filosofías coinciden en que se centran en
la esencia de las cosas, es decir, ambos puntos de vista intentarán explicar la existencia
de las cosas, mientras que se diferencian, entre otras cosas, porque para Platón, la
verdad y el conocimiento son cosas no solo posibles, sino necesarias, y para los sofistas,
cuya posición es escéptica, no existe una única verdad sobre las cosas, sino que cada
persona puede verla de una forma distinta, teoría que probamos en la siguiente frase:
“El hombre es la medida de todas las cosas”, perteneciente a Protágoras.

Desde mi punto de vista, es cierto que lo que percibimos por los sentidos es muchas
veces engañoso, aunque creo que no se debe infravalorar en exceso como pensaba
Platón, el cual sobrevalora en exceso las cosas trascendentes. Pienso que la virtud está
en el término medio.

Podemos ver en la actualidad algo de la filosofía de Platón reflejada, como la dialéctica

como analogía con la política. Así pues, políticamente la dialéctica platónica nos limita,
nos obliga a estar encerrados en este mundo, cuando lo que queremos la mayoría de
nosotros es ser libres, elegir la posibilidad de aspirar a algo más sin conformarnos
únicamente con lo que la naturaleza nos ha dado.