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Esta es otra superproducción de Buba Cómix

13 MUERTES DE BUBA
Trece acuarelas fúnebres de José Quintero

Primera edición electrónica: 5 de Abril de 2005

Derechos Reservados
© 2002-2005, José Martínez Quintero
josequintero@planetabuba.net

Versos, ilustraciones y dirección de arte:


José Quintero
http://www.planetabuba.net

Diseño gráfico y curaduría:


Nieves Dánae

Prólogo mortal y aval académico:


Ernesto Priego
http://neverneutral.blogspot.com/

Corrección de estilo y coucheo de redacción:


Christian Ordóñez
http://sombrainvisible.blogspot.com/

Se prohibe, so pena de muerte, la reproducción


total o parcial de esta obra –por cualquier medio–
sin el consentimiento por escrito del titular de los
derechos e izquierdos correspondientes.

¡Impreso en México, cabrones!


buba:
-
la muerte nina
y los colores
del instante
ernesto priego
Esta noche me has dicho sin palabras
que debemos entrar en la muerte
como quien entra en una fiesta.

Jorge Luis Borges

El personaje más coherente y atractivo de la todavía novel historieta

alternativa mexicana es mujer y es niña: Buba constituye el homenaje

cínicamente postmoderno de una forma de expresión condenada por sus

ignorantes detractores a la supervivencia como forma exitosa de trascender.

Buba, la sirena de los brazos mochos, la niña alada de botas industriales,

dueña de mascotas demoniacas, el sexo azul de un hada de guantes carlbarkianos

y asesina permanente de icónicas y únicas deidades, es lo más cercano que

tenemos en México a una verdadera propuesta autoral contemporánea que

desafía y al mismo tiempo hace homenaje a la más exquisita y escatológica

tradición del cómic underground. Buba, cúmulo de paradojas e ironías, se

burla con desparpajo de una aburrida izquierda sin sentido del humor y de

un mundillo académico onanista y autocomplaciente.

José Quintero es el autor de un planeta atemporal que se transforma

intestinamente, pues finca su idea del paso del tiempo en la capacidad del
cómic para representar el devenir de su personaje a través de la distribución de las imágenes en el

espacio sideral de una página, ofreciéndonos un ejemplo de belleza construida a partir del aforismo

historietístico, del poema versificado que se ríe de sí mismo y se toma muy en serio. Las Trece

muertes de Buba es un libro que marca la epidermis como un tatuaje que festeja la permanencia del

arte frente a lo efímero de la vida y es, desde luego, un regalo, un premio para quienes sobrevivimos

a la muerte cuando niños, para quienes superamos nuestros miedos, o así lo creímos... Es, también,

la congruencia de un mundo ficcional que sigue un riguroso discurso y que permite apreciar a un

creador plástico capaz de llevar la estética underground (usualmente en blanco y negro) al cromatismo

estridente de unas acuarelas cuasi-kitsch que se oponen a una temática tradicionalmente terrible,

lúgubre y sombría. Este es, pues, un libro para niños sobrevivientes (que eso somos los que nos

creemos adultos), donde el tema es –nada menos– la muerte.

Puesto en marcha de una idea anteriormente conocida, la Muerte trágica no. 13 (publicada en junio

de 1994 en La Mosca en la Pared), el libro que tiene el lector en sus manos es una celebración de

nuestra infantil debilidad frente a la muerte; exhortación a la risa trágica, risa primera que devendrá

mueca, quizá lágrimas; colección de retratos del verdadero instante decisivo: los instantes

usualmente indetectables que preceden la llegada de la muerte. Pepe Quintero sabe que nuestro

amor por la belleza nos obliga a crearla, por eso imagina y compone las formas de la muerte a través

de lo que no es, porque lo que intenta hacer es una especie de imposibilidad, pintar eso que nadie

conoce, que nadie ha visto, al menos no en carne propia: la imagen misma de lo que no puede ser

(porque la muerte es la ausencia absoluta, y representarla se antoja imposible). Por eso, Quintero

nos presenta viñetas-ventana que muestran los instantes previos a la muerte, y la muerte en Buba

aparece, entonces, como una contradicción: la muerte como efecto, la muerte como un llegar a ser.
Así, somos invitados a la fiesta de las muertes de Buba,

una muerte plural, jamás única, repetida en número

fatídico pero, al fin y al cabo (y lo sabemos), la

representación de lo imposible.

La obra de José Quintero es el testimonio de un potencial

creativo pocas veces visto: se trata de un estilo léxico-

pictográfico exquisitamente complejo en donde la imaginación literaria comparte espacio

textual con la retórica de un trazo seguro y sin falsas pretensiones. Allí, las atmósferas

enrarecidas son reminiscencias de los cielos, y las cúspides enloquecidas de un

Nietzsche ya senil comparten la idea del torbellino imparable del progreso que presencia

una Buba cada vez más cercana al ángel de la historia que viera Walter Benjamin en

cierta pintura de Paul Klee. Como lo dijera el poeta William Carlos Williams (sobre

el poema más famoso de Allen Ginsberg, Howl), habrá que agarrarse las faldas, porque

al ver, al leer este libro, iniciaremos un descenso al inframundo. Y el inframundo está

aquí, en el umbral, en la antesala, en estas páginas que muestran los colores del

instante, la muerte niña que sobrevivimos pero que, hasta ahora, no nos atrevíamos a

mirar. Habrá que volver a la infancia, regresar a nuestra capacidad quizá perdida de

sentir un pesar desvalido, para entrar con Buba a la muerte como si se tratase de una fiesta.

Ernesto Priego.
1
deja Que jueguen
-
tus ninos
A tu espalda, detrás tuyo,
donde tu vista no alcanza,
donde se apaga el cocuyo;
donde la desesperanza.

Detrás de ti se abalanza
el monstruo de lengua helada,
sin que pueda detenerlo
el bozal de tu mirada.
deja Que jueguen tus ninos
-
acuarela / papel
1999
2
deja Que jueguen
-
tus ninos LL
Si me dices con quién andas,
yo te diré de qué mueres;
¿andas detrás de querubes?
¿tienes con ellos qué veres?

Si en granjearte los quereres


de los alados insistes,
tendrás la sangrienta gracia
de morir por quien no existe.
-
deja Que jueguen tus ninos LL
acuarela / papel
1999
3
pase usted

De hueso ha de ser tu casa,


postmórtem será tu idilio,
y el vientre que todo amasa,
tu próximo domicilio.

Como a un feto en el exilio,


en el país de los huesos,
tu madre la Calavera
te habrá de comer a besos.
pase usted
acuarela / papel
1999
4
el gran pez

Del mar, donde el cielo asoma,


viene el gran pez a comerte
porque es ley, verdad y axioma,
que al débil lo coma el fuerte.

Y el leviatán de la muerte
acude al puntual llamado,
donde tú eres el que pesca,
pero tú eres el pescado.
el gran pez
acuarela / papel
2000
5
ave nietzscheana

Como niños inocentes,


como joyas olvidadas,
Dios coloca sus presentes,
los custodia con espadas.

Sufren las mentes preñadas


de verdades, y no hay cura
si hace nido en sus almohadas
el ave de la locura.
ave nietzscheana
acuarela / papel
2000
6
-

lagrima de sangre

Al saberse una mentira,


llora Dios su cruel destino;
de su ojo, que todo mira,
nace un llanto solferino.

Y sembrando va el camino
de ensangrentadas semillas,
y el hombre cosecha el fruto
de sangre, clavos y astillas.
-

lagrima de sangre
acuarela / papel
2000
7
-

arbol del
conocimiento
La opinión de la retina
vale más que el pensamiento;
la “verdad” no es alimento
sino exceso, golosina.

Por eso el conocimiento


ha de rechazarse a priori
(o sufrirse a posteriori,
como Adán en su momento).
-

arbol del conocimiento


acuarela / papel
2001
8
coordenada

Aunque oculta y clandestina,


bajo esta tierra minada,
tu suela ha de hallar la mina
que le ha sido reservada.

En la exacta coordenada
en el mapa de la muerte,
se halla la bomba paciente
esperando tu pisada.
coordenada
acuarela / papel
2001
9
volantinero
con diablo
-
-

[bajo zaratustra de la montana]


Si el Diablo ve con recelo
tu paso lento y cansino,
si su aliento mortecino
derriba tu frágil vuelo,

precipítate con calma,


sírvate esto de consuelo:
que antes de tocar el suelo
ya habrá fallecido tu alma.
volantinero con diablo
acuarela / papel
2001
10
pulpo
¿Viene la muerte a buscarte?
Has de esperarla sentado,
correcto, bien educado,
sereno y sin inmutarte.

Saber morir es un arte,


un desplante de buen gusto:
dominar –gallardo– el susto;
claudicar… desintegrarte.
pulpo
acuarela / papel
2001
11
icaro
-

Caerás como una roca


que alguien arrojó a la Nada:
inerte, ciega, ignorada,
triste, sin alma y sin boca.

Caerás de mi memoria,
tu faz ha de ser borrada.
Como una estrella apagada,
caerás sin pena ni gloria.
icaro

-
acuarela / papel
2002
12
la casa de
-

asterion
¿Quién es la bestia endiablada
cuya testa el aire surca,
cuya casa se bifurca
en prisión multiplicada?

Comprendes, más por instinto


que razón elaborada:
la vida es el laberinto,
la muerte es la bestia astada.
-
la casa de asterion
acuarela / papel
2002
13
-

Corazon
de muerto
En vientre de hembra preñada
(útero de sangre y lodo),
¿qué ve tu vista apagada?
No ve nada y lo ve todo.

¿Y el alma? Fue evaporada.


¿Y el cuerpo? Seco, desierto.
Justo en medio de la nada
nace un corazón de muerto.
-
Corazon de muerto
acuarela / papel
2002
a la memoria de Guset
(1989-2002)

a quien le encantaba comer,


querer y vivir.
-
jose quintero
México, D.F. 71.04.05

Dibujante autodidacta, domador de historietas, cultor del verso y del axioma, artista
siempre abismado en las grandes incógnitas del ser humano. Ha publicado el recopilato-
rio Buba cómix, volumen 1 (Vid, 2000) –hoy volumen 1.1 (Vid, 2004)–, el poemario
ilustrado Buba y Blue Demon contra los filósofos postsocráticos (edición del autor,
1999), y el minicómic metafísico Planeta Buba (edición del autor, 2001).
Subsidia su pureza historietística prostituyéndose como ilustrador comercial. Gusta
deprimirse y acariciar cotidianamente sus tres heridas: la del amor, la de la muerte y la
de la vida.

-
nieves danae
México, D.F. 76.08.27

Estudió diseño gráfico en la Facultad de Arquitectura de la Universidad Autónoma del


Estado de México. A sus dotes como diseñadora es menester añadir sus buenos oficios como
museógrafa, curadora, editora, directora de arte, cocinera, amante y esposa.
Actualmente se desempeña como Gerente general de SEPS en Editorial Expansión.
La colaboración de Nieves en Las 13M no se limita al diseño gráfico y editorial, terapias psi-
coanalíticas, alimentación, hospedaje y arrumacos; su labor de convencimiento e insistencia
en la realización del proyecto fueron fundamentales para esta publicación.

ernesto priego
México, D.F. 75.04.02

Es licenciado en lengua y literaturas modernas inglesas por la Facultad de Filosofía y Letras


de la Universidad Nacional Autónoma de México, sede académica donde actualmente se
desempeña como profesor. Ha colaborado en diversas publicaciones nacionales y extranjeras
con sus audaces y culteranas críticas, reseñas y ensayos literarios. Su columna, La mariposa
inmóvil, aparece dos jueves de cada mes en la sección cultural del diario El Financiero.
Actualmente publica su mamonsísimo blog neverneutral en el URL:
http://neverneutral.blogspot.com/.
-
ceci martinez
México, D.F. 81.05.01

Después de haber creado a Buba –personaje fundamental de la historieta mexicana–, Ceci Martínez
se retiró del ingrato oficio del cómic autoral a la tierna edad de ocho años, avergonzada de aquel
pecado de juventud, finiquitando así una de la trayectorias más fugaces de las que se tenga memo-
ria. Egresada de la carrera de diseño gráfico por la Universidad Autónoma
Metropolitana–Xochimilco, actualmente trabaja como diseñadora e ilustradora freelance, e insiste
en no querer saber absolutamente nada de la historieta.
se imprimió electrónicamente en la Ciudad de México
durante el mes de Abril de dos mil cinco del año del señor,
en una iMac G5 que responde al nombre de Buba IV.

El cuidado de la edición electrónica estuvo a cargo


de Nieves Dánae, José Quintero y Christian Ordóñez Bueno
(el hemerógrafo de Buba y nuestro insobornable
inspector de Ortografía).

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