Los Jóvenes, una mirada al ámbito local.
* desconexión entre los vecinos y sus municipios, y más aún es el
El pasado 12 de agosto se celebró el día internacional de la
juventud, hecho que pasó inadvertido en nuestro país, a pesar de la
existencia de un organismo del Estado avocado al tema, como el
SENAJU1. Podría ser anecdótica la situación pero por el contrario
resulta sintomática, puesto que revela su poca acción y escasos
niveles de posicionamiento2. No digo que sea una fecha para
celebrar, por el contrario, hubiera sido una buena oportunidad para
renovar fuerzas y reflexionar sobre los avances y deficiencias que
existen en materia de juventudes, evaluando la posibilidad de
replantear estrategias y/o nuevas alternativas. Es bajo esta lógica que
nos proponemos reflexionar el tema de jóvenes retomando la
perspectiva del ámbito local y en ese camino deslizo algunas ideas
para provocar el debate de nuevas opciones.
Considerando que las municipalidades son los órganos de primera
línea, es decir los que se encuentran más cerca a la ciudadanía, y
tienen como uno de sus principales propósitos, promover el
desarrollo social de los vecinos. Pero en los hechos vemos gran
1 podemos encontrar en Macassi, 2004. Lo habitual en los municipios es un trabajo poco
*Catherine Paredes Quispe Bachiller en Ciencia Política UNMSM
Actualmente el ente encargado de las Políticas Juventudes es el SENAJU adscrito al
Ministerio de Educación. Previamente existió el CONAJU.
2 Según Censo del INEI del año 2007 los jóvenes son 7 554204 habitantes.
El 59% de entrevistados por el IOP de la Universidad Católica el año 2007, manifestó
que no había escuchado hablar del CONAJU, al año siguiente, la misma encuestadora hizo
repito la pregunta a pesar que dicho ente, ya había desaparecido para dar paso al SENAJU.
Esto revela el poco posicionamiento de un espacio responsable de dirigir las políticas
Juventudes, en un contexto donde el 93% de entrevistados estaba de acuerdo con la
existencia de una institución dedicada a la juventud.
distanciamiento que existe con los jóvenes3. Ahora bien, dentro de
los nuevos paradigmas de estudios relacionados a juventudes, se
concibe a los jóvenes como potenciales protagonistas e impulsadores
del desarrollo de la comunidad. Pero la pregunta es cómo pueden ser
los jóvenes impulsadores del desarrollo si los jóvenes no participan
en el quehacer habitual de la política. Y es evidente que la
participación de los jóvenes no se genera de manera espontánea, para
ello es precisa la apuesta por procesos, que creen las condiciones
para dicha participación, y eso inicialmente pasa por extender
necesarios lazos de confianza hacia ellos.
La falta de oportunidades en los jóvenes
Los jóvenes entre 15 y 29 años representan el 27,5 % de la
población total del país4 y el problema que más los afecta es el
desempleo. Las cifras al respecto son alarmantes, la tasa de
desempleo es de aproximadamente 18%5, además “de cinco millones
de jóvenes, cerca de tres millones están fuera de la PEA”6 Esto es
notorio en la propia percepción de los jóvenes, quienes identifican la
3
Algunas excepciones en la gestión de municipalidades en materia de juventudes, la
organizado y desarticulado entre las diversas áreas que tangencialmente abordan el tema y
en otros casos, la falta de continuidad en programas y proyectos dirigidos a los jóvenes.
4
5
Datos del Proyecto Promoción del Empleo Juvenil en América Latina-PREJAL que figura
en la página web: http://prejal.oit.org.pe/docs/ficheros/200711210019_4_2_0.pdf
6
Palabras vertidas por Luis Gonzáles Gómez de Aranda, Consejero Técnico Principal del
Proyecto Promoción del Empleo Juvenil en América Latina-PREJAL en entrevista al diario
el Comercio.
falta de oportunidad laboral como la principal dificultad para
incorporarse a la vida adulta7 .
Cada año más jóvenes terminan los estudios secundarios, por
ejemplo, al finalizar el 2003 aproximadamente 390 mil estudiantes
egresaron de los colegios, de ellos 166 mil, al año siguiente, no
estudiaban ni trabajaban8, es decir se encontraban en situación de
inactividad. Muchos de ellos seguramente tenían expectativas de
seguir estudios superiores pero no contaban con los medios, ni las
oportunidades para hacerlo.
A este panorama adverso para los jóvenes en el plano laboral 9 habría
que agregar otros problemas que también los afectan: la violencia,
reflejada en las pandillas; en el lado de la salud, los altos índices de
embarazo adolescente y en el plano educativo, la baja calidad del
sistema público, que a decir de los jóvenes contribuye a su
frustración10. Consecuentemente es notorio el bajo nivel de
participación social y política, situación que recalco, sería el
resultado de una seria de factores, entre ellos, los antes descritos.
7
Encuesta de opinión realizada por el IOP de la Universidad Católica en Lima
Metropolitana -Julio 2008.
8
Datos consignados por Juan Chacaltana en “Inserción laboral de jóvenes: resultados del
estudio en Perú”.
9
Por su parte el Estado ha tratado de enfrentar este y otros problemas que afectan a los
jóvenes con Programas, como Projoven, creado a fines de la década del 90 pero que a pesar
de su continuidad no lograr mayores resultados. Un interesante trabajo al respecto es:
Empleo juvenil en el Perú situación actual y perspectivas de Carrascal, Ursula y Gina
Bardelli, 2004.
10
Al respecto indispensable: Carlos Aramburú (2006)
La apatía y desconfianza más presente que nunca
Esta aversión de los jóvenes hacia la política, es posible ya
constatarlas en encuestas que datan desde el año 2000, donde
aproximadamente el 61% de encuestados la calificó como una
actividad negativa, mientras que solo el 11% la calificó en términos
positivos11.
Pero la historia no dice que esto no siempre fue así, y más aún, en la
actualidad todavía hay voces que evocan de manera nostálgica el
activismo político y social de la década del 60 y 70 y reclaman en
los jóvenes de hoy un rol más activo.
Caeríamos en un error al pretender comparar la situación de apatía
en los jóvenes de hoy en día con el activismo político de décadas
pasadas, carecería de validez, ya que nos referimos a dos contextos
sumamente diferentes; el sistema político que regía en aquel
entonces era post oligárquico y caracterizado por el populismo12 y el
activismo político estuvo conformado, en su gran mayoría por
universitarios, “no había organización política que no encuentre
en el movimiento universitario una fuente para la formación de
sus liderazgos. A fin de cuentas, el movimiento universitario era
parte del circuito político cultural”13, con un discurso
11
Cf. VENTURO, Sandro. Contrajuventud. Lima: Tarea Asociación Gráfica Educativa,
2001, p 106.
12
Cf. VENTURO, Sandro. Contrajuventud. Lima: Tarea Asociación Gráfica Educativa,
2001, p. 93.
13
Ídem, p. 99.
predominantemente de izquierda marxista maoísta, a decir de
Chávez Granadino, y "por lo general el movimiento universitario
tuvo una dinámica reactiva: se activó cada vez que la escena política
nacional se polarizaba"14.
Pero una pregunta sigue pendiente, qué conjunción de circunstancias
nos llevaron en poco menos de una década a vivir situaciones tan
diferentes en un grupo específico poblacional. Al respecto Sinesio
López manifiesta que “la violencia política de los 80 y las crisis
económicas y sociales vividas durante la década del 90"15 son
elementos determinantes para entender dicha situación, además
agrega que los cambios culturales afectan principalmente a la
juventud, pues es en ellos donde cala muy hondo los valores
individualistas, propios de la época.
En esa línea Venturo distingue claramente que lo que existió en los
60 y 70 fueron movimientos juveniles y en específico “movimientos
estudiantiles”, mientras que a partir de los 80 existen solo movidas
juveniles sin “ningún protagonismo político en el país y mucho
menos alguna forma de intervención en el sistema político”16.
14
Ibídem.
15
La información al respecto se puede encontrar en “Los Mapas De La Sociedad Civil”
documento de trabajo elaborado por Sinesio López, diplomado de la PUCP.
16
Ídem, p. 100.
Al respecto Sinesio López presenta datos estadísticos sobre los
niveles de participación de los jóvenes, la misma que en
comparación con el resto de la población es menor. “El 57.5% de los
mayores de 35 años participa en alguna organización mientras que
sólo el 38% de los jóvenes entre 18 y 24 años está organizado” y
además el 87.1 % de los jóvenes manifiestan pertenecer sólo a una
organización o no pertenecer a ninguna, el 18.7% de las personas
entre 25 y 34 años pertenecen simultáneamente a diversas
organizaciones. Es válido aclarar que muchas de las organizaciones
en las que participan los jóvenes son de carácter deportivo, cultural o
espiritual y no necesariamente políticas, puesto que la participación
activa fuera de los ambientes universitarios son prácticamente
nulos; de esta manera el 62% de jóvenes entre 18 y 24 años
muestras bajos y muy bajos niveles de ciudadanía activa.
Considerando; tal como señala Sinesio, a las crisis sociales y
económicas, además de la violencia vivida durante los 80, habría que
tener en cuenta el contexto actual de desempleo en los jóvenes.
En los últimos años ha habido un creciente interés por estudiar el
fenómeno juvenil desde diferentes perspectivas17, varias de ellas
centran la perspectiva del análisis de los jóvenes al ámbito cultural,
en aspectos como la música y el deporte, con el objeto de entender
los intereses y necesidades a través de su lenguaje.18
17
Véase Feixa, 1999, Reguillo 2000 y Macassi, 2001.
18
Véase la Encuesta de opinión realizada por el IOP de la Universidad Católica en Lima
Metropolitana en Agosto del 2007 y Julio 2008.
Frente a ese escenario adverso en el que se encuentra enmarcada la
realidad de los jóvenes, se han impulsado, a lo largo de los últimos
años, diversos proyectos y programas, pero con escasos niveles de
impacto. La principal dificultad que se presenta con frecuencia en
dicho abordaje, es el escaso interés de iniciar procesos de mediano y
largo plazo, tanto a nivel de los responsables de diseñar e
implementar las políticas públicas de Juventudes a nivel nacional
como local. Por el contrario es una constante los programas o
proyectos basado en aspectos deportivos y/o recreativos que giran en
torno a acciones aisladas, cuando en la actualidad recientes
investigaciones sobre Juventud en las ciencias sociales muestran la
relevancia de los aspectos culturales en la interacción social de los
jóvenes.
La postergación de un trabajo serio y responsable que implique
recursos y perspectiva democrática con los jóvenes contribuirá a la
agudización de los niveles apatía, desinterés y desconfianza.
El rol del ámbito local
El reto de trabajar el tema de juventudes desde los municipios es
grande, requiere visión y continuidad en la política de juventudes
locales.
Como se ha repetido innumerable cantidad de veces la mayoría de
jóvenes no tiene interés en la participación política, para ellos la
lógica de la vida, va en el sentido de desarrollo individual, pero esta
colisiona muchas veces con grandes trabas al momento de insertarse
en el mundo laboral19, teniendo como consecuencia un hecho más
grave, el no lograr compenetrarse dentro de la sociedad. Por su parte
los gobiernos locales al ser promotores del desarrollo de la
población, abordan el trabajo con los jóvenes a través de programas
y proyectos, pero descuidando elementos básicos, como reconocer
las características propias de su población juvenil, presupuesto y
continuidad en el tiempo y lo más importante sin reconocerse como
elemento negativo, adverso a los ojos de los jóvenes, es decir sin
comprender que la apatía y el desinterés hacia la política y la
desconfianza es dirigida a los políticos y también a las instituciones
(como la municipalidades), esta es la primera barrera a romper para
iniciar un trabajo fructífero con y para los jóvenes.
Es vital apostar por generar procesos en la implementación de
políticas locales en materia de juventud, creando las condiciones
para la participación de los jóvenes y no esperar que dicha
participación se produzca de forma espontánea ante un programa,
proyecto o espacio propuesto.
Crear las condiciones pasa por construir lazos con los jóvenes, dar
muestras de voluntad y ello implica un respaldo presupuestario,
19
Tal como hemos dado cuenta al inicio, la necesidad de trabajo y de mejor educación son
los principales elementos que los jóvenes identifican para la incorporación a la vida adulta.
además pasa por un cambio en el paradigma que las 2008 “Medidas contra el desempleo juvenil. Entrevista a
municipalidades tienen sobre los jóvenes, y empezar a considerar el Luis Gonzáles Gómez de Aranda”. El comercio.
Lima, 14 de octubre de 2008. Consulta: 16 de
diseño de programas, proyectos y espacios a partir de lo que los Enero del 2009.
mismos jóvenes quieren o necesitan y no sobre las ideas que los < http://perupaisdiferente.blogspot.com/2008/10/
responsables de las políticas suponen que los jóvenes quieren o medidas-contra-el-desempleo-juvenil.html>
necesitan. Se desprende de esto último la necesidad de personal
LÓPEZ, Sinesio
interdisciplinario enfocado a un fuerte trabajo de campo que Los Mapas De La Sociedad Civil. Portal de la
acompañe dichos procesos. Escuela de Gobierno y Políticas Públicas de la PUCP.
Consulta: 10 Julio del 2009.
<http://www.pucp.edu.pe/escueladegobierno/nuevo/
Fuentes: index.php? option= com_content&task= view&id
ARAMBURÚ, Carlos =77&Itemid=275#>
2006 Situación y desafíos de la juventud peruana. Portal de
PREJAL. Lima, Junio. Consulta: 15 junio del 2009. VENTURO, Sandro.
<http://prejal.oit.org.pe/docs/ficheros/20070927001_4 2001 Contrajuventud. Lima: Tarea Asociación Gráfica
_2_0.pdf> Educativa.

CHACALTANA, Juan
2005 Inserción laboral de jóvenes: resultados del estudio en
Perú [diapositivas]. Lima. Consulta: 20 de Mayo.
< http://www.scribd.com/doc/8537565/Insercion-Laboral-
de-Los-jovenes-Resultados-Del-Estudio-en-Peru >

CHÁVEZ, Jorge Granadino

1990 ¿Los jóvenes a la obra?: juventud y participación política.
Lima: Agenda.

LEÓN, Azucena