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Rr See So ee ey Ce ey Ss eee Ray 1940 a 1970, tenemos los grandes acontec JOSE AGUSTIN TRAGICOMEDIA MEXICANA | La vida en México: rere nesetta enietens de 1940 a 1970 @ & § g £ 5 Q o £ & g a a 2 3 8 8 HH ‘Autores mexicanos en Booket Cantos Mowreuavon os informes secratos Cantos Fuentes Cantar de ciegos En esto creo Los cinco soles de México Jones Inancvencorn Los pasos de Lopez Laley de Herodes Elrey se acorea a au templo De pert La tumba Cerca del fuego ‘Ahi viene la plaga a mio! ceramada Wecenre Leteno Loe albation ‘Auorues Masraerts ‘Areéneame ia vida Mujeres de os grandes ‘canoo Onozco El album de Amada Diaz Francisco Vila oe Jusees Juan Jost AnnEoUs iateria, Gonfabulario| Bestiaro, Enmoue Senna Une sofaba que ora rey Seria México Lue Srote Las horas violetas Las grandes aguae Le plaza Paco fonacio Taito I La Dioclta de Leonardo Cuatro manos Eresto Guevara también ‘conocido como el Che anos Taito Diaz Er exo: un relato de tar La rabelién de aa canadae La noche navegable fonacie Panna SI volviesen Svs Maiestade Bennanoo FennAnoez Tiempo de alacrane ‘Tragicomedia me: {© 1990, 2007 José Aeustin Rs Derechos reservados © 1990, 2007, Eatrial Planeta Mexicana, S.A. de CV. Bajo el sll editorial BOOKET na ‘Avenida Presidente Mask i, 111,20. pso Colonia Chapuitepe Morales (CP. 11870 Mexico, DF. ‘wo editrialantscom me Diseo del prada: Ana Pala Divila Fotografia de porta: German Romero! Cuaroscuo Fotografia del autor: Ramses Ramirez Primera edd: febrero de 1991 ‘Segunda edicin: julio de 1998 Primera edi en esta presetacin de book: bil de 2007, ‘Quit reimpresin: abel de 2017 ISBN-13:978-970.37-01353, ISBN-10;970-37.01353 [No 80 permite In reprodcsién total o pascal de este libro ni su incorporeion a un sistema informitio, ni su tansmisién en cuaguie orm 9 por cuuluier modio, sez este electronica, mecénice, por fovocopia, por grabacin uw owen métodos, sin ef piso previo y por ‘ert de os tule del eoprigh. [Es infacciém de Tos derechos mencionados puede ser consittiva de elo conva ls propiedad intelectual (Ars. 29 y siguietes de la Ley Federal de Derechos de Autry Ate, 424y siguientes del Cdigo Peal). Impres en los talleres de tema, S.A. de CV cults nm, 43, colonia Sten, México. DF. Inpresoy hecho en México ~ Printed ar made te Mexico José Agustin Tragicomedia mexicana 1 La Vida en México de 1940 a 1970 A Andrés, Jesis y Agustin, ‘que les sa lee! 7 4 Mercedes Certucha -y Homero Gayosso 1. LA TRANSICION (1940-1946) AQUI VIENE HUEVOS DE Oxo! En 1940, Diego Rivera y Frida Kablo se casaron por segunda ‘vez y México pisaba la cola del tigre. Se vivia una intensa agi- tacion. Las medidas revolucionarias de Lazaro Crdenas (re forma aprasia,fortalecimiento de obreros, educacién socialists yexpropiacién petrolera) beneficiaron al pueblo pero también despertaron una active oposicign de teratenientes, patrones, Iaiglesa y pare de la clase media de las ciudades. Todas estas fuerzas identificaron a Cardenas como un peligro comunista 1yse defendieron atacando: las inversiones se contrjeron, se fugaron capitales y se desat6 una fiebre especulativa de terre- ‘nos urbanos, queen 1940 sumentaron de valor hasta en 200 por ciento. Los ticos también se lanzaron @ comprar lujosos au- tos importados, y los Packards, Lincolns y Cadillacs circula- ban as calles, pavimentadas 0 no, de las ciudades mexicana: Las grandes compaiias extranjeras, por su parte, cont buyeron al desorden econémico al retirar su dinero de los bancos mexicanos, étos de plano dejaron de conceder prés- tamos. Para no varias, el gobierno siguis sobregirandose y por tanto imprimis billetes con energa; los aumentos de precios, especialmente en bésicos, ahondaron la earestia y acabaron de ‘exasperar a toda la poblacién, pues nadie se reponia atin de los efectos de la expropiacidn petroleray se presenciaba, pro- ccurando no preocuparse demasiado, la gran guerra que tenia lugar en Europa, Africa y Asia. El rechazo a Cardenas beneficié a dos caueillos militares: Joaquin Amaro, radical de derecha, y el “moderado” Juan An- ‘drew Almazén, ex huertista, "hombre de negocios y de mando «de ropas”, quien en enero de 1940 constituysel Partido Revo- lucionario de Unificacién Nacional (Pt). Amaro no se que ati y armé la Federacién de Agrupaciones Revoluciona- ‘Oposicionistas (FARO). Los dos flamantes disidentes del sistema anunciaron sus candidaturas a la presidencia de la re- pblicay (Almazin con mayor cautela) se pronunciaron en con- tradela educacién socialist, de los dos, dela Confederacién de Trabajadores de Mexico (CT™), laizquierds, la expropiacién petrolera yla antidemocracia del partido oficial. Ambos se pro: ponfan “restablecer la confianza de ls inversionsta y ectf carlos errores cometidos” Sin embargo, al poco rato fue claro que Almazén aventajaba con mucho a Amaro. Laenorme fuerza que cobrabala derecha fue determinan- te para que el presidente Cardenas eligiera sucesor, pues entre sus reformas al sistema no se inclufa la voluntad de democra tizacién sino mas bien Ia consolidacién de los poderes presionantes de la presidencia. En el Partido de a Revolucién, Mexicana (PRM) eran visibles dos campaiias vigorosas que buscaban la candidatura oficial a “la grande”. Una de elas, a del general Francisco J. Magica, secretario de Comunicacio: nes, representaballacontinuided y ampliecin de las reformas sevolucionarias,y era la opeién natural de laizquierda, Cér. dlenas sabia que si se inclinaba por Migica, como muy posi blemente lo deseabs, las derechas se exacerbarian en su con tra y la stuacién podia resultarinmanejable. Por tanto, eligid Taotra precandidatura existente, la del general Manuel Avila Camacho, secretario de Guerra y Marina, quien habia logra do ubicarse enel “centro” y resultaba un elemento neutro que ppodia unificar la gran diversidad de intereses que hervian en el rat, ademés de que le quitarfa banderas ala oposicin sin ab- dicar alos prinipios dela revolucién mexicana, “Usted seré el presidente dela replica”, se dice que Lazaro Cérdenas infor méa Avila Camacho. “Y sialguno recibe una tarjeta o carta mia, no le haga easo. Seri porque me vi obligado a darla.” ‘Lézaro Cardenas utilize todo el aparatoso peso de su in vestidura en favor de su clegido. Lo junt6 con Vicente Lom- bardo Toledano, el viejo lobo de Mars, secretario general de la entonces muy poderose CTH, y loge que el insigne maes- tron alto oportunismo apoyara a Avila Camacho, pues “ha bia que escoger”, sentencié Lombardo, “no al hombre gue iis ofreciera al movimiento obrero sino al que garantizara la R tunidad del pueblo mexicano y su sector revolucionatio” Con cto, el general Migica empezs a deci adi6s a sus ambicio. nes presidenciales, La Confederacién Nacional Campesina (NC), el siempre débil y manipulable sector campesino, también satistizo los ddeseos del presidente y apoy6 la candidatura de Avila Ce- ‘acho. Lo mismo ocurti6 con una mayoritariacantidad de militares (el sector més conflictivo del partido) y de gober- inadores liderados por el joven y afanoso mandatario de Vera- cruz, Miguel Aleman, quien fue nombrado secretario general del Comité Pro-Avila Camacho, con lo cual aseguraba pric ticamente su viaje en el préximo gabinete ‘Ya con toda esa fuerza detris, Avila Camacho subi et vo- Jumen conservador de su campafia y no se cansaba de sugeric que levaria a cabo las rcctficaciones que se exigian. Pore lado dela oposicién, Joaquin Amaro vio que tenia escasas posibi- Tidades de gana y, gruiiendo, se retird del juego electoral. ‘Tambien se habia registeado la candidatura de Rafael Sénche2 Tapia, quien se lan26 por su lado, pero jams tuvo la ‘menor fuerza. El Partido de Accién Nacional (PAN) apenas habia sido fundado en 1939 por Manuel Gémez Morin y no present6 candidato ala presidencia, pero apoyé a Andrew Al Por tanto, todas las expectativas estaban puestas en Ma- rnuel Avila Camacho, que contaba con el aplastante apoyo del zobiemo, yen uan Andrew Almaz, cuya “ola verde” crecia yy erecia en as ciudadesy obteniael apoyo de mucha gente. La campaiia de Almazin pronto se conwiti6 en una verdadera amenaza, yl gobierno y el Pax‘ urdieron una despiadada “gue rra sucia” contra los almazanistas. En varias ciudades (Mon terrey, Puebla, Pachuca, por ejemplo) las autoridades locales reprimieton duramente a la oposici6n y hubo numerosos muertos y heridos; en muchas otras partes dela replica ‘obstaculizaba y hostilzaba sistemsticamente toda actividad pro-Almazén, Todas estas circunstancias fueron enrarecien- ddo ominosamente la armésfera politica del pats B

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