La segunda década del siglo XX significó la aparición de complejos fenómenos
que afectaron a la economía del estado de Veracruz. Aunque no siempre estos cambios fueron en la misma dirección ni dependieron de las proclamas revolucionarias. Con todo y la fuerza popular de los reclamos sociales que frecuentemente han sido considerados como la base ideológica de la Revolución Mexicana, la lucha por el poder se vio influenciada de manera determinante por otros factores cuya fuerza se puede notar en sus alcances económicos. La industria del petróleo con sus fuertes lazos internacionales y la élite que controló la administración de los recursos públicos, logró imponer buena parte de sus intereses, hecho que se corrobora al revisar la evolución de su peso relativo en la estructura económica y del ejercicio presupuestal. El sector petrolero, establecido casi en su totalidad en territorio veracruzano, logró mantener la explotación cada vez más valiosa de hidrocarburos a pesar de las luchas armadas y de la entonces nueva Constitución de 1917 que proclamó la propiedad estatal de los recursos naturales. Al mismo tiempo, los encargados de decidir el destino de los recursos públicos estatales ejercieron su poder y esto tuvo efectos en la estructura del gasto público en el Estado de Veracruz.
No dejaremos de lado lo que pudo significar el apogeo de la industria petrolera.
El estado de Veracruz contó con un impulso económico apoyado en la capacidad de esta para absorber mano de obra y es posible afirmar, de acuerdo a la información revisada, que la capacidad de las compañías petroleras de intervenir en los conflictos armados nacionales logró mantener cierta calma en el territorio veracruzano. Es decir, la importancia estratégica de la industria petrolera influyó de manera determinante para que la Revolución Mexicana no significara la parálisis de la economía veracruzana.
El análisis de los egresos del gobierno del Estado de Veracruz nos da un
panorama interesante. Mientras el movimiento revolucionario se vio compuesto en parte por las proclamas populares, principalmente campesinas, la actitud de los primeros años de un régimen posrevolucionario no muestra señales de una vocación social. La concentración del gasto de gobierno estatal en los rubros correspondientes al ejecutivo y a las asignaciones económicas directas correspondientes al ramo con nombre de clases pasivas, nos habla de que quienes controlaron el gobierno de Veracruz concentraron el poder económico en el ejercicio de los egresos a nivel estatal, y esto se tradujo en el beneficio de un reducido grupo poblacional que bien puede relacionarse con las élites revolucionarias.
Esta interpretación se ve apoyada por la significativa reducción en el gasto del
gobierno estatal dirigido a un rubro que definimos en este trabajo como gasto social, compuesto por los ramos de instrucción pública, beneficencia social y Comunicaciones, Obras Públicas, Agricultura E Industrias.
De manera general, podemos afirmar que la revolución tuvo una importante
relación con el acomodo de las fuerzas en pugna por el poder político. Los recursos económicos generados por el auge petrolero funcionaron como fuente de financiamiento para el gobierno de Carranza establecido en el estado alrededor de 1914 por medio de los impuestos estatales a la extracción y exportación del crudo principalmente. Este hecho fue fundamental para que este estuviera en posición de triunfo hacia el final de la revolución, consolidando el principio de un régimen posrevolucionario.
En este nuevo orden no se vio reflejado un interés manifiesto por dirigir
recursos del gobierno estatal hacia los sectores sociales amplios, concentrando el ejercicio del presupuesto en un reducido número de personas, relacionadas con el poder político de los grupos gobernantes de principios de la década de 1920. Esto da cuenta de que, al menos en los primeros años del régimen nacido de la revolución, se ejerció una política económica centralizada que redujo el gasto destinado a sectores amplios de la población para dirigirlo hacia un grupo en especial, relacionado con el poder político emergido de la Revolución Mexicana.