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Este documento discute el objeto de estudio de la psicología y la existencia del alma. Argumenta que existen múltiples psicologías y que decir "la Psicología" como un concepto singular es un error. Además, señala que el siglo pasado contempló intentos de una "Psicología sin alma" pero que la realidad del alma ha sido descubierta nuevamente. Finalmente, reconoce que el alma es la realidad del yo.
Descriere originală:
Breve Extracto de una excelente obra del Padre Leonardo Castellani
Este documento discute el objeto de estudio de la psicología y la existencia del alma. Argumenta que existen múltiples psicologías y que decir "la Psicología" como un concepto singular es un error. Además, señala que el siglo pasado contempló intentos de una "Psicología sin alma" pero que la realidad del alma ha sido descubierta nuevamente. Finalmente, reconoce que el alma es la realidad del yo.
Este documento discute el objeto de estudio de la psicología y la existencia del alma. Argumenta que existen múltiples psicologías y que decir "la Psicología" como un concepto singular es un error. Además, señala que el siglo pasado contempló intentos de una "Psicología sin alma" pero que la realidad del alma ha sido descubierta nuevamente. Finalmente, reconoce que el alma es la realidad del yo.
"La Psicologa consiste en observar el rooio esritu en vez de
observar la realidad de las cosas" (Chesterton). Pero el propio es pritu no pertenece a la realidad de las cosas? Y el espritu en general no es la misma realidad de las cosas o por lo menos, uno de sus elementos ms importantes?
Esta conferencia versa sobre el OBJETO de la Psicologa, objeto
que Chesterton considera como un vano narcisismo, como si fuera la Psicologa el vano espejo de una mujer coqueta. Este reproche de Chesterton es justo respecto a varias Psicolo gas; porque existen as, en plural. Decir "la Psicologa" en singular y con mayscula es un error hoy da. Porque eso no existe2. 1. Esta conferencia m uestra la realidad del alma en tres almas geniales: Dostuiew ski, Santa Teresa y Helen Keller. 2. "L a feliz y terrible Psicologa moderna, al que se allega a ella, le aparece como un caos. Por lo menos, como un berenjenal. Vam os a la Psicologa con la pregunta: Qu es el hom bre?' es decir: qu soy yo? Y nos encontram os en un berenjenal. Topamos con enredadsim as discusiones, a veces erizadas de cifras y frmulas algebraicas, otras veces dichas en una lengua pedantesca y sibilina con una term inologa imposible, otras veces plagadas de errores y mistagogias, algunos muy peligrosos; mas si vam os a libros com prensibles, nos encontramos con una superficialidad increble, con clasificaciones de las facultades anm icas con historias clnicas de enfermos m entales, o con Psicologa literaria 'a la violeta' como la Psicologa del toro de Lidia o la Psicologa de la vida conyugal de Trifn y Sisebuta". "N o de balde el viejo H erclito haba dicho seis siglos antes de Cristo: "Los linderos del alma buscando, jam s llegars al trmino, por ms
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Leonardo Castellani
La respuesta al reproche es que el espritu es una realidad, y
una realidad formidable. La realidad del alma! exclama el psic logo suizo C. G. Jiing con asombro. Es el ttulo de uno de sus ltimos libros, quiz el mejor de todos. Cree haber descubierto l "la realidad del alm a", negada en el siglo pasado por los psiclogos llamados fenomenistas3. El siglo pasado contempl el intento de una "Psicologa sin alma". As se llama el libro de Lange (1828-1875), y as podran calificarse innumerables investigaciones, algunas muy finas, como las de Mewmann sobre la memoria. Descariaban ei alma-substancia4, sea por prejuicios filosficos (positivismo5) sea por escrpulos mtodos diversos que em plees: tan profunda cosa es ella"; palabra que A ristteles com ent de esta manera: "esta disciplina es sum am ente difcil; prim ero por su objeto mismo; despus, por la diversidad de los m todos; finalm ente, por la dificultad de definir los fenmenos anm icos" (Castellani, La Crisis de la Psicologa", en F reu d, M endoza, JAUJA, 1996, pgs. 170-173. La cita est abreviada). 3. El fenom ensm o o actuaiism o propone una "Psicologa sin a l m a niega que sustrato o su jeto alguno est detrs de los fenm enos o actos psquicos conscientes y concluye que el YO es una ilusin psicolgica, ilusin inevitable procedente de nuestra "errnea organizacin natural" (Castellani, "D iccionario de Psicologa", "Lange", en "Freud", p. 251). 4. El alma es el principio por el cual vivimos, sentimos, nos movemos y pensamos. Ese principio es algo, es decir, existe: esto no puede ponerse en duda, ni es negado por nadie, ni siquiera por el m aterialismo, que en el fondo d iscute su naturaleza, no su realidad. La "Psicologa sin a lm a " en rigor no negaba la realidad sino de tal clase de alma (es decir, del alma sustancial de concepto com n), pretendiendo reducirla a un "accid en te": a un conjunto de fenm enos. Hume sostena que el Yo slo es un conjunto de d iv ersas percepciones que se suceden con una rapidez inconcebible, y estn en un flujo o movimiento perpetuos. El alma es, en definitiva, el Yo. Que el alma sea sustancia significa que el Yo de todo sujeto consciente est dotado de perm anencia y se reconoce idntico a s mismo (Castellani, "Diccionario de Psicologa", "Alma"). 5. El positivism o slo admite el conocim iento "cien tfico", lim itado a la observacin de los fenm enos en los que trata de hallar relaciones matemticas. Rechaza la M etafsica con su pretensin de explicar la realidad por sus causas ltimas y su recurso a entidades inobservables: una de ellas, la nocin de sustancia.