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Como ya hemos visto, la justificacin es la declaracin legal, por parte de Dios, por la
cual l nos concede Su propia justicia, por los mritos de Cristo. La justificacin es
instantnea, perfecta y permanente. Nuestra salvacin eterna depende de ella. Sin
embargo, a los que Dios justifica, l tambin santifica. Dios no declarar justo a un
hijo Suyo, para luego dejarlo esclavizado al pecado, viviendo como viva antes. No; l
se encarga de transformarlo a Su imagen. La santificacin es el proceso por medio del
cual Dios, por Su gracia y poder, nos va purificando nuestras vidas del pecado, y
hacindonos santos en nuestra forma de vivir.
1. EL CONCEPTO DE LA SANTIFICACIN
La palabra, santificacin, en griego es jagiasmos (1 Cor 1:30; 2 Tes 2:13); viene
de la palabra, jagios, que significa santo. Pero, qu significa santo? Hay dos
conceptos fundamentales que debemos notar:
a. Santificacin Posicional
La palabra santo, tiene el sentido de separado de o apartado para. Los
utensilios del templo, el aceite de la uncin, el Lugar Santo, etc. eran santos,
en ese sentido. Eran cosas separadas del uso normal, y dedicados para el
servicio de Dios. Ver Juan 17:19.
Ese es el primer sentido de la palabra, santo, cuando se usa para describir al
creyente (1 Cor 1:2; Col 1:13).
Hay un segundo sentido, que se deriva de eso, y que tiene una connotacin
ms tica, pero que sigue describiendo nuestra posicin en Cristo, y no tanto lo
que vivimos y experimentamos (1 Cor 6:9-11).
b. Santificacin Experimental
La santificacin posicional exige cierta clase de vida santidad a Jehov. Los
sacerdotes tenan que lavarse, y lavar los utensilios, etc. Tena que ser dignos
para el servicio para el cual se haba separado.
Es lo que Dios hace con la persona a quin l salva. Purifica su corazn (Hch
15:9, griego, katharizo = limpiar). Nos da una nueva naturaleza santa,
que anhela vivir en santidad. As empieza el proceso de la santificacin. Y ese
proceso es de gran importancia.
Seguid la pazy la santidad, sin la cual nadie ver a Dios (Heb 12:14)
Bienaventurados los de limpio corazn, porque ellos vern a Dios
(Mat 5:8)