Documente Academic
Documente Profesional
Documente Cultură
JUAN CHACALTANA
NORBERTO E. GARCIA
JOSE GALLARDO
INDICE
Capitulo I
Los obstáculos en el mercado laboral para la expansión del Sistema de Pensiones.
Capítulo II
La afiliación a pensiones en un sistema reformado.
Capitulo III
La organización del sistema de pensiones
Capítulo IV
Implicancias de Políticas
3
CAPITULO 1
(PERU 1991-2000)
NORBERTO E. GARCIA
INDICE
CAPITULO I
Pag.
1. Introducción..........................................................................................................3
3. Los rasgos del ajuste del mercado laboral en los noventa que operan................6
como obstáculo a la expansión del (SP).
3.1.El crecimiento de la PEA y su composición.. ............................................7
3.2.Empleo formal e informal y subutilización......................................................... 7
3.3.El cambio en la composición del empleo por tamaño de establecimiento..........10
3.4.El aumento en la diferencia de ingreso formal-informal y según tamaño.......... 11
3.5.Empleo asalariado y modalidades contractuales................................................ 13
3.6.Empleo y pobreza................................................................................................16
BIBLIOGRAFIA...................................................................................................... 39
Anexo Estadístico......................................................................................................41
5
1. Introducción
Tanto las Encuestas de Hogares como las Encuestas de Niveles de Vida registran un
descenso en la afiliación al Sistema en su conjunto – privado y público. Entre 1991 y
el 2000, la tasa de afiliación al Sistema de Pensiones (SP), se reduce
significativamente, tanto en relación a la PEA como en números absolutos. Como puede
constatarse en el Anexo 1, para el Perú en su conjunto (urbano y rural), de acuerdo a la
información de las Encuestas de Niveles de Vida (ENNIV) la tasa de afiliación respecto
a la PEA, se reduce de 26.4 por ciento en 1991 a 11.6 por ciento en el 2000.(Conviene
señalar que la información de las Encuestas de Niveles de Vida difiere de la
correspondiente a Encuestas de Hogares y ambas difieren también de los registros del
Sistema Privado de Pensiones).
La tendencia al descenso en la tasa de afiliación se explica casi íntegramente por
lo verificado en los afiliados urbanos – ya que la afiliación en el ámbito rural es
prácticamente negligible. Para el Perú Urbano Total, de acuerdo a las Encuestas de
Hogares (ENAHO’s) y estimaciones efectuadas para el presente trabajo, la reducción
es de 29 a 22.9 por ciento de la PEA Urbana. Esto también implica un descenso en el
número absoluto de afiliados, de aproximadamente 1870 mil a principios de la década,
a 1762 mil afiliados en el 2000.
Tanto el nivel como la tendencia de la tasa de afiliación respecto a la PEA Urbana,
se encuentra muy influido por lo que se verifica en Lima Metropolitana, ya que en el
resto urbano del país, la tasa de afiliación es bastante más débil. En Lima
Metropolitana, de acuerdo a la información de las Encuestas de Hogares (ENAHO) el
número de afiliados se reduce de aproximadamente 960 mil en 1991 a 870 mil en el
2000 – lo que implica un descenso en la tasa de afiliación respecto a la PEA de 40 por
ciento en 1991 a 25.5 por ciento en el 2000.(Vease Anexo 1).Esta reducción en la tasa
de afiliación es un efecto neto de dos tendencias contrapuestas: el descenso de 40 a 5
por ciento de la PEA en la proporción de afiliados al sistema público, y el aumento de 0
a 20 por ciento del sistema privado de pensiones.
El descenso en la tasa neta de afiliación se explica por la reducción de la tasa de
afiliación de los asalariados privados (56 a 42 por ciento), particularmente significativa
en el estrato de microempresas, y de los trabajadores independientes (15.8 a 5.5 por
ciento) ya que la de los asalariados del sector público aumenta ligeramente en la
década. (Vease Anexo 1)
La puesta en marcha y el tránsito hacia un nuevo (SP) puede explicar parte de esta
tendencia. No obstante, es relevante tener en cuenta que una parte importante de la
misma está explicada por eventos que tienen lugar en el mercado laboral durante la
década del 90, y que impactan significativamente sobre las posibilidades de afiliación y
asiduidad de las cotizaciones al (SP). Estos eventos son expuestos en este Capítulo, en
las secciones a continuación.
Desde el punto de vista de la información disponible para el análisis del mercado
laboral, se contaba con la serie de Encuestas de Niveles de Vida (ENNIV) para 1991,
1994, 1997 y 2000; con la serie de ENAHO’s Lima Metropolitana para todos los años
del período 1990- 2000, y con la serie ENAHO’s 1994- 2000 para el Perú Urbano. Se
optó por escoger la serie proveniente de las ENAHO, porque en varias de las
preguntas relevantes las ENNIV no son comparables entre sí. A partir de Lima
Metropolitana se estimó el comportamiento del Perú Urbano en 1991-2, y fue utilizado
para comparar los resultados del Perú Urbano en 1991/2-1999/2000. La estimación de
las variables relevantes del Perú Urbano 1991/92, se efectuó a partir de las diferencias
7
Dos aspectos claves, (vinculados entre sí) ausentes en el nuevo modelo, son la
priorización del crecimiento acelerado de la oferta neta de transables, y del aumento de
la productividad en transables. El primero, habría implicado el uso consistente de
políticas específicas para destrabar obstáculos y lograr una mayor competitividad que
descanse en algo más que la abrupta reducción de costos laborales. El segundo, habría
requerido un conjunto coherente de políticas para inducir conductas proclives al
aumento sistemático de la productividad, variable clave en una economía como la
Peruana – por sus repercusiones sobre costos de transables y sobre los ingresos de la
mano de obra.
3. Los rasgos del ajuste del mercado laboral en los 90’s que operan como
obstáculo a la expansión del (SP).
Se exponen a continuación los rasgos del proceso de ajuste y cambio del mercado
laboral del Perú en 1991-2000, focalizando el análisis en lo sucedido en el ámbito
9
En los 90’s, la PEA Total crece a un ritmo de 2.5 por ciento anual, mientras que la
PEA Urbana, ante el empuje de las migraciones hacia las grandes urbes, lo hace a un
3.5 por ciento promedio anual. Esta es una de las tasas mas elevadas de América
Latina, e impone moderación cuando se analiza la creación anual de empleos – ya que
es muy difícil crear ocupación productiva y de calidad para un crecimiento tan elevado
de la oferta laboral .
Sobresale en el periodo la rápida elevación de la tasa de participación femenina, que
se eleva de 38 hasta 47 por ciento – si bien que la misma no ha alcanzado todavía el
nivel de las experiencias más avanzadas de América Latina, lo que indica que esta
presión permanecerá hacia el futuro. Este hecho es una fuente de expansión futura para
el (SP).
En los 90’s continua el proceso de migración rural-urbana. Hacia el 2000, casi dos
tercios de la PEA del Perú se encontraba en áreas urbanas. Recíprocamente, un tercio de
la PEA se ubicaba en areas rurales, lo que constituye un límite natural a la expansión
del (SP), que se corrige muy lentamente. En el caso del Perú existe un factor adicional:
un 80 por ciento de la PEA Rural se encuentra por debajo de la línea de pobreza per
capita.
Cabe señalar que un cincuenta por ciento de la PEA Urbana se encontraba a fines de
los 90’s en Lima Metropolitana. Si se toma en cuenta el nivel de ingreso laboral y otros
indicadores de calidad, más del 66 por ciento del empleo de calidad se encontraba en
Lima Metropolitana – la ciudad más prospectada por el (SP). Es importante tener “in
mente “ este rasgo cuando se analicen los Cuadros que se presentan posteriormente,
muchos de los cuales han sido estandarizados respecto a la PEA Urbana.
Otro factor restrictivo a la expansión del (SP) por el lado de la oferta laboral, es la
escasa calificación de gran parte de la PEA, lo que indirectamente repercute sobre las
posibilidades de empleos adecuados para afiliarse y cotizar al (SP). Los indicadores de
cobertura de la educación no revelan toda la magnitud del problema. Así, hacia fines de
los 90’s, un 17 por ciento de la PEA Urbana había completado estudios universitarios,
un 8 por ciento sólo estudios superiores no universitarios, un 45.7 por ciento había
completado estudios secundarios, un 22,9 por ciento sólo había terminado educación
primaria y un 6.4 por ciento no había terminado o no había cursado educación primaria.
Pero en la práctica el problema es más grave cuando se atiende a la calidad de la
educación. Así, uno de los principales problemas es la baja calidad de los maestros en la
educación primaria pública, particularmente fuera de Lima. Similarmente, la educación
secundaria estuvo hasta hace pocos años orientada a preparar al alumno para estudios
universitarios poco conectados con el quehacer empresarial y no contenía elemento
alguno de calificación para el trabajo. La educación universitaria y superior no
universitaria de calidad, está concentrada en sólo una docena de instituciones cuya
cobertura es muy pequeña, en comparación con las aproximadamente 120 entidades de
10
Dos de los rasgos esenciales son el débil crecimiento del empleo formal, y el
constante aumento del subempleo urbano. En el Cuadro 1 se observa que en 1992-
2000, el Empleo Urbano crece a un ritmo superior a la PEA Urbana – que se eleva a
una tasa de aproximadamente 3.5 por ciento anual. No obstante, la composición de ese
crecimiento del empleo es lo relevante. El crecimiento del empleo formal urbano se
debilita respecto a las décadas previas, y alcanza un ritmo inferior al 1 por ciento anual,
mientras que el empleo informal crece a una tasa de 4.7 por ciento anual. El
debilitamiento del aumento del empleo formal, se explica en parte por el descenso del
empleo formal público – del 12 al 8 por ciento de la PEA Urbana en la década. Pero
también refleja el efecto de la mayor competitividad que enfrentan las empresas, sobre
todo en transables no extractivos. El rápido crecimiento del empleo informal se vincula
al significativo aumento de trabajadores independientes de bajos ingresos y – en menor
proporción - de asalariados en microempresas informales. Estos últimos crecen mucho
más que los asalariados en microempresas formales.(En nota al pié del Cuadro 1 se
expone la definición de formalidad e informalidad adoptada como proxy para estas
variables). El número de desempleados abiertos crece menos que la PEA . Lo expuesto
previamente explica porque la proporción del empleo formal en el empleo urbano se
reduce de 52.9 por ciento en 1992 a 47 por ciento en el 2000. Recíprocamente, la
11
participación del empleo informal en el empleo urbano total crece, desde 47 a 53 por
ciento en dicho período. La tasa de desempleo abierto tiende a decrecer en la década,
desde un 9.5 hasta un 8 por ciento de la PEA Urbana.
_________________________________________________________
Cuadro 1. Perú. Crecimiento y composición del empleo urbano 1991- 2000 (1)
___________________________________________________________________
(en por cientos)
1991 2000
(2)El subempleo por ingresos es estimado identificando todos los ocupados que tienen
un ingreso inferior a la linea de pobreza per-capita (por perceptor en el hogar),
equivalente a us.170.- dls mensuales en el 2000..
______________________________________________________________________
______________________________________________________________________
Cuadro 3. Perú. Empleo por tamaño de establecimiento. 1991-2000 (1)
( en por cientos del empleo urbano)
1991 2000
Formal Informal Formal Informal
Este cambio de composición por tamaño hacia una menor proporción del empleo en
empresas medianas y grandes en areas urbanas, tiene implicancias para las
posibilidades de afiliación. Las empresas medianas y grandes tienden a ser las mas
estructuradas, en las que se cumple más con la afiliación al (SP) – y lo inverso es
también cierto para la microempresa. En general, cabe esperar que las tasas de evasión
y elusión sean menores en empresas medianas y grandes. Un aspecto importante es que
cuando una empresa evade, tiende a hacerlo en todos los frentes para evitar riesgos–
tributación, leyes laborales, disposiciones municipales, contribuciones a la seguridad
social, etc. Por consiguiente es poco esperable que las pequeñas y microempresas que
evaden tributación y leyes laborales se preocupen por la afiliación y cotización de sus
trabajadores para la seguridad social.
15
El Cuadro 4 señala las diferenciales de ingreso laboral formal e informal y por tamaño
de establecimiento. Ratificando lo antes expuesto, una de las conclusiones del Cuadro 4
es que el ingreso laboral más bajo se sitúa en el ingreso informal del estrato de menos
de 5 ocupados. Por consiguiente, en la medida que la participación en el empleo de este
estrato se eleva, aumenta la proporción de trabajadores con ingresos más bajos.
1991 2000
2. Promedio Informal 57 42
El deterioro del mercado laboral del Perú no se debió solo a una elevación de la
proporción de informalidad y un descenso relativo del ingreso informal. Aun dentro del
empleo formal y del trabajo asalariado en microempresas informales, se registra un
aumento notable de la precariedad y de la inestabilidad – que además de repercutir
negativamente sobre la inversión en capacitación y productividad afecta las
posibilidades de afiliación y la frecuencia de las cotizaciones.
En el Cuadro 5 se presenta la composición del empleo asalariado privado según
tipo de contrato laboral. Como ya se mencionara, la reforma laboral introduce múltiples
contratos laborales flexibles, de menor costo para el empleador. Las empresas utilizan
esta nueva institucionalidad, y se constata en el Cuadro 5 que la proporción de
asalariados con contrato flexible (inestable) se eleva desde 25.8 por ciento hasta un 32
por ciento en el la década. Pero – algo no previsto por la reforma laboral - se eleva
mucho más aun la proporción de asalariados privados sin contrato (o en negro) desde un
33. 2 por ciento en 1991 hasta un 46.8 por ciento en el 2000. Las dos tendencias
explican porqué la proporción de los asalariados privados con contrato estable,
desciende desde 41.0 por ciento en 1991, hasta un 21.3 por ciento en el 2000.
17
1991 2000
(1): Se identifica a los sin contrato por hallarse sin contrato y no cotizar seguridad
social en la semana de referencia de la Encuesta
________________________________________________________________________
1991 2000
_____________________________________________________________________
_____________________________________________________________________
Todos los rasgos estilizados del ajuste del mercado laboral expuestos en
secciones previas, tienden a reflejarse en su impacto sobre la cobertura de la pobreza.
Para los pobres, la principal fuente de ingresos proviene del mercado laboral, y en la
medida que este se deteriore o no mejore, su situación objetiva tampoco mejorará.
Así, en los 90’s la proporción del empleo urbano que se encuentra por debajo de la
línea de pobreza per cápita, se comporta como una U. Decrece hasta 1996 y vuelve a
elevarse. Hacia fines de la década, como lo señala la información de la línea 3 del
Cuadro 8, había retomado la proporción de comienzos de la década – un tercio del
empleo urbano. Como a esto hay que agregar el grueso del empleo rural, mas de 50
por ciento del empleo total del Perú se encontraba a fines de los 90 por debajo de la
línea de pobreza per-capita. Los cambios registrados en el mercado laboral explican
en lo esencial este proceso.
Cuadro 8. Perú. Proporción del empleo urbano con un ingreso laboral inferior a
la línea de pobreza por perceptor. 1992- 2000.
1992 2000
Durante los 90’s se argumentó mucho que para enfrentar las presiones de la mayor
competitividad percibidas a partir de las reformas, era imprescindible reducir los
costos laborales por hora, y en particular los costos laborales no salariales
denominados en Perú “sobre costos laborales”. El argumento era que los altos sobre
costos laborales reducen la competitividad e impiden la contratación de personal - y
en la perspectiva de este capítulo, al hacerlo, son indirectamente un obstáculo a la
expansión del (SP). La evidencia empírica sugiere que en buena parte de los 90’s,
Perú se encontraba entre los países con un sobre costo laboral más elevado. Así, en
D. Martínez y V.Tokman, (1999), se detecta que en 1996 el Perú se encontraba entre
los países de América Latina con mayor proporción de obligaciones laborales del
empleador – equivalente a un 64.5 por ciento del salario bruto en contraste con cifras
por debajo del 50 por ciento para los restantes países analizados.(Conviene aclarar
que las estimaciones para el Perú no incluyen entre los sobre costos el aporte para
pensiones o jubilaciones porque no constituía una carga para la empresa). En línea
con dicho enfoque, en los 90’s se registran reducciones legales en los sobrecostos
laborales en las empresas, que en total reducen en aproximadamente 5 a 7 puntos de
porciento dichos sobre costos.
Un segundo aspecto a considerar es que en períodos en que el costo del capital es
muy alto – la tasa de interes real relevante para las empresas es muy elevada – como
ocurrió en el decenio de los 90’s en el Perú, ello fuerza a las empresas a buscar
menores costos laborales para compensar y defender costos por unidad competitivos.
Pero, como se verá posteriormente, presiona a las empresas a reducir costos laborales
por unidad producida – y no sólo costos laborales por hora trabajada.
No obstante, hay varias razones para reflexionar sobre lo expuesto. La primera, es
que el Perú también se encuentra entre los países con costos laborales por hora más
bajos – aproximadamente us. 2.1 dls por hora en la industria manufacturera. La
22
_________________________________________________________________________
Cuadro 9. Costos Laborales por hora en la Industria Manufacturera. 1999. (us. dls.)
Fuente: BLS, USA, y (1) estimación en base cifras de OIT , 1998, para Países de América
Latina.
Finlandia, Holanda, Noruega, Suecia, Suiza y Alemania, entre us. 18. Dls y us. 12
dls para el resto de Europa, Canadá, Australia, Nueva Zelandia e Israel, y en el rango
de us. 6. dls a us. 10 dls. para la República de Corea, Singapur, Taiwan y Hong Kong.
Por consiguiente, medida por los costos laborales por hora, la industria Peruana
parece ser más competitiva que la Alemana – en la que el costo laboral por hora
alcanza los us 28. dls la hora. ¿Porqué entonces el énfasis registrado en el Perú en una
estrategia de reducción de costos laborales por hora?
Parte de la respuesta está en el hecho de que el concepto utilizado –costo laboral
por hora o por unidad del insumo trabajo – es sólo parcialmente relevante. Para fines
24
La expansión de los ocupados sin contrato es sin duda el principal fenómeno que
institucionalmente se está constituyendo en un obstáculo a la expansión del (SP).
Conviene recapitular brevemente en sus principales causas. Es factible identificar
varios factores actuando coetáneamente: i) la rápida expansión del empleo en el
segmento de microempresas, que tradicionalmente exhibe los mayores indices de
evasión contractual contribuyó al fenómeno – la proporción de asalariados sin
contrato en microempresas respecto al total de sin contratos, se elevó desde 53 a 74
por ciento en los 90’s; ii) la legitimación ideológica de casi una desregulación laboral,
provista por las discusiones públicas que precedieron y acompañaron posteriormente
a la reforma laboral, que brindó un estímulo adicional a aquellos que deseaban
embarcarse en esta dirección; iii) la ausencia de fiscalización y penalidades, que
permitió la expansión de estas prácticas; iv) los significativos diferenciales de costos
laborales por hora– un trabajador sin contrato implica un costo laboral por hora
equivalente a un 50 por ciento del correspondiente a un contrato indefinido y un 70
por ciento del correspondiente a un contrato temporal; v) el predominio de una
estrategia de minimización de costos laborales por hora – y no costos laborales por
unidad producida – adoptada por las empresas peruanas en los 90’s, particularmente
en el segmento de pequeña y microempresa. Es difícil determinar cuanto pesó cada
uno de estos factores en la expansión de los sin contrato, sobre todo porque se
encuentran interrelacionados.
29
capacidad gerencial y tecnica – como lo prueba el hecho de que, a la inversa del Perú,
las diferencias de productividad entre la pequeña y la gran empresa son en EE.UU.
relativamente pequeñas. Y también es cierto que muchas ramas importantes de las
economías de los países desarrollados, aplicaron políticas deliberadas de elevación de
la productividad, con un éxito notable.
Lo anterior explica la ausencia de políticas públicas deliberadas a nivel macro o
meso, y la visión de la competitividad como una mejora de la infraestructura para
explotar recursos naturales – dejando de lado el mejoramiento de los recursos
humanos. El aumento de la productividad del trabajo no estaba directa o
indirectamente incluído en el modelo de política económica.
Esto último conduce a la cuarta razón: es bastante claro que en un país caracterizado
por la sobreabundancia de mano de obra no calificada, y la necesidad de mejoras de
calificación, el esfuerzo y recursos destinados a la educación y a la capacitación
laboral en los 90’s se encuentran entre los más bajos de América Latina. En
particular, el esfuerzo y recursos públicos destinados a mejorar la calidad de
maestros, guías, entrenadores, etc. fue muy débil. Mas aun, se lo percibio sólo desde
el angulo de los costos de estos sistemas sin analizar alternativas de organización y
beneficios futuros.
Si uno adiciona el 46.7 por ciento de los asalariados sin contrato, más la porción de
trabajadores contratados vía servicios a traves de boletas con (RUC), más la
proporción de los contratos temporales que facilitan la no cotización asidua de la
seguridad social, puede concluir con una hipótesis sorprendente. Las políticas
deliberadas aplicadas en diferentes campos, ya expuestas previamente, facilitaron la
evasión y elusión de cotizaciones de la seguridad social – y de (SP) – en un monto
muy grande: más de un 35 por ciento de la nómina salarial total del país.(Si se suma
46.7 por ciento de sin contratos, más aproximadamente 2/3 de los ocupados con
contratos temporales – que corresponden a los de menos de un año de duración, más
una imputación conservadora de 5 puntos porcentuales por subcontratación vía (RUC)
se infiere que 73 por ciento del empleo asalariado está evadiendo el pago de
contribuciones al (SP), lo que, aceptando los diferenciales de salarios vigentes entre
gran empresa por un lado y pequeña y microempresa por el otro, nos da la cifra
expuesta) Dicho de otro modo, el alto grado de precarización del mercado laboral y la
estrategia de minimización de costos laborales por hora, condujeron a una gigantesca
evasión de las leyes laborales y sociales. Lo más importante es que el Gobierno tenía
plena conciencia de esto pero en forma coherente con su visión estratégica, no actúo
para remediar o paliar este hecho. Por el contrario, aceptó el deterioro del sistema de
inspectoría laboral y no lo reemplazó con nada. Ante la ausencia de un sistema de
fiscalización y la no existencia, en los hechos, de medidas punitivas, los casos de
evasión se multiplicaron. La fuerte presión del mercado laboral y la ausencia de
instancias de reclamo contribuyeron a que miles de trabajadores aceptaran este hecho.
7. Conclusiones.
Un muy débil crecimiento del empleo formal – inferior al 1 por ciento anual-
respecto al elevado aumento de la PEA Urbana – 3.5 por ciento anual, fue
acompañado por un aumento del empleo informal – 4.6 por ciento anual –
que abarca asalariados en microempresas informales y sobre todo
independientes informales, y eleva la tasa de informalidad a 53 por ciento del
empleo urbano. Este cambio es acompañado por un aumento en la diferencia
de ingreso laboral formal respecto al informal, y un descenso – o en el mejor
de los casos constancia – del ingreso real informal. Ambas cosas, elevación de
la informalidad y rezago de su ingreso, contribuyen a elevar drásticamente la
proporción de ocupados urbanos de muy bajos ingresos. Lo anterior fue
acompañado por un cambio en la composición del empleo por tamaño de
establecimiento, que disminuye la proporción del empleo en empresas
medianas y grandes y eleva la correspondiente a pequeñas y
34
¿Cuan lejos está el (SP) de haber alcanzado los límites impuestos por los
rasgos específicos del mercado laboral? O, dicho de otro modo, cuan
importante es la modificación de las tendencias expuestas del mercado
laboral para permitir la expansión del (SP) hacia el futuro? Un primer punto a
considerar es la estructura de edades de la PEA Urbana, esperada para los
próximos años. Como se expusiera, existen razones – demográficas, de
participación femenina y migraciones internas – que abonan la hipótesis de un
crecimiento significativo de la población joven en areas urbanas para el
próximo quinquenio. Lo que beneficiaría a la expansión del (SP). Pero en
contra de ello, se encuentran factores institucionales y de desempeño del
mercado laboral. El Cuadro 10 señala algunos antecedentes al respecto. La
primera columna del Cuadro 10 registra los asalariados - privados y públicos –
y los independientes afiliados al (SP). La segunda registra sólo los asalariados
con contrato – cualquiera fuera el mismo. La tercera, los asalariados con
contratos de una duración de un año o más. La cuarta los asalariados e
independientes por encima de la línea de pobreza per- capita. La segunda y
tercera columna tratan de situar el principal problema económico e
institucional que se enfrenta en el mercado laboral: gran proporción de
asalariados sin contrato – que inhibe afiliación – y con contratos de muy corta
duración – que afecta asiduidad de cotizaciones.
36
(en miles)
____________________________________________________________________
BIBLIOGRAFIA
Egger,P. y García, N. “Apertura Económica y empleo: los países andinos en los 90’s”
OIT, Lima, 2000.
García, N. “La calidad del empleo en el Perú”, Borrador Preliminar, CIES, Red de
Políticas de Empleo, Lima, 2001.
Porter, M. “The competitive advantage of nations” The Free Press, N.York, 1990.
39
ANEXO ESTADISTICO
41
A
41
43
NEXO 1
Cuadro 1. INFORMACIÓN DE LIMA METROPOLITANA
ESTRUCTURA DEL MERCADO LABORAL
Estruct. Mercado (Miles) 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999
2000
PET 4,030.6 4,233.7 4,262.6 4,487.3 4,461.2 4,474.6 4,653.4 4,602.5 4,955.6
5,015.1
PEA 2,414.9 2,587.5 2,743.4 2,874.8 2,970.1 2,862.1 3,199.8 3,178.8 3,488.3
3,420.5
Ocupados 2,274.9 2,344.5 2,471.3 2,617.0 2,763.8 2,657.4 2,923.1 2,962.1 3,156.6
3,157.8
Asalar.Privados 938.0 966.4 1,063.8 1,162.2 1,221.3 1,165.8 1,306.5 1,360.1 1,413.8
1,261.8
Asalar.Publicos 314.3 291.1 300.0 270.1 283.9 189.9 165.3 222.9 280.6
247.8
Patron 132.8 120.9 148.5 152.6 158.8 140.1 152.4 206.7 178.6
153.0
Independente 704.3 763.2 718.6 777.7 831.4 861.8 937.6 869.0 915.7
060.4
Otros 185.6 203.0 240.5 254.4 268.3 299.7 361.4 303.3 367.9
434.8
Desocupados 139.9 243.0 272.1 257.8 206.4 204.7 276.8 216.7 331.8
262.7
Inactivos 1,615.8 1,646.3 1,519.2 1,612.5 1,491.1 1,612.5 1,453.6 1,423.7 1,467.2
1,594.6
Tasa de Afiliación (%)
PEA 39.7 35.8 32.8 33.9 33.2 27.9 27.9 29.7 27.3
25.5
Ocupados 41.2 37.5 35.0 35.8 34.6 29.3 29.7 31.4 29.5
27.0
Asalar.Privados 56.0 51.7 47.1 48.7 46.8 40.7 40.8 28.3 41.4
42.3
43
44
Asalar.Publicos 75.4 76.6 74.1 81.7 86.9 79.1 77.9 65.0 80.8
82.4
Patron 28.3 28.0 26.6 24.3 24.5 22.5 31.4 20.7 22.2
15.8
Independente 15.8 12.3 11.1 11.2 8.9 8.7 9.9 5.6 7.1
5.5
Otros 13.7 14.4 9.0 10.2 8.9 15.6 18.3 4.9 3.8
7.4
Desocupados 15.4 19.2 13.6 14.2 14.6 10.5 9.1 5.9 6.3
5.7
Inactivos 21.3 21.5 11.6 11.1 8.8 7.3 7.6 5.2 7.6
6.2
Indicadores
Participación 59.9 61.1 64.4 64.1 66.6 64.0 68.8 69.1 70.4
68.2
Desempleo 5.8 9.4 9.9 9.0 6.9 7.2 8.6 6.8 9.5
7.7
Ratio Empleo Población 56.4 55. 58.0 58.3 62.0 59.4 62.8 64.4 63.7
63.0
Fuente: ENAHO 1991-2000
44
45
* Nota: Para el año 1991 la encuesta no permite desagregar entres Trabj. Fam. No Rem. y Trab. Independientes
Fuente: ENNIV 1994-2000
45
46
46
47
CAPITULO II
Juan Chacaltana J1
Chacaltanaj@terra.com.pe
Actualmente en el Perú, se estima que existen casi dos millones de personas (7% de la
población total) que ya han dejado la edad activa para trabajar y por tanto, se
encuentran en edad de jubilación2. De ellas, solo el 19% recibe efectivamente una
pensión, cifra que se viene reduciendo aceleradamente en los últimos años. El resto,
probablemente se financie con mecanismos familiares o informales, que muchas veces
resultan inadecuados desde el punto de vista socioeconómico y, más aun, muchos de
ellos tienen que seguir trabajando en edades avanzadas debido a la falta de ahorro en
la juventud.
1 El autor es Investigador Principal del Centro de Estudios para el Desarrollo y la Participación (CEDEP). Este
47
48
28
26
24
22
20
18
16
14
12
10
1996 1997 1998 1999 2000
Diversos factores contribuyen a esta situación. Estos van desde decisiones individuales
en el manejo intertemporal del riesgo e ingresos de los propios individuos, hasta
elementos inherentes al mercado laboral peruano pasando por características propias
del sistema de pensiones que existe en el país. En el caso peruano, como en varios
países de la región, en la ultima década se produjo una severa reforma del sistema de
pensiones, mediante el cual se paso de un sistema único de reparto basado en un fondo
común, administrado por el Estado a un sistema mixto en el que conviven el fondo
común con un esquema de manejo de pensiones individual y privado, dirigido por las
administradoras de fondos de pensiones (AFP’s). La creación del sistema privado de
pensiones tuvo tres objetivos principales: a) establecer un sistema previsional que
permitiera a los trabajadores tener pensiones razonables en el momento de su
jubilación, b) generar una masa considerable de recursos por invertir en mercados de
capitales y c) eliminar la ineficiencia en el uso de recursos generado por el sistema de
reparto del SNP (Muñoz, 2001)
Existen muy pocos estudios que han analizado los resultados de estos cambios o evaluado sus
impactos, probablemente debido a que este sistema es aun bastante joven. Algunos de los
3 Muñoz (2001)
48
49
pocos estudios realizados se han concentrado más bien en los importantes resultados que este
sistema ha tenido en el mercado de capitales, cuyo fondo está valorizado en 13 mil millones de
soles4. El objetivo –central – de facilitar una pensión digna, es aún materia de estudio porque
muy pocas cohortes de individuos pertenecientes al nuevo sistema, están pasando al período de
cobranza de pensiones.
Sin embargo, se puede decir que no ha quedado claro cual ha sido el efecto final que este
cambio ha tenido respecto a la tasa de afiliación y los niveles de pensiones que se esperan
recibir de este sistema. En el presente capitulo, se intenta analizar precisamente la cobertura de
los sistemas de pensiones durante la década de los 90’s. La idea es tratar de observar qué tipo
de cambios se han producido en la afiliación, en un contexto de cambio como el descrito. Para
ello, se utiliza principalmente información estadística proveniente de la Encuesta Nacional de
Hogares5 (ENAHO) 1991-2000 para Lima Metropolitana, aunque en el anexo se presenta
información para el nivel nacional6. Cabe indicar, que la definición de afiliación que se utiliza
en estas encuestas difiere sustancialmente de la utilizada en los sistemas de pensiones que
existen en el país. Para tomar un ejemplo, consideremos el caso del sistema privado de
pensiones. Este maneja dos conceptos: afiliados y cotizantes. Lo que se ha observado luego de
hacer una conciliación de información de ambas fuentes, es que la definición de afiliados de las
encuestas de hogares, es bastante parecida a la de cotizantes del SPP. En el gráfico 2, por
ejemplo, se observa que el número de “afiliados” según encuestas, es muy similar al número
de “cotizantes” en la Superintendencia de Administradoras de Fondos de Pensiones (SAFP).
49
50
1,400,000
Afiliados SAFP
1,200,000
1,000,000
800,000
Afiliados ENAHO
600,000
200,000
0
1998 1999 2000 2001
No se han realizado estudios en el país para explicar este comportamiento. Sin embargo, se
puede ensayar la hipótesis de que en las encuestas de hogares se pregunta a los trabajadores si a
ellos se les ha afiliado, los cuales mencionan afirmativamente probablemente debido al hecho
de que o aportan o les descuentan en planilla. Eso debería ser similar a la definición de
cotizantes del sistema privado de pensiones, que precisamente cuenta a los “afiliados activos”
en las cuentas individuales. Esta hipótesis sostendría que, la diferencia entre ambas
estimaciones probablemente se deba a problemas de retrasos en los pagos o evasión por parte
de las empresas que deben pagar finalmente las retenciones al sistema. Sin embargo, llama la
atención la sistemática proporción constante de esta diferencia a lo largo de los años, por lo
que no se descarta otras posibles causas a este hecho estilizado. Esto tiene otra implicancia
para este estudio en particular: el análisis de la cotización y la afiliación según ENAHO,
tendría causales muy similares. Por lo que, en este capitulo se concentra la atención
exclusivamente en la afiliación.
El derecho a una pensión para la edad de jubilación es uno de lo más antiguos en la legislación
laboral peruana. Hasta 1973, existían regímenes diversos para obreros, empleados y
trabajadores privados. En dicho año, ocurre la unificación de estos sistemas en lo que se
denominó el Sistema Nacional de Pensiones (SNP), que tenía la forma de un fondo común, es
decir, un sistema en que los aportes de los afiliados se repartía por igual al momento de la
jubilación.
50
51
Diversos problemas se asociaron a este esquema. Una baja cotización de cierto tipo de
afiliados, la baja capacidad del sistema para recaudar o cobrar deudas en los principales
empleadores (en especial el Estado), y malas inversiones de los fondos previsionales llevaron a
este sistema a una situación bastante precaria, pues las pensiones que podía asegurar eran
bastante bajas. Ante esta situación, en junio de 1993 se propone la Ley de creación de las
Administradoras de Pensiones, que introduce un esquema de capitalización individual en las
pensiones. A diferencia del sistema anterior en que la pensión no tenia relación con la
aportación, en el nuevo esquema esas dos dimensiones se volvieron indesligables. Una
particularidad de esta reforma fue que el nuevo sistema no reemplazó al anterior, sino que se le
concibió y planteó como complementario, de manera que aún en la actualidad coexisten ambos
sistemas en el país. ¿Qué ha sucedido con la tasa de afiliación a pensiones, en un contexto
como el descrito?
51
52
45
40
35
30
25
20
1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
Como se ha mencionado, en vista de esta situación y de las bajísimas pensiones que recibían
los asalariados en el país, en Junio de 1993 se estableció el régimen privado de pensiones, con
la creación de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFPs). El nuevo sistema
previsional producto de las reformas en la década de los 90’s fue de tipo paralelo7, en donde se
permitía coexistir un sistema público, administrado por el estado, y un sistema privado
administrado por las AFPs (Administradoras privadas de fondos de pensiones) reguladas por la
Superintendencia de AFPs.
El supuesto era que este sistema permitiría asegurar una pensión razonable para la vejez, de
manera que se debería esperar seria una reacción positiva en la tasa de afiliación a partir de la
implementación de este sistema. Lo que se ha observado es que, efectivamente, la tasa de
afiliación al sistema privado de pensiones se ha incrementado en los 7 años que lleva de creado
llegando a situarse en alrededor de 18% actualmente. No obstante, la afiliación al Sistema
Nacional de Pensiones (SNP) se ha reducido drásticamente pasando de 29% en 1993 a menos
de 5% en el año 2000.
Eliminado: 3
Grafico 4. Lima Metropolitana. Evolución de la Afiliación Pensiones, según sistema
52
53
35
30
25
15
10
0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
En otras palabras, a pesar del incremento observado en el sistema privado de pensiones, este
no habría sido suficiente como para compensar la caída en el sistema nacional de pensiones.
Dos preguntas de interés surgen a partir de esta información.
53
54
creció a diversas tasas, pero lo que se ha observado es que la tasa de afiliación ha seguido
cayendo8.
Gráfico 5. Perú: Relación entre afiliación al sistema de pensiones y PBI per cápita Eliminado: 4
45 5,000
4,800
40
4,600
35 4,400
30 4,200
4,000
25
3,800
20 3,600
1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
Por otro lado, es probable también que la reforma de pensiones haya tenido efectos negativos
sobre las decisiones o posibilidades de afiliarse a un sistema de pensiones. Entre estos
elementos se podrían mencionar, por ejemplo, aspectos generales, como una importante
campaña de difusión a favor del nuevo sistema privado, en desmedro del sistema nacional de
pensiones, o aspectos específicos, como los asociados a los costos de pertenecer a un sistema
privado de pensiones y obtener efectivamente una pensión adecuada, especialmente en un país
con niveles de pobreza importantes9.
Algunos elementos que explican la evolución en la tasa de afiliación Con formato: Numeración y
viñetas
8
Esto por tanto conduce a la hipótesis de que el tipo de crecimiento – y procesos económicos
en general - que han ocurrido en Perú en la ultima década deben haber tenido efectos
negativos en la tasa de afiliación, aspecto que trataremos en mas detalle en el siguiente sub
capitulo. En particular, se argumenta que el crecimiento económico durante la década de los
90’s no se sustentó sobre sectores intensivos en el uso de mano de obra susceptibles a ser
afiliadas a un sistema de pensiones, este factor aunado a la flexibilización de los tipos de
contratación en el mercado laboral generan este tipo de comportamiento en los indicadores.
9
Este aspecto es tratado en mas detalle en el capitulo III de este estudio.
54
55
35
30
SNP-Hombres
25
SPP-Hombre
20 SNP-Mujer
SPP-Mujer
15
10
0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
55
56
consistente con el hecho de que en la juventud la gente no se preocupa mucho por reservas
previsionales, y cuando está ya en edad muy avanzada, ya no es muy rentable ahorrar
porque el periodo de recuperación de este ahorro seria muy corto. Lo interesante del
gráfico 7, es que este patrón parece confirmarse en el caso del sistema privado de
pensiones, en tanto que no es el caso en el sistema nacional de pensiones. En este último
caso, la afiliación a pensiones es mayor mientras avanza la edad. Casi por definición, en el
caso del SPP se ha incrementado la afiliación en adultos y en menor medida en jóvenes.
Por el contrario, en el caso de adultos mayores, la caída en la tasa de afiliación al SNP no
ha podido ser compensada por el SPP. Esto puede deberse a incentivos de los propios
individuos – quienes ya no encontrarían incentivos a afiliarse al SPP que requiere largos
periodos de aportación para poder recuperar una pensión razonable – o a características
propias del sistema privado, que no ve en este segmento de edad un mercado con potencial
para el futuro. Como quiera sea el caso, la caída en la tasa de afiliación de adultos mayores
es una de las pérdidas más importantes asociadas a la reforma peruana
45 45
40 40
Adultos Mayores
35 35
30 30
25 25
20 Adultos 20
Adultos Adultos Mayores
15 15
10 10
Jóvenes
5 5 Jóvenes
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
• Educación. El nivel de educación es una de las variables que mejor explica el hecho de
estar o no afiliado al sistema privado de pensiones, pues a mayor nivel de escolaridad
mayor probabilidad de estar afiliado. Esto es porque un mayor nivel de educación permite
a un individuo acceder a mejores condiciones laborales lo que repercute finalmente en su
afiliación al SPP. Esto parece ser bastante cierto en el caso del Sistema Privado de
Pensiones, en el cual la afiliación de personas con educación superior se ha incrementado
de manera notable, mientras que la afiliación a trabajadores con secundaria o primaria, se
ha mantenido prácticamente inalterada. Esto es un cambio importante respecto al esquema
anterior en donde la afiliación de trabajadores con educación secundaria o primaria,
fluctuaba alrededor del 20-25%. En el SPP, la afiliación de primaria no pasa del 4% y la
56
57
afiliación de secundaria no pasa del 10%. Esto se explica probablemente porque en la
ultima década, los ingresos de trabajadores con educación superior se incrementaron, a
pesar que el empleo que mas creció fue el no universitario.
50 50
45 45
40 Superior 40
35 35
30 30 Superior
25 25
Secundaria
20 20
Secundaria
15 15
10 Sin nivel / primaria 10
5 5 Sin nivel / primaria
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
10 Hernández (2000)
57
58
Sistema Nacional de Pensiones Sistema Privado de Pensiones
40 40
Jefe del hogar
35 35
30 30
Cónyuge
25 25
Jefe del hogar
20 Hijo 20
15 15 Hijo
10 10 Cónyuge
5 5
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
58
59
A continuación detallamos la relación entre afiliación y algunas de las principales variables
laborales existentes en las encuestas de empleo
59
60
Eliminado: Salto de página
Gráfico 10. Lima Metropolitana. Afiliación a Sistemas de Pensiones según nivel educativo
Sistema Nacional de Pensiones Sistema Privado de Pensiones
50 50
45 45
40 Superior 40
35 35
30 30 Superior
25 25
Secundaria
20 20
Secundaria
15 15
10 Sin nivel / primaria 10
5 5 Sin nivel / primaria
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
60 Asalariado Privado 60
50 50 Asalariado Publico
40 40
Asalariado Privado
30 30 Asalariado Privado
20 Patron 20
Patron
10 10
Independiente
Independiente
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
• Sector de actividad económica. Otra variable de interés para el caso de los ocupados es
la rama de actividad en que desempeña sus actividades. Lo que se ha observado con la
60
61
reforma y que actualmente, las ramas de actividad que presentan mayor porcentaje de
afiliación son los sectores de servicios e industria, mientras que las ramas de actividades
extractivas y se han rezagado notablemente.
45
45
40 40
35 35
30 30
25 Industria 25 Servicios
20 Construccion 20
Industria
15 Servicios 15
10 Comercio 10 Construccion
5 5 Comercio
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
61
62
Sistema Nacional de Pensiones Sistema Privado de Pensiones
70 70
60 60 Grande
50 Gran 50
40 Mediana 40 Mediana
30 30
Pequena
Pequena
20 20
Micro
10 10
Micro
Independientes Independientes
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
Grafico 14. Lima Metropolitana. Afiliación a Sistemas de Pensiones según tipo de contrato
Sistema Nacional de Pensiones Sistema Privado de Pensiones
90 90
80 80
70 C. Permanente 70
60 60
C. Permanente
50 50
40 40
30 30 C. Fléxible
20 C. Fléxible 20
10 Sin Contrato 10
Sin Contrato
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
13
Chacaltana (2001)
62
63
• Sindicalización Finalmente, un aspecto muy particular ocurre en el caso del cruce de la
variable afiliación sindical con afiliación al sistema de pensiones. Se podría esperar que, con
el poder de negociación que tienen los sindicatos, esto les habría permitido mantener algún
grado de protección elevado en el caso de pensiones. Lo que se ha observado, por el
contrario, es que la afiliación al sistema nacional de pensiones cayo drásticamente, pero el
sistema privado de pensiones no ha logrado afiliar a muchos trabajadores sindicalizados14.
63
64
70
60
50
Sistema Nacional de Pensiones
40
30
10
0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
Todos los factores que pudieran estar asociados a la evolución de la afiliación a los sistemas de
pensiones, pueden ser vistos desde el punto de vista individual, como una elección entre
ingresos futuros versus ingresos actuales. De hecho, se trata de una elección en la cual existe
información incompleta y asimétrica pues los beneficios futuros no son muy claros ya que se
tienen que descontar en el tiempo, cosa que no pasa con los costos que ocurren en tiempo
presente. Asimismo, no todos los individuos, tienen igual propensión a afiliarse, no solo
debido a factores psicológicos sino también a los condicionantes existentes en su entorno
económico y social.
Visto el problema desde esta óptica, es posible proponer un modelo de elección intertemporal,
a fin de desarrollar un análisis multivariado de los determinantes de la afiliación y cotización.
Con este fin, se puede estimar una regresión para analizar la probabilidad de afiliación de la
siguiente forma:
64
65
Ai = X ' β1 + u1i
En este caso, Ai es una variable latente de afiliación (no observable directamente), el sub
índice i representa las observaciones (i=1,2...n), X es una matriz de regresores que contiene
variables explicativas como las mencionadas15. Asimismo, u1i denota el error.
La idea central de esta sección es que la variable Ai , puede ser definida de diversas
formas, dependiendo de los objetivos que se plantee y los supuestos que se asuma.
Una primera opción es considerar que la afiliación ocurre entre dos valores discretos
(me afilio o no me afilio) lo cual conduce a la estimación de un modelo binario. Una
segunda alternativa es incorporar el hecho de que en el caso peruano la afiliación
puede ocurrir en uno de dos sistemas paralelos (el SNP o el SPP) lo cual implica
expresar Ai no como binario sino como un modelo multinomial. Finalmente, se puede
pensar en un escenario mixto, en el cual la decisión de afiliación ocurre en dos etapas:
primero seria la decisión de afiliarse y en segundo lugar, se tomaría la opción de
algunas de las alternativas existentes16.
En el primer caso, aún cuando la variable Ai es una variable latente sí se puede observar es un
proxy de ella, Ai *, la cual viene definida de la siguiente manera
15
Para los modelos se han seleccionado una serie de variables que reflejen y capturen las
principales características individuales y de mercado de trabajo de los agentes económicos, tales
como: género, edad, estado civil; y por el lado de mercado de trabajo variables como: categoría
ocupacional, sector de la empresa donde labora, tipo de trabajo, tipo de contrato, tamaño de
empresa, sindicalización e ingreso laboral. La mayoría de estas variables están divididas en
dummies respecto de sus categorías y algunas de ellas no han sido estimadas con el fin de
evitar la trampa de dummies y tienen la aclaración “referencia” en el anexo XY para hacer
alusión a estas.
16
Los resultados del trabajo econométrico se hicieron utilizando encuestas de empleo
realizadas por el Ministerio de Trabajo en Lima Metropolitana, inicialmente denominadas
Encuestas de Niveles de Empleo y mas recientemente, ENAHO, y ejecutadas por el Instituto
Nacional de Estadística e Informática. Los años evaluados son: 1994, 1997 y 2000; por tratarse
el 94 del cumplimiento del primer año de funcionamiento, el 97 luego de un período de
reformas para promover la afiliación, y el año 2000, para tener un panorama de la situación
actual; y de esta manera corroborar la mayor cantidad de hipótesis posibles.
65
66
1, si Ai > 0
A*i =
0, si Ai = 0
Este problema puede ser estimado a partir de una regresión logit, que toma la forma funcional
exponencial para relacionar Ai* con su conjunto de regresores. Es decir, dada una variable
Eliminado: de
dependiente dicotómica Ai* y un conjunto de variables independientes cualitativas y
cuantitativas, la regresión logística consiste en obtener una función lineal de las variables
independientes que permita clasificar a los individuos en una de las dos subpoblaciones
(afiliados y no afiliados) establecidos por los valores de la variable dependiente.
Luego, a partir de ( xi1 ,..., xip ) , i = 1,...n muestra de n observaciones de las variables
independientes X 1 ,..., X p , en los grupos de individuos establecidos por los dos valores de la
variable dependiente Ai , se trata de obtener una combinación lineal de las variables
independientes referidas a características individuales y de mercado laboral, que permita
estimar las probabilidades de que un individuo pertenezca a cada una de las alternativas: si está
afiliado o no a un sistema de pensiones. La probabilidad de que un individuo este afiliado a un
sistema de pensiones estará dada por:
eZ 1
Pr( estar afiliado) = , o de manera equivalente Pr( estar afiliado) =
1 + eZ 1 + e −Z
Z = β1 X 1 + ... + β p X p + β 0
Muchas de las variables independientes que asumimos como determinantes del modelo son
variable dicotómicas que toman el valor de uno si pertenecen a determinada categoría evaluada
y cero en otro caso; para estas variables los coeficientes reflejarán el efecto de las categorías
presentadas respecto de las categorías que sirvieron como referencia. El criterio para obtener
los coeficientes β 0 , β1 ,..., β p estimaciones de los parámetros desconocidos βˆ0 , βˆ1 ,..., βˆ p , es el
de máxima verosimilitud. A partir de β 0 , β1 ,..., β p , las probabilidades estimadas de que un
individuo esté afiliado o no a un sistema de pensiones son, respectivamente:
66
67
1
Pr(estar afiliado) = pˆ = ˆ y qˆ = 1 − pˆ
1 + e −Z
donde
Los resultados de este ejercicio se muestran en el cuadro 2. Se encuentra que entre las
variables individuales, la única que tiene efecto claramente significativo es la edad. El signo que
se encuentra es positivo y, en adición, el signo negativo de la edad^2, indica que existe una
concavidad en esta variable. Es decir, aumenta hasta cierto punto pero a una tasa decreciente.
Este hallazgo confirmaría pues, que incluso en la afiliación global, se encuentra una suerte de U
invertida en la relación entre afiliación y edad17
Son las variables de mercado laboral, las que parecen tener mayor significancia para explicar la
afiliación a AFPs. Entre estas variables, las mas importantes son : la condición de asalariado, el
tipo de trabajo que se desarrolla, el tipo de contrato con que se cuenta y los ingresos laborales.
En el caso de la condición de asalariamiento, es interesante notar que en 1994 la condición de
asalariado privado no era significativo pero esta variable empieza a tener creciente significancia
hacia el año 2000. Una conclusión similar se puede obtener de la observación del grupo
ocupacional en el cual los coeficientes administradores y gerentes, así como empleados de
oficinas, son significativos en ciertos años.
17 Estos resultados son muy parecidos a los obtenidos por otros estudios similares como el de Holzman, Packard
y Cuesta (1999), quienes realizan un modelo probit simple para analizar los determinantes de la cobertura de los
sistemas previsionales de Argentina y Chile
67
68
Nivel de Educación
Secundaria 0.14093 2.07 0.14064 4.17 0.00643 0.15
Superior 0.14249 1.82 0.25701 6.11 0.07012 1.43
Sin embargo, en donde hay una clara significancia es en variables que tienen relación con un
nuevo fenómeno observado recientemente en el mercado de trabajo peruano: una mayor
inseguridad en el empleo. Esta se ha visto expresada a través de una reducción en empleos
68
69
permanentes, sea mediante mas contratos flexibles o sin contrato o una menor duración en el
empleo. Los coeficientes de tipo de contrato son claramente significativos y positivos. Esto
quiere decir, que en relación a los sin contrato, quienes tienen contratos flexibles o
permanentes, tienen mayores probabilidades de estar afiliado. Los efectos marginales son
elevados a lo largo de toda la década. Por otro lado, los coeficientes de la duración del empleo
son también significativo aunque solo en 1994. Finalmente, los ingresos son también un buen
predictor de la probabilidad de estar afiliado
Una limitación seria del modelo anterior es que, como se ha visto en la sección 2.2 de este
capitulo, no toma en cuenta la existencia en el país, de dos sistemas de afiliación. En realidad, si
estos sistemas son paralelos, como se plantea el modelo peruano, se podría mejorar el modelo
descrito en la sección anterior considerando un definición ampliada de Ai. En este caso, se ha
propuesto la siguiente definición.
Para estimar este tipo de modelo, como variables categóricas, se ha elegido el modelo logit
multinomial, que precisamente asume la existencia de dos opciones pero que existen de manera
paralela. Los resultados indican que algunas variables presentan efectos diferenciados
dependiendo de cual es el sistema al que el individuo se afilia18.
El modelo logit multinomial los valores que pueda tomar la variable Ai de afiliación no tiene
juicio de valor incorporado, es decir, la alternativa uno no es mejor que la dos o viceversa,
simplemente son diferentes opciones que no guardan ningún orden establecido. En este tipo
18
El modelo antes mencionado, sin embargo, no toma en cuenta la abrumadora evidencia de
que en la ultima década, se ha producido un enorme proceso de traspaso de personas de un
régimen a otro. Es decir, existe sustitución entre las alternativas existentes en el sistema de
pensiones. Por tanto, el modelo que seria apropiado seria un modelo logit anidado (nested
logit), en el cual primero se elige entre estar afiliado o no y luego, se opta por un sistema o el
otro. La virtud de este modelo, radica en asumir que existe una elasticidad de sustitución
estimable entre las alternativas de pensiones que es diferente a la elasticidad que existe entre la
disyuntiva entre afiliarse y no afiliarse. Este tipo de estimación requiere información de cada
una de las alternativas existentes, como costos, apreciaciones sobre calidad, etc.
69
70
de modelos se estima un set de coeficientes β ( 0 ) , β (1) , β ( 3) correspondiente a cada una de las
categorías de la variable dependiente:
(0)
e Xβ
Pr( Ai = 0) = (0) (1 ) (2)
e Xβ + e Xβ + e Xβ
(1)
e Xβ
Pr( Ai = 1) = (0) (1) (2)
e Xβ + e Xβ + e Xβ
(2)
e Xβ
Pr( Ai = 2) = (0) (1 ) (2)
e Xβ + e Xβ + e Xβ
dado que existe más de una solución para el modelo, es decir para los valores que pueden
tomar β ( 0) , β (1) , β ( 2 ) para las mismas probabilidades de Ai = 0, Ai = 1, o Ai = 2 . Entonces
para hacer estimable el modelo e identificarlo se toma como valor base de la estimación
β ( 0 ) = 0 , de tal manera que los coeficientes restantes β (1) , β ( 2 ) medirían el cambio relativo de
Ai = 0 . Luego fijando el coeficiente β ( 0 ) = 0 , obtenemos
1
Pr( Ai = 0) = Xβ ( 0 ) Xβ ( 1 ) (2)
e +e + e Xβ
(1)
e Xβ
Pr( Ai = 1) = (0) (1) (2)
e Xβ + e Xβ + e Xβ
(2)
e Xβ
Pr( Ai = 2) = (0) (1 ) (2)
e Xβ + e Xβ + e Xβ
Pr( Ai = 1) (1 )
= e Xβ
Pr( Ai = 0)
Eliminado: yy
Luego procedemos a estimar el modelo, cuyos resultados se observan en el cuadro 4 . Los
resultados indican que algunas variables presentan efectos diferenciados dependiendo de cual
es el sistema al que el individuo se afilia19.
19
El modelo antes mencionado, sin embargo, no toma en cuenta la abrumadora evidencia de
que en la ultima década, se ha producido un enorme proceso de traspaso de personas de un
régimen a otro. Es decir, existe sustitución entre las alternativas existentes en el sistema de
pensiones. Por tanto, el modelo que seria apropiado seria un modelo logit anidado (nested
logit), en el cual primero se elige entre estar afiliado o no y luego, se opta por un sistema o el
otro. La virtud de este modelo, radica en asumir que existe una elasticidad de sustitución
estimable entre las alternativas de pensiones que es diferente a la elasticidad que existe entre la
70
71
Cuadro 4.Resultados de la regresión Logit Multinomial (Efectos Marginales)
Sindicalización 0.0569 1.6 0.0389 1.5 0.0253 1.1 0.0113 0.9 0.0808 5.6 0.1107 4.2
Nivel de Educación
Secundaria 0.0811 2.0 0.0635 1.8 0.0997 4.5 0.0293 2.0 -0.0062 -0.3 0.0539 1.3
Superior 0.0612 1.5 0.0849 1.9 0.1609 5.7 0.0714 3.9 0.0097 0.9 0.0968 2.1
Mujer 0.0589 2.0 -0.0073 0.2 -0.0287 -2.1 -0.0081 -1.1 0.0260 3.0 0.0289 2.0
Casado -0.0456 -1.6 -0.0255 -1.3 -0.0292 -1.8 -0.0208 -2.1 0.0083 0.6 -0.0335 -1.7
Edad 0.0360 5.8 0.0292 5.5 0.0038 1.4 0.0124 4.6 0.0029 1.4 0.0149 3.2
Edad^2 -0.0004 -5.1 -0.0004 -5.5 0.0001 1.0 -0.0001 -3.7 0.0000 -0.1 -0.0002 -2.6
Ingreso Laboral (log) -0.0046 0.5 0.0598 3.6 0.0162 2.3 0.0430 6.8 0.0014 0.7 0.0564 5.3
Tiempo Trabajo (meses) 0.0009 5.1 0.0007 4.9 0.0000 0.3 0.0000 0.4 0.0000 1.1 0.0001 0.7
En el caso de las variables individuales, por ejemplo, se observa que la variable edad tiene
resultados diferenciados, pues la forma de U invertida que se mencionó en la sección anterior,
solo es significativa para el caso de aquellos que se afilian al sistema privado de pensiones. En
disyuntiva entre afiliarse y no afiliarse. Este tipo de estimación requiere información de cada
una de las alternativas existentes, como costos, apreciaciones sobre calidad, etc.
71
72
el caso del sistema nacional de pensiones, la variable edad solo parece tener significancia en el
año 1994 y en las siguientes regresiones pierde significancia
En el caso de la variable genero, es a la inversa. Tiene una importancia clara solo en el sistema
nacional de pensiones, mientras que en el caso del sistema privado solo se hace importante en
el año 2000. En un estudio de Holzman et al (1999), se justifica este comportamiento por el
hecho de que las mujeres no tienden a mantener una relación de trabajo estable pues prefieren
dedicarse a su hogar o en todo caso al contar su cónyuge con algún tipo de seguro estas no
encuentran incentivos para afiliarse a algún sistema de pensiones. En lo que respecta al nivel
de educación, se ha mencionado que el impacto de las variables referidas a un mejor nivel de
educación cuentan con un impacto positivo sobre el nivel de cobertura. Sin embargo, esto
también depende del sistema del que se trate. En el caso del sistema de pensiones, es claro que
las variables educativas, especialmente las de educación superior tienen clara significancia. En
cambio en el SNP esto no ocurre así.
Aún cuando, a nuestro juicio, las muestras de las ENAHO son suficientemente grandes y
confiables, consideramos que sería necesario contrastar si la evolución mencionada líneas
arriba se mantiene al realizar un análisis con data agrupada. Esto permitirá además,
correlacionar la tasa de afiliación con otras variables también de interés para el análisis.
Para ello, sobre la base de las encuestas de Empleo realizadas por el Ministerio de Trabajo en
Lima Metropolitana, se procedió a construir una base de datos pseudo panel, en base a
cohortes demográficos, para segmentos poblacionales de 5 años de edad cada uno.
72
73
Construcción de las cohortes Con formato: Numeración y
viñetas
El análisis de cohortes ha sido sugerido por Deaton (1985) quien propone dividir la muestra en
cohortes los cuales comparten características comunes como por ejemplo variables
demográficas, históricas o económicas. La idea es que luego, se pueden obtener los promedios
por cohorte y utilizarlos como representaciones individuales de un panel obteniendo así un
Pseudo Panel20.
En la construcción de los Cohortes para un Pseudo Panel, existe un trade-off entre el número
de cohortes y el tamaño de estos cohortes. Pequeños cohortes (con menores observaciones)
implican menor precisión en el promedio por cohorte, de esta forma el trade-off es
básicamente entre el número de observaciones y la precisión de las mismas21. Además del
tamaño de los cohortes, la forma en que los cohortes están construidos también es importante.
Si el objetivo es obtener errores reducidos, los individuos en cada cohorte deben ser lo más
homogéneos posibles, mientras que los de cohortes diferentes deben ser lo más heterogéneos
posibles22.
En la práctica, los cohortes deben de ser definidos sobre las bases de variables que no varíen a
través del tiempo y que sean observadas por todos los individuos en la muestra, esta es la
principal restricción. En este caso se ha utilizado como variable de cohorte la edad de cada
individuo, determinando así 10 cohortes que son los siguientes:
Cohorte 1: de 15 a 20 años
Cohorte 2: de 20 a 25 años
Cohorte 3: de 25 a 30 años
Cohorte 4: de 30 a 35 años
Cohorte 5: de 35 a 40 años
Cohorte 6: de 40 a 45 años
Cohorte 7: de 45 a 50 años
Cohorte 8: de 50 a 55 años
Cohorte 9: de 55 a 60 años
Cohorte 10: de 60 a 65 años
20
Debido a que cada observación de un cohorte está construida sobre la base de una muestra de un verdadero
cohorte poblacional, el promedio tratado como una observación contiene errores muestrales. Ante esta
situación, es recomendable que las observaciones sean consideradas como medidas de un verdadero valor con
errores, los cuales pueden ser ignorados si el número de observaciones entre cada cohorte es lo
suficientemente grande
21 Baltagi (1995)
22 Gassner (1998)
73
74
La evolución del sistema según información por cohortes Con formato: Numeración y
viñetas
Los años sujetos de análisis son 1994, 1997 y 2000. Para los tres años se observa un patrón de
comportamiento y evolución para la tasa de afiliación al SPP y al SNP23.
23 Esta particularidad que se aprecia en gráfico es fruto del sistema de tipo paralelo, según la definición de Mesa-
Lago (2001), en donde coexisten un sistema administrado por el Estado y otro administrado por las AFP. Incluso
estudios previos presentan evidencia de una serie de incentivos y legislaciones que en vez de promover la
afiliación al SPP, como era el objetivo inicial de la reforma , alientan una suerte de competencia entre ambos
sistemas de tal manera que existen incentivos para determinados grupos etarios de afiliarse a uno o a otro sistema
dadas las condiciones que estos ofrecen.
74
75
Estado del Sistema en 1994
50
45
40
35 Sistema Nacional de Pensiones
30
25
20
Sistema Privado de Pensiones
15
10
5
0
I II III IV V VI VII VIII IX X
75
76
Referente a la tasa de afiliación al SNP, esta muestra una trayectoria creciente a lo largo de los
rangos de edades (ver gráfico 16). Como se mencionó anteriormente este fenómeno particular
tiene que ver con las características del SNP que ofrece un fondo de reparto común y una
pensión mínima sin importar el número de aportes que se realiza ni la cantidad de estos, es
decir las generaciones jóvenes financian las pensiones de los ancianos, lo que genera un
problema en el largo plazo para el Estado. Otro factor importante es la implantación del
FONAHPU que genera otra vez un nuevo incentivo de afiliación a este sistema. Luego, dadas
las condiciones del SNP este parece ser un sistema conveniente para aquellas personas de bajos
ingresos y aquellas que van a realizar pocos aportes durante su vida laboral, es por eso que las
mayores tasas de afiliación se encuentran entre los grupos de individuos con más años.
Así mismo otro elemento a tomar en cuenta para este tipo de comportamiento es la antigüedad
de este sistema, mientras que el SPP cuenta con sólo 9 años, además de la falta de información
de los agentes de mayor edad, han hecho que los individuos afiliados desde antes al SNP no
encontraran incentivos suficientes para trasladarse al SPP, eso aunado a factores como bajos
niveles de ingreso, baja rentabilidad de los fondos de las AFPs y una suerte de competencia
entre ambos sistemas paralelos generan un comportamiento de la tasa de afiliación como el
que se aprecia en el gráfico 16. Así pues, quede claro que la historia de sustitución en ciertos
grupos de edad ha sido muy clara cuando se utiliza información por cohortes
Para el análisis econométrico de data pseudo panel, de igual modo que en los modelos
individuales, se busca explicar cuales son los determinantes de la cobertura de los sistemas de
pensiones (tanto SPP como SNP) haciendo un análisis desde el punto de vista de cohortes
demográficos por edades.
El estudio considera un período de 1993 hasta el 2000 con un total de 10 cohortes por años de
tal manera que el estudio cuenta con 80 observaciones (cohortes) y diez grupos por años.
Nótese que el modelo original para este caso seria uno de tipo binomial por la variable
independiente involucrada24. Una vez que los cohortes son definidos y construidos las
observaciones toman el valor de medias por cohortes y representan las proporciones de esta
variables. Por ejemplo la variable dicotómica que indicaba la condición de mujer de un
individuo es ahora el porcentaje de mujeres en la muestra por cohorte para cada año.
24 La variable dependiente afiliación toma valor de uno si está afiliado a algún sistema de pensiones (SNP o SPP) y
76
77
Al no contar con la información acerca de un mismo individuo para todos los períodos resulta
imposible estimar un panel data genuino, luego siguiendo la metodología propuesta por
Deaton (1985) se procedió a la estimación por cohortes de las medias de las variables
involucradas en el proceso. Para este caso, como se mencionó anteriormente, se construyeron
cohortes demográficos por grupos de edades. La estimación de un modelo usando pseudo
paneles tiene la de ventaja de no sufrir el problema de attrition que afecta a los modelos de
data panel además de permitir la licencia de mezclar información de diferentes encuestas.
Para ilustrar la manera sobre cómo se construye y se evalúa la estimación de pseudo paneles
definimos un grupo de 8 ( en este caso) series de corte transversal y un modelo como:
El indicador “i” es un identificador de cada uno de los N individuos existentes en cada serie de
corte transversal en cada período. Luego definimos 10 cohortes armados de la misma manera
todos los períodos de evaluación. Cada individuo perteneciente a una encuesta tiene que estar
en sólo un cohorte. Después promediando las observaciones de todos los individuos para cada
cohorte se obtiene:
en donde y ct es el promedio de yit de todos los individuos que pertenecen al cohorte “c” en el
período “t”. Ahora si la relación económica incluye para los individuos un efecto fijo,
obviamente la relación correspondiente para los cohortes será un efecto fijo de cohorte25.
En este caso, se procedió a estimar el modelo por medias considerando efectos aleatorios y los
resultados de la estimación se muestran en el Cuadro 5.
De manera general, se puede decir que los resultados encontrados en el análisis individual se
mantienen las variables que explican significativamente la afiliación por cohortes por el tipo de
contratos, la edad y la educación. En estos casos, aquellos cohortes que tienen contratos son
más jóvenes y tienen más educación, tienen una afiliación a cualquier sistema de pensiones. Las
únicas diferencias importantes con las regresiones a nivel individual es que, en la regresión por
cohorte la variable asalariamiento pierde poder explicativo mientras que el estar casado, se
vuelve importante para explicar la afiliación al sistema de pensiones.
25 Ante esta disyuntiva acerca de la modelación de la estimación ya sea de efectos fijos o de efectos aleatorios, se
procedió a usar la lógica de Deaton (1997) para asumir una estimación de tipo efectos aleatorios, porque al
trabajar con las medias de un modelo de todos los miembros de los cohortes que aparecen en la encuesta y
quienes son diferentes en cada período, luego el “efecto fijo” no sería fijo en realidad, porque estamos evaluando
los promedios de distintos individuos en cada año.
77
78
Nivel de Educación
Secuandaria -0.05705 -0.5
Superior 0.19650 1.8
Número de observaciones 80
Número de grupos 10
Observaciones por grupo 8
Wald Chi2 (g.l.) 1387.84 (27)
R2 Within 0.7372
R2 Between 0.9981
R2 Overall 0.9639
78
79
Una de las primeras y más importantes conclusiones de este análisis consiste en la verificación
Eliminado: xx%
de que luego de la reforma la tasa de afiliación global cayo de 40% en 1991 a 25% en el año
Eliminado: 3
2000. En particular la tasa de afiliación al sistema nacional de pensiones cayó de manera
Eliminado: xx%
drástica y a pesar que el sistema privado se ha incrementado sistemáticamente, ese crecimiento
no ha podido compensar la caída en la afiliación al SNP y lo más probable es que esta pérdida
no se pueda repara en los próximos años
Una segunda conclusión importante se refiere a la observación de que en estos casi 10 años del
sistema, existe evidencia de una abrumadora sustitución de trabajadores de un sistema por el
otro. El sistema privado de pensiones no parece haber atraído nuevos afiliados hacia el sistema
general de pensiones. Por el contrario, se ha concentrado en un subconjunto muy particular de
trabajadores que se encontraba afiliado al sistema anterior y que ha pasado al nuevo sistema.
En otras palabras, por su propia lógica de tipo privado, el SPP se concentró en trabajadores
muy rentables: los jóvenes y de edad mediana, de educación superior, de buenos ingresos, con
contratos (permanentes y/o flexibles) quienes progresivamente han ido pasando al nuevo
esquema de pensiones. En estos casos, el crecimiento de la afiliación privada ha compensado la
caída en la afiliación al SNP, casi de manera perfecta.
Existen dos obstáculos a la expansión del sistema de pensiones que surgen muy claramente de
esta información. El primero de ellos tiene que ver con el hecho de que, como se muestra en el
79
80
Eliminado: aquellos
capitulo I, el empleo en este tipo de trabajadores (de altos ingresos con educación superior) ha
ido decayendo en términos relativos, y por el contrario, lo que se ha incrementado es el empleo
asalariado sin contrato y de independientes informales, en pequeñas empresas o por cuenta
Eliminado: a
propia, de bajos niveles de educación, con bajos ingresos, etc. Es decir, el grupo objetivo del
las AFP’s está disminuyendo en términos relativos. Asimismo, a menos que ocurran cambios
drásticos en el patrón de generación de empleo de la economía peruana , la tasa de afiliación se
mantendrá en niveles bajos.
El segundo obstáculo, tiene que ver con la naturaleza propia del sistema privado de
pensiones, el cual por la naturaleza privada de su origen buscará aquellos grupos que le resulten
más rentables. Lo que se ha observado en los diez últimos años es un proceso de “ obtención
de la crema “ en el mercado de afiliaciones, es decir, una sustitución imperfecta, debido a que
ciertos grupos poblacionales– es decir, asalariados sin contrato e independientes informales,
con menores niveles educativos, de ciertas ramas de actividad, y con menores ingresos – no
resultan rentables o atractivos para el sistema privado. De hecho, no parece existir ninguna
evidencia de que en el futuro estos grupos se conviertan en mas rentables para el SPP. Por el
Eliminado: ultimos
contrario, según lo observado en los últimos tiempos en el Perú, la discusión parece haber
Eliminado: Peru
estado concentrada en cómo facilitar, más aún, el traspaso de aquellos trabajadores con
contrato , con bono de reconocimiento, con ciertos niveles educativos, etc. al sistema privado
de pensiones. Por tanto, se puede esperar que el esquema de trabajo mixto existente en el
Perú, produzca tasas de afiliación relativamente bajas, y de hecho más bajas que las existentes
hace una década.
Eliminado:
Esto plantea un tema social muy claro hacia el futuro. Si los grupos a los que el SPP no se ha
acercado no son atractivos en un sistema privado, que no puede internalizar ciertos costos
sociales, será necesario pensar en algún esquema de intervención para resolver el problema
previsional de estos grupos. Se desprende entonces de esta conclusión de que en el futuro
deberán existir dos sistemas pero con objetivos claramente diferenciados: uno para
“trabajadores pobres” – y con ello nos referimos a todos aquellos trabajadores que no han
resultado rentables para el sistema privado de pensiones – y otro para “no pobres”.
Evidentemente, el segundo grupo es la meta natural del SPP. Con respecto al primer grupo,
existen dos opciones: reformar el sistema nacional de pensiones concentrándolo en aquellos
grupos tradicionalmente mas excluidos de las pensiones y/o que este sistema facilite al sistema
privado, una base para ampliar la cobertura de estos grupos. En ambos casos, un sistema
nacional moderno de pensiones es necesario. Lo que proponemos en este documento, es que
el sistema nacional de pensiones se convierta en algo así como una corporación nacional que se
encargue de supervisar el trabajo de las AFP, pero que a la vez les facilite los medios para que
estas puedan ampliar la cobertura en grupos poco rentables desde el punto estrictamente
80
81
privado. En otras palabras, lo que se propone es convertir al sistema nacional de pensiones en
un organismo de segundo piso, en el cual se maneje el subsidio de la sociedad hacia los mas
pobres. Este subsidio puede ser financiado a través de una transferencia de aquel segmento del
mercado que es pobre, pero es probable que éste deba ser acompañado de una transferencia
del propio estado.
81
82
Baltagi, Badi H. “Econometric Analysis of Panel Data”. John Wiley & Sons Ltd.
England, 1995.
Holzmann, Robert; Truman Packard and Jose Cuesta. “Extending Coverage in Multi-
Pillar Pension Systems: Constraints and Hypotheses, Preliminary Evidence and Future
Research Agenda”. World Bank: Social Protection Discussion Paper Series No. 0002.
Washington, September 1999.
82
83
Mesa-Lago, Carmelo. “La Reforma Estructural de Pensiones en América Latina:
Tipología, Comprobación de Presupuestos y Enseñanzas”. En: Bonilla García,
Alejandro y Alfredo H. Conte-Grand. “Pensiones en América Latina: Dos Décadas de
Reforma”. Oficina Internacional del Trabajo. Lima, 2001.
Muñoz, Italo. “La Reforma del Sistema Privado de Pensiones”. En: Abusada,
Roberto; Fritz Du Bois; Eduardo Morón y José Valderrama. “La Reforma
Incompleta”. Centro de Investigación Universidad del Pacífico e Instituto Peruano de
Economía. Lima, Agosto 2000.
83
84
84
85
ANEXO 1
C u a d ro 1.1
L im a M e tro p o lita n a :
E ST RU C T U RA D E L M E RC A D O LA B O RA L
E s tru c t. M e rc a d o (M ile s ) 19 9 1 19 9 2 19 9 3 19 9 4 19 9 5 19 9 6 19 9 7
PET 4 ,0 3 0 .6 4 ,2 3 3 .7 4 ,2 6 2 .6 4 ,4 8 7 .3 4 ,4 6 1 .2 4 ,4 7 4 .6 4 ,6 5 3 .4 4,
PEA 2 ,4 1 4 .9 2 ,5 8 7 .5 2 ,7 4 3 .4 2 ,8 7 4 .8 2 ,9 7 0 .1 2 ,8 6 2 .1 3 ,1 9 9 .8 3,
O c up a d o s 2 ,2 7 4 .9 2 ,3 4 4 .5 2 ,4 7 1 .3 2 ,6 1 7 .0 2 ,7 6 3 .8 2 ,6 5 7 .4 2 ,9 2 3 .1 2,
A sa la r. P riv a d o s 9 3 8 .0 9 6 6 .4 1 ,0 6 3 .8 1 ,1 6 2 .2 1 ,2 2 1 .3 1 ,1 6 5 .8 1 ,3 0 6 .5 1,
A sa la r. P ub lico s 3 1 4 .3 2 9 1 .1 3 0 0 .0 2 7 0 .1 2 8 3 .9 1 8 9 .9 1 6 5 .3
P a tro n 1 3 2 .8 1 2 0 .9 1 4 8 .5 1 5 2 .6 1 5 8 .8 1 4 0 .1 1 5 2 .4
In d ep e n d e n te 7 0 4 .3 7 6 3 .2 7 1 8 .6 7 7 7 .7 8 3 1 .4 8 6 1 .8 9 3 7 .6
O tro s 1 8 5 .6 2 0 3 .0 2 4 0 .5 2 5 4 .4 2 6 8 .3 2 9 9 .7 3 6 1 .4
D e so c up a d o s 1 3 9 .9 2 4 3 .0 2 7 2 .1 2 5 7 .8 2 0 6 .4 2 0 4 .7 2 7 6 .8
In a ctiv o s 1 ,6 1 5 .8 1 ,6 4 6 .3 1 ,5 1 9 .2 1 ,6 1 2 .5 1 ,4 9 1 .1 1 ,6 1 2 .5 1 ,4 5 3 .6 1,
T a s a d e A f iliac ió n (% )
PEA 3 9 .7 3 5 .8 3 2 .8 3 3 .9 3 3 .2 2 7 .9 2 7 .9
O c up a d o s 4 1 .2 3 7 .5 3 5 .0 3 5 .8 3 4 .6 2 9 .3 2 9 .7
A sa la r. P riv a d o s 5 6 .0 5 1 .7 4 7 .1 4 8 .7 4 6 .8 4 0 .7 4 0 .8
A sa la r. P ub lico s 7 5 .4 7 6 .6 7 4 .1 8 1 .7 8 6 .9 7 9 .1 7 7 .9
P a tro n 2 8 .3 2 8 .0 2 6 .6 2 4 .3 2 4 .5 2 2 .5 3 1 .4
In d ep e n d e n te 1 5 .8 1 2 .3 1 1 .1 1 1 .2 8 .9 8 .7 9 .9
O tro s 1 3 .7 1 4 .4 9 .0 1 0 .2 8 .9 1 5 .6 1 8 .3
D e so c up a d o s 1 5 .4 1 9 .2 1 3 .6 1 4 .2 1 4 .6 1 0 .5 9 .1
In a ctiv o s 2 1 .3 2 1 .5 1 1 .6 1 1 .1 8 .8 7 .3 7 .6
In d ic ad o re s
P a rticip a c ió n 5 9 .9 6 1 .1 6 4 .4 6 4 .1 6 6 .6 6 4 .0 6 8 .8
D e se m p le o 5 .8 9 .4 9 .9 9 .0 6 .9 7 .2 8 .6
R a tio E m p le o P o b la c ió n 5 6 .4 5 5 .4 5 8 .0 5 8 .3 6 2 .0 5 9 .4 6 2 .8
F ue n te : E N A H O 1 9 9 1 -2 0 0 0
85
86
ANEXO 2: Análisis Proporción de Afiliados al SPP y al SNP
70
70
60 Servicios Servicios
60
50
50
40
40
30 Industria 30 Industria
20 Comercio 20
10 Construcción Comercio
10 Construcción
Extractivas Extractivas
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
86
87
45 45
40 40
35 Prof., Tec.
35
Prof., Tec. 30
30
25 25 Emp. Oficina
Trab. Servicios
20 20 Trab. Servicios
15 Emp. Oficina 15
10 Vendedores Obreros
Vendedores 10
Grte., Adm., Func.
5 Grte., Adm., Func.
Obreros 5
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
80 80
70 70
Contrato Permanente Contrato Permanente
60 60
50 50
40 Contrato Fléxible 40
Contrato Fléxible
30 30
20 20
10 Sin Contrato 10 Sin Contrato
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
87
88
70 70
60 60
50 Gran 50 Gran
40 40
30 30
Micro
Pequeña Pequeña
20 20
Independientes Micro
10 Mediana 10 Mediana
Independientes
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
60 60
50 50
40 40
% Afil. SNP y
sindicalizados % Afil. SPP sindic.
30 30
% Afil. SNP % Afil. SPP
20 20
10 10
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
88
89
80 80
70 70
Superior
60 60 Superior
50 50
40 Secunda 40 Secundaria
30 30
20 20
10 Sn nivel / primaria 10 Sn nivel / Primaria
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
80 80
Hombres
70 70 Hombres
60 60
50 50
40 40
Mujeres Mujeres
30 30
20 20
10 10
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
89
90
80 80
Casados 70
70 Casados
60 60
50 50
40 Solteros 40 Solteros
30 30
20 20
10 10
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
70 70
40 40
Hijo
30 30
Hijo
20 20
10 10
Cónyuge Cónyuge
0 0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
90
91
ANEXO 3
Perú Total :
ESTRUCTURA DEL MERCADO LABORAL
Indicadores
Participación 60.0 63.6 72.2 67.2
Desempleo 4.2 3.7 4.1 4.5
Ratio Empleo Población 57.4 61.2 69.2 64.1
* Nota: Para el año 1991 la encuesta no permite desagregar entres Trabj. Fam. No Rem. y Trab. Independientes
Fuente: ENAHO 1994-2000
91
92
ANEXO 4: Análisis Estadístico Tasa de Afiliación Perú Total
39
8,500,00
34
7,500,00
29 Ta
6,500,00 sa
de
24 Afil
5,500,00
iaci
19 ón
4,500,00
3,500,00 14
2,500,00 9
1,500,00 4
1991 1994 1997 2000
4
Fuente: ENNIV 1991, 1994, 1997,
2000
92
93
8,300,000 37
7,300,000 32
6,300,000
27
Tasa de Afiliación
5,300,000
22
4,300,000
17
3,300,000
12
2,300,000
1,300,000 7
300,000 2
1991 1994 1997 2000
80
70
60
50
40
30
20
10
0
1994 1997 2000
93
94
7,000,000
6,000,000
5,000,000
4,000,000
3,000,000
2,000,000
1,000,000
0
1994 1997 2000
35
30
25
20 Menor 1 año
entre 1 y 5
15
Mayor a 5
10
0
1991 1994 1997 2000
94
95
30
25
20
15
10
0
1991 1994 1997 2000
José Gallardo
95
96
CAPÍTULO III
LA ORGANIZACIÓN DEL SISTEMA DE PENSIONES
I. Introducción
Luego de ocho años desde el inicio de la reforma del sistema de pensiones es necesario hacer una
evaluación del desempeño del mismo. En la medida que las características de la estructura de
mercado constituyen los principales determinantes del desempeño del sector, en este capítulo se
hace un análisis de la organización del (SPP). En él se enfatizan las características de su oferta y
demanda para explicar la interacción entre las empresas que se desenvuelven en el Sistema Privado
de Pensiones y analizar su desempeño a través de los efectos sobre la cobertura y asiduidad del
sistema, las ganancias de rentabilidad de las cuentas individuales de capitalización, así como sobre
la eficiencia de la industria en la asignación y producción del servicio previsional. Estos aspectos
son de especial relevancia no sólo por la compleja combinación de costos hundidos endógenos y
exógenos que caracterizan a esta actividad, sino también por la existencia de un esquema de
regulación administrado por el Estado.
II. Antecedentes
26
. Ver en el anexo No 1 una breve historia del sistema de pensiones en el Perú.
27
. Mesa Lago (1999) señala que las reformas estructurales de los sistemas de pensiones en América Latina
impulsaron tres tipos de modelos, el sustitutivo (en Chile, Bolivia, El Salvador y México el sistema privado
reemplazó al sistema nacional), el mixto (en Uruguay y Argentina el sistema privado se combina con el
sistema nacional) y el paralelo (en Perú y Colombia el sistema privado es opcional al nacional).
96
97
entre las empresas (aproximadamente 1.39% en el SPP y 3% en el SNP). En el caso del
SPP los trabajadores deben además pagar una comisión de administración fijada por la
empresa administradora del fondo. Existen algunas diferencias en lo referente a los aportes
de los trabajadores independientes y dependientes. En el caso de los dependientes los
trabajadores cotizan pero son las empresas las que trasladan los fondos, mientras que en el
caso de los trabajadores independientes, estos deben cotizar y trasladar fondos
directamente.
Como ha sido señalado, el esquema multipilar tiene algunas ventajas. Sin el deseo de ser
exhaustivos, permite una transición hacia un sistema privado basado en cuentas
individuales que minimiza de alguna manera el costo de la transición a aquellos
trabajadores afectados por las reformas, reduce el costo fiscal de la transición, y combina
esquemas con diferentes características y, por ende, expuestos a diferentes riesgos
(Holzmann; 2000).
Sin embargo, una de las consecuencias del funcionamiento de este esquema donde
coexisten dos sistemas es la limitación del sistema privado para crecer, especialmente en
dos grupos de trabajadores. El primero es el de trabajadores de ingresos no altos y que están
cercanos a la jubilación, quienes no disponen del tiempo suficiente para acumular los
fondos necesarios que le permitan una pensión mayor a la que obtendrían en el SNP. La
relevancia de este grupo de trabajadores naturalmente decrece en el tiempo. El segundo es
el grupo de trabajadores que tienen bajos ingresos que independientemente de su edad
prefieren al SNP porque este provee de una pensión mínima que excede a lo que obtendrían
97
98
en el SPP. Es decir, el sistema privado tiene limitaciones para crecer en el grupo de
trabajadores de menores ingresos.
Debe señalarse que en el tramo de ingresos altos también existe una restricción que no
incentiva a la afiliación. Actualmente no existen límites a la remuneración máxima
imponible, como si existe en otros países, como Colombia, Chile, Uruguay o Argentina.
Este aspecto desincentiva la suscripción de trabajadores independientes de altos ingresos
quienes preferirán no suscribirse o alterar el reporte de ingresos afectando por ende al nivel
de la cotización. En el anexo No 1 se describe más detalladamente a los sistema pensiones.
98
99
Luego de la creación del Sistema Privado de Pensiones, el inicio de las operaciones de las
empresas administradoras de fondos requirió de importantes gastos de instalación en
estudios de mercado y de factibilidad, capacitación de una fuerza de ventas y la
implementación de la parte operativa28. Los gastos pre-operativos incurridos por las 8
AFP´s a Diciembre de 1993 ascendieron a 150 millones de nuevos soles (aproximadamente
71 millones de dólares de EEUU) Asimismo, la entrada de las empresas y su posterior
operación han estado caracterizadas por la fuerte inversión en propaganda29, la cual
buscaba posicionar a las empresas en el sistema creando una reputación de solidez y
confianza. Esta diversidad de gastos ha configurado una compleja combinación de costos
hundidos en la actividad.
Los gastos de instalación pueden ser mejor caracterizados como costos hundidos de tipo
exógeno (set up costs), mientras que los gastos en propaganda, explicados por la naturaleza
28
. Entre los gastos operativos corrientes se puede considerar los generados por la fuerza de ventas,
publicidad, mercadeo, intermediación, recaudación, en procesos legales para el cobro de aportes, la
comunicación con los afiliados, supervisión, traspasos, y otros gastos administrativos.
29
. De acuerdo a Morris (1999) los gastos en propaganda representaron entre un 6% y 8% de los costos totales
en 1998.
99
100
del servicio previsional, pueden ser mejor considerados como de tipo endógeno debido a
que pueden ser ajustados ante variaciones en la demanda. Una consecuencia de la
combinación de los costos hundidos exógenos y endógenos es la alta concentración de la
industria independientemente del tamaño de mercado. El índice de concentración
Herfindahl-Hirschman (HH) en 1995 fue de 2,100 para el caso de los fondos y de 2,300 en
1996 para el número de afiliados. En el año 2000 el índice alcanzó el valor de 2,700 para el
caso de fondos y 2,500 para el número de afiliados. Este proceso de gradual concentración
puede ser explicado por las absorciones y fusiones que se generaron entre las distintas
empresas30.
30
. Luego del inicio de operaciones por parte de 8 empresas en el período 1994, se inició un proceso de
fusiones que redujo el número de AFP´s a 4 en el año 2000. En 1994 la AFP Horizonte absorvió a la AFP
Megafondo. Ese mismo año Nueva Vida absorvió a la AFP Providencia. En 1996 Profuturo absorvió a la AFP
El Roble, y en el año 2000, las AFP´s Unión y Nueva Vida se fusionaron en Unión-Vida. Debe señalarse que
las tres primeras absorciones se produjeron en el período 1994-1996, bajo condiciones macroeconómicas
favorables pero también bajo un sistema imperfectamente diseñado (Mesa-Lago; 1999).
100
101
induce la desconcentración del Sistema Privado de Pensiones como ocurre en el caso de
otras industrias.
Gráfico No 1
Concentración versus Tamaño del Fondo
3
Logit (c2)
-1
-2
- 2.00000 4.00000 6.00000 8.00000 10.00000 12.00000 14.00000 16.00000 18.00000 20.00000
Ln (TM)
Para analizar la robustez de este tipo de estructura de mercado Paz y Ugaz (2002) han estimado,
como parte de este proyecto de investigación, la relación entre la concentración y el tamaño de
mercado para una muestra de 21 países que han implementado reformas estructurales en la
provisión de seguridad social en las últimas dos décadas. La metodología aplicada es la sugerida por
el estudio de Sutton (1991) para el caso de industrias con importantes costos hundidos endógenos
(gastos de propaganda). La ecuación estimada es:
IC
LN = β 0 + β 1.( LN ( S )) −1
1 − IC
101
102
hundidos endógenos que absorben el crecimientos en la demanda y no motivan una entrada
importante de empresas.
Cuadro No 2
102
103
En el nivel macroeconómico la demanda agregada muestra un ciclo con períodos de
aceleración del crecimiento y con períodos de caídas y estancamiento. La imposibilidad de
generar etapas largas de crecimiento sostenido es posiblemente motivado por la alta
dependencia de la situación externa y la existencia de políticas fiscales pro-cíclicas que
impulsan más la demanda en épocas de auge y la restringen fuertemente en épocas de
recesión, usualmente prolongándola. Estas fluctuaciones afectan los niveles y variabilidad
del ingreso familiar, pobreza, rentabilidad de las empresas, así como los límites de la
informalidad, el tamaño de la fuerza laboral dependiente, entre otros.
3.3. Competencia
La alta concentración de la industria previsional en una perspectiva de largo plazo limita las
posibilidades de competencia y debilita los incentivos para buscar un menor costo operativo
tanto estática como dinámicamente. Esto sugiere que el mecanismo de competencia, que
usualmente garantiza la eficiencia en el funcionamiento de los mercados, puede ser
particularmente débil en el caso de la provisión privada de seguridad social.
En el caso peruano las estrategias de mercadeo utilizadas en el caso peruano han estado
preferentemente dirigidas a trabajadores dependientes de ingresos superiores a los 1,000 nuevos
soles mensuales. En cambio, no se han implementado estrategias de afiliación de importancia para
trabajadores independientes e informales o trabajadores de bajos ingresos, posiblemente porque
estos ingresos no permiten cubrir los costos de afiliación (Shah; 1997). Bajo la estrategia seguida
los costos de traspasos (ochenta soles que debe pagar la AFP de destino a la AFP de origen) se ven
incrementados por la existencia de “premios y regalos” que recibe el afiliado y la comisión que
recibe el afiliador. Las comisiones que pagan las administradoras a los promotores varían de 3.5% a
16% del primer salario mensual del nuevo afiliado. Para que la AFP cubra este costo, necesita que
103
104
el afiliado aporte aproximadamente ocho meses a la empresa por lo que la AFP no podría recuperar
el monto de la comisión incurriendo en una pérdida si el afiliado decide retirarse de la AFP luego de
seis meses, como le es permitido por la ley (Shah; 1997).
104
105
Los aspectos centrales en el funcionamiento del sistema de pensiones son la cobertura del
sistema, el grado de asiduidad de las cotizaciones realizadas por los afiliados, la
rentabilidad del fondo y por ende de las cuentas de capitalización individual, la rentabilidad
que las administradoras de los fondos obtienen en una industria sujeta a regulación, la tasa
de innovación en los distintos procesos de la industria como por ejemplo el manejo de
portafolios óptimos, y el grado de eficiencia en la asignación y en la producción de la
industria.
Cobertura
105
106
relevancia en la determinación de la afiliación. Como se muestra también en el cuadro, la
probabilidad de afiliación es mayor entre los trabajadores de sexo masculino, casados, de
mayor edad, mayores ingresos y localizados en las zonas urbanas del país.
En la segunda etapa de la decisión los afiliados deben optar entre el sistema nacional y el
sistema privado. Lo relevante en este nivel de decisión son las características de los
sistemas. Considerando que la edad del trabajador y su ingreso son variables Proxy de los
beneficios del sistema privado (a mayor edad y menor ingreso menores son los beneficios
de pasarse a una AFP), y que los costos son representados por las tasas de 11.7% en el
sistema privado y 13% en el sistema nacional, se puede observar que la probabilidad de
afiliación a una AFP es mayor cuanto mayor es el ingreso del trabajador, menor la edad del
trabajador, y menor el aporte. Los parámetros IV sugieren lo restrictivo del supuesto de
independencia de terceras alternativas y, por ende, de las diferencias importantes en las
relaciones de sustitución y la conveniencia de estimar el logit anidado. La capacidad
predictiva del modelo es mostrada en la parte inferior del cuadro.
106
107
Cuadro No 3
Segunda Decisión
Aporte al sistema (11.73% en SPP y -2.157989 .1487192 -14.51 0.000 -2.449474 -1.866505
13% en ONP)
Nivel de ingresos (Nuevos Soles) .0002895 .0000495 5.85 0.000 .0001925 .0003864
Edad del trabajador afiliado a AFP -.0564221 .0047556 -11.86 0.000 -.0657429 -.0471012
Primera Decisión
Nivel de ingresos del trabajador .0003791 .0000468 8.10 0.000 .0002873 .0004709
(Nuevos Soles)
Tamaño de la empresa del trabajador .0000178 .0000158 1.13 0.260 -.000132 .0000487
Trabajador independiente:
(IV Parámetros)
No Afiliado .1 . . . . .
LR test de homocedasticidad (iv = 1): chi2 (1) = 145.77 Prob >chi2 = 0.0000
Predicción
Elección
Predicción 0 1 Total
0 30433 1139 31572
1 1028 14605 15633
Total 31416 15744 47205
Notas:
* 1 si se encuentra en planilla
** 1 si es hombre
*** 1 si es casado
107
108
Cobertura: Ingresos Decrecientes y Costos No Decrecientes
Existen diversas explicaciones sobre las limitaciones del crecimiento del SPP. Entre ellas se
ha señalado la existencia de impuestos a las contribuciones de los independientes o la
competencia desleal del SNP que ofrece a sus pensionistas una remuneración mínima. Más
allá de la validez de estos argumentos, parecería claro que el problema de la cobertura es
fundamentalmente explicado por dos aspectos que afectan la rentabilidad de una
administradora, los bajos ingresos de la población laboral aún no afiliada y los costos
crecientes que supondría su afiliación. Es decir, el Sistema Privado de Pensiones ha
penetrado los segmentos del mercado donde el ingreso de los afiliados es normalmente alto
con respecto al promedio nacional y donde los costos de afiliación son relativamente bajos.
En la medida que este segmento ha sido copado, las administradoras de fondos de
pensiones deben penetrar otros segmentos donde los ingresos son menores y los costos de
afiliación crecientemente altos como el sector público o los trabajadores independientes. La
dificultad de expansión del sistema se ve reflejada por recientes estrategias que han
buscado penetrar en segmentos inesperados como el de futuros trabajadores afiliando, por
ejemplo, a estudiantes universitarios. Es decir, se ha optado por la afiliación de individuos
con un ingreso futuro relativamente alto antes de penetrar en segmentos con ingresos
corrientes bajos.
Para mostrar estos aspectos se ha utilizado una muestra aleatoria de 500 afiliados
proporcionada por la SAFP para calcular la distribución del ingreso de los afiliados por año
de afiliación. El cuadro No 4 muestra que los trabajadores que se afiliaron a alguna de las
AFP’s en los últimos dos años se concentran en los niveles bajos de ingreso (menores a
2000 N.S.) a diferencia de los afiliados en años anteriores que en aproximadamente 20% de
los casos afiliaban a trabajadores con ingresos mayores a los 2,000 N.S. El porcentaje de
afiliados en los tramos bajos de ingreso en los años iniciales del sistema es también
importante, lo cual es consistente con una estrategia de afiliación por parte de las
administradoras que privilegiaba a empresas grandes.
Cuadro No 4
Distribución de Ingresos de los Afiliados por Tiempo de Afiliación
108
109
Tiempo de Afiliación Menores a 500 soles 500 - 1000 1000 - 2000 2000 - 5000 Mayor a 5000
Fuente: SBS
Por el lado de los costos se observa que sus componentes tienen tendencias opuestas. Los
costos en administración se hacen relativamente más importantes dada la necesidad de ir
atendiendo a un número de pensionistas cada día mayor (parte de los afiliados están
recibiendo ya sus pensiones), mientras que los gastos en ventas se hacen más pequeños
relativamente, tanto por la situación macroeconómica como por la saturación de segmentos
objetivos. Como resultado de estas tendencias opuestas pero también de una reducción en la
variabilidad de los componentes se observa que la variabilidad de los costos totales se
reduce gradualmente como puede observarse en los gráficos No 2 y 3. Los gráficos No 4 y
5 muestran que el costo medio y el costo medio en ventas medidos en miles de Nuevos
Soles, luego de haber decrecido a partir de 1998, prácticamente se mantuvieron con poca
variabilidad en el año 2001.
El número de afiliados crece en cantidades parecidas cada mes por lo que existe poca
variabilidad en la pendiente del número total de afiliados por AFP en el cuadro No 6. De
otro lado, la productividad por promotor medida como el número de nuevos afiliados por
promotor se ha elevado considerablemente desde 1998 (cuadros 8 y 9). El crecimiento de la
productividad medida de este manera puede sugerir un importante proceso de aprendizaje
en la fuerza de ventas ya familiarizada con la industria. Un análisis más detenido sugiere
una historia bastante distinta. Lo que genera esta tendencia es la creciente afiliación de
trabajadores con menores ingresos lo cual reduce el ingreso por afiliado del promotor. La
única manera de mantener el ingreso en este mercado competitivo es a través de la salida de
promotores tal como lo muestra el gráfico No 8.
109
110
En el gráfico No 7 se muestra el gasto de ventas (promotor, mercadeo, propaganda, etc.)
por trabajador fue decreciente en casi todo el período transcurrido luego de la entrada en
operación de las AFP´s. En los años recientes, sin embargo, la variabilidad se redujo
gradualmente para revertir la tendencia en los últimos meses, en los cuales se observa un
ligero incremento del gasto de ventas por trabajador. Esta evidencia sugiere la existencia de
límites para el crecimiento de la cobertura contenidos en el costo de afiliación al sistema
(mercadeo, fuerza de ventas) más el costo administrativo (en valor presente neto), el cual ha
sido calculado en 387 N.S. para el promedio del sistema privado (menor en Horizonte y
mayor en Profuturo). El ingreso del afiliado que marginalmente puede cubrir este costo no
es bajo para los estándares peruanos por lo que un número grande trabajadores estaría fuera
del rango rentable (o de empresas dada que el tipo de empresa parece ser relevante para la
estrategia de las administradoras de fondos). Este problema se acentúa si se considera que
existen problemas con la asiduidad de las cotizaciones.
La información de costos y demanda sugiere por tanto dos procesos paralelos que muestran
las importantes limitaciones del sistema de pensiones para crecer en general y en las
actuales circunstancias. De un lado, se está afiliando crecientemente a trabajadores con
menores ingresos (como se ha señalado parte del sector público con menores ingresos e
inclusive universitarios sin trabajo). De otro lado, los promotores están afiliando a
trabajadores que son crecientemente más caros por lo cual las economías a escala parecen
disminuir significativamente. Esto puede ser explicado porque los nuevos segmentos
objetivo de las AFP´s consisten en centros laborales más pequeños, o porciones de la fuerza
laboral que no están obligadas a suscribirse y que por ende requieren de mayores gastos, o
de más difícil detección en caso de que estuvieran obligadas.
110
111
Gráfico No 2
10000
9000
8000
7000 Horizonte
Integra
6000 Nueva Vida
Profuturo
5000
Unión
4000
3000
2000
Ene-97 Jul-97 Ene-98 Jul-98 Ene-99 Jul-99 Ene-00 Jul-00 Ene-01 Jul-01
Gráfico No 3
6 000
5 000
4 000
Horizonte
Integra
3 000
Nueva Vida
Profuturo
2 000
Unión
1 000
0
Ene-97 Jul-97 Ene-98 Jul-98 Ene-99 Jul-99 Ene-00 Jul-00 Ene-01 Jul-01
111
112
Gráfico No 4
0.05
0.045
0.04
0.035
H orizonte
0.03 Integra
N ueva V ida
0.025
P rofuturo
0.02 U nión
S istem a
0.015
0.01
0.005
0
E ne-97 Jul-97 E ne-98 Jul-98 E ne-99 Jul-99 E ne-00 Jul-00 E ne-01 Jul-01
Gráfico No 5
C o s to m e d io d e v e n ta s
0 .0 3 5
0 .0 3
0 .0 2 5
H o riz o n te
0 .0 2 In te g ra
N u e v a V id a
P ro fu tu ro
0 .0 1 5
U n ió n
S is te m a
0 .0 1
0 .0 0 5
0
E n e -9 7 J u l-9 7 E n e -9 8 J u l-9 8 E n e -9 9 J u l-9 9 E n e -0 0 J u l-0 0 E n e -0 1 J u l-0 1
112
113
Gráfico No 6
Número de Afiliados
800 000
700 000
600 000
200 000
100 000
0
Ene-97 Jul-97 Ene-98 Jul-98 Ene-99 Jul-99 Ene-00 Jul-00 Ene-01 Jul-01
Gráfico No 7
C o s to d e v e n ta s e n tr e n u e v o s a filia d o s
8 .0 0
7 .0 0
6 .0 0
5 .0 0
4 .0 0
H o riz o n te
3 .0 0 In te g ra
N u e v a V id a
2 .0 0 P ro fu tu ro
U n ió n
1 .0 0
S is te m a
0 .0 0
E n e -9 7 J u l-9 7 E n e -9 8 J u l-9 8 E n e -9 9 J u l-9 9 E n e -0 0 J u l-0 0 E n e -0 1 J u l-0 1
-1 .0 0
-2 .0 0
-3 .0 0
113
114
Gráfico No 8
1 200
1 000
800 H orizonte
Integra
N ueva V ida
600
P rofuturo
U nion
400
200
0
Ene-97 Jul-97 Ene-98 Jul-98 Ene-99 Jul-99 Ene-00 Jul-00 Ene-01 Jul-01
Gráfico No 9
P ro d u c tiv id a d d e p ro m o to re s p o r A F P
5 0.0 0
4 5.0 0
4 0.0 0
H orizon te
3 5.0 0
In teg ra
3 0.0 0
N ue va
2 5.0 0 V id a
P rofu turo
2 0.0 0
U nió n
1 5.0 0
S iste m a
1 0.0 0
5.0 0
0.0 0
Jun -9 3 Jun -94 Jun -9 5 Jun -96 Jun -9 7 Jun -98 Jun -9 9 Jun -00 Jun -0 1
114
115
Asiduidad
Tomando en cuenta criterios como la ubicación geográfica del afiliado, sexo, ingreso o
fecha de afiliación se observa que existen algunas diferencias al interior de la muestra. En
lo referente al ingreso del afiliado el cuadro No 5 muestra que los trabajadores de menores
ingresos son aquellos que porcentualmente cotizaron menos el último mes (tres de cada
diez), y que en un porcentaje bastante mayor no ha cotizado en los últimos dos años (tres o
cuatro de cada diez).
Las diferencias son menores cuando se considera el sexo, aunque el porcentaje de mujeres
que contribuyeron el último mes es más alto y el porcentaje de mujeres que no cotizaron en
los últimos dos años es ligeramente menor (ver cuadro No 6). Diferencias pequeñas
también existen en lo referente a las regiones. Los trabajadores en Lima tienden a mostrar
un porcentaje menor de contribución en el último mes y un porcentaje mayor de no aporte
en los últimos dos años. Una explicación puede ser la mayor heterogeneidad en Lima, las
diferencias, sin embargo, son pequeñas como lo muestra el cuadro No 7.
31
. Este indicador de asiduidad es imperfecto pero es utilizado debido a la inexistencia de indicadores de este
tipo.
115
116
Cuadro No 5
Asiduidad por Nivel de Ingreso
Personas que realizaron su último aporte Menores a 500 soles 500 - 1000 1000 - 2000 2000 - 5000 Mayor a 5000 Total
Fuente: SBS
Cuadro No 6
Asiduidad por Sexo
Personas que realizaron su último aporte Femenino M asculino T otal
Fuente: SBS
Cuadro No 7
Asiduidad por Fecha de Suscripción
Personas que realizaron su último aporte Menor a un año 1 - 2 años 2 - 3 años 3 - 4 años 4 - 5 años 5 a más Total
Fuente: SBS
Cuadro No 8
Asiduidad por Región
Personas que realizaron su último aporte: Lima Otro departamento Total
Fuente: SBS
116
117
Cuadro No 9
Asiduidad por Edad
Personas que realizaron su último aporte Menor a 30 años 30 - 39 40 - 49 50 - 59 60 - 65 Total
Fuente: SBS
Para analizar si estas tendencias eran estadísticamente significativas se estimó un probit ordenado.
Las estimaciones se realizaron utilizando la muestra aleatoria de 478 afiliados al Sistema Privado de
Pensiones proporcionada por la SAFP. La estimación del probit ordenado nos permite determinar
que características incrementan la probabilidad del individuo a seguir aportando al Sistema Privado
de Pensiones. Para la regresión se especificó como variable de la asiduidad del afiliado a la misma
variable fecha en la que realizó su último pago.
Cuadro No 10
Número de = 478
observaciones
LR chi2 (15) = 24.05
Pseudo R2 = 0.0197
117
118
Las ganancias de capital que la administradora obtiene para el afiliado es otra de las
variables relevantes en la evaluación del desempeño del Sistema de pensiones. Las
ganancias son el resultado de un conjunto de variables como la rentabilidad del fondo de
pensiones y el costo del servicio, el cual puede ser descompuesto en el costo de la
administración del fondo, el costo de supervisión del sistema (aporte para la regulación), y
el costo del seguro.
32
. La rentabilidad nominal anualizada en los últimos 36 meses se calcula de acuerdo a:
(12 / 36 )
VC t
RN t = −1
VC t − 36
118
119
cuota es la porción del fondo que pertenece a cada afiliado. Este fondo es divido en cuotas,
de tal forma que cada vez que el afiliado realiza un aporte a su cuenta individual (CIC), en
realidad está comprando cuotas del Fondo. Las cuotas son valorizadas diariamente, en
función del valor total de los instrumentos en que hayan invertido el fondo. Por tanto los
aportes se constituyen en cuotas; y los rendimientos del fondo hacen crecer el valor cuota.
La variación del valor cuota promedio sería el indicador de rentabilidad del sistema.
Gráfico No 10
119
120
40.00%
35.00%
30.00%
25.00%
20.00%
15.00%
10.00%
5.00%
0.00%
Ago-94 Ago-95 Ago-96 Ago-97 Ago-98 Ago-99 Ago-00 Ago-01
-5.00%
-10.00%
Rentabilidad Real Anualizada Rentabilidad Nominal Anualizada
Fuente: SAFP
Una medida alternativa de la rentabilidad del fondo consistiría en saber que tanto obtendría
un individuo que deposita el equivalente de su cotización neto de costos en un activo libre
de riesgo como un certificado de depósito del BCRP. En un cálculo más reciente Carrasco
(2001) ha encontrando que para el período Enero 1995 - Agosto 2001 por cada 100 nuevos
soles que se obtendría de intereses utilizando un instrumento del Banco Central, un
cotizante en el Sistema Privado de Pensiones obtendría aproximadamente 86 nuevos soles.
Es decir, la rentabilidad del sistema de privado de pensiones es menor que alternativas de
ahorro con poco riesgo. La rentabilidad neta mensual calculada por Carrasco se halla
descontando el efecto de los costos en los que debe incurrir el afiliado por estar en el SPP, y
que no incrementan sus Cuenta Individual de Capitalización. Es decir, un porcentaje de la
remuneración asegurable destinado a financiar las prestaciones de invalidez y
sobrevivencia, y un monto destinado a la prestación de gastos de sepelio, así como los
montos y porcentajes que cobre la AFP por los conceptos retribución al servicio que la AFP
está prestando.
120
121
Gráfico No 11
Fuente: SAFP (2001)
Costos en el SPP
3.00%
2.50%
2.00%
Prima de Seguro
1.00%
0.50%
0.00%
Ene-95 Ene-96 Ene-97 Ene-98 Ene-99 Ene-00 Ene-01
Debido al crecimiento constante del número de afiliados y del valor del fondo, las
tendencias de estos costos sugieren que el desempeño de la industria no ha sido
satisfactorio. Tanto el ratio comisión-aporte (aproximadamente 30%) como el ratio
comisión-total de recursos administrados (aproximadamente 20%) han permanecido
estables en los últimos cuatro años, luego de haberse incrementado en 1997 como lo
sugiere el gráfico.
121
122
Topes Máximos
Existen restricciones a las inversiones de las AFPs, las cuales buscan controlar el riesgo de
la cartera administrada. Estas restricciones resultan de la combinación de límites máximos a
tipos de activos, límites máximos globales (combinación de dos o más tipos de activos),
sub-límites a valores específicos, límites por emisión, límites por emisor, límites por grupo
económico y límites de inversión en el extranjero.
33
. Ver por ejemplo Rocha, Hinz y Gutierrez (1999).
34
. Ver Vitas (1998).
122
123
Cuadro No 11
Tipo de activo Límites sobre el valor del Fondo
a) Valores emitidos por el Gobierno Central de la República del Perú Menor al 30% a + b < 40%
b) Valores emitidos por el Banco Central de Reserva Menor al 30%
c) Depósitos a plazo y otros títulos representativos Menor al 30% c + d + s < 40%
d) Bonos emitidos por empresas del Sistema Financiero Menor al 25%
e) Bonos subordinados emitido por empresas del Sistema Financiero y el de Seguros Menor al 15% e + f < 40%
f) Instrumentos de inversión emitidos para el financiamiento hipotecario por empresas financieras Menor al 40% f + g < 40%
g) Instrumentos de inversión emitidos para el financiamiento hipotecario por otras entidades Menor al 40%
h) Bonos emitidos por personas jurídicas de derecho privado no pertenencientes al sistema financiero Menor al 40%
i) Instrumentos de corto plazo Menor al 15% i + j < 20%
j) Operaciones de reporte Menor al 10%
k) Acciones y valores representativos de derechos sobre acciones en depósito inscritos en la bolsa Menor al 35% k + l + m< 35%
l) Certificados de suscripción preferente Menor al 3%
m) Productos derivados de valores que se negocien en la bolsa de valores Menor al 0.1%
n) Operaciones de cobertura de los riesgos financieros Menor al 5%
o) Cuotas de participación de los fondos mutuos de inversión en valores y de fondos de inversión Menor al 15%
p) Instrumentos de inversión representativos de activos titulizados Menor al 10%
q) Instrumentos financieros emitidos o garantizados por estados u otras instituciones extranjeras 1/ Menor al 7.5%
r) Emisiones primarias de acciones y/o valores mobiliarios representativos de derechos crediticios 2/ Menor al 4%
s) Pagarés emitidos o avalados por empresas del sistema financiero Menor al 5%
t) Pagarés emitidos o avalados por otras entidades Menor al 5%
u) Otros valores mobiliarios, cuando la Superintendencia lo determine
1/ También se consideran acciones y valores representativos de derechos sobre acciones en depósito inscritos en bolsa de valores,
instrumentos de deuda, cuotas de participación de fondos mutuos y operaciones de cobertura de riesgo emitidos por instituciones
2/ Se refiere a las emisiones dirigidas a financiar el desarrollo de nuevos proyectos
En la segunda etapa de la decisión los afiliados deben optar entre el sistema nacional y el
sistema privado. Lo relevante en este nivel de decisión son las características de los
sistemas. Considerando que la edad del trabajador y su ingreso son variables Proxy de los
beneficios del sistema privado (a mayor edad y menor ingreso menores son los beneficios
de pasarse a una AFP), y que los costos son representados por las tasas de 11.7% en el
sistema privado y 13% en el sistema nacional, se puede observar que la probabilidad de
afiliación a una AFP es mayor cuanto mayor es el ingreso del trabajador, menor la edad del
trabajador, y menor el aporte. Los parámetros IV sugieren lo restrictivo del supuesto de
independencia de terceras alternativas y, por ende, de las diferencias importantes en las
relaciones de sustitución y la conveniencia de estimar el logit anidado. La capacidad
predictiva del modelo es mostrada en la parte inferior del cuadro.
Asimismo, para que los diversos instrumentos puedan formar parte de la cartera de una
AFP, se requiere de dos acreditaciones de clasificación de riesgo. Hay que agregar que
desde el mes de febrero de este año se impusieron clasificaciones de riesgo mínima por
instrumento financiero. Anteriormente no existían limitaciones por riesgo, pero las AFPs
123
124
siempre prefirieron tomar valores con poco riesgo, según lo manifiesta las políticas de
inversiones que cada una publica.
Cuadro No 12
CARTERA ADMINISTRADA POR AFP E INSTRUMENTO FINANCIERO (a Diciembre del 2001)
Entre los principales instrumentos que conforman el portafolio de las AFP´s a diciembre de
2001 se encuentran las acciones, los depósitos a plazo, y los bonos de empresas no
financieras y de arrendamiento financiero. En estos casos, así como en el de los restantes
instrumentos los límites establecidos por la regulación de las inversiones no son
alcanzados.
124
125
Debe señalarse, sin embargo, que las restricciones a las inversiones en el exterior sí pueden
constituir una importante limitación a las inversiones de las AFPs. En este sentido, algunos
autores sostienen que estas restricciones son una traba al incremento de la rentabilidad de
los fondos debido a que impiden diversificar el portafolio con activos internacionales lo
cual disminuiría el riesgo de la cartera ocasionado por las fluctuaciones internas (Muñoz;
2000). De esta forma las AFPs podrían reducir no sólo los riesgos específicos de los
instrumentos que conforman una cartera en activos domésticos, sino también el riesgo de
mercado.
Gráfico No 12
125
126
V a lo r d e l F o n d o y B o n o s d e l S e c to r P riv a d o
3000
2500
2000
S to c k d e b o n o s
1500
Fondo de AFPs
1000
500
0
1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
Fuente: BCRP
El gráfico No 12 muestra la evolución del valor agregado del fondo de pensiones y el stock
de bonos del sector privado. Como se puede apreciar la disponibilidad de bonos en la
economía peruana no ha sido significativamente mayor que la potencial demanda desde el
Sistema Privado de Pensiones. Más aún, a partir de 1998 se abre una brecha importante
entre estas variables, lo cual hace más latente el problema de inversión para las AFP´s. Hay
que resaltar que el problema se vuelve más dramático al escoger únicamente los bonos que
cuentan con el menor riesgo que son los instrumentos que cuentan con la mayoría de la
demanda de las AFPs.
Cuadro No 13
126
127
CARTERA ADMINISTRADA POR EL SISTEMA PRIVADO POR INSTRUMENTO
El poco desarrollo del mercado de capitales también influye para que los instrumentos en los que
invierte las AFP´s no tengan el grado de liquidez suficiente para poder trasladar rápidamente los
fondos de un valor a otro, lo que también ha influenciado la relativa estabilidad de las proporciones
en que invierten las AFP´s en los últimos años como se muestra en el cuadro No 13. Como se puede
observar, las mayores diferencias en los porcentajes invertidos se producen en el caso valores del
gobierno central, bonos de empresas no financieras y de inversiones en valores extranjeros. Este
último caso se debe a que desde el 30 de mayo del 2000 se permitió realizar inversiones en este tipo
de instrumento.
Existen dos barreras al ingreso de nuevos emisores en el mercado de capitales: los elevados
costos de financiamiento y los cortos plazos para cumplir con los requisitos mínimos
exigibles. Falen (2001) muestra que una empresa sin experiencia en el mercado de valores
se demora más de dos meses en el proceso de estructuración y clasificación de la emisión,
127
128
excediendo los dos meses de antigüedad en la información relevante que otorga la Conasev
y SBS.
Adicionalmente, los costos de realizar una emisión son elevados. Los costos fijos
(estructuración, gastos en clasificadoras y gastos legales) ascienden a $71,000 y los costos
variables a 1.08% del monto colocado. De esta manera, el financiamiento en papeles de
deuda es atractivo sólo si se emite por un monto elevado, la emisión tiene una clasificación
de riesgo baja (no incurre en costos de garantías o un pago de una cuota mayor para
compensar al inversionista) y el bono sea de largo plazo. Estas características sólo podrían
ser cumplidas por pocas empresas en el Perú, observándose una alta concentración en los
emisores de bonos35.
Los fondos mutuos son un patrimonio compuesto por los aportes voluntarios de personas
naturales o jurídicas que es manejado por una Sociedad Administradora de Fondos con la
finalidad de obtener una rentabilidad mediante inversiones en diferentes instrumentos
financieros. Los fondos pueden ser de Renta fija o Renta mixta. Los límites a la inversión
de los Fondos mutuos impuestos por la CONASEV son menos restrictivos y existe una
mayor competencia que en el Sistema Privado de Pensiones. Los rendimientos de los
Fondos mutuos de Renta Fija y Renta variable se comparan con el rendimiento del Sistema
Privado de Pensiones en el cuadro No 14.
Cuadro No 14
Rentabilidades de Diferentes Fondos
(Nuevos Soles)
Período FM Renta Mixta FM Renta Fija FM Total AFP
1998 -11.20 2.40 2.10 1.00
1999 20.90 20.80 20.80 23.10
2000 -22.80 7.70 7.30 -2.80
2001* 0.20 2.90 2.90 9.60
Fuente: CONASEV y SBS
* Hasta Agosto del 2001
35
Falen estimó que el monto total de bonos colocado en 1999 fue explicado por los diez mayores emisores.
128
129
En el cuadro se puede observar que los Fondos mutuos de renta mixta presentan en el
período examinado una rentabilidad menor a la del Sistema Privado de Pensiones, mientras
que el fondo de renta fija muestra una rentabilidad menor a la de las AFPs en los años 1999
y 2001. Las diferentes rentabilidades de los fondos se deben a la diferencia en la estructura
de inversiones de los fondos. Los fondos de renta mixta invierten principalmente en
acciones domésticas y externas, los fondos de renta fija destinaron por ejemplo el 73.8% de
sus recursos a comprar bonos en diciembre del 2000. Debe señalarse que el patrimonio del
fondo mutuo de renta fija supera largamente al de renta mixta, por ello que en el acumulado
predomina el comportamiento del fondo de renta fija.
No obstante existir períodos en los cuales el fondo de pensiones reporta una mayor rentabilidad que
el fondo mutuo, en general el fondo mutuo debe exhibir un mejor rendimiento. Se podría aseverar
que el fondo mutuo tiene una mejor diversificación debido a que el fondo de pensiones no podría
diversificar la cartera de manera similar por la alta concentración en bonos que no es permitida por
los límites impuestos por las instituciones pertinentes, pero estos límites no se hacen efectivos
porque el real límite es la poca disponibilidad de bonos en el mercado nacional. A diferencia de las
AFPs, los fondos mutuos pueden invertir más del 70% en bonos debido a que los recursos que
manejan estas sociedades están muy por debajo que los fondos administrados por una AFP (US$
2,582.8 millones del Sistema Privado de Pensiones contra $ 438.4 millones de los fondos mutuos
para diciembre del 2000)36.
De otro lado se debe considerar que los fondos analizados tienen diferentes políticas de inversión.
La política de inversión de la AFP es de largo plazo porque la finalidad es otorgar al afiliado una
pensión razonable al momento de su jubilación y para ello la AFP manejará sus aportes por varias
décadas. Para maximizar esa pensión la AFP tendrá un horizonte de inversión más extenso y sin
ambiciones de corto plazo, por ello que no se observan actitudes de “traders” en estas instituciones.
En cambio, la política de inversiones del fondo mutuo tiene la necesidad de tener un buen
rendimiento en el corto plazo debido a que existe libre entrada y salida de inversionistas, sólo en
algunos fondos se exige un periodo mínimo de permanencia y le cobran al inversionista una tasa
sobre el monto invertido si éste decide retirar su dinero en un lapso menor al indicado. Por ende, las
inversiones de las Administradoras de los Fondos de Pensiones en el Perú tienen dos tipos de
restricciones: la primera impuesta por el Banco Central mediante límites máximo para invertir
según instrumento, emisor, grupo económico y nivel de riesgo, mientras que la segunda proviene
del poco desarrollo del mercado de capitales nacional.
Los topes máximos no son restricciones muy relevantes porque se observa una amplia brecha entre
el límite y el monto invertido por las AFPs. Por otro lado, la escasez de instrumentos en el mercado
de capitales no permite una mayor diversificación de la cartera administrada, convirtiéndose de esta
manera en la principal restricción de las AFPs para mejorar la rentabilidad del fondo. Una posible
solución para permitir diversificar de una mejor manera el fondo sería relajar el límite a
instrumentos extranjeros. Con esta medida las AFPs podrán tener acceso a mayores oportunidades
de inversión con mejores rendimientos que el mercado local y además reducir el riesgo de mercado.
36
Acceso a Financiamiento a través del Mercado de Valores (2001)
129
130
Asimismo, no existen incentivos fuertes para que las administradoras mejoren el rendimiento del
fondo. Sólo cuentan con un pequeño incentivo que es el encaje, cuya rentabilidad a la AFP es muy
reducida en comparación con las comisiones recibidas por las administradoras. Por ello se
recomendaría que se implemente una comisión para la AFP proporcional al rendimiento del Fondo,
para que las administradoras tengan mayores incentivos a incrementar la rentabilidad del fondo
mediante una mejor diversificación. Hay que agregar que estos incentivos serían más relevantes en
el caso que la AFPs tuvieran mayores instrumentos en los cuales invertir, ya que por ahora existe
poco márgen para incrementar la diversificación.
La similitud entre las carteras de inversión de las empresas del Sistema Previsional se explica por la
falta de instrumentos en el mercado. Los pocos instrumentos se reparten entre las diferentes
administradoras. Otra causa de la semejanza en la estructura mencionada sería la necesidad de no
alejarse de la rentabilidad mínima establecida por la SBS, pero esta restricción no es muy
importante ante la falta de oportunidades de diversificación de cartera.
En el caso peruano existen otros aspectos que encaren la provisión de seguridad social
como son el costo tanto en la provisión del seguro de invalidez y sobrevivencia, y los
costos de la supervisión del sistema.
Cuadro No 15
Ingreso Imponible y Costos del Sistema
130
131
País Ingreso Imponible Seguro de Invalidez y Comisión de la
Promedio Sobrevivencia Administradora
(US$) (% ingreso) (% ingreso)
Argentina 838 1.19 2.09
Bolivia 255 2.00 0.50
Chile 508 0.70 1.61
El Salvador 321 1.32 1.83
México 471 2.501/ 1.98
Perú 652 1.34 2.39
Uruguay 605 0.64 2.04
Fuente: AIOS (2000)
Notas 1/: Comisión equivalente sobre flujo. El seguro es administrado de manera
independiente al sistema de pensiones.
Costos de Supervisión
131
132
las administradoras. A estos costos directos habría que añadirse los costos originados en las
comisiones a la Caja de Valores de Lima, bolsa y Conasev, los cuales varían entre 2.5% y
4% (Morris; 1999).
En la medida que las condiciones de competencia en una industria con pocas empresas y
barreras a la entrada significativas no son las óptimas, los incentivos provistos por el
esquema de regulación aplicado son fundamentales para la obtención de una asignación
razonablemente eficiente, ganancias en productividad que conduzcan a menores costos y
tasas de retornos adecuadas. En el caso peruano la provisión de incentivos a las empresas
está centrada en el requerimiento de un encaje como se explica a continuación.
Encaje e Incentivos
132
133
logra beneficios en la capitalización de las cuentas individuales de los aportantes y en el
encaje de la administradora.
De otro lado, el encaje no es una buena garantía para rescatar el valor del fondo ante una
posible caída en el valor del mismo. Para que el encaje sea una garantía para el fondo de
pensiones, no debe tener una correlación positiva con la rentabilidad del fondo. Es
preferible una correlación negativa entre ambos rendimientos para que ante alguna
reducción en el valor del fondo de pensiones, esta sea contrarrestada por la mejora del
rendimiento del encaje lo que permitiría compensar la caída. En la actualidad, si se reduce
el valor cuota del fondo, el encaje también reportará una disminución en su valor y podría
no cubrir la rentabilidad mínima exigible. En este caso se haría efectiva la garantía de la
carta fianza expedida por una entidad bancaria. Hasta la actualidad ninguna AFP ha tenido
una rentabilidad menor a la mínima establecida.
Cuadro No 16
El mecanismo del encaje en la práctica puede ser débil si las rentabilidades de los
fondos evolucionan similarmente. El cuadro No 16 presenta un cuadro
comparativo de los ingresos provenientes de las comisiones recibidas e ingresos
por utilidad (o pérdida) del encaje. Se puede observar en el cuadro que los
ingresos por comisiones superan ampliamente a los ingresos por el encaje. Este
último está correlacionado positivamente con la rentabilidad del fondo, por ello
que en los años 1999 y 2001 se reportan mejores resultados. Asimismo, las
administradoras no corren riesgos por los ingresos en las comisiones debida a
que el pago por este concepto es obligatorio. Debe señalarse que se espera
incrementos en el monto total de encaje mantenido debido al crecimiento del
valor del fondo, suponiendo además que la tasa de encaje se mantiene alrededor
del 1% de la cartera administrada. En este caso se prevé que el incentivo de la
utilidad sobre el encaje sea más fuerte.
Gráfico No 13
100.00%
133
50.00%
0.00%
1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000
134
135
En el caso peruano debe señalarse además que el tema de la rentabilidad mínima puede inducir
comportamientos cooperativos por parte de las empresas. Específicamente la rentabilidad real anual
en cada mes no puede ser menor a la que resulte inferior de la rentabilidad real anual promedio
menos tres puntos o el 25% de la rentabilidad real anual promedio de todos los fondos. Por tanto,
135
136
las administradoras no son incentivadas a tomar riesgos o decisiones que impliquen cambios en el
portafolio que sean distintas a las que se toman en otras administradoras.
Eficiencia Asignativa
V. Conclusiones
Diversas explicaciones se han dado para estos resultados, la mayoría de ellas referidas a las
acciones del gobierno (impuestos, competencia a través del Sistema Nacional de Pensiones,
etc.). Luego de un análisis de la industria, parecería que la explicación más importante tiene
que ver con la existencia de una estructura de mercado altamente concentrada en la que
existen importantes barreras a la entrada de diverso tipo. La necesidad de hundir costos
significativos de instalación y el tamaño de demanda crean una industria concentrada. La
existencia de costos hundidos de tipo endógeno determinan que la concentración sea alta
para distintos tamaños de demanda. Una estimación de corte transversal para un grupo de
136
137
economías donde se ha reformado del sistema de pensiones muestra la robustez de esta
característica. Si a esto se añade la existencia de regulaciones estrictas a las inversiones de
las administradoras, se configura un escenario en el que existe poco margen para la
competencia y por ende para una asignación eficiente que se traduzca en una reducción de
costos en el manejo de fondos (eficiencia productiva).
Como resultado, desde su creación, la rentabilidad real neta del Sistema Privado de
Pensiones ha sido baja lo cual dificulta el crecimiento de su cobertura. Desde el lado de la
oferta del servicio se pueden distinguir algunos factores asociados a la regulación de la
industria que explican la baja rentabilidad (o altos costos) de los fondos, como son las
restricciones a las inversiones, la débil estructura de incentivos a las AFPs que no
comparten las ganancias obtenidas para los afiliados, la estructura de mercado que se
genera con la limitación de instrumentos (cuotas, costos, etc.), y la existencia de costos
altos (seguros y comisiones pagadas a las administradoras).
137
138
medianas asignar trabajadores para la búsqueda de información, gastos de
contabilidad, etc.
Los dos aspectos señalados nos permiten clasificar a los afiliados o potenciales
afiliados a partir de dos criterios, las características socioeconómicas, simplificando
trabajadores de altos ingresos y trabajadores de bajos ingresos, y las características
laborales, simplificando empresas grandes y pequeñas. Dada la regulación de precios
vigente, las AFP´s tienen pocos incentivos para afiliar a trabajadores que tengan
simultáneamente las características bajos ingresos y empresas pequeñas. En este
sentido, los ingresos de la administradora, que son una fracción fija del ingreso del
trabajador, decrecen en la medida que se incorporan trabajadores con ingresos bajos,
mientras que los costos de la empresa aumentan en la medida que se incorporan a
trabajadores que se desempeñan en empresas medianas o pequeñas, que son más
difíciles de ubicar y que tienen un menor número de trabajadores. Debe señalarse que
en el caso de trabajadores independientes de ingresos medianos o altos, es costoso
suscribirlos y también conocer sus verdaderos ingresos.
Existen, sin embargo, modificaciones que pueden permitir algunas mejoras en el sistema
privado de pensiones. Desde el lado de la demanda se puede determinar que la creación de
planes de consumo puede permitir una mejora en la asignación debido a que el afiliado
podría escoger un plan más acorde con sus preferencias y características. Esto podría tener
un impacto en la cobertura. En un contexto de heterogeneidad se destaca, por tanto, las
138
139
restricciones de instrumentos que el regulador puede autorizar a las AFP´s para atraer a
distintos tipos de trabajadores. Es decir, parecería ser necesario diseñar mejores esquemas
de discriminación que puedan hacer rentable la afiliación de trabajadores en pequeñas
unidades laborales. En la actualidad no existen planes de jubilación distintos que permitan
elegir las comisiones, tasas de contribución o fondos. En la actualidad, por ejemplo, los
aportantes jóvenes y los de avanzada edad están obligados a formar parte de un mismo
fondo el cual puede ser no óptimo para ambos, debido a que los primeros podrían estar
interesados en tener un mayor riesgo (Rocha y otros; 1999). Debe señalarse que la
existencia de tasas fijas genera conceptualmente ineficiencias en la asignación porque el
monto ahorrado difiere del óptimo dadas las preferencias, ingresos, alternativas de ahorro,
etc.
Desde el lado de las inversiones parecería poco factible mejorar la rentabilidad de los
fondos sin incurrir en mayores riesgos dada la situación macroeconómica vigente. Se
podría flexibilizar algunas restricciones a la inversión como, por ejemplo, la creación de
fondos alternativos o modificar posporcentajes tope (otras economías).
Un aspecto distinto a los señalados tiene que ver con la poca confianza en el sistema de
pensiones que existe entre los trabajadores. Existen algunos factores que incrementan
la desconfianza de los potenciales afiliados. Como por ejemplo la falta de
reglamentación para la rentabilidad mínima, hace que se genere desconfianza entre
los trabajadores. Estos cambios y la difusión de la relevancia de la necesidad de contar
con una provisión por jubilación así como de un seguro de accidentes o invalidez
ayudarían a solucionar el problema de la credibilidad (debe recordarse que una
fracción muy pequeña de los casi 300 trabajadores – la mayoría independientes- que
fueron victimas del incendio del centro informal en Mesa Redonda después de la
Navidad pasada estaba afiliado a una AFP)..
VI. Bibliografía
139
140
Ayala, U. (1996) “¿Qué se ha aprendido del Sistema de Pensiones en Argentina,
Colombia, Chile y Perú?” Documento de trabajo 330. Banco Interamericano de
Desarrollo.
Carrasco, G. (2001) “La Regulación del Sistema Privado de Pensiones”. Mimeo. PUCP.
Castro, J. (1994) “Defender el S.N.P. para modificarlo”. En: Sistema privado de pensiones
desafíos y respuestas, CEDAL.
Cruz Saco A. y V. Ivachina (1999) “¿Capitalización para quién? La industria de las AFPs”.
En: Apuntes. N°45, CIUP.
Francke, P.(1994), “El trabajador y el Sistema Privado de Pensiones”. En: Sistema privado
de pensiones desafíos y respuestas, Lima: CEDAL
Holzmann, R. (2000) “The World Bank Approach to Pension Reform”. The World Bank.
Mimeo.
140
141
Morris, F. (1999) “Diagnóstico de los Costos del Sistema Privado de Pensiones y de la
Superintendencia de AFP´s”. Mimeo.
Muñoz, I.. (2000) “La reforma del Sistema Privado de Pensiones”, En: La reforma
incompleta, Lima: IPE y CIUP.
Rocha, R., Hinz, R. y Gutierrez, J. (1999) “Improving the Regulation and Supervision of
Pension Funds: Are there Lessons from the Banking Sector?” The World Bank. Mimeo.
Rojas, J. (1998), “La rentabilidad del sistema privado de pensiones en el Perú, 1993 –
1997”. Documento de trabajo N° 160. PUCP.
Shah, H. (1997) “Towards Better Regulation of Private Pension Funds”. The WorldBank.
Mimeo.
Vega Centeno, M. y Remenyi, M. (1996) “El Sistema Previsional en el Perú: Sistema Nacional de
Pensiones vs. Sistema Privado de Pensiones”. En Economía, Lima: Pontificia Universidad Católica
del Perú. Vol XIX, N° 37-38.
141
142
142
143
Anexo No 1
El Sistema de Pensiones en el Perú
El Sistema Privado de Pensiones (SPP) fue creado por el D.L. 25897, en Diciembre de
1992, con la finalidad de aliviar la carga estatal que significaba el Sistema Nacional de
Pensiones (SNP), y en el contexto en el que se redefinía el rol del Estado en la economía.
Estas reformas buscaban restringir las tareas del Estado a la regulación y provisión de
bienes públicos básicos. La seguridad social y el sistema previsional deben entonces pasar a
provisión de agentes privados.
En este contexto se creó el Sistema Privado de Pensiones (SPP), esquema de ahorro forzoso basado
en cuentas de capitalización individual administradas por empresas privadas (Administradoras de
Fondos de Pensiones o AFP´s) reguladas por la Superintendencia de Administradoras de Fondos de
143
144
Pensión (SAFP). El sistema de pensiones quedó conformado por ambos esquemas que en principio
coexistirían sólo temporalmente (por ende la reforma crearía un esquema privado sustituto), aunque
luego se decidió mantener un esquema paralelo (Mesa Lago; 1998).
Primera Etapa
Se da inicio en Diciembre de 1936 con la Ley 8433 y termina en abril de 1973 con el
D.L. 1999 (ver más adelante). Según el Estudio Actuarial del SNP (1990) en este
período las prestaciones se caracterizaron por la implantación y funcionamiento de
varios programas paralelos, cuya administración correspondió a instituciones
diferentes, independientes y competitivas. Entre los regímenes de pensiones que
estuvieron vigentes en este período tenemos:
- La ley 8433 llamada Ley del Seguro Social Obrero Obligatorio, es el régimen
que dio origen oficial a los programas de prestaciones del Seguro Social en el
país. Tuvo carácter mixto pues cubre riesgos de salud y pensiones
simultáneamente. El riesgo de enfermedad era también cubierto por los
mismos empleadores, y el riesgo de vejez fue sustituido por la Ley 13640, que
estableció el Fondo de Jubilación Obrera. Así dicho régimen cubría solo los
riesgos de invalidez hasta la dación del D.L. 19990.
144
145
agrícolas y mineras. Este régimen tuvo vigencia hasta la promulgación del D.L.
17262.
- La ley 13724, denominada ley del Seguro Social del Empleado, fue un régimen
mixto que cubrió los riesgos de salud y pensiones de forma simultánea. Cubría
riesgos de: enfermedad, invalidez, vejez, muerte y sobrevivientes. Se excluyó de
la cobertura a los incluidos en la ley general de goces y a los empleados
particulares comprendidos en la ley 10624. Este régimen fue de aplicación
nacional y en la rama concerniente a pensiones tuvo vigencia has 1973.
145
146
Son características de esta etapa los regímenes de prestaciones a cargo de la Caja
Nacional del Seguro Social (ley 8433, ley 16124 y D.L. 18846) y del Seguro Social del
Empleado (ley 13724), fueron regímenes de carácter mixto, cubrieron riesgos de salud
y pensiones. Debe señalarse también que hubo programas que cubrían exclusivamente
riesgos de pensiones, como la ley general de goces, la 13640 y el D.L. 17262.
Segunda Etapa
Se da inicio con la implementación del D.L. 19990 y culmina con el D.L. 25897. Esta
etapa se inicia con la promulgación del D.L. 19990 y se caracteriza por la fusión de los
programas de prestaciones inherentes a los dos grupos de asegurados (obreros y
empleados) y la creación de un ente administrador único (Según el Estudio Actuarial
del SNP). En esta etapa los regímenes vigentes son:
146
147
Tercera Etapa
Con el D.L. 25897 se crea el SPP, y se traspasa el programa de pensiones del IPSS a
una oficina del Estado, la Oficina de Normalización Previsional (ONP), perdiendo así
la autonomía que tenía en materia de pensiones el IPSS.
En el SPP no esta reglamentada la pensión mínima, mientras que el SNP esta se dio a
partir de enero del 2002. Con respecto al bono de reconocimiento, este se encuentra
ajustado a la inflación, pero no devenga intereses y tiene un tope máximo, además sólo
el 1% de los asegurados que se pasaron al SPP tuvieron acceso a él (Mesa Lago, 1998).
Estas condiciones de acceso, diferencias en las cotizaciones, así como, otros factores
como la desconfianza en el nuevo sistema limitaron la cobertura inicial del SPP.
147
148
Entre 1995 y 1997 se promulgaron leyes con el fin de fomentar nuevas afiliaciones al
SPP, se unificaron tanto las edades de retiro (65 años), como las contribuciones en
ambos sistemas, las contribuciones en el SPP bajaron de 14.5% de la remuneración a
11.8% (8% de aporte a la CIC, 3.8% comisión de administración y seguro, y el 1% de
contribución de solidaridad se eliminó), mientras que en el SNP las contribuciones
aumentaron del 3% al 11%, eliminando la contribución del empleador, y 1997 esta se
incremento a 13%. Estas medidas generaron un nuevo impulso en las afiliaciones al
SPP, tal como se muestra en el siguiente gráfico.
Nuevas Afiliaciones
140
120
100
80
Nuevos afiliados
60
40
20
Julio 1993 Julio 1994 Julio 1995 Julio 1996 Julio 1997 Julio 1998 Julio 1999 Julio 2000 Julio 2001
148
149
concluido su vida laboral, tratando de que este ingreso tenga relación con el percibido
durante la vida activa del trabajador, y tiene tres elementos centrales, la capitalización
individual de los aportes, la participación del sector privado como administrador de
los fondos y la posibilidad de elegir a una administradora por parte de los
trabajadores (AIOS; 1996).
Se han señalado diversas ventajas para la existencia de este esquema como las opciones
disponibles para cada afiliado, la permeabilidad a cambios demográficos, la relativa
separación de los problemas políticos que conllevarían a una inestabilidad normativa y
administrativa, la mayor transparencia en el manejo de las cuentas, el orden fiscal38, la
promoción de la competencia, la generación de empleo, el crecimiento del ahorro interno y
el desarrollo del mercado de capitales39.
37
. Ver en el anexo 2 una descripción más extensa de los agentes y características del Sistema Privado de
Pensiones.
38
. En 1996 se estimó que el pago de pensiones alcanzaba los 60 millones de soles mensuales y la recaudación
no llegaba a la suma de 50 millones de soles. Ver Vega Centeno y Remenyi (1996).
39
. En el año 2000 la composición de la cartera de inversiones estaba constituida principalmente por acciones
comunes (24%), bonos de empresas no financieras (17.5%), bonos de arrendamiento financiero (12.7%), y
depósitos a plazo (14.9%).
40
. Ver en el anexo 3 una descripción de las sanciones aplicadas por la SAFP desde la creación del SPP.
149
150
El Sistema Nacional de Pensiones
Los regímenes de reparto más importantes en el SNP son los normados por los
D.L.19990 y D.L.20530, los cuales fueron promulgados en los años 1973 y 1974
respectivamente. El D.L. 19990 comprende a los trabajadores del régimen laboral de
la actividad privada (Ley 4916 y Decreto Legislativo 728), a los trabajadores obreros
(Ley 8433) y a los funcionarios y servidores públicos sujetos al régimen laboral de la
actividad pública (Ley 11377 y Decreto Legislativo 276) que no se encentren en el
régimen D.L. 20530. Consiste, según el Informe sobre los Regímenes Previsionales de
los Decretos Leyes N° 19990 y 20530 y otros a cargo del Estado, D.S. N° 003-2001-TR,
del 15 de julio del 2001, en otorgar prestaciones fijas y percibir contribuciones no
definidas en valor suficiente para que la contribución colectiva de los trabajadores
financie las pensiones de los jubilados. En este sistema de reparto, según se señala en
el mismo informe, los trabajadores de menores ingresos obtienen una prestación
mayor que la que hubieran obtenido con ahorro personal, mientras que para los
trabajadores de ingresos altos, la relación es inversa.
El segundo sistema de reparto es el normado por el D.L. 20530 que beneficia a los
funcionarios y servidores públicos de entidades e instituciones del Estado y de los
gobiernos locales, que cumplan con los requisitos establecidos. En este sistema, el
trabajador aporta durante su vida laboral y obtiene una pensión que en la mayoría de
los casos es nivelable con la remuneración de un trabajador activo (cédula viva). Este
régimen, en la actualidad, se encuentra cerrado a nuevas incorporaciones, excepto
para los magistrados del Poder Judicial y fiscales del Ministerio Público, quienes
pueden incorporarse con mas de 10 años de carrera judicial.
150
151
Según, el informe elaborado por la comisión especial encargada, el subsidio que el
Estado asume, calculado sobre remuneraciones y pensiones promedio es:
151
152
1. Los pensionistas bajo este régimen son los menos favorecidos, ya que cuentan
con topes máximo (807 nuevos soles) y mínimo (415 nuevos soles). Además son
aquellos que presentan una menor dispersión.
Este régimen fue pensado para beneficiar a todos los trabajadores sujetos al régimen
laboral de la actividad pública regulado por el D.L. 11377.
Ya que es el sistema más antiguo del Perú (Ley de Goces y Beneficios de 1850), no ha
sufrido modificaciones que lo lleve a adecuarse a cambios demográficos.
Contrariamente, los cambios que se dieron distorsionaron el sistema diseñado
originalmente. Así, mediante la ley 26495, en noviembre de 1982 se modificó el
cálculo de la pensión haciéndola nivelable. Luego, a través de la ley 23329, de
diciembre de 1981, se permitió la reincorporación al sistema. La ley 25008, de
enero de 1989, se elevó la pensión de los sobrevivientes al 100% de la pensión
de cesantía. Con leyes como la 25219, que se dio en mayo de 1990, y la ley
25388 de enero de 1992, se ampliaron los alcances del sistema incorporando a
trabajadores de régimen laboral de actividad pública y trabajadores de
empresas estatales sujetos a régimen de actividad privada. Estos trabajadores
gozan actualmente de pensiones muy superiores a las que se otorgan en
cualquiera de los sistemas previsionales en el Perú, inclusive en el SPP.
152
153
capacidad de pago del Estado y disminuye la capacidad de pago de pensiones
para las capas más desprotegidas.
La principal ventaja del Sistema Nacional es que garantiza una pensión mínima a los
afiliados. Por otra parte, el Sistema Privado al tomar en cuenta los ahorros o aportes al
fondo para obtener la renta que el afiliado gozará luego de jubilarse, puede provocar que los
trabajadores que tienen remuneraciones bajas o dejaron de aportar por cierto periodo a la
AFP, reciban como pensiones sumas despreciables. Este punto es una gran diferencia con el
esquema chileno, ya que el Sistema privado en Chile prevé una pensión mínima con la cual
cubren al 35% de sus afiliados (Castro; 1994). El sistema Privado de Pensiones ha previsto
incorporar una pensión mínima, pero hasta ahora no ha sido incorporada a los reglamentos.
Una desventaja del Sistema Nacional es la existencia de una pensión máxima, lo que
provoca el desaliento al ingreso de trabajadores que cuentan con ingresos elevados y que en
una AFP podría gozar de una pensión de jubilación mayor. El Sistema Nacional de
pensiones permite que el trabajador tenga a acceso a regímenes especiales de jubilación si
las condiciones de su trabajo son diferentes al resto del mercado laboral. Contrariamente, el
Sistema Privado obliga a los afiliados a jubilarse no antes de cumplir 65 años para hombres
y mujeres. La única posibilidad que se realice una jubilación anticipada en el SPP es
cuando el afiliado pueda obtener una pensión igual o superior al 50% del promedio de las
remuneraciones percibidas y rentas declaradas durante los últimos 120 meses, debidamente
actualizadas, pero para ello el afiliado deberá tener un nivel de aporte mensual muy
elevado.
153
154
Anexo No 2
Características del Sistema Privado de Pensiones y sus Agentes
Son las encargadas de administrar las cuentas de capitalización individual y manejar los
fondos de pensiones de los trabajadores. Estas empresas se constituyen como sociedades de
propósito exclusivo. Las AFP deben contar con un capital social mínimo requerido, que se
actualiza con el IPC, e acuerdo a los requerimientos de operaciones (Artículo 18, D.S. 054-
97-EF).
El Ente Supervisor
154
155
Superintendente de
Banca y Seguros
Secretaría General
Superintendencia Adjunta de
Gerencia de Informática Asesoría Jurídica
Superintendencia Adjunta de
Administración General
- Que exista una separación entre la Administradora y el Fondo, es decir que cada
administradora pueda manejar sólo un fondo y que este sea un patrimonio
independiente del de la administradora (AIOS 1996).
Los Afiliados
155
156
Aportes y Cotizaciones
De acuerdo con el artículo 47° del Reglamento de la Ley del SPP, los trabajadores afiliados
al SPP deben efectuar sus aportes al Fondo. Los afiliados al SPP tenían obligación de
cotizar al fondo un monto igual al 10% de su remuneración imponible (antes de impuestos
y deducciones, después de subsidios y compensaciones), más lo que estableciera la AFP
por comisiones de administración y gastos de seguros. A partir de la Ley N°26504 este
porcentaje se redujo al 8%.
Los trabajadores cotizantes son aquellos que vienen cumpliendo con su obligación de
entregar sus aportes a la AFP. Los aportes obligatorios y voluntarios de los trabajadores
dependientes los realiza el empleador. Este pago debe ser efectuado dentro de los primeros
cinco días del mes siguiente al que fueron devengados (artículo 49°), en caso de demora
este pago da lugar a intereses moratorios. En caso de demora en el pago de aportes se dan
sanciones civiles o acciones legales contra el empleador dentro del plazo determinado por
la Superintendencia. En caso de que la AFP no tome las acciones pertinentes para la
recuperación de los pagos adeudados, la Superintendencia sanciona a la AFP con multa.
156
157
Según el artículo 52° del mencionado reglamento las AFP están facultadas para
repetir contra el empleador los gastos en los que incurran en el procedimiento de
cobro de aportes. Respecto a los trabajadores independientes, estos deben efectuar
los pagos de los aportes directamente a la AFP (de acuerdo con el artículo 33°). La
modalidad y frecuencia del pago son establecidas por acuerdo entre la AFP y el
afiliado de acuerdo con lo que dicte la Superintendencia. Los montos de los
aportes se establecen de acuerdo al artículo 30°.
Los aportes voluntarios no están sujetos a límite, de acuerdo con el artículo 31° de
la ley general. En la primera etapa del SPP, los aportes establecidos para los
trabajadores dependientes afiliados a las AFP eran superiores a los que cobraba el
IPSS. Para reducir esta diferencia, se estableció por ley que la remuneración de
quienes se afiliaban al SPP se incrementaba de la siguiente manera:
41
La remuneración asegurable está constituida por el total de las rentas provenientes del trabajo personal del afiliado, cualquiera sea la
categoría de renta a que deban atribuirse de acuerdo a las normas tributarias sobre la materia
157
158
- Si además el trabajador lo disponía su ingreso se incrementaba en 9.72%, pero el
empleador se liberaría de la provisión de la compensación por tiempo de servicio
(CTS).
- Un incremento equivalente al monto por el seguro de vida obligatorio y el empleador
dejaría de pagarlo.
Traspasos
Los requisitos para que un trabajador traspase su CIC de una AFP a otra son los
siguientes de acuerdo al artículo 27° del Compendio de Normas del SPP, Título V:
a) Haber efectuado el pago de por lo menos los seis últimos aportes mensuales
consecutivos devengados hasta el mes precedente al bimestre anterior a la
presentación de la solicitud.
b) Efectuar el pago de la compensación por traspaso a que se refiere el artículo 28°.
La compensación por traspaso (artículo 28° del Compendio de Normas del SPP,
Título V) se paga a la AFP de origen por los gastos adicionales ocasionados por el
proceso de verificación originado por la solicitud. Este monto es fijado por la
Superintendencia y es una cantidad fija e igual para todos los afiliados al sistema.
En el gráfico podemos ver como han ido variando las solicitudes de traspaso aprobadas en
el SPP y los promotores contratados por cada AFP, mensualmente desde diciembre de
1995. Se puede observar que ambas series están altamente correlacionados (coeficiente de
0.73).
158
159
Promotores vs Traspasos
9000
8000
7000
6000
5000
prom
traspasos
4000
3000
2000
1000
0
Dec-95 Jun-96 Dec-96 Jun-97 Dec-97 Jun-98 Dec-98 Jun-99 Dec-99 Jun-00 Dec-00 Jun-01
Fuente: SAFP
- En Enero del 2000, AFP Nueva Vida absorbe a Unión, se da un leve incremento en los
traspasos.
Bono de Reconocimiento
159
160
Los trabajadores afiliados al SNP tienen acceso a este bono que reconoce sus aportaciones
al sistema, siempre y cuando hayan cumplido con cotizar cuatro de los últimos seis meses
antes de su traslado al SPP (en un inicio el requisito era cotizar los seis meses anteriores al
traspaso al SPP), y como mínimo 48 meses dentro de los diez años previos.
Los bonos de reconocimiento pueden ser transferidos por endoso del titular, a través
de la AFP a la cual se encuentra afiliado el trabajador. Las características de dichos
bonos son:
- son nominativos
- están denominados en moneda nacional y expresan un valor constante que se reajusta
en función al IPC.
- Son garantizados por el Estado Peruano.
- Son redimibles en la fecha de jubilación del titular, hayan sido transferidos o no al
afiliado, o en caso de muerte, jubilación anticipada o declaración de invalidez total del
mismo, si aún no ha sido transferido al afiliado.
- Su valor nominal se calcula mediante la siguiente formula:
VN = ( RPM ) * (# meses ) * ( 0 . 1831 )
Donde:
VN es el valor nominal del bono
RPM es la remuneración promedio mensual
#meses es el número de meses reconocidos
Inversiones de la AFP
La Cartera de Inversión de la AFP cuenta con límites máximos para los diferentes
instrumentos financieros en los que se invierte los recursos del fondo. Los porcentajes
máximos son establecidos por el Banco Central de Reserva, con la aprobación de la
Superintendencia de Banca y Seguros. En la tercera sección se detallan estos topes
máximos.
Prestaciones
160
161
Las prestaciones a las que tiene derecho al afiliado son las de jubilación, invalidez,
sobrevivencia y gastos de sepelio. No se incluyen prestaciones de salud ni riesgos de
accidentes. Los pensionistas de jubilación, invalidez y sobrevivencia están comprendidos
como asegurados obligatorios del Régimen de Prestaciones de Salud. Los afiliados perciben
la pensión de jubilación cuando cumplen los 65 años de edad, aunque puede hacerlo
después de aquella fecha, manteniéndose los derechos y obligaciones de la AFP y la
Compañía de Seguros. Por otro lado, el individuo puede jubilarse anticipadamente, si
obtiene una pensión igual o superior al 50% del promedio de remuneraciones percibidas y
rentas declaradas durante los últimos 10 años, debidamente actualizados.
La pensión por jubilación se obtiene en función a la Cuenta Individual de Capitalización (CIC) del
afiliado en función al capital acumulado en su cuenta menos los fondos registrados en la a) “Libreta
Complementaria de Capitalización AFP” que decide retirar y b) el producto de la venta o redención
del Bono de Reconocimiento (si es que el afiliado proviene del Sistema Nacional de Pensiones). La
pensión de jubilación se puede hacer efectiva en cuatro formas: retiro programado, renta vitalicia
personal, renta vitalicia familiar y renta temporal con renta vitalicia diferida.
En el primer caso, el afiliado puede efectuar retiros mensuales contra el saldo de su Cuenta
Individual de Capitalización hasta que esta se extinga. Los retiros se realizan según un
programa concordado por ambas partes, cumpliendo las condiciones prestablecidas por la
Superintendencia de Banca y Seguros. Si el saldo fuera positivo y fallece el afiliado, el
saldo pasa a sus herederos.
La Renta Vitalicia Personal le permite al afiliado recibir una pensión mensual hasta su
fallecimiento, para lo cual el afiliado le cede a la AFP el saldo de su Cuenta Individual de
Capitalización. Para poder cumplir con estas pensiones, la AFP establece un sistema de autoseguro
utilizando los saldos de las Cuentas Individuales de Capitalización de los afiliados que contrataron
esta modalidad y hayan fallecido. De esta manera se crea el Fondo de Longevidad, cuyas
inversiones son supervisadas por la Superintendencia de Banca y Seguros.
161
162
Mediante la Renta Temporal con Renta Vitalicia Diferida, el afiliado contrata una Renta
Vitalicia Personal o Familiar, con la finalidad de recibir una pensión mensual a partir de
una fecha determinada, obteniendo de la AFP una Renta Temporal durante el tiempo en que
ejerce la opción por la modalidad que haya escogido el afiliado y a la fecha en que la Renta
Vitalicia diferida empieza a ser pagada. Para obtener los pagos de la AFP por ese intervalo
de tiempo, el afiliado tiene que retener en su CIC los fondos suficientes para poder
gestionarlos.
La AFP puede tomar el riesgo de invalidez, sobrevivencia y gastos de sepelio o pueden ser
administrados por las Empresas de Seguros a pedido de las AFP. Si el afiliado elige la
Empresa de Seguros, le corresponderá pagar una prima según el tarifario establecido por la
empresa mencionada. En el caso de los trabajadores dependientes, el empleador retiene el
pago destinado a las Empresas de Seguros para transferirlos a la AFP. Cada afiliado
designa mediante la AFP a la empresa de seguros que administra su riesgo o le encarga a la
AFP la designación de la misma y puede trasladar el manejo de riesgo a otra empresa de
seguros en la misma forma y plazos que disponen los reglamentos en pasar de una AFP a
otra. Por otro lado, para que una compañía de seguros pueda participar en el Sistema
Privado de Pensiones, debe registrarse en la Superintendencia y están obligadas a asegurar
cualquier afiliado que lo solicite, en caso contrario se cancelará el registro de la misma.
Si la AFP tome la decisión de administrar los riesgos en forma directa, todos los afiliados quedarán
comprendidos en esta modalidad. Para este fin, la AFP debe constituir un Fondo Complementario
con los aportes obtenidos por el porcentaje de la remuneración asegurable destinada financiar las
prestaciones de invalidez y sobrevivencia y el monto destinado a financia la prestación de gastos de
sepelio. Las inversiones que se efectúen con los recursos del Fondo Complementario también se
rigen bajo los mismos principios que rigen el Fondo. Adicionalmente, la AFP tiene la obligación de
contratar un seguro para cubrirse del riesgo de una eventual catástrofe.
Disposiciones tributarias
162
163
Fondo de Longevidad. Las transferencias de valores mobiliarios para cualquiera de los tres
fondos no están afectas a las tasas y contribuciones fijadas por la CONASEV.
Reforma de 1995
En Julio de 1995 se aprobaron algunas modificaciones al sistema previsional peruano con el fin de
eliminar las diferencias entre el SNP y el SPP, que habian generado una competencia desventajosa
para el sistema privado. Tambien se aprobaron algunas modificaciones cuyo objetivo era dar un
mayor acceso a los trabajadores independientes. Se aprobaron medidas cuyos objetivos y detalles
fueron:
- Se reduce la carga laboral del trabajador, el empleador asume la carga laboral del pago de IPSS
y FONAVI.
- Se reduce la tasa de aporte a la CIC de 10% a 8%.
- Se incrementan los aportes al SNP de 9% a 11%, asumido integramente por el trabajador.
- Se dieron incrementos compensatorios a las remuneraciones y se eliminaron otros creados por
la ley original.
- Se exonera del IGV a las primas y comisiones cobradas por las AFP.
- Se elimino la contribución de solidaridad del 1%.
Reforma de 1996
En Noviembre de1996, se dieron normas con el fin de eliminar ineficiencias, y normas para que las
AFP tomen un papel mas activo en el cobro de aportes adeudados. Los cambios mas importantes
fueron los siguientes:
- Se dieron medidas para agilizar la afiliación al SPP, se dio un plazo de 10 dias para que el
trabajador que ingresa a un centro laboral informe a que sistema previsional y dado el caso a
que AFP desea afiliarse.
- Se dieron mecanismos para pormover una mayor lealtad de los afiliados, y reducir los traspasos,
como es el cobro de comisiones diferenciadas.
- Se dieron medidas para fomentar el ahorro voluntario sin fin previsional en una AFP.
- Se amplio el bono de reconocimiento hasta diciembre de 1997, con el fin de fomentar traslados
al SPP.
163
164
- Se dieron medidas para constituir provisiones en el caso de no iniciar procesos de cobro de
aportes adeudados.
164
165
Anexo3
Sanciones a las Administradoras de Fondos de Pensiones
Cuadro Resumen
Número de Sanciones a las AFP´s
B. Sanciones por 6 4 0 0 0 1 0 11
publicidad e
información a
usuarios
C. Sanciones por 7 3 4 4 5 3 2 28
políticas de
inversión
Total 17 14 5 4 15 9 3 67
Fuente: SBS.
Elaboración: propia.
2000
La Superintendencia está facultada para imponer sanciones a las empresas supervisadas en función
de la gravedad de la infracción cometida. Dichas sanciones pueden ser la cancelación de la licencia
de funcionamiento de la AFP, la exclusión del registro de la Superintendencia, la suspensión
temporal, una multa o una amonestación.
Durante el año 2000, se impusieron 3 multas a las AFP: dos por realizar traslados de fondos
destinados a prestaciones a una cuenta corriente de la AFP y una por abrir una agencia sin la
respectiva autorización de la Superintendencia. Asimismo, se impusieron 253 sanciones contra
promotores, de las cuales 243 fueron la exclusión permanente del registro de promotores de AFP y
las otras 10 la inhabilitación para operar por un lapso de 60 días.
1999
165
166
1998
166
167
Multa 9 920 Nuevos Soles.
121-98 01.04.98 Sanción a Profuturo por déficit de encaje por 7
dás consecutivos. Multa por 52 805 Nuevos
Soles.
142-98 09.04.98 Sanción a Horizonte por obstaculizar
inmotivada y reiteradamente, el proceso de
recepción del pago de la compensación por
traspaso. Multa por 21122 Nuevos Soles.
143-98 09.04.98 Sanción a Nueva Vida por obstaculizar
inmotivada y reiteradamente, el proceso de
recepción del pago de la compensación por
traspaso. Multa por 21122 Nuevos Soles.
192-98 17.05.98 Sanción a Integra por incurrir en excesos de
inversión. Multa por 21122 Nuevos Soles.
359-98 16.09.98 Sanción a Unión por incurrir en excesos de
inversión. Multa por 21122 Nuevos Soles.
429-98 30.10.98 Sanción por dejar de observar procedimientos
establecidos para el acceso a una pensión en
dólares. Multa por 52 000 Nuevos Soles.
476-98 22.11.98 Sanción a Profuturo por adquirir valores
negociables que no cumplieron los requisitos
establecidos en la norma vigente. Multa por
78000 Nuevos Soles.
510-98 28.11.98 Sanción a Unión por obstaculizar el proceso de
recepción del pago de la compensación por
traspaso. Multa por 26 000 Nuevos Soles
511-98 28.11.98 Sanción a Integra por incurrir en sobregiros de
endeudamiento para la realización de
inversiones a cuenta de la cartera administrada.
Multa por 26 000 Nuevos Soles.
556-98 28.11.98 Sanción a Nueva Vida por obstaculizar el
proceso de recepción del pago de la
compensación por traspaso. Multa por 52000
Nuevos Soles.
1997
167
168
1996
1995
168
169
263-95 20.06.95 Sanción a Horizonte por informar vacancias de
directores fuera del plazo establecido por ley.
Multa por 4023 Nuevos Soles.
347-95 07.09.95 Sanción a Profuturo por faltas diversas. Multa
por 40234 Nuevos Soles.
352-95 13.09.95 Sanción a Nueva Vida por no remitir
oportunamente copia de solicitud de
preexistencia. Multa por 10000 Nuevos Soles.
427-95 29.10.95 Sanción a Integra por no remitir dentro de los
plazos establecidos, copia del material
informativo y publicitario. Multa por 4023
Nuevos Soles.
435-95 02.11.95 Sanción a Integra por incumplir con la entrega
de copia del contrato de afiliación al
empleador. Multa por 4023 Nuevos Soles.
490-95 07.12.95 Sanción a Horizonte por infracciones diversas.
Multa por 40234 Nuevos Soles.
1994
169
170
Business. Edición 1994”. Multa por 4882
Nuevos Soles.
103-94 22.04.94 Sanción a El Roble por no remitir a la SAFP el
material informativo publicado el 29.03.94.
Multa por 3487 Nuevos Soles.
108-94 22.04.94 Sanción a El Roble por publicar material
informativo que no cumple con las normas de
publicidad. Multa por 13948 Nuevos Soles.
180-94 13.05.94 Sanción a Integra por no remitir a la SAFP el
material informativo distribuido a sus afiliados
y contener información inexacta. Multa por
34870 Nuevos Soles.
406-94 13.07.94 Sanción a Providencia por no informar dentro
de los plazos establecidos los acuerdos sobre
las juntas generales de accionistas y por
reiterancia a la infracción durante el período de
un año. Multa por 13948 Nuevos Soles
576-94 14.09.94 Sanción a Profuturo por realizar inversiones
que exceden el monto máximo permitido.
Multa por 13948 Nuevos Soles.
649-94 23.09.94 Sanción a Horizonte por no remitir a la SAFP
el material informativo ¿, y no publicar la
mínima información requerida. Multa 13948
Nuevos Soles.
775-94 19.10.94 Sanción a Providencia por irregularidades en
el manejo de diversos casos de solicitudes de
reversibilidad. Multa por 13984 Nuevos Soles.
849-94 14.11.94 Sanción a Integra por publicidad comparativa
inexacta en su Boletín “Integrando Octubre-
1994”. Multa por 20922 Nuevos Soles.
170
171
CAPITULO IV
IMPLICANCIAS DE POLITICA
Norberto E. Garcia
Norberto E.García
171
172
Capitulo IV
Implicancias de Políticas
1. Introducción
De los tres Capítulos previos, como fuera ya mencionado, surgen implicaciones de políticas
que es útil sintetizar en el presente Capítulo. Conviene distinguir: i) las políticas hacia el
mercado laboral que aun cuando tengan efectos a mediano plazo, requerirán dos decenios
de crecimiento económico alto y sostenido para modificar los rasgos negativos del mercado
laboral que impiden la expansión del (SP); ii) las modificaciones al actual régimen de
pensiones para enfrentar la dualidad del mercado laboral; iii) las medidas adoptables para
facilitar la expansión del (SP) mientras las políticas previas maduran.
Como se concluye de los Capítulos I y II, el aumento sostenido del empleo con buenos
niveles de ingreso, es una condición para la expansión a mediano plazo del (SP). Pero esto
no es un resultado esperable de la política laboral sino de la política económica en su
conjunto. Unas pocas cifras nos dan una idea de la magnitud del esfuerzo que esto
representa, como condición necesaria, no suficiente. En la actualidad, la informalidad
representa un 53 por ciento de la PEA Urbana y un 54 por ciento de los hogares se
encuentra por debajo de la linea de pobreza – cifra que se eleva hasta un 80 por ciento en
areas rurales. Dado un crecimiento esperado de la PEA Urbana del orden de 3.5 por ciento
anual, el Producto No Primario debería crecer a una tasa promedio anual de entre 7 y 8 por
ciento para generar nuevos empleos de calidad y ademas reducir gradualmente el
subempleo, la informalidad y la pobreza. Incluyendo el Producto Agropecuario, Pesquero y
Minero, el PBI agregado deberia crecer a un ritmo de 7 por ciento anual en forma sostenida.
Dada la restricción de divisas y el bajo nivel de inversión actual, alcanzar y mantener esa
cifra de crecimiento del PBI, requiere un crecimiento de la inversión – esencialmente de la
privada – de 8 o 9 por ciento anual, y elevar el coeficiente de inversión desde el 18.0 por
ciento actual hasta un 28.0 por ciento sostenido. Pero este ritmo de crecimiento implica
importaciones de bienes intermedios y de bienes de capital acordes. Dada la elasticidad
Importaciones/PBI que caracterizó al Perú en los 90’s, el esfuerzo previo sólo será viable
con un crecimiento anual de las exportaciones del 9 a 10 por ciento anual, en forma
sostenida. Esto último implica una ambiciosa política de penetración de nuevos mercados y
diversificación de mercados y exportables – incluyendo el Turismo. Lo que implica una
institucionalidad de prospección e incentivos cambiarios o extra cambiarios acordes.
Dado que en la actualidad (1er semestre del 2001) el Perú se encuentra transitando el cuarto
año de recesión consecutiva, y considerando que el escenario de la economía internacional
172
173
no será propicio hasta el 2003, la sola maduración de las principales políticas para imprimir
tal ritmo de crecimiento llevará tiempo.
Es por ello que a pesar de que se efectúen esfuerzos por el lado de las políticas activas en el
mercado laboral, llevará muchos años ir superando el problema esencial. Esto no significa
que la expansión del (SP) deba esperar 20 años hasta que se solucione el problema del
mercado laboral. Esto significa que la expansión anual del (SP) se encontrará acotada por
este factor, hasta que se sienta el efecto sobre el empleo e ingresos de un alto ritmo de
crecimiento. Por el otro lado, existen acciones, que se describen en los párrafos siguientes,
que permitirán remover gradualmente obstáculos a la expansión del (SP) aun antes de que
se perciban plenamente los resultados sobre el empleo de un crecimiento alto y sostenido.
173
174
mejoramiento de la productividad. No obstante, es crucial que estos cambios sean
efectuados consensuadamente, a traves de la concertación tripartita en el Consejo Nacional
del Trabajo y sólo despues de logrado acuerdos llevarlos al Congreso. En la práctica, los
actores sociales tienen que tener claridad respecto a las ventajas de lo que estan acordando,
para ponerlo en marcha en las empresas, más que ser obligados por ley.
174
175
- La sexta area de acción es el reemplazo del modelo predominante de negociación
salarial por otro que concentre la atención en los factores específicos que contribuyen a
elevar la productividad en la empresa y en los incentivos salariales para que los
trabajadores participen en dichos aumentos. El objetivo es que hacia el futuro, los aumentos
reales de salarios esten principalmente determinados por el aumento de la productividad.
En este campo, convendría plantear el tema en el Consejo Nacional del Trabajo, y apoyar al
Consejo en campañas de difusión para las empresas y para los sindicatos – que ya han
comenzado. El paso siguiente, es solicitar la acción de las Organizaciones de empresarios y
de trabajadores que integran el Consejo Nacional de Trabajo, para llevar la campaña de
difusión hacia sus respectivas bases. Este es un tema clave para reemplazar el enfoque de
minimización de los costos laborales por hora y su reemplazo por la minimización de los
costos laborales unitarios.
175
176
Como ya se mencionara, el tema es como acelerar el ritmo de la inversión privada para
lograr un crecimiento del PIB de un 7 a 8 por ciento anual sustentable a largo plazo, sin lo
cual no hay crecimiento del empleo de calidad. Lo que implica en particular un gran
esfuerzo exportador y competitivo con importaciones, dada la restricción de divisas que
afecta al crecimiento del Perú. No corresponde a este trabajo elaborar sobre estos temas,
pero sí parece relevante subrayar la estrecha vinculación con los ya presentados en páginas
previas. Enfrentar la restricción de divisas para acelerar el crecimiento económico, supone
poner énfasis en el esfuerzo institucional para identificar y abrir mercados externos, y en el
mejoramiento de la competitividad en transables. Esto último no es sólo un problema de
mejorar la infraestructura económica – energía, transporte, comunicaciones, caminos,
puertos, aeropuertos, etc. sino además y muy especialmente, de desarrollar y mantener entre
los actores económicos y sociales, conductas coherentes con un impulso sistemático hacia
el aumento de la productividad – en línea con lo que se ha ido exponiendo en este trabajo.
Por consiguiente, una política de equilibrios macroeconómicos y reglas estables es una
cara del tema. La otra, la creación de una institucionalidad en diversos ámbitos –
incluyendo el laboral – que estimule la adopción de políticas de aumento de la
productividad a nivel micro. En este sentido, lo valioso sería sincronizar las acciones en el
campo de la política laboral y la política económica para reforzar su incidencia sobre
productividad y competitividad.
Un segundo gran tema es que salir de una larga y profunda recesión, reactivar la economía,
alcanzar y mantener tasas elevadas de crecimiento económico para crear empleos de
calidad, supone no sólo avanzar en mejoras de competitividad sino ampliar, redefinir y/o
profundizar reformas económicas y sociales.
Un gobierno democrático tiene necesariamente que lograr acuerdos con los partidos
políticos y con la sociedad civil, para definir perímetros de consenso en torno no sólo a
objetivos, sino alrededor de diferentes políticas esenciales para establecer las bases para un
alto crecimiento, que puedan ser implementadas con permanencia a largo plazo, y no sean
expuestas a las contingencias del enfrentamiento político y social, cotidiano, propio del
libre juego democrático. Sobre todo cuando el punto de partida coincide con las
repercusiones de una recesión internacional.
En este sentido, la concertación en torno a temas laborales requiere de ser ampliada a una
agenda bastante más amplia, pero muy concreta, en torno a puntos cruciales para el tránsito
hacia un nuevo modelo de crecimiento, y sobre todo para la sustentabilidad y
gobernabilidad durante la larga etapa de cambios que el mismo supone.
176
177
Esto último no es sólo un problema de mejorar la infraestructura económica – energía,
transporte, comunicaciones, caminos, puertos, aeropuertos, etc. sino ademas y muy
especialmente, de desarrollar y mantener entre los actores económicos y sociales, conductas
coherentes con un impulso sistemático hacia el aumento de loa productividad – en línea con
lo que se ha ido exponiendo en este trabajo. Por consiguiente, una política de equilibrios
macroeconómicos y reglas estables es una cara del tema. La otra, la creación de una
institucionalidad en diversos ambitos – incluyendo el laboral – que estimule la adopción de
políticas de aumento de la productividad a nivel micro. En este sentido, lo valioso sería
sincronizar las acciones en el campo de la política laboral y la política económica para
reforzar su incidencia sobre productividad y competitividad.
Un gobierno autoritario puede intentar hacerlo sin compromisos con la sociedad civil por
un período de tiempo, pero un gobierno democrático tiene necesariamente que lograr
acuerdos con los partidos políticos y con la sociedad civil, para definir un perímetro de
consenso en torno no sólo a las metas, sino alrededor a las políticas que establezcan las
bases del crecimiento económico, para que puedan ser implementadas con permanencia a
largo plazo, y no sean expuestas a las contingencias del enfrentamiento político y social,
cotidiano, propio del libre juego democrático. Sobre todo cuando el punto de partida
coincide con las repercusiones de una recesión internacional. En este sentido, la
concertación en torno a temas laborales requiere de ser ampliada a una agenda bastante más
amplia, pero muy concreta, en torno a puntos cruciales para el tránsito hacia un nuevo
modelo de crecimiento.
177
178
sistema. El costo fiscal de esa transferencia gradual será menor, sin duda,
que el derivado de enfrentar una explosión de dicha bomba de tiempo.
iv) Una alternativa a considerar para manejar el nuevo sistema, es constituir una
Corporación de derecho privado e interes público, como entidad de segundo piso, para
implementar la estrategia de expansión y financiamiento del Sistema Privado y
administrarla en el tiempo. Las AFP’s por sí solas tenderan a mantener su orientación
actual, mientras que una entidad de segundo piso velará por la reorientación y
funcionamiento del sistema redefinido, y se hará responsable por su financiamiento. Esta
Corporación estaría también a cargo de administrar el Seguro Público de Pensiones, hasta
su agotamiento en el tiempo.
178
179
Un primer factor es la estructura altamente concentrada del mercado por el lado de la oferta,
determinada por elevados costos exógenos de instalación y endógenos de inicio de
funcionamiento, que constituyen una barrera a la entrada de nuevos oferentes de servicio y
restringe la competencia.
Un segundo factor, es la debil competencia entre AFPs que la actual organización del Sistema
genera. El mecanismo de competencia es débil porque está restringido a gastos de mercadeo y
a la posibilidad de quitarse clientes de una a otra AFP. Por un lado, la elevada concentración
debilita la competencia. Por el otro las AFP´s tienen incentivos muy debiles para reducir sus
costos operativos. Al estar impedidas de diferenciar productos y obligadas a ofrecer sólo un
tipo de plan de pensiones, se obtura el mecanismo restante – diferenciación de productos –
que les hubiera permitido competir. En síntesis, la competencia entre AFP’s esta
principalmente limitada a gastos de mercadeo y quitarse clientes, que incrementa el costo por
trabajador pero no expande la cobertura. Todo lo expuesto sugiere que la debilidad de la
competencia en el mercado de AFP’s es un obstáculo para la expansión de la afiliación, y que
deberian plantearse modificaciones a las actuales reglas de organización en este sentido.
Mientras tanto, un cambio simple que puede tener repercusiones positivas que se desarrolla en
una sección posterior, es autorizar a las AFP´s a operar con paquetes diferenciados de
productos – planes diversos de pensiones.
El hecho de que las AFP’s hayan obtenido en los años recientes la “crema” del mercado a
traves de la substitución del sistema antiguo, hace que en la actualidad su expansión enfrente
costos crecientes e ingresos decrecientes, lo que constituye un límite a la expansión. Los costos
son crecientes porque la venta de nuevos servicios implica ahora identificar, acudir y
seleccionar empresas cada vez mas pequeñas – lo que eleva los costos – y con trabajadores de
ingresos menores – lo que reduce relativamente los ingresos.
Adicionalmente, los costos de venta actuales son elevados y no permiten afiliar a una fracción
elevada de la población. Esto ultimo sugiere que este es un ambito donde se requeriran
modificaciones importantes – como los incentivos planteados en secciones anteriores – para
poder expandir el sistema
7. Rentabilidad
La evidencia sugiere un divorcio entre las utilidades de las AFP’s y la rentabilidad del fondo
de pensiones. Las primeras han sido elevadas ( para cubrir las inversiones iniciales), mientras
que esta última ha sido baja – lo que no es sorprendente ante la escasa de competencia. Una
comparación de la rentabilidad del fondo entre 1995 y el 2001 y la rentabilidad de un activo
financiero de muy bajo riesgo, como lo es un certificado de depósitos del Banco Central de la
Reserva del Perú, señala claramente que la de este ultimo es significativamente mas alta. Pero el
179
180
problema principal es que con las actuales reglas del juego, la rentabilidad de las AFP’s
depende esencialmente de las comisiones cobradas y de la asiduidad de las cotizaciones, pero
está divorciada de la rentabilidad del fondo – excepto por el mecanismo de encaje que es un
vinculo muy debil como esta diseñado actualmente. Esto reduce el incentivo para reducir
costos operativos y mejorar el portfolio. La restricción que enfrentan las AFP’s en terminos de
alternativas de inversión de los fondos, contribuye también a este divorcio. Ademas, las AFP’s
no tienen incentivos suficientes para mejorar el rendimiento del fondo.
En esencia, deberían plantearse cambios en la dirección de : i) adoptar medidas que
permitan una comisión a las AFP’s proporcional al rendimiento del fondo para que las
utilidades de las AFP’s reflejen un incentivo a la eficiencia; ii) redefinir el mecanismo de encaje
para vincularlo negativamente a la rentabilidad del fondo – ya que la practica sugiere su escasa
relevancia actual; iii) flexibilizar los topes, instrumentos y destinos de inversión de los fondos
de las AFP´s, para mejorar la rentabilidad.
Un aspecto esencial para expandir la afiliación es la autorización a las AFP’s a generar y vender
planes de pension variados. Esto permitiría adecuarse a las diferentes características y
condiciones de los afiliados y flexibilizar los instrumentos para afiliar diferentes tipos de
trabajadores. En particular, esto implica diseñar esquemas atractivos para hacer rentable y
captar la demanda de trabajadores independientes y asalariados de pequeñas empresas. La
conveniencia de planes diferenciados de jubilación incluye también flexibilidad en las tasas.
Las tasas fijas son ineficientes porque el monto ahorrado no se adapta a las diversas
posibilidades y preferencias de los beneficiarios.
Un segundo elemento a tomar en cuenta para cambios en el sistema es mejorar la credibilidad.
La ausencia de una reglamentación de una rentabilidad mínima del fondo, alimenta la
desconfianza de los potenciales beneficiarios. Una via importante para superar este escollo es
una campaña de información respecto a la importancia de contar con un seguro de jubilación,
accidentes e invalidez, que es una via mas segura que una decisión de ahorro voluntaria que en
la práctica bien puede no concretarse.
180
181
181