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CEIP Sagrado Corazón

Puente Mayorga

DON QUIJOTE DEL CAMPO DE GIBRALTAR.


En un lugar del Campo de Gibraltar, en San Roque, había un colegio en el que los niños
y niñas leían libros y libros del proyecto de lectura. Hubo uno que de tanto leer se
volvió loco de remate, tan loco que creía ser Don Quijote del Campo de Gibraltar.

DON QUIJOTE
( - ¡Voy a ser caballero andante! Me llamaré Don Quijote del Campo de Gibraltar e iré
por los caminos buscando aventuras )

Para ser un caballero andante como Dios manda D. Quijote necesitaba una armadura y
unas armas con las que luchar. Así que sin pensarlo dos veces, fue al trastero donde se
guardaban los disfraces para los teatros y apareció convertido en un caballero andante, o
al menos eso era lo que él pensaba.

DON QUIJOTE
( - ¡Temblad gigantes del mundo que aquí está Don Quijote del Campo de Gibraltar! )

Pero a un buen caballero no le bastaba con tener unas armas: también necesitaba un
caballo. Pasó por la clase de infantil y ni corto ni perezoso cogió el primero que
encontró

DON QUIJOTE
( - ¡ Se llamará Rocinante! )

Pero no creáis que a un buen caballero le bastaba con tener unas armas y un caballo:
también necesitaba un escudero. Así que salió al recreo y se fue en busca de su amigo
Miguel Ángel ( que para él era Sancho Panza) y le preguntó si quería ser su escudero.

DON QUIJOTE
( - Amigo Sancho, ¿ quieres ser mi escudero? )

Miguel Ángel le siguió la broma y desde ese momento adoptó el nombre de Sancho
Panza.

SANCHO PANZA
( - Me gustaría mucho pero tengo que estudiar e ir al colegio todos los días)

DON QUIJOTE
( - Por eso no has de preocuparte, amigo Sancho, porque antes de una semana
conquistaré Gibraltar y te nombraré gobernador de la Roca. Te harás famoso, saldrás en
todas las televisiones, ganarás mucho dinero y no tendrás que ir más al colegio.

Al oír aquello Sancho Panza no se lo pensó dos veces. ¡Sería rico y no tendría que ir
más a la escuela.

SANCHO PANZA
( - ¡ Cuenta conmigo!)

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A los dos días, Don Quijote y Sancho ya estaban en camino. Salieron de la barriada en
plena noche con muchas ganas de vivir aventuras ¡ y vaya si la vivieron!

Estaba amaneciendo cuando apareció a lo lejos un montón de chimeneas. Y entonces


dijo Don Quijote:

DON QUIJOTE
( - ¡ Ya tenemos aquí la primera aventura, amigo Sancho!
¿ Ves aquellos dragones tan fieros? Pues pienso luchar con ellos hasta darles muerte
para que dejen de hacer maldades.
No quemarán más la ropa de los tendederos ni mancharán los coches. )

SANCHO PANZA
( - ¿ Qué dragones? )

DON QUIJOTE
(- Aquellos que se ven allí a lo lejos. ¿No ves el fuego que echan por la boca?)

SANCHO PANZA
( - No hay dragones solo se ven árboles.)

Pero Don Quijote veía un dragón escondido entre los árboles.

DON QUIJOTE
(- ¡ Ya veo que tienes miedo!.Pero no temas que este combate es cosa mía.)

Y echó a cabalgar a toda prisa, apuntando con la lanza a los dragones de su imaginación

SANCHO PANZA ( gritando)


( - ¡ Que son chimeneas señor! )

Pero cuando llegó a la primera chimenea y le clavó la lanza, saltó una válvula y del
ruido tan grande que hacía se pegó un susto que salió rodando por el suelo.

SANCHO PANZA
( - ¡ No le decía yo que eran chimeneas señor!

DON QUIJOTE
(- Calla amigo mío, que todo esto ha sido cosa del mago Frestón. Pero juro por mi
Dulcinea que lo pagará muy caro.)

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Quiso Sancho llevarlo al Consultorio pero él dijo que le diera el bálsamo de Fierabrás
que cura todos los males del mundo.

Sancho le dijo a Don Quijote que lo mejor era volver al colegio y este le dijo que no
desesperara que muy pronto conquistaría Gibraltar y le nombraría gobernador de la
Roca.

Sancho obediente le siguió y cuando llegó a la frontera empezó de nuevo la aventura.

QUIJOTE
(-¡ Ya tenemos una nueva aventura! Porque lo que ese caballero lleva en la cabeza es el
Yelmo de Mambrino, un casco maravilloso que vuelve invencible a quien lo usa. Así
que voy a hacerme con él cueste lo que cueste.)

Pero no había ni caballero ni yelmo que lo que vio fue el casco de un “bobi” ( policía
inglés) que le pedía el pasaporte.

QUIJOTE (gritando)
(-¡ Dame ese yelmo, desdichado, porque yo lo merezco más que nadie!.)

Y comenzó a galopar contra él dispuesto a atravesarlo con su lanza.

El policía al ver a Don Quijote y Sancho pensó que estaba viendo visiones y se
desmayó. Sancho cogió el casco y se lo dio a su amo. Tan grande le quedaba que casi
no se le veían los ojos Sancho se mondaba de la risa pero no dijo nada, porque su amo
se enfadaba mucho cuando le llevaban la contraria.

Menos mal que el policía se desmayó porque estuvieron a punto de dar con sus huesos
en la cárcel, aunque en realidad Don Quijote hubiera vivido una maravillosa aventura en
el castillo de Gibraltar que no es otra cosa que la cárcel de la Roca.

Día a día siguieron viviendo aventuras en compañía de Sancho: peleó con un león en
San Roque, tuvo aventuras en posadas que eran castillos, ¿ o al revés ?, en Castellar y
Jimena, voló por los aires en Tarifa y tuvo una aventura junto al mar en Puente
Mayorga.

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Una mañana que salió Don Quijote a pasear por la playa de Puente Mayorga armado
con todas sus armas, vio venir hacia él a una dama armada de pies a cabezas que llevaba
una resplandeciente luna pintada en su escudo. Se acercó a Don Quijote y le dijo:

DAMA DE LA BLANCA LUNA

( - Caballero don Quijote del Campo de Gibraltar, yo soy la Dama de La Blanca Luna
vengo a luchar contigo y hacerte confesar que soy más hermosa que tu Dulcinea. Si
confiesas no lucharé, pero si peleas y yo te gano, quiero que dejes las armas y te vayas a
tu pueblo a descansar durante un año. Pero, si tu me vences serán tuyas mis armas y mi
caballo.)

DON QUIJOTE (sorprendido)


(-Dama de la Blanca Luna sin duda vos sois muy bella, pero yo creo que jamás habéis
visto a la ilustre Dulcinea ya que no ha habido ni puede haber belleza que se pueda
comparar con la suya; por eso acepto vuestro desafío ahora mismo.)

Los de la ciudad se lo dijeron al virrey y este acudió a la playa acompañado de muchas


damas y caballeros. El virrey preguntó la causa de la batalla y la Dama de la Blanca
Luna le respondió que era cuestión de saber quién era la más hermosa y le dijo las
mismas razones que le había dicho a Don Quijote. El virrey se apartó diciendo:

VIRREY
( - Si Don Quijote y la Dama de La Blanca Luna insisten en su propósito, que
batallen y que Dios decida.)

Agradecieron al virrey el permiso que le daban y se dispusieron a la batalla.

DON QUIJOTE ( se encomendó al cielo y a su Dulcinea)

El caballo de la Dama de la Blanca Luna cabalgó más rápido que Don Quijote, y su
caballo topó con tanta fuerza contra Rocinante que, sin que la lanza lo tocara, tiró a
Rocinante y a Don Quijote por el suelo en una peligrosa caída.

DAMA DE LA BLANCA LUNA( poniéndole la lanza sobre la cara a Don Quijote)

(- Vencido sois, caballero, confesad que yo soy más bella que vuestra dama.)

DON QUIJOTE (sorprendido)


(-Dulcinea de Puente Mayorga es la más hermosa mujer del mundo y yo el caballero
más desdichado de la tierra)

Ya se iba retirando la Dama de La Blanca Luna cuando sonó el timbre para salir al
recreo y Alfredo que se había quedado dormido leyendo los libros del proyecto de
lectura se despertó y se fue para el patio; le guiñó el ojo a Miguel Ángel y se pusieron a
jugar como todos los días, sin contar nada a nadie.

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