Tilted Arcs

(Arcos inclinados)

Por Rubén Ojeda (Da Rubenovich)

En base al trabajo escultórico del artista Richar Serra, he realizado, no una escltura, sino una
instalación, que toca varios puntos ajenos a Serra, pero que sin su ayuda y referencia, serían
imposibles o insustentables.
Una de las características más importantes del trabajo de Serra es que están hechos con
Acero, el cual sufre un proceso de oxidación estando ya instalados. La característica primordial
en las esculturas de Serra, es su tamaño monumental, casi llegando a lo colosal. Estas dos
características son las que fundamentan mi obra en fondo y forma y que me acarrearían muchos
problemas.
El primero de mis problemas fue la función que Serra quiere que sus trabajos,
generalmente, cumplan. La función primaria en el trabajo de Richard está íntimamente ligada a
las enormes proporciones de su obra: al ser ésta tan enorme, crea una interrelación entre la obra
y el espectador, que por proporción, terminan siendo un mismo objeto, ambos, trabajo y
espectador, se convierten en obra. Por la magnitud de los trabajos de Serra, el espectador puede
caminar al lado de la escultura por minutos enteros e incluso perderse en una de ellas.
Las esculturas de Richard también tratan de generar sentimientos de angustia,
claustrofobia, finitud e inseguridad, ya que al estae, una persona frente a una obra de tal
magnitud como el Band, dicha persona puede fácilmente perderse dentro de ella, o de no estar
segura de ya haberla recorrido completa. También cabe recalcar que Richard utiliza únicamente
la gravedad y el peso de las piezas de metal, para equilibrar sus esculturas. Eso implica un
riesgo para el espectador, el cual al enterarse de esto, se sentiría inseguro inmediatamente.
La tercera función de las esculturas de Serra es la oxidación, la cual ignoro lo que
represente. Ésta toma de 8 a 10 años en completarse y es una forma de que sus esculturas se
coloreen de un tono rojizo de forma permanente. Esta característica es fundamental para
sustentar el discurso de mi obra.
Tuve que romper con la regla de clase que decía que la escultura no podría rebasar el
metro cúbico de volumen, debido a que, en la obra de Richard Serra, es fundamental que sean
monumentales, y con el tamaño preestablecido en el reglamento, no se cumplirían las funciones
deseadas. Mi escultura, mejor dicho, mi instalación le he nombrado Tilted Arcs, haciendo
referencia a la controversial escultura de Serra llamada Tilted Arc, la cual consistía en un arco
de 120 pies de largo (36.6 m), 12 pies de altura (3.6 m) y 2.5 pulgadas. Mi trabajo consistía en
tres mantas pintadas a gran formato: Dos eran de 2 m de largo por 1.5 m de ancho; la última era
de 3.30 m de largo por 1.5 m de ancho. De esa manera respetaba los propósitos que Richard
trata de proyectar.
Conceptualmente, intenté representar al pie de la letra una escultura de Richard Serra,
posiblemente no cumplí con el estilo minimalista con el que trabaja Serra, pero también cabe
mencionar, que mi trabajo tiene un peso propio y un discurso a parte, y que el trabajo de Serra,
en éste caso, sirve solamente de marco teórico. Mi instalación Tilted Arcs es una crítica al arte
clásico y a la imposición de éste; a diferencia de la escultura de Richard que cumple las
funciones antes mencionadas.
Las mantas de mi instalación, tenían imágenes hechas con pintura acrílica negra, de
algunos fragmentos de la Mona Lisa. La primera tenía pintada la sonrisa, la segunda, las
manos, y la tercera y más larga, la mitad de la cara. Las tres colgaban de un balcón en el tercer
piso del Colegio Cain Murray (UDLAP), que iban directamente conectados a un árbol junto al
lago de la universidad. Este lugar me pareció ideal para montar la instalación porque, en primer
lugar, el balcón del cual colgaban las mantas, era del cuarto en el que duermo. Otra ventaja de
éste lugar es que no es un lugar excesivamente transitado, pero aun así, la gente lo cruza para
llegar a sus respectivas clases o entrenamientos, lo cual refiere a la escultura Tilted Arc de
Serra, que se encontraba en un lugar bastante transitado, pero muy espacioso. La controversia
sobre esta escultura fue causada porque a la gente que cruzaba la plaza federal de Nueva York,
le estorbaba el paso. Esa era una de las funciones que mi escultura desempeñó: la gente prefirió
darse la vuelta a pasar por en medio de la instalación, aun así hubieron algunas personas que si
la atravesaron pero buscando no pisar los anclajes de las mantas. Este fenómeno que ocurre
cuando uno se encuentra enfrente a un objeto enorme, es el mismo que ocurre cuando alguien
se encuentra frente a una obra de arte, y mucho más enfatizado si la obra de arte tiene tanto
peso socio-cultural como la misma Mona Lisa.
La oxidación del metal, es un fenómeno que cuando ocurre es especialmente difícil de
remover, a veces imposible. Escogí la imagen de la Mona Lisa para esta instalación, porque me
parece incorrecto que sea una referencia artística, es decir que me parece, incluso ridículo, que
la gente cuando se refiere al arte, lo relacionan directamente con ésta imagen. Personalmente, la
Mona Lisa sólo cumple con las características del término arte griego, como un saber hacer,
que lo pone al nivel de unos zapatos hechos por una persona que sabe hacer zapatos, pero no a
las características del término Arte hoy en día. La imagen de la Mona Lisa representa el óxido
en mi instalación, porque, aunque no fue considerado arte es su propio tiempo, ni cumpla con
las características actuales del término, la sociedad está condicionada, históricamente a
denominarle arte, y no sólo eso, sino a ser el ícono del término. Es algo que me parece
lamentablemente incorregible. La manta mas grande enfatizaba esto, pues al ser la más
alargada refería a las conocidas mantas de las dictaduras comunistas o nazis, era la imposición
o dictadura del arte clásico.

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