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Disipando pronto las dudas de Horacio, el temible fantasma ingresa vestido con
toda su armadura. El fantasma ataviado con su traje de guerra utiliza su visera y
lleva una porra en su puño. Atemorizados Horacio, Marcelo y Bernardo se dan
cuenta que el espectro en armadura se parece mucho al recientemente fallecido
Rey Hamlet. Horacio le habla al espíritu, pero el fantasma permanece en silencio.
Preocupado por el espíritu errante del Rey Hamlet, Horacio advierte a los guardias
que "'Esto pronostica alguna extraordinaria mudanza a nuestra nación”. La
presente conmoción, razona Horacio, debe ser el resultado de las recientes peleas
con el joven Fortinbrás de Noruega. En el pasado, el Rey Fortinbrás desafió al Rey
Hamlet a una batalla por territorio en disputa. Los dos monarcas acuerdan
mutuamente que la tierra del perdedor sería cedida al ganador. Hamlet mató a
Fortinbrás y, en consecuencia, obtuvo las tierras de Fortinbrás. El joven Fortinbrás
con la intención de recuperar la tierra perdida por su padre, ha reunido una
muchedumbre de combatientes para desafiar a Dinamarca. Bernardo está de
acuerdo en que el inminente ataque de Fortinbrás debe ser la causa de la actual
perturbación. Como prueba, él señala que el fantasma usa la misma armadura que
llevaba el Rey Hamlet para derrotar al viejo Fortinbrás.
Acto 1 Escena 2
Hablando a su consejo reunido, el Rey Claudio lamenta la reciente muerte del Rey
Hamlet, su hermano. Al mismo tiempo, se regocija en su rápido matrimonio con la
Reina Gertrudis, su cuñada que quedó viuda. Claudio envía a Voltiman y Cornelio a
Noruega con una carta instruyendo al Rey reprimir los avances del joven Fortinbrás
contra Dinamarca. Laertes, visitando formalmente Dinamarca por la coronación del
Rey Claudio, solicita el permiso de Claudio para regresar a Francia. Claudio cumple
con el deseo de Laertes como un favor a Polonio, su altamente apreciado asesor
quien es también padre de Laertes.
Aunque entristecido por la muerte de su padre, la mayor causa del sufrimiento del
Príncipe Hamlet es el matrimonio desleal de la Reina Gertrudis con Claudio. A un
mes de perder a su amado esposo, la Reina Gertrudis se casa precipitadamente con
Claudio, el propio hermano del ReyHamlet. Enojado por la hipocresía de Gertrudis y
su infidelidad, Hamlet desprecia a su madre, diciendo: "'fragilidad, ¡tu nombre es
mujer!'"
Acto 1 Escena 3
Laertes, con destino a París, se despide afectuosamente de su hermana Ofelia.
Ofreciéndole algunos consejos de hermano, le advierte a Ofelia mantener su
castidad frenando las románticas intenciones del Príncipe Hamlet. Debido a que
Hamlet es un príncipe, él debe casarse con alguien de alto rango. Por lo tanto, no
puede ser totalmente serio en su amor por Ofelia.
Polonio insta a su hijo a partir rápidamente, sin embargo, detiene a Laertes con una
larga lista de recomendaciones. Como aconseja el minucioso padre: "'Presta el oído
a todos y a pocos la voz…procura no dar ni pedir prestado a nadie…pero, sobre
todo, se honesto contigo mismo.. '" Después de que Laertes parte en su buque,
Polonio se hace eco de su preocupación porOfelia advirtiéndole que el Príncipe
Hamlet es joven y lujurioso. Polonio instruye a su hija tratar a Hamlet fríamente,
desconfiar de sus votos de amor, y evitar su compañía. Obedientemente, la casta
Ofelia acepta.
Acto 1 Escena 4
En el cortante aire de la medianoche, Hamlet, Horacio y Marcelo reanudan su
observación del fantasma. Una bulliciosa fiesta organizada por el borracho Rey
Claudio se escucha a lo lejos.
Él debe ahora pagar por sus pecados terrenales no purgados ardiendo en las
sulfurosas fosas del Infierno.
Acto 2 Escena 1
Curioso acerca de la conducta de su hijo y su carácter, Polonio encarga a su criado,
Reynaldo, espiar a Laertes. En París, Reynaldo indirectamente preguntará a los
franceses en relación con el comportamiento de Laertes. Ofelia acude presurosa al
lado de su padre, asustado por el lujurioso y enloquecido comportamiento de
Hamlet.
Acto 2 Escena 2
El Rey Claudio ha enviado apresuradamente por Ricardo y Guillermo y les da la
bienvenida en su corte. Claudio espera que Ricardo y Guillermo, amigos del Príncipe
Hamlet, descubran la causa de la reciente locura de Hamlet. Polonio entra con dos
informes: el primero se refiere a Noruega, el segundo es sobre Hamlet. El
embajador Voltiman informa a Claudio que el Rey de Noruega ha acordado reprimir
las acciones de su sobrino en contra de Dinamarca. Tomando ventaja de la
enfermedad de su tío, el exaltado joven Fortinbrás encubrió sus acciones contra
Dinamarca como legítimos movimientos contra Polonia. Al conocer las verdaderas
intenciones de Fortinbrás, el Rey de Noruega Fortinbrás obligó a Fortinbrás a poner
fin a todas las operaciones en contra de Claudio y Dinamarca. Voltiman informa
finalmente que Noruega solicita se le otorgue un paso pacífico a través de
Dinamarca con el fin de llegar a Polonia. El Rey Claudio está muy satisfecho.
Polonio continúa con el segundo tema, la locura del Príncipe Hamlet. El asesor de la
corte se extiende en un dilatado prólogo en su informe - irónicamente sobre la
importancia de la brevedad - y la Reina Gertrudis le ruega que discutan "'Menos
arte y más asunto'". Polonio informa que el rechazo de Ofelia ante el deseo de
Hamlet ha causado la locura del Príncipe. El presenta una poética carta de amor de
Hamlet a Ofelia como evidencia. Para probar más su teoría, Polonio sugiere que él y
el Rey observen secretamente un encuentro arreglado entre Hamlet y Ofelia. El Rey
Claudio y la Reina Gertrudis manifiestan su acuerdo con ello.
Acto 3 Escena 1
Ricardo y Guillermo admiten ante el Rey Claudio que no han podido detectar la
causa de la locura de Hamlet. Ellos extienden la invitación hecha por Hamlet a
Claudio y Gertrudis para la actuación de esa noche. La pareja real se siente aliviada
de ver a Hamlet ocupado con un feliz pasatiempo.
Acto 3 Escena 2
Hamlet advierte a los actores que no exageren su próxima actuación. El Príncipe
elogia a Horacio por su honestidad y le pide observar atentamente al Rey Claudio
durante la obra. Si Claudio parece incomodarse durante la escena del crimen,
Hamlet y Horacio ambos sabrán que el Espíritu era veraz y que Claudio es culpable.
La audiencia real entra y Hamlet vuelve a su estado de locura.
La obra, titulada "La Ratonera", describe el asesinato del Duque Gonzago en Viena.
Un villano llamado Luciano vierte veneno en la oreja de Gonzago y corteja a la
duquesa que se quedo viuda, Baptista. Horrorizado, el Rey Claudio interrumpe
abruptamente la representación y sale apresuradamente. Horacio y Hamlet están
convencidos de la culpabilidad de Claudio en el asesinato del Rey Hamlet.
Guillermo le cuenta a Hamlet que el Rey Claudio está muy nervioso y que la Reina
Gertrudis desea hablar con él en privado. Un músico entra con una flauta.
Continuando con su actuación de locura,Hamlet reprende a su falso amigo
Guillermo por "tocarlo" como lo haría con un instrumento.
"'Pues, mira tú, ¡en que opinión tan baja me tienes! Tú me quieres tocar, presumes
conocer mis registros, pretendes extraer lo más íntimo de mis secretos, quieres
hacer que suene desde el más grave al más agudo de mis tonos y ve aquí este
pequeño órgano, capaz de excelentes voces y de armonía, que tú no puedes hacer
sonar. ¿Y juzgas que se me tañe a mí con más facilidad que a una flauta? No; dame
el nombre del instrumento que quieras: por más que le manejes y te fatigues, jamás
conseguirás hacerle producir el menor sonido'".
Acto 3 Escena 3
Afirmando que la locura de Hamlet es un peligro para el estado y su reinado, el Rey
Claudio ordena a Ricardo y Guillermo acompañar a Hamlet en el viaje a Inglaterra.
Polonio informa que va a espiar la visita de Hamlet a la Reina Gertrudis ocultándose
detrás de un tapiz (telón) en su dormitorio.
Atormentado por su conciencia culpable, el Rey Claudio intenta orar por el perdón.
Sin embargo, debido a que aún posee los frutos de su crimen - a saber, su corona,
su reina, y su ambición - él sabe que su arrepentimiento es insuficiente. Claudio se
lamenta: "'Mis palabras vuelan a lo alto, mis pensamientos aquí se quedan. / Las
palabras sin pensamientos nunca van al cielo'".
Mientras el culpable Rey ora de rodillas, Hamlet en silencio saca su espada para
vengarse. Deteniéndose, Hamlet se da cuenta de que matar a Claudio en medio de
la confesión enviaría al desahogado Rey directamente al cielo. La venganza vendrá
más tarde paraHamlet, cuando el Rey Claudio esté ocupado en algún acto vil o
libidinoso, y por lo tanto sea totalmente responsable de sus pecados.
Acto 3 Escena 4
Hamlet visita la recámara de la Reina Gertrudis y la asusta con sus fuertes
recriminaciones. Espiando la discusión detrás de un tapiz (telón), el espía Polonio se
preocupa por la seguridad de Gertrudis y pide ayuda. Confundiendo al espía oculto
con el Rey Claudio, Hamlet embiste con una estocada de su espada a través del
telón y mata a Polonio. Hamlet sigue reprendiendo a su vergonzosa madre por
casarse con el vil hermano de su amado esposo. El fantasma de pronto se le
aparece aHamlet, vestido con pijama. El fantasma del rey amonesta a Hamlet por
relegar su venganza.
Ellos interrogan a Hamlet sobre el paradero del cadáver, pero Hamlet responde solo
con enigmas e insultos. El Príncipe compara al traidor Ricardo con una esponja.
Abrumado temporalmente con el favor del Rey, Ricardo pronto será exprimido,
utilizado, y abandonado completamente seco.
Acto 4 Escena 3
Debido a que Hamlet es un príncipe popular, Claudio no puede castigarlo muy
severamente en Dinamarca por el asesinato de Polonio. Enviando a Hamlet a
Inglaterra parece ser la única solución para la situación desesperada de Claudio.
Embromando al Rey con adivinanzas, Hamlet vagamente le revela la ubicación del
cadáver oculto de Polonio.
Acto 4 Escena 4
Según su acuerdo previo, el ejército del joven Fortinbrás atraviesa pacíficamente
Dinamarca en su camino a luchar contra Polonia. Hamlet se critica a sí mismo por
su inacción.
En comparación con Fortinbrás, que prontamente toma medidas contra Polonia por
una trivial porción de tierra, Hamlet se siente como un cobarde holgazán. Hamlet
promete no pensar en nada más que vengar el asesinato de su padre, diciendo:
"'Oh a partir de este momento / ¡Sean de sangre mis pensamientos o no merezcan
sino baldón!'"
Acto 4 Escena 5
Polonio ha sido rápidamente enterrado sin la debida ceremonia. Su repentina
muerte a manos de la espada de Hamlet ha quebrado la cordura de Ofelia. La
trastornada doncella entra, cantando como una loca y tocando un laúd.
Laertes vuelve hecho una furia de París. Él ataca el castillo con una multitud de
seguidores, intentando derrocar al Rey y vengar el asesinato de su padre. En su
locura, Ofelia distribuye flores simbólicas al Rey, la Reina, y a su hermano. El Rey
Claudio insta a Laertes a calmarse. Una vez que conozca la verdad sobre el
asesinato de Polonio, Laertes verá que el Rey Claudio es inocente.
Acto 4 Escena 6
Horacio recibe una carta de Hamlet. El Príncipe le escribe diciéndole que ha sido
tomado prisionero a bordo de un barco pirata. Ricardo y Guillermo permanecen en
el buque original de Hamlet, con destino a Inglaterra. Horacio recibe órdenes de
entregar varias cartas adjuntas al Rey Claudio y dirigirse inmediatamente al lado de
Hamlet.
Acto 4 Escena 7
Laertes se entera que Hamlet, no el Rey Claudio, es el responsable de la muerte de
Polonio. El vengativo hijo exige saber por qué Hamlet no fue ejecutado por haber
cometido asesinato. Claudio sostiene que no podía imponerle la pena de muerte
porque la Reina y el país quieren mucho al joven Príncipe Hamlet. Al recibir las
cartas de Hamlet, Claudio y Laertes saben que el Príncipe regresará a Elsingor al día
siguiente. El Rey Claudio trama un plan que lo librará de su irritante sobrino. Al
mismo tiempo, la situación también le permitirá a Laertes una oportunidad para
vengar el asesinato de Polonio. Sabiendo que Laertes es un famoso espadachín,
Claudio organizará una competencia de esgrima entre Hamlet y Laertes. El florete
de Hamlet carecerá de filo, para proteger a Laertes, mientras que la espada de
Laertes estará filosa y envenenada, para matar a Hamlet. Debido a que la muerte
del Príncipe parecerá accidental, la Reina Gertrudis y Dinamarca nunca sospecharán
de asesinato. Claudio incluso propone un plan alternativo. Si el duelo arreglado
parece probable de fracasar, Claudio instará a Hamlet a beber de un cáliz
envenenado para refrescarse.
Acto 5 Escena 1
Dos extraños payasos campesinos cavan la tumba de Ofelia y especulan si su
muerte fue un ahogamiento accidental o un suicidio. El médico forense ha
dictaminado la muerte de la doncella como un accidente y por lo tanto se le permite
una cristiana sepultura. Mientras los sepultureros charlan, Hamlet y Horacio
deambulan en el cementerio. Hamlet recoge un cráneo desenterrado y se pregunta
qué tipo de carácter tendría alguna vez. Hamlet pregunta a los sepultureros quien
va a ser enterrado, pero recibe enigmas en lugar de respuestas. El primer payaso
excava la calavera de Yorick, el antiguo bufón del Rey.
Recordándolo con cariño, Hamlet mira el cráneo y señala: "'Ay, pobre Yorick, Yo le
conocía, Horacio - tenía un humor incansable, una agudeza asombrosa...'"
Acto 5 Escena 2
Hamlet le cuenta a Horacio de su traicionero viaje por mar a Inglaterra.
Despertándose en la noche, Hamlet deambulando por las oficinas del capitán
encuentra una carta escrita por el Rey Claudio. Hamlet abrió la carta y descubrió
que era una orden en contra de su propia vida. El Rey Claudio había ordenado al
Rey de Inglaterra hacer que decapiten a Hamlet inmediatamente después de leer la
orden. Actuando rápidamente, Hamlet falsifica una nueva carta de Claudio, que
encargaba a Inglaterra ejecutar a los portadores de la carta, es decir a Ricardo y
Guillermo. Sellando la falsa misiva con el sello oficial de su padre, Hamlet volvió a
colocar su manuscrito en las habitaciones del capitán y escapó.
Hamlet lamenta su mal trato hacia Laertes y reconoce que la venganza de Laertes
contra él es similar a su propia venganza contra Claudio. El molesto cortesano
Enrique anuncia que Claudio ha organizado una competencia de esgrima entre el
Príncipe y el experto Laertes. Envidioso de la habilidad de Laertes con el florete y
deseoso de probarse a sí mismo, Hamlet acuerda competir. Horacio se siente
incómodo, pero el testarudo Príncipe ignora sus dudas.