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Prólogo: ......................................................................................................................................... 2

Introducción:.................................................................................................................................. 3

Desarrollo: ..................................................................................................................................... 4
a) El caso Ana Maria Acevedo: ................................................................................................ 4
b) El fallo ͞C. P. d. P. , A. K. . s/ Autorización.͟ ......................................................................... 5
c) Análisis del texto del artículo 86 inc. 1 del Código Penal Argentino. .................................... 7
d) El caso Chileno:................................................................................................................... 8

Síntesis y propuestas para el caso argentino acerca del aborto terapéutico: ................................. 10

Citas͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙͙..11
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Ante todo debemos preguntarnos, ¿Qué es el aborto?, una de las definiciones
más clásicas nos ilustra diciendo que consiste en la interrupción del embarazo
antes de que el producto de la concepción (embrión o feto) sea viable y pueda
sobrevivir en el ambiente externo por lo cual se produce su muerte.
Ahora bien cabe preguntarnos también si el concepto embarazo goza de un
concepto único o por el contrario hay divergencias acerca de su significado.
Según la mayoría de los científicos, un embarazo se produce a raíz de la
fecundación, que es, la unión del óvulo y el espermatozoide formando el cigoto.
Para la Organización Mundial de la Salud (OMS)c c el embarazo comienza con la
implantación del cigoto en la pared del útero.
Podemos decir que a pesar de que todavía no entramos del todo en tema ya nos
encontramos con una primera confrontación de ideas, por un lado la definición por
así decir ³científica´, de la cual se puede olfatear un sentido más conservador y
por el otro lado la definición de la O.M.S cuya definición busca poder implementar
ciertos métodos de anticoncepción como la píldora del ³día después´, que
siguiendo a la primera definición entrarían como métodos abortivos.
El presente trabajo pretende desentrañar la realidad, aquello que se palpa día a
día en Argentina, para lo cual se tendrá en especial consideración la legislación
actual, como así también la decisión de nuestros tribunales y que sucede con
ellas, como así también las posibilidades de mujeres de diversas clases y en el
resto de Latinoamérica.
Luego de esbozar dos historias ficticias que tranquilamente podrían ser verídicas,
que oficiaran de disparador para ver qué es lo que sucede con el aborto
terapéutico en nuestro territorio, para lo cual nos serviremos de dos casos uno
ocurrido en la provincia de Santa Fe y el otro una sentencia del supremo tribunal
de la Provincia de Buenos Aires
Luego realizaremos un breve estudio del artículo 86 de nuestro código penal en su
inciso uno, brindando nuevas luces acerca de su redacción y de su trasfondo en
donde encontraremos prejuicios y concepciones, si se quiere arcaicas.
Más adelante haremos un acercamiento a nuestro país hermano, Chile y
descubriremos como es su legislación y como puede o no acceder la mujer al
aborto terapéutico.
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En la sección final trataremos de encontrar una propuesta de solución para el


problema del aborto centrado más que nada en su faceta terapéutica. Enunciando
propuestas de políticas públicas y de legislación

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En la actualidad, como ya hace mucho tiempo, Argentina parece dividida en varios
países paralelos, no es lo mismo la educación de una niña de orígenes precarios y
de bajos recursos, que la educación de una niña de clase ³bien´. Ahora,
supongamos que la primera niña crece y en su adolescencia sufre un embarazo y
también imaginemos que la segundamente nombrada corre con la misma ³suerte´.
Pareciera ser que en un país donde todos somos iguales ante la ley, y donde se
está bajo la luz de una constitución, la cual ha receptado diversos tratados
internacionales a los cuales se le dio categoría supra legal, tanto una como otra
adolescente tendrían la misma posibilidad de acceder a una interrupción de su
embarazo.
Pues bien nada más distante de la realidad que aquello, es lo que verdaderamente
pasa, ahora bien supongamos que la muchacha de escasos recursos, por así
decirlo, decida o le hagan decidir(a través de violencia física o verbal u otras
circunstancias) realizar un aborto, ahora bien sin medios y sin acceso a cierta
información, esta señorita no le quedara más remedio que ir a alguna parte del
gran buenos aires en una casa perdida y someterse a las manos de una
enfermera, que en un cuarto de asepsia más que discutible le practicara lo
decidido, o algún médico de dudosa reputación a cambio de ciertos favores
sexuales le hará este método en un cuarto de hotel, para sorpresa de la empleada
de maestranza y eso en el mejor de los casos, cuando no, se verá en manos de
amigas ³experimentadas´ en el tema que le harán tomar alguna infusión o alguna
abuela campesina que le introduzca ciertas pasturas por la vagina, y así miles de
³medios´ mas.
Ahora pasemos al caso de la adolescente de clase alta, ella seguramente
recabará el dinero necesario para acceder a algún consultorio privado de barrio
norte o en algún quirófano adquirido por amigos de la familia, donde todo quedara
silenciadoi. Donde pasara lo que debe pasar y a no ser por las lesiones
psicológicas (si es que las sufre), el tema quedara en el olvido y en unos días
podrá retomar su vida normal.
Además del problema económico y sus consecuencias, como ser; mala atención,
mayores posibilidades de infección y muerte, etc. También existe el problema de
la edad no es lo mismo la posibilidad de acceso en una mujer joven que una mujer
adulta, esta ultima cuenta con mayor independencia que la mujer joven, tanto
como para recolectar el dinero necesario como así también el no tener que
esconderse o al menos que el hecho de ocultarse, -sea tanto de sus padres como
de quien ella crea que podría emitir un juicio de valor que le ocasionaría pudor o
dolor-, por su condición de mayor, le será más fácil.
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Por lo hasta aquí esbozado, se me permitirá afirmar que no estoy hablando de un


país donde todas las mujeres sean iguales, que existen marcadas diferencias, y
que ellas pueden trazar la línea entre la vida y la muerte.
Con lo hasta aquí expuesto, cabe hacerse una serie de preguntas: ¿Por qué la
mujer tiene que someterse a todas estas peripecias para lograr abortar aun
cuando su vida o su salud se encuentran en riesgo?, ¿Cómo es la legislación en
nuestro país?, por otra parte también debemos argüir ¿Cómo actúan nuestros
tribunales, cuando la mujer se encuentra en riesgo de vida?

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En Argentina la regla es que el aborto es un delito, y las excepciones las


encontramos en nuestro código penal en su artículo 86 que reza:
³«El aborto practicado por un médico diplomado con el consentimiento de la
mujer encinta, no es punible:
1) si se ha hecho con el fin de evitar un peligro para la vida o la salud de la madre
y si este peligro no puede ser evitado por otros medios;
2) si el embarazo proviene de una violación o de un atentado al pudor cometido
sobre una mujer idiota o demente. En este caso, el consentimiento de su
representante legal deberá ser requerido para el aborto.´
Según su lo anteriormente leído, para el código, no sería punible el aborto en
principio, en dos casos, a saber: cuando la vida de la mujer o su salud corran
riesgo y cuando ese feto sea producto de una violación a una mujer idiota o
demente.
Ahora bien abundan los ejemplos, donde o por dilaciones mal intencionadas o por
negligencia de diferentes órganos del estado cientos de mujeres mueren o sufren
daños irreparables a causa de no haber tenido el permiso tan preciado al aborto,
Uno de los casos históricos más recordados es el de Ana Maria Acevedo.

A sus veinte años, Ana María Acevedo, nacida de la provincia de Santa Fe y


madre de tres hijos perdió la vida el jueves 17 de mayo del 2007, tenía cáncer
en el maxilar y estaba embarazada.

en el mes de Mayo del 2006,Ana María recurre al hospital de su localidad


acusando un fuerte malestar de muelas, luego de cinco meses de atención
odontológica, el 23 de octubre del mismo año es derivada al Hospital Cullen, de
la ciudad de Santa Fe, donde le descubren una rara enfermedad llamada:
"Rabdomiosarcoma alveolar" luego de dicho diagnostico se le extrae el tumor
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de las partes blandas de su cuello, omitiendo explicarle que en su estado,


debía tomar precauciones para no quedar embarazada.

El 23 de noviembre de 2006, es derivada al Servicio de Oncología del Hospital


Iturraspe pero ante la sospecha de embarazo es demorado el inicio del
tratamiento. El 7 de diciembre del 2006 se confirma el estado de gestación de
cuatro a cinco semanas por lo que es derivada al Servicio de Ginecología del
mismo dispensario. El 14 de febrero de 2007 Ana retorna a Santa Fe y se
interna en Oncología.

El 27 de febrero el Comité de Bioética del Iturraspe analiza el caso, el ³acta de


la nombrada reunión deja constancia que ³anónimos´, ya que los datos de los
participantes estaban ausentes habían decidido:

³«dejar en suspenso el tratamiento, ya que el indicado para la patología, está


contraindicado si se está cursando un embarazo. La enfermedad aún puede
ser tratada con quimioterapia y radioterapia para mejorar la calidad de vida,
pero se descarta por el embarazo´. Continua el Comité: ³¿en algún momento
se pensó en un aborto terapéutico?´. Respuesta: ³por convicciones, cuestiones
religiosas, culturales, en este hospital y en Santa Fe, no´ii

Luego de esta decisión los padres de Ana recurren a la fiscalía de turno donde
tampoco encuentran respuesta, en fin Ana muere el Jueves 17 de Mayo de
2007, víctima de un estado que nunca le concedió derechos; ni a una
educación, ni mucho menos a una educación sexual, a un trabajo, a la salud y
a la planificación familiar, en definitiva que la condeno por el hecho de ser
mujer y además de ser pobre.

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En este falloc La Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires,


autorizó la interrupción de un embarazo de una mujer con una enfermedad
cardiovascular, hipertensa, fumadora, obesa, madre de 2 hijos y que había
sufrido la pérdida de dos embarazos.

A pesar de que los médicos manifestaron que era conveniente interrumpir el


embarazo, la obligaron a obtener autorización judicial, a raíz de dicha exigencia
ella comenzó las acciones pertinentes obteniendo dictamen favorables tanto en
primera como en segunda instancia, lo cual se encontraba justificado ya que
encuadraba en el inciso 1 del art 86 del Código Penal.

Hasta que el Asesor de Incapaces, que representaba al feto, solicito a la


Suprema Corte que declare inaplicable la ley, ya que consideraba que los
derechos de la persona por nacer se habían encontrado violados.
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El fallo a pesar de representar un avance hacia una interpretación amplia de


nuestro articulo 86, dejo entrever sesgos de posturas retrogradas y claramente
regresivos de la defensa de los derechos de la mujer.

Veamos un fragmento del voto del juez Pettigiani:

³(«ninguna vida es superior a otraýc


El acto del que para salvar su vida causa la muerte de otro no es un acto
justificado ni este caso de estado de necesidad puede considerarse como una
causa de justificación, pues el derecho del sacrificado es tan legítimo como el del
sacrificador, el sacrificado es por completo inocente, nada hizo por su parte para
que surgiera la situación de peligro que amenazaba al que salvó su persona.
El acto realizado no es justo y sin embargo no es punible«)´iii

En este extracto podemos ver que el juez Pettigiani, contiene en su discurso un


fuerte cariz religioso y moral.

Lo tristemente interesante por una parte es que el catolicismo no es la religión


de Estado, nuestro Estado es laico. Llevar adelante un veredicto primando la
ley natural y transformando el ³pecado´ en delito y hacer uso de la fuerza
pública para su persecución, es decididamente inconstitucional,
lamentablemente en la actualidad quedan reticencias de estas posturas y son
más de lo que uno podría desear.

Considera al feto como una persona actual con esencia humana que aunque
no funcione como persona, siguiendo a Stephen Schwarz, debe ser respetado
como tal.

Ahora bien Pettigiani va más allá que Schwarz y otros conservadores, ya que
ellos están dispuestos a aceptar la interrupción de un embarazo en casos en
los que existan riesgos de vida para la mujer.

Lo que hace este ministro de la corte es, en palabras de Susan Sherwiniv, exigir
a grupos oprimidos sacrificarse, agravando así su situación de subordinación.

Que hoy por hoy existan jueces que defiendan esta línea de pensamiento hace
que las mujeres, a pesar de que el artículo 86 del código penal en su inciso
primero lo permita, no puedan tener acceso a una adecuada interrupción de su
embarazo cuando peligre su salud y su vida, tal situación no solo significa un
menoscabo a sus derechos, sino también una potencializacion de los riesgos
sufridos.

En este fallo también encontramos votos, como el del doctor Piombo, que
autoriza el aborto en pos de la salud de la mujer:
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(«³El bien que se debe sacrificar, aun con la protección que nuestro
Derecho da a las personas por nacer, no tiene la misma jerarquía, toda vez que
una madre de familia ha anudado relaciones de educación, cuidado y protección
en relación a los hijos que anteriormente ha traído al mundo, que, en el caso de
perder la vida, mal podrán ser cubiertas por el Estado o cualquier institución de
índole civil o religiosa«)´v

A pesar de que el voto del doctor Piombo, haya sido favorable a la protección de
los derechos de las mujeres, este extracto, leído en un tono crítico, su estudio,
deja entrever una postura en la cual se estereotipa a la mujer como la madre
protectora y fundadora de lazos fuertes y cuidadora de sus hijos, como que si lo
mas importante no sea que la mujer corra riesgo de muerte, sino que a raíz de esa
supuesta muerte ninguna institución podrá suplir ese rol instituido.

Es decir parecería ser que la salud de la mujer es menos importante, que el vacio
que dejaría en sus ³funciones´ atribuidas por una sociedad con fuertes rasgos
patriarcales.

Luego de haber vivido la desgracia de Ana, y de leer algunos extractos del fallo
citado, una duda sale a relucir, ¿Por qué se dan estas demoras para que una
mujer tenga acceso al aborto, cuando su vida corre peligro?

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cc c
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Quizás parte de la respuesta al interrogante con el cual cerramos el anterior


acápite aparezca a partir de una lectura detenida del articulado, vamos a
transcribir solo el párrafo concerniente a los casos arriba enunciados:
³«El aborto practicado por un médico diplomado con el consentimiento de la
mujer encinta, no es punible:
1) si se ha hecho con el fin de evitar un peligro para la vida o la salud de la ~ 
y si este peligro no puede ser evitado por otros medios.

Si prestamos atención, en un primer momento, cuando se habla de consentimiento


se alude a la mujer encinta, pero en el inciso uno se habla de salud de la madre,
este término expresa una relación y no algo del dominio intimo de la persona, este
hecho expresa un fuerte prejuicio, ya que barre con todos sus atributos quedando
reducido así su ³rol´, cabe recordar el voto del doctor Piombo, a sobrevalorar su
capacidad de ser madres por sobre todo.

Entonces, no solo analizando el voto del doctor Piombo, sino también examinando
el mismo articulado podemos concluir que: para nuestra ley, lejos de proteger a la
mujer como sujeto pleno de derecho libre de todo preconcepto sexista, solo
parece importar su condición de madre reduciéndola a un mero receptáculo de
embriones.
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Pasemos ahora al concepto de salud para la Organización Mundial de la Salud,


debe ser interpretado como: "bienestar físico, psíquico y social de una persona" y
no sólo ausencia de enfermedad. Nuestra constitución nacional en su artículo 75
inc. 22 protege el acceso a la salud integral, que es la anteriormente definida por
la O.M.S.

Ahora bien este concepto, el de salud integral, no es tenido en cuenta casi nunca,
por otra parte el estado de salud de la mujer en cuestión lo tiene que dictar un
tercero, en este caso un medico diplomado, es permitido preguntarse, ¿Qué
incidencia pueden llegar a tener los juicios de valor de este médico, cuando un
juez que se supone custodio de la constitución en sus fallos se deja llevar más por
sus convicciones que por la propia ley?
Una solución a esta tercerización tiene que ser que la palabra de la mujer se
imponga y sea tomada con alta seriedad. Pues el médico puede ser un doctor en
medicina, pero no tiene la capacidad de penetrar en el sentir de la mujer encinta,
no puede emitir por tanto un diagnostico sobre su ³bienestar´

El problema más grave quizás es que como decíamos más arriba el concepto de
salud integral rara vez es tenido en cuenta, ya que se prefiere examinar casi
exclusivamente el riesgo de muerte, y de esta forma presentarlo como un conflicto
entre dos seres vivientes, que aunque se tienda a privilegiar la vida de la mujer
encinta, no deja de generar dificultades y subjetividades. Que quizás se evitarían,
siendo más amplios y tomando en cuenta primordialmente a la salud en términos
de la O.M.S y no efectuando una cuasi batalla entre la vida de uno y otro.

Sigamos al excelentísimo constitucionalista Germán Bidart Campos:

"O lo que se pide es autorización para cumplir una conducta especialmente


despenalizada, y entonces no hace falta tal autorización, porque la conducta está
exenta de sanción penal; o lo que se pide es autorización para cumplir una
conducta que, prima facie, coincide con un tipo penal, y entonces la autorización
no puede concederse, porque un juez no puede dar una venia para delinquir.
Cualquiera de ambos extremos hace improcedente la autorización impetrada; el
primero por inútil; el segundo, por imposibilidad jurídica"vi

De lo precedentemente expuesto, estamos en posición de decir que el médico que


obligue a la mujer que va en busca de un aborto terapéutico a recabar una orden
judicial va a estar violando el sistema republicano de división de poderes, ya que
se estaría tomando la potestad tanto de cambiar la ley como así también y más
grave aun agregando condiciones en detrimento de la mujer, menoscabando sus
derechos y coartando el acceso a los mismos.

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En palabras del diputado chileno Francisco Chauan Chauan del partido


Renovación Nacional: ³este país se encuentra bajo una concepción humanista
cristiana que reconoce desde la concepción hasta la muerte natural, a un ser
pleno de derechos y sujeto de derecho, que por ende no deja lugar a una
regulación del aborto, solo su prohibición.´vii

En Chile el aborto terapéutico fue permitido por el Código Sanitario entre 1931 a
1989, en este período toda mujer cuya vida estuviera en peligro podía solicitar un
aborto si contaba con la aprobación de dos médicos. En 1989, en las postrimerías
de la dictadura militar, se eliminó la excepción del aborto terapéutico, penalizando
esta práctica y poniendo en riesgo a las mujeres.viii

Hoy por hoy los artículos 342 A y 245 del Código Penal Chileno penan el aborto,
bajo el titulo: ³Crímenes y simples delitos contra el orden de las familias y contra la
moralidad pública I´

Art. 342_

El que maliciosamente causare un aborto será castigado:


1 Con la pena de presidio mayor en su grado mínimo, si ejerciere violencia en la
persona de la mujer embarazada.
2 Con la de presidio menor en su grado máximo, si, aunque no la ejerza, obrare
sin consentimiento de la mujer.
3 Con la de presidio menor en su grado medio, si la mujer consintiere.

A pesar de esta prohibición, año tras año ocurren de 150.000 a 160.000 abortos,
el 35% de los embarazos en Chile terminan en aborto.

Como en nuestro país, las mujeres pobres son las más damnificadas por estas
prohibiciones, teniendo que acceder en condiciones adversas tanto antes, durante,
como después del aborto pues como manifiesta el diputado Fulvio Rossi Ciocca:
³«uno de cada tres embarazos en Chile termina en aborto, pero en abortos
clandestinos, hecho en las peores condiciones, y lo peor que son las mujeres más
pobres, que llegan finalmente a complicaciones asépticas y que máxima reciben
doble castigo, aparte de las complicaciones, además son sancionadas por la
justicia. Además me llama la atención que mucha gente que se opone a que
hablemos de aborto por razones medicas, también se opuso a la educación
sexual, a difundir el uso de preservativo para prevenir el SIDA, se opuso al uso de
la píldora del día después«´ix

Uno de los casos más sonados ya hace un tiempo fue el de Gladys Pavez, quien
pidió formalmente hace ya varios años someterse a un aborto terapéutico a
sabiendas que su feto no poseía riñones, pulmones ni vejiga y que con aquellas
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malformaciones no podría sobrevivir después del parto o podría adelantar el


alumbramiento.

En palabras de ella:

"Tengo mucho miedo, duermo apenas, no faltan las pesadillas y hasta en mi


trabajo en la casa ando como más lenta y me siento deprimida. No sé en qué
terminará esto, cuál será el final, seré fuerte en los dos meses de embarazo que
me faltan, pero temo morir antes que nazca mi hijo".x

Esto es solo una muestra de hasta dónde puede llegar un país cuya legislación es
totalmente incompatible con los tiempos actuales, por demás arbitraria y que por
otra parte ,comparte solo con tres países más, a saber: Nicaragua, Salvador e Isla
Malva

Hoy por hoy el avance más significativo de las mujeres chilenas es que se permitió
la entrega de la pastilla del día después, en cuanto a proyectos para modificar la
legislación acerca del aborto, aun hoy ³siglo XXI´ no se avista solución favorable
alguna.

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A raíz de lo estudiado e investigado a lo largo del presente trabajo, estamos en
condiciones de arribar a las siguientes conclusiones:

1- Mientras se siga primando el juicio de valor ante la letra de la ley, serán más los
abortos permitidos que terminaran realizándose en la clandestinidad.

2- Lo anterior configura una seria violación y atropellamiento a los derechos


republicanos de la mujer.

3- El menoscabo del concepto de salud integral, es inconstitucional, y por ende


violatorio de los derechos de las mujeres.

La mujer deberá tomar aun un rol más activo y de contralor sobre el sistema
educativo, político, de salud y legal primordialmente. Para lograr hacer valer sus
derechos a la vida, salud e igualdad.

Es primordial que las asociaciones, ONG´s y fundaciones de cariz feministas


participen de las decisiones legislativas conformando un gran grupo de presión y
alentando a propios y ajenos a efectuar una política activa en pos de un aborto
legal, gratuito y despojado de penurias de índole moral, ya sean estas
prejuzgamientos o discriminaciones.
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Para lograrlo, una de las claves está en la ley de cupos, abogar por que cada vez
se nivele mas el porcentual, y que las mujeres obtengan cada vez mayores
puestos de decisión, cuidando que aquellas no solo tengan el cuerpo de mujer,
sino que por sobre todas las cosas este fuertemente comprometida con la causa
feminista, en este caso la legalización del aborto para no morir.

También es de suma importancia las presiones internacionales, como por ejemplo


lo sucedido el 19 de abril del 2010, día en que El Comité de Derechos Humanos
de las Naciones Unidas exhortó a la Argentina a "modificar su legislación de forma
que la misma ayude efectivamente a las mujeres a evitar embarazos no
deseados".xi

El comité de la ONU criticó "la inconsistente interpretación por parte de los


tribunales de las causales de no punibilidad contenidas en dicho artículo". xii

La Argentina "debe igualmente adoptar medidas para la capacitación de jueces y


personal de salud sobre el alcance del artículo 86 del Código Penal", recomendó
el documento.xiii

En suma, tanto mujeres y hombres, debemos tomar conciencia, que aquí no se


trata de preponderar una u otra vida, es algo más simple, pero a la vez muy difícil
de hacer aplicar, es en definitiva respetar y sobre todo hacer respetar los derechos
constitucionales de las mujeres, velando por su autonomía, salud y vida.



i
Para mas testimonios encontramos la página web: http://www.rimaweb.com.ar/aborto/yo_aborte.html.
ii
La crónica completa de la historia de dolor y angustia de esta mujer está disponible en:
http://www.aluviondigital.com/derechoshumanosnro10.html

iii
Extracto del fallo C. P. d. P. , A. K. . s/ Autorización. Fallo completo disponible en
www.articulacionfeminista.org/
iv
Susan Sherwin, No longer Patient, Filadelpia, Temple University Press, 1uu2, cap 5.

v
Extracto del fallo C. P. d. P. , A. K. . s/ Autorización. Fallo completo disponible en
www.articulacionfeminista.org/
vi
Germán Bidart Campos, "Autorización Judicial Solicitada para Abortar", El Derecho 114-184.
vii
Para escuchar el audio completo del fragmento de esta y otras declaraciones: http://www.bcn.cl/video-
testimonio/aborto-teraupetico-chile-ley
viii
Texto completo: http://adhb.wordpress.com/200u/03/17/la-realidad-en-chile-del-aborto-terapeutico/
ix
Para escuchar el audio completo del fragmento de esta y otras declaraciones: http://www.bcn.cl/video-
testimonio/aborto-teraupetico-chile-ley
c 12c

x
http://www.lacuarta.cl/diario/2002/04/1u/1u.08.4a.CRO.MAMI.html
xi
Nota completa en: http://www.unosantafe.com.ar/contenidos/2010/04/1u/La-ONU-exhorta-a-Argentina-
para-que-sancione-una-ley-que-regule-el-aborto-0024.html
xii
Ibíd.
xiii
Ibíd.

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