II ENCUENTRO MÉXICO-CHILE

Por Juan Fernando Perdomo*

POLÍTICA ANALÍTICA
Nada llena tanto de alegría como saber que, lo que en un momento fue solo
una idea, ahora es una realidad. En estos días, el 12 y 13 de Octubre, la
UNIVERSIDAD DE XALAPA será la anfitriona del II ENCUENTRO
EMPRESARIAL y ACADÉMICO MÉXICO-CHILE, en Xalapa.

En el 2004 asistí en santiago de Chile a una reunión interparlamentaria entre

los legisladores del hermano país y el congreso mexicano, momento en el cual
yo era diputado Federal. Los legisladores nos comprometimos a estrechar los
lazos económicos y de amistad entre ambos países.

Es muy común que estas reuniones tengan gran contenido, pero el seguimiento
de las acciones o, inclusive, de los programas, casi siempre se queda en
buenas intenciones. Pero hubo y hay gente comprometida. Chilenos y
Mexicanos que pensamos que las oportunidades no pueden dejarse pasar.

Y así fue que la UNIVERSIDAD CENTRAL DE CHILE, a través del Dr. Gabriel
Ramírez, le dio seguimiento a uno de las grandes líneas de acción que los
congresistas de ambos países plantearon: Más interacción, más acercamiento,
más conocimiento de unos y otros. Y organizaron el PRIMER ENCUENTRO
ACADEMICO EMPRESARIAL MEXICO CHILE en el 2005, allá en Santiago, en
donde pude estar disfrutando de la excelente anfitrionía de los amigos Chilenos
y de nuestro muy respetado Embajador Ricardo Villanueva.

Este papel de acercamiento, como ahora vemos, no sólo les toca a los
ejecutivos de ambas naciones, ni es tarea exclusiva de nuestros distinguidos y
excelentes embajadores que, me consta, están haciendo la tarea.

Reconozco con orgullo de Veracruzano que la UNIVERSIDAD DE XALAPA, a

través de la Dra. Isabel Soberano y, con el apoyo de todo su equipo de trabajo,
tuvo, y tiene la visión de que estas oportunidades tampoco son competencia
única de los empresarios. El sector académico debe ayudar a transformar
nuestra sociedad en una sociedad del conocimiento y hacerla competitiva.
Y así se firmó el acuerdo para que se realizara este SEGUNDO ENCUENTRO
MEXICO CHILE en la capital del bello estado de Veracruz, en Xalapa.

Realizar este evento no es fácil, pero al evaluar las relaciones de nuestro país
en lo institucional, comercial y de las propias sociedades nos damos cuenta
que hay un explosivo crecimiento y una buena oportunidad de compartir
experiencias en todos los ámbitos y, nuestros países van a salir beneficiados;
nuestros empresarios van a salir beneficiados y nuestros jóvenes estudiantes
encontrarán, hoy mas que nunca, que se deben de abrir al mundo para ser
exitosos. ¡Que mejor oportunidad de aprenderlo con una país hermano, que
nos quiere y habla el mismo lenguaje!
Hay que reconocerlo, tenemos otras razones para acercarnos a Chile. Y
algunas son están reflejadas en sus indicadores: Chile aparece como el 18º
país en competitividad y México está hasta el Lugar 31º. Es decir, su
capacidad de atraer y retener inversiones es mucho superior al nuestro.

No sólo eso. En el último reporte del PNUD sobre desarrollo humano, Chile
ocupa el lugar 37 y México el lugar 53. En el índice de combate a la pobreza
Chile ocupa el segundo lugar entre 102 países en desarrollo, mientras que
México tiene le sitio 13. Chile está conjugando desarrollo económico con
bienestar. Nuevamente algo que tenemos que hacer mejor en México

Su economía es más estable y su sistema político ha logrado, con una

sociedad participativa, condiciones de educación, cultura y calidad de vida,
que México necesita y desea.

Y una buena noticia: ¡Somos socios comerciales! Las puertas están abiertas al
100% para hacer todo tipo de intercambio. Tenemos la oportunidad de hacer
negocios, asociarnos, comprarles o venderles, o invertir en una alianza que ha
rendido enormes frutos y que hace falta sigamos impulsando para lograr sacar
provecho ambas naciones, a este aprecio que nos tenemos mutuo.

Como bien dijo el ex embajador chileno en México, Dn. Eduardo Aninat “los dos
países se necesitan entre sí: México requiere a chile para lograr su entrada
como miembro asociado al MERCOSUR. Y chile necesita a México para
acercarse a América del norte y Centroamérica”.

Como muchos sabemos, en 1991, México y Chile pusieron en marcha un

acuerdo bilateral de preferencias arancelarias en donde el comercio entre estas
dos naciones pasó de 174 millones de dólares en 1991 a 1,177 millones en
1998. En 2004, a trece años de la entrada en vigor del acuerdo de
complementación económica (ACE) con Chile, el intercambio bilateral se había
multiplicado por ocho.

El 17 de abril de 1998 se firmó en la hermosa ciudad de Santiago, el tratado de

libre comercio entre la república de chile y los estados unidos mexicanos, el
cual entró en vigor en agosto de 1999.

El favorable desempeño del comercio entre ambos países propició la

negociación para ampliar y profundizar la cobertura del ACE, ya que éste sólo
consideraba la liberalización del comercio de bienes y mantenía esquemas
regulatorios del comercio entre ambas naciones que no respondían a la nueva
realidad de los socios comerciales. Entre los temas que se incluyeron en el
nuevo acuerdo se encuentran: servicios, inversión, solución de controversias,
compras gubernamentales y propiedad intelectual.

En México y en Chile sabemos que el progreso económico debe ayudar a

disminuir la pobreza y la desigualdad. Los beneficios del desarrollo deben
alcanzar a todos: Los empresarios y los académicos tienen un rol fundamental
en la construcción de un mejor futuro para todos. Y el estado tiene la obligación
de no entorpecer sino de facilitar los procesos de transferencia social.
En muchos países, las transferencias fiscales ya están reduciendo las
desigualdades más extremas. Los chilenos han estrechado la brecha entre las
relaciones del ingreso del 20% más rico y del 20% más pobre de 20:1 a 10:1.
Desde la perspectiva del desarrollo humano, las transferencias fiscales con los
mayores rendimientos son las inversiones en la formación de capacidades y en
la provisión de protección durante los períodos de gran vulnerabilidad y en
Chile los están logrando.

Creo que la fortaleza de las instituciones democráticas chilenas ha tenido un

papel fundamental en los avances conseguidos. No importa el nombre del
partido político ni su ideología, si estas instituciones son respetadas y utilizadas
en bien de todos. No es un problema de etiquetas, sino de gobiernos eficaces
que ayuden a generar riqueza y faciliten de manera sana la equidad en el
ingreso. Pero, en esa tarea y en muchas más de nuestro desarrollo, cada
sector de la sociedad tiene mucho que hacer.

Por eso el valor de este encuentro. Un encuentro académico y empresarial,

pero sobre todo un encuentro de dos países hermanos que se quieren y saben
que juntos pueden crecer mucho mejor, todo ello para beneficio del desarrollo
económico y social de nuestros pueblos.

¡Enhorabuena!

*Juan Fernando Perdomo es egresado del TEC DE MONTERREY.

Servidor público, empresario y Político ( jperdomo@infosel.net.mx )