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3: 9742 + 1999 Modernidad y Crisis Ambiental: En torno al Fundamento de la Relacion Naturaleza - Ser Humano en Occidente Andrés Monares FR. * “Tal vez el hombre siempre se ha preocupado de su medioambiente porque hace tiempo dependid por completo de 6!" A.C. Fisher y F. M. Peterson (1976), Economistas Resumen El trabajo relaciona la actual crisis ambiental con la modernidad, en cuanto ésta contiene en i aspectos culturales en que se basarian las conductas que provocan los problemas ambientales. Tales aspectos culturales surgen *Antropélogo, Universidad Ausiral de Chile. Feveta Aveta 0 Cenoiae Sona especificamente del calvinismo, el cual en su interpretacién de los textos biblicos confirma la separacin que éstos establecieron entre los seres humanos y la naturaleza, al igual que su superioridad sobre ella. Pero, lo que especificamente agrega Calvino es el uso de aquella en funcién del placer, el antagonismo entre ambos y la posibilidad de considerar lo natural como propiedad privada. De tal concepcién, surgiria el enfoque moderno para relacionarse con la naturaleza, el cual se refieja en diversos aspectos como la ciancia, la filosofia yla economia Presentacién El siguiente trabajo es el primer paso para una investigacién més profunda y extensa en tomo a la relacién entre ser humano, naturaleza y modernidad. Se enmarca dentro de una reflexion sobre modernidad y América Latina, Quienes asumimos ésta critica, |o hacemos en el intento por dilucidar un camino singular y propio para el continente, desde nuestro multiple origen indigena, espafol, portugués y africano. Mezcla de la cual Domingo Sarmiento renegaba, justamente por ser contraria al espiritu de la civilizacién. Pero, los que estamos empefiados en ésta busqueda para América Latina, no deseamos esa “civilizacion” a que se refiere Sarmiento y preferimos seguir buscando en nuestra “barbarie”. Tal civilizacién en el fondo, no es otra cosa que !o que hoy se identifica por modernidad. Esta se entendera aqui como: “las formas ideolégicas de! conjunto de sociedades que basan su tradicion en la herencia europea a partir de la Reforma Protestante, luego de la llustracion Escocesa y Francesa y de las Revoluciones Estadounidense y Francesa, Su expansién se ha dirigido desde Europa y Estados Unidos al ARTICULO Aro Monstes FE resto del mundo, en lo que actualmente se conoce como proceso de globalizacién y homogeneizacién, donde sociedades han adoptado (0 han sido obligadas a adoptar) patrones modermos superponiéndolos a los suyos tradicionales o realizando diversos tipos de sintesis. Puntualmente, la Modernidad surge como un proyecto que viene a reemplazar el orden sociocultural medieval, al plantear la supremacia e importancia del individuo, el ejercicio de sus derechos y su autonomia frente a cualquier jerarquia ajena a él, especialmente la de la Iglesia Catdlica Romana. Como algunos de sus rasgos mas caracteristicos, se tiene al racionalismo, en filosoffa; capitalismo de mercado, en lo econémico; Estados nacionales democraticos en lo politico; ciencia racional-empirica, en lo intelectual; derecho positivo, en la jurisprudencia; etc...” (Monares 1998: 82) Es esta tradicién lo que hoy conforma una base ideacional para las conductas que han llevado las condiciones ambientales del planeta a su actual situacion. La meta del presente trabajo es demostrar ésta relacién entre las ideas: modernas y la crisis ambiental. Es necesario hacer la salvedad que aunque se haran referencias histdricas, no es el propésito del autor dejar establecida una detallada secuencia temporal del desarrollo de la modemidad. A pesar de ello, tales referencias aparecen como validas para mostrar en forma clara ciertos procesos de aquella a través del tiempo. Por otro lado, se hizo referencia @ nuestro continente, ya que nos urge a los latinoamericanos encontrar un camino cultural mas acorde con nuestras tradiciones e historia y menos dafino, para reemplazar las ideas que han demostrado ser inviables en el logro del bienestar de la mayoria de los seres humanos y estén causando la degradacién y destruccién de la naturaleza del planeta. Este trabajo pretende dar luces acerca de dicha situacion y ayudar asi a, en tanto pertenecemos o queramos pertenecer a una tradicién diferente de la moderna, buscar un camino mas acorde a ella y que posibllite realmente un mayor bienestar de la especie humana, Finalmente, en el sentido que éste trabajo esperamos sea la primera fase de una investigacién més extensa y profunda, se explica la cantidad de anotaciones a pie de pagina. Aunque, se estima comprensible que para algunos pudieran resultar excesivos en su numero y extensién, no se ha querido dejar sin respaldo ciertas argumentaciones y dichos que, si bien es cierto, no es aqui el lugar para aclararlos plenamente, tampoco seria correcto ni serio no exponer explicacién alguna. Pidiendo desde ya la comprensién del lector, se ha preferido pecar de riguroso que de negligente. Modernidad y crisis ambiental’ Hoy, la civilizacion hegeménica en gran parte del mundo es la Occidental Moderna, conformada. por sociedades que se han “alejado” de la El términe asoogiea “medio ambiente” Yoda aquella que nes odes), 80 utiizara en este trabajo indistintamerte a “naturalaza” Uusado en filosofia. Ambos designarén lo que puede ser tipicamente recanocido como natural, es deot: + ls elamentos ‘orginleos, induido of hombre actual y lo> otras hominidos u hombres (ies, e inorodnicos no intervendos culturalmente por los; y, 2° lo elementos culturalments interveniges que ya exisia antes del acconar de los hominidos sobre la natualeza, Se elicié tal terrinologia para unifiar citrios, a pasar de su ‘connotacién antropocenticay de excluir a la esirpe home de natural. Justamenta, el concepto ‘medio ambiente’ adquiere ‘santo con la apaticin y consiguiente intervencion cultural de {os hominidos en lo natural y de ia creacion de elementos ‘absolutamante aricales que interactian con los naturales. Asi 'por ejemplo, una clusad no se le define como “natural, pero es. fevidentemente o} lugar donde se desenvueive la vide de ‘hurnanos, eros animales y vogetales, y donde tambien existen ‘lomontos incrginicos naturales y arifciaios, naturaleza a nivel conceptual. Es decir, en estas sociedades se ha desarrollado una linea de pensamiento que considera al ser humano separado de la naturaleza, como dos entidades diferentes. Los humanos de las sociedades modemas no se consideran como una parte mas de un habitat y/o nicho ecolégico? Un claro ejempio de esta afirmacién, se tiene en el hecho que actualmente se desarrolla en la ciencia ecoldgica una discusién para determinar al rol del ser humano en los ecosistemas. Particularmente, esta discusién se centra en si los seres humanos son una “especie clave” (keystone species), entendida como una cuyo impacto sobre su comunidad 0 ecosistema es mas grande de lo esperado en relacion a su abundancia (Power y Mills 1995). Esto implica que una posible inclusion de! hombre dentro de los hébitat y/o nichos, sdlo se esta considerando recientemente en la Ecologia. Esta situacién de separacion y diferenciacion, 8 puede también abordar desde una perspectiva de fondo. Segin Collingwood (1950) a fines del siglo XVIII surge en Europa la idea moderna de naturaleza, la cual conceptualizaré a ésta en cuanto su “funcién”. Ef interés pasard de la Materia o de la naturaleza en si, como era anteriormente, a la funcién determinada que ‘cumple. Esta sera culturaimente construida, pues somos los seres humanos los que asignamos el concapto de “funcién” para alguien o algo. La conclusién a que llega el autor es que a pesar de su existencia real, la naturaleza ha sido considerada por la filosotia europea como si no existiera por si misma, sino que es dependiente * datas * ugar ~en su sentido geogtdfco- donde vve un tga de ‘anism dado” (Fuerios 1980: 22) Neter .desebe qué variables ‘@ aocian con la dstnbucin y abundancia de un tpe de organism ago” (Ider 1989: 22). Es decir, un rich detormicado puede inluir ‘saratsteas det Fadil como torperatura, humedad, atid onivlos Ge has; pero, adams 9 eonsioran ots varebes cmo dveretad do cepredadores,cartiad y ésoonbidad do lento, competes, oc Moco y Cal Ambiental: En tore a Fundamento de, para su existencia del pensamiento humano. Esta perspectiva se puede graficar con Kant (1957), quien plantea: “..admitiendo que nuestra representacién de las cosas, tal como nos son dadas, no se regla por éstas como si fueran cosas en si, sino que estos objetos, como fenémenos que son, se reglan por nuestra manera de representar...” (Ibidem 1957: 132) Luego, agrega que: “no podemos tener conocimiento de las cosas hasta que se haya dado a esos ‘conceptos la intuicién que les corresponde, y que, por consecuencia, no podemos tener conocimiento de los abjetos como cosas en si, sino en tanto que son objetos de la intuicién sensible, es decir, como fenémenos" (Ibidem 1957: 135). Entonces, como bien sefiala Collingwood, para Kant no se puede conocer la cosa en si, pero se le puede pensar; ya que como dato sensible existe sdlo en relacion al sujeto sensible que la “representa como fenomeno”*. Asi, los Esta mms linge de pensamento se enouenita ya en Newion (1987) ‘andes expresa is imposibiad de conooa a setancla de Dic y dl ‘mundo en genera: "Solamente verros las formas y colores de los ‘uerpos, Salo oimcs fos sonidos, solo toeamos is superfces extamas, ‘lamas los meros elores y gustaras los sabores: poro las sustancias Inferores no las conacernos con ringun senior con ninguna acc raja mucho mens tanemos un daa de a susiancia de dios” (bide 1967: 784). As, se debe buscar oxpresar ls fendrncs naturales por ‘macio de li matoraticas, puas mas alla de la conveniencsa cinta {Ge esto, no 8s poste abordatlos en su "sustanc‘, como dice Kent, ‘como “cota an. Actulmente, esa concepcicn sigue rgiendo en la ‘meledologia centica, donde to que se mde re son las propiedades e 1s objos 0 sucesos, sino ls incicadores de estas propiedades ‘como expresn manifesta ycbservabe ela popiedac (Briones 1090: 118-120) Del mismo modo, este enfoquo se puede recenocer en ia Antropoogia Estructura de Levi Strauss y ous modelos cogntvos de la cealitsd (Guerra 1979): y, como mae adeanto so verd en Rappaport también on la Ecologia Cultural y sus “imagenes culturales de la rnaturalez’, En todo caso, aunque acu! so concuerda on que son fos hhumanos quienes vlaboran conceplos de la realidad, se econcce también que esa realidad existe independientemente del sujeto observa ‘varae Monaro® occidentales para estudiar la naturaleza, fuera de hacerla depender de su pensamiento, se “alejan” de ella al abstraerla y lo hacen al mero nivel de “funcién®. Esta abstraccién supone una “no vivencia’, una “realidad operativa’ que se desliga de lo real para facilitar el andlisis y la conceptualizacién. Este camino, como lo expone Morris (1987) estaria sefalado por el pensamiento cientifico que “desencanta” al mundo natural: “Este tipo de pensamiento puede describirse mejor como un desencantamiento, una no participacién, debido a que insiste en la distinci6n entre abservador y abservado (...) hay una total separacién y distanciamiento de lla (la naturalezal. Sujeto y objeto siempre son vistos como antagénicos” (Ibidem 1987: 16).‘ Ahora bien, se ha llegado a un punto en el cual todos los habitantes del planeta e incluso el resto de la fauna y flora, estan afectados y en peligro por la llamada “crisis ambiental". La que se entender como las multiples situaciones que atectan la calidad de vida de los seres humanos y ponen en peligro la existencia de todas las formas orgénicas del planeta. Dentro de tales situaciones, que se definen en tanto problemas, estan por ejemplo aspectos como: el cambio climatico global; la capa de ozono; la contaminacién atmostérica; la calidad y suministro de recursos de agua dulce; la deforestacién; la desertificacion y sequia; la diversidad biolégica; etc. (Annis 1991). Se pueden dar muchas razones como causas de la crisis: que el ser humano modemo, como creador de cultura se considera “no animat” e incluso “no natural”, por lo que no toma en cuenta lo que lo rodea 0, como se expresa en la cita con que comienza este trabajo, supuestamente ha superado el estado de dependencia del medio ambiente; lo urbano como separacién o negacién de lo natural; el crecimiento demogratico y la necesidad de materias primas que conlleva; el ansia de lucto que implica el capitalismo de mercado; 0, la tecnologia que permite una explotacidn extensiva de la flora y fauna como nunea antes se conocid. Es obvio que éstas y otfas razones en conjunto han sido causantes de la actual situacién. Pero, en el fondo, existe un tipo de mentalidad, un conjunto de ideas que avalan y en las cuales se basa ésta relacion tan “lejana‘ y agresiva del ser humano moderno con la naturaleza; esa separacion y diferenciacion a la que se hizo referencia. En éste punto, habria que preguntar por qué se llegé a la crisis y no a raiz de qué acciones, las que ademas se conocen perfectamente. Es necesario aclarar el fundamento ideolégico de éste tipo de relacién con la naturaleza, que por lo demas no es inherente a todo el género humano y si caracteristico de las sociedades moderas. Se deben tomar en cuenta aspectos culturales de indole ideolégica que estan dados en la modernidad, que serian los que fundamentan las conductas de sus miembros 0 portadores hacia la naturaleza. De modo que, en tiltimo término, se esta ante un problema cultural: “El hombre contempla la naturaleza a través de una pantalla compuesta de creencias, conocimiento y propésito, y los hombres actuan segun sus imagenes "Goma se vera mds adelante, el persamiantacleniicacaresiano a cue hace relsrencia y crite e tado autor en su texto, es ten solo una sate 0 consecuencia de la moderna, + Ecoiégicamentshablanco, es paienatual dela historia de ura especie ‘1 quo pueda estar svete presionas del medio e incluso 98 exiega Desde este punto de visa, e208 suoosas san “pate do ne regia dl ego” de a naturaleza y la supervveneia.Lo.que May que acarer es, ‘que, como Fumano que vive su G9 vial en esie momento y en cota sociedad, desao que yoy ela vivamos lo mas poste y en as majoras Condiciones. Mero histrica como persona (po como especie) que Pertenece aun grupo social, es concestualmente deren al do tas ‘especies, ol que tl vez puede carespender a miles de aos. Consienle {ie ello desea vivir, sen por anirapacentriemo © por instinio de supervivencia culturales de la naturaleza, mas bien que de acuerdo con su estructura real. Por lo tanto, algunos antropélogos (...) han llamado nuestra atencién acerca de la necesidad de tomar en cuenta el conocimiento y creencias del hombre con referencias al mundo que lo rodea, y sus motivos culturalmente definidos Pata actuar como lo hace, si deseamos comprender sus relaciones ambientales” (Rappaport 1993: 271). Los miembros de las sociedades modemas tendrian una determinada “imagen de la naturaleza’, la que a nivel ideolégico entregaria las bases de las “creencias, comportamiento y propésito” hacia ella. La conducta moderna hacia la naturaleza, las “relaciones ambientales”, esiarian culturalmente definidas tal como to estén en las otras sociedades, Pero, ocurre que el contenido particular de la modernidad, tendria en si aspectos que habrian entregado los fundamentos para un tipo especifico de conducta, que seria la causa de la problematica situacién ambiental en la cual hoy se encuentra todo el planeta. “Cuél es la imagen moderna de la naturaleza?: naturaleza y cristianismo Una vez que se ha identificado el problema como cultural, y para intentar determinar los aspectos particulares de la modernidad en que se han basado las conductas causantes de la crisis ambiental, se comenzaré por sefialar que aquella surge a nivel ideolégico de premisas religiosas de origen cristiano protestante, Entre los ejemplos a que se pueden recurrir para apoyar esta afirmacién, se encuentra Ernst Troeltsch (1983) socidlogo, historiador y tedlogo protestante aleman, quien en su libro “El protestantismo y ef mundo modero” sefala a este credo religioso cristiano como “uno de los Modomidad y Cra Amini: En tome al Fundamonta do. progenitores de la cultura modema”, de hecho el libro en si es una argumentacién de tal idea. Iguaimente, el texto de Max Weber (1994) ‘La ética protestante y el espirity del capitalismo", postula al protestantismo como el motor ideolégico de la conducta econémica, el afan de lucro y la ética moderna del trabajo; todos aspectos que son parte indiscutible de la modemidad. Por otro lado, Robert Merton (1992) expone en la seccidn destinada a estudios sobre sociologia de la ciencia de su libro “Teorfa y estructura sociales”, e| fundamento religioso protestante de a ciencia experimental de los siglos XVII y XVIII en Inglaterra, Francia, Alemania y los Estados Unidos, base de fo que hoy es la actual ciencia experimental. En primer término, antes de referirnos dentro del protestantismo, y en virtud de los antecedentes con que se cuentan, especificamente al Calvinismo*; debemos remitimos a ‘La Biblia” como libro fundamental de Occidente Modemo y como antecedente del Cristianismo’, En ella queda claramente establecida una visién antropocéntrica del mundo, con lo cual se da por sentada la separacién entre lo natural y los seres humanos. Pues, aunque son parte de la Creacién, se les define como sus dominadiores, por fo que no sé los considera conceptuaimente a la par 0 como formando parte de la naturaleza: * Trost (1989), dentro do su argumentackon sobre laimpertancia del protestatismo an To que él lama "mundo modern, sefala en pparticuiar sobre el calvrism an eamparacién a kteranismo: "la ‘ignificacién de amas confesiones en la conforsacion del mundo ‘modemo radica en drecciones muy diversas, y como el dasarala ‘dol calvnismo se ha Hevado muy por encima del luteranismo cconservador, hasta e punto Ge converitse en una gran potencia universal, resula también que, en todas las cuestiores élicas, de ‘organizacén,poltioas y cocials, su signeacén o inflenea han ‘sido mucho mayores”(Ibidem 1983: 35). Con os ejemlas que mas adelante se exponen, so espera apoyar y complemantar las ‘afirmaciones de Troeisch con respect a la imporancia€ inivencia {el cama on al uso modemo. Anas Menaos *Y dijo Dios: Hagamos al hombre 4 nuestra imagen, conforme 4 nuestra semejanza; y sefioree en los peces del mar, y en las aves de los cielos, y en las bestias, y en toda la tierra, yen todo animal que anda arrastrando sobre la tierra (...) ¥ los bendijo Dios; y dijoles Dios: Fructificad y multiplicad, y henchid la tierra, y sojuzgadla, y sefioread en los peces de la mar, y en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra” (Gén 1, 26-28). Como puede verse, es en el “Libro del Génesis”, en el primer relato de la Creacién, donde queda establecido que el ser humano tendré la facultad, en virtud del designio divino, de dominar la naturaleza, “seforear" a todos los miembros de la fauna no humanes y “sojuzgar” la tierra, Ademés, los humanos tendran una condicién superior, al ser los elegidos de Dios y los Unicos seres vivos de la Creacién divina que fueron hechos a Su imagen y semejanza. Tienen una misidn particular que depende de su propio accionar, pues son un fin en si mismos. No asi el resto de las criaturas que estan justamente para servirlos, 0 sea, en relacién de dependencia, en funcién de ellos. Los seres humanos, desde el principio, son diferentes y superiores a las demés criaturas.* 7a Ba? ullzada en esto Wabajoconesporde ala version protestant de Caslodro de Rea (1563) revisada per Ciprano de Valra (1612) * Passmore (1978) expresa que no es artecto sonal a Génesis como fa fundamecto de la conducta madera hacia la naturaleza. Pare tanto 088 lo, como! Atiguo Testaronio en gonoral,sosiern la ‘bond! dl mundo anos dl advorimignic humane, xite ol mundo para mayor glia de Dios, y slo en segundo luzar para servo del hombre,” (bid 1878, 42-43), Aunque aparece como comecta ela ‘alimacion,justamente lo que se irterta demas en este trabajo es queata linea bibicay suerpetacién son as que tenen ea nluencia fn eslos momertos, perdiéndose el enfoque que el autor menciona. ‘Sen aquelias doctrnas as que conlormarén as bases Meaconales para 9 eampertamicnto moderna hacia lo naturleza, no la inucnela dol ‘onsamiono rigge, como lo sofa Pasomore, Pero que, no 0s quo fal peceamiontovacle de Todo contenido mora'larelacén ser humere- nalualaza, smplomarto se osiruc.ra oto go de moral que dara lugar un igo se react parca. Luego, en el siglo XVI, cientos de afios después de establecido el texto biblico, el reformador Juan Calvino (1988) en su interpretacion de las Escrituras, también entrega el dominio de la naturaleza al ser humano, pues *..e1 mundo ha sido creado para el hombre, debemos siempre, cuando hablamos de la providencia con que Dios |o gobiema, considerar este fin” (Ibidem 1988: 130)’. Hasta aqui, tomando en cuenta la cita precedente, no habria mayor variacién con los textos biblicos: el ser humano sigue siendo el elegido de la Creacién, separado de la naturaleza que esta a su servicio y disposicién. Pero, como se expondra, el reformador introduce algunas variaciones en su interpretacién que tendran importantes alcances. Para empezar, Calvino sostiene que “Para evitar la austeridad o la intemperancia, se requiere una doctrina acerca del uso de los bienes terrenos’ (Ibidem 1988: 552). En tal sentido aboga por la utilizacién de esos bienes derechamente para “proporcionar satisfaccién’, a la vez que apoyandose en San Pablo recomienda e! libre uso de los “bienes de la tierra” @ incluso su comercializacién: “Y ni siquiera podemos abstenernos de aquellas cosas que parecen mds bien aptas para proporcionar satisfaccion, que para remediar una necesidad. Hemos, pues, de tener una medida, a fin de usar de ellas con teologleamante, pues dentro del dogma calvineta es Dios, no los setes humanas, quien achia sate eh mundo, Come Eto hace en vitud de que fo cfeado 6s excusivamente para os humanos, sus ‘acciones son on favor de su puodo elegiso. AI respecto, hay que tener on evonta que para Calvino el pueblo slegido no es el género ‘humano en su tctaidad, ues aquellos para l gon ‘como unos poco ‘90s de rigo escondidos eno la pa", As, la bondad do Dios 0 derrama sobre tan s6lo algunos elagdos: “unas madres lonen los pechos tenes, y otras fos tienen secos, segin que a Dios lo grade almentar a unc mas abundaniomenie yal ito con mayor ‘esease2" (idem 1988: 127), pura y sana conciencia, ya sea por necesidad, ya por deleite (...) Si es preciso que pasemos por la tierra, no hay duda que debemos usar los bienes de la tierra en la medida que nos ayudan a avanzar en nuestra carrera y no le sirven de obstaculo. Por ello, no sin motivo advierte San Pablo que usemos de este mundo como si no uséramos de él; que adquiramos posesiones, con el mismo énimo con que se venden...” (Ibidem 1988: 552)."° Este uso sigue aun los lineamientos de ‘La Biblia’, pues como ya se vio Dios entrega a los seres humanos animales para que los dominen. Pero, lo que Calvino introduce especificamente son dos variaciones importantisimas. En primer lugar, es un uso que no sdlo implica el remediar nuestras necesidades, sino también nuestro deleite y la consecucién de nuestros fines, entendidos ellos en sentido amplio. Segun esto, se podria utilizar a la naturaleza para usos que van mas alld de lo estrictamente necesario Naturalmente hablando, o sea, para usos que excedan la necesidad de alimentacion 0 abrigo Por ejemplo. Es decir, para usos de “deleite””. Modemidad y Cisls Ambient: En tomo al Fundamento de. Ademas, se sefiala a la naturaleza como un posible obstaculo a nuestros fines, es decir, en contraposicién a los seres humanos. Se desprende de ello que los humanos y lo natural no tienen fines que sean paralelos 0 acordes, ambos son entidades separadas y como tales sus desarrollos 0 metas pueden estar en abierta contraposicién. Lo importante para la naturaleza puede no serlo para los seres humanos y viceversa, lo que implicara una absoluta contradiccién si entendemos el asunto desde la visién del ser humano como formando parte de un habitat y/o nicho.'® En segundo lugar, Calvino entrega a los seres humanos la posesién de la naturaleza. Se la puede adquirir y vender, y obviamente no se compra ni se vende lo ajeno, sino lo propio (mas aun cuando la propiedad privada para el calvinismo es sagrada)"®. Asi, a la jerarquia biblica de! ser humano sobre la naturaleza y la consiguiente separacién de ambos, el reformador agrega la propiedad y el goce ilimitado de ella. A la vez que deja monoliticamente sentada la © Se reise al texto bidico de la primera carta de San Pablo a los Covitos, donde ésterecomienda viirla vida sin “congoa’, ya que 1 iempo es corto ..y los que compan, [vivan] como los que no oseen (.) ¥ los que usan de este mundo, como los que no usan porque 3 aparioncia de este munca se pasa (..) Quisiera, pues, ‘que estuvieseis sin congoja" (1 Co7, 30-32), Apesar de que el texto hace un lamamniento a la vida ausiera, como se puede ver en la ‘a, los tines en que lo utiiza Calvino son cerentes. También fon Troetsch (1985: 46:51) se encuentra ia expresién “posoar et ‘mundo come si no se poseyera’, cuando el autor expone acerca ol ascoismo ¥ la salvacién en la doctrinaluterana y calvinita Espectficamente, para el ascotismo calvrist, la trea roligiosa es ‘conqustary posoer ol mundo para gloria de Dios, Per, al ser para ticha confesisn tant la accion de congusla, come lo conquistado ‘© poseido de a divnidady na de los seres humanos, finaimente so [puede entennier que tal pasasion "somo sno se pesayera’. Este {25 €1 mismo sentido que se encuertra en Weber (1994: 207) y su ‘defricion del ascetismo protestante como “intramundano”: “en el ‘mundo, pero no de este mundo ni para asta mundo’, ya que es para ‘exclusa gloria de Dos, La “necesaro" seré detarminado culturalmente por cada sociedad, ero equ nos remiimos a Santo Tomas de Aquino (1954: 753-762) Elautoraltratar ol ema dela concupisconca, diferencia una natu, ‘qe media las necesidades naturales (alimento, abvigo, vestGo, 22) y que es fina; de una no natura, que remodia 1 que Lama "deseo codicoso" (necasidad de riqueza es el ejemplo que ulliza)y que es infinito. Por ser cistiano, de hecho Santo Tomas sostiene ‘una posiciin antropocéntric: (a superioidad de! ser humana con respecio a la naturaleza que esté dostinada a serve. Pe diferenciacién de ambos tipos de concupiscencia se ‘modida para ia intervancién humana en la naturalaza: basta lo que remedie las nocesidades humanas naturales. As, a pesar de sor ‘ambos ritianes y por ale antropooérircos, a medida que sostine Santo Tomas os evidertementa diferente y contrapuosta a lo ‘expresado por Calvino. "= parece como obvio que en un habitat y/o nicho las motas Inmediatas de una potencial presa con respecto a su predador son contraditorias: ambas desean vivir y una debe mori. No obstanta, lo que se dabe tomar en cuenta son las metas de supervivencia general, o sea, que el habitat yloricha debe segut jando para sostener a todas las poblaciones que dependen 40 6), depradadores y presas,o incluso alos humanos.. 18 "Porque dobomas considerar que lo que cada uno poses no lo ha conseguido a la ventura por casualidad, sino por la ‘itibucién de! que es Supreme Seflor de todas las cosas; y par ‘0, a ninguna persona se le pusden quita sus bienes con malas Andee Menaves separacién del ser humano de la naturaleza y la contradiccién entre ambos, refuerza dentro de tal concepcién de separacién, la jerarquia humana por sobre la naturaleza. Los seres humanos seran ahora los depredadores omnipotentes que explotan los “recursos” que les pertenecen, pues en virtud de la posibilidad de comercializacién, la naturaleza ha pasado a ser un bien econémico factible incluso de considerarse propiedad privada. Calvino llega a plantear, en una directa alusion ‘a Santo Tomas, que se debe prescindir de un tipo de filosofia a la que nombra como *inhumana”. Ella niega al ser humano la posibilidad de utilizar las criaturas de Dios para otros fines que no sean solamente sus necesidades naturales: “Prescindamos, pues de aquelia inhumana filosofia que no concede al hombre mas uso de las criaturas de Dios que el estrictamente necesario, y nos priva sin razén del licito fruto de la liberalidad divina, y que solamente puede tener aplicacién despojando al hombre de sus sentidos y reduciéndolos a un pedazo de madera” (Ibidem 1988: 553). aes y engafos, sin que sea Violada la dstibucién divina” (Cahino 1988: 206), Iqualmento, «1 fisofo inglés John Locke en su razonamiento acerca de ia propredad, sefala a Dios como quien ‘entregé las tierra a los hombres (Miranda 1991); por su pare, ‘Adam Sith (1997), expreaa que fue la "Providenta’. En esta ‘misma linea de persamiento, o mas blen como consacvencia do ella, se tiene que las Consttucionas Pollicas de los paises resguardan legalmento ol “cagrada" derecho a la propledad, tal como lo hace nuestra propia Constitucién en su capitulo I laiculo 19, nimero 24. Aunque ésta costione la “funcion social” de la propiedad, el lore mercado y la filosofia del derecho Individual se encargan de hacer inviable asta salvedad. En “Taviney (1972) se encuentra una excelente critica a ios derechos Individuales y la propiedad, en contraposicién a las funciones social “Esta veién calvinista se mantiene hasta hoy en la econom| ‘capialista de mercado, donde ia produccién no se encamina Ja necesaro socialmente hablando, sina alo lucralvo (Tawney 1972. Espoz 1989). Pasando por supuesto por Adam Smith Novak (1981) hace alusion a la nueva tarea morel de la femergente burguesia del siglo XVIll exprosancilo como: "..es ‘obligatorio ir mas ald de jo que os sufteionta y producit mayor De la cita se entiende que, hacer uso de las criaturas de Dios s6lo para satisfacer nuestras necesidades naturales nos haria perder nuestra condicion humana, ser “reducidos a un pedazo de madera”, La humanidad radicaria justamente en una conducta rapaz donde “...usemos de los dones de Dios sin escrupulo alguno de conciencia y sin turbacién de nuestra alma...” (Ibidem 1988: 656). El pensamiento calvinista en relacién a la naturaleza, fue posteriormente desarrollado, tanto a nivel ideolégico, como en acciones coneretas. Por ejemplo, Adam Smith (1992) profesor de moral cristiana calvinista en la Universidad de Glasgow, quien como fundador de la disciplina econémica no incluye como variable para adquirir riqueza a lo natural’®. La riqueza sélo se consigue con el trabajo humano y ala naturaleza simplemente se le da un precio de mercado, pues se la considera un recurso como cualquier otro. Esta nocién tiene absoluta vigencia hasta nuestros dias y se puede graficar en Wonnacott y Wonnacott (1995: 671-718), quienes discuten el tema de la calidad de vida, la contaminacién y la explotacion de los recursos naturales. Las Unicas soluciones que proponen son bajo criterios de mercado a nivel de restricciones econémicas: de precio y regulaciones estatales; igualmente, se trata de “recursos naturales”, es decir, objetos naturales con valor de uso y cambio"®. Del mismo modo, riqueza (..) La exigencia dca ya no era la sufiiencia, sino la productvidad”(Ibidem 198%: 64). Este es, basicamente, el mismo Fazonamionto quo expone Weber (1994) para laéica protestant, base de lo que lama “espirtu dal eapitaliero” "© La economia capitalisia de mercado como expresion raligiosa protestante puede encontrarse on Espoz (1989); y Tesumidamente en Raczynsk' (1993), en una entrevista al eferido ‘autor publicada en el aro “El Mercuri" el 3.de octubre de 1993. * Laacitud actual dela economia respecto a la naturaleza, que a raiz de la crisis de recursos implica la idea de una expiotacion racional yo un crecimiento sustentable, no se funda en un cambio do perspectva acerca de ala. Simplomente, corresponde ala el tema de los derechos de propiedad sobre la naturaleza es asumido como abvio. En el caso de Marx, la Unica relacién del ser humano con la naturaleza se da a través de la produccién, es decir, de los procesos econémicos."” Por otro lado, Merton (1992) expone que en la Inglaterra del siglo XVII el ideal cientifico es de tipo religioso, puntualmente puritano (secta calvinista) dar al ser humano una mejor vida y Qlorificar a Dios mediante el estudio y Consecuente dominio de su obra la naturaleza. Esta doctrina religiosa es sostenida y practicada Por los cientificos ingleses de la Royal Society, en su gran mayoria de religién puritana"*. A modo de ejemplo, el cientifico inglés Joseph Priestley sostiane que el progreso humano se debe a un “plan del Ser Supremo”. Dentro de tal razonamiento, es decir, como parte del plan divino para el progreso humano, expresa la idea el conocimiento para control de la naturaleza y mejoramiento de la vida humana: *..como observa lord Bacon, el conocimiento es potencia, se ampliaran (os poderes humanos; la naturaleza, sus sustancias y sus leyes estardn cada vez mas bajo nuestro control; los hombres conseguiran que su existencia en esta tierra sea més facil y confortable (...) cualquiera que haya sido el ‘comienzo de este mundo, su final sera glorioso y paradisiaco, mucho mas de io que nuestra imaginacién puede concebir” (Priestley, citado consideracion dei conceto econémico de “costo marginal (Zamora 1966), donde se debe expotar los recursos hasla 8! punto que, perntiendo el maximo de ganancia, no los exinga "Para product, los hombres contraen determinados vinculos y relaciones, y a través de éstos vinculos y relaciones sociales, y ‘6a través de ellos, 2s como se relacionan con le naturaleza y ‘como se elect la produccié” (Marx, citado en Monaén 1990: 35). "En cte mismo sentido, Weber expone quo, ia dscplina preterida ‘de todo el eristianisme puritano, bautizante y pietsta ers lafisica ¥ aquellas otras disciplinas matematico-naturales (...) ‘empiismo del sigio XVii era el medio de buscar a ‘Dios en la haturaleza’; sta conducia a Dios" (Ibicem 1994: 182) eciaridad y Cris Ambiental: En toro al Fundamento de, en Mori 1983: 178)."* En este mismo sentido, Troeltsch (1983) expresa que la ciencia natural moderna, surgida de las ideas protestantes, ha “racionalizado a la naturaleza en una amplitud e intensidad tales que bien se puede hablar de un efectivo dominio espiritual de la naturaleza...” (Ibidem 1983: 25). Como se puede ver, es quizds en la ciencia, donde se deja notar con mayor fuerza la idea del ascetismo intramundano calvinista de conquistar y controlar el mundo mediante la accion metédica, Finalmente, en la clasica obra de fines del siglo XIX del antropdlogo estadounidense de religion presbiteriana (secta calvinista) Lewis Morgan (1993), se encuentra igualmente reflejada esta ideologia acerca del dominio de la naturaleza por parte de los seres humanos. El autor comprende el progreso humano, desde el punto de vista del progreso del dominio sobre la naturaleza por medio de los avances tecnoldgicos. La evolucién social de la humanidad, desde el salvajismo y la barbarie a la civilizacién, se habria dado desde un momento primario en que los seres humanos estaban absolutamente sometidos a la naturaleza, para luego ir “avanzando” hasta lograr imponer sus reglas a ésta: "Los humanos son los tinicos seres de los que puede decirse que han ganado control absoluto sobre la produccién de comida” (Ibidem 1993: 41). Es decir, sobre la naturaleza. "La fe osddonta! on 0! poder do la ciencia para controlar a ta ‘aturaleza continda vigente hasta nuestros dias. Robert Solow, ‘premio Nobel da Economia 1967, llaga.a sostener que se podran ‘sustituir los recursos naturales, por lo que para él es absolulamente posible que ‘el mundo, en efecto, se las pueda arregiar sin recursos naturales" (Solow 1974, ctado en Daly 1969: 18). En el fondo ol autor plantoa, ya no sé al total control de ia naluraleza por la acolo cieniica de los aeres humanas, sino la tuptura definitiva de Ia depandencia de ios hacia la naturaleza, Esta, mas que contolada, ha sido superada; tal como se entende en la cit con que se inicia este trabajo de los economstas Fisher Peterson, Andis Moraes F. Comentario No se puede sefialar de modo simple que terminando Calvino su libro, el ser humano moderno comenzara a depredar y contaminar el medio ambiente, ni que todo el que asi se comportare sea calvinista. Quizds, sdlo transcribié a sus textos una realidad en la que ya estaba inserto, tal vez poco a poco su doctrina fue dando pie a conductas. Falta por ahora aclarar esa situacién.*” Lo que se debe notar y que es lo central para este trabajo, es que esta interpretacién biblica y la doctrina calvinista en general, conforman un fundamento que ha servido a las sociedades modernas para relacionarse con la naturaleza. Las concepciones de origen calvinista hacia la naturaleza, han sido la base del comportamiento de los miembros de las sociedades modernas hacia aquella. Como diria Rappaport, estos “motivos culturalmente detinidos” por la modernidad son los que, al materializarse en conductas, han causado la crisis ambiental. Pero, como ya se expresé, la concepcién y actitud moderna hacia la naturaleza no es inherente al género humano, no es universal Existen otras visiones que consideran a los seres humanos como formando parte de la naturaleza, donde lo “necesario para vivir’ (ver pie de pagina nro. 11) es lo que generalmente ocurre en los habitat y/o nichos en que cada ser vivo (incluidos los humanos) consume justamente lo que requiere para satisfacer sus necesidades = En esta sentido, ol propio Calvino sostiene que a pesar de que Dios gobiema diractamente el accionar humano, no se puede ‘caer an conductas que pongan en pelaro nuestra vida, por ser ello contraro ata divnidad: "porque El, que ha limtado nues Vida, nos ha dado los medios para conservaria; nos ha avisado de 10s peligos, para que no nos hallasen desapercibigos (..) 51 el Seftor nos ha confiado la guarda de nuestra vida, que la cconserveros"(Ibidem 1988: 139). Asi, no podemas culpar al roformador directamente de nuestra sitvacién ambiental. Se tertionde que sus ideas son base de otras ideas posteriores que sven de fundamente a conductas. naturales y donde es muy poco usual que exista acumulacién 0 sobreexplotacién. Este tipo de relacién con la naturaleza, al menos a nivel ideol6gico, la encontramos en forma similar en diversos pueblos no modernos, en sentido amplio. Pueblos que se consideran a si mismos como una parte mas de la naturaleza, donde ésta Jos contiene como a cualquier otro ser vivo." De modo que, en las concepciones ideolégicas de tales pueblos, no se concibe la separaci6n y/o superioridad y/o sujecién de la naturaleza con respecto a los humanos y tampoco la posibilidad que aquelia sea propiedad privada y factible de enajenar. Desde una vision de ese tipo, ldgicamente lo que suceda a la naturaleza afecta de modo directo a los humanos. Lo que implicaria, al menos a nivel ideal, una base que sostenga y refuerce comportamientos que tiendan al equilibrio y respeto de las relaciones entre humanos y lo natural. Se puede citar, a modo de ejemplo cercano y actual, las palabras del Consejatu Chaftin Chithué Wapi (Gran Consejo de Comunidades Huilliche de la Isla de Chiloé): “Los winka piensan que no son hijos de la mapu fiuke, no se someten a ella (...) Nosotros no caeremos en ia tentacién de sentirnos los mayores de la mapu fiuke, porque entendemos que somos sus hijos y porque cuando hemos sido tentados a ver el mundo con los ojos del winka nos hemos dado cuenta que nos condenamos al desaparecimiento (..) entonces no habré winka ni huiliche que vierta lagrimas sobre el cuerpo de la mapu fiuke © Esta idea generalizada en la cosmologia de diferentes puctios amerindias acerca que la naturaleza contiene a los seres hhumanos, entre otros seres vivos y materia inorte, es bastante ‘6gloa hasta para el pensamiento accidental. Conlleva el hecho Inclsoutble que 6° depende de ela para sobrevivir no se punde vivir en y do la nada. incluso en la teologia erisiana, como muestra del amor de Dios a sus elagidos, todo ol resto de la naturaleza es ereada antes quo ol ser humano, pera que le sa do sostén, muerta" (Consejatu Chafun Chilhué Wapi 1994), En Chile, otros casos actuales de relaciones ideol6gicas y materiales diferentes del tipo de elacién moderna entre grupos étnicos y la naturaleza, se encuentra en Smith-Ramirez (1994). La autora describe los usos gastronémicos, artesanales y medicinales, no tan s6lo madereros y econémicos (en cuanto economia de capital o explotacién para ‘comercializacién) que hacian y hacen del bosque miembros y descendientes de la etnia mapuche- huilliche de San Juan de la Costa en la X Region. Del mismo modo, Gonzalez y Valenzuela (1979) exponen la situacién de homologacién ideolégica que realizan los mapuche-pehuenche de su propia organizacién social con la conformacién del bosque de Pewén (Araucaria araucana): el ordenamiento de los arboles de pewén es nombrado segiin los términos de la propia organizacién social de! grupo y entendido como una agrupacién parental natural, o sea, como grupos familiares de pewén.”” Se debe dejar en claro que no es la idea de éste articulo un ensalzamiento gratuito de los pueblos indigenas, o un romanticismo indigenista trasnochado del tipo buen salvaje. Pues de hecho, no todas las sociedades no modemas y/ © étnicas han tenido o tienen una relacién arménica con la naturaleza. Sino que, se ha pretendido establecer un punto de partida ideolégico o una base ideacional para los comportamientos de los grupos frente a la naturaleza, 3 “Tambien la mportancia asignada a los pewén s0 manifiesia a ‘ive! ideoidgico. A semejanza del iobché [agrupamiento de fami unidas por linea paternal an of plano social, estos Indiganas observan una ciera forma de “organizacién natural” lentes pinos araucaris. Un agruparniento de pewén consttuye lun loopewén, el que esti formad, a lo menos, por cinco 0 seis frboles que comparten *relaciones parentales” entre si" (Gonzalez y Valenzucla 1978: 61). Modemisad y Cis Ambientat: En tome a Fundamanto de. Asi, no quiere decir que la ideologia de un pueblo acerca de la naturaleza tenga exacta correspondencia con el comportamiento real de ese pueblo en su totalidad, o a nivel de grupos 0 individuos; pero si es un referente del cual partir para explicar esas conductas y tendencias. Al respecto, en antropologia se distinguen los conceptos de “cultura ideal” y “cultura real”, para diferenciar lo que las personas dicen y creen que debieran hacer, de lo que realmente hacen (Hoebel 1993). Dichos términos sirven justamente para diferenciar las variaciones que se dan de las normas y/o costumbres establecidas en las culturas, tenidas como buenas, deseables y correctas, de cémo se practican en la realidad por los grupos y/o personas miembros. Igualmente, dentro de las culturas particulares se da a variabilidad, es decir, en cada sociedad hay de hecho variaciones grupales e individuales de aquella. O sea, se dan diferencias en la “puesta en practica” de la cultura (Herskovits 1948).”* Finalmente, se entiende que la concepcién del ser humano en la naturaleza es contrapuesta a la visién ideoldgica de la modernidad acerca de la naturaleza y los humanos, que los separa y considera a éstos por encima de aquella. Tan ajenos a ella que incluso son sus duefios con potestad para enajenarla, para transformarla en mercancia y destruirla. *.,entonces no habré winka ni huilliche que vierta lagrimas sobre el cuerpo de la mapu fluke muerta’. Enrelacién al comporiamient cultural des indhviduos y grupos, toma importancia el tera de la identidad cultural. Es deci, ei feriémeno social de caracteristicas dindmicas, por el cual jas Personas se sienten partcipes y reconacen como propia una tultura y, por ende, sus formas idoclogicas y conductuales (Wergara y Vergara 1982). Aunque, por otro lado, las conductas @ Ideas se desarrollan o responden a patroncs y contextos Cultuales determinados, en ocastones pueden ser uiizadas sin la plone corteza de elo. ‘Andres Monaos P. BIBLIOGRAFIA ANNIS,B, 1991. ‘Dalberaciones mundiales en Rio", pp. 36-38, En: Desarrolio de base, Neo. 3, Volumen 15, 1991. EU BRIONES, ©. 1990. Métodos y técricas do investigacén para las clercias sociales, 2da. ecicion, Editorial Tillas. México. ‘CALVINO, J. 1986 (1896). La instituclon dla religion cristina. Eultoral Nuova Creacién, Buenos Aires. ‘COLLINGWOOD, R. G. 1950. Idea de la naturaleza. Fondo de (Cultura Econémica. 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Teorias, concepto y AGRADECIMIENTOS: {Al profesor Renato Espoz. ya que como alumno de sus estucios sobre epistemoiogia de las ciencias me antregé los conacimisntos que hicioron posible o prasente trabajo, al darme muchas de las harramiontae conceptuales para abordar éste y otros tomas; ‘qualmente agradezeo sus relerencias, indicaciones al texto y la ‘métodos. 11a. reimpresion, Editorial Tecnos. Madrid MORGAN, L. 1993 (1877), “Socledad antigua’, pp. 32-60. En’ Antropologia. Lecturas. 2da. edicién, P. Bohannian y M, Glazer (editores). McGraw-Hill Madrid. MORI, G, 1983, Larevolucion industrial. Editorial Criica-Grjatbe, Barcelona, 'MOREIS, B. 1987, reoncantamiento del mundo. Cuatro Ventas Editorial. Chil. NEWTON, |. 1987 (1686). Principios materaticos de la tlosota natural. Tomo i. Alianza Editorial. Madi. NOVAK, M. 1981, ‘Las deficiencias cuturales del capitalism’ (pp: 55:79, En: Estudios Publicos, Nro. 4-5, Septiembre-Diciembre 1981. Cantro de Eslusios Pibicos. 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A Loreto Medina ‘por sus corresciones de os berradores, Obviamente cualquier acierto ‘del presenta trabajo se debe a quiones mo ayudaron; por el contro, ‘cualquier error 96 de Unica responsabilidad do! autor.

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