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Vol. II, Número 25, 15 de septiembre de 2008. CEDICULT Director: Leonel Durán Solís
correodelasculturas@gmail.com
En este número:
Arqueología
Hace diez mil años, los autóctonos deforestaron parcelas de bosque tropical y modificaron
la zona de los humedales de Kuk, cuyo paisaje probablemente parecía un mosaico de bos-
que, prados y hábitats alterados por la actividad humana. Unos pocos hoyos cavados en los
límites de los humedales y herramientas de piedra con residuos microscópicos de tubérculos
de taro y de ñame hacen suponer que la población ya había empezado a dedicarse al cultivo
de plantas ricas en almidón.
Más tarde, hace unos 7,000 años, los habitantes empezaron a desarrollar la zona. Cul-
tivaron plantas en montículos de tierra, una especie de terreno elevado, en el límite de la
zona pantanosa: las bases subterráneas de estos montículos todavía son visibles en el barro.
Cultivaron plantas con alta tolerancia hídrica como el taro en la base de los montículos, y
aquellas que exigen poca agua como el plátano y el ñame en la cima. Según parece, estos
cultivos ricos en almidón se alternaban con otros de vegetales de hoja.
Hubo formas similares de cultivos múltiples en valles adyacentes al área del sitio de Kuk.
El bosque lluvioso del alto valle de Wahgi fue talado en su totalidad por la actividad hortíco-
la y los incendios. Desde entonces, la mayor parte del valle se ha convertido en un prado.
Un sistema de drenaje de canales en red se implantó hace 4,000 años para facilitar el
cultivo. Los terrenos pantanosos de Kuk contienen el mayor número de vestigios agrícolas
conservados en Nueva Guinea, que son además los más antiguos y mejor preservados. Con-
sisten en restos de distintos tipos de barro formado de viejos suelos y del relleno de antiguos
canales de drenaje. La extensión y la configuración del sistema de drenaje han cambiado con
el correr del tiempo. Si bien se desconocen los motivos que llevaron al drenaje periódico y
al abandono de los humedales, ello se podría deber tanto a factores climáticos, como hidro-
lógicos o sociales.
Hoy en día, varios centenares de Kawelka
Cultura ibérica. viven
FinalesyS.cultivan en los
III, inicios S. IIhumedales
a.C. de Kuk y sus
alrededores. A pesar de las tradiciones orales que ligan la comunidad a la tierra, los Kawelka
no saben a ciencia cierta si sus vínculos con Kuk datan de hace miles de años. Pero poco
importa.
Se han comprometido de forma voluntaria a proteger los vestigios arqueológicos enterra-
dos, lo que supone dejar ciertas áreas sin cultivar y regular el desarrollo de otras. Para los
Kawelka, la noción de patrimonio designa algo a lo que están directamente ligados a través
de su tierra y de su historia. De modo que la mejor manera de proteger el sitio de Kuk con-
siste en permitir a los Kawelka que continúen ocupando y cultivando esas tierras.
Antropología
C uando el hombre llegó a América ya era homo sapiens; el proceso evolutivo se dio en
África. Esta es la hipótesis aceptada por la ciencia a nivel mundial respecto a los oríge-
nes del hombre americano.
Sin embargo, ¿cuándo fue su entrada en el continente?; ¿viajó por el estrecho de Bering?;
¿atravesó el Océano Pacífico brincando sobre sus islas?; ¿cruzó el mar en barcas?; ¿entró
por la parte sur, por el norte o el centro? ¿Obien, igualmente incierto, su origen es de ascen-
dencia europea, asiática o de Oceanía?
Aún cuando no hay acuerdos en torno a estas cuestiones, la migración es el tema que
actualmente despierta mayor debate entre los estudiosos de la prehistoria americana. Por tal
motivo, el IV Simposio Internacional El Hombre Temprano en América, que realizó el Ins-
tituto Nacional de Antropología e Historia y la Dirección de Antropología Física, a través del
proyecto El Hombre Temprano en México, desde el año 2000, se dedica a las migraciones.
El encuentro se llevó a cabo del 18 al 22 de agosto del presente año en el Museo Nacio-
nal de Antropología y entre los asistentes estuvo el doctor Carlos Lorenzo, que forma parte
del equipo de trabajo del doctor Eudald Carbonell, en Atapuerca, España, uno de los sitios
arqueológicos más importantes del mundo referidos a la evolución humana.
También compartió sus conocimientos en este simposio el doctor José Luís Lanata, inves-
tigador argentino que ha trabajado sobre el arribo del hombre a América; él hace una simu-
lación y ubica la llegada de los primeros grupos humanos entre 20 a 18 mil años.
Otro de los participantes fue James Chatters, investigador norteamericano que ha estudia-
do al hombre de Kenewik, uno de los esqueletos que ha despertado polémica en cuanto a su
afiliación poblacional.
Jiménez presentó un trabajo comparativo empleando los cráneos más antiguos de México
y una muestra de cráneos de Australia y Nueva Guinea, que pertenecen al acervo osteoló-
gico de la Universidad de Cambridge, Inglaterra. El antropólogo explica que los cráneos se
midieron y fueron analizadas sus características físicas para determinar si hay semejanzas
entre las tres muestras estudiadas. Jiménez abunda diciendo que su estudio parte de las
hipótesis respecto a los antepasados del hombre americano, una de ellas afirma que pudie-
ron haber llegado de Australia o brincando sobre las islas que se encuentran en el océano
Pacífico o por el estrecho de Bering.
De acuerdo con Jiménez, hoy día no existe diferencia entre las hipótesis planteadas sobre
la antigüedad desde la entrada del hombre al continente americano, debido a que las repor-
tadas en los últimos años se ubican entre 20 mil y 25 mil años antes del presente. Lo que
Antropología
tenemos que decir es que al inicio de las investigaciones sobre el hombre americano, las
hipótesis que se planteaban diferían por miles de años.
Las preguntas que siguen por resolver son: por dónde viajaron, cuál fue el corredor por
donde ingresaron, si entraron por el Pacífico, por la parte sur o por el norte y, en este sen-
tido, resaltó que la información que aporte México es muy importante porque de cualquier
manera tuvieron que pasar por aquí debido a la ubicación geográfica del país, por eso los
resultados de sus investigaciones son de relevancia para entender la prehistoria de América.
Cabe recordar que los restos humanos más antiguos en América fueron localizados en
México y corresponden a la Mujer del Peñón III, que fue fechada por el método de carbono
14 en el año 2000 y tiene 12 mil 700 años. Este esqueleto fue descubierto accidentalmente
en 1959, cuando el señor Tereso Hernández cavaba un pozo en el patio de su
casa, en las calles de Emiliano Zapata y Bolívar, en la colonia Peñón de
los Baños, muy cerca del Aeropuerto Internacional Benito Juárez, en la
ciudad de México.
Los restos fueron entregados al entonces Departamento de Prehis-
toria del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y al
lugar de los hallazgos acudió el arqueólogo Francisco González Rul,
quien realizó pozos de sondeo para analizar el sitio. Los estudios de
entonces concluyeron que se trataba de un espécimen precerámico,
La mujer del Peñón
Antropología
se organizó el primer simposio. En términos muy generales, así es como nace el primer
Simposio Internacional El Hombre Temprano en América, donde se propició la discusión y
reflexión colectiva del tema medular en las investigaciones sobre el poblamiento en América.
El laboratorio determinó la antigüedad de La mujer del Peñón III en 12 mil 700 años, con
una confiabilidad de 95 por ciento. Es hasta el momento el fechamiento más antiguo para
un espécimen humano en el continente americano.
Con esta labor, México, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia, entró
al debate científico sobre la prehistoria americana, llevando a la mesa de discusiones sus
aportaciones en la materia.
El proyecto de investigación del hombre temprano en México tiene varias vertientes. Ade-
más de los fechamientos, se hicieron estudios morfológicos, genéticos y de alimentación,
algunos de los cuales ya están concluidos.
Las próximas tareas del proyecto son recorridos a nivel nacional por lugares, ya ubicados,
con posible presencia prehistórica, para detectar los sitios precerámicos, y hacer el mapeo,
levantamiento y registro de tales sitios y posteriormente su trabajo de excavación.
Jiménez destaca que las colecciones osteológicas permiten reconstruir parte de la historia
biológica y cultural del hombre, ya que los huesos son archivos biológicos y culturales, a
través de ellos podemos conocer algunas de las huellas de lo que hizo y fue un hombre.
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Antropología
En el simposio también se presentaron los estudios hechos a 200 muestras de polen fosili-
zado de sedimentos de una localidad del Estado de México, centro del país mexicano, donde
en la década de los 70 se hallaron vestigios humanos de hace 20 mil años.
Estos análisis permitieron recrear 40 mil años de vida de la Cuenca de México y conocer
tres cambios climáticos que modificaron la flora y la fauna locales en el Cuaternario, el
último de período geológico.
Lauro González aseguró en la conferencia La vegetación del Cuaternario en la Cuenca de
México que “en esa era (32,000-13,000 a.C.) cactáceas, pinos y zacates” alimentaron a los
herbívoros que llegaban de Estados Unidos e iban colonizando el altiplano mexicano.
González, biólogo de la Escuela Nacional de Antropología e Historia de México, informó
que algunas especies animales de ese período fueron “berrendos, camellos, bisontes, caba-
llos y tuzas”.
En la ponencia Los yacimientos en la sierra de Atapuerca, el investigador ibérico Carlos
Lorenzo fechó en un 1.2 millones de años los restos humanos más antiguos de Europa, halla-
dos este mismo año cerca de la ciudad española de Burgos. Hasta hace poco, se consideraba
a otras osamentas, también halladas en España, como las más antiguas de Europa con 800
mil años.
“En uno de los yacimientos, Sima del Elefante, localizamos una mandíbula con dientes
y la falange de un dedo meñique”, dijo Lorenzo, investigador de la Universidad Rovira i
Virgili de Tarragona, y agregó que el método del carbono 14 permitió dar una fecha.
En declaraciones a la agencia DPA, el organizador del evento y antropólogo del Instituto
Nacional de Antropología e Historia (INAH), Concepción Jiménez, dijo que en el simposio
“los asistentes pidieron descentralizar y compartir las teorías desarrolladas en el orbe sobre
los primeros grupos humanos en América”.
Para lograrlo, agregó, se creó la Red Latinoamericana de Orígenes, que permitirá intercam-
biar información y homologar los conocimientos sobre ecología, prehistoria, antropología y
paleontología. En ella participan el INAH y la Universidad Nacional Autónoma de México
(UNAM), así como las universidades de Buenos Aires, Cambridge y Tarragona, entre otras
instituciones.
Patrimonio
E l reto inmediato que enfrenta Cuba para la conservación de sus edificios históri-
cos son los embates de la naturaleza, por lo que no descarto que en los próximos
años se realicen construcciones para reducir los daños de los huracanes, señala el
historiador Eusebio Leal Spengler, quien desde hace varias décadas es el responsable
de la restauración del Centro Histórico de La Habana, trabajo que ha merecido reco-
nocimiento internacional.
Tan sólo en las semanas recientes dos
huracanes, Ike y Gustav, llegaron a la
isla caribeña, y obligaron al desalojo de
2 millones de personas en todo el país y
3 mil personas sólo en La Habana Vieja,
indicó el director del Museo de la Ciu-
dad, en un correo electrónico enviado a
La Jornada en respuesta a la solicitud de
informes sobre los daños causados por los
dos meteoros.
Sin embargo, añade el investigador, “la capacidad organizativa del pueblo cubano
ha minimizado los daños a las vidas, pero no así a la naturaleza doblegada por fuerzas
terribles, el deterioro es inmenso. En la parte histórica, agravios mínimos”.
Leal Spengler visitó México recientemente para ofrecer una conferencia magistral en
la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México
(UNAM), acerca de su trabajo de restauración de edificios en el casco viejo de la
Patrimonio
capital cubana.Un sueño que, dijo, “comenzó cuando tenía 17 años” y que ahora ha
convertido inmuebles que estaban en ruinas en hoteles, escuelas, comercios, casas
habitación, centros de salud mental y para la tercera edad, e incluso está yendo más
allá de la ciudad antigua para trabajar en otras zonas, como El Vedado.
La conservación del patrimonio “es el fruto de la cultura. La Revolución sola es hija
de la cultura y de las ideas, como dijo Fidel (Castro), y es verdad. Se necesita cultura
para que los gobiernos se interesen en la conservación de su patrimonio. La cultura
no es sólo conocimiento, es la sensibilidad ante los grandes problemas humanos.
“La cultura es poner el corazón cerca del latir popular. La cultura no es solamente
lo que está edificado, sino lo que está dicho, lo que está escrito, lo que flota en el aire
como una noción del bien, pienso que eso es muy importante.
“Es un poco la búsqueda de una ética universal que coexista con todos los seres
humanos y que nos permita creer que la utopía es posible.”
Don Eusebio creyó en esa utopía desde muy joven y, recuerda, “nadie creía en lo
que estaba haciendo; me veían caminando por la calle jalando un carro con una viga,
la gente decía que estaba loco. Siempre he dicho que en mi país y en otros lugares el
primer reconocimiento al talento aplicado es que te digan que estás de remate, sobre
todo cuando inmediatamente después dicen: ‘sí, pero es muy trabajador’”.
La charla con los estudiantes de la UNAM se volvió una confesión: tuvo que dejar
la escuela cuando tenía aprobado el cuarto año de primaria. “No pude volver a la pri-
maria, ni a la secundaria ni fui bachiller; tuve que limpiar cristales de automóviles y
limpiar casas”, pero al llegar la Revolución se abrieron escuelas para los trabajadores,
circunstancia que aprovechó, y después continuó estudiando de manera autodidacta
hasta que, un examen especial, le permitió cursar la licenciatura en historia. “A partir
de ahí, todo”.
Desde 1968, Eusebio Leal Spengler se encarga de la Oficina del Historiador de La
Habana; desde 1981 es responsable de la restauración del Centro Histórico, que en
1982 fue declarado Patrimonio de la UNESCO.
En 1990, dijo en la conferencia, “el Estado le dio a la institución y en un decreto, en
medio de la más profunda crisis que vivió el país, la capacidad de poseer patrimonio,
Patrimonio
es decir, le dio bienes patrimoniales, edificios del gobierno, bienes de manos muertas;
la municipalidad lo hizo igual, de tal forma que se creó un fondo inmobiliario para
esto. El Estado concedió un préstamo inicial de un millón de dólares, que para mí
era una fortuna –nunca había visto tanto dinero–, que años después convertimos en
tres y después en 110 millones, del cual de una forma fuimos creando, comprando
edificios en ruinas.
“En la medida en que el proyecto fue diseñándose fueron surgiendo dos cosas: el
patrimonio cultural es la primera línea de sucesión de todo lo que se trate; y, la segun-
da, crear un plan maestro para diseñar el uso de suelo. A partir del censo, conocimien-
to, planificación, crear un orden jurídico para el Centro Histórico con ordenanzas
nuevas, con una capacidad de administrar viviendas, no supliendo la autoridad del
gobierno local. “Hoy nosotros financiamos al gobierno local, es decir, que la Oficina
del Historiador, mediante sus 16 hoteles, 75 comercios y otro tipo de actividades que
Patrimonio
son de origen público tienen la posibilidad de tomar esas actividades, que son audi-
tadas por el Estado pero no van al Estado, sino que nosotros mismos podemos hacer
la planificación de nuestra inversión.”
La Oficina del Historiador debe, por ley, ayudar a la comunidad, así que se crean
escuelas nuevas y centros para minusválidos, enfermos, etcétera; cuenta además con
una emisora de radio, una editorial propia, una revista, un periódico digital. “Es decir,
una pequeña ciudad-Estado griega utópica”, indica Leal Spengler.
Se han realizado trabajos de restauración en lugares como las plazas de Armas o
la de San Francisco, edificios que estaban en ruinas son ahora museos, como el de
Ciencias Naturales, de Arte Nacional y de Arte Contemporáneo, o centros educativos
como en el que ahora se imparte la carrera de gestión y preservación del patrimo-
nio cultural (en ese sitio se encontraba un edificio histórico que fue demolido para
construir un helipuerto en 1957 y ahora se reivindicó su función) o aquellos en los
que se enseñan oficios, como carpintería y herrería; el Café de la Marina, la Plaza
Vieja y el Barrio Chino. Edificios ahora convertidos en salas de conciertos, oficinas,
escuelas, viviendas, o un inmueble del periodo Eiffel de 1885 que albergará un teatro,
centro de artesanías, cafetería y juegos infantiles; o un centro de salud mental para el
tratamiento de enfermedades que se adquieren por adicción; escuelas de ballet o de
gastronomía.
“Este proyecto se sustenta en la capacidad económica del Centro Histórico que
genera recursos mediante el turismo y el comercio, que son entregados automáti-
camente a la restauración. Quiere decir que la Oficina del Historiador gestiona el
proyecto, lo sueña, lo diseña, lo construye, lo administra.”
Con estos trabajos “queremos asegurar que tengamos ese orgullo de humanidad; no
el orgullo aldeano que cree que la aldea es el centro del mundo, sino ese orgullo de
considerar patria a la humanidad, de sentir como dolor cualquier dolor ajeno, de que
lo que hacemos modestamente pueda servir como una motivación, pero sobre todo
recuerden que no hay futuro sin pasado”.
Fuente: La Jornada/ Editado por el Correo
Reseña
Revista Claroscuro
por Mariano Flores Castro
El Correo de las Culturas del Mundo agradece el envío del sexto número de la revista anual
Claroscuro, aparecido en diciembre de 2007. Se trata de un logro importante no sólo por
la indiscutible calidad de sus contenidos sino también por el rigor y la perseverancia que
aseguran su continuidad. ¿Cuántas revistas con decoroso diseño, una clara política editorial
y buenos propósitos naufragan tras su primer o segundo número? Éstas, digamos desde un
cauteloso pesimismo, son incontables. La Internet es una aliada y a la vez una adversaria
de la creación-circulación-consumo de este tipo de ofertas culturales impresas, marginadas
como están de los mercados del “bestsellerismo” y la literatura volátil —oficial o ficcional.
El espacio pensante creado por Cristina de Bernardi y sus colaboradores resulta ser un
santuario intelectual para quienes conciben la cultura como un vasto cosmos no limitado a
las llamadas bellas artes y las letras. En Claroscuro hallamos enjundia, ideas defendidas con
ambos lados de la masa encefálica, dudas compartidas, polémicas vigorosas, razonamientos
inéditos, erudición profusa, sensibilidad social, búsqueda de la equidad y, en fin, reflexiones
serias sobre el concepto de identidad relacionado con la mundialización. Valioso tiempo se
ahorrarían los filósofos en su tránsito incesante por las ideas sobre el hombre si leyesen esta
publicación, modesta y prodigiosa a la vez.
En esta entrega dedicada a analizar la relación entre Identidad, Diversidad y Globalización,
Claroscuro rinde homenaje póstumo a Edgardo Garbulsky, un brillante pensador argentino y
universal, antropólogo, catedrático y promotor de la dignidad de hombres y mujeres.
Entre las colaboraciones destacamos las de dos conspicuos mexicanos: Héctor Díaz
Polanco y Rodolfo Stavenhagen. El primero se ocupa de analizar lo que él llama etnofagia,
término que “expresa el proceso global mediante el cual la cultura de la dominación
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Reseña
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Reseña
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Reseña
e identidad: algunas cuestiones sobre la comunidad gitana rom, de Pena Celina, así como
cuatro reseñas bibliográficas de crítica pertinente y aguda.
El contenido de esta entrega de Claroscuro no tiene desperdicio, por lo que sería deseable
que apareciera también en formato digital en Internet. Ello demuestra, por un lado, que no
todas las posiciones críticas respecto al estado pluricultural que guarda el mundo provienen
de Estados Unidos y Europa; y por el otro, que el vigor intelectual de Latinoamérica ha
dejado de ser un archipiélago inconexo de científicos sociales.
Entre libro y revista, Claroscuro escudriña en las diferentes aristas del debate sobre la
diversidad cultural del mundo, los procesos sociales (marginación, migraciones, relación
Estado-individuo, hegemonías pretéritas y presentes, conflictos étnicos y de género, etc.),
la antropología cultural hoy, la educación superior, los derechos humanos y la tan llevada y
traída globalización, entre otros temas candentes de nuestro tiempo. A seis números de su
primera aparición, cabe preguntarse: ¿cuándo contaremos en México con una publicación
internacional de semejante calidad y, sobre todo, con visiones ampliamente documentadas
sobre la proteica condición humana en la lucha por su plenitud? La oportunidad está a la
mano y el Centro de Estudios sobre la Diversidad Cultural (CEDICULT) del Museo Nacional
de las Culturas (INAH-México) cuenta con las credenciales suficientes para aprovecharla.
Hay quienes afirman que se han dedicado demasiados esfuerzos y recursos a apuntalar
la idea según la cual “como México no hay dos” y Mesoamérica es el ombligo del mundo
antropológico e histórico, una tendencia explicable en los inicios del Estado nacional y
convenientemente aprovechada por los gobiernos posrevolucionarios, pero que, como todo
indica, se encuentra en franca crisis. Por eso, la posible colaboración entre el Centro de
Estudios sobre Diversidad Cultural (CEDCU) de Argentina, y el CEDICULT de México, se
vislumbra edificante y promisoria en más de un sentido, ya que nos ayudaría a abrir la ostra
cognoscitiva dentro de la que hemos vivido tanto tiempo.
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Hallazgo
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Exposiciones
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Culturas
V isitar la tumba de Tutankamón, recorrer el Templo de Luxor, subir y bajar las pirámides
de Giza y admirar la Gran Esfinge era, hasta hace unos años, simplemente un sueño
para muchas personas. Hoy, acceder a estas maravillas, declaradas Patrimonio Mundial, es una
realidad para los mexicanos, sin la necesidad de realizar largos y cansados viajes, ni grandes
desembolsos económicos.
Sin más equipaje que el interés por descubrir a una de las culturas más antiguas de la
humanidad, el público podrá realizar un viaje virtual por el kiosco interactivo Egipto Eterno,
donado por la empresa IBM México, al Museo Nacional de las Culturas (MNC). El espacio
multimedia fue inaugurado por autoridades del Instituto Nacional de Antropología e Historia
(INAH), el embajador de Egipto en nuestro país, Aly Houssam El- Din El Hefny, y el director
de Relaciones Externas de la empresa transnacional, Jesús De la Rosa Ibarra.
En conferencia de prensa, el coordinador nacional de Difusión del INAH, Benito Taibo,
resaltó el hecho de conocer otras culturas como espejo para vernos y reconocernos de una
mejor manera. Egipto Eterno es un claro ejemplo por los puntos de coincidencia entre la
cultura egipcia y la prehispánica que existe en México; hizo énfasis en el espacio y tiempo
en que tecnología y cultura han logrado encontrarse en beneficio de la sociedad y del cono-
cimiento histórico.
El recorrido virtual es resultado de los esfuerzos realizados por el INAH, la República
Árabe de Egipto, por medio de su embajada en México, y el fomento cultural que realiza
IBM, en ocasión del 50 aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre la
nación árabe y nuestro país.
De manera paralela, se inauguró también la muestra de papiros El papel de lo Divino. El
uso del papiro en el antiguo Egipto, la cual, se anunció, fue donada por el gobierno de Egip-
to al MNC.
Leonel Durán, director del recinto, comentó que el espacio museístico dedicado a la cultu-
ra egipcia será sometido a mejoras, enfocadas a brindar una mayor y mejor comprensión de
esa antigua civilización. Resaltó la importancia de contar con expresiones artísticas de una
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Culturas
de las culturas milenarias por excelencia, al tiempo que agradeció la donación de los más de
40 papiros que integran la exposición.
El recorrido es una fusión de información cultural con medios audiovisuales de vanguar-
dia, donde se representan, a través de animaciones y menús interactivos, los datos históricos
más importantes de la cultura egipcia. Se compone de un sitio web que muestra un mapa,
acompañado por una línea del tiempo, los cuales guiarán a los visitantes por la muestra.
Además, el espectador puede admirar las obras de arte y explorar los lugares de Egipto
representativos de su cultura. Uno de los principales objetivos es ofrecer una visión clara,
sintetizada y concisa de los elementos característicos de esa antigua civilización.
El embajador de Egipto en México, Aly Houssam El-Din El Hefny, mencionó que la
instalación de estos kioscos sobre la cultura egipcia en distintos países del mundo es muy
importante, pero que en el caso de México resulta de mayor relevancia, ya que ambos países
poseen expresiones culturales en común, que los unen y los hermanan.
“Mi gobierno agradece y reconoce la labor realizada por el Conaculta, específicamente
del INAH, en favor de estrechar los lazos culturales entre nuestras naciones; la sociedad
mexicana, especialmente, es una de las más sensibles a los temas culturales, su capacidad
de apreciar y disfrutar el patrimonio de otros países es inigualable e incomparable”, agregó
el diplomático.
El proyecto involucra disciplinas como la arqueología, antropología, epigrafía e historia
del arte. La curaduría está diseñada para enfatizar el contexto histórico y social del antiguo
Egipto, así como los rasgos iconográficos y epigráficos, para brindar al público una idea
clara de los contenidos y permitirle una visita dinámica, amena y reflexiva.
“Estos kioscos interactivos están dirigidos a todo público, principalmente a los niños y
jóvenes, ya que en el futuro serán ellos los encargados de dar continuidad a estos proyectos
y los principales encargados de la conservación del patrimonio cultural no solamente de sus
respectivos países, sino del mundo”, resaltó El Hefny.
Según palabras de Jesús De la Rosa Ibarra, director de Relaciones Externas de IBM Méxi-
co, el visitante podrá realizar recorridos en tercera dimensión, con giros de 360 grados de
los objetos animados que se representan en las pantallas, “aderezados” por un desarrollo de
gráficos diseñados con lo último en tecnología aplicada para tales fines.
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Culturas
Egipto posee cerca del 33 por ciento total del patrimonio cultural de la humanidad, por lo
que tejer redes de cooperación entre su gobierno y empresas particulares, además de realizar
intercambios con otras naciones, ha sido una constante enfocada al uso y aplicación de nue-
vas tecnologías; el desarrollo de nuevos programas virtuales para recrear los sitios arqueoló-
gicos del mundo, permitirán que
permanezcan más tiempo.
Uno de los principales retos
para las naciones que poseen un
amplio legado cultural, coinci-
den los especialistas, es la con-
servación del mismo, debido a
los altos costos para realizarlo
y las dificultades que provocan
aspectos climáticos y daños oca-
sionados por el hombre, entre
otros. La tecnología es una solu-
ción y el INAH la adapta a las
necesidades del patrimonio cul-
tural mexicano.
Una vez inauguradas las dos
exposiciones, se llevó a cabo un recorrido por las mismas, encabezado por Alfonso de Maria
y Campos, Director General del INAH, y Aly Houssam El-Din El Hefny, embajador de Egip-
to en México, para dar testimonio del legado virtual que complementa la sala del Museo
Nacional de las Culturas dedicada a la cultura egipcia.
Encontrarle no ha sido fácil. Pero estaba ahí, a la vera del mismísimo Philippe de Montebello
desde hacía 13 años. El nombramiento de Thomas P. Campbell como nuevo director del
Museo Metropolitan de Nueva York cierra ocho meses de suspenso que han mantenido en
vilo al mundo del arte de la ciudad desde que el legendario Montebello, que ha dirigido esta
icónica institución durante 31 años, anunció en febrero su intención de retirarse.
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Museos
Campbell es británico y tiene 46 años. Experto en tapices europeos, trabajaba como comi-
sario dentro del Departamento de Escultura y Artes Decorativas del Metropolitan desde
1995. Supervisaba también el Antonio Ratti Textile Center, donde se conservan las 36,000
piezas textiles de la institución. Con este perfil, no precisamente cercano a los fuegos de
artificio, fue elegido el pasado martes por el Consejo de Fideicomisarios del museo y tomará
posesión de su cargo en enero.
Su puesto era sin duda uno de los más codiciados entre los gestores culturales del planeta,
aunque asumirlo tampoco será fácil. Montebello deja un complejo legado en el que se mez-
clan ambiciosas exposiciones de calidad con taquillazos culturales y adquisiciones agresivas
que le han convertido en un modelo tan admirado como difícil de emular.
Fundado en 1870, el Metropolitan es el mayor centro artístico de Estados Unidos y alberga
una de las mejores colecciones de arte del mundo, con más de dos millones de piezas que
abarcan 5,000 años de historia. Su presupuesto anual es de 200 millones de euros.
El nombramiento de Campbell ha dejado boquiabierto a más de uno. En los últimos
años, para dirigir museos, parecía valorarse más un buen administrador con capacidad para
atraer millones que un erudito con amplios conocimientos artísticos capaz de conciliar la
parte comisarial con la económica. “En mi opinión es la elección acertada. Campbell es un
excepcional historiador del arte con experiencia probada y con una capacidad de juicio que
encaja perfectamente en la larga tradición de líderes del Metropolitan que han surgido desde
las filas comisariales del propio museo” declaró Philippe de Montebello el martes tras su
nombramiento.
Campbell ha batido incluso a su propio jefe de Departamento, Ian Wardropper y también a
Gary Tinterow, responsable de arte del siglo XIX y XX. Ambos nombres se habían barajado
entre los candidatos al puesto.
Fuente: El País/ Foto: http://mimsstudios.files.wordpress.com
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Directorio
DIRECTOR GENERAL
ALFONSO DE MARIA Y CAMPOS CASTELLÓ
SECRETARIO TÉCNICO
RAFAEL JULIO PÉREZ MIRANDA
SECRETARIO ADMINISTRATIVO
LUIS IGNACIO SÁINZ CHÁVEZ
COORDINACIÓN EDITORIAL
MARIANO FLORES CASTRO
correodelasculturas@gmail.com
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