Sunteți pe pagina 1din 52
‘TITULOS PUBLICADOS EN ESTA COLECCION Elnito que enloquedt de amor Etvigo yelmar Demian Elbo Elanseiso ‘Asihablabe Zaratusra Sub tera ‘Mor Bodas de songre stud en escaata Romeo y Jit ‘manual de Carero eran Piro yo El detensortene la palabra Nada mence que do un hombre Laddsee Corazéa Proginial a Alia ‘Cuonios dela sah Col Blanco Medio a palos Erhorére qu clculaba Mucha Dido Hombrectos Antone ‘sino Elare dotaquora jardin secrete Homict Lavida es svete Ppt piemas largas digo Rey {a grana do ls animales ‘Sidthara Nara y Goldundo, Bedranjoo Else ‘Sub sole Nietla Nema ‘Ginoo peptas de naranja Diloges de Platt Maia El Prncpito La metarorsis : El fentzsma de anterils- Evniberoryla rosa Lallada Marin Rivas sa de muferas cantar de fo Oi llamado de fa soba €lenferme imaginaio El daro do Ara Frank Frankenstein Madame Bovary Muerctas Werte: crimen y castigo ‘homie invsible proceso er Juan Teno Namraciones exracrdnarias Pram encadenado «Veraneando en Zapallar» y seleccidn de cuentos Eduardo Vaienzuela Olivos Registro de Propiedad intelectual Inscripeidn N" 131.853 ISBN. 956818744546 2 Edicién: abril 2003, Diseno de portada: José Luis Orellana Composicién y Diagramacién: Alba Editores Impreso en Chile en ios talleres de Alba Editores ‘Veraneando en Zapallar Eduardo Valenzuela Olivos* ACTOUNICO La.escena representa el patio de la casa de don Procopio Rabadilla. En primer término, a ambos lados, puertas que ddan acceso a habitaciones interiores. Alegran el patio nu- -merosas matas de zapallo con sus frutos, destacandose vi- siblemente, ‘Allevantar el tel6n, don Procopio esta sentado leyendo’ atentamente el diario, mientras doa Robustina examina ‘unos figurines de modas, junto a una mesita de bambi Hay varias sillas en amable desorden. ESCENA PRIMERA, Procopio y Robustina, Procopio: _(leyendo un dari). "Se encuentran veranean doen Zapalla el talentoso abogado don Pro- copio Rabadilla, su distinguida esposa dofia Robustina Jaramillo y sus encantadoras hi- jas Amparo, Consuelo y Esperanza. ;Que tal el parzafito! Robustina: Procopio...no me saques de mis casills. En Veraneando en Zapallar y alecn de cuentos 3 Robustina: Procopio: Robustina: Procopio: Robustina: lugar de agradecerme lo que hago por pres- tigiar nuestro nombre... por asegurar el por venir de nuestras hijas... por darte brillo. St...ya lo tengo en I tela de mis trajes. Intentas burlarte de mi... Procopio vulgar, hombre intl, “Mujer, no me insultes, sino quieres que. Tnfame. Abogado sin trabajo. (sin hacerie caso.) Veraneando en Zapallar. ‘Afortunadamente no mentimos, porque este ‘timo patio de la casa ostenta unas hermo- «as matas de esa sabrosa legumbre. Claro. Muy justo. Muy natural. Qué habrian dicho las amistades si hubieran sabido que ‘nos quedabamos en Santiago? Eres insoportable mujer, con tus pretensio- nes ridiculas. Tan bien que estaria yo aestas horas, déndome un paseo por las piscinas. Alisbando alas olas..a las bafista. Site co- 1n02¢0, Procopio, Si sé que eres uneterno ena- morado. Exageras, mujer. Lo que hay es que soy afi- cionado a la geometria ya estudiar en el te- reno las rectas, las curvas, los catetos y las hipoteniusas. ‘Pues, si quieres estudiar matemética,no tie- nes mas que encerrarte en tu cuatto. iAy, la suspirada libertad! Y se dice que las ‘mujeres no mandan. Yo no sé qué mas pre- tenden las sefioras con sus teorias feministas. Nosotras somos las martes del deber. 'Y nosotros los martires para pagar las cuen- tas de la modista, del lechero y de todo. Veramcendoen Zapalary selccion de cuens iAN\, esta vida es horrible, desesperante. (En fla voz y paseéndose a grandes pasos). ;Cémo encontrar consuelo, cémo hallar una espe- yanza,en dénde buscar ampatoa esta critica situacién ESCENA SEGUNDA Dichos, Amparo, Consuelo y Esperanza. Amparo __(entrando): 2Nos llamabas papa? Consuelo (entrando): Aqui estamos Esperanza (entrando): {Qué deseas? Procopio(primeroextratado,y recordando después):-Ab, de veras. Me olvidaba, hijas mias, que os Ia mais Amparo, Consuelo y Esperanza, aun- {que precisamente sois lo contratio de e508 dules nombres. Amparo: De qué conversébais? Consuelo: Esperanza Consuelo Procopio: Veraneendo en Zapalar y seleccidn de cuentas De que ha de ser, hijas mias? De nuestra si- tuacién; de que tu padre no cesa de protes- far por el encierro Voluntario a que nos he~ ‘mos sometido para guardar las apariencias. Es una situacién atroz Horible. : {don Procopio): ;Como no lograste paps, jun- tar dinero para salir las playas? Porque los juicios son pocos. Yala gente no litiga como antes, Ya se esté convenciendo dela verdad de que “més vale un mal arre- glo que un buen pleito”. ¥ porque finalmen- te todo os lo habéis gastado vosotras en tra- jes, zapatos, bails, tc. Amparo (escandalizada):;Fas ofdo, mamé? Robustina: No le hagas caso. Por él ojala salierais voso- tras con trajes de percal, osin trajes. Vuestro padre no sabe de lujo, ni de distincién (des- preciatioumente). Desciende de la familia de Jos Rabadilla; mientras que yo soy noble y de antigua estirpe... (con micha dignidad y ‘orgullo). Soy de los Ja-ra-mi-llos.; Entre mis antepasados se encuentran un general y un obispo. Seria pedir peras al olmo pedirle a tu padre distincién, chic, savoir faire, con- fort. No pertenecerd jamas ala dite... Procopio: _zQuieres traerme el diccionario, Amparo, arair traduciendolo queme dice tumadre? | Esuna suerte que me insulte en francés, por ‘que ast no me entero inmediatamente... ESCENA TERCERA Dichos y Luchit. Luchito —_(entrandoy :Hay dificultades? Procopio: Si, hijo mio tu made. Robustina: Tu padre era el que Luchito: En fin, la paz se ha restablecido. Me alegro. Procopio: _Estabas estudiando? Luchito: 5i,papé. Inglés. Es dificil, pero ya me va gus- tando. Procopio: Muy bien. Es un ramo iitil. Sobre todo para entenderse con los gringos. Ti sabes que siempre andar como rubes por todas partes. Robustina: _ zY cémo andan los repasos de geogratia? Luchito: Te diré. De la geografia no me preocupo Veranewnde on Zaallor voc de cura: Consuelo Amparo: Esperanza: Consuelo: Amparo: Esperanza: Procopio Robustina: Luchito: rmuicho, porque se esté modificando constan- temente. (siguiendo la comoersacin que ha mantenido con sis hermanas en unt grupo apart, en primer te. mimo): Qué serd de Carlos? eX de Enesto? fs terrible no tener noticias de nuestros no- De seguro que iran a Zapallar por vernos. 2 alno encontramos se pondrén a cortejar otras? Por Dios. No quiero figurarmelo. (Siguen con- zersando entre si, animadamente). (a Lucho): Es una vergitenza. Reprobado en tes examenes. Y en cada uno con tres ne- SRubiera sido con una solamente habrias ‘pasado bien. Lo mismo digo yo. Mi ideal habria sido salir ‘con una sola negra... (Aparie). Con una ne- {gra picara: la Teresita que me quiere mucho. En fin, echaremos un vistazo a la ciudad. Treparemos al observatorio (Trepaen la esca- la que esta apoyada en el muro.) Caracoles, (Quées eso? {Una humareda en la casa veci- (emeroso): Deja ver (sube a la escala.) {Dios ‘mio, lo que faltaba: un incendio! Habré que ir poniendo en salvo los muebles. iAy, Dios mfo! ‘Ampéranos, Virgen de los afligidos. Qué situaci6n mis ridiculat (a Luchito: Corre, Grta. Llama a los bomberos. Veremeendoen Zapalla y elecin de cuentes 7 Robustina: Todos: Procopio: Robustina: Procopic Robustina: Procopio: Amparo: Consuelo: Esperanza: Luchito: Robustina: Pero mujer, qué pretendes? iada, que no podemos salir. Imperiosamen- ts Quenosilenadie Pero gests loca, mujer? ‘Nosotros no estamos aqui. Estamos en Za- pallar, zentiendes? Sila casa se quema, nos quemaretos en ell io me agrada la perspectiva. Pero, que hacemos? Hay que pensar algo. Yo me siento mal. Yo protesto. iChits! Nina palabra. El ridiculo seria es- antoso. A ver Luchito, sube al observato- Foy vesicundeelincentio. io, el humo disminuye. Parece que el fuego ha sido sofocado por los propios moradores. IGedes Dasma Perm Respiro. San Antonio Bendito ha hecho un milagro. No. Ha sido San Expedito, santo que hace las cosas ligerito. Yo le hice una manda, Yyo también, ‘Yo un paquete de velas para su altar. Yyootro. Bueno, papito, Danos la plata para comprar las velas, oe Pero entonces, qué gracia tiene que ustedes haganla manda? * Es que nosotros ponemos la intenci6in, pero ‘ti pones la plata. Veraneandoen Zapalar y seleccgn de cuentas Lo de siempre: yo soy el eterno pagador. Bueno, nifias. Ya se est oscureciendo y es conveniente que os dediquéis a hacer vues- tras labores. (Se xan Amparo, Consuelo y Espe- ranza,) (A Luchito)‘Ti, estudiante reprobado, fa tepasar tus libros. A ver cémo sales en ‘marzo. (Se va Luchito.) (A su mujer): Ta que- rida Robustina, a zurcirme los calcetines. En ‘estos tiempos nose pueden comprar nuevos. Y yo, me largo ala calle. Procopio: Robustina: Procopio: Claro mujer. A comprar provisiones para él dia de manana. De veras, me olvidaba, Bueno. Puedes salir ro vuelves luego, Ah, claro! Anda, tréeme el, sombrero y el sobretodo. (Se aa Robustina,) Robuisti Procopio: ESCENACUARTA, Procopio solo. Luego, Robustina. (colo): Al fin. Voy.a respirar aire, a estar un rato en libertad, lejos de la férula de esta rei- na del hogar. Compraré las provisiones de costumbre, las dejaré encargadas donde un ‘amigo de confianza en casa de Jerez:, en se- sguida iré a echar una modesta cana al aire y. a beber tunas copitas con unos buenos ami- {gos que estén veraneando como yo. Este Je- rez es muy diablo. Anoche me facilit6 para los efectos de esta aventura una barba ppos-tiza, ton la cual podré andar tranquilo, Procopio Verancondo en Zapallary selecciéndecuents ° sin que nadie me reconozea. (La saca del bol sillo laexamina,) Por cierto que no le he di- cho ni una palabra a mi mujer de este dis- fraz. (Heceaspavientos y habla mientras oculta Ia barba en su bolsllo) Robustina | (entrando y sorprendiéndolo): :Qué es es0?. {Que estés hablando solo? {Qué significan ‘6505 movimientos? Procopio: Problemas, hija mia. Problemas... Robustina: Ah! Procopio: (después de ponerse el sobretodo y l sombrero): Bueno, mujer. Hasta luego. Robustina: No tardes zeh?... Y mucha discrecién. Procopio: _Pierde cuidado. Hasta luego, esposa mia. Robustina: Vélgame Dios. Lo que cuesta mantener el, prestigio de nuestra posicién social. ESCENA QUINTA Robustina y Amparo. Amparo, (entrando): -Y papa? Robustisas Salis, hija mi Amparo: jQuécontrariedad! Yo tenia que hacerle unos _-encargos y.. Robustina: Los dejas para mafiana, entonces. No hay. ms remedio. Amparo: ;Qué rabia me da no poder salir a la calle, pasar al correo, ver si hay cartas! Robustina: {Carta de quién? Amparo: De las amigas, naturalmente. (Aparte.) Y si hay alguna del novio, tanto mejor. ;Quéser4 de Emesto? 10 Veraneando em Zayalar 9 selccion ecu Robut ‘Amparo: Robustina: Amparo: Robustina: Amparo: Robustina: Amparo: Robustina {Cémo Emesto? Noes tunovio Agamensn? Nowe : Como as? Explcae, porgueyofrancamen- sto me doy cuenta Ge extol cambios tn repentinos- or lo demds ees poco exparst tezcon ta made, high es eae Best? eDénde lo conociste? eased ios Gomez, Tu sabes que todes fos martes tenen sus reuniones, Pues. en tuna de ells fa presentada a €. Simpatiza moven lac Esnsmao my gah i fe muy bien, esta empleado en un ministe fo En fin esun excelente partido. Yonohe {Querido decite nada, pore no tena segue Mga desusintencione, nisi todo ba a e- Glciaea simples conversacions, Per0 Pa- rece que Emesto piensa seriamente- Mealegro mucho, hip mf, Pero Agamencn {Quéita a decir Agamensn? itd, zQue puede decir? No me gusta ese Fombse. No fene dénde caerse mero. Es ‘muy antipitic.Y luego el nombre que He- ar tan fargo y tan feo: A-go-me-n6n. Hi-ganeel favor mam, dene hablarme mas deat Pero de todos modo, habia que dare algue haexplicacién, Ninguns, mad. Porque has de saber tam- Eiengque atu candidato Agamendn se le ha ‘visto cortejando a la-Rosa del Campo, a la Violeta del Valle aa Hensiadelos Rios ala Margarita Montes al (terrumpbnol Basi, ja mia. Seve que ‘Veraneando en Zapallar selecn de cuents n se individuo no es un hombre: es un pica- flor. Es un péjarode cuentas. Has hecho bien cen darle calabazas. ESCENA SEXTA Dichos, Consuelo y Esperanza Consuelo, (enrand):No, siquin las ha dado ha sido Robustina: —{Cémo es eso? jEstabas escuchando? Eso es muy fe. Esperanza (a Consuelo) Fallas a la verdad. He sido yo la : que Io ha despedido. No soy como ti, que desesperas porque no encuentras un novio a tu gusto. A mime sobran Consuelo (irénicamente): Las ganas. Robustina: Pero, qué barbaridad. Parece que los senti- ‘mientos fratemales desaparecen al tratarse de estos asuntos Esperanza: Es que son muy delicados Amparo: Bueno. Basta. Sera como ustedes quieran, pero es el hecho que yo seré la primera en contraer nupcias. Porgue lo que eres ti (rf- riénadose a Consuelo) no te fies de tu cadetito. GTe da envidia? Léstima. Porque suponiendo que te fuera bien hasta la terminacién de sus estudios, - To que seria un milagro-, cuando ingresara alejército habria que pedir permiso para que se pudiera casar contigo. Son muchos trémi- tes. Hay que gustarle alos padres, a los her- ‘manos, alos tos, a todos los parientes, y to Consuelo: Veranoundoen pala y seleccon de cues Robustina: Esperanza: Amparo: Consuelo: Esperanza: Amparo: Esperanza: Consuelo: Robustina: Consuelo: Verineendoen Zpalar y selecn de cuentos davia hay que gustarle al gobierno. Bs terri- ble. Podfas aprender de vuestra hermana menor. Tiene mas sentido practico. Si, mama. Yo no deseo jévenes arrogantes, guapos, 0 con vistosos uniformes. Prefiero lun sefior de edad. iQuéhorror! {Qué atrocidad! Un seftor de edad pero con dinero, que me dé Iujo, que me dé gusto en todos mis de- seos, que me compre joyas,trajes y auto. No desespero encontrarlo. :Perono te atrae el amor, la juventud, la sim- ppatia que emanan de las miradas carifiosas, fa emocién que experimentames al ver de improviso al ser amado? Si. Todo eso es muy lindo, muy encantador, , ‘muy poético, Pero nose encuentza féciimente y, Sobre todo, a nuestro aleance. Un novio {ue sea al mismo tiempo joven rico e inteli- gente, yen la imposibilidad de encontrar las ‘cosas al gusto de una, opto por lo pricti-co, por tn sefior de edad que tenga dinero. Lo que desea ésta (sefialando a Esperanza) es quedar viuda, joven y con plata. Un partido ventajoso, como dicen los hombres. Bueno. Basta de charlas, ya descansar. Esta tun poco fria la noche, y no conviene estar al sereno. Facilmente'se puede coger un resfrio. Esta bien mama, Nos vamos (se an todas a sus habitaciones.) ESCENA SEPTIMA Luchito solo. Saliendo en puntillas de su habitacién y con et sombrero en la mano, en acttud de salir. Luchito: Nadie. No hay nadie afortunadamente. Lo que es yo, me escurro con todo sigilo. Estoy arto de inglés, de matemiticas y de geogra- fia. (Se va sin hacer ruido.) ESCENA OCTAVA Amparo sola, entrando pensatioa Amparo: ,Qué seré de Emesto? La tltima vez que lo Vi, fuea la salida de misa... Se oye rio en ef patio de una de las casas vecinas.) (Alarmada): 2Quién podré ser sino hay nadie alli ahora? (labré entrado algiin ladron?. ESCENA NOVENA Amparo y Ernesto. Emesto _(asomando arriba del tejado, por laensa vecina): Soy yo, Emesto. Amparo: Civlos jqué placer! Te-aqui?... Pero za qué se debe esta sorpresa? jQué vergiienza me da al mismo tiempo! Emesto: Amor mio, “a'Zapallar me difiste que te ibas”, ya Zapallar fui, No estabas. Entonces dije: “Bstaré en otro Zapallar..y, efectiva- ‘mente, aqui te veo. Amparo: Pero, emo... como has sabido? 1 Veranando en Zp y selec decent Emesto: ‘Amparo: Emesto Amparo: Emesto: Amparo: Ernesto: Por una casualidad. Verés. Rondaba frente a tu casa, imaginéndome verte en los balco- nes, fresca como una rosa y encantadora como siempre, cuando con gran asombro mio veo salir sigilosamente a tu hermano Luis; tate! me dije. Aqui hay gato encerra- do. ¥ como tocé la coincidencia que la casa ‘vecina estaba desocupada, aqui me tienes. Bueno, Emesto; perono vaya a verte alguien ‘enesa postura, con lo cual nos compromete- rias. Voy a abrirte la puerta de calle y con- versaremos unos pocos minutos con mis tranquilidad. (asustado). ;Ay! Qué es es0? ‘Que me parece que tiembla. De veras. Por Dios, bajate. Hasta luego. (Ernesto desaparece tras el teja- do) ESCENA DECIMA Amparo, Consuelo, Esperanza y Robustina Consuelo Esperanza: (entrnio) Ma. ram. Et temblando. [Dios mo, qué sto Amparo Luce. Salgarios aa calle Nova lncale no, Pornada del mundo. Yome siento mal. Las piemas no me sostienen Yparece que sigue todavia Verancendo en Zapalar selecdn de cuentos 6 Consuelo: Esperanza: Consuelo Amparo: Consuel Esperanza: Robustina Consuelo: ‘Con seguridad que va a venir otro remezén. ‘Nunca viene uno solo. Siempre me acuerdo del terremoto de... (asustadisima): No lo decia? ;Otra vez! ¥ con un ruido infernal, Corramos a la calle. Salgamos, si. (Llamando,} Lucho... Lucho. Parece que no esté. :Habré salido? (imperation): Bajad la voz, y estaos quietas. ‘Aptended de vuestra madre... (Apart), que tampoco las tiene todas consigo. zNo veis? Ya pasé (pequeria pause.) (Ea! A recogeros, nifias, que ya es hora de entregarse al repo- so. En cuanto a ese insubordinado de Lucho, ‘maiiana arreglaremos cuentas. Cualquiera duerme tranquila. Esta vida es insufrible, Basta de rezongos. Consuelo: Cualquiera encuentra marido con esta situa-cidn, Esperanza: Nadie quiere casarse. Robustina: Paciencla,hijas mias. Consuele: Buenas noches, mamacits speranza: Que reposes bien. Robustin: Lo mismo digo, hits, Hasta maiana, (Se ban primero Corisuelo, Amparo y Experanca por distintas puri; uego,Robusina ESCENA UNDECIMA, Amparo, sola Amparo: (Saliendo-de su cuarto y entrando a escena de 16 Veraneond n Zap skein de cuentas puntillas.): El pobre Emesto debe estar espe- randome, Voy a abrirlela puerta y charlare- ‘mos tn momento. En seguida vuelvo. ESCENA DUODECIMA. “Amparo y Ernesto. Emesto: Amparo: Ernesto: ‘Amparo: hits. Calladito. Que nadie se entre. Nadie, alma de mi alma... (le declara cémica- mente su amor). 2Y cuentas ya con algo para nuestra boda’, Guento con la muerte de mi tio y padrino Se- bbastidn, que, como no tiene familia y me pro- fesaun carifo entranable, me institiré su tini- coheredero. GY tendremos que esperar que fallezca para Ser realizados nuestros ideales.. Qué triste y finebre es eso! iLavida es asi filoséfcamente). "De la muerte nace a vida, en una constante renovacién. Gque seria largo explicarte.. porque los mi- Autos son preciosos. ¢Me quieres mucho, verdad? LY me lo preguntas, ingrato? Te amo locd- rente, Penso en tia todas horas.Suefiocon- tigo casi todas las noches. Qué suekas? Dime. Sueno que yo estoy toda vestida de blanco, fide frac, correctisimo,y frente anosots.. elsacerdote bendiciéndonos. Cincuenta au tomeviles lo menos, esperando afuera en la calle la salida de la concurrencia. Veraneando en Zapallar y elecin de cuentos vy Emesto: Yo sueftoo mismo, pero en una parroquia uml, (Aparc) Aste gasta menos. Amparo: Qué ocurrenca!Y gel qué din? Robustina (adeno: Asilio.. Amparo . Consuelo. peranza Amparo: Virgen santa, :Qué ocurrtd?.. Escondete aqul En seguidasaldrés, Yoteavisaré. Qu sari... Emesto se oculta entre ls planta). Tay, que sto! ESCENA DECIMOTERCERA. Amparo, Consuelo, Esperanza y Robustina, Consuelo (entrando): ;Qué ocurre? Esperanza (entrando): ;Oué pasa? Robustina (entrandorépidamente, con bata y grro de dor- mmr, presa de un verdadero nico): jas mis... algo terrible. No puedo hablar. ‘Amparo: Pero zqué sucede? Explicae, por favor. Robustina (con palabras entrecortadas) Sucede que hay ladrones... hay ladrones en la casa. Consuelo: Dios mio! Esperanza —_(asustadsima): Huyamos. Robustina — (prosiguiendo su relato): Un bandido...barbt- do y siniestro... quiso introducirse en mi dormitorio. Amparo: Qué horzor! Consuelo: _¥ zdénde ests? Robustina (desfllecida) No ost, hijas tias. No he teni- do fuerzas sino para salir fuera para llama Esperanza: Llamemosala policia 18 Veteneandoen Zapalar y seleccon de cues Robustina _(scbreponiéndose a su propia turbacién):'No. Eso no. Seria para que el ridiculo cayera sobre nosotras. Ustedes saben que no estamos aqui. iEntienden? Estamos en Zapallar, de mane- ta que si nos roban, debemos dejamos ro- bar. Amparo: Pero, mamé... Consuelo: Debemos hacer algo. Robustina: Sihubiera un hombre a quien acudir... ESCENA DECIMOCUARTA. Dichos y Ernesto Emesto —_(presentindose bruscamente, al ofr tas iltimas palabras): A sus érdenes, sefiora. Consuelo: jUy!,elladrén... (corre desesperada.). Esperan- za, huyamos. (Consuelo y Esperanza se van, dando gritos. Dovia Robustina cae desmayada en un sillon. Emesto no halla qué hacer, Amparo esté toda confundida). Emesto: Pero, Amparo mia zqué ocurre? ‘Amparo (sobresaltada): Ocurre que... hay ladrones en. ‘casa, y no hallamos c6mo expulsarlos. Esta- ‘mos solas. Toca la casualidad que Lucho y ‘paps salieron. ;Qué hacer? Emesto: Ante todo, serenidlad ..calma, yolo prenderé. ‘Amparo: Gracias, Emesto mio. Gracias. Robustina: (oolviendo en sO. ;Se fue el ladr6n ya? Emesto _(respeiuosamente):Senora Robustina _(cayendo nuevamente en el sillon): Por favor, no me mate usted. Verangendoen Zaplla y selecon de cuentos 1% Emesto: No, sefiora. Si no pieriso en mataria, usted std equivocada. Yo soy Emesto, que amo a ‘Amparo, y he venido aqui a salvar a usted ya los suyos de la audacia de los ban- doleros. 7 Robustina: {Es verdad, hija mia? Amparo: Si, mamacita. Es mi novio. Robustina: jOh, caballero! ;Cémo le podremos pagar este favor? Busque usted al ladrén y échelo fuera... sin que se entere la policia, sin que se entere nadie. 7 Emesto: Bien, sefiora. Acato sus érdenes. Voy a pro- ceder a registro de las habitaciones. Mien- tras tanto, ociltese usted con Amparo y no salga hasta que yo la llame. Robustina: Bueno. (Aparte.) Estoy mas muerta que viva. (Se van Amparo y Robustina.) ESCENA DECIMOQUINTA Ernesto, solo, Emesto: Lo malo es que no traigo arma alguna. (Se 0 registra los bosilles.) 2Y si el bandido lleva pifal?.. (Pause) Bal... nimo... resolucién. (Dirigiéndosea una pueriay retrocediendo,) Pero no, no me atrevo... ;Qué falta me hace mi revélver! Hay que tener presente que esta ‘empefado... mi amor propio, mi honor de ‘aballero. Debo, pues, afrontar la situacién. 2Qué hacer? La verdad es que yo, al salir de ‘asa, no me figuré el Ifo en que iba a meter- me. Pero, por ella, estoy dispuesto a todo. Moriré por ella como un paladin de los tiem Veraneendo en Zapallarysleccén de cuentas ‘pos heroicos. (Transicién). El escéndalo que Voy a formar el ladrén pretendeatacarme, yaa ver para contarlo, La verdad es que ten- gomiedo de penetrar en las habitaciones. Yo preferiria esperarlo aqui, en el patio. Aqui hay més cancha, mas campo para la cha. y para huir en caso necesario. Pero no, Huir ino. {Qué dirfa mi Amparo? Debo mostrar- te ante sus ojos como un valent. Venga, ies, como revélver improvisado, la lave ean easa, Con ella apuntaré al bandido, si se atreve a presentarse. ESCENA DECIMOSEXTA. Ernesto y Amparo Amparo: Ernesto: dLoencontaste, Emesto? No. Todavia no; pero estoy buscéndolo. Debe estar escondido sabes? Posiblemente meha visto y ha dicho para sf; voy a tener que ha- bérmelas con un hombre... “ésta no es con- migo”... Y se ha ocultado. ESCENA DECIMOSEPTIMA Dichos y Robustina. Robustina Emest (entrando); ZEncontr6 usted al bandido ya? Todavia no, sefiora, pero estoy buscéndolo, debe haberse escondido, posiblemente de- bajo de las camas, porque no se ha puesto a aleance de mi vista. Verancundo en Zapalar y seleccén de cuentas Biisquelo pronto, efor, para salir de esta si- tuacién angustiosa. Si, Emesto mio, bascalo, pero no arriesgues tu vida. Ta sabes que ella me pertenece. Voy, amada mia voy (con un gest heroic) Empiezo a registrar las habitaciones... (apar- fe) y empiezo a sentir un temblor de piemas que no puede sostenerme. (Entra por una puerta lateral) Amparo: Tranquilizate, mamé, porDios. Ya ves. Aho- ra no estamos solas, tenemas quién nos de- fienda. Y Emesto es un valiente, no cabe duda. Robustina _(asustada). Escdndete, hija mia. Escndete. ‘Amparo: é Robustina: ives?... Elbandido... elhombre barbudo (se refiere a Procopio, que entra pensa- tivo a escena, sin verlas) Amparo: — (corriendo.a ocultarse con su madre en el costu- vero): Virgen santa! ESCENA DECIMOCTAVA Procopio, solo. Luego, Ernesto Procopio __(ontranso; trae puesta la barba postiza, el cuello del sobretodo lenantado, leno de terra; en una palabra, est inconocible. Viene bastante bei.) Yono'sé qué le ha dadoa mi mujerpor huit ‘demi, Elhechio de que yo haya tomado unas copitas...no-¢s motive suficiente para que hhuya‘asi.La verdad es que bebf mucho. Co- sas de Jerez...que me retuvo en su casa mas de lo que yo pensaba. 2 Verancondo en Zapalar y sleccion de cuentas Emesto __(entrando): Caracoles! Aqui esta el lad. (Dirigiéndose a Procopo.); Miserable... (Apun- indole con la lave.) Salga ustegafuera.. 0, de lo contrario, hago fuego. Pero, hombre, ,quién es usted? {Por quéesté aqui? Emesto: _Esoes loque yole pregunto a usted, soban- dolero... Yno se acerque mas .. porque dis- paro. Procopio: Habrise vst. Emnesto: _Salga de esta casa inmediatamente, Procopio _(aparte): Pero zestoy softando? gO me habré equivocado de casa?...Como veo medio tur- bio. Pero no. Por el zapalar la reconozco. Emesto (apart): Vacila, tal vez, entre fugarse 0 ata- carme. Ira a sacar sus armas? Procopio: _(bruscamente) Caballero tend usted que ex plicarme cémo se encuentra aqui. Emesto:. _(retrcedindo): No fengo que explicarle nada. Salga usted a la calle Procopio: ESCENA DECIMONOVENA Dichos, Consuelo, Esperanca y un carabinero. Luego, Amparo y a Robustina, Consuelo: (entrando): Por aqui. (entrando) Pase usted. (entrando): ;Dénde esté el ladrén? Pracopio _(sefialando a Ernesto): Ab. Ernesto _(seilalando a Procopio): Este es. Carabinero.jEn qué quedamos? zA cusl me llevo preso?.. Consuelo (et la duda): Llévese a los dos. Verancendoen Zapallar y selecn de cuentes B Amparo Robustina Procopio: (entrando): No. E50 no, Carabinero, el ladrén es ese hombre barbudo. ;Verdad, mam? (que ha entrado con Amparo): Si, carabinero. Ese hombre es el que quiso introducirse en mi cuarto. Naturalmente. Carabinero:Entonces hay circunstancias agravantes: robo Procopio Emesto: Robustina: Carabinero Procopio Robustin: Ernesto: Amparo Procopio: Robustina Caral Emesto: Procopio: Consuelo rocturno, con premeditacion y alevosia. (aparte): {Pero es que estoy sofiando?... No, Taculpalla tiene Jerez que me hizo tomar tan- to. Concuyamos. Si, siquelo usted fuera (apart al carabinero) y déjelo en libertad. No queremos que se pase parte. (apare) Este es un Ki, (a Robustina): Bueno. Dejémonos de bromas Yy vamosa acostamos, ijt yOtra vez? Yoo mato. (Apunta can le Have.) {interponiéndose): No. Nolo mates. Por favor, Emesto mio Ah! Con que “Emesto mio” zeh? Muy bien, ‘muy Bien (opirte: Esa vo. inero:Basta de escindalos. Vamonos pare la comisa- ria. (Toma a Procopio de un brazo) Si. Eso es, Pero, Robustina, gpermites que me leven preso?, (extrajiada): Sabe su nombre. No me conoces? Soy tu marido. (udosa): ;Procopio?.. ;Pero esa barba? Versneanio en Zapalar y seleccion de eventos Procopi Robustin: Procopio Emesto Procopio: Emesto: Procopio Amparo Robustina: De veras. No mela habia quitado. (Se laqui- fa.) Ha sido un olvido. Como tengo la cabe- 2a trastomada. Bra postiza? {parte a Robustina): i. Me la puse para que ‘nome reconocieran; para guardar el incbg- nito, por obedecerte-, (aparte): ,Cémo explicar? (Queda pensativ.) G@Robisstina): Y luego, hija mia, que la ver- dad se ha de decir: paséa tomar unas copi- tas. 2¥ el'susto que me has dado? Se pasaré. Pasaré, como a mf también se me pasara..la borrachera. (aparte a Amparo): 2Y qué hago yoen esta si- tuacion? (aparte a Ernest): Pedisle perd6n, natural- mente, y en seguida pedirle mi mano. La ‘ocasion Ta pintan ealva {aparte paras): No me queda otro recurso (Arrodillindose.) Perdn, paps. 2Cémo es 050 de “perdén, papa? §%, sefior. Yo amo a su hija locamenite. Yo deseo hacerla mi esposa, ante Dios y ante los hombres, con todos los tequisitos legales. Cindignadisimo) Sinvergiienza. 2¥ me queria asesinar y echarme a la calle? Carabinero, Iéveselo preso. (El carabiner intenialeoarse a Emesio,) (interponiéndose): No, e30 no. Papacito lindo. Perdénalo. Sino nos perdonas... sino con sientes en nuestra unidn... moriremes. Perdlénalos,Procopio. En lo que slicitan, lle- van la penitencia. Veraneendoen Zapalla y selecin de cuentos coy Pero, usted cuenta con algo? 5; sofor,cuento con. Bueno le dire. Yosoy Ge familia scay,aparte de esto, estoy oct pado en el ministers. Lego me van a a5 _. Rondon tengo personas influyentes que po- | Gran conseguirme un puesto de importan- Giacon una fentaaprecable, y nada nos fl- tara Vaya vaya. Los perdonaré. (Qué hemos de hacerle! (Los abraza) . Carabinero:zDe manera que nohay ladrones ni hay nada? Emesto: Si los hay! (por Amparo) esta nina, que me ha robado el corazdn impiriindece a bustin). Yesta mujeequeme roballa libertad Carabinero:Bueno, dejarse de bromas, que no estoy para pliticas Yo voy a pasar el parte Robustina: No, No. (A Pracoto). Passe algo para que ro de un escanalo. Es preciso que todos ignoren fo que ha ocurido aut {al einer Tore, owen pse dinero) pve cigars. y param tagost amano vie CarabinerosSeagradece: Buen dar con las coses que pasen Robustina. Bueno, Adios. ¥ mucho silencio. Procopio: Ernesto: Procopio: Procopio: Procopio ESCENA VIGESIMA Dichos, menas ef carabinero. Procopio _ (dirigiéndose a Robustina): Y ahora, hija mia, convendras cofimigo en que asino se puede 2% Veransandoen Zapata y selecdn ve cuentos Consuelo: Esperanza: Pasamos en constante zozobra. En perpetua alarma. Annparo, incendie, temblores,ladrones... Es un ‘martirio estar encerrada. Voloamos a Santiago ‘mama Es decir, ya que estamos en él, voloames “socialmente” por medio de los periico. Robustina: Bueno. Ya esté. (Quéha de hacérsele! Acep- to. (A Consuelo) Escribe, hija mia. (Consuelo se Sienta a la mesa, toma un blocky se dispone a escribir.) (Dictindole): “Flan regresado de Za- pallar el eminente abogado don Procopio Rabadilla, su.distinguida esposa doa Ro- bustina Jaramillo y sus encantadoras hijas ‘Amparo, Consuelo y Esperanza.” |. EDUARDO VALENZUELA OLIVOS (1882-1948). OBRAS: Una aventura de Manuel Rodriguez, La Epopeya de quigue, oa Peula Jara Quemade, Veraneandoon Zonal y selon de curs a Un crimen en mi pueblo Armando Mook" Comedia policial en un acto PERSONAJES Dofia Cucha Rosaura El Lechuza Gerardo Pefialosa Carabinero Filidor Carabinero Pefia Charo ‘Chueco Mena Adela Damién Laescena representa el escritoria de un hacendado en un pue- Dilito del sur de Chile. Al fondo, a la fquierda, una ventana que daa un patio. En lateral izquierdo, una puerta que daa fa pese- brera. En lateral derecha, das puertas en primero y segundo tér= sino; &ta iltima da ala calle, y la primera, a habitaciones inte 8 Veroeendo on Zepalarselecén de cures riores. En las paredes algunos grabados en colores recortados de revists y representandoescena patistcns y ds anuncos, uno de ellos del sate y el oto de una marca de midquinestrilladoras. Junto ata ventana wna mesa escritoro, con su silén; algunas sills dispersas por la habitacin y en wn vincén,herramientas y ‘aperos de montar. Un bracero con lumbre bajo la mesa ‘as ocke horas de una maiana neblinosa de inviern El teatro completamente a ascuras; antes de leoantarse el t= lin suena un tro, ya poco, voces de Dofia Cucha. ‘Vor de Dofia Cucha: Socorro! ;Socorro! ;Auxilio! (Se eoan- ‘nel telin y aparece en escena Dota Cucha, que desatinada grita por puertas y ventanas fa noticia) ‘Socorro! ;Han matado al patrén! jHan matado a don Damin! Socorro! (En efec- to, recostado en el silén, el sombrero de a ‘has. las puesto, aparece don Dani, nm vil. A un extrema de la mesa, un revdtoer. Uno de os batentes deta ventana abiero yun ers: tl perforado por una bala) Misia Rosaura, ;Socorro! Don Gerardo! ‘Socorro (Que entraa medio vestr, en babuchas ysal- to de cama, Es la esposa de Damin. Mujer joven): Qué ocurre, Doria Cucha? (Mostrando al escritori): {El patrén, misié Rosaural {Dios m{o! ;Damignt Lo han matado, ahi, él vino por la venta~ ra. 2Quién? ;Dios mio! Pronto Cucha, un ‘médico. Avisen al retén. ;Gerardo! (Va a Ie puerta llamar). ‘Verneandoen Zaplla y elec de cuentas » Dofta Cucha: Dofia Cucha: EL Lechuzs Rosaura: Dofia Cucha: Rosaura: Rosaura: Dota Cucha: Gerardo: Rosaura: 30 iSi,en seguidal niciael mutisenel momen- toque entra El Lechuza, uno de los mocos). 2Qué le pasa, dofia.? Corre a llamar al Sargento Pefaloza iy al dotor que han matado al patrén! {Dios mv’ y ampare! (Se prsigna).jAl tr to (Muti el Lechuza). ‘Corre! Llame a la Adela, Dona Cucha. Estdien misa. {Valgame Dios! ;Y cémo ha podido ser {tol {Quién? (Yendo a la puerta segundo término derecha). Gerardo! ;Gerardo! (A medio vestr y arrebosado en wn poncho): 2Qué pasa con Gerardo y con tanta grite- ra? ‘Su paps... Damiénl 2Qué le pasa al viejo? (Eehéndose a llorat): ;Que to han matado, -Damian! jMire! 2Quign? ;Cusndo? ;Cémo? Un tro, ahi... Tratando de acercarse).;Ge- rardo! Habiame! jAguérdese!jNo lo atoquel..(Yendo junto Alani). Oiga don... caallero. (Pause) (ES cierto, no mas! ;Cayé en su ley! jDios mio, Gerardo! Qué desgracia! ;Po- bre de mil {Por Diosito santo! (Mi patron! (Ambas mujeres gimer). iGuieno, geno! ;T4 giieno! Con griterios no se arreglan las cosas.. Que llamen a Pehaloza y al doctor... Ya fue El Lechuza a avisar... {Usted cree Verancandoen Zapalar y seleccdn de cuentas Gerardo: Rosaura: Gerardo: Gerardo: Rosaura: Gerardo: Rosaura: Gerardo: Rosaura: Gerardo que esté muerto, Damién’...jDa- rid!

S-ar putea să vă placă și