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Que es lo que Dios espera de Su pueblo?

Hay dos tipos de juicio:


Un juicio basado en lo que es recto, justo... que corresponde.
Y, para juzgar al pueblo de Dios, una dimensin de juicio basado en la
medida
en su sus vidas corresponden a la Verdad.

Un juzgar por la medida en que participa de la Verdad.

Mi padre sola decir que la meta para el creyente en el nuevo Testamento "no es
salvacin, no es santificacin... la meta del Nuevo Testamento es
PARTICIPACION."
O sea que ms all de "experiencias cristianas" lo que Dios desea para nosotros
es un participar de lo que El ES.

Dios mide nuestras vidas por la medida de participacin con la verdad de Su ser.
Hasta qu punto hay un acuerdo, una armona, una correspondencia, entre lo que
nosotros somos en nuestro ser y lo que El es.
Es nuestra naturaleza semejante al mundo nos rodea? O ha sido nuestro
ser
transformando a la imagen de la naturaleza de Jess?

Pedro presenta el glorioso deseo del corazn de Dios hacia los redimidos:

Que lleguen a ser "participantes de la naturaleza divina." (II Pedro 1:4)


Pablo lo llama "un varn perfecto,... a la medida de la estatura de la plenitud de
Cristo." (Efesios 4:13) Y ambos apstoles anuncian lo que el Espritu de Dios
proclama a travs de todo el texto sagrado, que en Cristo Jess est todo provisto
para que esto se cumpla en cada uno de los Suyos.
Creo que siendo tan alto el llamado y tan completa la provisin,
hace inevitable que los que nos llamamos por Su nombre
seamos juzgados por esta verdad.

Viene a mente otra cita que mi padre repeta mucho, "El cristianismo es algo muy
simple mas muy profundo - es vivir... bajo la vista de Dios y por Su ayuda."

Su ayuda, Su invitacin, Su deseo, es que podamos, no solo dar la espalda al


diablo y al mundo sino tambin a nuestras flacas habilidades y adentrarnos en
Su gracia, Su fuerza, Su Vida.
El secreto de la vida cristiana no est basado en experiencias externas sino en
llegar al lugar de contacto con Dios mismo, pues esto abre en el interior del ser
un manantial que fluye con Vida contantemente renovada, suficiente para cada
situacin. Un ro que nos lleva a conocer, en una medida que crece ms y ms,
toda la plenitud de los recursos de gracia y vida que existen en Dios.

As podremos estar libres de todo aquello con que el mundo ata a los hombres.

As podremos llegar a la PARTICIPACIN de la plenitud de Su Vida.

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