Sunteți pe pagina 1din 1
Nuestra mente codifica la reali- dad, la interpreta, “se la platica”, como si nos contéramos a nosotros mismos Jo que nos sucede. Pero esta historie- ta, esta narracién, cierta o distorsiona- da, se convierte en “nuestra realidad”, y tiene efectos positivos o negativos concretos en nuestros sentimientos y nuestros actos. ‘Tenemos un estilo acostumbrado para explicar las cosas; algunos, por ejemplo, ya por habito piensan: “Los problemas duran s6lo un tiempo”, mientras otros aprendieron a pensar y se habituaron a creer: “Los problemas dificilmente mejoran”. Y en cada caso es evidente el efecto de estos pensa- mientos en el 4nimo, en el deseo de luchar y en la biisqueda de mejoria. La palabra optimismo quizé no sea del agrado de muchos pues el tema se presta ala extrema comercializacién y puede implicar un engaito de fon- do. “Todo es hermoso”, por ejemplo, es una frase que puede sonar hueca 0 que impide ver otras realidades. El reto es ser un(a) optimista inteligente, es decir, buscar una interpretacién de la realidad basada en datos pero que a su vez. nos coloque en una posicién proactiva y constructiva ante la vida. En vez de decir “No viajo en avién pues podria caerse”, digamos, por ejemplo, “El avién podria caerse, pero la probabilidad es muy baja. El hecho de que yo viaje en él, no aumenta la probabilidad en mi contra”. Es de suma importancia hablar- nos con la verdad; silo hacemos asi, y analizamos a fondo las experiencias, podremos encontrar un cimulo de in- formacién util. Por qué no hacerlo? ePor qué escoger sélo elementos ne- gativos, que representan una version parcial de la realidad?

S-ar putea să vă placă și