Sunteți pe pagina 1din 17

"Es innegable que a veces se forma un fluido mucoso en los

órganos internos y en la vagina durante el coito, pero esto sólo


ocurre a las mujeres lascivas o a las que llevan una vida
lujuriosa" 1.

En un mundo donde “el placer pasa por la imagen, esa es la


gran mutación” (Roland Barthes 1980)2 la acción de hacer sexo
sigue siendo peligrosa, bandida.

Como dijo Valérie Tasso “creo que hoy en día hablar de sexo ha
dejado de ser un tabú, el verdadero tabú se ha vuelto el sexo
mismo”3 .

Difícil encontrarse con 30 años descubriendo el squirting y no


preguntarse ¿por qué alguien no me lo había dicho antes, o por
qué pocas mujeres lo saben hacer?
Buscando informaciones sobre lo que es el squirting me he
encontrado en un desierto, las pocas gotas de saber sobre el
tema os la añado aquí abajo, pero tengo que decir que me han
dejado muy perpleja.
Este artículo sacado de internet ha sido escrito por Carmen
Márquez (que personalmente desconosco) el 11 septiembre de
2007 en el blog “Educa sexo-blog sobre educación sexual,
sexo…”4

“Lo cierto es que existen varias teorías al respecto, pero aún no


se puede afirmar sin duda alguna si la humedad que crece en la
vagina de la mujer tras alcanzar el clímax se puede considerar o
no eyaculación. Y es que no sólo existen pocos datos al respecto
sino que, encima, algunos son contradictorios entre sí.
Teniendo en cuenta esta introducción, hablemos pues de lo que
sí sabemos:
Podemos empezar diciendo que cuando se habla de
“Eyaculación Femenina“, se refiere a la llegada de líquido a la
zona vaginal durante las contracciones que provoca el orgasmo
en las mujeres.
Este líquido se produce en las glándulas de Skene, que están
situadas en la vagina, cerca del lugar donde podemos estimular
el Punto G. Cuando la mujer está excitada, estas glándulas se
llenan de líquido y como con el orgasmo la pelvis se contrae,
aprieta los diferentes órganos de la zona y, entre ellos a las
glándulas de Skene, se produce el rebosamiento y posterior
salida de esa sustancia líquida y lechosa.
Generalmente sale en poca cantidad, pero puede ocurrir que
sea mucha, debido a que estas glándulas tienen una asombrosa
capacidad para vaciarse y llenarse en pocos segundos. Así, por
ejemplo, si el orgasmo se prolonga, y las contracciones
vaginales son numerosas, se puede segregar una cantidad
realmente llamativa.
Las actuales investigaciones van dirigidas a descubrir si este
líquido expulsado es sobretodo orina, que se escapa por
incontinencia o por debilidad de los músculos que la controlan,
si es sólo la sustancia que segregan las glándulas de Skene, o si
es una mezcla de ambas.
Otro punto a tener en cuenta es que estas glándulas de Skene
no funcionan de la misma manera en todas las mujeres,
existiendo casos en los que la secreción antes nombrada ni
siquiera se produce.”

Otra definición de squirting que nos da alguna información más


llega de un artículo del periódico “El Mundo” sacado de su
página online, del apartado “Cama redonda” y escrito por Josep
Tomás el día 2 de abril 2008 5.
“(…) El responsable de estas emisiones expelidas por la uretra
son las glándulas uretrales, parauretrales y de Skene, que se
encuentran en la zona de la pared anterior de la vagina, el
consabido punto G. El líquido expulsado, aunque contiene
residuos de urea o creatina no es orina, sino que su principal
componente es la glucosa, la fructosa y la fosfatasa ácida
prostática, también presentes en el semen masculino. La
eyaculación suele producirse durante el orgasmo debido a las
contracciones pélvicas derivadas del mismo.”

Después de leer este artículo, que algo me aclaró, me dije


vamos a buscar la definición del fantasmagórico Punto G y me
he encontrado con este asombro 6. Por suerte los de Wikipedia
han puesto el aviso de tener cuidado con esta definición porque
no tiene referencias científicas.
Los comentarios entre paréntesis y en cursiva son míos.
“El punto de Gräfenberg, más conocido como punto G, llamado
así en honor de su descubridor, el ginecólogo alemán Ernst
Gräfenberg, es una pequeña zona del área genital de las
mujeres localizada detrás del hueso púbico y alrededor de la
uretra. Es lo mismo que, o parte de, la uretra esponjosa, donde
se encuentran las glándulas de Skene.
Se dice que la estimulación del punto G (a través de la pared
frontal de la vagina) propicia un orgasmo más vigoroso y
satisfactorio, y es posiblemente la causa de la eyaculación
femenina.
Tal estimulación requiere un empuje en cierto modo opuesto al
que se necesita para lograr la máxima excitación clitorial con el
pene.
(La claridad de esta ultima frase es estupenda, me estoy
haciendo un dibujo para comprenderla, y además ¿sin pene
cómo funciona el todo?)
Muchos libros sobre sexo aconsejan a las parejas incapaces de
lograr el orgasmo femenino el considerar la estimulación del
punto G como técnica sexual.
Un creciente número de expertos cree que la razón por la que la
estimulación de este área provoca un orgasmo «hacia fuera» e
incluso la eyaculación femenina es que el punto G ha
evolucionado a un "punto disparador" del parto (es que los
expertos aún piensan en termino de mujer=madre, no hay otra,
no hay posibilidad de búsqueda de placer por un coño,
independientemente de su destino reproductor). La cabeza del
feto empuja este punto durante el parto, lo que parece disparar
la última fase de empuje. Esto se traduce, durante la
estimulación sexual normal, en una contracción más
significativa de la vagina.
El punto G puede no ser solamente un punto discreto (¿esto de
discreto lo que es?). De hecho, algunos científicos como Natalie
Angier defienden que se trata del conjunto de profundos nervios
del clítoris cuando pasan a través de los tejidos para conectar
con la columna vertebral. El clítoris tiene profundas raíces y
puede cambiar de tamaño y ligeramente de posición a medida
que los niveles hormonales cambian en las diferentes etapas de
la vida de una mujer.
(¡Esto no lo sabía!)
Un pene curvado hacia arriba tiene la habilidad natural de
ejercer mayor presión sobre la pared frontal de la vagina. Si un
pene no se curva hacia arriba, entonces pueden ser necesarias
diferentes posiciones sexuales. Por ejemplo, un hombre cuyo
pene se curve hacia abajo puede hallar que la penetración
posterior es más adecuada para estimular el punto G dado que
la curva presionará la pared frontal.
(Sin pene no hay punto G, no hay penetración, ni orgasmo, ni
eyaculación femenina ni hostia, y después aún hay quien tiene
el coraje de decir que no es una sociedad falo céntrica…)
La estimulación del punto G mediante el uso de un dedo o la
lengua es posible gracias a la presión combinada de empujar el
clítoris hacia abajo mientras se arquea la lengua o el dedo hacia
arriba en un movimiento de llamada. El dedo o la lengua debe
estar entre 2,5 y 7,5 centímetros dentro de la vagina para que
de resultado ( el sueño de todas: una lengua elástica de 15
centímetros…¡por qué no!). Sin embargo, cada mujer puede
necesitar una forma diferente de estimulación.
Se piensa que la estimulación del punto G es más intensa en las
mujeres mayores de treinta años, porque los cambios en la
estructura de los tejidos del interior de la vagina permite un
acceso más fácil a dicho punto. Algunas mujeres creen por esta
razón que en la treintena alcanza su cúspide sexual.
Punto G masculino
El término punto G se denomina también para la próstata. Esta
glándula, exclusivamente masculina, se estimula
frecuentemente durante las relaciones sexuales homosexuales
(claramente el sexo anal en la pareja heterosexual donde es la
mujer la que penetra es ilegal). La fricción constante del pene
con la próstata produce en el hombre pasivo (todavía seguimos
con las categorías binarias de recibir-pasividad-sumisión-
debilidad/dar-actividad-dominio-poder) un intenso orgasmo de
eyaculación involuntaria y fuertes espasmos”.

Después de todo esto me quedo con mi experiencia activa e


intentaré explicar a mi manera lo que significa para mí el
squirting.
El squirting es el acto de correrse, la eyaculación femenina, pero
no simplemente el sentir un orgasmo, sino correrse con una
expulsión de flujo vaginal que puede salir con más o menos
presión y ser más o menos espectacular por no decir
¡cachondamente escandalosa!
Este acto implica un cambio de paradigma, una ruptura con la
educación recibida en cuanto bio-mujeres 7. Hasta hace algunos
meses siempre cuando tenía un orgasmo contraía los músculos
vaginales para contenerme, para no dejar salir nada, para no
desbordar demasiado.
Era un acto instintivo, fruto de tanta educación represora
patriarcal heterosexista donde el placer de la mujer no existía
sino como premio por la bravura del bio-hombre capaz de hacer
gozar, no se contemplaba la libertad y la autonomía de probar
placer en la mujer, siempre era el espejo donde el hombre o la
pareja (dejando abierta la duda a las parejas homosexuales)
veía reflejado su poder. Y por cierto, este poder no podía ser
oscurecido por una corrida más espectacular que una
eyaculación masculina.
Al contrario, el squirting implica invertir la acción de los
músculos vaginales, no retener sino empujar, y la onda
propagadora que produce es de arrastre, lleva consigo milenios
de sumisión no consensual , expulsada hacia fuera en toda la
visibilidad de una explosión fallera.
Es una sensación liberadora a ratos cósmica, es la conciencia
del propio placer que ocupa el espacio, que se proyecta fuera de
sí, que se expande y se expresa en toda su fuerza.

Con toda la ingenuidad de una cachorra frente a sus primeros


pasos me he sentido totalmente estúpida por no haberlo
descubierto antes, sintiendo mi cuerpo extraño a mí misma.
Y pensaba cuántos años sin saber los límites de mi propio
cuerpo, cuantos años sin gozar plenamente de mi placer.
Y siguiendo la reflexión, mi pasado heterosexual ha empezado a
recomponerse como un puzle y la ignorancia me ha aplastado
cara al suelo.
Antes que todo creo profundamente que recibimos una
educación moralista, que nos enseña a olvidar nuestra
corporalidad, y católica que no nos deja vivir jamás el placer
como un goce y una búsqueda, sino dentro la lógica del placer
reproductor que nace de la culpa y de la redención (el dolor
como placer es un privilegio de los penitentes y por esto hay
que ser inscrito al orden…).
Dentro esta educación la ignorancia hacia los placeres de los
cuerpos es alucinante.
Para empezar recuerdo que hace algunas décadas las mujeres
no tenían clítoris sino algo allí que poco importaba, siempre que
no fuera demasiado grande como para competir con el poder
del gran hermano falo que todo lo ve.
Por otro lado el ano es aquel lugar de nadie que amenaza la
virilidad del bio-hombre con el espectro de la homosexualidad, y
la feminidad de la bio-mujer con la promiscuidad del putón.
Y la búsqueda de nuevos centros de placer desplazados
respecto al centro de la sexualidad reproductiva… inútil.

La sexualidad sigue siendo algo privado pero la eyaculación del


bio-hombre tiene todo carácter público: salir de sí mismo,
ocupar espacio, dejar huella, al contrario del placer de la bio-
mujer trasparente.
¡Mentira!

Desde mi posicionamiento como parte de aquella minoría de


bio-mujeres que elegimos nuestras prácticas sexuales y
sentimentales como una búsqueda de libertad me encuentro
con 30 años con toda mi rabia por tener conciencia de que el
control de cada uno de nuestros comportamientos sexuales
sigue sucediendo cada día.
Pero por suerte cada día vamos descubriendo nuevos agujeros
desde los cuales dinamitar poco a poco los miedos y esta
construcción tentacolar.
El squirting es un acto político contra la represión a expresar
libremente el placer y no sólo el placer sino todas aquellas
formas de exceso prohibidas a las bio-mujeres y a todas las
personas por un sistema que nos quiere a todos implosivos.
El squirting es un acto político contra el miedo a explotar, contra
el miedo a sentir la intensidad de la vida, del sexo en cuanto
acción, como estrategia de superación del miedo a morir.
¡Si antes tenía un coño ahora tengo un cohete que dispara
chispas al correrse!

A continuación os añado algunas entrevistas sacadas de


personas que practican el squirting porque como novata creo
que hay que aprender y practicar.

1 De Ree’s Cyclopaedia en Erika Bornay “Las hijas de Lilith”Ed.


Arte Catedra, 1990, 2004 Madrid
2 Catalogo de la exposición “Claude Cahun” Ed.IVAM Institut
Valenciá de Art Modern, Valencia 2001
3 http://www.mirorenzaglia.org/?p=4957
4 http://www.educasexo.com/sexo/eyaculacion-femenina-lo-que-
si-sabemos-sobre-ella.html
5
http://www.elmundo.es/elmundo/2008/04/01/camaredonda/1207
071483.html
6 http://es.wikipedia.org/wiki/Punto_G
7 Concepto de cuerpo de mujer nacida para repetir la norma
secular de cuerpo binario con vagina (el clítoris todavía se ha
quedado ilegal por no hablar del ano) en oposición al cuerpo del
bio-hombre con polla (el ano está también fuera de la ley).
La bio-mujer es educada a la sumisión no consensual y a la
costumbre de no desear el poder, y a no tenerlo.
Su destino: la reproducción.
(concepto desarrollado por Beatriz Preciado en su libro “ Testo
Yonqui”)

Hola Diana-Pornoterrorista,
Me dirijo a ti con mis preguntas por varias motivaciones:
Primero porque tus acciones pornoterroristas son a mi sentir tan
desestabilizadoras pues rompen el tabú del cual he hablado al
principio del texto: hablar de sexo no es más un tabú, hoy en día
el tabú es el sexo en sí mismo.
En segundo lugar tus acciones son carne, flujos, sexo, que
hablan de otro gran tabú que es el sentir en su forma más
visceral, tus performances son para mí como grandes banquetes
donde todos compartimos tus tripas y al devorarte nos unimos
todos en una antropofagia delirante que es como un gran ritual
catártico donde todos salimos liberados de los miedos
aprendidos hacia lo que son el deseo, las fantasías, las
perversiones.
Y tercero como practicante del squirting.
1) ¿Tú practicas el squirting? ¿Cómo lo aprendiste (si lo has
aprendido) o cómo evolucionó tu capacidad de hacerlo?
Entiendo el squirting más como una manifestación corporal y
emocional que como una práctica, se trataría más bien de la
consecuencia directa de algunas prácticas sexuales.
Mi forma de correrme es tan múltiple como lo pueden ser los
tipos de orgasmos que tengo, el squirting es una manifestación
concreta de un cierto tipo de orgasmos.
La primera vez que sucedió fue con una penetración
acompañada de estimulación en el clítoris, mientras tenía un
orgasmo clitoriano que acabó transformado en uno vaginal (es
importante decir que no sucedieron los dos al mismo tiempo).
De pronto me vi en un charco y mi compañera estaba
completamente “bañada”, y como ella no paraba, el líquido no
paraba de salir.
No es que lo haya aprendido, un día sucedió y desde entonces
he practicado diversas formas para controlarlo, dominarlo,
explotarlo y sacarle el máximo partido.
El squirting, a diferencia de la eyaculación masculina (aunque
algunos expertos tántricos hablen de “eyaculación interna” no
soy un biohombre para constatar que es o no posible), es
completamente controlable y voluntario a pesar de que también
es completamente orgánico y biológico. A través de las
biomujeres que me han interrogado acerca de la técnica para
realizarlo, yo misma he descubierto cómo funciona, y lo he
descubierto no porque sepa cómo “hacerlo” sino porque sé
cómo “evitarlo”. Es muy simple: cuando vamos a tener o
estamos teniendo un orgasmo, tanto vaginal como clitoriano, la
vagina se contrae. Incluso muchas de nosotras, apretamos
también los músculos de los glúteos, las piernas, el abdomen,
las manos, la mandíbula. Es un acto reflejo: apretar. El lugar por
donde se expulsa el líquido en una corrida está a la entrada de
la vagina, es el mismo sitio por donde sale el líquido que nos
lubrica cuando estamos cachondas. Si todos los músculos están
contraídos la cantidad de líquido que expulsamos al corrernos es
mucho menor que si están relajados. Durante un orgasmo, si lo
que queremos es conseguir que grandes cantidades de líquido
salgan a presión lo que debemos hacer es no contraer los
músculos, especialmente la vagina, y empujar, empujar como si
el orgasmo fuera un bebé al que queremos lanzar disparado
desde nuestra vagina-cañón.
Eso es, es sencillo y cualquier biomujer es capaz de hacerlo, es
sumamente placentero, más que en el aspecto físico-orgánico
(el orgasmo es exactamente el mismo en intensidad con
squirting o sin él) en el aspecto mental, político y metafórico de
las expresiones y representaciones del orgasmo femenino.
2) ¿Por qué crees que se sabe así tan poco de esta práctica
fuertemente política?
El squirting es algo que sucede más de lo que pensamos pero la
pornografía o incluso la pospornografía no lo suelen representar
y si lo hacen suele ser de forma cómica
(http://www.redtube.com/8303), no se le entrega nunca el
mismo rango que a una eyaculación masculina. De modo que
sucede pero no tiene representatividad pornográfica, y por lo
tanto no hay información, no “se sabe” acerca de lo que es, de
cómo sucede, lo que conlleva también una carencia de
reflexiones en torno al tema.
También en la intimidad es una manifestación reprimida. La
sociedad, el sistema o como quieras llamarlo no sólo reprime
hacia fuera sino también hacia dentro, nos inyecta su veneno en
las ideas que tenemos sobre nuestro propio cuerpo y las cosas
que le pasan. De hecho, esa es la estrategia básica para toda
represión: empezar por el cuerpo, el lenguaje, lo íntimo, lo
propio.
Muchas biomujeres, cuando tienen una eyaculación piensan
simplemente que se han meado. Yo misma cuando pregunté a
mi ginecóloga acerca del tema me dijo que no tenía ni idea, que
igual era orina. Luego hablando con otra ginecóloga mejor
informada me dijo que de orina nada, que se trata del líquido
que producimos para lubricar pero que expulsado con fuerza y
rapidez no tiene la misma consistencia, digamos que está a
“medio hacer”. Yo lo he metido en un bote, es transparente
tirando a blanco y deja dibujos muy exóticos en las sábanas
negras. Si fuera orina no sería así. Pero nadie nos ha hablado de
la eyaculación femenina, ni en el colegio, ni en la calle, ni en la
cama.
Y la represión también pone sus huevos en el lenguaje. Aquí en
la Europa no anglosajona ni siquiera tenemos una palabra para
designarlo y usamos la voz inglesa, que por cierto, es bastante
humillante porque ‘squirting’ viene de ‘squirt’ que quiere decir
‘chorrito’… ¿Chorrito?, que me disculpen quienes llaman así a la
eyaculación femenina, pero lo mío no es un “chorrito” ni mucho
menos, es bastante más espectacular y abundante que
cualquier eyaculación masculina. De modo que propongo
llamarlo sencillamente como lo que es, una eyaculación en toda
regla.
Se sabe poco porque se nos desinforma desde flancos muy
importantes para la construcción de nuestra sexualidad como lo
son la pornografía, el lenguaje y la anatomía científica.

3) En los últimos meses hemos visto llegar una nueva ola de


represión hacia las prácticas sexuales, ya sea en su expresión
(el porno-impuesto italiano), en su representación (la censura de
la peli Brokeback Mountain en Italia), o en sus deseos (el
posicionamiento del papa contrario a la petición de Amnistía
Internacional a favor de la despenalización de la homosexualdad
en los países donde todavía es un delito).
¿Por qué crees que vuelve esta onda represora?
Considero que sencillamente nos estamos “saliendo de madre”,
o para que me entiendas mejor, estamos pisando terrenos
peligrosos. La abolición de los géneros, por ejemplo, es algo que
debe preocupar terriblemente a una sociedad en su base
heteropatriarcal, a un feminismo carca que, lejos de adaptarse y
evolucionar, se ha quedado anclado en “la mujer”, a una iglesia
que sabe que tiene los días contados y que ve en quienes
desestabilizamos cualquiera de sus estructuras a sus peores
enemigxs.
La historia dicen que se repite y es cierto. Siempre, tras una ola
de expansión de las libertades (como pudieron ser, por ejemplo,
los 20 primeros años del siglo XX) viene otra de represión de las
mismas, una especie de dique de contención que impide que
esa ola de libertades se transforme en tsunami y arrase con
todo. Me pregunto muchas veces qué hubiera sucedido sin las
Guerras Mundiales y sus consecuencias o sin las dictaduras
variadas que recorrieron Europa y América a partir de los años
30-40, donde se forzó un retroceso claro y evidente en el
sentido de las libertades, sexuales y de toda índole. Quizás
ahora no estaríamos hablando de la eyaculación femenina como
un acto político o artístico, sino como algo bello y cotidiano, algo
que sucede sin más.
Ahora estamos en la cresta de la ola, subiendo y subiendo,
creciéndonos, y el sistema está acojonado. Por eso se han
lanzado a construir diques, a intentar frenarnos como sea para
que no arrasemos con todo. Tengo la esperanza de que no lo
consigan.

4) ¿Por qué las prácticas sexuales, el sexo como acto, asustan


así el poder?
Las prácticas sexuales subversivas, supongo que quieres decir.
Creo que en este sentido la represión está profundamente
ligada a la base de nuestra cultura judeocristiana. Hace años
que el sexo está aceptado socialmente como acto no
necesariamente reproductivo. Eso el poder lo ha digerido
finalmente. Lo que no puede digerir es que nos salgamos de su
modelo de representación de lo que el acto sexual y la
interacción sexual entre personas debe ser.
El poder establece un modelo que el 90% de la población sigue
a rajatabla y sin rechistar. Ese 90% disfruta o cree disfrutar con
ese modelo convenido. En realidad al poder lo que le asusta es
que nosotrxs, ese 10% de personal “enfermo”, “desviado”,
“degenerado” y, por tanto, “perverso” contagiemos al otro 90%.
A través de nuestra sexualidad se pueden conseguir cosas que
desestabilizarían uno de los pilares básicos del sistema, como es
el binarismo hombre-mujer: la abolición de los géneros conduce
necesariamente a la abolición también de la denominada
“superioridad masculina” y al empoderamiento de las
biomujeres en su papel intencionalmente activo en el sexo.
También a través del BDSM, donde se representa claramente
que la dominación y la sumisión no son una cosa que se otorga
o con la que se nace sino que se elige, del mismo modo que se
elige una falda o un pantalón. El BDSM ridiculiza las
representaciones del sistema, su escala de poderes. Y en cuanto
al squirting, es claramente una manifestación en la que una
biomujer muestra que también es capaz de eyacular, esa
manifestación casi ritual hasta ahora asignada exclusivamente
al poder del biohombre.
En definitivamente, nuestras sexualidades asustan porque no
están imitando el modelo impuesto, se salen del margen
permitido y entran en terreno peligroso. El Estado se pone alerta
cada vez que una biomujer eyacula (me pregunto si será por
esto por lo que me pone tanto hacerlo).

5) En la sociedad contemporánea y a lo largo de los siglos el


arte y la pornografía han sido y siguen siendo lenguajes muy
controlados por el poder, para ti ¿por qué esto es así? ¿Y tú por
qué utilizas estos dos lenguajes?
Primero decir que yo considero que muchos tipos de pornografía
son arte. Podría afirmar que la pornografía es arte enfocado a la
excitación sexual en todas sus variantes (cinematográfica,
literaria, pictórica, fotográfica, performántica, etc).
El poder controla todas las expresiones emocionales porque en
ellas está la clave para dominar, y el lenguaje artístico es
importante porque tiene la capacidad que no tienen otros
lenguajes, la capacidad de trastornar y transformar, de originar
cambios internos, mentales, de modificar la perspectiva de las
personas. Es normal que a lo largo de la Historia el arte haya
estado al servicio del poder. Cuando deja de estarlo algunos
dicen que, entonces, el arte no sirve para nada o que ni siquiera
es arte. Yo diría que simplemente cuando deja de servir al poder
comienza a servir a los elementos desestabilizadores del mismo
(y por eso es deslegitimizado, como tú me comentabas en
Venecia).
Utilizo la expresión artística, primero porque es la única forma
que comprendo de hacer las cosas, segundo porque es un arma
eficaz para calar hondo en un amplio abanico de personas. Hay
personas que no entienden las teorías o la política pura y dura
(me incluyo) pero que en cambio son receptivas a las
expresiones artísticas. Con mi arte trato de tocar la parte
visceral del ser, esa que es más difícil de manipular por el
sistema pero que quizás por eso, porque se resiste, suele estar
casi siempre herida o dañada por éste. Mi expresión artística la
puede asimilar cualquiera, lo que no quiere decir que sea
comprendida como yo quiero que se comprenda, pero me basta
con que sea asimilada, porque a veces las cosas son como una
semilla que necesita un tiempo para eclosionar, o como un virus
(mi expresión artística es más bien esto segundo), que requiere
de cierta incubación para desarrollarse e invadir.
Para mí el arte pornográfico, o lo que llamamos pospornográfico,
es eficaz en tanto que la sexualidad es esa parte visceral y
animal del ser humano que es absolutamente imprescindible.
Todo el mundo tiene una sexualidad aunque no tenga sexo. Así
me aseguro de que aquellos recipientes donde deposito mi arte,
lxs receptorxs, siempre tendrán un hueco especialmente
diseñado para lo que hago. Si pretendo que la gente se ponga
cachonda se trata sólo de una estrategia para que abran sus
tripas hacia mí y lo que tengo que decir, que comunicar, que
transmitir: una información que considero valiosa porque jode al
poder y porque transgrede la norma.

hola O.R.G.I.A, hola tatiana, carmen, bea, isabel, he preparado


un articulo por el blog sobre el squirting o mejor la eyaculación
feminina, y ya que existe muy poco material sobre el tema estoy
recopilando entervistas directa de personas que lo practican.
además me enteresa que estas personas sean vinculadas al arte
y al posporno como responsables de la reflexión sobre las
rapresentaciones y el poder de las imagenes en la costrucción
de imaginarios, estereotipos y conseguentemente de
comportamientos. Sin embargo como creadoras teneis el poder
de crear nuevos espacios de rupturas y cambios.

1) ¿Tú practicas el squirting? ¿Cómo lo aprendiste (si lo has


aprendido) o cómo evolucionó tu capacidad de hacerlo?
Si pasa, pasa cuando pasa y es una fiesta mojada. Y, siendo
sinceras, nos hemos dedicado a entrenarnos en “otras cosas”.
Eso sí, no lo llamemos eyaculación “femenina”: si está claro que
lo que no se denomina, no es visible y por lo tanto no existe,
inventémonos otro nombre por favor.

2) ¿Por qué crees que se sabe tan poco de esta práctica


fuertemente política?
Quizás porque los genitales de la mujer no han sido
considerados como fuente de placer hasta ¿bien entrado siglo
XX?, además de no reconocérsele en general una sexualidad
activa. Eyaculación como acción que es implica un sujeto agente
–valga el pleonasmo-, y por lo tanto poder, y dominación si
tenemos en cuenta, además, que durante mucho tiempo se ha
pensado en la genitalidad de la mujer como un receptáculo, un
saco donde se “siembra” y después se “recoge” (en términos de
productividad/reproductividad del sexo, entendido en este caso
sólo en clave heterosexual). Y todo ello sin contar con la
versatilidad de lo prostético y de los juegos de rol, entre otras
muchas cuestiones (juguetería, etc.), que descentralizan el sexo
y el placer de esa genitalidad prototípica del control
heteronormativo para provocar cortocircuitos al producir nuevos
centros erógenos.

3) En los últimos meses hemos visto llegar una nueva ola de


represión hacia las prácticas sexuales, ya sea en su expresión
(el porno-impuesto italiano), en su representación (la censura de
la peli Brokeback Mountain en Italia), o en sus deseos (el
posicionamiento del papa contrario a la petición de Amnistía
Internacional a favor de la despenalización de la
homosexualidad en los países donde todavía es un delito).
¿Por qué crees que vuelve esta onda represora?
Quien sabe cuál será el mecanismo exacto.. lo que está claro, a
nuestro parecer, es que se trata de una tendencia histórica que
aparece y desaparece en bucle vinculada estrechamente a
períodos críticos del capitalismo en sus diversas ramificaciones:
pensemos en el saludable “libertinaje sexual” permitido en los
locos 20 y la recesión social en este sentido a partir del crack
económico mundial del 29; la época del baby boom y la perfecta
ama de casa yanqui tras la 2ª GM, y así. Si a esto además le
sumamos la no consecución social de ciertos derechos básicos
humanos en muchos países en el siglo XXI, y la hegemonía de la
cada vez más reaccionaria Iglesia Católica y del islamismo
extremista, etc., se produce un efecto bola de nieve represivo.

4) ¿Por qué las prácticas sexuales, el sexo como acto, asustan


así el poder?
Porque el sexo parte de una pulsión incontrolable incluso para el
propio sujeto, del deseo, y todo lo que sea ingobernable y
escape al dominio institucional, y por lo tanto sea actuable
libremente es potencialmente subversivo y por ello molesto para
el poder.
5) En la sociedad contemporánea y a lo largo de los siglos el
arte y la pornografía han sido y siguen siendo lenguajes muy
controlados por el poder, para ti ¿por qué esto es así?
Porque ambos tienen un gran vínculo con las pulsiones
ingobernables, con el placer, y con la subversión. Si representar
es dominar, pensemos pues lo que implica la relación de ambas
esferas. ¿Y tú por qué utilizas estos dos lenguajes? Porque
somos unas perversas pervertidas o viceversa, y lo que
realmente nos divierte es re-presentar lo representado y/o
representar lo irrepresentable.

Hola Itziar Ziga,

1) ¿Tú practicas el squirting? ¿Cómo lo aprendiste (si lo has


aprendido) o cómo evolucionó tu capacidad de hacerlo?

Para serte sincera, yo no llamo a mis flujos repentinos con ese


nombre inglés que no sé ni pronunciar. Yo con mis amigas hablo
de charkito, soy una garrula monolingüe y me niego a nombrar
algo tan valioso que sale de mis entrañas con otra palabra que
termine por ing. La primera vez que escuché hablar de
eyaculación femenina -tampoco me gusta esta denominación
masculinizante- fue en un artículo escrito por una amiga mía
seropositiva sobre el cuerpo de las mujeres y el vih. Margarita
decía entonces -hacia 1995- que la despreocupación de la
autoridad médica hacia nuestros cuerpos llegaba hasta tal punto
que a nadie se le había ocurrido investigar si el charkito
contenía carga viral. Yo pensé: joder, a mí nunca me ha pasado,
yo nunca me he corrido de esa forma tan generosa. No iba a
pasar mucho tiempo hasta que se abriera la fuente. La primera
vez fue follando con una amante mía, horas y horas. Me quedé
sorprendida y extasiada, como boba. Me dije: esto es correrse
de verdad. Desde entonces he ido aprendiendo la técnica en mi
cuerpo. Te relajas, te abandonas al placer y te abres toda. No
me sucede siempre, pero cada vez más. Y mejor. Y más
cantidad... Al principio me sucedía más masturbándome, la
colaboración externa tiene que ser muy buena para que el
torrente se libere. Nunca me he corrido así con un chico
biológico, no quiero parecer hembrista pero así es. Charlar y
practicar con las zorras de mis amigas me ha sido de gran
utilidad para abrir mis compuertas.

2) ¿Por qué crees que se sabe tan poco de esta práctica


fuertemente política?
Porque del cuerpo y del placer de las mujeres sólo se explica lo
que esté al servicio de la reproducción y de la relación
heterosexual normativa. Porque correrse aparatosamente es
exclusivo de los hombres. (Aunque no dudo que millones de
charkitos se han desatado a lo largo de los siglos hasta en las
mejores familias.) Porque a las mujeres nos han enseñado a
avergonzarnos de nuestro cuerpo, a ser discretas y sigilosas.
Porque el sexo -tanto para mujeres como para hombres- ha sido
fuertemente castrado por la puta iglesia y la medicina patriarcal
para dominarnos.

3) En los últimos meses hemos visto llegar una nueva ola de


represión hacia las prácticas sexuales, ya sea en su expresión
(el porno-impuesto italiano), en su representación (la censura de
la peli Brokeback Mountain en Italia), o en sus deseos (el
posicionamiento del papa contrario a la petición de Amnistía
Internacional a favor de la despenalización de la
homosexualidad en los países donde todavía es un delito).
¿Por qué crees que vuelve esta onda represora?
La represión y el dominio del estado sobre nuestros cuerpos no
cesa nunca, es más, se va estrechando. Las torcidas y las brujas
mantenemos un pulso permanente contra el poder. El
capitalismo imperialista blanco heterosexual y patriarcal ha
acelerado su avance sobre nuestras vidas desde el 11 de
setiembre, su gran jugada maestra. Y en todas las guerras
somos nosotras las más perjudicadas porque el orden aprovecha
-y las provoca- para reasentarse. ¿Qué decirte de Italia, querida,
que tú no sepas? Con el puto Vaticano ahí en medio pudriéndolo
todo.

4) ¿Por qué las prácticas sexuales, el sexo como acto, asustan


así el poder?
El sexo, entendido como diferencia y como acto, es el centro de
todas las disputas del poder. A las mujeres se nos enseña a
obedecer a través de la amenaza de la violación y de la
obligatoriedad de la maternidad. Corrernos sin ellos es
demostrarles que no les tememos tanto. Lo mismo pasa con los
hombres: desperdiciar su sagrado semen sin dominarnos a
nosotras es decirle al poder heteropatriarcal que tienen algo
mejor que hacer. Nada se sostendría en este puto mundo sin la
heterosexualidad obligatoria.

5) En la sociedad contemporánea y a lo largo de los siglos el


arte y la pornografía han sido y siguen siendo lenguajes muy
controlados por el poder, para ti ¿por qué esto es así?
No hay nada más suvbersivo que el placer de las dominadas
(mujeres, bolleras, maricas,...). Se nos exije el peaje de la
desdicha para permitirnos subsistir en los márgenes. Por eso es
tan necesaria nuestra pornografía extraviada y pervertida. Hace
ya años que me aburrí del activismo serio y puritano, que
abandoné el feminismo decente. Reapropiarme del insulto puta
es lo más hermoso como insurgente del género que me ha
pasado, más que follar con mujeres o que practicar s/m.

Hola Helen Torres, Zorra suprema, " practico la astucia de la


zorra y soy un putón descarado "
1) ¿Tú practicas el squirting? ¿Cómo lo aprendiste (si lo has
aprendido) o cómo evolucionó tu capacidad de hacerlo?

La primera vez fue hace como ocho años. Yo lo relaciono con mi


post_maternidad. Cuando parí me sentí muy mal tratada por la
institución médica, mi cuerpo fragmentado y separado de
cualquier emoción o sentimiento, sentí la injerencia clínica e
instrumental como una violación tan bestia (por estar
legitimizada, no sólo dentro de la institución médica sino por
todas las otras, es decir, familia, Estado..). Entonces sentí la
necesidad imperiosa de reconquistar mi cuerpo, pero, como
toda reconquista, fue arar sobre lo arado, así que no volví atrás,
sino que fui mucho más allá. Un día un amigo me dejó un libro, ?
El Tao del sexo?. Allí había un capítulo que explicaba sobre
cómo conseguir una eyaculación. Así que lo intenté y funcionó?
Después de esa primera vez, ya no pude parar? A veces hago el
esfuerzo de contenerme, sólo para no manchar, pero pienso que
las mujeres ya nos contenemos demasiado, así que prefiero
inundar las alcantarillas?

2) ¿Por qué crees que se sabe así tan poco de esta práctica
fuertemente política?

Porque la sexualidad está reprimida por la alianza entre la moral


burguesa y la cristiana para controlar nuestras emociones y
placeres. Cuando comprendes que la sexualidad es una correa
de transmisión de la libertad, no es tan fácil dejar la cama para
ir a trabajar, y mucho menos, bajar la cabeza y aguantar la
humillación del capitalismo? Por eso creo que el hedonismo es
una herramienta de transgresión muy poderosa.

3) En los últimos meses hemos visto llegar una nueva ola de


represión hacia las prácticas sexuales, ya sea en su expresión
(el porno-impuesto italiano), en su representación (la censura de
la peli Brokeback Mountain en Italia), o en sus deseos (el
posicionamiento del papa contrario a la petición de Amnistía
Internacional a favor de la despenalización de la homosexualdad
en los países donde todavía es un delito).
¿Por qué crees que vuelve esta onda represora?

Ante una nueva crisis del sistema financiero, viene seguida una
crisis económica, lo que significa que la gente deberá trabajar
más por menos, una vez más. Para eso, es necesario que la
gente tenga miedo (nuevos virus, amenazas de guerras
nucleares, Apocalipsis ecológico?) y decida que es feliz
trabajando para el enriquecimiento de la élite gobernante. Una
forma muy eficaz de propagar el miedo es metiéndose en
nuestras camas y nuestros sueños: medios de comunicación,
educación y leyes se encargan de definir qué hemos de desear y
qué no, cuál es el cuerpo que hemos de tener, qué tipo de
enfermedades hemos de padecer? Y, una vez más, el sexo es la
última frontera?

4) ¿Por qué las prácticas sexuales, el sexo como acto, asustan


así el poder?

(ya está en la otra respuesta, creo ;)

5) En la sociedad contemporánea y a lo largo de los siglos el


arte y la pornografía han sido y siguen siendo lenguajes muy
controlados por el poder, para ti ¿por qué esto es así? ¿Y tú por
qué utilizas estos dos lenguajes?
El porqué creo que ya lo apunté antes. El porqué yo los utilizo:
porque libre expresión de la sexualidad es la máxima expresión
de libertad: nuestra animalidad, nuestros deseos hechos
realidad? eso es una bomba!!! Imagínate que las mujeres, en
vez de pensar que su marido es generoso porque lava los platos
y lleva a los niños al cole de vez en cuando, decidiera que ella
puede eyacular. Para ello, tiene que relajarse y gozar,
entregarse, conciliar, negociar consigo mismo y con su pareja?
y, sobre todo, no estar cansada ni agobiada? Si eso ocurriera,
esa mujer, si lograra eyacular, se liberaría a su vez de la carga
de la maternidad, e intentaría vivirla como un regalo, se
liberaría de la carga de la pareja, y la viviría como una elección,
y la carga doméstica, que la repartiría entre toda la familia. Y si
toda la familia pasara de ella, ella, que habría descubierto su
propio poder, les mandaría a la mierda? Ni siquiera querría ser
madre!! Digamos que esto es una revolución, no? ¡¡Cómo iba la
Iglesia y la élite dominante tolerar esto!! (Por algo será que ni la
iglesia ni los sátrapas disfrutan de su sexualidad?)
muchisimas gracias a todas por el apoyo y la participación!

S-ar putea să vă placă și