1. Busca informacin sobre los aspectos ms relevantes de la vida y
la obra del autor.
Juan Luis Panero
En 1976 Jaime Chvarri inici
el rodaje de lo que tena que ser un reportaje sobre el padre: Leopoldo Panero, el material se convirti en la pelcula El desencanto que acab siendo un smbolo tanto de la familia como de la poca y fue una pelcula de culto para toda una generacin. En El desencanto la madre, paradjicamente llamada Felicidad, y dos de sus hijos, retrataron a travs de sus recuerdos al poeta, siempre ausente. Pero sobre esta peculiar y decadente estampa familiar pes el reflejo de una poca que se agotaba. Los ltimos coletazos del franquismo se dejaron ver a travs de la evocacin de la vieja gloria de quien fuera uno de los escritores oficiales del rgimen. El desencanto fue adems la ltima pelcula mutilada por la censura cinematogrfica en Espaa y una de las obras de Chvarri ms reconocidas por la crtica. Ya en 1994 lleg Despus de tantos aos, pelcula en la que Leopoldo Mara, el hijo, se convirti en el eje central del film y Ricardo Franco retom la labor de retratista emprendida por Jaime Chvarri dos dcadas antes.
2. Busca en el diccionario las palabras del poema cuyo significado
desconozcas.
Paradjicamente de manera contraria a la lgica
Mutilada: cortado o cercenado
3. Comenta con tus palabras lo que se expresa en el la turbia fijeza de mis ojos sobre ella, permanecen, dando fe de aquel tiempo, memoria de la carne. poema. Juan Luis Panero MEMORIA DE LA CARNE COMENTARIO: Por la noche, con la luz apagada, miraba a travs de los cristales, entre los conocidos huecos de la persiana. Como un rito o una extraa costumbre la escena se repeta, da tras da, igual siempre a s misma. Frente a frente su ventana, la vea aparecer y bajo la tenue claridad de la luz, lentamente, irse haciendo desnuda. Sus ropas caan sobre la silla, primero grandes, luego ms pequeas, hasta llegar al ocre color de su cuerpo. Andando o sentada, sus movimientos tenan la intil inocencia del que no se cree observado y la imprevista ternura del cansancio. Cuando todo volva a la oscuridad, los apresurados golpes del corazn se aquietaban con una sosegada plenitud. De quien as, ocultamente dese, nunca supe su nombre y el romper de su risa es an el vaco. Sin embargo all, en la perdida frontera de los catorce aos, por encima del Latn imposible y de los misteriosos nmeros de la Qumica, el temblor detenido de mis manos,