Sunteți pe pagina 1din 110
Pana IT Fexcathy COT ee eR MCS Mees ory Sree ere) [No pretendo ser nic, slo pretendo ser miembro de una pequena mineria que ce que bay F sank bola hooped iomioiae tao het aah a stants mat peace Co a Pye Whitehead vale mdi gue un milla de santurronasdeclaraciones Pi ere eer ed ee (SE Si Se aspera pop ian reprimomoa Pe ee ie ee ar ae a roy Gregory Bateson CGA H Pee RE Gh Sha Mea are Pee eae i ed ate Se ene a I ae a SN ea PO ee nae IMR a ee eee a ee Oo ae ee ee eens Le tree ae et ee sa eh cms i aia Brome eo Ge? te Inicalmente slo incorporaba elementos fagmentarios en nuestra relaion fue ereciendo y Iacéndoe cada vee menes fica la ian lg parecer cada vez més ma al miso ee ee ea ete ce eed “Mary Catherine Bateson Pe eee eee eee een ae rd aL ee eee ee ke et eared feo tcwr palpi) 1 grap pare uprshicy mtr Paar NERO een nine eer ee ent Peter see pronto eee eee aries ee eee ee Paes ioe a ected i eee elas Pete ees a Pe sees er ante ee Fe enn ae ete ee es eee te ECSU ers cn ne ‘Mead, es autora de un rayon haere ohn gt fpgar ee eer a uno por Gedisa Ha Hevado cabo investigates en el Medio Orcs y en as Pee he mab rime eer ee ry ei ot PSE pet Ae HA eT ee rire Antropologia (oneesm reba Came ens any WErsntmes los angeles WNL aS aR ganz1912 Gregory y Mary Catherine Bateson EL TEMOR DE LOS ANGELES ganz1912 Editorial Gedisa ofrece los sipulentes alos dela EL TEMOR DE LOS ANGELES COLECCION EL MAMIFERO PARLANTE Esa coleccn eitori, dirigida por Eliseo Vern, consa de las obras de los mis pretigisos autores e todo el mundo, y de un ampioespecto de temas, iva en Serie Mayor —deicada a temas teticos, nicos y prfesionaes— y Serie Menor rau pblco més anplio— por Serie Mayor ELISEO VERON La semiosis social ALAIN BERRENDONNER —Elementos de pragmdtica . teu Gregory y Mary Catherine Bateson PAUL YONNET Juegos, modas y masas PIERRE BOURDIEU Cosas dichas PAUL WATZLAWICK (COMP) La realidad inventada GREGORY YMARY El emorde los ngeles (CATHERINE BATESON Serie Menor MARC AUGE Elviajero subterrdneo MARC AUGE Travesia por los jardines de Luxemburgo ELISEO VERON Construir el cacontecimiento Isaac JosePH Eltransetinte y et espacio urbano gedisa ‘Titulo del original inglés: Angels Fear © 1987 by the Estate of Gregory Bateson and Mary Catherine Bateson. Director de la coleccién El Mamifero Parlante: Bliseo Veron Traduccién: Alberto L. Bixio Cubierta: Maqueta de coleccién: Julio Vivas Realizacién: Acuatro Composicién tipogrifica: Acuatro mera edicién, 1989, Barcelona Derechos para todas las ediciones en castellano © by Editorial Gedisa, S.A. Muntaner 460, entlo,, 1° Tel, 201 6000 08006 - Barcelona, Kspaita ISBN: 84-7432-347-9 Depésito legal: B. 20.200 - 1989 Impreso en Romany Valls, S.A. Verdaguer 1 - 08786 Capellades (Barcelona) Impreso en Bspafia Printed in Spain Queda prohibida la reproduccién total o parcial por cualquier medio de im- presién, en formaidéntica,extractadaomodificada,en castellano o cualquier otro idioma. Este libro esté dedicado a: Lois Bateson y Bakev Kassavjian. Sin ellos no seriamos nosotros mismos. Tu padve yace enterrado bajo cinco brazas de agua; se ha hecho coral con sus huesos; los que eran ojos son perlas. Nada de él se ha dispersado; sino que todo ha sufrido la transformacién del mar ‘ye ha convertido en algo rico y extrafo. Las ondinas, cada hora, hacen sonar su campana ding-dong. jEscuchad! Ahora la oigo, ding-dong. Shakespeare - La tempestad EXPRESIONES DE RECONOCIMIENTO L IL UL # Vil. vull. xl. XIL Indice Introduccit 1. Planteo del contexto 2. Definicion de la tarea .. El mundo del proceso mental ‘Metdlogo: gPor qué cuentas historias? ....... El modelo Ni sobrenatural ni mecanico Metélogo: gPor qué placebos?... No sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha, Metdlogo: Secretos. Modos de defender la fe . Metélogo: ¢Estas insinuando algo? Los mensajes de la naturaleza Metilogo: La adicciéi 43 48 61 4 XIIL Dios no se dar 138 XIV, Metélogo: Maro, 17 XV. Laestructurcontextura 152 1. Mapa y te 2, LAMECESAA nnn 3. Entreline.. 158 4, Las brech contextura ... 162 167 XVI. Inocencia yincia XVII. Qué es punetéfora? 182 XVIIL Metalogo: Btente espectro 199 GLOSARIO = NOTAS SOBRE LASES DE LOS CAPITULOS.. 209 INDICE TEMATICC.. 211 Expresiones de reconocimiento Hace cinco afos que me propuse completar e! libro en el que estaba trabajando mi padre en el momento de su muerte, y en ese intervalo han ‘ocurrido muchas cosas. En primer lugar, debo agradecer a todos aquellos que esperaron pacientemente una obra que deseaban ansiosamente ver publicada, la viuda de mi padre, Lois Bateson, otros miembros de la fami- lia, el editor de mi padre y amigos y colegas comunes que mostraron gran moderacién al urgirme para que completara esta obra. La hicieron posible varias instituciones, especialmente al suministrar- me los contextos de la obra y el pensamiento de Gregory: el Esalen Insti- tute, el Camaldolese Hermitage en Big Sur, San Francisco Zeb Center y la Lindisfarne Association. EI Instituto de Estudios Interculturales dispone formalmente del legado literario de mi padre y me suministré una compu- tadora en la que quedé registrado el manuscrito. Amherst College me fa- cilité el trabajo al permitirme desentenderme de mis obligaciones y guar- dar la necesaria distancia entre esa institucién y yo misma; asi pude con- centrarme en la obraty en el pensamiento creador. te libro tuvo el mismo agente, John Brockman, y el mismo editor, William Whitehead, desde que fue concebido por primera vez, y estas dos personas prestaron todo su apoyo para mantener viva la obra a través de los cambios de autor y de editor. Otras personas que desempefaron en esta tarea un importante papel son Lois Bateson, mi hermano John Bate- son, en cuya casa de British Columbia compuse varios capitulos, Joseph y Jane Wheelwright. Mas recientemente, aprovech¢ la ayuda y sugestiones de Rodney Donaldson, Richard Goldsby, Jean Houston, David Sofield, William Irwin Thompson y Francisco Varela, cada uno de los cuales con tribuy6 con valiosas perspectivas. La mayor parte del trabajo de este libro se realiz6 en Cambridge, Mas- sachusetts, con el apoyo del mas alentador de los criticos, mi marido, Bar. kev Kassarjian, También conte con la compaiia de un dulce perrito Ak: ta que incansablemente me asegura que la epistemologia es ciertamente un asunto de relaciones y me consuela de las extravagancias de la compu- radora, M.C.B. Cambridge, Massachusetts ‘Agosto de 1986 13 Introduccion (MCB y GB) 1, Planteo del contexto (MCB) En 1978, mi padre, Gregory Bateson, completé el libro titulado Mind and Nature: A Necessary Unity” (Dutton, 1979). Ante la amenaza de una muerte inminente por céncer me habia llamado desde Teheran a Califor- nia para qué trabajéramos juntos en dicho libro. Casi inmediatamente, cuando se comprobo que el cancer cedia ostensiblemente, Bateson co- menzé a trabajar en el nuevo libro que iba a llamarse, Donde los dngeles te- ‘men pisar, aunque a menudo se referia a él llamandolo El temor de los dn- 4geles. En junio de 1980 tlegué a Esalen, donde vivia mi padre; alli me ente- ré de que su estado de salud habia vuelto a empeorar y entonces él me propuso que colaboraramos en el nuevo libro, esta vez. como coautores. ‘Mi padre murié el 4 de julio sin que hubiéramos tenido la oportunidad de comenzar a trabajar, y después de su muerte dejé de lado aquellos manus- critos. Ahora por fin, trabajando con la pila de manuscritos que Gregory dejo a su muerte —misceldneos, inconexos e incompletos— procuro aportar la colaboracién que é! me habia pedido. No me parecié urgente despachar con prontitud este trabajo. A decir verdad, me importaba respetar la advertencia contenida en el titulo de Gregory: no precipitarme como una tonta. La verdadera sintesis de la obra de Gregory se encuentra en Mind and Nature, el primero de los libros que ‘compuso para comunicar sus ideas al lector no especialista, Steps to an Ecology of Mind** (Chandler, 1972 y Ballantine, 1975) reunié jo mejor de losarticulos cientificos de Gregory escritos para una gran variedad de au- ditorios especializados y publicados en una mulliplicidad de contextos; mientras tanto Gregory cobraba plena conciencia de las posibilidades de su integracién en una obra. La aparicién de Steps demostraba tambien la existencia de un publico avido por abordar la obra de Gregory como un modo de pensar, independientemente de los contextos historicamente * Hay versién eastellana: Bip ynaturatea, Buenos Aires, Amorrort, 1982, {T. ** Hay versincastellame Pasos hacia una ecolegta de la mente, Buenos Aires, Lobe, 197. (h 15 variados en que habian sido formulados primero sus puntos de vista; esto Io impulsé a realizar una nueva sintesis y nuevos esuerzos para comu- nicarse. ‘Donde los éngeles temen pisaribaa ser un libro diferente. Gregory gra dualmente se habia dado cuenta de que la unidad de la naturaleza que él afirmara en Mind and Nature s6lo podia comprenderse en virtud de meta foras familiares procedentes de la religién; en realidad, estaba enfocando esa dimensién integradora de la experiencia que él Ilamaba lo sagrado. ra ésta una cuestion que enfocaba con gran ansiedad y cautela, en parte porque se habia educado en un hogar dogmaticamente ateo y'en parte porque se daba cuenta de las potencialidades contenidas en la religién ‘que permiten la manipulacién, el oscurantismo y la divisibn. El simple em- pleo de la palabra religién suele desencadenar una serie de equivocos. Por €30 el titulo del libro expresa, entre otras cosas, su vacilacién y su deseo de plantear nuevas cuestiones, cuestiones que se siguen de su obra ante- rior, pero que exigen un tipo diferente de saber, un tipo diferente de cora- je. ¥ yo experimento la misma ansiedad. Esta obra es un testamento, pero ‘un (estamento que no me incumbe s6lo a mi, sino que incumbe a todos aquellos que estén dispuestos a debatirse con semejantes cuestiones. ‘Al preparar este libro, debi tener en cuenta una serie de tradiciones sobre la manera de tratar un manuscrito que quedé incompleto a la ‘muerte del autor. La posibilidad mas evidente y cientifica era a de separar escrupulosamente nuestras respectivas partes y poner una nota de pie de pagina o unos corchetes cada ver. que introducia yo alin cambio en el texto y unsic, cada vez-que me abstuve de hacerlo cuando mi juicio me su- xgeria empero que un cambio era necesario. Con todo eso, puesto que la in- tencidn de Gregory era la de que completaramos juntos este manuscrito, decid no seguir el camino del editor que se desentiende del texto, de ma- nera que hice correcciones ¢ introduje alteraciones menores cuando és- tas eran necesarias. Por supuesto, los manuscritos originales se conserva- rin, de suerte que sila obra merece atencién, alguien algtin dia podra es- cribir una monogratia cientifica sobre las diferencias que hay entre los manuscritos y el texto publicado que representa el trabajo de nosotros dos. Limitaré mi escrupulosidad a la conservacisn de las fuentes, Al cabo de algunas vacilaciones, decidi no complementar los materiales que Gre- gory habia contemplado como de uso posible en este libro apoyandome extensamente en sus otros escritos, sino que incurri en ciertas omisiones y elegi ciertos puntos como lo habria hecho Gregory. Material que en par- te duplica publicaciones anteriores fue sin embargo a menudo conserva- do para que contribuyera ala argumentacion general Por otro lado, cuando mis agregados 0 desacuerdos eran verdadera- ‘mente sustanciales, no me resolv sencillamente a eludirlos y escribir algo que el lector podria confundir con la propia prosa de Gregory. Bo habria significado volver a desempefiar el papel de amanuense, el papel que de- sempené en Mind and Nature, libro en el que fund todas mis contribucio- nes con las de Gregory, como han hecho siempre las mujeres y las hijas 16 durante siglos, La elaboracién de este libro fue en si misma un problema de ecologia y epistemologia, porque el saber de Gregory estaba empapa- do por un modelo distintivo de la relacién y de la conversacién De manera que me parecié importante, cuando hice algunos agrega- dos significativos, que quedara claramente senalado que éstos, correctos © equivocados, me pertenecian. Decidi hacerlo en parte recurriendo a la forma de secciones puestas entre corchetes y en parte recurriendo a la forma de lo que Gregory lamaba metélogos. Durante un periodo de cerca de cuarenta afios, Gregory solia emplear una forma de didlogo entre “el padre” y “la hija’; ponia los comentarios y preguntas en boca de una “hija” ficticia, quien hacia la perenne pregunta “Papa,

S-ar putea să vă placă și