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APUNTES ACERCA DEL RETRATO FOTOGRAFICO

Sin lugar a dudas ésta es la disciplina más difícil y a la vez apasionante de la fotografía. El
lograr una foto "espectacular" es un equilibrio entre el dominio técnico, la planificación,
nuestra imaginación y el buen hacer del modelo.

Lo primero que hemos de decidir es si usaremos un modelo profesional o uno aficionado


como algún amigo o amiga. Está claro que el uso de modelos profesionales tiene muchas
ventajas, no sólo por su aspecto físico, sino porque además saben posar y explotar bien su
imagen. Pero como esto sólo está al alcance de unos pocos, nos ceñiremos a lo que
tenemos a mano: las amigas y amigos.

El mayor inconveniente con ellos es cuando se resisten y usan la típica frase: "Es que yo no
soy fotogénica/o". Pero como nosotros somos constantes (es la única forma), insistiremos.
Las fórmulas que mejor resultados me dan están siempre precedidas por un periodo de
adaptación, la cuestión es que se relaje y lo tome como un juego, por supuesto siempre hay
que estar atentos para sacar alguna foto. Si lo haces bien y sobre todo con simpatía ya no te
pondrán resistencia posteriormente.

Hagas lo que hagas para convencerlo/a, primeramente tú debes comportarte como un


profesional, es decir:

-Escoge un día en el que sepas que el modelo se encuentre descansado, o se notará en la


cara.

-Busca las horas mágicas, a primeras horas de la mañana (pero sin darle un madrugón) y a
últimas encontrarás una luz llena de matices favorecedores.

-Debes conocer tu equipo y el manejo de éste como a la palma de tu mano. Si no lo


conoces, entonces debes hacer uso del humor para que el modelo vea una fachada de
simpatía en vez de los nervios que te están carcomiendo. Si el modelo se da cuenta de que
te encuentras nervioso, se contagiará y ya no habrá nada que hacer, la sesión será un
fracaso.

-Los teleobjetivos son los más indicados. Te ayudan a mantenerte a cierta distancia del
modelo para no agobiarlo y su escasa profundidad de campo ayuda desenfocar el fondo. La
gama de lentes que van desde el 85mm al 135mm son las más indicadas, aunque algunos
prefieren ópticas más largas aún.

-Toma una lectura de la luz directamente de su piel con un buen fotómetro de mano, o
acércate con la cámara, utiliza la apertura/obturación adecuada y luego aléjate y reencuadra
la escena.

-Sé rápido y muéstrate seguro con lo que estás haciendo (aunque en el fondo no tengas ni
idea), ésta actitud dará seguridad al modelo, además, las buenas expresiones son efímeras.

-Los fondos siempre sencillos y uniformes, es la modelo lo que importa, de otra forma no lo
necesitas. Que sólo ella o él sean el centro de la foto.

-No agobies al modelo, no está preparado para ello.


-Ni se te ocurra recriminarle lo más mínimo... ¡recuerda que lo hace por amistad!

-Halágala/o constantemente y dile lo bien que lo está haciendo.


-Si ves que está demasiado nervioso/a o un poco cansado/a, para inmediatamente la sesión
y ofrécele algo de beber y/o de comer.

-No abuses en la primera sesión, no más de un par de rollos, salvo que él o ella se sienta
animado/a y desee seguir un poco más.

-Cuidado con expresiones e intentos tales como: "desabróchate la blusa", "ponte más sexy",
"muéstrame tus encantos"... puede pensar que tus intenciones son algo más que unas fotos,
y se pondrá a la defensiva y nervioso/a.

-Trátalo/a siempre con un trato exquisito y volverá a trabajar contigo. Esto incluye el
regalarle igualmente alguna de esas fotos en la que creas que está mejor que en ninguna.

-Muéstrate siempre como el amigo que eres. No te muestres distante con él, ya que se
supone que eres un amigo sacándole unas fotos, y no un profesional que exige a sus
modelos porque les ha pagado, así que nada de malcriadeces ni prepotencia.

-Tienes que mantenerlo siempre relajado y cómodo. Por ejemplo llévate un CD Player
portátil con la música que más le guste a él/ella. Si te acompaña más gente para ayudarte en
la sesión o para hacer de modelos que NUNCA haya un extraño o alguien con quien no
tenga confianza, o harás que se sienta incómodo/a. Dale conversación y bromea con él/ella
entre pose y pose.

-Es importante tanto subrayar la belleza como resaltar la personalidad, la pose que adopta el
modelo es decisiva. La edad, el sexo y el porte son factores importantes a la hora de
escoger la pose.

-En los primeros planos debes enfocar los ojos o al ojo más próximo si la cabeza está
ladeada. Procura trabajar con la luz suficiente como para que la profundidad de campo sea
suficiente para mantener todo el rostro nítido, salvo que desees específicamente dar un halo
de misterio difuminando la imagen para obtener un efecto más suave.

-Evita los primeros planos frontales salvo que busques un efecto específico. Éste tipo de
planos favorecen a muy pocos modelos... si la belleza del rostro del modelo te gusta,
entonces fotografíalo en algún primer plano frontal.

-¿Qué hacer con los brazos y manos? Nada de brazos cruzados o caídos, para evitarlo
puedes hacer que se apoye en algo (un árbol, una silla, un muro o una cerca...) o que use la
mano para apoyar la barbilla, las apoye sobre los muslos o las rodillas... lo que sea, pero
que no "estorben" ni parezcan flácidas. Así que presta a las manos la misma atención que al
rostro.

-Insiste en que sea natural, ni quieras ni consientas que intente imitar a algún/a modelo
profesional, sólo lograrás que quede artificial.

-Que suba un poco la cabeza y agáchate ligeramente, lograrás que su figura salga más fina
y estilizada.
-Que ladee ligeramente el cuerpo, así se disimulan formas que de hacerlo frontalmente se
verían aumentadas. También prueba poses con la cámara al nivel de sus ojos.

-Prueba multitud de encuadres y posturas con ella, no te dejes guiar por su supuesto "lado
bueno", es muy fácil que tenga otros tan buenos o incluso mejores, pero que no los conozca.
-Que mantenga entreabierta la boca, tendrá un gesto más distendido y agradable, o en caso
de tener que mantener los labios juntos que no los apriete, sólo que descanse un labio sobre
el otro. Y por supuesto sonrisas, pero sin que lleguen a ser muecas exageradas.

-Que mantenga los ojos abiertos, ganará la cara en expresividad.

-Recuerda que en retratos lo que prima es la expresión por encima de todo, incluso si has de
sacrificar el fondo u otros elementos en el encuadre no dudes en hacerlo.

-Si buscas una pose determinada explícasela con tranquilidad y con suavidad. Si no la hace
bien a la primera, no importa, siempre podrá repetirla las veces que sea, no pienses en que
tendrás que gastar más rollos, sólo importa lograr una imagen de la que sentirnos
orgullosos, y eso no tiene precio. Con esto aprovecho para recordarte que lleves película de
sobra.

LA ILUMINACIÓN EN EXTERIORES

El retrato en exteriores entraña dificultad, ya que no tenemos la oportunidad de crearla a


voluntad como en un estudio. La mejor luz se encuentra por la mañana y o en las últimas
horas de la tarde, es decir, cuando el sol ilumine oblicuamente en un ángulo menor de 45º.
Prepara la sesión entre una a tres horas después del amanecer o antes del crepúsculo. Si te
ves obligado ha realizar alguna foto con el sol encima, entonces búscate una sombra clara.
Los días con ligeras nubes o con brumas ofrecen una luz tamizada y suave muy
aprovechable para el retrato.

Habrá que decidir la colocación del modelo con respecto al sol. Rodéala para ver cómo
conseguir la iluminación más equilibrada y el fondo menos molesto. Y recuerda que la
lectura de luz haz de hacerla directamente del rostro del modelo para que el fondo no afecte
en la lectura.

Para ayudarnos a controlar la iluminación hemos de llevar con nosotros un par de reflectores
y también un par de flashes. Los reflectores pueden ser paraguas reflectores o si no tienes
muchos medios, un par de planchas de tecnopor blanco que puedes conseguir en una tienda
o almacén. Los flashes son una alternativa barata a los equipos profesionales que se
despliegan en producciones con presupuesto. Con un par de cables prolongadores
conectados a la cámara para la sincronización o el uso de células fotoeléctricas para que se
activen al mismo tiempo, dispondrás de un par de luces portátiles y adaptables para
componer la luz. Una cartulina blanca también puede servir, pero no suele tener mucha
resistencia a los transportes.

También puedes utilizar como reflector papel de aluminio, pero a mí personalmente no me


gusta, pues dan una luz reflejada muy brillante que rara vez suele coincidir con la
iluminación suave que requiere un retrato.

Con el sol situado detrás del modelo, se recurrirá a un reflector.


No olvides que nuestros ojos utilizan las sombras como el principal indicio de volumen. Así
que es primordial ajustar las luces auxiliares y reflectores de la forma correcta para lograr el
efecto deseado.

FOTOS FAMILIARES Y DE GRUPO

Uno de los recursos más comunes, sobre todo para los aficionados, es recurrir a familiares.
Son fáciles de convencer y al fin y al cabo forman parte de nuestra vida cotidiana. Éste tipo
de fotografía te resultará especialmente sencilla de llevar a cabo, ya que el conocimiento que
tenemos sobre la forma de ser de cada familiar nos ayudará a retratarlos en su mejor
momento.

Cuando estoy en familia lo que más me divierte es ir a la caza de fotos espontáneas, para
ello haremos uso de los teleobjetivos. Es la mejor forma de pillarlos desinhibidos y naturales.
Aprovéchate de esos momentos de juego, baño en la playa o en una piscina. Lograrás los
mejores resultados en ambientes y lugares relajados.

Otra forma de pillarlos inesperadamente es fotografiarlos en el trabajo o en actividades de


ocio como en un partido de fútbol, una excursión... Recuerda que una actividad por sí misma
provee suficiente interés visual, así que lo mejor es buscar fondos simples y concentrarse en
unos pocos detalles bien escogidos.
Retratar a un individuo a solas es bastante más difícil que hacerlo en grupos. Los hermanos
y amigos te resultarán más fáciles si los fotografías en grupo, luego con un buen teleobjetivo
podrás realizar retratos de un único individuo si es lo que buscas.

Para fotografiar a padres e hijos lo mejor es aprovechar ese momento en que entablan una
conversación o comparten unos momentos juntos. Si eres discreto ni se enterarán de tu
presencia. Si ya lo haces de una forma más estudiada, es interesante traducir visualmente la
relación entre padre e hijo escogiendo un momento de contacto físico realizando un primer
plano.

A los grupos hay que intentar colocarlos sobre un fondo liso o bien esperar a que estén
juntos para realizar un encuadre ajustado.

Si vamos a realizar una foto de grupo familiar en dónde todos estén implicados, el secreto
está en colocar primero al grupo y después trabajar con la pose de cada uno. Anímalos a
que entablen alguna conversación que contribuya a mantenerlos relajados, pero siempre
controlando la situación para que todos estén atentos en el momento del disparo. Sitúalos de
forma que no se tapen los unos a los otros, aprovechando para ello una escalera o un
terreno con distintas elevaciones si te es posible. Puedes ponerlos de forma generacional
(los más pequeños delante, y cada fila una generación superior), en clan familiar (cada
miembro rodeado por su familia más cercana) o simplemente los más bajitos delante y los
más altos detrás. El situarlos es tu reto personal. Eso sí, usa una óptica correcta que
englobe a todos, y tras la foto, puede ser buena idea retratar cada clan por separado.

FOTOGRAFÍAS DE NIÑOS

Con los niños es fundamental "entrar" en su mundo. Para ello:


Siempre es mejor hacerlo agachados y desde su altura para que se les vea con más
naturalidad, ya que si lo hacemos desde arriba, su rostro o figura quedarían
desproporcionados. Así que si es necesario túmbate en el suelo.

Mantén a los sujetos ocupados para lograr gestos espontáneos. Bastará un juguete como un
balón, o alguna golosina como un chupete o un chicle (si tiene edad para ello).

Si eres padre o madre (o esperas serlo en breve) fíjate que los niños pequeños se
desarrollan con rapidez los primeros meses; conviene fotografiarlos al menos una vez cada
semana comenzando a hacerlo desde recién nacido en el hospital (y no olvides a la madre).
Igualmente quedarán muy entrañables las fotos del papá preparando el primer biberón, los
abuelos con el niño entre los brazos, el primer baño, etc. Entre los seis meses y el año
puedes bajar la cadencia a una foto cada dos o tres semanas. Con esto que pueda parecer
exagerado lograrás un magnífico álbum del desarrollo de tus hijos.

Aléjate un poco para que así se aísle con su juego y se olvide de la cámara (y de camino no
dejen su huella en el objetivo, tienden a sentirse atraídos por los objetos brillantes). Usa la
óptica típica de retratos o la que mejor se adapte a tu forma de ver la fotografía.

No intentes forzarlos a que realicen un gesto. Se pondrán de mal humor, además, eres tú
quien debe estar a la caza de sus gestos, y no ellos a tu servicio... entre otras cosas porque
no entenderán qué quieres (esto, claro está, dependerá de la edad del niño).

El elemento sorpresa será también un buen arma a tener en cuenta, y si encima no te haces
notar... tardará en darse cuenta de tu presencia. Ajusta previamente la exposición y el
enfoque antes de hacerlo, esto te dará más tiempo para fotos; una vez ajustada la máquina,
ya puedes llamar la atención del niño.

Para no asustar al niño con destellos de flash utiliza película rápida como la ISO 400 con
una velocidad obturación rápida (1/125 te será cómoda, sobre todo si posees un objetivo
luminoso de alrededor del f/2.8); las modernas películas rápidas poseen un grano
suficientemente fino y te permitirá congelar cualquier movimiento del niño.

FOTOGRAFIAR PERSONAS MAYORES

La colocación de las fuentes de luz será un factor extremo. No hemos de permitir que arrojen
sombras duras. Sólo cabe pues un tipo de iluminación: difusa y suave.
El mayor problema con el que nos enfrentaremos es precisamente al paso del tiempo sobre
su rostro. Por contra, tienen la ventaja de dejarse fotografiar con facilidad.

El soporte en blanco y negro suele ser muy interesante para este tipo de retratos, pero no
debemos descartar el color. Para disimular más las arrugas haremos uso de filtros difusores
o del conocido truco de la media (tipo panties) en el objetivo.

Los mejores profesionales utilizan el siguiente truco: compran un difusor de tamaño más
pequeño que el diámetro frontal del objetivo. Lo que hacen es colocarlo en la parte anterior
del objetivo, adherido con unas bolitas de plastilina. Esto se hace con el objeto que la
difusión sea más sutil y delicada. Puedes probar esto también con la media, es decir,
meterla por la parte anterior del objetivo, quedando cogida por la bayoneta al ensamblar el
objetivo. En el caso de las medias prueba distintas tonalidades (beige para tonos cálidos y
grises para tonos fríos).
Tampoco estará de más un filtro cálido que proporcione una cierta tesitura a los gestos y
expresiones. Usa por ejemplo el filtro 81B para un resultado suave y el 85A para un efecto
más exagerado. En blanco y negro usa un filtro amarillo o naranja para disimular las posibles
manchas de la piel. Si el retratado es calvo, hemos de tener cuidado con los reflejos sobre la
calva; cambia la iluminación hasta que todo quede perfecto o si no puedes con él usa un
filtro polarizador para acabar con ellos combinado con un filtro cálido de los anteriormente
expuestos.

Si el retratado es una persona cercana a nosotros no tendremos demasiados problemas


para sacarle una sonrisa, si es un desconocido tendremos que ganárnoslo. Charla con él
distendidamente sin hacer ningún disparo (por ejemplo mientras preparas la iluminación) e
intenta encontrar un tema del que le guste hablar (de la vida social en su época, su
familia...). Si esto no funciona y sigue mostrándose impasible, prueba a sacar la foto por
sorpresa. Si esto último falla... haz lo que buenamente puedas.

Si te es posible, fotografíalos en sus quehaceres cotidianos, en su sofá preferido,


paseando... y luego haz una ampliación de la mejor foto y regálasela... no seamos tacaños.

"Quema" rollos y lleva siempre de sobra, las mejores situaciones tienen la mala costumbre
de comenzar... justo cuando hemos disparado el último fotograma que nos quedaba.

EL RETRATO DE MODELOS

El retrato femenino es el más difícil y exigente al que puede enfrentarse un profesional. Las
modelos son coquetas, sensuales y les gusta sentirse y verse guapas, así que si estas
inseguro de ti mismo y de tu técnica...¡no te arriesgues!.

Empecemos por el principio:

Solo las mujeres mas acostumbradas o “lanzadas” no se sentirán cohibidas estando a solas
con un fotógrafo, sobre todo si eres hombre, así que invítale a que venga acompañada de al
menos una amiga, se sentirá cómoda y... quizá ella se emocione y tengas dos sesiones en
vez de una. Indícale que es importante que no venga acompañada del novio, esposo o de un
hombre, pues generalmente suelen desconfiar constantemente del fotógrafo y estará encima
tuyo y de la modelo, lo que destruirá cualquier atmósfera cómoda de trabajo, y eso
repercutirá en la sesión y en las fotos.

Como siempre debes de crear un buen ambiente. Si es época de frío mantener el estudio a
una temperatura agradable con calefactores, o con ventiladores o aire acondicionado en
épocas calurosas. No hay nada peor que una cara encogida de frío o sudada por el calor.

La cámara siempre sobre trípode y si es posible con un cable disparador separado de la


cámara, Esto puede ayudar un poco a que la modelo se olvide de la cámara. El enfoque
siempre sobre los ojos y, con una iluminación suficientemente potente para trabajar con
aberturas pequeña de diafragma. Que la modelo mire directamente a una luz de baja
intensidad previa al momento del disparo para que se le acomoden las pupilas, así los ojos
tendrán un mejor aspecto y por consiguiente mejorara el aspecto del rostro.

Ten en cuenta que tú eres el entendido, así que debes guiar a la modelo para llegar a un
resultado satisfactorio. Impón tu autoridad... pero siempre con simpatía y una sonrisa en la
boca. Recuerda que se trata de satisfacer sus gustos y no los tuyos, así que limítate al tema
técnico y que ella se exprese (fotográficamente hablando) a su manera.

Procura que llegue con una ropa cómoda y con unos colores que le vayan al modelo pero
que no le quiten protagonismo. Los colores cálidos como el rojo, el naranja o el amarillo
atraen la mirada, los colores fríos como el azul y el verde no. El negro puede ser seductor y
el rojo agresivo, mientras que los colores pasteles, son dulces y tranquilizadores. Cuida el
pliegue y la caída de la ropa.

Ten siempre a mano un pequeño camerino en donde pueda cambiarse, con un buen espejo
y material de peluquería para que se retoque el pelo. Dale tiempo suficiente, cuanto mejor se
arregle menos trabajo te costara sacarla guapa.
La naturaleza en su sabiduría las creo sin sombreros así que salvo que ella lo desee las
fotos deben ser "a pelo", y si insiste acuérdate de arrojar luz al rostro, pues el sombrero se
comerá toda la luz ambiental.

Si es posible que luzca un escote... mejor que mejor. Nunca enfada mostrar determinados
encantos. Tanto si tiene escote como si no, busca una postura que realce el busto y
cuidando que los brazos no lo tape. Si posee poco pecho, prueba con una postura en donde
ella mantenga el pecho inclinado, así la ropa los agrandará o que apoye la cara en ambos
brazos para que hagan de pared... pero tampoco fuerces las posturas, al fin y al cabo esos
pechos son parte de ella.

Si los brazos son muy delgados coloca la modelo de lado para situar el brazo más cerca del
objetivo y que parezcan de mayor grosor.

Pon extremo cuidado con las manos. Suele funcionar el situarlas de canto en relación a la
cara para estilizar las muñecas, salvo que las tenga de por si demasiado finas. Si las fotos
son de pie o cuerpo entero cuida la forma de las manos. El puño no ha de estar ni cerrado ni
flácido. Los actores poseen una técnica consistente en cerrar el puño con el pulgar abierto e
ir liberando los dedos progresivamente, empezando por el índice, esto proporciona una
buena posición.

Utiliza en las sesiones un espejo de grandes dimensiones. Ten en cuenta que


psicológicamente cada uno de nosotros no nos conocemos tal como somos, sino al revés, lo
que se conoce como el reflejo inverso de nosotros mismos, pues estamos acostumbrados a
vernos en espejos, y esa es la imagen que generalmente tenemos de nosotros mismos
como normal. Deja que ella busque en el espejo la expresión con la que se siente más
cómoda o atractiva. Cuando la haya encontrado ahí estaremos nosotros para fotografiarla.

Y en general aplica los principios del comienzo del capitulo.

Recuerda siempre que:

La cámara de fotos, sólo es una herramienta con la que plasmar tu creatividad.

LAS IMÁGENES LAS CREAS TÚ, NO LA CÁMARA

Da igual que tengas una máquina de precio elevado entre manos, si tus conocimientos son
mediocres sólo obtendrás imágenes normales. Los resultados dependerán siempre de tu
imaginación y buen hacer.
MENOS siempre es MÁS. Si algún elemento no aporta nada interesante... ¿qué pinta en tu
foto?

Sujeta la cámara siempre con firmeza, con los brazos pegados al cuerpo, y no dejes de
respirar más de un segundo cuando dispares la imagen, o podrás oscilar o tambalearte.

Dispara siempre que puedas sobre un trípode o apoyándote en otras superficies que
mejoren la estabilidad de la cámara. Los resultados al ampliar serán evidentes: mejor nitidez
en los detalles.

Ten cuidado, cuando sujetes una cámara compacta, de que los dedos o el pelo o la correa
no tapen parte o completamente el objetivo. Recuerda que en éste tipo de cámaras la
imagen del visor varía un poco respecto a la que saldrá realmente ya que no están en el
mismo plano.
En cámaras réflex, coloca siempre un filtro UV o Skylight ya que protegerán la lente de tu
objetivo de golpes y arañazos sin absorber luz.

Adquiere cámaras y elementos de marcas de reconocido prestigio.

Mantén siempre limpio los objetivos y la cámara. Usa un bote de aire comprimido y un cepillo
con pera de goma en su limpieza. Con los objetivos usa toallitas limpia-objetivos o un trapito
de los que dan en las ópticas para limpiar las gafas, nada de productos con componentes
agresivos o sin especificar, y no uses el aliento, pues contiene humedad y afecta a la parte
mecánica.

Las películas lentas (número ISO inferior a 100) poseen un mayor contraste.
Busca siempre las horas mágicas: primeras horas de la mañana y últimas de la tarde.

Un sol bajo o una luz rasante lateral realza la textura de un objeto.

Con el sol en posición medio-alto, es el momento ideal para realizar imágenes de alto
contraste, bien disparando hacia arriba desde un punto bajo, o bien recogiendo el reflejo de
los rayos de sol en el agua.

En fotografía de interiores busca escenas en las que existan formas consistentes y tonos de
gran contraste.

Si revelas en blanco y negro, recuerda que un revelador de grano extrafino o un sub-


revelado reducen el contraste y un sobre-revelado lo acentúa.
En B/N, un filtro rojo fuerte oscurece un cielo azul y las sombras, con uno amarillo, los tonos
de piel de las personas salen mas saturados.

Para lograr mayor riqueza de color: con diapositivas subexponer en medio o un punto, con
negativos sobrexponer en medio o un punto. Las diapositivas poseen un mayor contraste y
saturación de colores.

Para que un cielo aparezca con un azul intenso y con la máxima saturación deberás
seleccionar el ángulo adecuado. Normalmente, la posición más adecuada es cuando el sol
está de espaldas al fotógrafo. Usa filtro polarizador.
Las mejores velocidades para lograr sensación de movimiento son 1/8 y 1/15 seg. En
elementos en movimiento se logra una buena sensación disparando a 1/30 seg.
El barrido es otra forma para crear movimiento en el fondo. Para ello comienza a perseguir el
objeto, dispara pero sigue moviendo la cámara hasta finalizar el seguimiento para evitar
brusquedades al realizar el disparo.

Otra forma de detener la acción es esperar al momento en que el objeto llega al punto en el
que su velocidad es casi cero, por ejemplo, en un salto será cuando el saltador haya llegado
a la máxima altura y comience a caer.

Los motivos en movimiento serán más fáciles de sacar nítidos si se mueven hacia o desde ti.

Para eliminar el primer término, utiliza diafragmas muy abiertos para dejar en foco sólo el
segundo término.

Para obtener el mayor margen de nitidez para el primer y último término, coloca el símbolo
de infinito del objetivo frente al diafragma de trabajo.

Para evitar reflejos con luces o flash, no tomes las fotos de frente, sino con un ligero ángulo.

Los fondos deben ser sencillos y ordenados, así no restaran interés al foco de atención.

Acércate siempre lo más posible. Si una foto no resulta interesante es que no estabas lo
suficientemente cerca...

Ten cuidado con las luces fluorescentes, su tonalidad verdosa rara vez mejora una imagen.
Si realizas un retrato debajo de una luz fluorescente, lo normal es que el pelo tenga una
dominante verdosa, así que cuidado.

La mejor manera de tomar fotos con luz de vela es usar una película rápida de ISO 800
forzada en uno o dos puntos para evitar velocidades de 1/15 ó 1/30 seg. Las películas
balanceadas para luz de tungsteno son la que ofrecen mejores resultados aún a pesar de la
persistencia de un leve fondo cálido. Busca encuadres reducidos, ya que sólo quedan
registrados los elementos más próximos, y coloca el objeto/sujeto lo más cerca posible de
ella.

Elige la sensibilidad de la película (número ASA) de acuerdo con la luz que haya en el lugar
donde vayas a tomar las fotos. Si las haces en la playa, ciudad o montaña usa película de
ISO 100 ó 200 como máximo. Para fotografías en interiores con poca luz, use película de
ISO 400 y flash o bien película de ISO800 o 1600 si no quieres flash.

*Tomado de Internet

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