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FISIOPATOLOGIA
El cuadro suele ser mediado por uno o más de los siguientes mecanismos:
a. Diarrea osmótica
b. Diarrea secretora
c. Diarrea exudativa
d. Motilidad intestinal alterada
e. Reducción de la superficie de absorción
Diarrea motora. Aunque poco estudiada, se sabe con certeza que se producen
alteraciones hiperperistálticas con disminución en el contacto entre el contenido
luminal y la mucosa intestinal. A menudo la diarrea es intermitente y alterna con
estreñimiento. Es causada por diabetes mellitus, hipertiroidismo y, también por el
síndrome de intestino irritable.
ETIOLOGIA
Los cuadros más corrientes de diarrea aguda suelen tener su origen en alimentos
o agua contaminados. Las diarreas agudas que se desarrollan con ocasión de
viajes se denominan "diarreas del viajero" y, en la mayor parte de los casos, son
producidas por infecciones bacterianas. Las diarreas de origen viral son
igualmente importantes (Tabla No.1).
Tabla No. 1
S. aureus
DIAGNOSTICO
Tabla No. 2
o Deficiencia de lactasa
o Fármacos: laxantes, antiácidos, antibióticos
o Lesión aguda por radiación
Es imprescindible precisar:
Estudio paraclínico
TRATAMIENTO
Debe tenerse en cuenta que en algunos casos esta solución hipertónica puede
incrementar la diarrea y que en la mayoría de diarreas simples, como la "diarrea
del viajero", es suficiente ingerir cualquier líquido salado o acompañado de
galletas saltinas. También son útiles las soluciones minerales comerciales, que
son de muy buen gusto, como el Gatorade.
La hidratación parenteral se indica en casos de dishidratación grave, cuando
fracasa la hidratación oral o se sospecha enterocolitis. Se utiliza lactato de
Ringer, 10-20 ml/kg/hora, según la intensidad de las pérdidas.
Sin embargo, agentes como el lomotil pueden tener efectos adversos sobre la
evolución de la enfermedad al favorecer la secreción prolongada de toxinas y
aumentar el tiempo de contacto del agente infeccioso con la mucosa. Están
contraindicados en los procesos inflamatorios invasivos bacterianos o
parasitarios.
La mayoría de las "diarreas del viajero" son producidas por bacterias (o sus
toxinas) y en ellas ha demostrado ser beneficioso el uso de antibioticoterapia,
especialmente trimetropin sulfametoxazole o ciprofloxacina, usualmente en una
dosis grande y única.
¿Cómo podemos prevenirlas?
La falta de higiene, la ingestión de agua y alimentos contaminados son las vías por medio de las
cuales se adquieren estas infecciones.
1) Consumir sólo agua segura. Si no se cuenta con agua de red, colocar 2 gotas de lavandina por
cada litro de agua o hervirla durante 3 minutos, tanto sea agua para beber, lavarse las manos o
los dientes, cocinar o lavar las verduras y frutas.
2) Lavarse cuidadosamente las manos con agua y jabón, después de ir al baño, de cambiarle los
pañales al bebé, y antes de comer o manejar los alimentos.
3) Lavar frutas y verduras con agua segura. Si se van a consumir crudas, dejarlas en un
recipiente en agua con un chorrito de lavandina durante 10 minutos y luego enjuagarlas muy bien
con agua segura.
5) Mantener los alimentos bien tapados y refrigerados, ya que los microorganismos pueden ser
transportados por insectos o por el polvo, y se multiplican con rapidez, especialmente en épocas
de calor.
6) Alimentar al niño con leche materna durante los primeros 6 meses de vida. Entre las
múltiples ventajas de la lecha materna está la de proporcionar defensas contra las infecciones
gastrointestinales.
7) Lavar adecuadmente las mamaderas. Éstas constituyen un excelente medio de cultivo para
las bacterias causantes de la diarrea, por lo que es importante desechar todo resto de alimento
que quede en ellas, lavarlas cuidadosamente con agua segura y jabón o detergente. También es
recomendable esterilizarlas periódicamente, hirviéndolas durante unos 5 minutos en un
recipiente con abundante agua.
8) Utilizar baños, letrinas o cualquier otro medio que garantice el aislamiento de las
excretas.
CUADRO CLÍNICO:
4. Inmunodepresión.
5. Ancianos.
7. Trabajadores sexuales.
• Estado nutricional del paciente mediante el examen físico y la toma de peso y talla.
• Existencia o no de fiebre.
• Abdomen globuloso.
• Hiperperistaltismo.
• Timpanismo o matidez.
• Tumoración abdominal.
• Prolapso rectal.
Una alta proporción de niños que evolucionan hacia un curso prolongado presentan ya
altas tasas fecales y deshidratación iterativa a los 5-7 días de evolución
intrahospitalaria.
EXÁMENES COMPLEMENTARIOS:
• Hemograma
• Orina
• Coprocultivo
• Gram. en heces
• Intubación duodenal
TRATAMIENTO:
Profiláctico:
• Agua, 1 litro
• Glucosa 20 gramos
Esta fórmula está comercializada en todos los países del mundo de forma estándar, en
sobrecitos que hay que verter en una jarra con un litro de agua, agitar hasta su
disolución y comenzar a beber inmediatamente, en pequeñas cantidades cada 1-2
horas. Pero a falta de esta posibilidad, existe el recurso de preparar una fórmula muy
similar en casa, con lo siguiente:
• Agua, 1 litro
Las comidas frecuentes y poco copiosas se toleran mejor y contribuyen a una ingesta
nutricional más adecuada, la leche y sus derivados se añaden con precaución en casos
de diarrea infecciosa ya que puede haber lesionado la mucosa de intestino delgado y
producirse una disminución transitoria de la actividad de la lactasa.
PLANES DE TRATAMIENTO:
Para tratar al niño con diarrea sin deshidratación se aplica el plan "A", se capacita al
responsable del cuidado del paciente con enfermedad diarreica, para continuar su
tratamiento en el hogar y para iniciarlo en forma temprana en futuros episodios de
diarrea, aplicando el ABC de las diarreas a continuación se menciona:
Si se conoce el peso del menor: 100 ml/Kg. de peso (25 mi/ Kg./hora) fraccionado en
dosis cada 30 minutos. La dosis de suero oral de 100 ml/Kg. en cuatro horas, es para
reponer las pérdidas previas (50 a 80 ml/Kg.) y las pérdidas actuales (5-20
ml/Kg./hora), en un niño con deshidratación de 5 - 8 % y con evacuaciones diarreicas
no muy abundantes. Si tolera bien (no se distiende, ni vomita y bebe con avidez) dar
la misma dosis calculada para cada 30 minutos, pero cada 20 minutos. Evaluar cada
hora y si continúa con buena tolerancia aumentar la dosis 10% más de la ingerida y la
hora anterior y así sucesivamente.
• Se evitarán los estimulantes del reflejo gastrocólico y del peristaltismo: café, zumos
de naranja azucarados.
Tratamiento Farmacológico:
Datos y cifras
Las enfermedades diarreicas son la segunda mayor causa de muerte de niños menores de cinco años. Son
enfermedades prevenibles y tratables.
Las enfermedades diarreicas matan a 760 000 niños menores de cinco años cada año.
Una proporción significativa de las enfermedades diarreicas se puede prevenir mediante el acceso al agua
potable y a servicios adecuados de saneamiento e higiene.
En todo el mundo se producen unos 1 700 millones de casos de enfermedades diarreicas cada año.
La diarrea es una de las principales causas de malnutrición de niños menores de cinco años.
Las enfermedades diarreicas son la segunda mayor causa de muerte de niños menores de cinco años, y
ocasionan la muerte de 760 000 millones de niños cada año. La diarrea puede durar varios días y puede
privar al organismo del agua y las sales necesarias para la supervivencia. La mayoría de las personas que
fallecen por enfermedades diarreicas en realidad mueren por una grave deshidratación y pérdida de
líquidos. Los niños malnutridos o inmunodeprimidos son los que presentan mayor riesgo de enfermedades
diarreicas potencialmente mortales.
Se define como diarrea la deposición, tres o más veces al día (o con una frecuencia mayor que la normal
para la persona) de heces sueltas o líquidas. La deposición frecuente de heces formes (de consistencia
sólida) no es diarrea, ni tampoco la deposición de heces de consistencia suelta y “pastosa” por bebés
amamantados.
La diarrea suele ser un síntoma de una infección del tracto digestivo, que puede estar ocasionada por
diversos organismos bacterianos, víricos y parásitos. La infección se transmite por alimentos o agua de
consumo contaminados, o bien de una persona a otra como resultado de una higiene deficiente.
Las intervenciones destinadas a prevenir las enfermedades diarreicas, en particular el acceso al agua
potable, el acceso a buenos sistemas de saneamiento y el lavado de las manos con jabón permiten reducir
el riesgo de enfermedad. Las enfermedades diarreicas pueden tratarse con una solución de agua potable,
azúcar y sal, y con comprimidos de zinc.
Hay tres tipos clínicos de enfermedades diarreicas:
la diarrea acuosa aguda, que dura varias horas o días, y comprende el cólera;
la diarrea con sangre aguda, también llamada diarrea disentérica o disentería; y
la diarrea persistente, que dura 14 días o más.
Alcance de las enfermedades diarreicas
Las enfermedades diarreicas son una causa principal de mortalidad y morbilidad en la niñez en el mundo,
y por lo general son consecuencia de la exposición a alimentos o agua contaminados. En todo el mundo,
780 millones de personas carecen de acceso al agua potable, y 2 500 millones a sistemas de saneamiento
apropiados. La diarrea causada por infecciones es frecuente en países en desarrollo.
En países en desarrollo, los niños menores de tres años sufren, de promedio, tres episodios de diarrea al
año. Cada episodio priva al niño de nutrientes necesarios para su crecimiento. En consecuencia, la diarrea
es una importante causa de malnutrición, y los niños malnutridos son más propensos a enfermar por
enfermedades diarreicas.
Deshidratación
La amenaza más grave de las enfermedades diarreicas es la deshidratación. Durante un episodio de
diarrea, se pierde agua y electrolitos (sodio, cloruro, potasio y bicarbonato) en las heces líquidas, los
vómitos, el sudor, la orina y la respiración. Cuando estas pérdidas no se restituyen, se produce
deshidratación.
El grado de deshidratación se mide en una escala de tres:
1. Deshidratación incipiente: sin signos ni síntomas.
2. Deshidratación moderada:
o sed;
o comportamiento inquieto o irritable;
o reducción de la elasticidad de la piel;
o ojos hundidos.
3. Deshidratación grave:
o los síntomas se agravan;
o choque, con pérdida parcial del conocimiento, falta de diuresis, extremidades frías y húmedas, pulso
rápido y débil, tensión arterial baja o no detectable, y palidez.
La deshidratación grave puede ocasionar la muerte si no se restituyen al organismo el agua y los
electrolitos perdidos, ya sea mediante una solución de sales de rehidratación oral (SRO), o mediante
infusión intravenosa.
Causas
Infección: La diarrea es un síntoma de infecciones ocasionadas por muy diversos organismos bacterianos,
víricos y parásitos, la mayoría de los cuales se transmiten por agua con contaminación fecal. La infección
es más común cuando hay escasez de agua limpia para beber, cocinar y lavar. Las dos causas más
comunes de enfermedades diarreicas en países en desarrollo son los rotavirus y Escherichia coli.
Malnutrición: Los niños que mueren por diarrea suelen padecer malnutrición subyacente, lo que les hace
más vulnerables a las enfermedades diarreicas. A su vez, cada episodio de diarrea empeora su estado
nutricional. La diarrea es la segunda mayor causa de malnutrición en niños menores de cinco años.
Fuente de agua: El agua contaminada con heces humanas procedentes, por ejemplo, de aguas residuales,
fosas sépticas o letrinas, es particularmente peligrosa. Las heces de animales también contienen
microorganismos capaces de ocasionar enfermedades diarreicas.
Otras causas: Las enfermedades diarreicas pueden también transmitirse de persona a persona, en
particular en condiciones de higiene personal deficiente. Los alimentos elaborados o almacenados en
condiciones antihigiénicas son otra causa principal de diarrea. Los alimentos pueden contaminarse por el
agua de riego, y también pueden ocasionar enfermedades diarreicas el pescado y marisco de aguas
contaminadas.
Prevención y tratamiento
Entre las medidas clave para prevenir las enfermedades diarreicas cabe citar las siguientes:
el acceso a fuentes inocuas de agua de consumo;
uso de servicios de saneamiento mejorados;
lavado de manos con jabón;
lactancia exclusivamente materna durante los primeros seis meses de vida;
una higiene personal y alimentaria correctas;
la educación sobre salud y sobre los modos de transmisión de las infecciones;
la vacunación contra rotavirus.
Entre las medidas clave para tratar las enfermedades diarreicas cabe citar las siguientes:
Rehidratación: con solución salina de rehidratación oral (SRO). Las SRO son una mezcla de agua limpia,
sal y azúcar. Cada tratamiento cuesta unos pocos céntimos. Las SRO se absorben en el intestino delgado y
reponen el agua y los electrolitos perdidos en las heces.
Complementos de zinc: los complementos de zinc reducen un 25% la duración de los episodios de diarrea
y se asocian con una reducción del 30% del volumen de las heces.
Rehidratación con fluidos intravenosos en caso de deshidratación severa o estado de choque .
Alimentos ricos en nutrientes: el círculo vicioso de la malnutrición y las enfermedades diarreicas puede
romperse continuando la administración de alimentos nutritivos —incluida la leche materna— durante los
episodios de diarrea, y proporcionando una alimentación nutritiva —incluida la alimentación exclusiva
con leche materna durante los seis primeros meses de vida— a los niños cuando están sanos.
Consulta a un agente de salud, en particular para el tratamiento de la diarrea persistente o cuando hay
sangre en las heces o signos de deshidratación.