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TEORÍA DE LA CONSTITUCIÓN: NOCIONES GENERALES

1. Tipología de conceptos sobre la Constitución

El concepto de Constitución encierra varios significados. El más elemental en


el que hay plena coincidencia entre todos los tratadistas políticos, es el que se
refiere a la Constitución como el conjunto de reglas superiores que regulan el
funcionamiento de una comunidad. Es por lo tanto la ley máxima que inspira a
toda legislación de un Estado, el estar por encima de las demás leyes por ser
de rango superior. Sin embargo el concepto de la Constitución no es uno solo
ya que tiene una diversidad de conceptos que se da desde la antigüedad, en
la edad media y en la edad moderna, pues la preocupación sobre la
organización política se halla en todo los tiempos de la humanidad. Es por ello
que existen diversos conceptos acerca de la Constitución.

1.1. En la antigüedad

1.1.1. La Constitución en Grecia

Desde el punto de vista histórico, Alvares Enrique refiere que,


“(…) normalmente suele atribuirse a los hebreos el primer
concepto de Constitución, en el sentido de existir una norma
suprema. Esta norma suprema se identificaba con la ley divina,
conteniendo una fuerte carga ética y moral.”1

Pero en la época griega predomina la idea de una Constitución


en sentido material, en esta época la forma de gobierno no
supone concepto de soberanía ni de Estado, sino simplemente
un sistema de organización y de control de los diversos

1
ALVARES CONDE, Enrique, “Curso de Derecho Constitucional”. Editorial. Tecnos. Tercera Edición. vol.I
Pág. 145. Madrid. 1999.
componentes de la sociedad, construido para dar eficacia a las
acciones colectivas.

Del mismo modo el autor ya en mención, manifiesta que “La


forma del gobierno griego y especialmente de los atenienses
era la forma democrática, esta forma democrática significaba
primacía absoluta de la asamblea de todos los ciudadanos
atenienses para la asunción de las decisiones de relevancia
colectiva (…)”2. Es decir el derecho de palabra concedido a todo
ciudadano sin discriminación; también referida a la alternación
de los gobernantes, obligación de estos a rendir cuentas.

Por otro lado Aristóteles “Utiliza el término Constitución para


referirse a las distintas formas de gobierno. La Constitución
como del principio según el cual está ordenada la autoridad
política. La Constitución política o gobierno, dice, es la
organización o el orden establecido entre los habitantes de la
ciudad”3. Por tanto, se podría decir que la Constitución, en el
pensamiento aristotélico, tiene por objeto garantizar las
magistraturas, la distribución de los poderes, los atributos de la
soberanía, y la determinación del fin específico de cada
asociación política. Constitución equivale a régimen, a
estructura, a contextura: es el modo de ser de la ciudad, su
compostura o naturaleza total.

1.1.2. La Constitución en Roma

REMEDIO SÁNCHEZ refiere que, “La ciudad romana tiene en


su origen caracteres muy similares a los de la polis griega

2
ALVARES CONDE, Enrique. Op. Cit. Pág. 145.
3
ARISTÓTELES, “La política”. libro 3°. capítulo I.
(grupo social reducido, unidad religiosa y participación
ciudadana), que a diferencia del griego, el romano tiene
conciencia de la existencia de una res publica diversa de los
intereses privados y las proyecta sobre la distinción entre un
Derecho público y un Derecho privado.”4

En Roma el nombre de constitutio indica el acto legislativo en


general o su resultado. En el Digesto se establece que
constitutio es lo que el emperador ordena y que tenía fuerza,
vigor de una ley. Posteriormente, evolucionó hacia el “estatuto
de una civitas”.

La aportación del mundo romano es: El Estado se entenderá


como algo preexistente al pueblo, y la Constitución como uno
de los elementos del Estado, siendo considerada como el
instrumento eficaz para organizar la comunidad política. Y es
necesario señalar que la Constitución no significó para los
romanos una garantía contra los abusos del poder, ni el
ejercicio de los Derechos individuales por parte de los
ciudadanos. La Constitución entendida como el instrumento
eficaz para organizar la comunidad política.

REMEDIO SANCHEZ, Freís señala que “Cicerón fue quien


primero utilizó el término Constitución en su sentido actual. La
definición ciceroniana habla de res pública como res que es del
pueblo, pero con la condición que no sea considerado pueblo
toda multitud de individuos agregados de cualquier manera,
sino solo aquella que está reunida sobre la base de un
consenso sobre el Derecho y de una comunidad de intereses”5.

4
REMEDIO SANCHEZ, Freís, “Introducción al Estado Constitucional”. Editorial. Ariel. Pág.33. Barcelona
1993.
5
Ibíd. Pág. 33.
1.2. En la edad media

Si bien la concepción del poder divino de los reyes hace que algunos
consideren que en la edad media no existió la concepción de
Constitución; sin embargo, puede hablarse del concepto de ley
fundamental que puede ser considerado como el antecedente de la
Constitución.

Según Rolando Tamayo, “En la edad media la palabra Constitución va


adquirir progresivamente el significado de ´legislación`, pero de una
legislación que fundamenta y explica las relaciones de poder de los
individuos en la comunidad política, es decir, en las ciudades y reinos. La
iglesia tomo el término “constitutio” del Derecho romano y lo aplico a las
reglamentaciones eclesiásticas estas válidas para toda iglesia o alguna
provincia eclesiástica particular”6.

Es por ello que por mucho tiempo se entendió por Constitución una regla
o edicto emanado de las autoridades eclesiásticas; así, las diversas
órdenes religiosas tenían sus propias "Constituciones", y estas también
regían en los monasterios y conventos. Eran estatutos (Instituta)
aprobados por el soberano pontífice.

Con la aparición de una nueva clase que es la burguesa, cuyo ámbito de


vida e intereses era muy diferente al de los estamentos feudales y
eclesiásticos. Los burgueses aspiraban a una mayor libertad,
entendiendo este concepto no solo como un derecho natural sino como
algo útil, pragmático, que facilitaría sus actividades productivas. De ahí
surgió su lucha por conseguir la autonomía de las ciudades mercantiles,
la cual se obtuvo a través de las Cartas o fueros comunales, que

6
TOMAYO Rolando Y SALMORAN. “Introducción al Estudio de la Constitución” .Pág. 52. Fontamara,
México DF, 1998.
significaban un nuevo concepto de Constitución. En ellas se limitaban los
derechos señoriales y se garantizaban a los burgueses, estar
organizados en corporaciones de oficios, entre otras cosas para darse su
propio gobierno.

A lo largo del siglo XVII se cumplió en Inglaterra un proceso, que llevó a


este país por la vía del Constitucionalismo liberal, hasta desembocar a
comienzos del siglo XVIII en una monarquía limitada, regida por una serie
de Leyes Constitucionales, con un contenido filosófico que iba más allá
de la simple organización del gobierno y tendía a garantizar
efectivamente los derechos individuales de los súbditos ingleses frente a
aquel.

Posteriormente muchos humanistas, filósofos y juristas buscaron definir


la esencia de la Constitución. BOSSUET sostiene que "La buena
Constitución del cuerpo del Estado consiste en dos cosas: en la religión
y en la justicia. Estos son los principios interiores y constitutivos de los
Estados". Para MONTESQUIEU la palabra Constitución se refiere a "la
complexión tradicional, histórica de la nación"; ROUSSEAU por otro lado
sostiene que es "forma de gobierno" a la estructura del poder, "leyes
fundamentales" a la sobre-estructura jurídica de aquella, y "contrato
social" a la decisión originaria fundadora de la comunidad política.

Al independizarse los Estados Unidos de Norteamérica, el término


Constitución fue empleado en un sentido revolucionario, para oponer las
Constituciones o formas de gobierno de las trece colonias que
conformaron la federación, dadas por la exclusiva y libre voluntad del
pueblo, a las instrucciones provenientes de la Corona inglesa para
gobernar esas colonias.

La Revolución Francesa, continuando la idea americana, asimiló la


Constitución a una determinada forma de organización política; aquella
que garantiza las libertades individuales, trazando límites a la actividad
de los gobernantes. En efecto, la Declaración de los Derechos del
Hombre y del Ciudadano, promulgada en 1789, estableció la fórmula
según la cual toda sociedad en la cual la garantía de los derechos no esté
asegurada, ni la separación de los poderes determinada, no tiene
Constitución.

1.3. En la modernidad

Alvares Enrique, sostiene que el concepto moderno de Constitución


aparece como resultado de ciertos acontecimientos como es: “La
aparición de los conceptos de comunidad y Estado, la protección jurídica
de los pactos y el nacimiento de los civiles, la aparición de las cartas de
las colonias inglesas de Norteamérica y el auge de la doctrina moderna
del Derecho natural. Ya con el movimiento liberal que se inicia con la
revolución inglesa del siglo XVII”7, se empieza a gestar la idea de que la
Constitución tiene por finalidad asegurar la libertad del ciudadano frente
al Poder Político.

La Constitución norteamericana de 1787 es una Constitución


democrática, fundada sobre el Poder Constituyente, dirigida a instituir un
gobierno limitado y con armonía. Se preveía un equilibrio entre los
poderes.

La Constitución de la Revolución Francesa fue la Constitución del pueblo


soberano. Se concebía el poder legislativo como el Poder Constituido,
autorizado y limitado por la Constitución. Sin embargo en esta
Constitución el poder legislativo está colocado en tal forma que el
ejecutivo le está subordinado completamente y todo elemento que

7
ALVARES CONDE, Enrique. Op. Cit. Pág. 147.
pudiera entorpecer la legislación es rechazada.

Jellinek menciona, “que la mejor garantía posible para los derechos de


los individuos está dada por el Estado de Derecho, por el principio del
Estado soberano y que en el sistema del Estado de Derecho, los
derechos están confiados a la ley del Estado soberano.”8

El mismo autor señala que, “La Constitución del Estado comprende los
principios jurídicos que determinan cuales son los órganos supremos del
Estado, el modo de su formación, sus relaciones reciprocas y su esfera
de acción y, en fin, la posición fundamental del particular respecto del
poder del Estado”9. Es decir, la relación entre Estado y Constitución es
tan sólida que no puede existir Estado sin Constitución, pero tampoco
Constitución sin Estado; y que la Constitución existe para organizar y
limitar un Estado.

Hegel Hace referencia al concepto de Jellinek, pero esta como la idea de


un código legal que ordena coercitivamente la composición y las
tendencias de desarrollo de la estructura dominante de poder, o sea a la
organización del Estado y al progreso de su vida, la que depende del
modo y formación de la conciencia que tenga el pueblo de sí mismo; una
Constitución es la obra de los siglos, es la idea y la conciencia de lo
racional, pero solo al punto en que está desarrollado un pueblo.

Carlos Marx sostiene que la Constitución es la organización del Estado


como modo de existencia y actividad de las cualidades sociales de los
hombres y no de su naturaleza abstracta o cualidad particular.

8
JELLINEK, George. “Teoría General del Estado”. Granada - España. 2000. Pág. 508.
9
Ibíd. Pág. 508.
1.4. Según algunos autores contemporáneos

Karl Loeweinstein que, es uno de los grandes realistas del estudio del
Derecho Constitucional en la época contemporánea. “Plantea que en
toda sociedad existe una Constitución real u ontológica. Una Constitución
ontológica es el ser de cada sociedad, es la cultura social real, son las
formas de conducta reconocidas, los principios políticos en los que se
basa toda comunidad, y que se formaliza en una Constitución escrita” 10.

El mismo autor citado por Blancas Bustamante establece “que una


verdadera Constitución es aquella, además de contener normas sobre
los poderes supremos y garantías esenciales, debe encarnar los más
profundos valores de la democracia y la realidad del grupo de gobernados
al cual se impondrá.”11

De otra parte Aristóteles citado por Rubén Correa afirma que “la
Constitución es la que determina con relación al Estado la organización
regular de todas las magistraturas, agregando que, todas las
Constituciones hechas en vista del interés general son puras porque
practican la justicia; y todas las que solo tienen en cuenta el interés
personal e los gobernantes están viciadas en su base, y no son más que
un corrupción de las buenas constituciones.”12

Rubén Correa, manifiesta que existen tres diferentes conceptos de la


Constitución que son las siguientes:

10
CABANELLAS DE TORRES, Guillermo. “Diccionario Jurídico Universitario.” Segunda Edición
actualizad, corregida y aumentada. Edit. Heliasta. Buenos Aires, Argentina. 2004.
11
BLANCAS BUSTAMANTE, Carlos; LANDA ARROYO, César y RUBIO CORREA, Marcial. “Derecho
Constitucional General”. Fondo Editorial PUCP. Tercera Edición. Lima - Perú. 1992. Pág. 325.
12
CORREA FREITA, Rubén. “Derecho Constitucional Contemporáneo”. Editorial. fundación de la cultura
universitaria. Tercera Edición. Tomo I. Uruguay. 2000. Pág. 21.
 El concepto jurídico de Constitución, es el conjunto de normas
fundamentales de una comunidad determinada, un Estado, que
regulan la organización y funcionamiento del gobierno y que
establecen los derechos de los individuos.

 El concepto político de Constitución, es el instrumento que permite


conciliar la libertad y la autoridad, dado que, como con acierto
afirmaba León DUGUIT en todo sociedad, en todo estado, hay una
diferenciación entre gobernantes y gobernados, entre quienes
mandan y quienes obedecen.

 El concepto sociológico de Constitución, es la suma de los factores


reales de poderes que existen en una sociedad en un momento
histórico determinado como afirmo Ferdinand LASALLE.

El mismo autor concluye con lo siguiente acerca del concepto de la


Constitución “es la ley fundamental de todo un estado la norma jurídica
básica de una comunidad, y teniendo en cuenta la complejidad de los
fenómenos políticos, sociales y culturales que la Constitución debe
reconocer y regular, puede definirse a la Constitución como lo ase
magistralmente André HAURIOU, es el encuadramiento jurídico de los
fenómenos políticos.”13

De la misma forma Raúl Chámame, manifiesta que la Constitución, “es


la máxima expresión normativa de un Estado determinado, cuya
legitimidad descansa, en que esta tenga su origen en un pacto social,
que se traduzcan en su acatamiento permanente, en donde se

13
CORREA FREITA, Rubén. Op. Cit. Pág. 24.
establecen los derechos de las personas y las facultades y límites del
Poder Político.”14

De otra parte el mismo autor define desde tres acepciones a la


constitución que a continuación vamos a desarrollar:

 Concepto absoluto, la Constitución es la ley de leyes. Aquí


CONSTITUCIÓN, significa una regulación legal fundamental, es
decir, un sistema de normas supremas y ultimas.

 Concepto positivo, Surge mediante un acto del poder Constituyente


que contiene solo la determinación consciente de la concreta forma
de conjunto por la cual se pronuncia o se decide la unidad política.

 Concepto ideal, consiste que cada partido en lucha reconozca como


verdadera Constitución solo aquella que corresponda con sus
postulados políticos.”15

De otra parte Manuel García Pelayo, citado por Feliciano Calzada,


sostiene que el concepto de Constitución presenta una tipología de
conceptos que son las siguientes:

 Concepto racional normativo, es la ordenación de ideas del Estado


liberal burgués, que establece una limitación al Estado cuando
señala la garantía de los derechos individuales y la división de
poderes.

14
CHANAMÉ ORBE, Raúl. “Lecciones de Derecho Constitucional”. Editorial. Lex y Iuris. Primera Edición.
Lima. 2015. Pág. 100.
15
Ibíd. Pág. 101-102.
 Concepto histórico tradicional, que es el resultado del pensamiento
conservador, que se antepone al liberal; el autor afirma que la
Constitución de una nación no es producto de la razón, sino la
consecuencia de una pausada transformación histórica en la que a
menudo de encuentran elementos irracional; así, una Constitución
es resultado de actos parciales y de usos y costumbres.

 Concepto sociológico, o perspectiva del estudio de la sociedad en


el ámbito constitucional. Por ello que se afirma que el concepto
sociológico se basa en tres principios:1) En esencia, la Constitución
es una forma de ser y no de deber ser.2) La Constitución no es
efecto del pasado, sino producto del presente, resultado de los
factores económicos. 3) La Constitución no es pura normatividad,
sino es el ser de hoy del que emana o al que tiene que adecuarse
el deber ser.”16

De lo mencionado, GARCÍA PELAYO hace una síntesis del concepto de


la Constitución de la siguiente manera, “Es la estructura jurídico- político
de un Estado concreto, que se integra como un momento en la estructura
total del Estado y de la sociedad.”17

2. Sentidos del término Constitución

La palabra Constitución es un término universal y según PÉREZ ROYO, Javier


“La Constitución escrita es un fenómeno relativamente reciente en la historia
de la organización de las sociedades humanas. Únicamente a lo largo del siglo
XVIII empiezan a existir documentos en los que pretende fijarse por escrito las
normas a las que debe responder la organización política general de la
sociedad, con especificación de los órganos y procedimientos a través de los

16
CALZADA PADRON, Feliciano. “Derecho Constitucional”. Editorial. Hurta. Pag.140. Mexico.1990.
17
Ibíd. Pág.140-141.
cuales se debe ejercer el poder, así como de la relación de tales órganos con
los individuos y sus derechos.”18

Dichos documentos aparecen por primera vez en las Colonias inglesas de


América del Norte y después en los Estados Unidos constituidos por aquellas
colonias tras la independencia de Inglaterra. Posteriormente Francia se
incorporará al mundo de la Constitución escrita tras la Revolución con la
Declaración de Derechos del Hombre y del Ciudadano de 1789 y con la
Constitución de 1791. De Francia la Constitución se extenderá al continente
europeo a lo largo del siglo XIX. Tras la independencia de las colonias
americanas de España y Portugal, la Constitución escrita se impondrá también
en dichos territorios, convertidos ahora en Estados independientes.

La Constitución escrita es, por tanto, un fenómeno relativamente reciente y


localizado en sus orígenes territorialmente. Dista mucho de ser un fenómeno
universal ni en su dimensión temporal ni en su dimensión territorial.

Ahora bien, si el fenómeno de la Constitución escrita es relativamente nuevo,


el término “constitución” es antiquísimo, casi tanto como la reflexión sobre la
política, habiéndose hecho uso de él de manera abundante en la Antigüedad
clásica, así como en la literatura política y jurídica tardo medieval y moderna.

“De forma similar; si la afirmación inicial de la Constitución escrita se produce


en una zona del planeta exclusivamente, en los dos siglos siguientes conocerá
un proceso de expansión extraordinario, pasando a convertirse en la forma
general de organización del poder en prácticamente todo el mundo. En la
actualidad, tras los diversos procesos de descolonización, todo el planeta está
integrado por Estados y todos los Estados tienen una Constitución.”19

18
PÉREZ ROYO, Javier. “Curso de Derecho Constitucional”. 7ma. Edición. Marcial Pons. Ediciones
Jurídicas y Sociales S.A. Madrid. Barcelona. 2000., Pág. 67.
19
PÉREZ ROYO, Javier. Op. Cit. Pág. 68.
Que los Estados que existen por toda la superficie del planeta son diferentes
unos de otros es un hecho sobradamente conocido. Lo mismo ocurre también
con las Constituciones. Pero como “ideal” al que se aspira y como término del
que se hace uso, la Constitución se ha convertido en un término universal.

2.1. Constitución en sentido material y en sentido formal

Raúl Ferrero Rebagliatti señala que: “Las constituciones escritas son un


hecho reciente, pues las más antiguas sobrepasan poco más de dos
siglos, en tanto que la existencia del Estado se remonta a varios milenios.
Ello prueba que, aparte de la Constitución en sentido formal, ha existido
siempre un estatuto o constitución no escrita que sirve de estructura
básica a todo Estado. Tal estatuto, que viene a dar a la colectividad
órganos que aseguren la unidad de su voluntad y hacen de ella una
persona estatal, es un complejo de relaciones de poder, de tradición
normativa en la vida de cada pueblo.”20

La Constitución en sentido material significa régimen político, modo de


estructurar el Estado conforme a determinada concepción. Así, aunque
la Constitución británica hace soberano al Parlamento, éste no se atrevía
a establecer discriminaciones en el sufragio o a prohibir la existencia de
todos los sindicatos, como observó Harold Laski. Por tanto, hay una
realidad constitucional que adecua el Estado a la estructura económica,
a la religiosidad, a las tensiones sociales, a la cultura de una época. De
ahí que los cambios de una Constitución no siempre se operen por los
medios que ella ha previsto, de manera autónoma, sino por medios
heterogéneos, extraños a su previsión, tal como sucedió en Francia en
1958. Lo que la doctrina llama “operación constituyente”, prevista por un

FERRERO REBAGLIATTI, Raúl. “Ciencia Política, Teoría del Estado y Derecho Constitucional”. Editorial
20

GRIJLEY. Novena edición. Lima - Perú. 2003. Pág. 228.


capítulo especial que trata de la Reforma de la Constitución, se realiza
muchas veces por revolución o cambio total de régimen.

Anota Fraga Iribarne que una Constitución nace a veces de una decisión
y otras de una transacción. Es, ante todo, la arquitectura institucional de
un régimen, el instrumento que canaliza las fuerzas políticas y organiza
la vida del Estado.

“La concepción contractualista, difundida por Rousseau, priva al poder


de su independencia sustancial. Replanteando el problema, Hauriou ha
revelado que el Estado es poder organizado, superiormente organizado,
institucionalizado. Ampliando tal aserto, dice Burdeau que no es el
consentimiento del pueblo el que hace el poder de derecho sino que, a la
inversa, el consentimiento se logra porque hay un poder de derecho.”21
Una vez más, comprobamos que la vida pasa a través del Derecho y
determina un equilibrio entre la norma y realidad.

Al respecto Javier Pérez Royo manifiesta que “la contraposición entre


Constitución formal y Constitución material y el interrogante sobre la
fuerza normativa de la Constitución no es más que una forma de
manifestación específica de la tensión entre el ser y el deber ser, que sí
se da en todas las ramas del Derecho.”22

Ésta es una cuestión de excepcional importancia en todo el mundo del


Derecho en general. Encontrar el punto de equilibrio entre la realidad
social y el mandato jurídico, entre cómo las cosas son y cómo la norma
dice que deben ser, es la cuestión clave de la que depende el éxito o el
fracaso de la norma; es decir, que se alcance o no el objetivo perseguido
por el legislador al dictarla.

21
FERRERO REBAGLIATTI, Raúl. Op. Cit. Pág. 229.
22
PÉREZ ROYO, Javier. Op. Cit. Pág. 77.
Y es así, porque, aunque sea verdad que detrás de cada norma
individualmente considerada está el aparato coactivo del Estado para
imponer su cumplimiento por la fuerza, si los ciudadanos no la cumplen
de manera voluntaria, no lo es menos que la capacidad del Estado para
imponer coactivamente el cumplimiento de sus normas, cuando se pasa
de la perspectiva individual a la del ordenamiento jurídico considerado
como un todo, es muy reducida.

De acuerdo con los cálculos efectuados por la sociología jurídica, el


Estado mejor organizado del mundo, esto es, un Estado en el que
funcionará perfectamente todo el aparato coactivo, empezando por la
policía, siguiendo por el sistema judicial y acabando por el sistema
penitenciario, es decir, un Estado que no existe en parte alguna,
únicamente podría imponer de manera coactiva entre un 5 y un 7 por 100
de sus normas. El ordenamiento jurídico descansa, por tanto, en el
cumplimiento espontáneo por parte de los ciudadanos de la casi totalidad
de las normas que integran el ordenamiento. Si así no fuera, el Estado
entraría en “quiebra o bancarrota coactiva”.

El aparato coactivo del Estado viene a ser el equivalente de las reservas


líquidas de un banco, con las que éste hace frente a la retirada ordinaria
de fondos por parte de sus clientes. Tales reservas son suficientes en
circunstancias normales, pero dejan de serlo si, por el motivo que sea,
se produce una falta de confianza en el banco y los clientes deciden
retirar masivamente sus depósitos. Pues igual ocurre con el Estado. Su
aparato coactivo basta si los ciudadanos cumplen voluntariamente las
normas. Si el cumplimiento llega a ese umbral del 5-7 por 100, el
resultado es el caos.
El ordenamiento jurídico del Estado como un todo tiene necesidad de la
coacción para mantenerse, pero no puede descansar en la coacción. Si
las normas no son las adecuadas para la realidad social del país, no hay
Estado que pueda imponer coactivamente su cumplimiento.

Desde una perspectiva general no es la coacción lo que define el


ordenamiento. Sin embargo, desde la perspectiva de cada rama
particular del ordenamiento o de las normas individualmente
consideradas, la coacción sí es un elemento esencial de su definición.

PEREZ ROYO, Javier expresa que “(…) la tensión entre el ser y el deber
ser y el consiguiente problema de su fuerza normativa no afecta al
estatuto científico o normativo de la rama del Derecho o de la norma de
que se trate. El Derecho civil, penal o financiero es derecho y su fuerza
normativa, por las buenas o por las malas, no se discute. Dicha tensión
la podrá tomar en consideración y de hecho la toma en consideración
siempre el legislador de lege ferenda, pero de lege data el problema
desaparece jurídicamente, aunque pueda continuar existiendo desde una
perspectiva sociológica. La regulación de la objeción de conciencia, el
tráfico de drogas o el delito fiscal son buenos ejemplos de lo que se acaba
de decir.”23

Lo específico de la Constitución es que con ella sólo cabe la perspectiva


general. La Constitución sólo es una y su objeto es la construcción
jurídica del orden político global de la sociedad, como acabamos de ver.
En consecuencia, la tensión entre el ser y el deber ser no puede ser
nunca una tensión “localizada”, como la que puede producirse en una
norma del ordenamiento, sino que la tensión es por definición una tensión
“total” que afecta a la Sociedad y al Estado globalmente considerados.
La perspectiva del problema sería, en cierta medida, la del ordenamiento

23
PÉREZ ROYO, Javier. Op. Cit. Pág. 77.
jurídico considerado como un todo. Aquí es donde reside la dificultad de
encontrarle una respuesta.

“Porque, en efecto, ¿cómo se resuelve la tensión entre el ser y el deber


ser cuando el enfrentamiento se produce entre la Constitución material
de la sociedad y la Constitución formal del Estado? ¿Es que la
Constitución formal puede tener fuerza normativa frente a la Constitución
material de la sociedad como un todo.”24

La cuestión afecta al propio estatuto científico del Derecho


Constitucional, a su propia definición como Derecho. Por eso se plantea
el problema de la fuerza normativa de la Constitución, es decir, la
cuestión más radical que se puede plantear en relación con una norma
jurídica.

En realidad, ésta ha sido la gran cuestión que no ha dejado de estar


presente en el Derecho Constitucional desde la Revolución Francesa.
Las respuestas que se le han dado han sido fundamentalmente dos: la
del constitucionalismo monárquico liberal del XIX y la del
constitucionalismo democrático del siglo XX.

2.2. Constitución en sentido político

La Constitución en sentido político, es “El conjunto de relaciones que se


dan en una comunidad determinada”, en base al poder político, es decir,
“en base a la decisión que se asume dentro del Estado, abarcando la
totalidad de manifestaciones de la vida social, para lo cual el poder
político tiene que ser legitimado, a través de una causa determinadora,
con criterio justificante.”25

24
PÉREZ ROYO, Javier. Op. Cit. Pág. 78.
25
CALZADA PADRON, Feliciano. Op. Cit. Pág. 142
Pedro Flores Polo define la Constitución en sentido político como “(…)
aquel principio rector encargado de regular las relaciones entre los
poderes públicos y los ciudadanos en general”26; es decir, que su función
esencial es la de regular el poder político fundamentalmente.

José Afonso Da Silva, citando a Carl Schmitt, señala que la Constitución


en sentido político constituye aquella política fundamental, cuya función
principal es la de regir la organización de un Estado, estableciendo: la
autoridad, la forma de ejercicio de esa autoridad, los límites de los
órganos públicos, defendiendo los derechos y deberes fundamentales de
los ciudadanos y garantizando la libertad política y civil del individuo.”27

Del mismo modo NARANJO MESA, Vladimiro expresa que el estado


procede a la distinción entre el poder y sus agentes de ejercicio “todo
estado tiene una constitución”. Se distingue la constitución a grandes
rasgos como la ley fundamental del estado, siendo “el conjunto de
normas fundamentales para la organización del estado, que regula el
funcionamiento de los órganos del poder público, y que establece los
principios básicos para el ejercicio de los derechos y la garantías de las
libertades dentro del estado”. La definición dada no puede tomarse como
objetiva debido que en un estado como dice Burdeau puede regirse bajo
un sistema absolutista o totalitario.”28

26
FLORES POLO, Pedro. “Diccionario Jurídico Fundamental”. Editorial Grijley. 2da Edición. Lima-Perú.
2009. Pág. 1011.
27
DA SILVA, José Afonso. “Constitución y Normas Constitucionales”. Disponible en.
http://biblio.juridicas.unam.mx/libros.
28
NARANJO MESA, Vladimiro. “Teoría constitucional e Instituciones Políticas”. Editorial Temis .S A
Segunda Edición. Bogotá Colombia 1987. Pág. 213
2.3. Constitución en sentido jurídico: como compendio de normas para
la organización del Estado

Según Humberto Enríquez Franco este concepto alude a la Constitución


que viene condicionada por la realidad histórica. Sin ignorar las
circunstancias concretas de una época, de forma que su pretensión de
vigencia sólo puede realizarse cuando toma en cuenta dichas
circunstancias, ella es, gracias a su carácter normativo el instrumento que
ordena y conforma esa realidad social y política. De modo que esta
correlación entre el ser y el deber ser se derivan sus posibilidades y sus
límites.”29

Hesse Conrad, define a la Constitución como “el orden jurídico


fundamental de la comunidad. Ella fija los principios rectores con arreglos
a los cuales se debe formar la unidad política y se deben asumir las
tareas del Estado. Contiene los procedimientos para resolver los
conflictos en el interior de la comunidad. Regula la organización y el
procedimiento de formación de la unidad política y la actuación estatal.
Crea las bases y determina los principios del orden jurídico en su
conjunto.”30

Esta Constitución se caracteriza por contener normas básicas para la


organización del Estado, que se encargarán de regular el ejercicio del
poder en este mismo, de este modo se aprenderá a distinguir entre el
poder y sus agentes de ejercicio, debido a que los gobernantes no están
investidos de facultades que ellos mismos establezcan, sino que le son
delegadas en virtud de un estatuto.

29
ENRÍQUEZ FRANCO, Humberto. “Derecho Constitucional”. Editora Fecat. 1ra Edición. Trujillo - Perú.
2001. Pág. 74.
30
HESSE, Conrad. “Escritos de Derecho Constitucional”. Centro de Estudios Constitucionales. Madrid -
España. 1983. Pág. 16.
En síntesis, la Constitución en sentido jurídico es la encargada de la
normatividad del poder, especialmente del poder político a fin de que sus
titulares (el Estado como titular principal y los gobernantes como titulares
por un período de tiempo) no excedan su uso en la aplicación del poder,
situación que en la práctica se incumple, de allí que se hable de
gobiernos de tipo totalitarista, autocrático, populista, entre otros. Esta
Constitución fue ideada por Kelsen, quien pretendió darle dinámica
propia e independiente.

3. Las concepciones acerca de la constitución

De acuerdo a Manuel García Pelayo citado por García Toma afirma que “el
contenido de una Constitución se encuentra orientada por una de estas
corrientes teóricas: racional - normativa, tradicional - histórica y sociológica.”31

A continuación pasaremos a detallar cada corriente teórica para su mejor


comprensión:

3.1. La concepción racional – normativa

Respecto a esta concepción GARCÍA TOMA, Víctor señala que “Fue


impulsada por el movimiento de la ilustración de los siglos XVIII y XIX e
impuesto compulsivamente por Napoleón Bonaparte como modelo a
buena parte de los pueblos europeos.”32 En tal sentido, esta concepción
teórica es propia de un pensamiento prístino liberal que fue promovida
por la Ilustración.

31
GARCÍA PELAYO, Manuel. “Derecho constitucional comparado”. Edit. Alianza. Madrid - España. 1984
citado en GARCÍA TOMA, Víctor. “Teoría del Estado y Derecho Constitucional”. Edit. Adrus. 4ª edición.
Perú. 2014. Pág. 467.
32
GARCÍA TOMA, Víctor. “Teoría del Estado y Derecho Constitucional”. Edit. Adrus. 4ª edición. Perú. 2014.
Pág. 467.
Por otra parte, Javier Pérez Royo citado por García Toma refiere que
tras la visión racional - normativa aparece a inicios de la ilustración; y
plantea que: “Si bien el ser humano no puede ir contra las leyes de la
naturaleza, en cambio puede mediante el uso de la razón evitar quedar
a merced de dichas fuerzas (…), así también esto debe ocurrir en lo que
a su vida social se refiere. Si se puede luchar contra la sequía mediante
la construcción de embalses (…) ¿Por qué no se va poder luchar contra
el despotismo y el derecho del más fuerte, mediante el establecimiento
de unas normas racionales para el ejercicio del poder? (sic)”33

Es así que, de acuerdo a García Toma (2014) esta corriente sugiere a,


“(…) la Constitución como una categoría de la razón.”34 Siguiendo los
planteamientos del autor precedentemente citado, se afirma que esta
concepción se sustenta en que, “(…) la razón humana es el medio capaz
de resolver, a través de la dación de normas escritas, la totalidad de los
problemas de carácter político-social. Se postula la probabilidad de crear
y estructurar a priori una determinada comunidad político-jurídica, e
incluso, de asegurar la felicidad del hombre.”35

Esta idea surge a partir de la creencia de que el hombre es un ser nómico


que vive de acuerdo a reglas establecidas por la sociedad. Es así que
García Toma afirma que esta corriente surge de la creencia de que, “(…)
se puede planificar la vida política, de racionalizar el ejercicio del poder y
de fundamentar el orden jurídico de una sociedad.”36 Entonces, la
Constitución es concebida como “(…) un conjunto normativo establecido
en un solo acto constituyente, en el que de manera plenaria y sistemática
se fijan los fines, funciones y órganos del cuerpo político.”37

33
GARCÍA TOMA, Víctor. Op. Cit. Pág. 468.
34
Ibíd. Pág. 467.
35
Ibíd. Pág. 467.
36
Ibíd. Pág. 467.
37
Ibíd. Pág. 467.
En este mismo orden de ideas, Pablo A. Ramella, “Concibe la
Constitución como un complejo normativo establecido de una sola vez y
en el que de una manera total, exhaustiva y sistemática se establecen
las funciones fundamentales del Estado y se regulan los órganos, el
ámbito de sus competencias y las relaciones entre ellos.”38

En tal sentido, de todo lo anteriormente señalado, la Constitución Política


contiene una pluralidad ordenada o sistemática de principios, valores,
instituciones y normas primordiales que se instituyen como la base o el
cimiento para la organización político - jurídico del Estado y de la relación
de mando - obediencia con el pueblo; también de justificar la existencia
misma del Estado por la consecución de objetivos que tienen carácter
comunitario y que se constituirá en la búsqueda del bienestar general.”39
Y finalmente, respecto a las perspectivas para comprender el sentido
racional - normativo de la Constitución, Carlos Alberto Olano (citado por
García Toma; 2014) sostiene que existen dos perspectivas, y son:

3.1.1. La perspectiva formal

Se entiende que, la Constitución Política es una categoría de la


razón. Es así que, según García Toma, “La Constitución
racionalmente se entiende como un complejo de normas
escritas supras emanadas de un procedimiento complejo y
solemne, cuyo sancionamiento corresponde al titular del poder
constituyente.”40

38
A. RAMELLA, Pablo. “Derecho Constitucional”. 3ª edición. Edit. Depalma. Argentina. 1986. Pág. 4.
39
GARCÍA TOMA, Víctor. Op. Cit. Pág. 468.
40
Ibíd. Pág. 468
Esta perspectiva entiende que la Constitución Política es un
conjunto de normas positivadas que son emanadas mediante
procedimientos complejos y que si son incumplidas
corresponde al poder constituyente su sancionamiento.

3.1.2. La perspectiva material

Esta perspectiva entiende a la Constitución Política como


aquellas instituciones de carácter político y jurídico encargadas
de realizar los objetivos comunitarios de un grupo de personas
de un determinado territorio. Es así que, García Toma (2014)
sostiene que, “La Constitución se entiende como un complejo
de instituciones político - jurídicas encargadas de realizar los
fines coexistenciales de un grupo de personas adscritas a un
entorno espacio-temporal determinado.”41

A diferencia de la perspectiva formal, ésta concibe a la


Constitución como un conjunto de instituciones ya sean
políticos como los Gobiernos Regionales, el Congreso, etc. y
los jurídicos como el Poder Judicial, el Ministerio Público, etc.
que permiten a las autoridades y a la población alcanzar
aquellos objetivos o fines sociales.

3.2. La concepción tradicional - histórica

Respecto a esta corriente, García Toma afirma que “Fue impulsado por
la vocación historicista aparecida en el siglo XIX al influjo del
romanticismo en su vocación irracionalista. En ese sentido,
preponderante papel jugaron Edmund Burke y Joseph de Maestre.”42

41
GARCÍA TOMA, Víctor. Op. Cit. Pág. 468.
42
Ibíd. Pág. 469.
Además, A. Ramella refiere que esta corriente “Constituye una reacción
contra el concepto racional y es la afirmación de la idea conservadora
frente al liberalismo.”43

Según García Toma esta concepción se fundamenta porque alude a la


Constitución como “(…) producto del carácter nacional y del espíritu
peculiar de cada pueblo”44. Asimismo, el autor citado precedentemente,
refiere que se fundamenta en “(…) la elaboración de un texto fundamental
arraigado en las costumbres y sentimientos peculiares y ancestrales de
cada pueblo.”45

A diferencia de la concepción racional-normativa, ésta se funda en la idea


de que la Constitución Política no es fruto de la razón sino de ese
sentimiento de pertenencia a un lugar, del arraigo a las costumbres y
vivencias ancestrales, de tradiciones, usos y practicas acumuladas a lo
largo del tiempo histórico, y del pasado compartido entre los miembros
de un determinado territorio.

Asimismo, A. Ramella sostiene que, “La Constitución es el resultado de


una lenta transformación histórica.”46 Del mismo modo, Germán Bidart
Campos y Walter F. Carnota citado por García Toma refieren que según
esta corriente “(…) la Constitución {…} ha surgido, se ha modificado, y
subsiste en sus estructuras fundamentales no por la elaboración racional
sino como producto idiosincrásico de la comunidad. El tiempo, el uso, la
ejemplaridad, han ido legitimando su vigencia y consolidando su curso.”47

43
A. RAMELLA, Pablo. Op. Cit. Pág. 4.
44
GARCÍA TOMA, Víctor. Op. Cit. Pág. 469.
45
GARCÍA TOMA, Víctor. Op. Cit. Pág. 469.
46
Ibíd. Pág. 469.
47
BIDART CAMPOS, Germán y F. CARNOTA, Walter. “Derecho constitucional comparado”. 2 tomos. Edit.
Ediar. Buenos Aires - Argentina. 2001 citado por GARCÍA TOMA, Víctor. “Teoría del Estado y Derecho
Constitucional”. Edit. Adrus. 4ª edición. Perú. 2014. Pág. 471.
En tal sentido, como ya se sostuvo precedentemente, la Constitución no
es el resultado de la elaboración del legislador como producto de la razón
sino de una lenta transformación histórica en la que han intervenido
motivos culturales, políticos, sociales y económicos.

Finalmente, como fundamento a lo anterior, es recordable la afirmación


planteada por el representante de Pennsylvania John Dickinson en el
Congreso Constituyente de Filadelfia en 1787: “La experiencia debe ser
nuestra única guía. El raciocinio podría extraviarnos.”48

3.3. La concepción sociológica

Al igual que a las concepciones precedentemente desarrolladas


debemos establecer el origen de esta corriente, y de acuerdo a García
Toma (2014), “Fue impulsada por la vocación sociologista aparecida a
finales del siglo XIX e introducida específicamente por Ferdinand Lasalle
en su obra ¿Qué es la Constitución?”49

Al respecto, Ferdinand Lasalle citado por García Toma sustenta el


concepto sociológico en los siguientes términos: “Los factores reales de
poder (sic) que rigen en el seno de la sociedad son esa fuerza activa y
eficaz que informa todas las leyes e instituciones jurídicas de la sociedad
en cuestión, haciendo que no pueden ser, en sustancia, más que tal y
como son (…). ¿Pero qué relación guarda esto con lo que vulgarmente
se llama Constitución (…)? No es difícil, señores, comprender la relación
que ambos conceptos guardan entre sí.

Se toman, estos factores reales de la poder -las monarquía, la


aristocracia, la gran burguesía, los banqueros, la conciencia colectiva y

48
GARCÍA TOMA, Víctor. Op. Cit. Pág. 470.
49
Ibíd. Pág. 471.
la cultura general, la pequeña burguesía y la clase obrera-, se entiende
en una hoja de papel, y ya no son simples factores de poder, sino que se
erigen en derecho, en instituciones jurídicas, y quien atente contra ellos
atenta contra la ley, y es castigado.”50

En tal sentido, el concepto sociológico alude a la Constitución como la


concretización de los fenómenos sociales que nacen y evolucionan
gracias a la acción de los diversos factores de la convivencia colectiva; y
dentro de esos “diversos factores” están los factores reales de poder que
involucran a los que ostentan una posición social y económica, a las
pequeñas empresas, a los que están en el poder político, a la clase
obrera, etc. en fin a toda la sociedad.

Asimismo, A. Ramella sostiene que esta corriente sociológica, “Es la


concepción de la realidad. Es Constitución la que está vigente en un país,
sin consideración a su ideología. La Constitución es el resultado de las
condiciones sociales, jurídicas, históricas, etc., en un país
determinado.”51 Teniendo en cuenta la idea anterior, podría vincularse la
corriente sociológica con la concepción tradicional-histórica; sin
embargo, la diferencia radica en que la concepción sociológica tiene en
consideración aspectos sociales, jurídicos, económicas, etc. que
acaecen en la realidad del presente y no del pasado.

En tal sentido, como afirma Javier Tajadura Tejada citado por García
Toma, sostiene que “(…) la Constitución no es el resultado del pasado,
sino inmanencia de las situaciones sociales del presente; no se sustenta
en una norma transcendente, sino en la infraestructura social.”52

50
Ibíd. Pág. 471.
51
A. RAMELLA, Pablo. Op. Cit. Pág. 4.
52
GARCÍA TOMA, Víctor. Op. Cit. Pág. 471.
4. Naturaleza jurídica de la Constitución

Al respecto debemos partir por entender conceptos tan esenciales como


“naturaleza” y “jurídico”. En tal sentido, por naturaleza se hace referencia a lo
que es propio, a la esencia de algo, en general aquello que lo caracteriza
decisivamente; y es en esa misma línea de idea que, la Real Academia
Española refiere por naturaleza a “Esencia y propiedad característica de cada
ser.”53 Y por “jurídico” debe entenderse de acuerdo al Diccionario de la Real
Academia Española como “Que atañe al derecho o se ajusta a él.”54

Y la “naturaleza jurídica” se refiere según Manuel Ossorio en su Diccionario de


Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales como la “Calificación que corresponde
a las relaciones o instituciones jurídicas conforme a los conceptos utilizados
por determinado sistema normativo.”55

Es así que, Ferrero Rebagliatti refiere que “La Constitución es la norma


fundamental de la que desciende por grados el resto del orden jurídico. Puede
ser definida como el conjunto de reglas que organizan los poderes públicos y
aseguran el ejercicio de los derechos políticos y civiles.”56 Teniendo en cuenta
la pirámide normativa propuesta por Hans Kelsen se tiene que la Constitución
es aquella norma de carácter fundamental que se encuentra en la cúspide del
resto del orden jurídico, y es en ella en la que están establecidas las reglas
que regulan las funciones del Estado y la ley que garantiza los derechos
humanos.

Por otro lado, en su célebre opúsculo sobre la naturaleza de una Constitución,


el socialista Fernando Lasalle citado por Ferrero Rebagliatti sostiene que,

53
REAL ACADEMIA ESPAÑOLA. “Diccionario de la Lengua Española”. 22ª edición. Disponible en:
http://www.rae.es/rae.html.
54
Ibíd. Pág. 225.
55
OSSORIO, Manuel (s/f). “Diccionario de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales”. 1ª edición electrónica.
56
FERRERO REBAGLIATTI, Raúl. Op. Cit. Pág. 222.
“(…), en esencia, la Constitución de un país es la suma de los factores reales
de poder, expresados por escrito en instituciones jurídicas.”57 También,
Ferrero Rebagliatti refiere que, “Es a través de la Constitución que se realiza
la conexión entre derecho y poder. En efecto, el poder del Estado se ve
constreñido a ejercerse con arreglo a la estructura establecida por la
Constitución y es mediante ésta que el poder social se hace poder estatal,
asumiendo el gobierno dentro de las vías señaladas en ella.”58

5. Objeto de la Constitución

Respecto al objeto de la Constitución, Herrera Paulsen refiere que, “La


Constitución de modo general, organiza el ejercicio del Poder.” 59 La idea de
que la Constitución organiza el ejercicio del Poder debe ser considera en su
aspecto más general puesto que el mismo Herrera Paulsen sostiene que: “El
objeto de la Constitución es, pues, doble: de una parte, designa los
funcionarios a quienes corresponde decidir las cuestiones del Estado, fijando
su competencia y las modalidades de su ejercicio y, de otra parte, dice
Burdeau, ´también indica qué doctrina de organización social y política
representan los gobernantes y, en esto, ella identifica la idea de Derecho que
será la idea de obra de la institución estatal.´”60

Del mismo modo, Naranjo Mesa afirma que, “El objeto de una Constitución es,
por regla general, doble: a). De un lado organiza el ejercicio del poder en el
Estado; desde este punto de vista puede afirmarse que ella establece las
reglas de juego de la vida institucional; b). De otro lado, la Constitución
consagra los principios que servirán de guía para la acción de los órganos del

57
FERRERO REBAGLIATTI, Raúl. Op. Cit. Pág. 222.
58
Ibíd. Pág. 222.
59
HERRERA PAULSEN, Darío. “Derecho Constitucional e Instituciones Políticas”. Edit. Eddili. 2ª edición.
Lima - Perú. s/f. Pág. 144.
60
Ibíd. Pág. 144.
poder público; desde este punto de vista, ella refleja una determinada filosofía
política.”61

Asimismo, Ferrero Rebagliatti señala que la Constitución tiene un doble


carácter, así: “1º Es la norma que regula las funciones del Estado; 2º Es la ley
fundamental de garantías, respecto de los derechos humanos.” 62 En tal
sentido, de lo anteriormente expuesto, se deduce que la Constitución tiene un
carácter doble: organiza el ejercicio del poder del Estado que implica designar
a los funcionarios a quienes les corresponde decidir sobre cuestiones del
Estado, regular las funciones del Estado y todo lo relacionado con la vida
institucional de un determinado país; y, de otro lado, establecer principios que
se serán la guía para desarrollar determinada acción del poder público.

A continuación profundizaremos el contenido de cada uno de estos aspectos


que constituyen el objeto doble de una Constitución Política. Así vemos que:

5.1. Organización del ejercicio del poder

La organización del poder estatal es entendida como la fijación de las


reglas de juego que consiste en el establecimiento de un conjunto de
normas que determinan el estatus de los gobernantes así como la
naturaleza y fines de la actividad política por ellos desplegada. En tal
sentido, Herrera Paulsen (s/f) asevera que, “Esta organización puede
descomponerse en un cierto número de reglas que determinan el
estatuto de los gobernantes y paralelamente precisan los fines de su
actividad.”63

61
NARANJO MESA, Vladimiro. Op. Cit. Pág. 333.
62
FERRERO REBAGLIATTI, Raúl. Op. Cit. Pág. 221.
63
HERRERA PAULSEN, Darío. Op. Cit. Pág. 144.
Del mismo modo, Naranjo Mesa afirma que, “(…) la Constitución designa,
de un lado, los individuos a quienes corresponderá la adopción de las
decisiones, fijando su competencia y las modalidades del ejercicio de sus
funciones; y de otro lado, los procedimientos según los cuales serán
designadas las autoridades públicas.”64 Entonces, en la Constitución
Política de un determinado país se designa los procedimientos y
requisitos por las cuales son elegidos los funcionarios o autoridades
estatales; asimismo, establece las funciones y competencias para los
individuos que van a dirigir los destinos de un Estado.

Asimismo, Naranjo Mesa refiere que, “La Constitución es pues, para los
gobernantes, a la vez el fundamento de sus prerrogativas y la ley de sus
funciones. (…). Esta se traduce en el hecho de que el individuo o el grupo
que gobierna cumplen su tarea en virtud de un título que emana de la
Constitución. Sus decisiones no pueden legítimamente imponerse, sino
en cuanto se presume que son decisiones de un órgano constitucional
que valen como decisiones de Estado.”65

Es así que, fundamentando lo precedentemente señalado, Herrera


Paulsen sostiene que, “La Constitución para los gobernantes es el
fundamento de prerrogativas y la ley de su funcionamiento. Así: a).
Establece en primer lugar su legitimidad. En tal virtud, las tareas o
funciones que realizan los gobernantes las cumplen por mandato de la
Constitución. Sus decisiones se imponen legítimamente, valen como
decisiones del Estado; b). De esto también se desprende que la
Constitución es fuente de la autoridad de los gobernantes. Esta autoridad
solo existe por la Constitución y solo puede manifestarse en la medida
que ella lo prevé y reglamente; y, c). La Constitución, en fin, determina la
competencia de los gobernantes. Delimita las funciones a llenar por los

64
NARANJO MESA, Vladimiro. Op. Cit. Pág. 333.
65
Ibíd., Pág. 334
distintos órganos, las que pueden estar inspiradas en consideraciones
muy diversas. Limita necesariamente las posibilidades de acción de los
gobernantes, pues, aun, si su competencia es muy amplia, su ejercicio
esta subordinando al fin perseguido: el servicio del interés común.”66

5.2. Principios que deben inspirar la acción pública

Respecto a este punto, Naranjo Mesa puntualiza que “Aunque


generalmente se pone énfasis en el aspecto relativo a la organización del
ejercicio del poder en el Estado por parte de la Constitución, su aspecto
filosófico o ideológico no es menos trascendental. Podría decirse que el
primero es el aspecto formal, en tanto que este es el aspecto de fondo
de una Constitución.”67

Es así que de acuerdo con Naranjo Mesa, “(…) se trata de determinar los
principios que deben inspirar la acción del Estado y el funcionamiento de
los órganos del poder público.”68 Estos principios se fijan por regla
general en las llamadas declaraciones de derechos que están incluidas
en casi todas las Constituciones.

Este carácter es muy importante porque de acuerdo con Ferrero


Rebagliatti, Víctor “Este ultimo carácter de la Constitución, como
protectora de los derechos de la persona humana, es muy importante,
pues el Estado democrático, que surgió por obra de la Revolución
Francesa, el cual presupone la limitación del Estado por acción de las
leyes. La concepción del Estado de Derecho implica que el Estado no
puede obrar sobre sus súbditos sino conforme a reglas preestablecidas.
La concepción democrática esta consubstanciada con el Estado de

66
HERRERA PAULSEN, Darío. Op. Cit. Pág. 144.
67
Ibíd. Pág. 334.
68
Ibíd. Pág. 334.
Derecho, es decir, que el Poder es admisible solamente con un
ordenamiento jurídico de garantías.”69

6. Principios básicos de la Constitución

La Real Academia Española sostiene que, “Por principios se entiende a la


base, origen, razón fundamental sobre la cual se procede discurriendo en
cualquier materia. El principio es la base de una garantía, es un axioma que
plasma una determinada valoración de justicia de una sociedad, sobre la cual
se constituyen las bases fundamentales del derecho.”70

De lo señalado anteriormente se puede colegir que, por principio se entiende


a aquellos mandatos, normas que ordenan realizar algo en la medida de lo
posible y con relación a las posibilidades en el terreno de los hechos.

Del mismo modo, se entiende por principios básicos de la Constitución a


aquellas características y cualidades que tiene una Constitución que las
diferencia de las demás leyes de las que está integrada un ordenamiento
jurídico. Estos principios se pueden hallar ya sea de forma expresa o como
también tácitamente.

6.1. Principio de Supremacía Política, Jurídica y Normativa de la


Constitución

GARCÍA TOMA, Víctor respecto a los principios constitucionales refiere


que, “Son una pluralidad de fórmulas o modelos insertados de manera
expresa o tácita en todo sistema constitucional.”71

69
FERRERO REBAGLIATTI, Raúl. Op. Cit. Pág. 221.
70
CHANAMÉ ORBE, Raúl. Op. Cit. Pág. 112.
71
GARCÍA TOMA, Víctor. Op. Cit. Pág. 428.
Asimismo TORRES VÁSQUEZ, Aníbal sostiene que, “La Constitución
tiene carácter político y jurídico. El primero se manifiesta al evocar las
ideas como libertad, democracia, garantía de los derechos
fundamentales de la persona, limitación del poder. Su carácter jurídico
responde a la Constitución como norma y se desprende de su propio
contenido al establecer la obligatoriedad de sus preceptos.”72 Por otro
lado, el principio de supremacía jurídica “(…) responde a la Constitución
como norma y se desprende de su propio contenido al establecer la
obligatoriedad de sus preceptos. Todos los poderes del Estado le deben
sumisión.”73

Es así que, se entiende a la Constitución como el fundamento, la base o


el cimiento principal de todo el ordenamiento jurídico, es decir, no existe
ordenamiento jurídico alguno que no se fundamente o tome como base
a la Constitución; del mismo modo que, no existe norma alguna que esté
por encima de éste. En otro término se refiere a la garantía de
subordinación de todo ordenamiento jurídico porque las normas
posteriores están siempre subordinadas a la Constitución.

Del mismo modo, el autor precedentemente referido, sostiene que el


Tribunal Constitucional en la sentencia Nº 0014 – 2003 – AI/TC del
10.12.2003 establece que, “La Constitución es una norma jurídica debido
a que expresa la auto representación cultural de un pueblo, y refleja sus
aspiraciones como nación (...). (…) la representación del pueblo
políticamente soberano, lo asumirá la Constitución, que de esta forma
pasará a convertirse en norma jurídicamente suprema.”74

72
TORRES VASQUEZ, Aníbal. “Introducción al Derecho”. Pacifico Editores. Quinta Edición. Perú. 2015.
Pág. 315.
73
Ibíd. Pág. 113.
74
Ibíd. Pág. 326.
En tal sentido, una Constitución es una norma básica lograda por
consenso entre todos los intereses existentes en el país, un conjunto
normativo que todos acuerdan y se comprometen a respetar y en ella
contiene la filosofía para la construcción del Estado. Entonces, es la
norma que va a regular la convivencia pacífica en el país.

6.2. Principio de Jerarquía Normativa acorde a la Constitución

Respecto a este punto, ESCOBAR Claudia y VARGAS Marcelo


sostienen que, la expresión “jerarquía” se utiliza fundamentalmente en
dos sentidos:

“En primer lugar, la expresión hace referencia a la ordenación por grados


entre los diversos elementos de un sistema; en este primer sentido,
´jerarquía` es sinónimo de organización, estructura, orden o graduación
(sic)”75. En tal sentido, se colige que, existen unos elementos
constitutivos que hacen parte de un sistema, y que estos se encuentran
en una relación vertical donde unos son superiores a otros.

Por tanto, en el campo del Derecho, “La expresión se utiliza para referirse
a la ordenación escalonada entre los órganos de una determinada
organización por ejemplo, entre los órganos de las sociedades, entre las
ramas del poder, y al interior de las ramas ejecutiva y judicial, entre las
normas jurídicas, entre los principios, valores y derechos, y entre los
medios de prueba; precisamente, la ordenación por grados entre las
normas jurídicas es la ´jerarquía normativa`.”76

75
ESCOBAR, Claudia y VARGAS, Marcelo. “Evaluación critica del principio de jerarquía Normativa a partir
del derecho positivo colombiano”. Trabajo de grado. Bogotá – Colombia. 2000. Pág. 9.
76
Ibíd. Pág.10.
En segundo lugar, los autores ya citados refieren que, “La expresión hace
referencia a cada uno de los niveles o grados que hacen parte de la
estructura de ordenación vertical de elementos; aquí jerarquía es
sinónimo de grado, rango o categoría.”77 En tal sentido, llegando a la
conclusión de que, en el campo del Derecho se hace referencia a las
mismas cosas a las que se hace referencia en el sentido anterior, es
decir, al rango de los órganos, ramas y dependencias de una
determinada organización, a la posición de las normas de un sistema
jurídico, a la categoría de los principios, derechos y valores jurídicos y, al
rango de los diferentes medios de prueba.

De tal modo que, el principio de jerarquía normativa es un principio


estructural esencial para dotar al ordenamiento jurídico de seguridad
jurídica y resolver conflictos normativos. Es un principio ordenador básico
que ofrece una gran seguridad jurídica debido a su enorme simplicidad.
Así, basta conocer la forma de una disposición, para saber cuál es, en
principio, su posición y fuerza en el seno del ordenamiento. Este principio
está establecido en el artículo 51 de la Constitución, las normas jurídicas
se ordenan jerárquicamente, de forma que las normas de inferior rango
no pueden contravenir a las normas superiores puesto que la
Constitución prevalece sobre toda norma legal.

Asimismo, GARCÍA BECERRA citado por CHANAMÉ ORBE, Raúl


sostiene que, “La Constitución como ordenamiento fundamental del
orden jurídico, tiene una serie de principios sobre los que descansa.
Estos principios le dan sustento a la Constitución y la hacen diferente de
cualquier ordenamiento jurídico, son la base sobre la cual se sustenta la
Carta Magna (sic).”78 Es así que la Constitución es considerada como la
norma fundamental del Estado, que se caracteriza por su supra

77
ESCOBAR, Claudia y VARGAS, Marcelo. Op. Cit. Pág.10.
78
CHANAMÉ ORBE, Raúl. Op. Cit. Pág. 112.
legalidad, es el de mayor jerarquía (ocupa el lugar más elevado dentro
del ordenamiento jurídico), es decir, la Constitución ocupa la jerarquía
normativa más elevada por encima de la legislación.

Es así que, la estructura jerarquizada tiene una forma piramidal cuya


cúspide es la Constitución que es la norma suprema que se impone a
todas las demás. Por lo tanto, el respeto del principio de jerarquía es
condición de validez de las normas jurídicas.

Entonces, de la Supremacía de la Constitución nace el principio de la


jerarquía de las normas jurídicas, tal como lo afirma el maestro alemán
Kelsen, quien basa la Supremacía de la Constitución en dos conceptos
de orden jurídico: el de supra-ordenación y el de la subordinación de las
normas. En tal sentido, la norma que determina la creación de otra, es
superior a ésta; la creada de acuerdo con tal regulación, inferior a la
primera. El orden jurídico, especialmente aquel cuya personificación
constituye el Estado, no es, por tanto, un sistema de normas coordinadas
entre sí, que se hallasen, por así decirlo, una al lado de la otra, en un
mismo nivel, sino que se trata de una verdadera jerarquía de diferentes
niveles.

Teoría de la Pirádime Jurídica de Kelsen


6.3. Principio de Sometimiento u Obediencia al Orden Constitucional por
parte de los gobernantes y gobernados

GARCÍA DE ENTRERRÍA, Eduardo señala que “(…) un programa pleno


y completo de control de constitucionalidad debe cubrir al conjunto de las
normas infra constitucionales. Toda norma por cierto tiene que estar
sometida a la Constitución, como cualquier tipo de acto u omisión
proveniente de la autoridad pública (…).”79

CHANAME ORBE, Raúl refiere que “(…) el Estado liberal


decimonónico que confería supremacía absoluta a la ley se pasa al
Estado Constitucional, que limita el ejercicio del poder aun del
Legislativo. El núcleo del constitucionalismo moderno consiste en haber
concebido una norma suprema, fuente directa de derechos y
obligaciones, inmediatamente aplicable por todos los operadores
jurídicos, capaces de imponerse frente a cualquier otra norma, y, sobre
todo, con un contenido preceptivo amplio de principios y derechos
fundamentales (…).”80

En tal sentido, uno de los rasgos que mejor definen al “Estado


Constitucional de Derecho es la orientación del Estado a la protección
de los derechos al margen (o incluso por encima) de la ley; ya no la
eficacia de los derechos en la medida y en los términos establecidos en
la Constitución (…).”81

79
GARCÍA DE ENTRERRÍA, Eduardo. “La Constitución como norma y el Tribunal Constitucional”.
3ra. Edición. Civitas. Título 1., Pág. 87 y ss. y 131 y ss.; asimismo, GORDILLO, Agustín. “Tratado de
derecho administrativo. Parte general”. 1998. Capítulo VII-5.
80
CHANAMÉ ORBE, Raúl. “Conocimientos Básicos de la Constitución”. Editores Juristas.
Primera. Edicion.Lima.Peru.2004. Pág. 11.
81
Ibíd. Pág. 12.
Por ende, “Si un sector del ordenamiento jurídico en vigor o de la
actividad estatal no puede ser enjuiciado constitucionalmente, no se
tipifica en la nación del caso un régimen completo de control de
constitucionalidad. Ahora bien, tal como se viene de expresar, el referido
planteamiento ha generado desde larga data diversas resistencias
inspiradas en el sistema francés, en la exacerbación de la ley como
expresión de la voluntad general, y en una inadecuada concepción del
principio de separación de poderes (…).”82

En efecto, LINARES QUINTANA expresa que “(…) en el sistema francés,


el objeto de control es un acto jurídico legislativo o reglamentario no
perfecto (luego de perfeccionado el acto no cabe contralor alguno), y en
caso de ser declarado inconstitucional, el efecto del pronunciamiento es
la imposibilidad de promulgación o aplicación. El control reparador o a
posteriori imperante en la mayoría de los sistemas modernos se funda
esencialmente en la supremacía de la Constitución sobre la ley, principio
ínsito en el propio concepto de Constitución rígida. Desde esta
perspectiva, aparece obvio que una ley pueda desaplicarse si contradice
con una norma jerárquicamente superior.”83

6.3.1. De los gobernantes

Tiende a garantizar que los poderes constituidos


(Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial), respeten la
Constitución y tengan limitaciones en el ejercicio del
poder, por ello las autoridades principales del
Legislativo (Vicepresidente de la Republica), Ejecutivo
(Presidente) y del Judicial (Presidente de la Corte) al

82
CHANAMÉ ORBE, Raúl. Op. Cit. Pág. 12.
83
LINARES QUINTANA. Segundo. “Derecho Constitucional e Instituciones Políticas”. Ed. Plus ultra. T.I. y
II. 3ra. Edición. Buenos Aires - Argentina. 1981. Pág. 128.
tomar posesión de su cargo prometen el respeto a la
Constitución.

En relación a la Constitución Política del Perú el art.


39 refiere que, “Todos los funcionarios y trabajadores
públicos están al servicio de la Nación. El presidente
de la República tiene la más alta jerarquía en el servicio
a la Nación y, en ese orden, los representantes al
Congreso, ministros de Estado, miembros del Tribunal
Constitucional y del Consejo de la Magistratura, los
magistrados supremos, el Fiscal de la Nación y el
Defensor del Pueblo, en igual categoría; y los
representantes de organismos descentralizados y
alcaldes, de acuerdo a ley”84.

6.3.2. De los gobernados

Al respecto, la Constitución Política del Perú el art. 38 señala


que “Todos los peruanos tienen el deber de honrar al Perú y de
proteger los intereses nacionales, así como de respetar, cumplir
y defender la Constitución y el ordenamiento jurídico de la
Nación.”85

Así también, la Constitución Política del Perú el art. 45 señala


que, “El poder del Estado emana del pueblo. Quienes lo ejercen
lo hacen con las limitaciones y responsabilidades que la
Constitución y las leyes establecen. Ninguna persona,
organización, Fuerza Armada, Policía Nacional o sector de la

84
CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL PERÚ. 1993. Art. 39.
85
CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL PERÚ. 1993. Art. 38.
población puede arrogarse el ejercicio de ese poder. Hacerlo
constituye rebelión o sedición.”86

7. Contenido de Constitución

NARANJO MESA, Vladimiro señala que “El contenido de una Constitución


debe obedecer, como es natural, a los objetivos que esta se propone y que
son fundamentalmente, como se ha señalado, los de organizar el ejercicio de
poder en el Estado y fijar los principios esenciales que deben inspirar la acción
pública, mediante la consagración de los derechos y libertades de que son
titulares los asociados individual o colectivamente. De esta manera se puede
afirmar que una Constitución debe constar, básicamente, de dos tipos de
normas: normas de carácter orgánico y normas de carácter dogmático. Las
primeras son todas aquellas que se refieren directamente al primero de los
objetivos señalados: la organización del poder en el Estado. Las segundas
consagran los derechos, libertades y responsabilidades de los asociados y
establecen los principios filosóficos que deben inspirar la acción de los
gobernantes (…).”87

Del mismo modo, NARANJO MESA refiere que “Por ello se habla en
las Constituciones de una `parte orgánica´ y de una `parte dogmática´.
Pero, además, las Constituciones contienen, por lo general, una
`cláusula de reforma´, es decir, una o varias normas destinadas
específicamente a prever y describir los mecanismos para su propia
reforma. Y la mayoría de ellas contienen también normas que no se
refieren propiamente ni a la organización del poder ni a declaraciones
de derechos, es decir, normas ajenas tanto a la parte orgánica como
a la parte dogmática, que se podrían calificar de neutras, pero que,
por su importancia, el constituyente ha considerado conveniente

86
CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL PERÚ. 1993. Art. 45.
87
NARANJO MESA, Vladimiro. Op. Cit. Pág. 335.
incorporarlas al cuerpo constitucional. Por lo demás, las
Constituciones están precedidas salvo contadas excepciones de un
Preámbulo, en el cual se trazan de manera solemne y genérica los
grandes principios que inspiran su expedición.”88

Es así, como desarrollaremos de manera ordenada el contenido de la


Constitución en base a lo siguiente:

 Preámbulo;
 Parte filosófica;
 Parte orgánica;
 Normas neutras; y
 Cláusula de reforma.

7.1. El preámbulo

El preámbulo de una Constitución puede definirse como una declaración


solemne de los propósitos del constituyente que expresa los valores,
principios y necesidades de un pueblo (o de una nación), el cual será el
ordenamiento superior que le servirá de programación de su futuro. Se
trata de un enunciado previo a las formulaciones de reglas y normativas
numeradas de la Constitución. Se trata el preámbulo de la exposición de
fines y principios permanentes de una población con organización y
conciencia políticas. Es por ello que, debe reconocerse que
necesariamente un preámbulo presenta un contenido ideológico, que
refleja el momento histórico que vive un Estado y la ideología que, por lo
menos, imaginariamente aparece como dominante.

Es así que, el preámbulo es esa fórmula solemne colocada, a manera de


introducción, en el encabezamiento de la Constitución, y que resume las

88
NARANJO MESA, Vladimiro. Op. Cit. Pág. 335.
grande directrices que inspiran la promulgación de ésta y que deben servir
de pauta o guía a gobernantes y gobernados en la vida del Estado.
Puede definirse también como “La enunciación previa contenida en las
Constituciones, donde se exponen los grandes principios y fines que han
guiado al constituyente para redactar las normas básicas de la
organización política del país.”89

En materia de preámbulos, el de la Constitución de los Estados Unidos


de 1787 sirvió de modelo clásico a la gran mayoría de las Constituciones
americanas y europeas el siglo XIX, e incluso, de la época
contemporánea. Este Preámbulo señala: “Nosotros, el pueblo de los
Estados Unidos, a fin de formar una Unión más perfecta, establecer la
justicia asegurar la tranquilidad interior, proveer a la defensa común,
promover el bienestar general y asegurar los beneficios de la libertad
para todos nosotros y para nuestra posteridad, ordenamos y
establecemos esta Constitución para los Estados Unidos de América.”

Si examinamos, por ejemplo, el Preámbulo de la Constitución Argentina


de 1853, aun en vigor, vemos que, en buena parte es copia del anterior:
“Nos los representantes del pueblo de la Nación Argentina, reunidos en
Congreso General Constituyente por voluntad y elección de las
provincias que la componen, en cumplimiento de pactos preexistentes,
con el objeto de constituir la unión Nacional, afianzar la justicia,
consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, proveer el
bienestar general, y asegurar los beneficios de la libertad, para nosotros,
para nuestra posteridad, y para todos los hombres del mundo que quieran
hablar en el suelo argentino, fuente de toda razón y justicia, ordenamos ,
decretamos establecimos esta Constitución para la Nación Argentina.”90

89
Diccionario de Derecho Constitucional Contemporáneo. Pág. 228.
90
TORRES AGÜERO. “Constitución de la Nación Argentina”. 4ta. Edición. Buenos Aires. 1981. Pág. 87.
7.2. Parte filosófica o de Declaración de los Derechos y Deberes

Presenta los derechos, libertades y responsabilidades de los asociados y


establecen los principios filosóficos que deben inspirar la acción de los
gobernantes. Constituye la declaración de los derechos por cuanto en
los albores del constitucionalismo los derechos del individuo frente al
Estado se solían promulgar en un documento especial que recibían tal
denominación.

7.3. Parte orgánica o normas relativas a la organización del Estado

Son aquellas que se refieren al primer objetivo constitucional: la


organización del poder del Estado. Contiene los lineamientos esenciales,
las normas que definen al Estado mismo, la forma que éste adopta, su
sistema de gobierno y su régimen político, su división territorial,
normas referentes a la población, nacionalidad, ciudadanía, titularidad
del poder público, su distribución en ramas u órganos, los procedimientos
para la designación de los gobernantes y sus atribuciones, las reglas
sobre el ejercicio del poder, los controles y limitaciones a que están
sometidos los gobernantes, los términos de su mandato y, en general, las
condiciones bajo las cuales debe organizarse el Estado y ejercer el Poder
Soberano.

Como es lógico, FERRERO REBAGLIATTI, Raúl señala que “(…) estas


normas varían en cada Constitución según el Estado de que se trate. No
obstante, se ha objetado la manera como este tipo de normas tienden a
repetirse en los textos constitucionales; que existe una especie de
conformismo constitucional que hace de las Constituciones textos
estereotipados que no tienen sino una lejana relación con la vida política
real (…).”91

91
FERRERO REBAGLIATTI, Raúl. Op. Cit. Pág. 254.
“En efecto, a menudo el constituyente se limita en su tarea a plagiar
esquemas constitucionales de otros Estados y a repetir casi
textualmente, las reglas en ellos contenidas sobre la organización del
poder público, sin prestar la necesaria atención a las circunstancias
sociales, económicas culturales y políticas propias del medio y de la
época en que la Constitución y sus enmiendas van a regir. Como dice
`hay tabúes constitucionales, falsas ventanas en la fachada de los textos,
mientras los verdaderos motores de la vida se pasan en silencio`, como
resultado de este academicismo, las fuerzas que efectivamente actúan
en la vida estatal escapan a toda reglamentación constitucional cuando,
como atrás se señaló, la Constitución ha sido concebida como el pacto
social, como el breviario del ciudadano.”92

7.4. Normas neutras

Como se ha dicho, al lado de las normas puramente constitucionales, en


sentido material, las Constituciones incluyen frecuentemente una serie
de normas que no tienen carácter orgánico ni filosófico; pero que por la
importancia de las materias que regulan, el constituyente ha considerado
necesario y conveniente incorporar dentro de la Constitución, a fin de
hacerlas más estables y otorgarles una categoría superior a la de la ley
ordinaria. Dentro de esta categoría pueden incluirse todas aquellas
disposiciones referentes, por ejemplo, al régimen de familia, al ejercicio
de ciertas profesiones u oficios, al régimen de propiedad, o, en general,
normas de carácter social o económico distinta de las que bregan
derechos específicos en estos campos.

Como señala, GARCÍA TOMA, Víctor “(…) se considera a menudo a


estas normas como extrañas al contenido lógico de una Constitución,

92
FERRERO REBAGLIATTI, Raúl. Op. Cit. Pág. 255.
puesto que no tiene solamente por objeto definir el status orgánico del
Estado, sino también expresar la idea de derecho directriz de la actividad
estatal. Asimismo agrega, que si ella surge implícitamente de la
escogencia de los órganos, será más clara aun si se indican por algunos
ejemplos concretos, las prescripciones que ella establece.”93

Como ejemplo de este tipo de normas pueden citarse las que contiene
la Constitución colombiana y que disponen que “`El destino de las
donaciones intervivos o testamentarias hechas conforme a las leyes para
fines de interés social, no podrá ser variado ni modificado por el
legislador´, o que ´no habrá en Colombia bienes raíces que no sean de
libre enajenación, ni obligaciones irredimibles´, o la que dispone que
´solo podrán ser inscritos como abogados los que tengan título
profesional`.”94

7.5. Cláusula de reforma

Es la norma constitucional que especifica la forma como puede ser


reformada, generalmente de forma parcial, pudiendo serlo totalmente.
Esta cláusula es propia de las Constituciones rígidas, siendo un
procedimiento agravado o lleno de obstáculos que se deben de superar
previamente con tal fin.

8. Clasificación, tipología o variedades de Constitución

La diversidad de las Constituciones ha obligado a realizar varias


clasificaciones, de acuerdo con su forma jurídica, su origen y su carácter de
reformabilidad se encuentra clasificado de la siguiente forma.95

93
GARCÍA TOMA, Víctor. “Teoría Del Estado y Derecho Constitucional”. Edit. PALESTRA. 1ra. Ed. Lima
– Perú. 2005. Pág. 289.
94
Ibíd. Pág. 290.
95
CALZADA PADRÓN, Feliciano. Op. Cit. Pág. 134-137.
8.1. Según su forma jurídica

8.1.1. Constitución escrita

La Constitución escrita es aquella que se encuentra redactada


en un documento o texto de ley, por lo tanto existe una distinción
entre leyes constitucionales que son las leyes escritas y
ordinarias, este tipo de Constitución generalmente está
sometida a un proceso de línea especial.

La primera Constitución escrita, fue la de los Estados Unidos de


Norte América, adoptada por la Convenciones de Filadelfia de
1787. Esta Constitución influenció en la creación de una
diversidad de ellas, tal es el caso de Francia cuya Constitución
escrita fue la de 1791; esto motivó a que los posteriores
regímenes políticos franceses fueran regidos por
Constituciones escritas.

Esta Constitución es valorada como una garantía fundamental


para el gobernante y se constituye contra cualquier
arbitrariedad de los funcionarios y de los poderes públicos.
Un Estado dotado de una Constitución, es un organismo cuyo
poder ya se encuentra frenado, regulado. Esta garantía de
limitación, es más efectiva cuando la Constitución escrita es un
texto rígido.

8.1.2. Constitución no escrita

Las Constituciones consuetudinarias inician su ejercicio cuando


la organización y funcionamiento del Estado resulta de la
práctica constante como tradiciones consagradas por el uso
permanente y que llegan a tener fuerza jurídica.

Hasta fines del siglo XVIII no existieron sino Constituciones


consuetudinarias, basadas en la costumbre. Así, Gran Bretaña
ha conservado una Constitución consuetudinaria, que está
constituida por cinco modelos de documentos principales como:
la Carta Magna de 1215, la Petición de Derechos de 1628, Bill
of Rights de 1689, de Irlanda de 1800 y el Estatuto de
Westminster de 1931 y numerosas reglas escritas y decisiones
jurídicas que han establecido, por la fuerza de los procedentes,
las prerrogativas de la Corona. Del mismo modo, en la
Constitución Inglesa el conjunto de prácticas tradicionales han
adquirido el valor de verdaderas leyes constitucionales.

En tal sentido, FERRERO REBAGLIATTI, Víctor refiere que, “El


parlamento puede aprobar una reforma constitucional con las
mismas formalidades que rigen para las leyes ordinarias. Pero
como quiera que la costumbre cambie muy lentamente, no es
frecuente que se introduzcan innovaciones en la armadura
constitucional.”96

8.2. Según su Reformabilidad

La reformabilidad de una Constitución depende de su propia naturaleza;


es decir, si es rígida o flexible.

96
FERRERO REBAGLIATTI, Raúl. Op. Cit. Pág. 230.
8.2.1. Constitución rígida

Este tipo de Constitución es opuesta a la Constitución flexible,


aquí existe una jerarquía de normas legales donde la
Constitución es superior a la norma ordinaria, lo cual es
traducida en dos reglas:

 La Constitución sólo puede modificarse por un


procedimiento espacial.

 La ley fundamental se modifica por un órgano espacial o


siguiendo ciertas formas particulares preestablecidas.

La Constitución rígida es sistemática, casi todos los países han


adoptado Constituciones rígidas cuya reforma no puede
efectuarse sino siguiendo un procedimiento especial, más
dilatado y complejo que el exigido para la dación de leyes
ordinarias.

8.2.2. Constitución flexible

Cuando hablamos de un país que posee una Constitución


flexible nos referimos a que no existe una jerarquía en el
sistema normativo; la ley ordinaria y la Constitución se
encuentran jurídicamente en el mismo plano. Las leyes
constitucionales son las elaboradas por el legislador
constituyente y no por el legislador ordinario; del mismo modo,
se enmiendan, eventualmente, por un órgano especial y un
sistema procesal diferente y jerárquicamente superior al de una
ley ordinaria.
En tal sentido, HERRERA PAULSEN refiere que, “En
consecuencia, el órgano legislativo del Estado puede, por una
ley ordinaria elegida en las condiciones exigidas por toda ley,
modificar la Constitución, elaborar cualquiera de sus
disposiciones, nombrar, en fin una ley opuesta al texto
constitucional.”97

La noción de Constitución flexible provoca dos consecuencias:

 No hay distinción formal entre las leyes constitucionales y


las ordinarias: ambas categorías sólo se diferencian por el
contenido o disposiciones.

 Y, el sistema de la Constitución flexible no comparta un


procedimiento de limitación del poder de la Constitución.

La Constitución flexible es asimétrica. Así por ejemplo, la


Constitución británica es un modelo de Constitución flexible, de
igual manera el estatuto italiano de 1848 y el chino, este último
en menor grado.

8.3. Según su nacimiento u origen

8.3.1. Constitución otorgada

Se dice que corresponden tradicionalmente a un Estado


monárquico donde el propio soberano es quien precisamente
las otorga; es decir, son aquellas en las cuales el monarca, en
su carácter de titular de la soberanía, las otorga al pueblo. En
este caso, se parte de las siguientes premisas: Desde la

97
HERRERA PAULSEN, Darío. Op. Cit. Pág. 244.
perspectiva del monarca, es él quien la otorga por ser el
depositario de la soberanía. Es una relación entre el titular de la
soberanía monarca y el pueblo, quien simplemente es receptor
de lo que indique el monarca. Se trata de una Constitución en
la cual se reconocen los derechos para sus súbditos, así por
ejemplo tenemos a la Constitución francesa de 1814.

8.3.2. Constitución impuesta

En este tipo de Constitución, es la representación de la


sociedad la que le impone una serie de notas, determinaciones
o de cartas políticas al rey, y éste las tiene que aceptar. Por lo
tanto, existe en el caso de las Constituciones impuestas, una
participación activa de la representación de la sociedad en las
decisiones políticas fundamentales.

8.3.3. Constitución pactada

Estas Constituciones son multilaterales, ya que todo lo que se


pacte implica la voluntad de dos o más agentes; por lo tanto,
son convenidos y se dice que parten de la teoría del pacto
social.

Así se puede pactar entre comarcas, entre provincias, entre


fracciones revolucionarias, etc. Las Constituciones pactadas o
contractuales implican:

 Una mayor evolución política que en aquellas que son


impuestas u otorgadas.
 En las pactadas hay, una fuerte influencia de la teoría del
pacto social.

 En aquellas que son pactadas este pacto o consenso se


puede dar entre diversos agentes políticos todos aquellos
grupos de poder real que estén reconocidos por el Estado.

Así, aun tratándose de un imperio, cuando se pacta los


gobernados dejan de ser pobladores.

8.3.4. Constitución ratificada

Aquella que siendo dada por el Congreso Constituyente es


ratificada por otro estamento que puede ser el pueblo; por
ejemplo la Constitución actual.
8.4. . ………………

CHANAMÉ ORBE, Raúl por su parte refiere “Por sus singulares


características ontológicas las constituciones han sido clasificadas por
diversos autores.”98

8.4.1. Constituciones formales – materiales

Las formales son las Constituciones en su aspecto de sistema


de normas escrito y codificado. Es decir, lo que se debe ser
según las normas.

Las materiales son las vividas en la realidad social, es decir,


lo que es efectivamente en la realidad constitucional cotidiana;

98
CHANAMÉ ORBE, Raúl. Op. Cit. Pág. 113 – 114.
está en la conciencia de cada persona si puede cumplir con
sus deberes o no.

8.4.2. Constituciones racionales – normativas

Pretenden modificar la realidad y adecuarlo a un determinado


esquema jurídico por el solo hecho por el solo hecho de la
existencia de un conjunto de normas fundamentales escrita y
ordenada racionalmente. Considera que las normas son el
principio ordenado del régimen constitucional.

8.4.3. Constituciones historicistas

Cuando surge de un proceso histórico de una tradición que


eleva a una sociedad a tener determinados y particulares
reglas, diferentes de las otras sociedades con procesos
históricos distintos.

8.4.4. Constituciones sociológicas

Responden a las circunstancias de que la Constitución sea


considerada socialmente vigente en el presente, una
Constitución de ese tipo estaría integrada por las normas
políticas que en un momento determinado sean asumidas por
la sociedad como obligatorias.

8.4.5. Constituciones semi-flexibles

Se diferencia de los flexibles en que para reformar algunos


contenidos se requieren modos (la vigencia, la deroga de
Sudáfrica, la de Canadá de 1982).
8.4.6. Constituciones autoimpuestas

Los miembros de la comunidad ejercen el poder constituyente,


dándose así mismo una Constitución. Esto ocurre con la
mayoría de las Constituciones vigentes, esto se da
generalmente a través de congresos y asambleas.

8.4.7. Constituciones escritas – no escritas

Las Constituciones escritas son un código sistematizado. De las


no escritas existe una serie de normas de carácter
Constitucional y de Derecho Consuetudinario, el cual es
aceptado por el pueblo.

8.4.8. Constituciones pétreas

Se autoproclaman irreformables. En realidad algunas


Constituciones son pétreas en relación a algún contenido a ella,
como por ejemplo: la Constitución de Bonn de 1949, pétrea en
la imposibilidad de modificar el régimen republicano de
gobierno. La irreformabilidad puede ser establecido por un
lapso de tiempo, (por ejemplo: la Constitución de 1853 se
declaró irreformable durante 10 años).

8.5. Clasificación de Karl Lowenstein

Al respecto, CHANAMÉ ORBE sostiene que, “La actual generación se


ha vuelto más escéptica y también más humilde que la de sus padres. Es
consciente de que no se puede dar un Estado válido de una vez para
siempre y que, por lo tanto, tampoco hay un Teoría de la Constitución
eternamente válida, pudiendo tan solo cada generación dar una
interpretación general de lo que ella misma ha experimentado.”99

Así Loewenstein, uno de los grandes del Derecho Constitucional,


estableció una clasificación en relación a la ineficacia normativa de la
Constitución, y son:

 Normativas: Son aquellas en que se establece una relación


entre la realidad y la ley en correspondencia armónica.

 Nomonales: Son aquellas en la que no existe correspondencia


entre el texto constitucional y la realidad social.

 Semántica: Es aquella donde solo existe texto sin ningún


grado de aplicación de esa Constitución.

9. Teorías modernas sobre la Constitución

Al respecto, CALDERÓN SUMARRIVA puntualiza que, “La crisis de la


legalidad que afecta a todos los países ha producido una tendencia al
abandono del concepto tradicional de la Constitución y en su lugar se intenta
formular una nueva concepción de Constitución acorde con las nuevas
situaciones jurídico-constitucionales, ellas son las de: Smend, Schmitt, Heller,
Hauriou, Hans Kelsen, Santi Romano, Schindler, Kaufmann y Burdeau.”100

A continuación, se desarrollará a profundidad cada teoría, y son:

99
Ibíd., Pág. 115.
100
CALDERÓN SUMARRIVA, Ana y ÁGUILA GRADOS, Guido. “El ABC Del Derecho Constitucional”.
Editorial CT. 2da Edición. Lima-Perú. 2006. Pág. 27.
9.1. Teoría de Carl Schmitt

Carl Schmitt, resume su teoría “(…) en la reducción de la Constitución a


unas decisiones fundamentales. La posición decisionista considera que
el derecho tiene su raíz en la voluntad y no en la norma (…) (sic).”101 Esta
teoría plantea lo siguiente:

 La Constitución se establece por un acto de Poder Constituyente,


es decir, en virtud de una voluntad política preexistente que decide
sobre la forma y el modo de la unidad política. Tal unidad política es
el supuesto de la Constitución y no su consecuencia.

 La Constitución es el resultado de una decisión y no de una


obligación (norma).

 Intentando fundamentar el totalitarismo, sostuvo que el Derecho


tiene su raíz en la voluntad y no en la razón.

 La Constitución no surge ni se establece por sí misma; sino que es


producto de la voluntad de Poder Constituyente.

 La unidad política no es sólo una unidad fáctica, sino que es


también una unidad jurídica. Toda unidad política existente tiene su
valor y su razón de existencia, no en la justicia o conveniencia de
normas, sino en su existencia misma. Lo que existe como magnitud
política, es jurídicamente considerado, digno de existir.

 En la teoría de Schmitt subyace la afirmación hegeliana de que


existe una personalidad del pueblo como algo en sí, fuera de

101
SCHMITT, Carl. “Teoría de la Constitución”. Madrid. 1934. Pág. 25.
nosotros. Tal es la unidad natural, que perduraría en las
generaciones e iría creando el derecho positivo.

 La Constitución para Carl Schmitt supone la probabilidad de una


repetición de conductas, o sea, de una normalidad, pues se espera
que la configuración social se mantenga de modo análogo en el
futuro. La normalidad y la normatividad no forman territorios
separados sino unidos por una relación recíprocamente
condicionante.

 La presente teoría, “(…) hace mención acerca de la relación inter


sistemática entre Sociología y Derecho. Ruíz de Castillo manifiesta
que si el Derecho fuera condicionado, dejaría de ser normativo y
que, si ha de regir la vida social, no puede extraerse totalmente de
ella. Lo que rige se impone a lo regido o, por lo menos, lo conduce
(…)”102

9.2. Teoría institucionalista fundamental de Maurice Hauriou

Maurice Hauriou, fundamenta su planteamiento con la teoría


institucionalista, sus alegatos son:

 Considera a la Constitución como parte de un orden superior que es


el orden constitucional. Para comprender un orden institucional, debe
mirarse más allá de las reglas positivas que lo establecen
aparentemente, dirigiendo nuestra atención a las ideas políticas que
lo informan y a las funciones sociales que dicho orden constitucional
cumple.

102
FIX ZAMUDIO, Héctor y CARMONA, Valencia. “Derecho Constitucional Mexicano Comparado”.
Editorial PORRÚA. 2da Edición. México D.F., Pág. 27-39.
 Hauriou, sostiene que la base de una Constitución se encuentra en
las instituciones, a las cuales la ley fundamental no hace sino
organizarlas. La ley positiva, por tanto, equivale a un estatuto de lo
que ya existe, o sea de instituciones creadas por el medio social. Una
institución es la encarnación de una idea moral.

 Define el régimen constitucional como un orden de cosas a la vez


formal, objetivo y sistemático, que engendra fuerzas de resistencia
contra el poder y contra la libertad. Como quiera que las fuerzas del
poder y de la libertad son espontáneas, tiene un carácter subjetivo y,
por ello requieren una limitación objetiva, representada por las
instituciones constitucionales.

Preocupa a Hauriou, sobre todo, la ordenación social que sustenta al


régimen constitucional, pues entiende la Constitución como una
organización de instituciones y al Estado como la institución de
instituciones.

9.3. Teoría de Georges Burdeau

Georges Burdeau, define la Constitución como:

 “(…) una operación jurídica, mediante el cual el poder es transferido


de los gobernantes a una entidad abstracta, el Estado. Así, el poder
se institucionaliza y la Constitución viene a ser el estatus del poder
(…).”103

 Acto determinador de la idea del Derecho, al mismo tiempo que regla


la organización en el ejercicio de las funciones estatales. Agrega que

103
BURDEAU, Georges. “Traite De Science Politique”. Editorial Católica. 1ra Edición. París-Francia. 1949.,
Pág. 50.
la Constitución es la regla por la cual el soberano legitima el poder
adhiriéndose a la idea del derecho que representa y que determina, en
consecuencia, las condiciones de su ejercicio.

 Sostiene que la Constitución vale como teoría y no como política y que


no existe otro derecho que el positivo. Destaca la originalidad de su
concepción en cuanto distingue entre la Constitución en sentido
lógico-jurídico y en sentido jurídico-positivo. Atribuye a las dos la
misma necesidad teórica, es decir, la necesidad de partir de un
supuesto unitario que permita comprender como relaciones jurídicas
una serie de situaciones fácticas de poder. Dicha necesidad, afirma
Kelsen, es la que llevó al positivismo a formular una norma
fundamental y al iusnaturalismo a la hipótesis del contrato social.

9.4. Teoría normativista de Hans Kelsen

Hans Kelsen, plantea lo siguiente:

 El orden estatal reposa, por tanto, sobre una norma teorética, cual
es la de que debemos obediencia a la Constitución.

 La Constitución en sentido jurídico-positivo surge como grado


inmediatamente inferior en el momento en que dicho legislador
establece normas que regulan la legislación misma.

 La función estatal equivale a función jurídica, puesto que Estado y


Derecho son una misma realidad. No existe una yuxtaposición u
oposición de funciones como afirma la teoría tradicional, sino una
jerarquía de distintos grados de proceso creador del Derecho. Esta
estructura jerárquica desemboca en una norma fundamental, en la
que se basa la unidad de orden jurídico en su auto movimiento
 Kelsen admite que la norma fundamental no es creada por un
legislador, sino supuesta por el conocimiento jurídico.

Postulaba que, “La defensa de la Constitución no podía ser realizada


por el Presidente de la República, ya que la esencia de la democracia
no radicaba en el Jefe del Ejecutivo, por haber sido electo por la mayoría
del pueblo tal como lo postulaba Schmitt, sino en el Parlamento en
donde se conjugaba el pluralismo existente en el complejo mundo
estatal, es decir, como el pueblo se encontraba representado en el
Parlamento a través de partidos políticos, éste vendría a ser el lugar de
la discusión, del debate y la reflexión.”104 Además que la defensa de la
Constitución le correspondía a un órgano denominado Tribunal
Constitucional.

9.5. Teoría de Rudolf Smend:

Rudolf Smend, nos plantea lo siguiente:

 La Constitución es el orden jurídico de un Estado, que se diferencia del


resto del orden jurídico por ´el carácter político de su objeto “y del resto de
normas jurídicas en que estas son (…)la normativización abstracta de una
pluralidad infinita de casos`; mientras que la Constitución es la ley individual
de una realidad vital concreta.

 La Constitución no es mero cuerpo de normas, sino una unidad que actúa


como ley vital y más allá de su carácter técnico - jurídico.

 El pensamiento de Smend; se basa en la teoría de la integración personal,


funcional y real del siguiente modo:

104
GARCÍA PELAYO, Manuel. “Derecho Constitucional Comparado”. Editorial Alianza Universidad Textos.
Madrid-España. 1991., Pág. 35.
La integración personal se refiere al Jefe de Estado, que representa la
unidad nacional, o sea básicamente concibe a las personas o sociedades
que no sólo son medios para obtener finalidades reales y que no pierde su
esencia por tener un carácter de portador de competencias o por su calidad
de órgano del Estado, sino que constituyen una parte importante del Estado
mismo.

La integración funcional social comprende todas las formas de vida


colectiva de una comunidad, principalmente los procesos que producen
una síntesis social.

La integración real está referida a todos aquellos fenómenos que significan


participación de los individuos en un contenido de principios estatales o
encarnados en el estado.

 Este proceso es designado como Integración, aquí se sostiene que el


Estado es una parte de la realidad espiritual, una esfera espiritual colectiva,
y que tiene como característica un tipo de existencia dinámica. Es así que
el Estado vive y existe sólo en este proceso de renovación.

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