FACULTAD DE ESTUDIOS SUPERIORES

PLANTEL ARAGÓN
Carrera: Ingeniería civil
Asignatura: Mecánica de Suelos
Profesor: Gabriel Ruíz González
Reporte visita a la C.H. “La Yesca”
Alumno: Sosa Flores Jorge Daniel
Grupo: 1751
 Reporte visita a la C.H. “La Yesca”
Comenzaré desde que se tomó el autobús en las instalaciones de la FES Aragón, justo salimos 20
min después de lo esperado, sólo se nos dio indicaciones de tomar lugares y de tratar de no usar el
sanitario del autobús, a menos de que fuese muy necesario, pero cabe destacar que eso nos lo dijo
Alex, debido a que el chofer jamás se presentó y siempre estaba muy callado, no anunciaba las
paradas y algunas veces en el trayecto estaba fumando.

Ya comenzado a hacer calor en el camino, se puso el aire acondicionado, el cual no era del todo
bueno, en lo personal entiendo que nos tenemos que adaptar a las situaciones como se nos
presenten, pero de ser posible que lo antes mencionado no suceda, sería muy bueno y se
agradecería bastante.

Llegando aproximadamente a la hora prometida al pueblo de Tequila (Jalisco), ya se nos había dicho
que caminaríamos para llegar al hotel debido a que el acceso del autobús sería difícil, lo cual me
pareció muy bueno, ya que nos fuimos dando cuenta de las personas que están por ahí, de los
puestos de recuerdos y un sinfín de cosillas interesantes.

En el hotel se nos asignó nuestro cuarto compartido con los mismos compañeros, y se nos dio la
instrucción de que por la mañana saldríamos a la Central Hidroeléctrica La Yesca, así que salimos a
conocer el pueblo ya que teníamos una tarde-noche libre.

Por la mañana como se dijo salimos a la C.H., nos hicimos como hora y media de trayecto y una vez
estando ahí nos proporcionaron casco para todos como medida de seguridad.

Nos presentaron a nuestro guía de la visita que fue un ingeniero topógrafo, el cual fue muy amable
y nos dio una visita que, ya preguntando al profesor Gabriel Ruíz, nos dijo que fue la visita más
completa que nos han dado, la cual relataré a continuación:

Primero llegamos a ver lo que es la obra de excedencias o vertedor, el cual con sus 6 compuertas de
12 metros de ancho por 22 de alto, se ve impresionante, además de los pistones enormes que tienen
para mover dichas puertas y los brazos metálicos que las sostienen.

Obra de excedencias o vertedor Subestación, cortina y contenedor

En segundo lugar vimos lo que fue la obra de contención, mejor conocida como cortina, con sus
208.5 metros de altura y se colocaron poco más de 12 millones de metros cúbicos de roca, grava y
arena, con un embalse aproximado a 1,392 millones de metros cúbicos.

Caminando por encima de la cortina nos dimos cuenta de lo grande que es la obra, llegamos hasta
el otro extremo donde está la obra de toma, la cual consiste en dos tuberías de entrada, no las
pudimos ver porque el agua las cubría, pero en una imagen nos dimos cuenta del tipo de obra que
se hizo ahí. Después esa obra conecta con la casa de máquinas, pero antes visitamos la subestación
que está arriba de la caverna, dicha subestación tiene 7 transformadores y muchos controles, los
cuales por evidentes razones no podíamos tocar, ya que hay que recordar que es una obra de
resguardo militar, aunque sólo vimos pocos militares. Después de eso subimos nuevamente al
autobús para que nos bajara por una carretera hasta la parte delantera de la presa, donde está
ubicado un túnel enorme por donde ingresó el autobús y nos dejó hasta la parte alta de la casa de
máquinas con dimensiones de 50 metros de alto, de ancho con 22m y de largo 112 m, en su interior
alojaba 2 turbinas tipo Francis con eje vertical, dichas unidades generadoras ubicadas a lo alto de
algunos pisos de la casa de máquinas, el primer piso bajo tierra donde pasamos (el superior),
también llamado cuarto de excitación, debido a que ahí se mide el voltaje de excitación, y pudimos
ver que estaba girando una de las turbinas, la cual estaba al mínimo de trabajo por lo que nos dijo
el ing. Topógrafo, de ahí bajamos un nivel, al piso de generadores, con una cantidad inimaginable
de controles, pero ahí estaban los generadores cubiertos por una doble pared de concreto, donde
sólo por una puerta se puede ver que de ahí proviene el ruido. También hay muchas tuberías de
aceites, lubricantes para los generadores; luego pasamos al piso de turbinas donde se apreciaba
más la complejidad de las tuberías y en lo personal me llamó la atención una estructura en forma
de caracol, distintiva de la turbina tipo Francis, pero a menor escala porque la estructura de caracol
se aprecia en el mapa de piso, donde el agua pasa a gran velocidad y hace la generación de energía.

Estructura tipo caracol de la turbina Francis, una a escala y las dos enormes en mapa de piso

Posteriormente, bajamos un nivel más, hasta el piso de galería, el cual básicamente es el último
nivel al que pudimos tener acceso, porque ya más abajo sólo está un depósito de agua que es la que
se filtra en toda la obra, dicho gasto de agua se va midiendo piso por piso, hasta llegar al máximo
gasto de ese nivel, una vez ahí se usan unas bombas para sacarla nuevamente y que no se inunde
jamás, esas bombas siempre están trabajando ya que la filtración es siempre.

Una vez terminado el recorrido hasta debajo de la caverna enorme, subimos nuevamente para
poder salir, no sin antes hacer nuestro famoso Goya en festejo de haber concluido la visita con la
casa de máquinas, luego subimos nuevamente por la cortina, y fue ahí cuando nos dijeron
nuevamente que las rocas que están acomodadas, fue trabajo de tipo artesanal, es decir, buscar la
cara que embone para que quede perfecto. También pudimos ver que hay túneles, lo cuales se
llaman lumbreras y por ahí se verifican ciertos datos porque la cortina a pesar de su impresionante
dimensión, sufre un empuje de centímetros por año y eso también se debe de medir.

Después de concluida la visita nos regresamos al pueblo de Tequila, donde ya después, muy
cansados de estar en el sol del mediodía, el ingeniero Gabriel Ruíz nos recomendó un lugar muy
bueno para comer, y la verdad cabe destacar que la birria estuvo excelente, con su agua bien fría y
una tortillas elaboradas a mano. Posteriormente cada quien tomó su camino para turistear y probar
el famoso tequila de la región. En lo personal no me quedé con las ganas de probar de todos los
sabores que había de tequila y licores, pero claro sin excederme pues sólo era para degustar, aunque
sí estaba muy “pegador” el licor dulce. Ya después llegada la noche a cenar unas ricas hamburguesas
de la región, que sí tenían un sabor diferente y muy rico. Al finalizar la cena nos fuimos al hotel a
seguir la convivencia con los compañeros y amigos.

Al día siguiente, todos puntuales para desayudar antes del largo regreso; el cual fue de
características similares al viaje de ida, sólo que con el extra de que el sanitario desprendía un olor
muy fétido debido a que no estaba sellada la puerta. Fuera de eso fue un excelente viaje donde
hicimos una última parada donde comimos nuevamente y compramos algunos dulces de la región
de Michoacán, en donde por cierto los federales hicieron que el autobús se parara y cuando se sube
preguntó a dónde íbamos y de dónde veníamos, sólo inspección de rutina; aunque un tanto
temerosos algunos por los conflictos que se viven en nuestro país.

Llegamos poco después de la hora prometida, pero sin novedad, todo muy bien y con una despedida
amistosa del profesor cada quien tomó su camino.

Piso de galería Entrada/salida, el primer nivel