Sunteți pe pagina 1din 5

COMENTARIO HISTÓRICO DE TEXTO

16 NOVIEMBRE 2017.

1º Grado Historia
“Yo soy Ciro, rey del mundo, gran rey, rey legítimo, rey de Babilonia, rey de
Sumer y Akkad, rey de los cuatro bordes (de la tierra), hijo de Cambises…,
nieto de Ciro. Cuando entré en Babilonia como un amigo y establecí la sede del
gobierno en el palacio del gobernador…, Marduk, el gran señor, indujo a los
magnánimos habitantes de Babilonia a amarme, y yo me esforzaba todos los
días en adorarle…
Yo luché por la paz en Babilonia y en todas las ciudades sagradas. En cuanto a
los habitantes de Babilonia…, yo reparé sus viviendas en ruina, poniendo así
fin a sus quejas. Marduk, el gran señor, estaba satisfecho con mis hechos y
me envió amigables bendiciones, a mí, Ciro, el rey que lo venera y a Cambises,
mi hijo, el fruto de mis visiones, así como a todas mis tropas.
Todos los reyes del mundo entero, desde el mar superior al mar inferior, los
que se sientan en salones de trono… (así como) todos los reyes…, que habitan
en tiendas, trajeron sus grandes tributos y besaron mis pies en Babilonia”
ANÁLISIS EXTERNO:
Se trata de un texto extraído del Cilindro de Ciro y escrito en cuneiforme acadio
donde se alaba al rey Ciro II el Grande, circa 600/575-530 a C., y se muestra
como rey universal (las cuatro partes) de Mesopotamia.
Como motivo de la conquista de Babilona, Ciro II el Grande, mandó escribir a
sacerdotes babilonios el texto en un cilindro de arcilla que posteriormente fue
depositado en los cimientos de las murallas de Babilonia.
Dividido en tres párrafos, el primero hace referencia a su grandeza y
descendencia, advirtiendo al resto de monarcas de su universalidad y
grandeza. Muy propio del rey Persa, acepta a Marduk como dios al que adora
todos los días en muestra de reconocimiento y respeto a los babilonios.
En el segundo párrafo, Ciro II el Grande, justifica su conquista sobre Babilonia
atribuyéndola a penalidades que padecían sus ciudadanos por el rey Nabónido
y como cuenta con la aprobación del dios Marduk, quien bendice a él mismo,
su hijo Cambises (al que vio en sus sueños premonitorios, muy propio de este
monarca) y su ejército, como indicación al pueblo babilonio de legitimización y
continuidad regente.
El tercero y último párrafo, somete a todos los reyes de los “cuatro bordes de la
tierra” quienes le rinden pleitesía y sumisión.
ORIGEN Y ÁMBITO DE APLICACIÓN
Texto historiográfico donde Ciro II el Grande habla en primera persona de las
penalidades a las que estaban sometidos los babilonios por el anterior
monarca, Nabónido y como es llamado por el dios Marduk para que entre en
Babilonia y se convirtiera en su nuevo rey.
COORDENADAS ESPACIO TEMPORALES
Culminación de la campaña contra Babilonia y continuación de la expansión del
Imperio Persa, Ciro II el Grande toma la ciudad el 12 de octubre del 539 a C.,
en connivencia con el sacerdocio babilonio que estaba a su vez enfrentado al
rey Nabónido por sus reformas religiosas.
ANÁLISIS INTERNO
Enunciado.
Babilonia, capital universal.
Términos y conceptos que nos remiten a la antigüedad.
Ciro II el Grande: circa 600/575-530 a C., rey aqueménida de Persia y
fundador del Imperio persa aqueménida tras vencer a Astiages, último rey
medo, 550 a C., extendiendo su dominio por la meseta central de Irán y gran
parte de Mesopotamia. Sus conquistas sobre Media, Lidia y Babilonia, y desde
el mar Mediterráneo hasta la cordillera del Hindu kush, lo convierten en el
mayor imperio conocido hasta ese momento, conservándose cerca de
doscientos años hasta la conquista de Alejandro Magno, 332 a C.
Akkad: Ciudad fundada por el rey Sargón I el Grande, se desconoce su
localización y fecha de fundación, posiblemente hacia el 2.340 a C.
Sumer: Sumeria, región histórica de Oriente Medio que era parte sur de la
antigua Mesopotamia entre las planicies de los ríos Éufrates y Tigris.
Babilonia: Antigua ciudad de la Baja Mesopotamia. Ganó su independencia
después del período del renacimiento sumerio, aunque hay menciones a su
existencia desde tan temprano como Sargón de Akkad. Después de mucho
tiempo presenciando las luchas entre los estados regionales
de Isín, Larsa y Ešnunna, Babilonia fue convirtiéndose poco a poco en una
potencia regional, primero sustituyendo el papel que habían tenido Akkad
o Kiš para muy posteriormente convertirse en capital de un vasto imperio bajo
el mandato de Hammurabi (siglo XVIII a. C.). Desde entonces se convirtió en
un gran centro político, religioso y cultural

Marduk: dios tardío de la antigua Mesopotamia y deidad patrona de la ciudad


de Babilonia, que cuando se convirtió en el centro político del valle del Éufrates
en época de Hammurabi, ganó popularidad hasta alcanzar la cúspide del
panteón babilónico residiendo en el templo Esagila
IDEAS SECUNDARIAS
La conquista de Babilonia se encuadra en la tercera etapa de conquistas
iniciadas por Ciro II el Grande en el 550 a C., tras la primera victoria del rey
medo Astiages. A la fama de conquistador hay que añadirle la de magnánimo y
moderado ya que los reyes vencidos eran perdonados, las ciudades
conquistadas no eran destruidas y las divinidades y cultos locales eran
mantenidos e incluso adoptados por el propio Ciro.
Ciro trató de aprovechar el clima de pacificación que había caracterizado a la
época del acuerdo medobabilonio, si bien, su estratégia era claramente
imperialista, expansionista y unificadora. La lengua babilónica se mantiene y
Ciro no impone el persa.
CONCLUSIONES.
Ciro II el Grande, es un rey imperialista que sienta las bases de expansión y
conquista del Imperio Persa, rompiendo con la coexistencia pacífica entre
medos, babilonios, lidios y egipcios no conformándose con su papel
secundario.
Habiéndose rebelado contra el rey Astiages, al que perdona la vida, y con la
conquista de Ecbatana, el dominio persa sustituye rápidamente al medo,
siendo que los reyes y naciones trasladan a Ciro su reconocimiento de
hegemonía, suponiendo en ese momento un cambio jerárquico conservándose
las organizaciones políticas relajadas y generosas con las autonomías y
dinastías locales.
Su expansión continua con Lidia, 547 a C., perdonando al rey Sardes, y en los
años siguientes, 545-539, los dedica al flanco exterior del imperio iranio,
Bactriana, Gandara y Aracosia, llegando a las inmediaciones del valle del Indo.
Con la conquista de Babilonia, se hace automáticamente con los territorios
mesopotámicos y con los siropalestinos poniéndose fin a la dominación de los
gobernantes semitas sobre Mesopotamia y Oriente Medio, no necesitando del
empleo de una gran fuerza militar.
El Imperio persa, que tuvo continuación en su hijo Cambises y Darío, unificó
regiones que en los siglos anteriores habían sido polos opuestos de desarrollo
socioeconómico y de agregación política, vinculados entre sí por lazos
comerciales, diplomáticos y militares, esencialmente distintos.

S-ar putea să vă placă și