KEFIR

Instrucciones básicas

Una vez que uno se hizo con los nódulos de kéfir surgen muchas dudas… ¿Cómo empezar, qué
poner en el preparado? ¿Cómo conservarlo? Acá van unos tips iniciales…

KEFIR DE AGUA

Preparado básico:

Colocar en un frasco grande (que tenga capacidad para un litro de agua aproximadamente) 3
cucharadas de nódulos de kéfir, dos cucharadas soperas de azúcar tipo mascabo u orgánica y un
litro de agua mineral o filtrada. No usar agua de la canilla porque el cloro puede dañarlos. Agregar
medio limón con la parte abierta hacia el líquido. Tapar el frasco. En caso de taparlo de manera
hermética, dejar entre un tercio y un cuarto del frasco vacío, el kéfir necesita aire. También se
puede tapar con un lienzo o servilleta de papel, en este caso no es necesario dejar el espacio de
aire en el frasco.

Dejar fermentar durante 24 hs (diferentes tiempos de fermentación producen resultados

diferentes) a temperatura ambiente.

Sacar el limón, colar el líquido (que es lo que vamos a beber) y guardar los nódulos de kéfir en un
frasco con agua en la heladera. Hay que notar que en cada preparado el kéfir se reproduce, se
agranda y aumenta en cantidad, esto es lo que posibilita regalarlo a otra persona.

Uno puede notar que si colocó inicialmente 3 cucharadas, al momento de colarlo encuentra que
tiene 4 o 5 cucharadas. La cantidad de nódulos final que obtenemos puede variar dependiendo de
qué hayamos colocado en el preparado, el tiempo de fermentación, la vitalidad de los nódulos. Si
no se reproducen es signo de que algo no va bien y hay que observar el procedimiento.

Esta es una receta básica, hay muchas variantes, se pueden agregar distintos tipos de frutas o
jugos naturales que cada uno tendrá que experimentar y encontrar las que son de su agrado.

Conservación de los nódulos:

Los nódulos de kéfir, para realizar cotidianamente el preparado, pueden guardarse en un frasco
con agua en la heladera cuidando siempre de dejar aire, lo necesitan para respirar.
Aproximadamente una vez por semana es conveniente lavarlos un poco con agua libre de cloro.

Existen otros métodos de conservación como el disecado.