Sunteți pe pagina 1din 3

El niño

El secreto de la infancia

Alumna: Francisca Herrera Velásquez

Docente: Ellinor Barentin

Iniciación al Método Montessori


El niño

El secreto de la infancia

Como se plantea en el texto el niño posee una vida psíquica a educación necesita
ser revisada con urgencia, ya que su sicologia ha sido cuestionada desde tiempos
antiguos y es en base a esto que los niños y niñas han sido víctimas de
deformaciones por parte del adulto.

La mayoría de las veces se jacta a niño y niña como un ser con conductas
caprichosas, pero en el fondo no se detienen a ver como esas conductas son
expresiones de las cuales se pueden desprender diversos aprendizajes, que
claramente el niño/a manifiesta a su modo de expresión libre.

En la actualidad los docentes y el mundo en general, ven estas conductas como


un hecho negativo, tildándolo como una conducta disruptiva, pero no se analiza el
trasfondo de estas conductas. Pudiendo ser estas un grito de necesidad de
expresarse, de educarse y de querer aprender a su ritmo.

La educación no es liberal con los niños y niñas, en un sistema tradicional, se


forma una estructura y una rigidez ante a cual los alumnos deben someterse, no
se les permite la elección, la expresión de sus necesidades, sin importar lo que
ellos necesitan como lo dice María Montessori “liberar es conocer”. Un error muy
común en el sistema educacional actual, produce que el educador actué sobre el
niño/a, sin considerar lo primordial que es actuar sobre el ambiente, y es aquí
donde uno como docente, como educador se debe replantear su labor educativa,
pues, ¿Sera correcto actuar por sobre el pensamiento, conductas y /o
necesidades de los niños y niñas? Personalmente creo que debemos actuar sobre
el ambiente, prepararlo para el aprendizaje, tomarlo como un contexto
educativo, es más se debería incluir al niño/a en estas decisiones, ampliar su
proceso de creación y libertad en el cual se encuentra para promover más
aprendizajes significativos.

En el texto se plantea el primer principio de la Educación como acudir al


descubrimiento del niño para realizar su liberación. Hoy en día en muchos centros
educativos se oprime este principio, pasándolo por alto, sobre poniendo e
imponiendo la decisión de un educador, siendo el niño/a el que debe adaptarse al
ambiente y al educador. Cuando realmente según este principio es el adulto y el
ambiente los que debiesen adaptarse al niño y niña y a sus necesidades.
Por otra parte influye en la forma de enseñar y en el cómo se entregan
herramientas a los educando el ego del adulto, queriendo siempre llevarse los
méritos, sin dar lugar y atribuir los logros propios de los niños y niñas, estando
siempre la competencia de por medio. He visto esto en diversos lugares
educativos, en donde se instauran diferentes métodos de enseñanza, donde los
educadores luchan y compiten entre ellos, imponen sus métodos, sus decisiones
y no se toman el tiempo para preguntar a los niños y niñas ¿Qué quieren
aprender? ¿Qué temas les interesan? Otro punto es la no adaptación del
ambiente, no la preparación de este para el aprendizaje, el adulto sin embargo
lo adapta para su comodidad y sus necesidades.

El adulto debe convertirse en niño/a para lograr entrar en este mundo lleno de
fantasías, de imaginación, libertad y de creación para así entender la necesidad
y forma de adquirir los aprendizajes de manera espontánea tal como se logra
adquirir en el método Montessori.

La educación debe replantearse, debe existir un nuevo paradigma en la educación


tradicional, integrar diversos métodos que permitan la exploración,
experimentación por parte de los niños y niñas, generar oportunidades que
permitan aprendizajes mucho más significativos, según la necesidad de cada
alumno en formación.

S-ar putea să vă placă și