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Bajo un aparente desorden se esconde el secreto del universo y en las matemáticas existe una
posible respuesta de la verdad, tal como lo señalaba Pitágoras matemático filósofo del siglo V
a.c. quién pensaba que el universo estaba regido por las matemáticas y en ella busco
respuestas, llegó a encontrar una relación extraña en el número 1,618 ya que cuando dividía 1
entre 1,618 obtenía 0,618 resultado en el que se repiten los últimos tres dígitos, a este número
lo llamo número de oro o PI la letra griega Φ. Fibonacci un arquitecto italiano obtuvo una
sucesión numérica de: 1, 1, 2, 3, 5, 8, 13, 21, 34, 55……
sucesivamente cada número se obtiene de la suma de dos que le
preceden y al dividirlos por el anterior el resultado se aproxima al
número de oro 1,618 mientras más elevada sea la cifra más se
aproxima al número de oro, en base a esta secuencia se construyó el Figura 1. Rectángulo y espiral
de oro
rectángulo áureo o de oro, en el que si dividimos el lado mayor entre el
menor obtenemos 1,618 lo que nos dice que es un rectángulo en proporción dorada, y de este
se obtiene la espiral logarítmica o dorada. El número de oro está inmerso dentro del rectángulo
de oro, de la espiral dorada y la secuencia de Fibonacci dentro los anteriores, todas están en
relación unas de otras y todas están en proporción dorada, estos son hallados en objetos, seres
o fenómenos que son considerados proporcionales y bellos, la proporción dorada fue utilizada ya
mucho tiempo atrás en obras como las de Leonardo Da Vinci, en esculturas de Miguel Ángel
donde moldeaban figuras humanas en rectángulos de oro, esta proporción fue usado por
arquitectos desde los egipcios en la construcción de la pirámide de Keops del año 2600 a.c., en la
torre Eiffel la que posee rectángulos áureos o en el edificio de naciones unidas, también se hallan
en la naturaleza, en las flores, en el crecimiento de plantas, la distribución de las hojas en un tallo
o angulaciones de las raíces, en la formación de caracoles, en la anatomía de insectos en su tórax
y abdomen, en la reproducción de abejas y conejos, en los anillos de Saturno o la distancia de los
planetas. La música no es la excepción Stradivarius usó el 1.618 para calcular la ubicación de los
ejes de sus violines, también se halló este número en la estructura básica de las sonatas de
Mozart, en la Quinta sinfonía de Beethoven.
Este número también se encuentra en el hombre porque está hecho en proporción dorada desde
su ADN en el que al dividir el grado de inclinación de una espiral de ADN por su diámetro se
obtiene el número de oro, la estatura total de una persona se divide entre la distancia que hay
de los pies al ombligo resultando el número de oro, este dato es aplicable para la obtención de la
estatura de las personas, también ésta proporción la podemos observar en los pies, brazos,
*Especialista en odontología Restauradora y Estética.
Magister en educación superior en salud EGEC- UMSS
dedos y falanges que están en proporción dorada, para la obtención de
las falanges se multiplica 1,618 y se obtiene el tamaño de la próxima
falange, también se puede calcular el largo del antebrazo con la
medida de la mano o calcular las divisiones de la vértebras e incluso la
sonrisa o las piezas dentarias.
En odontología estética la proporción dorada es un instrumento que
permite el análisis del rostro, las arcadas y piezas dentarias facilitando
el proceso de diagnóstico y tratamiento pero este número va mas allá,
ya que puede aplicarse a la odontología forense, las piezas dentarias
siguen proporciones, la distancia mesio-distal del incisivo central Figura 2. Obtención de
medidas de falanges al
superior puede ser utilizada como referencia para el cálculo del ancho multiplicar por 1,618