INGENIEROS CONSULTORES Y ASOCIADOS, C.A.

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Prof. Marcías Martínez

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 DISEÑO CONCEPTUAL DE SEPARADORES

Marcías J. Martínez

1. Introducción.

El diseño de un separador se refiere a las consideraciones que se

deben hacer para calcular y decidir sobre el dimensionamiento y
selección de los equipos que debe llevar un separador, escogiendo el
tipo más apropiado para realizar el trabajo. El término “conceptual”
atañe a las consideraciones o conceptos en los cuales se apoya el
ingeniero para calcular y decidir sobre la mejor selección técnico
económica. Para hacer los cálculos y escoger el equipo más apropiado
el diseñador se apoya de manera especial en las normas existentes
(Ver Fig. No. 1 y 2). A los fines de este trabajo, se hará referencia a la
separación de mezclas de hidrocarburos, un aspecto rutinario en la
industria del petróleo.

1.1. Parámetros fundamentales para el diseño de un separador,

empleando como ejemplo el diseño de un separador vertical.
(Ver Fig. No. 3).

A continuación se mencionan los principales parámetros que

sirven de soporte al momento de calcular el recipiente (Ver Fig. No. 4):

1.1.1.Caudal del gas que se va a separar, presentado en

condiciones normales (14.7 lpca y 60 ºF).

El calculista deberá proceder a expresar este caudal en su

respectivo volumen a condiciones de operación, entendiendo como tal
la presión y la temperatura a la cual se va a hacer la separación de la
mezcla de hidrocarburos (Ver Fig. No. 5). Una vez que se determina la
cantidad de gas que saldrá por el tope del recipiente y el líquido que,
después de separarse sale por el fondo del separador, es posible iniciar
la indagatoria correspondiente.

El gas del tope se deberá trabajar a condiciones de operación (Ver

Fig. No. 6). Para calcular el diámetro interno del recipiente vertical, se
deberá calcular previamente la velocidad crítica del gas dentro de la
unidad (Ver Fig. No. 7). Se entiende como tal aquella velocidad por
encima de la cual los líquidos son arrastrados conjuntamente con la
fase gaseosa. Este término no toma en cuenta la existencia de una

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malla o extractor de niebla capaz de retener las partículas que
eventualmente pudiera arrastrar el gas.

Con el caudal de gas, a condiciones de operación, y la velocidad

del fluido gaseoso dentro de la unidad se determina el diámetro
requerido para hacer el trabajo (Ver Fig. No. 8). El ingeniero deberá
seleccionar el diámetro comercial más cercano que exista en el
mercado. Con este parámetro se inician los cálculos, no obstante, no
podemos garantizar que sea el que finalmente se vaya a utilizar.

1.1.2.Cantidad de líquido que debe procesar el separador.

Después que se selecciona el diámetro del recipiente, se debe

calcular la altura que los líquidos ocuparían dentro del separador. Este
parámetro (h L) va a servir de soporte para el dimensionamiento de la
unidad. (Ver Fig. No. 9).

Para calcular (hL) es necesario conocer el tipo de fluido con el cual

se trabaja, porque el tiempo de retención o de residencia de los líquidos
en el separador se determina con la gravedad API del fluido. En la Fig.
No. 9 se indican las condiciones para seleccionar el tiempo de
residencia.

Así, con el caudal de líquido que se deposita en el fondo del

recipiente y el tiempo de retención se dispone del volumen de líquido
que el separador puede manejar.

La altura del líquido será igual al volumen calculado dividido entre

el área transversal del separador que se ha seleccionado en forma
preliminar.

Con el diámetro del separador y la altura de líquido se termina el

dimensionamiento del recipiente, atendiendo a la normativa que
específicamente se aplique en cada caso. (Ver Fig. No. 1 y 2).

Es normal que el recipiente resulte demasiado alto, en lugar de un

separador habría resultado un tubo. En ese caso es necesario ir
aumentando el diámetro de manera progresiva hasta colocar la unidad
dentro de las condiciones de esbeltez que recomienda la norma (Por
ejemplo: 2,5 <L/D< 6,0). Cuando ocurre lo contrario y el recipiente
resulta demasiado chato, el diámetro se reduce hasta colocar el valor
de L/D mayor que el mínimo sugerido. (Ver Fig. No. 10).

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 En ambos casos el diseñador deberá encontrar el diámetro
correcto desde el punto de vista de la esbeltez o de la elegancia del
diseño.

Ahora se podrá revisar los catálogos para escoger un separador

que satisfaga los requerimientos de la empresa.

¿Cuál de estos criterios siguen los fabricantes?

El que más convenga para aumentar las ganancias. El fabricante

tiende a aumentar la velocidad interna del gas para reducir el diámetro
del separador.

De esa manera el vendedor tenderá a demostrar que su

separador, siendo más pequeño que el de la competencia, es capaz de
manejar una cantidad igual o mayor de los fluidos. El precio no será
aquel que resulte del costo del equipo fabricado, sino que, será
establecido en función de otras unidades menos eficientes y de mayor
diámetro.

1.2. Separadores horizontales. (Ver Fig. No. 13).

En el caso de los separadores horizontales el problema se centra

en la distribución adecuada del área de la sección transversal del
cilindro para manejar simultáneamente el gas y el líquido. En este caso
el agua y el petróleo se trabajan como una sola fase. (Ver Fig. No. 11).

El área requerida pa ra el gas natural también se calcula a partir

del caudal del gas, a condiciones de operación, y la velocidad crítica
del gas dentro del sistema. El volumen de líquido que se debe manejar
se encuentra multiplicando el área de la sección del círculo reservada
para los líquidos por la longitud del separador. (Ver Fig. No. 12).

Para repartir la sección transversal entre el gas y el líquido se

requiere un procedimiento de ensayo y error. La experiencia del
diseñador acortará el tiempo de cálculo en forma con tundente.
Obviamente, cuando se dispone de un simulador el ingeniero podrá
verificar de manera previa el diámetro más conveniente, con lo cual
reduce en forma efectiva la búsqueda de las respuestas.

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1.2.1.Normativas de dise ño.

La norma que se emplee para el diseño de un separador

horizontal bifásico conducirá al ingeniero a la selección más económica
y recomendable. De manera general se puede decir que, a medida que
aumenta el diámetro del separador se incrementa el precio del
recipiente. Eso conduce a utilizar el máximo valor permitido de L/D
antes de incrementar el diámetro del separador. (Ver Fig. No. 16).

1.2.2 . Diferencias con los separadores verticales vs. los

horizontales. (Ver Fig. No. 14 y 15).

El separador horizontal permite almacenar mayor cantidad de

líquido que el vertical, se prefiere cuando la relación gas petróleo es
baja.

El separador vertical se recomienda en aquellos casos donde el

fluido predominante sea el gas antes que los líquidos.

Esta primera opción podría quedar de lado cuando, por razones

de espacio, se deba seleccionar una unidad más apropiada para el
lugar donde se haga la separación.

1.3. Separadores horizontales trifásicos. (ver Fig. No. 17).

La separación trifásica implica la separación del gas con respecto

a los líquidos y, simultáneamente, garantizar que el petróleo salga libre
de agua y, el agua, libre de petróleo. Ello implica que cada una de las
fases (aceptando que el petróleo y el agua se comportan como dos
fases bien diferenciadas) debe salir del recipiente completamente libre
de la otra.

La separación del gas natural con respecto a los líquidos se logra

observando con rigurosidad los parámetros que ya han sido analizados:

1.3.1.Velocidad crítica del gas dentro de la unidad.

Tiempo de retención del líquido, en función de las características

del fluido que se separa.

Velocidad en el sentido vertical tanto del agua en la fase de

petróleo como la del petróleo en la zona reservada para el agua. Este

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aspecto es el más importante porque obliga al incremento del diámetro
del recipiente y aumenta de manera notable el costo del separador.

Es conveniente aclarar que en el cálculo de la velocidad en el

sentido vertical intervienen, entre otros parámetros, el tamaño de la gota
y la viscosidad del fluido. El tamaño de la partícula que se considera
apropiada para clasificar al agua, libre de petróleo y viceversa, es un
aspecto muy determinante en el tamaño del recipiente. Debe anotarse,
adicionalmente, que no resulta fácil medir el tamaño de la gota en las
operaciones del campo. La mayoría de las veces el usuario termina
aceptando lo que dice el vendedor de los equipos.

Así concluye el análisis del tema, dedicado al “Diseño conceptual

de separadores”.

El hipertexto del trabajo ha sido realizado por la empresa

INGENIEROS CONSULTORES Y ASOCIADOS C.A. (ICONSA):
iconsa@cantv.net y www.gas-training.com

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