Sunteți pe pagina 1din 7

Capítulo I: La teoría transhumanista

Desde los comienzos de la humanidad, se ha formulado la pregunta


fundamental sobre ¿Qué es un ser humano? Esta pregunta es indispensable para
el hombre, motivado a que a partir de ella es que se establecerá y determina que
seres son aquellos que serán considerados humanos y cuáles no. Por ello, es que
esta pregunta necesita estar vigente en cada momento de la historia de la
humanidad, porque su respuesta es lo que le permitirá crear al hombre derechos
humanos universales y concretizara la teoría humana.

Sin embargo, en la actualidad la humanidad atraviesa un momento delicado


en lo que es considerado un ser humano, la pregunta fundamental de los
hombres, está siendo replanteada por diversos autores y se comienza a proponer
definiciones mucho más amplias de ser humano de lo que se ha manejado hasta
los momentos. En otras palabras, la reflexión sobre el sentido y significado del ser
humano se está construyendo para formar una nueva definición del ser humano.

Es en este punto de la discusión que aparecen autoras como Teresa


Aguilar quien plantea una nueva visión de la humanidad, en donde los hombres
poseen partes mecánicas o robóticas, es decir son una hibridación con las
máquinas para repotenciar sus facultades y cubrir sus falencias. Se podría
plantear que este tipo de propuestas indican que el hombre comenzaría un nuevo
ciclo de civilización y evolución como un ser mas allá de lo humano, un hibrido
entre máquina y humano, un cyborg el cual determinara la nueva condición
humana.

Cabe aclarar, que cuando se está hablado de un nuevo concepto de ser


humano como lo es el del cyborg y una nueva teoría transhumanista no se refiere
a una teoría que vaya más allá de lo humano desligándose de su concepto, es
todo lo contrario. La teoría transhumana refiere a todas las capacidades que
posee el hombre y pueden ser mejoradas, es decir las facultades innatas del
1
hombre que puede potenciar y alcanzar un nuevo nivel gracias a su propia
voluntad de poder y capacidad de conciencia de lo posible. Es de esta forma que
el hombre evoluciona y dota de nuevos significados a todo lo que le rodea, es así
que construye el mundo.

Esta teoría transhumana pretende alcanzar nuevas definiciones de términos


que en la actualidad se encuentran obsoletos. Existen muchos conceptos que
resultan insuficientes para el ser humano, pues estos no logran abarcar a todo la
humanidad y su función queda restringida a un grupo selecto. Conceptos tales
como la libertad, política, sociedad, ética o derechos humanos ya no son
apropiados hoy en día; porque al no tener claro la definición de ser humano, no es
posible concretizar estos conceptos para todos los hombres.

En conclusión, es necesaria una nueva definición de ser humano que


actualice la visión del ser humano y fomente una apropiada teoría
transhumanista. Siguiendo los pasos de Teresa Aguilar, se puede proponer una
nueva teoría humana donde el ser humano sea considerado como una mezcla
hibrida entre hombres y máquinas que sirva para potenciar todas las facultades
innatas del hombre actual. No obstante, este es un punto delicado en la filosofía
moderna ya que abre un abanico de pros y contras contra este tipo de nueva
definiciones de ser humano.

Existen números autores que exponen su latente preocupación por expandir


la definición de ser humano y consolidar una nueva teoría transhumana que
considere los seres hibridados entre hombres y maquinas como humanos, pues
consideran que esto pondrá fin a la humanidad, son hombres con posturas
tecnofobicas. Asimismo, están otros autores y pensadores que consideran
necesaria esta nueva interpretación de ser humana ya que por medio de la
hibridación hombre-máquina se podrán superar ciertas limitaciones y potenciar
las facultades de los hombres, se posee una postura más tecnófila

2
Capitulo II: El debate entre la tecnófila, tecnófobia y los heréticos ante la ontología
cyborg

En la actualidad existe una profunda crisis humanística debido a la falta de


respuesta sobre la pregunta por ¿Qué es un ser humano? No existe una definición
o respuesta que satisfaga en este momento esta pregunta y eso crea diversas
disputas en la sociedad y una falta de claridad para concretizarlos derechos
humanos universales. Motivado a esto, se ha propuesto una nueva definición de
ser humano que contempla la hibridación entre los hombres y las maquinas como
seres humanos, ampliando el horizonte de lo posible y potenciado las facultades
de los hombres superando algunos límites de la naturaleza.

La nueva propuesta del concepto de ser humano como cyborg, que ha sido
defendida por Teresa Aguilar en múltiples escritos, ha traído como consecuencia
diferentes debates entre dos bandos definidos como aquellos que son tecnófilos y
los otros que son tecnofobicos. Es decir, el debate está concentrado entre los
amantes de la tecnología que la perciben como un potenciar al ser humano y los
que interpretan la tecnología en el ser humano como una invasión por parte de las
maquinas sobre el hombre que terminara en aniquilar a la humanidad. El debate
sobre esta nueva teoría transhumanista es el surgimiento de la tecnófila y la
tecnofobia.

Por un lado del debate sobre el nuevo concepto de ser humano, se


encuentran los partidarios de que la tecnología, las máquinas y los hombres son
campos que deben permanecer separados, pues la intromisión de uno con el otro
terminara suprimiendo alguno de los dos campos. En esta eliminación de un
campo sobre el otro, los tecnofobicos se decantan con que el lado a eliminar
terminara siendo el de los hombres, concluyendo así con la humanidad y abriendo
paso a un nuevo mundo donde los hombres son innecesarios. En otras palabras,
los hombres ya no serían quienes construirían el mundo y dotaran de sentido al
mismo.

3
Los tecnofobicos poseen muchos argumentos a su favor para defender su
postura, pues establecen que si la tecnología comienza a superar a los hombres,
estos pasarían a ser innecesarios y progresivamente sustituidos por un ser mejor.
La tecnología no es apreciada como una herramienta que facilita la vida de los
hombres o potencia sus facultades innatas, al contrario es vista como una
amenaza a la humanidad que pretende sustituir al hombre. Las maquinas no serán
un apoyo o soporte para el hombre, sino que serán las nuevas dotadoras de
sentido y será el hombre la herramienta para ellas.

Por otro lado, se encuentran aquellos que apoyan a la tecnología y


consideran que esta debe integrarse al campo de la humanidad para ser utilizada
como la herramienta que es para superar ciertas falencias de los hombres. Los
pensadores que plantean introducir al cyborg como una nueva y más amplia
definición del ser humano lo hacen por el hecho de que consideran que el hombre
no pierde su esencia de humano, mas bien se magnifica porque la tecnóloga le da
la posibilidad de potenciar las facultades del hombre y le facilita muchas tareas,
esto con el fin de cubrir necesidades actuales para poder plantearse mucho más
objetivos estimulando la conciencia de lo posible y despertando aún más la
voluntad de poder de los hombre.

Los tecnófilos argumentan que la tecnología es solo una herramienta para


los seres humanos y debe ser utilizada, ya que esta es la nueva ventana para la
superación de la humanidad. Es una superación al estilo de Hegel y Marx, es un
superar conservando lo que ya se posee, de ahí que el hombre siga siendo el
dotador de sentidos en el mundo.

En conclusión, ambas posturas son extremos de un mismo debate en


donde cada uno tiene argumentos con que defender sus posturas la tecnófila
establece la ontología cyborg como la esperanza superior de la humanidad,
mientras que la tecnofobia la considera como una amenaza final a la
supervivencia de la humanidad.

4
Capitulo III: la sociedad unidimensional y las nuevas formas de control

La ontología cyborg es un tema de discusión profunda en la actualidad


porque pretende renovar y replantear la pregunta fundamental de los hombres.
Debido a esto, se han formado diversos grupos de pensadores encargados de
discutir este tema y exponer todas las repercusiones que podría conllevar el
cambio de la definición por el ser humano a los hombres. Uno de estos debates es
el que mantienen aquellos que apoyan a la tecnología como la herramienta
necesaria y fundamental para la evolución del hombre, y los que consideran que la
unión hombre-máquina traerá consigo la extinción del hombre.

Los dos grupos poseen suficientes argumentos para defender sus posturas
y muestran los pros y contras de la ontología cyborg, sin embargo este tema y sus
consecuencias no son temas totalmente nuevos. Herbert Marcuse en su obra
titulada El hombre unidimensional en su primer capítulo ya expuso como se podría
conformar una sociedad unidimensional y nuevas formas de control. En este
capítulo del autor, se podría plantear la pregunta de si la civilización se encuentra
en la encrucijada de ¿súper maquinas o sub-humanos? Es decir, si la tecnología
potencia y es el siguiente pasó de la evolución de los hombres o los hombres
serán condenados a nuevas formas de control por parte de las máquinas y
perderán su libertad.

En primer lugar, Marcuse escribe como la tecnología y las maquinas se


pueden considerar como las herramientas necesarias y definitivas para solventar
muchas necesidades de la humanidad, para así otorgarle un tiempo libre a los
hombres el cual puede ser utilizado para la concertación de nuevos objetivos y
planear su futuro de manera más fácil y amplia. Las maquinas utilizadas de buena
manera ofrecen una utopía factible donde el hombre puede alcanzar una evolución
necesaria y ofrecen un tiempo libre a los hombres que les permitirá un amplio
desarrollo. No obstante, esta sería el mejor de los casos, en el cual las maquinas

5
liberan a los hombres de las formas de control ya existentes y ayudan a gestar un
hombre multidimensional.

En segundo lugar, se argumenta como a pesar de que la tecnología y las


maquinas pueden brindar esta liberación a los hombres, en la realidad resulta
mucho más complejo que esto suceda. Las maquinas en vez de ser utilizadas
como un apoyo y una forma de potenciar las habilidades de los hombres, terminan
generando una dependencia excesiva que va eliminado las facultades
desarrolladas por el hombre. La tecnología se comienza a transformar en una
nueva forma de control que engendra a sociedades unidimensionales.

Los hombres en busca de la libertad y tiempo de ocio que le ofrecía las


maquinas, terminan siendo totalmente dependiente de las mismas, a tal punto que
son incapaces de realizar actividades básicas sin la ayuda de la tecnología. Es en
este punto donde las formas de control cambian mas no se eliminan o reducen,
mientras que sin tecnología se encentran sometidos por el tiempo y los sistemas
engorrosos para realizar diversas tareas, con tecnología ganan más tiempo pero
no se pueden desligar de las maquinas. En otras palabras, se gana unas cosas
pero se pierden muchas otras. La libertad plena que pudiera haber prometido la
inclusión dela tecnología es solo utópica porque en la realidad las sociedades se
vuelven esclavas de la tecnología

En resumidas cuentas, Marcuse expone tanto la discusión y critica de los


tecnófilos y la de los tecnofobicos. Por una parte los que creen que las maquinas
permitirán un mayor tiempo libre a los hombres para crearse nuevas necesidades
más sofisticadas y dar un paso evolutivo y, por otra parte, aquellos que creen que
la tecnología terminara siendo otra forma de control y supresión de los hombres,
en donde se destaran hombres incapaces de crearse nuevas necesidades y
objetivos. Esta es una discusión abierta actualmente que necesita ser discutida
muy profundamente y ese es el deber de los hombres y sobre todos de los
filósofos contemporáneos.-

S-ar putea să vă placă și