PSICOBIOETICA BY HUGO EDGAR RUIZ MONROY

AL SAPIENS DE ESTOS TIEMPOS

“Os hablo con la única verdad de que dispongo, hemos de pensar todos que; la
dimensión psicológica de los sapiens de estos tiempos; depende en gran medida
de la calidad de vida que les ofrezcamos, y les heredemos, depende también; de,
los controles poblacionales que decretemos, de los accesos a las oportunidades,
además; del respetó, y la libertad existencial que les procuremos”

Nunca subestimes lo que un solo hombre puede hacer; por agua, y mucho menos
subestimes; a una horda sedienta.

El futuro de la especie es de carácter ético, el devenir de la especie es de carácter

moral.

Las multitudes sobrecargan el cerebro del sapiens, y lo hacen violento; por el te-
mor a la hambruna, a la sed y a la escasez. Estamos programados evolutivamente
para ocupar espacios, y suplir necesidades; exigencias halladas, gravadas en el
cerebro reptil como improntas.

“Han de temer todos quienes dejen descendencia tras de sí, será por su posteri-
dad débil e insatisfecha que habrán de temer, y lamentar. -Adorad al Dios que vie-
ne con cosas nuevas- Informen, y formen a los niños con palabras apropiadas, y
justo ejemplo; sobre la necesidad existente de controlar los nacimientos; para que
no sean sus hijo devorados por las llamas, por el hambre, por la sed y por las
emociones perversas; siendo varón, o siendo hembra, dará igual en el nuevo or-
den mundial”

La conexión entre el cielo, la tierra, y el inframundo; es una idea muy poderosa

para la especie sapiens, sapiens y está; alojada, en el cerebro de reptil como im-
pronta de supervivencia; siendo cuerpo o siendo alma; es por eso que, para pactar
con el hombre un nuevo mandato reproductivo; este ha de ser de carácter divino,
evangelizado, y moralizado convenientemente, nada más.

“Oh cuanta misericordia; y piedad; hallaran en el paraíso las almas altruista, y be-
nefactoras que no dejen descendencia, y permitan que se reproduzca el plasma
de la especie; loadas son por Dios, y por la especie”

Es gigantesca la tarea de construir un nuevo orden mundial; empero, no está por

encima de lo que podemos llamar poder; será otra gran revolución de especie;
propia del desarrollo del intelecto de estos tiempos. El dogma, y la norma interac-
tuaran transformando así; las poderosas emociones humanas. Las emociones al-
fabetizadas potenciaran un nuevo orden en el orbe, y alentaran la reproducción de
quien tenga altas probabilidades de vida exitosa.

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“Los tiempos en que el sustento llega de todas partes en abundancia; está llegan-
do a su fin, empero; no sin antes de que se conozca el hambre, la desocupación, y
la maldad feroz; producto de la emocionalidad perversa que aumentara en de-
nuesto por la pobreza, y la proliferación sin control”

La cuestión de sobrepoblación, y pobreza; es un tema que ha ocupado a econo-

mistas, demógrafos, políticos, ambientalistas, biopolíticos, geopolíticos, humanis-
tas, incluso a las naciones unidas, empero; las instituciones dogmáticas no han
hecho nada aún. Una inmensa mayoría de personas nos preguntamos sobre el
devenir de la especie, y su gigantesco número convertido en sinónimo de miseria,
la cuestión hoy; es, la supervivencia planetaria con algún éxito para la especie po-
seedora de la razón.

No solamente nos afectara la falta de alimentos, también los espacios, las cues-
tiones laborales, académicas, la contaminación, el agua, las emociones perversas,
el número, la miseria de la especie, el dogma donde son más poderosas la envi-
dia, y las bajas pasiones que el mismo Dios, en fin…, la teoría de Thomas Robert
Malthus, se colapsó porque en la época del primer ensayo sobre la población; la
expansión agrícola fue la más grande que se haya dado en la corta historia huma-
na, empero hoy está vigente; siempre ha existido la carencia, el hambre, no obs-
tante; y aun así, desde hace mucho tiempo sabemos qué; no solo la agricultura
soporta a la cultura, también; la soporta el dogma que en estos tiempos ingentes
se ha hecho perverso; la envidia se hizo poderosamente destructiva, y con el aval
de Dios se destruye a los hermanos de especie, la fe, y la envidia son un coctel
poderosamente explosivo, “odias los unos a los otros” parece ser el mansaje del
dogma extraviado de estos tiempos, y con frases menesterosas, zalameras, co-
chinas, y pútridas se ensalza la hipocresía diciendo “que Dios te bendiga”

Dios ama a los estériles; son los únicos que entendieron su mensaje, Dios dueño
de todo lo existente tuvo solamente un hijo según los cristianos; para las demás
confesiones ninguno. Oda extraviada para los insensatos, and pútridos que tienen
hijos, y les heredan el viento; no bastara con darles nombres de santos; la miseria
les acompañara, y atormentara. Que hermosa recompensa para los que no tienen
hijos; para ellos la fortuna, el mar, la playa, y las montañas regadas por sendos
ríos de agua limpia, y pura; empero, para aquellos reproductores de miseria; la
tierra árida, reseca, y las invitaciones a degustar excremento vendrán de todos
lados; serán permanentes, y además, tendrán una recompensa extraviada; es to-
do lo que merecéis pútridos engendros. Id por la tierra, y mirad cual es el castigo
de los que llaman pútrido e infecto; al autor de estas líneas que solo habla con
verdad; el tormento de la sed, y del hambre aguarda por ellos, y sus respectivas

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madres. Y si tuvieres los medios, y el éxito asegurado para vuestros hijos; ateso-
radles son plasma, y nada más.

Hemos hoy día; creado, o descubierto un mundo en donde no solo los alimentos
son indispensables, sino también; el consumo de bienes, y servicios; son los que
controlan definitivamente nuestra forma de vida, y emociones; esto concluyente-
mente nos llevara al colapso de toda especie por la falta de suministros, todo hoy
en día parece indispensable, y lo es; en apariencia emocional; además. El tema
del hambre, la pobreza, y la superpoblación para los gobiernos; sigue siendo un
tema vergonzoso, postergable, empero; no ético. Siempre tratamos de dilatar la
catástrofe de la especie; que empezara por el agua, es por eso que fallan, o care-
cen de credibilidad; las predicciones científicas que prometen un final feroz para la
especie; sino hacemos correctivos.

El imprescindible apetito colectivo por el agua; hará a la especie sapiens, sapiens

inhumana, provocando por si misma el mayor conflicto geopolítico del siglo (XXI)

“Muy pronto una inmensa cantidad de personas; viviremos en condiciones extre-

mas por la escases de agua potable, y el aumento en la demanda, reafirmando
que; el desarrollo de la cultura humana descansa en el acceso al agua potable”

El agua es un bien general-fundamental relacionado con la vida planetaria; ha da-

do lugar a conflictos de gran magnitud a través de nuestra corta historia, y presa-
gia en estos tiempos de multitudes que el planeta se encamina a una escases, tan
marcada; que dará lugar a la catástrofe de especie, generando por si misma; for-
mas de selección brutales por la mala gestión en el uso de los recursos hídricos, y
a métodos de distribución absolutamente selectivos que horrorizaran a la especie
poseedora de la razón.

La escasez de agua dará lugar a la más cruel, y devastadora división de especie;

hombres, y humanos.

“El agua es un elemento, y es una condición fundamental esencial; para el desa-

rrollo de la cultura biótica planetaria. El agua, y la vida; son condiciones fundamen-
tales indisolubles”

¿Por qué teniendo suficiente agua en el planeta; nos preocupamos?

Desde luego que desalinizar el agua de mar sería una solución perfecta, y proveer
o llevar el agua a los lugares donde no hay; sería una la solución para todos ade-
cuada, empero; hay un problema –paupérrimo- la desalinización del agua de mar
es –altísima- en términos económicos, y la cuestión es –sencillísima- los iones de
sodio, y cloro de la sal disuelta en el agua de mar; tienen uniones de tipo iónico

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entrelazadas con las moléculas de agua, una unión que es; si no la más fuerte, sí
muy difícil de deshacer, para deshacer esta unión lo más adecuado es; utilizar ca-
lor, esto es; utilizar combustible fósil para calentar el agua marina hasta evaporar-
la, y convertirla en agua libre de sal; para condensarla, y consumirla. Claro que
existen otros métodos entre los cuales está la osmosis inversa; que consiste en
hacer pasar por una membrana semipermeable un disolvente; en este caso (agua)
desde el lado donde está la solución más concentrada (el agua de mar y sus sales
disueltas) hacia el lado contrario; sin que pasen las sales. En este caso se requie-
re energía, en forma de presión, que será ligeramente superior a la presión osmó-
tica que haría pasar el solvente de baja concentración hacia el lado de la alta con-
centración. La presión osmótica es (la fuerza que ejerce un gas, un líquido o un
sólido sobre una superficie) necesaria para conseguir la ósmosis inversa; esto de-
pende de la cantidad de sales disueltas, y del grado de desalinización, o potabili-
dad que se quiera obtener.

Las industrias que precisan de calor, o precisan de fuerza para la elaboración de

productos; suelen invertir grandes cantidades de dinero en combustibles, y así
todo resulta muy costoso por elemental que parezca. La desalinización del agua
será por obligación un proyecto planetario, no obstante; de la misma forma pode-
mos imaginar los costos.

El (97%) del agua que existe en nuestro planeta es salada; no es apta para el
consumo humano, sólo una cantidad inferior al (1%) es apta para el consumo hu-
mano, el (2%) restante es para el consumo de la naturaleza. Las plantas desola-
doras de agua de mar; han producido agua potable desde hace muchos años,
empero; insisto, suele ser muy costoso el proceso. Las plantas desalinizadoras
producen agua para más o menos (100) millones de personas, empero; pueden
ser menos. Hemos de dar por cierto que, pronto; seremos, (8.000 mil millones), y
nada más. No creo que sea menester hablar de los residuos que se producen con
la desalación, y los energéticos que se necesitan para transportarlos, o desechar-
los. No desconozco que algunos países; realizan estudios para construir plantas
desoladoras más competitivas, además; que utilicen fuentes de energías renova-
bles, en esas está el mundo actual, si fuere posible desalinizar el agua con técni-
cas baratas; tendríamos la mitad de los problemas resueltos.

Por el momento amable lector, puedo decirle que; las técnicas que están a la van-
guardia son la tecnología termal, y la tecnología de membranas, aunque estas úl-
timas hayan tenido un crecimiento notable en lo últimos años, modestamente creo
que no serán suficientes; para la creciente demanda poblacional.

El agua debe ser un elemento de permanente suministro; debe ser condición fun-
damental en un nuevo orden, debe ser un proyecto global –patrimonio vital de la

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biota planetaria- con garantía de suministro para todos; o de lo contrario no pode-

mos descartar conflictos bélicos en zonas áridas, en zonas acuíferas, además,
podrá ser; un mecanismo de control, y selección brutal.

El tema del agua nos enrostrara con las predicciones, y no son supercherías mías,
hemos de hacer un control sobre la población; tenemos que formarnos e informar-
nos sobre el futuro del planeta, y de la especie. Una nueva educación que tenga
en cuenta la reproducción humana, las emociones, y un nuevo compromiso dog-
mático; nos permitirán descubrir que las probabilidades de vida exitosa son limita-
das para toda la especie; esto, debe contribuir emocionalmente, y naturalmente; a
disminuir la población en todo el orbe. Indudablemente estos temas no deben in-
quietar a los príncipes, deben inquietar a los plebeyos; como usted, y como yo. No
tenemos que aniquilar a nadie; tenemos que formarnos, e informarnos todos, y
nada más. Hay espacio para los que estamos, nuestros niños hemos de formarlos
para enfrentar un mundo carente de agua, y con muy pocas oportunidades de vida
exitosa, el mayor denuesto hecho a la especie sapiens, sapiens es permitir su re-
producción; sin ningún control.

Tenemos como especie la capacidad para sobreponernos a los desafíos, supera-

mos toda suerte de dificultades, tenemos ciencia, tecnología, laboratorios, inteli-
gencia que nos permite adelantarnos en el tiempo, etc., no obstante; nos hace fal-
ta conciencia; para superar la disonancia cognitiva; aún no hemos podido trans-
formar la luz solar en fuerza, seguimos dependiendo de combustibles fósiles, y
aumentando sin ningún control, y supuestamente somos una civilización avanza-
da, en estos tiempos estamos en la obligación de descubrir que la cifra supero la
frase, y que los hijos; no vienen con un pan, y agua bajo el brazo; muy por el con-
trario, son carga medioambiental.

El crecimiento poblacional en los países productores de alimentos; obliga induda-

blemente a la invasión, y urbanización de los espacios agrícolas, y en los demás
países en breve los espacios suministraran medianamente el consumo local; sin
hablar del fin de los suministros potables; para toda la especie.

Es claro que podemos seguir haciendo gráficos, y pronósticos alentadores, deli-

rantes dogmáticamente, además; hallaremos culpables, y con los ideales divinos
de que disponemos; podemos sentarnos a esperar salvadores, en fin…, son los
mismos tiempos dogmáticos de siempre con su paraíso, y su consabida salvación.
La catástrofe ambiental no es una predicción; es una realidad que nos afecta a
todos, los pronósticos alentadores resultan ser perversos, no habrá selección de
población, para que; si todos vivimos la misma tragedia, las consecuencias negati-
vas serán para todos, el medioambiente no es xenófobo, no es racista, no es eu-
tanásico; es benigno, empero; no es eterno.

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“La malignidad, y la astucia emocional humana halladas en el cerebro de reptil;

serán evidentes, y letales cuando el tema sea; supervivencia, y cuando todos los
espacios estén ocupados; se aniquilaran cien mil para que beba, y sobreviva uno,
y además; será visto como razonablemente bueno, la muerte la justificaran recur-
sos simples como el agua, y nada más”

“Y si vuestra madre os acosare por nietos; mandadle a degustar excremento, e

invocad que esto; floreciere como ejemplo, y si así hicieres; seréis tenido como
creyente, and piadoso en el nuevo orden, Dios ama a los justos; que no dejan
descendencia en la miseria. Benditos los padres orgullosos de sus hijos; malditos
los padres envidiosos, miserables, y crueles con sus hijos”

No os atormentéis tanto por el petróleo, he de deciros que; la humanidad prosperó

sin él, empero; con agua.

La evidencia proclama, y propone una nueva orientación, e incentiva la adopción

de conductas, y juicios críticos, razonables en estos tiempos; para desarrollar un
nuevo concepto de calidad de vida; teniendo en cuenta los aspectos sociales co-
mo son; la pobreza detonada por el crecimiento sin control de la población huma-
na, y la devastación de la biodiversidad planetaria por el sobre consumo. La idea
es alentar nuevos campos de reflexión, y de acción que puedan constituirse en
temas planetarios, y de común acuerdo; en pro de la conservación de la vida hu-
mana, y los colectivos ambientales; sin los cuales, la cultura humana no tendría
ningún sentido, y además; no existiría. Las propuestas de conservación son muy
importantes; venidas de donde vengan -sea usted amable lector; un proponente-

“Y si pudiéremos demostrar que la superpoblación humana es un mito; nos enca-

minaríamos al fin de los tiempos; por meras cuestiones ideológicas enraizadas en
el mal uso del conocimiento que sugiere que; la catástrofe que tenemos en ciernes
es mitológica, y nada más”

Una brújula emocional; no altera el cerebro, altera la conducta, además de los

procesos psicosociales, los procesos de elección, y selección individual, y podría
convertirse en una poderosa plataforma de control; sin intervenir en los procesos
creativos del cerebro del sapiens; luego es indispensable para ello; reformar el
sistema ideológico, y dogmático de la cultura humana; por medio de formadores
de opinión idóneos, por medio de una nueva educación, y de reforzadores conduc-
tuales nuevos; los cuales tienen plena cabida en el cerebro del humano; de estos
tiempos. La supervivencia es una impronta poderosa; hallada en el cerebro reptil
por evolución, y lo mejor es que; no tiene asiento afectivo, no hay pasado, presen-
te o futuro, he allí; la clave para la plataforma tecnológica de supervivencia.

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“El cerebro de reptil guarda la fórmula del –ADN- cósmico, el reptil tiene la clave
para la supervivencia, y es allí; donde podemos plantar la plataforma emocional
para estos tiempos de entendimiento generalizado, y nada más”

El inconsciente colectivo es poderoso, artificial, y si se quiere es fantástico, las

ideas nuevas son detonantes altamente categóricos para la especie poseedora de
la idea, el inconsciente colectivo se puede programar e irradiar con nuevas ideas;
basta el deseo, y un ideario altruista de supervivencia.

Una idea que beneficie a toda la especie será poderosa en estos tiempos; será un
proyecto especie encaminado a preservar la vida. Esto no se constituye en avan-
ce, o conocimiento alguno, todo el tiempo hemos sido programados por los dog-
mas alucinantes para; parir, rezar, esperar milagros, huirle al disfrute, negar la ca-
pacidad de ser felices, sentir temor, ser fieles, ser creyentes; empero, absoluta-
mente envidiosos del éxito ajeno, seguimos creyendo que la base de la felicidad, y
la salvación; es el dolor, la miseria y el sufrimiento, además; le rendimos culto a la
pobreza, al fracaso, a la huida al esfuerzo y a la necesidad, creemos en mandatos
divinos sin la existencia de una razón, o una prueba manifiesta, es alucinante, y
perversa esta programación; todo ello por miedo a la condena eterna del alma,
ahora bien, si todo ello; no se constituye en una programación perversa, en una
negación de la inteligencia, en un sometimiento de especie; entonces no sé qué
podrá ser, y además; no está por demás decir que, esta programación; se derritió
en el tiempo.

Definitivamente bástenos un nuevo saber, una nueva educación, y si se quiere

una nueva programación como especie, y esto no es nada nuevo, nuestra especie
siempre ha necesitado de itinerarios centrales para planificar los proyectos de vida
individuales. La capacidad que tenemos para encontrar culpables; nos hace infini-
tamente irresponsables, la capacidad o el potencial de inteligencia de que dispo-
nemos; se disminuye por el temor, y por la emocionalidad perversa que contradice
las iniciativas de preservación.

“Y Dios dijo; y pare de contar -constante peligrosa para la humanidad actual- la

humanidad entera precisa de un milagro, -el milagro de pensar- el hombre que no
piensa; no es apto para ser salvado”

La reconstrucción de la historia de la cultura humana; nos acerca indefectiblemen-

te a reconocer los excesos dogmáticos que hemos cometido como civilización,
empero; hoy, el afán es por toda la especie. Hemos de ver al hombre como puro
animal biológico, o si se quiere; como unidad biológica cósmica cognoscente; para
poder enderezar el itinerario de toda la especie. No desconozco que existen histo-
rias muy antiguas que han pregonado la supuesta existencia de deidades; lo cual

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es propio del cerebro humano; es el ego indiscutible en la especie mamífera que la

hace única, e irrepetible, además de temerosa y necesitada de una glándula celes-
te para succionar.

La evolución de la sociedad actual; no tendrá sentido si se da por medio de la lu-

cha entre los individuos, la evolución social global será viable; si la propuesta es la
cooperación con un fin específico; donde cada país adapte a sus ciudadanos a
una nueva evolución social, en donde la tendencia, y la creencia, sea; viables para
todos, y prometan algún éxito individual, en el fondo esta “inocencia” nos promete
grandes consecuencias de preservación planetaria.

Un yo perturbado por la necesidad contable; reacciona, y descubre indefectible-

mente que; la reproducción sin control es una brutalidad aceptada por todos sin
más, el control poblacional se constituye en la base de los derechos humanos. Las
carencias son producto de las propias decisiones, las probabilidades de éxito son
las ganancias del esfuerzo razonable, y constante, el éxito, la tenencia, y la parti-
cipación; son condiciones básicas para el cerebro del sapiens, y nada más.

No es el acervo genético el que me preocupa, y hay que salvar; es a la humanidad

entera en su totalidad, son las contingencias a que se verá enfrentada la especie
en un futuro cercano lo que nos debe alentar a; proponer proyectos de control; sin
denuestos a ningún miembro de la especie. Tenemos a disposición las neuro-
ciencias como método abierto; solo ha de basarse en nuevo conocimiento, refor-
ma dogmática, nueva educación, y nueva formación; con un contenido específico
para todos los sapiens de estos tiempos.

Tenemos dos opciones importantes, seguimos reproduciéndonos sin control hasta

desaparecer arrodillados rezando; asfixiados por el número, por la sed, y la mise-
ria creciente, o nos programamos mediante una plataforma tecnológica, y nos ha-
cemos consientes de la situación reproductiva de la especie en el mundo actual,
son dos opciones y son humanamente posible, además. El mayor sentimiento hu-
manista lo tiene todo aquel que; piensa, en las generaciones futuras, y en su de-
venir exitoso como especie. “Oda a toda la inocencia que habitara el mundo en
cincuenta años, quiero pensar que estoy haciendo algo por ella”

El peor veneno que existe, esta; en las ideas presuntuosas, en la desinformación

promovida por imaginarios colectivos perversos, y en las políticas pro-natalistas,
en los dogmas derretidos en el tiempo, o en desuso; estos son los adefesios terri-
bles que inutilizan la razón, y fortalecen el veneno.

Indispensable es la iniciación de una nueva cultura que incluya el tema de la nata-

lidad programada; esto, basado, y de acuerdo a las probabilidades de vida exitosa;
que tenga cada uno de los miembros de la especie a nivel global. Una realidad sin
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dogma; ha de ser un encargo neuro-científico, hemos de cimentar la idea para la

preservación. Entre más crezca la especie; mayor será el sufrimiento, y la necesi-
dad degenerara las emociones hasta hacerlas ferozmente letales. Si al sapiens se
le muestra; que, sus dificultades, y carencias son producto de sus desaciertos re-
productivos; no podrá olvidarlo con facilidad, la persuasión es poderosamente útil,
además; sabemos, que; disponemos de los formadores de opinión, y de los me-
dios para difundir la idea a nivel global.

Pocas han de ser las ideas, pequeños cambios en la dirección; nos darán la posi-
bilidad de llegar más lejos, empero; no lejos del objetivo. El control es indispensa-
ble para una especie que goza de razón; suficiente es el deterioro del hábitat para
llamarlo emergencia. La formación, la información constante, y los argumentos de
preservación, y control reproductivo; en los medios, lograran el interés de la gene-
ralidad; la especie solo necesita que se le tutele el temor.

Los argumentos, los dogmas y las necesidades; se hacen poderosamente fiables;

cuando se interesan las emociones primitivas, y se anidan en el cerebro de reptil
las exigencias puntuales, y drásticas; es así como se potencia el instinto de super-
vivencia en el sapiente como una impronta. Contamos con recursos neuro-
científicos, con Dios, y con alma, solo es asignarles nuevos itinerarios, y desarro-
llar una plataforma alfabetizada; creando así mismo la idea de unanimidad de es-
pecie.

“La casa del padre; está habilitada para los altruistas, y para nadie más; en la casa
del padre no existen; los pútridos, ni las pútridas; el cielo aguarda por todos los
altruistas. Oda al padre misericordioso, y dador; el paraíso es real, se bueno; no
pútrido, y lo hallaras; más cerca de lo que crees”

Salvar a Dios, y salvar el alma; se hace fundamental en un nuevo orden, además;

garantiza la obediencia, y algo más. Las ideas primitivas nos ayudaran a preservar
la especie; limitando su reproducción individual al mínimo; además, la parte primi-
tiva del cerebro se puede alterar con nuevo dogma. Nada aterra más al cerebro
común que la idea de desaparición, y condena eterna, alterar el cerebro primitivo;
solo es una cuestión de conveniencia; es un ejercicio neuro-científico, y nada más.
Que se reproduzca la parte de la especie que tenga mayor probabilidad de vida
exitosa, y nadie más; finalmente de lo que se trata es de salvar a la especie que
sabe, e interpreta el medioambiente, y conoce además el significado de la palabra
catástrofe.

“Oh cuanto atormentan a Dios, y muy pronto a los pueblos de la tierra; las multitu-
des perversas, hambrientas, desocupadas, numerosas, y menesterosas. Las al-
mas que mueren a tiempo, y solas; tienen garantizado el paraíso, son reverencia

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das por altruistas, y no existe tesoro más valioso ni en el cielo, ni en la tierra que
pueda equipararlo”

La amenaza nuclear, los efectos del cambio climático, la proliferación sin control;
hallado en ello las emociones perversas de un inmenso colectivo, son las amena-
zas que podrían extinguir a la especie en menos tiempo del que pensamos, es
legítimo preguntar; de cuánto tiempo disponemos para hacer correcciones, y ac-
ceder a un nuevo orden.

“Somos animales emocionalmente evolucionados, culturalmente acomodados a

zonas geográficas de supervivencia, con idearios individuales, formación cultural
específica, dogmas, costumbres, adoctrinamientos, y además; contamos con
grandes posibilidades de acceso a estados emocionales nuevos”

En una nueva educación es necesario tener en cuenta los idearios de control, y

desarrollo, hemos de hablar de nuevos derroteros que no disten de la súper-
vivencia; porque finalmente es el único objetivo conveniente para la especie.

Las ideologías que prometen un final feliz con solo sentarnos a esperar salvado-
res, y que afirman que no es necesario hacer ningún tipo de control poblacional;
son respetables, la razón es simple, hacen parte del viejo dogma, y la vieja educa-
ción que prometen, la salvación del alma; sin importar que pase con el cuerpo, y
con la lengua pútrida que infecta la condición humana; no obstante, estas ideolo-
gías se colapsaron hoy; por la inmensa zalamería e incoherencia que existe en-
torno a Dios, y nos están acercando al caos planetario, debemos acceder a una
nueva educación; para por lo menos salvaguardar una muestra de lo humanamen-
te rescatable, y posible.

No disponemos de experiencia preservacionista humana, como tampoco los ensa-

yos con animales; nos han conducido a buen puerto; la razón es simple; las emo-
ciones no lo permiten, es el entrenamiento, la nueva educación, y el concurso de
la voluntad emocional; quienes nos pondrán en el camino correcto.

La voluntad, la conducta, y la emocionalidad son la triada a interesar tecnológica-

mente; todo como un proyecto común de especie, si nos ponemos de acuerdo en
preservar el planeta; la vida en él, y la especie humana; no existirán reparos éti-
cos; solo existirán recursos dogmáticos que resultaran necios, y a falta de pruebas
manifiestas; serán dejados de lado por las juventudes.

El reordenamiento poblacional en estos tiempos; comenzara con una nueva norma

dogmática de especie; cuya finalidad sea superar la individualidad reproductiva;
implantada en el cerebro reptil como impronta de supervivencia, y si le añadimos

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una deidad; al sapiens le parecerá un dogma sagrado; y finalmente terminara en

breve siendo precisamente; sagrada, y nada más.

“Todo lo que baja del cielo es bueno; es un regalo de Dios, un mandato eterno,
han de parir solamente las almas que garanticen una vida exitosa a los hijos de
Dios, Dios ama la abundancia; detesta la carencia que somete a la inocencia,
obedece la norma, se bueno; no pútrido ni pútrida”

“No engendraras para asegurar carnes inmundas, ni parirás para asegurar dadi-
vas; porque ciertamente perderás algo más que tu tranquilidad, tienes dos opcio-
nes; ser bueno, o ser pútrido e infecto, tú eliges cuanta carga llevar”

No solamente nos acosa la pobreza derivada de las ideologías religiosas que si-
guen sustentando las emociones; sino también, los cambios acelerados en los
comportamientos compulsivos de consumo de una especie bombardeada por los
medios formadores de viejos ideales, acelerando con esto; el deterioro ambiental a
escala planetaria. Para mejorar la calidad de vida de las naciones, y prevenir la
catástrofe de especie que tenemos en ciernes; hemos todos de desarrollar com-
portamientos altruistas, y voluntariamente contrarios a la reproducción de la espe-
cie, tenemos que salvar a la especie; con un -proyecto especie-

No existen fórmulas concretas de control poblacional que no lesionen los intereses

emocionales, y dogmáticos de la especie, no obstante; la voluntad está más allá
de este itinerario. Debemos fortalecer la autonomía para que las probabilidades de
éxito, sean; descubrimientos individuales; que no sean cuestiones de banalidad
dogmática, y cultural, que no sea cuestión de enfrentar a los más débiles contra
los más fuertes; sino descubrir las probabilidades de éxito que tienen las descen-
dencias; siendo del pelambre que fueren, y no está por demás decir que; también,
la inmensa mayoría de personas de los países que se suelen llamar poderosos,
están empobrecidas por el número, y además; las inmigraciones, someten injus-
tamente a los nacionales que tratan de sobrevivir violentados por las ideas de
consumo impuestas globalmente.

La situación actual de la especie adquiere características dramáticas en todo el

planeta, el hambre, la desocupación, el desconocimiento de las libertades, el con-
flicto bélico, la pena de muerte, el terrorismo, las políticas brutales de control de la
conducta, los genocidios, el dogma que suele anular la autonomía, el éxodo, las
emociones perversas, y letales, la falta de espacios vitales, las conductas feroces
por la tenencia, por el haber, el rencor sobre la presencia, y la tenencia del otro, la
envidia sobre los logros ajenos, el numero incontable de personas, las pandillas
religiosas con sus crímenes grotescos, y brutales que azotan la tierra de Alá; y la
tierra de Cristo, y sus pandillas, con sus ejércitos de Dios; nauseabundos, con sus

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crímenes, y degollamientos morales; que suelen ser cotidianos, y brutales; no se

queda atrás; y con frases zalameras, y pútridas se le da curso a la cotidianidad, y
comunes son también, en; África; con la Yoruba, y sus bien amados Orisha, India
y Asia, con Buda Gautama, Krishna, en fin…, todos numerosos, menesterosos;
ganando un espacio en la tierra a punta de puñal, envidia, y blasfemias; empero,
tenemos todos a quien adorar, y a quien odiar; en todo el mundo. Si seguimos
aumentando sin control; seguirán aumentando los adefesios conductuales-
dogmáticos específicos de nuestra especie, y se constituirán, además; en los pila-
res de la tragedia del sapiens de estos tiempos indescriptibles, las ideologías
dogmáticas de libre albedrío son poderosamente destructivas, cuanta provisión
malsana encontramos en el dogma; sin importar cual fuere este.

“Un alfabetismo dogmático a nivel mundial, ayudara a paliar la tragedia del sa-
piens; de estos tiempos. Nueva educación, nueva norma, y control sobre la pobla-
ción humana; es un tema obligado en el orbe”

Hagámonos responsables verdaderamente de la vida, no seamos responsables

del verdadero exterminio de la vida sobre el planeta. Ponernos de acuerdo como
especie es una obligación trascendental. Preservar las especies, y dejar un plane-
ta saludable para las futuras generaciones es una necesidad, y debe ser además;
la cruzada universal que fundamente los tiempos actuales.

Si seguimos aumentando en número; caminaremos juntos a la ruina planetaria,

esta premisa no puede seguir siendo considerada un mito, la debacle planetaria
por el crecimiento sin control es real; y para comenzar; hoy, podemos decir que;
las emociones perversas con el aval de un dogma extraviado por la necesidad de
supervivencia emocional de muchas personas enajenadas por el miedo; se convir-
tieron en verdaderos elementos de control, de ataque feroz, de selección, aisla-
miento, y segregación, además; se están haciendo pandémicas.

Hoy día las emociones perversas son armas letales poderosamente destructivas;
usadas para lograr la supervivencia laboral, afectiva, psicosocial, académica, de-
portiva, etc., cabe la pregunta; cómo serán en un futuro no lejano cuando la nece-
sidad realmente sea por un espacio vital, y un poco de agua.

Todos seremos víctimas, damnificados, responsables de la hambruna, de los pro-

blemas sanitarios, de la destrucción del medioambiente, del hacinamiento, del
desempleo, de la ausencia de éxito, de las emociones perversas, de la angustia
existencial y letal, en fin…, sobran los ejemplos, y sobra la vieja educación, nece-
sitamos implantar políticas de desarrollo sostenible a nivel planetario. No nos lla-
memos a engaños; el planeta no puede sostener la creciente población; tampoco

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podemos ser irresponsables con las generaciones futuras. Magnífico seria que
fuéremos recordados como responsables.

El dogma debe ser actualizado; aprovechemos la dimensión psíquica, y la brújula

moral propia de la especie, y además; pongamos de acuerdo a los formadores
oportunistas de opinión dogmática; esto se constituye en una necesidad, en una
obligación académica, legal, y política; además de psicológica.

A mayor número, mayores serán las brechas económicas, políticas, sociales, las
rebeliones serán brutales, no será suficiente la dadiva global; porque las necesi-
dades serán crecientes en tanto sigamos aumentando, empero; aún podemos ha-
cer que los riesgos planetarios sean menores. Con una tecnología del yo; la cultu-
ra anticonceptiva se puede hacer poderosamente atractiva; resultara ser el método
más eficaz que jamás hemos experimentado como especie, tenemos que nutrir el
dogma con nuevo conocimiento, alfabetizar las emociones, potenciar el valor de
especie, y premiar el altruismo, y nada más.

No tenemos que exigirle a nadie, ni culpar a nadie; solo debemos reconocer que;
el deseo egoísta somete al planeta, y que las generaciones futuras serán las víc-
timas inocentes de nuestros excesos reproductivos, y consumistas. Hemos de
comprometer a las instituciones responsables de la cultura humana; para que
desarrollemos conjuntamente nuevos estilos de vida, y nuevos temas sobre la su-
pervivencia de la especie; no tenemos que preservarnos individualmente; tenemos
que preservar a la especie poseedora de la razón.

Necesitamos nueva formación, y nueva información para optar por decisiones que
nos beneficien a todos, erradicar la pobreza, y garantizar que todos recibamos
educación, y atención sanitaria básica de calidad; es posible si somos menos en
número; de lo contrario, no podemos garantizar la atención a nuestros hermanos
de especie, y mucho más difíciles serán las probabilidades de vida exitosa futura.

Todos tenemos hoy día; grandes probabilidades de vivir en pobreza, en necesi-

dad, en desamparo, y por consiguiente, los esfuerzos, y los accesos resultaran
insuficientes para todos.

No desconozco las posibilidades que ofrecen la tecnología, las formas ocupacio-

nales nuevas, y los modos de vida que se nos prometen, empero; todo ha mutado
a excepción de la reproducción; no obstante, elevar el nivel de vida de la creciente
población mundial; será cosa de titanes, si seguimos con los mismos dogmas, la
misma educación, y poniendo las mismas trabas a todo lo que sea control repro-
ductivo; desapareceremos sin hacerle falta a nadie.

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La Psicobioetica; es decir, la ética de la especie, propone una ruta, y un dialogo

interdisciplinar que por distintas razones ha de llegar al mismo punto, -al control de
la especie-, este tema ha estado presente en la historia de la civilización, ha sido
objeto de diversos comentarios; el intento de control, pero nada se ha concretado,
empero hoy, el control; hemos de proponerlo como una ciencia para la supervi-
vencia; tenemos a favor las neuro-ciencias como proyecto especie de control
emocional, y poblacional. Si controlamos las emociones; controlamos el cerebro
reptil, si controlamos el cerebro reptil; controlamos la reproducción de la especie, y
con ello la perversidad emocional de la cognición. Los adelantos psicosociales, y
los accesos neuro-científicos con los que contamos actualmente; nos facilitaran el
tránsito, y el nuevo propósito racional.

Las mutaciones de que ha sido objeto el cerebro, y el género; recientemente, son

un catalizador psicosocial de inimaginable poder para los iniciados en neuro-
ciencias. La presencia de movimientos de control reproductivo en varios países del
mundo; son un hecho miopemente visible; por el momento. Finalmente todos ten-
dremos que encaminarnos en un nuevo proyecto, y cada uno de los miembros de
la especie; tenemos la responsabilidad obligatoria de descubrí la importancia de
participar en el control del crecimiento poblacional.

El control de las emociones nos acercara medianamente a una perfección psicoló-

gica de orientación, y percepción, con ellas; al desarrollo poderoso del sentido de
preservación; como un propósito general de especie, estamos a tiempo para pre-
venir la catástrofe individual ideológica de la especie poseedora de la razón, todos
debemos orientarnos de manera perceptible, y en la misma dirección, todos con el
mismo propósito de preservación.

El esfuerzo por mejorar la condición de la especie, debe ser planetario; siendo de

importancia medular la autonomía de especie, empero; nutrida con nuevo conoci-
miento, y nuevo dogma; ni totalitario, ni liberal, es el plasma de especie lo que hay
que salvar, dejemos que sean las neuro-ciencias; como ciencias recientes las que
enseñen como combinar ambos movimientos por medio de una plataforma alfabe-
tizada. Si nos ponemos de acuerdo; no existirán reparos éticos, ni lesiones emo-
ciónales para ningún miembro de la especie.

El control reproductivo no es para mejorar la especie; es para garantizar la perma-

nencia del plasma poblacional en zonas estratégicas, todos debemos abreviar, y
facilitar el tránsito de la vida exitosa; es solo eso, y nada más.

El aumento descontrolado de la población; tiene un efecto devastador para el me-

dioambiente a nivel global, además; el aumento poblacional está directamente co-
nectado con el deterioro de la condición social, (aumento de la pobreza) que des-

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equilibra los estados; cual fueren estos. La humanidad no ha de encontrar otras

vías de erradicación; salvo el control poblacional como tarea geopolítica mundial
para este siglo (XXI), y para el futuro de todo el planeta.

“La competencia entre los miembros de la especie por alimentos, por ocupación,
por un espacio donde habitar, por agua, por tenencia, etc., será letal, será feroz en
breve tiempo. Si no reconocemos los límites reproductivos que nos impone el me-
dioambiente como capacidad de carga, y adicional a eso; no reconocemos que no
existen depredadores naturales que controlen el número, (la santa ciencia dio
buena cuenta de ellos) solo existen las emociones perversas que matan, y pertur-
ban la conducta en el buen nombre de Dios, además; obstruyen el desenvolvi-
miento de los individuos; provocando así; indefectiblemente, el caos en la especie;
siendo factible que nos devoremos los unos a los otros en menos de (70) años, y
nada más. “Oda a la santa ciencia que obstaculizo el curso natural de los santos
virus”

En nuestra línea evolutiva de manera secuencial, y relativamente independientes

funcionan tres cerebros relacionados entre sí; siguiendo una jerarquía de antigüe-
dad evolutiva, sus funciones han determinado nuestro desarrollo, y supervivencia
como especie altamente funcional, desde luego esto en ninguna manera se consti-
tuye en algo revolucionario; lo que podría ser revolucionario seria determinar cómo
cada uno de estos cerebros podrían tener un papel relevante para las neuro-
ciencias en el control numérico, y la supervivencia de la especie. En el cerebro
más primitivo están las ambiciones de supervivencia; sin ningún asiento afectivo,
sin hoy, sin mañana; solo concurre la supervivencia, y nada más. Lograr interesar
este cerebro podría ser definitivo para el control de las emociones, y la reproduc-
ción de la especie.

La reproducción es –reptiliana- no tiene acento afectivo, ni dogmático; solo tiene

acervo evolutivo, es un reforzador altamente poderoso para las especies, es ca-
vernaria, es básica, empero; en nuestra especie, controlar la descendencia es po-
sible; basta la superación de la reproducción individual, y definir propósitos globa-
les para los que aún no nacen. En el cerebro reptil se gravan, y se anidan todas
las exigencias de supervivencia como improntas indelebles. Desde niños; se vi-
cian, o se potencian como improntas definitivas, el trauma, el afecto, la violencia,
el respeto, la reciprocidad, la individualidad que nos hace únicos, etc., todo ello por
el efecto fijación; es por eso que resulta dramática, y sobre exigente la vida emo-
cional para algunos sapiens, y sin ir muy lejos; puedo añadir que, la recuperación
de las adicciones (odios, fe perversa, corrupción, violencia, substancias, afectos y
desafectos, sensibilidad con el dolor ajeno. etc.) precisan de la limpieza del cere-
bro reptil -como borrar una impronta- El cerebro reptil; es un cerebro limpio con

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carga primigenia inmune; cualquier cosa que lo impacte es tenida como funda-
mental para la supervivencia, los modos de ser, los afectos, y las formas conduc-
tuales; tiene asiento allí.

Desde los años (80), hemos creado una nueva impronta, y es el consumo, que se
ha vuelto absolutamente indispensable para el cerebro reptil. Cómo podemos de-
ducir, sin ser iniciados; el consumo es una plataforma altamente impactante para
el cerebro reptil. Una plataforma alfabetizada, y encaminada a la preservación de
la biota, la superación de la reproducción individual, y el reordenamiento de los
afectos, es posible; basta el interés, y un acuerdo global.

Los sapiens que se reproducen confiando en las probabilidades de un futuro posi-

ble; son una carga para la especie, y para el medioambiente, conservar el gen de
especie es suficiente. En el cerebro de reptil subyace el periodo cavernario intacto,
es allí; donde hallaremos los recursos de supervivencia de la especie; sin acento
afectivo, superando así la individualidad que nos hace numerosos, y menestero-
sos. Las especies se hacen plaga cuando no controlan su número, y sus apetitos;
además, en el caso del sapiens; sus emociones.

El sistema límbico la -emocionalidad- ha de encargarse de los albures como apa-

rezcan estos; de acuerdo a una plataforma emocional que incluya los momentos
de vida de cada uno, y el desarrollo biológico, y cognitivo psicosocial individual; en
donde todo aquello que no sea de agrado se deje de lado, y santas pascuas, la
finalidad no es el yo persona; es el yo especie, y que cada país preserve su mejor
muestra; aquella que tenga grandes posibilidades de vida exitosa. “Oda a la santa
política que ha de legitimar el santo plasma; de la santa especie”

El neo-córtex, la -racionalidad- no es problema; empero; sin dogma catastrófico

alienante, sabemos perfectamente que entre menos individuos; mayor será la po-
sibilidad de vida exitosa para la especie en el futuro. Para conservar la especie
tenemos que superar la individualidad reproductiva, y llenar de nuevo contenido
dogmático el cerebro reptil; tenemos que regrabar las improntas principalmente; el
respeto por la individualidad prístina del sapiens, y su confort. Potenciar la repro-
ducción del plasma de especie es una tarea ya hecha por el neo-córtex de estos
tiempos, es decir; resultara elemental, a todos nos duele la tragedia humana, el
hambre, la sed, y resulta fácil desterrarlas; desde ahora.

El respeto es fundamental; permite al cerebro reptil, descubrir las probabilidades

de vida exitosa, y también, descubrir los límites naturales que lo asisten.

“Oda extraviada al cerebro reptil que olvida cuando dice feo, empero; jamás olvi-
dad cuando le dicen feo; sabe a quién odia; pero no sabe porque odia”, -es así
como se induce la nueva plataforma; he ahí los basamentos-
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“Hallareis potenciado el cerebro reptil en el discurso peyorativo hacia vuestros

hermanos de especie; incluso, encontrareis doctores con letras santas bajo el bra-
zo; y lengua pútrida de presentación, la fe perversa da por elegido a cualquier pú-
trido engendro; incluso usted puede ser un elegido; amable lector”

Hay especies con cerebro, y cultura, empero; no pueden expresar emociones, por
lo tanto son cerebros grupales, y los rigen las motivaciones correspondientes a su
naturaleza, además; sin ningún asiento afectivo; esta naturaleza se halla en el ce-
rebro reptil.

Hay otras especies que poseen cerebro reptil, y cerebro mamífero; facultadas es-
tán para proteger, y cuidar de su descendencia, los rasgos afectivos son notables,
y su afán es; contribuir con número a las especies, esta naturaleza se halla en el
cerebro mamífero, o límbico.

Hay una especie que posee los tres cerebros (reptil, límbico y neo-córtex), el rasgo
más notable de esta especie; es su cultura, y sus emociones; las cuales puede
expresar, y materializar, no obstante; estas bondades evolutivas, la convierten en
la mayor depredadora del mundo natural, esta naturaleza se halla en el neo-córtex
dando origen al mamífero superior; que invadió todo el planeta como una plaga.

“El dogma es importante para el cerebro; no obstante, cuan valioso seria abstraer
al hombre de la reproducción sin control, del pecado, y de la condena eterna. El
hombre que se conserva libre de descendencia; es materia cósmica limpia, es
aliado estratégico del cielo”

El cerebro muto notablemente, hemos de estar a la altura de las nuevas estructu-

ras que se están desarrollando, y proponer cambios en la conducta, y en las emo-
ciones del sapiens de estos tiempos. No necesitamos de estructuras complejas, ni
plataformas costosas para hacer entender la realidad que nos asiste, debemos
trazar planes, y desarrollar estrategias originales que nos ayuden a paliar la deca-
dencia de la especie; por las cuestiones dogmáticas a que hemos tenido acceso.

El pensamiento ordenado, y lógico es altamente poderoso, y es de origen cultural;

independiente es de la programación genética, y lo mejor es que; lo podemos pro-
gramar, alterar, e interesar con elementos nuevos. Desarrollar una plataforma
dogmática que no condene el éxito, y promueva la planificación de la especie; no
debe ser asunto de otro mundo, además; la necesitamos.

“Si muta el cerebro; muta el género de la especie, empero; es en el cerebro reptil

donde cave legítimamente una plataforma neuro-científica; los demás escenarios,
y preferencias modales; parece ser que, precisan de plataformas ideológicas, y
discusiones éticas que las más de las veces; se hacen patéticas”

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El proceso cognitivo evolutivo de cada una de las sociedades mundiales, no es

distinto ni es diferente; es igual en todo el orbe; diferente es de la cultura. Es el
momento en que debe comenzar la construcción de un nuevo orden que nos per-
mita favorecer el plasma de la especie a nivel mundial; por medio del poder, y la
nueva norma; tenemos poco más o menos (20) años para lograrlo; antes de entrar
en crisis de especie. Sé que existen cúmulos de discursos alentados por cosmolo-
gías que prometen un final romántico, y feliz para todos; y además, sin hacer con-
troles, empero; a veces es mejor ser pesimista, no quiero aguarle la fiesta a nadie;
solo es preocupación de especie, y nada más.

“La crisis de especie, es la crisis medioambiental; que ocurre, cuando el ambiente

de una especie; se satura por el sobre consumo, y la necesidad de un espacio
individual para cada organismo; en donde los suministros vitales, son escasos, o
son nulos; además, la reproducción sin control no permite el acceso a condiciones
de vida razonables, para –la individualidad de un organismo superior- posibilitando
así; el desarrollo de métodos críticos, drásticos, dramáticos; para garantizar la
continuidad de la especie”

Las pruebas científicas de la grave crisis de extinción que enfrentamos; lamenta-

blemente irán apareciendo a medida que vallamos desapareciendo; ha de ser y
es, así; por la negativa a la convicción que tiene nuestra especie, no obstante, de-
bemos tomar en serio esta grave crisis; porque el tiempo se nos está agotando, y
morirán los príncipes, y también los plebeyos.

Las grandes extinciones -resientes- de la especie de la cual derivamos; se han

dado por el excesivo aumento en el número de miembros, y por la escases de
suministros básicos; principalmente el agua, y los espacios. Nuestra especie es
absolutamente vulnerable a la escasez de agua, el exceso con el hábitat garantiza
nuestra pronta desaparición. Muy pronto no tendremos ni para el consumo local, o
interno, el panorama es mucho peor de lo que actualmente parece, debo añadir
que; la limitación en el conocimiento que me asiste; no me permite transcribirlo en
su totalidad, empero sé qué; hasta las fieras; tiernas, y dulces están padeciendo el
cambio climático. A todo aquel; a quien le parezcan fatuas mis ideas; he de decir-
le, déjelas de lado, y proponga otras, empero; pronto, el tiempo con que contamos
se agota. El tiempo, y el espacio son infinitos; no obstante, el tiempo, y el espacio
que ocupa, y perdura un organismo; es finito.

Recordemos que, el neerdental; domino el planeta por más, o menos (300.000)

años, tenía en su haber evolutivo; dos cerebros (reptil y límbico), los cuales siguen
predominando en una inmensa mayoría de entelequias, luego fue reemplazado
por los organismos anatómica, y genéticamente modernos; con poco más, o me-
nos (38.000) años de evolución, y una expectativa de vida evolutiva de unos

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(50.000) años. En los últimos (200) años, se ha desarrollado, y reproducido de tal

forma que; ha invadido todos los espacios, y zonas planetarias estratégicas con
presencia, o con tecnología; generando la más grave crisis de la que se puede dar
razón históricamente. Los contrastes culturales, dogmáticos, conductuales, políti-
cos e intelectuales que ha desarrollo, y solían ser importantes; resultan ser poco
trascendentales para su supervivencia, lo que prima son sus propias creaciones,
como son, la pobreza, las emociones perversas, el estado ingente, y una creciente
necesidad de suministros; enfrentándolo muy pronto a su respectiva escases con
sus respectivos litigios; este factor será el primer gran detonante de la crisis de
especie a nivel global. Es bastante improbable que una especie con un cerebro
que dispone de tres estadios evolutivos desarrollados (reptil, límbico y neo-córtex),
sobreviva sin colonizar otros espacios temporales.

“Las sociedades sapientes más avanzadas tecnológicamente; son las sociedades

que crean plataformas emocionales científicas, alejadas de dogmas patéticos, y
conmiseración ruinosa”

Bastante compleja resulta la interpretación emocional del sapiens moderno; para

el común, empero, los iniciados saben que; todas las bajezas comportamentales;
se encuentran en el cerebro de reptil, es allí donde está el basamento para la pla-
taforma neuro-científica que preservara a la especie.

La permanencia del sapiens sobre el planeta resulta conmovedora por la conmise-

ración; además, se derivan consecuencias negativas detonadas, y movilizadas por
las emociones, por la pobreza, por el sobre consumo, por el número, por el apetito
sobre el agua potable, en fin… En el plano geopolítico internacional miopemente
atisbamos la necesidad de un nuevo orden mundial que garantice la supervivencia
de quienes resulten más aptos, los que no resultemos aptos; nos devoraremos los
unos a los otros, así; compartiremos todas las patologías e incluso el síndrome de
las vacas locas, y en ese orden de ideas; higienizar a la especie será un decreto
global.

“En ausencia de un proyecto político poblacional, y frente al aumento del empo-

brecimiento; se crearan estados totalitarios brutales, y sobre esa base se legislara
al sapiens de estos tiempos, además; potenciar un nuevo estado de derecho, y
recuperar la idea de bienestar; será incuestionable a nivel global; será cuestión de
emergencia planetaria”

Hemos de anticipar una nueva realidad mundial; caracterizada por una mayor es-
tabilidad de especie; debido a la disminución demográfica que potenciara un ma-
yor acceso a oportunidades individualizadas. El verdadero poder está en el control
de las emociones, los apatitos, y las poblaciones. Independientemente los países

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continuaran incorporándose con fuerza al sistema económico mundial; lo cual es,

y será; bueno para el plasma de la especie.

“Hallareis el verdadero poder en el dogma, empero; actualizado”

“Y si vuestro Dios; que es rico, y dueño de todo lo existente; tuvo un solo hijo para
amparar, como osas tú; parir, sin tener sobre que caer muerto (a), cuan nausea-
bunda, y reprochable resulta esta conducta en el paraíso, pútridos e infectos sois;
de nada os ha servido el intelecto; seguid creyendo que los últimos seréis los pri-
meros, en el momento de la selección, los menesterosos, y numerosos; han de ser
los –primeros- enviados a degustar excremento. Estas aleyas os llegan del cielo;
abrazadlas. Proscrita está en el nuevo orden; la palabra no lo tendrás, porque cier-
tamente será lo que más anhelaras, empero; si se os dice no podrás; aceptaras
con facilidad; ora a vuestro señor que es sabio, y clemente”

La superpoblación es un faltante emocional; especialmente detonado por la inse-

guridad, y la pérdida de confianza en las instituciones; las cuales no garantiza me-
diano bienestar para la población que envejece, las enormes desigualdades de
renta entre clases sociales potencian el imaginario colectivo perverso, y el terro-
rismo, pronto en el tiempo; nos haremos letales por la falta de formación nueva, y
suministros básicos; principalmente por agua.

“La supervivencia emocional fatua es la más cruel; por ella se destruye; el respeto,
el valor, la conciencia, la bondad de nuestros hermanos, y se constituyen en el
mayor denuesto de especie. La supervivencia emocional fatua; es nutrida por el
dogma extraviado, por la envidia, y por el odio hacia nuestros hermanos de espe-
cie, y su tenencia”

Cuando el apetito colectivo de una especie supera el apetito individual; las espe-
cies se hacen proclives al canibalismo.

“Y si descubrieres que hay más fuerza en el amor; que en el odio, ciertamente da-
rías un paso en el paraíso, y sí el agua manase de las piedras; no faltaría quien la
envenenase, ¡oh! reptiles inmundos; seguid soñando con el paraíso”

“Todos los sapiens, sapiens descansan en razón, y consciencia; los demás orga-
nismos de la tierra, descansan en naturaleza, empero también; tienen su inteligen-
cia, y su cultura, pedimento absoluto del cielo, es; protegerlos, y preservarlos, a
nadie se le pide entenderlos”

Las puertas del paraíso las abre; el decoro, se decoroso, altruista, y nada más.

“No invoques a vuestro señor con palabra zalamera; después que destruyes la
dignidad ajena, de nada te servirá tu hipocresía; en nada te aprovechara tu fe, las
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puertas del paraíso las abres tú mismo, tu misma, empero; con tu lengua sana; o
con tu lengua pútrida; decides por tu propio destino, tu elijes”

Podremos prescindir de todo cuanto poseemos; incluso alardear de ello, empero;

jamás, podremos prescindir de agua.

La cognición necesita nueva norma, nueva educación, y nuevo dogma, empero;

pronto.

Es la hora de cambiar; lo que se debe cambiar.

Lamento deciros, y además; en palabras de a centavo; que el reinado del sapiens,

y de los demás mamíferos, está llegando a su fin.

“Dios aborrece la palabra zalamera, la plegaria abundante, y mentirosa, además;

sabe cuándo; la oración, está cargada de excrementos y falacias, se prudente,
Dios conoce el corazón de los hombres, y de las mujeres. No quieras pasar por
santo, cuando en realidad eres; un pútrido engendro saturado de envidia, y odio
hacia tus hermanos de especie; solo porque resplandecen”

No sobrecarguemos el cerebro del sapiens con discursos, pretendidos; formémos-

lo, e informémosle con palabras de a centavo; sobre la catástrofe que tenemos en
ciernes; solo eso, y nada más, digamos no; al oportunismo profético.

“Todo el amor, y todo el odio; residen en la tierra, somos (8000) millones de alza-
dos en almas, y además; en convulsión constante, salvemos la biota planetaria;
solo es cuestión de ordenar la conducta humana en forma neuro-científica”

Sinceramente

HERM

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BIBLIOGRAFIA

El poder adaptativo by Hugo Edgar Ruiz Monroy

Psicobioetica, la ética de la especie by Hugo Edgar Ruiz Monroy

Alzados en almas by Hugo Edgar Ruiz Monroy

Decálogo by Hugo Edgar Ruiz Monroy

En nueva educación by Hugo Edgar Ruiz Monroy

Humanismo y terrorismo by Hugo Edgar Ruiz Monroy

Aspectos psicosociales de la depresión by Hugo Edgar Ruiz Monroy

En nuevo orden moral by Hugo Edgar Ruiz Monroy

HUGO EDGAR RUIZ MONROY

Psicoterapeuta. Docente

Bogotá Colombia

Breviarios para un mejor entendimiento (2016- 2017)

Titulo original (AL SAPIENS DE ESTOS TIEMPOS)

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