Sunteți pe pagina 1din 14

Universidad de Jaén (Ujaen)

Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación

Los cuatro prohibidos: Los arcángeles ortodoxos y su iconografía


Uriel, Barachiel, Jehudiel, Sealtiel

Aldones Nino Santos da SILVA

Trabajo presentado como exigencia para aprobación


en la assignatura Iconografía profana, impartida por
lo Prof. Dra. León Coloma, Miguel Ángel.

Jaén
Enero/2018
Los cuatro prohibidos: Los arcángeles ortodoxos y su iconografía

En la iconografía cristiana es muy común la presencia de ángeles, pues en la Biblia,


los ángeles participan de muchas escenas, donde auxilian las acciones divinas, como
mensajeros e interventores de la realidad. Ya en el siglo IV y V, el tema de los ángeles forma
parte de grandes debates en la escolástica. Tales seres fueron estudiados según sistemas de
clasificaciones, que tienen en las fuentes bíblicas base para agrupaciones y comprenderlos
sobre la base de grupos específicos y distintos. El Papa San Gregorio I, ya en el s. V reconoce
nueve órdenes de ángeles. San Ambrosio, San Jerónimo, Santo Isidoro de Sevilla, entre otros
presentaron los ángeles insertados en una jerarquía angélica. La más influyente de tales
clasificaciones fue establecida por el Pseudo-Dionisio, el Areopagita entre los siglos IV y V,
en su libro De Coelesti Hierarchia. Tomás de Aquino, siglo XIII, en la Summa Theologica,
sigue a la Jerarquía al dividir a los ángeles en tres jerarquías, cada uno de los cuales contiene
tres órdenes, en función de su proximidad a Dios. Los ángeles se dividen en tres grupos
principales: 1) Serafines, Querubines y Tronos; 2) Dominaciones, virtudes y poderes; 3)
Principados, Arcángeles y Ángeles. Esta jerarquía esta presente en la obra de Francesco
Botticini, The Assumption of the Virgin (​Imagen 1​).

Imagen 1: Francesco Botticini. La Asunción de la Virgen, c. 1475-6. Tempera en


madera. 228.6 x 377.2 cm. National Gallery / London (Room 57).
En muchas representaciones aparecen en número de siete, pero sin presentar los
atributos que posibilitan diferenciar entre sí, pero por otro lado hay escenas y elementos que
nos indican individualidades, haciendo de los arcángeles los únicos ángeles que son
identificables individualmente y por medio de la iconografía es posible reconocer algunos
arcángeles. Los teólogos generalmente presentaban en número siete, el número sagrado. El
historiador del arte francés, Louis Réau, dice que entre estos:

Miguel y Gabriel son conocidos por el Libro de Daniel, Rafael por el Libro
de Tobias, Uriel por el Libro apócrifo de Enoc, el cuarto Libro de Esdras y
por Evangelio de Bartolomé. El nome de los otros três varía según las
fuentes: Baraquiel se convierte a veces en Matiel, Jehudiel en Jofiel, Sealtiel
en Zeadkiel (RÉAU, 1996, p.65.).

Además de los atributos específicos de cada uno, muchas obras traen su nombre como
en el grabado que abre el libro de ​Los Siete príncipes de los ángeles, validos del Rey del
Cielo ​(​Imagen 2-3​), publicado en 1707 en el que se representan los siete arcángeles con sus
nombres y atributos característicos.

Imagen 2-3: Grabado que abre el libro ​Los Siete príncipes de los ángeles, validos del Rey del Cielo
(Bruselas, 1707).
No es común en el arte de Occidente encontrar ese tipo de representación que presenta
los siete ángeles, pues la difusión de sus imágenes en conjunto fue afectada por cambios que
ocurrieron en la iglesia romana y afectaron profundamente a la producción de imágenes, por
ejemplo al considerar el Libro de Henoc apócrifo se excluyó al arcángel Uriel, y según Louis
Réau, en 746 el concilio de Letrán limitó el culto de los arcángeles a ​apenas três, Miguel,
Gabriel y Rafael ​(​Idem​, p. 66). Por su parte, Juan Carmona Muela, afirma que tal definición
ocurrió en el Concilio de Trento ocurrido entre los años 1545 y 1563, a partir del cual ​los
únicos tres arcángeles cuyo culto era admitido por la religión católica eran san Gabriel, san
Miguel y san Rafael, e desautorizando, entre otros, Uriel, Barachiel, Jehudiel, Sealtiel. (
MUELA, 1998, p. 102). El hecho es que hubo entonces en la historia un momento específico,
donde cuatro de los siete arcanos existentes son desautorizados, y la producción será
increíblemente desigual en número, existiendo entonces innumerables representaciones de
tres, que se convierten en los principales, y la imagen de los otros cuatro se escasean.

Al analizar la cuestión de los arcángeles, destaco el papel de la Iglesia Ortodoxa que


es una comunión de iglesias cristianas, herederas de la cristiandad del Imperio Bizantino. La
Iglesia Ortodoxa tiene aproximadamente dos milenios, contándose a partir de la Iglesia
Primitiva, y aproximadamente mil años, contándose a partir del Cisma del Oriente o Gran
Cisma, en 1054. Desde entonces, los ortodoxos no
reconocen la primacía papal, y en general tienen una
historia hagiográfica aparte del catolicismo romano.
Por lo tanto, esto lleva a creer en la influencia del
Concilio de Trento, que ocurre tras el gran cisma y no
excluye la presencia de los cuatro ángeles, que pasan a
ser conocidos también como arcángeles ortodoxos,
como podemos ver en un icono de la Iglesia Ortodoxa
Rusa de la Asamblea del Arcángel Miguel (​Imagen 4​),
que en el siglo XIX aún presenta el conjunto completo
de arcángeles, como podemos ver Miguel en el centro,
por encima de la almendra de Cristo. Gabriel y Rafael
de pie junto a la izquierda y derecha. Detrás de ellos, de
izquierda a derecha Jehudiel, Selaphiel, Uriel y Baraquiel.
Podemos encontrar en la Iglesia parroquial, Galería Mattsies, en Baviera,
representaciones del grupo completo de los siete arcángeles (​Imagen 5​) pintados en madera,
la autoría es desconocida y según el historiador Dr. Gabriele von Trauchburg, fueron creadas
alrededor de 1730. Otro historiador, Christian Schedler de Mindelheim estima que el origen
de las imágenes arcángel para el año 1680. Posteriormente veremos esas imágenes
individualmente, identificando los atributos de cada uno de los arcángeles ortodoxos.
Después de esta breve introducción nos enfocar en la iconografía específica de cada uno de
los cuatro arcángeles ortodoxos, Uriel, Barachiel, Jehudiel, Sealtiel.

Imagen 5: Iglesia parroquial, Galería Mattsies, 1680.

Uriel
Entre los cuatro, el más representado es el árcanjo Uriel, personaje muy importante en
el Libro de Enoc, que es parte de la Biblia de la Iglesia ortodoxa etíope pero no es reconocido
como canónico por las demás iglesias cristianas. Las únicas versiones íntegras de este libro
que se conservan están en ge'ez, lengua litúrgica de la Iglesia etíope, pero son conocidas
varias partes en griego, y un fragmento en latín. La datación paleográfica fechó estos
documentos entre los años 250 a. C. y 66 d. El Libro de Enoc ha sido traducido al castellano
en el siglo XX, por Florentino García M. desde las versiones inglesas, editadas por Robert H.
Charles y Hedley F. Sparks, y desde la versión francesa de François Martin. Pero sus
versiones antiguas contaban con mucha popularidad, haciendo que Uriel fuera el más
reconocido arcángel ortodoxo en Occidente. Él es el responsable de presentar los misterios
para Enoc, en el capítulo 21 aparece en el siguiente pasaje ​Uriel el Vigilante y el Santo que
estaba conmigo y me guiaba, me dijo: "Enoc ¿por qué preguntas y te inquietas por la
verdad?. ​E continua (21:09) ​Contestándome,
Uriel el Vigilante y el Santo, que estaba
conmigo me dijo: "Enoc ¿por qué estás tan
atemorizado y espantado?". Le respondí: "Es
por este lugar terrible y por el espectáculo del
sufrimiento".

Arcángel asociado a la revelación de Dios,


enseña Enoc y lo muestra el sol, las estrellas y
hace revelaciones sobre el futuro. Entonces su
imagen se acompaña siempre de un fuego, que
puede aparecer de diversas maneras, y como
reveló a Enoc aspectos sobre su propia
humanidad, hay representaciones donde además
del fuego, aparece con un espejo en la mano
como en la Galería Mattsies (​Imagen 6​). Puede
ser representado con una antorcha en la mano,
siendo común en vitrales en América del Norte
y frescos en Rusia (​Imagen 7-8​).

También está presente en el Esdras, donde


el profeta Esdras se dirige a Dios con preguntas
sobre el juicio de los humanos y Uriel es
enviado a responderle e instruirlo sobre la verdad. Confirmando así el papel de revelador de
verdades divinas, aunque muchas veces sus verdades son perturbadoras, su papel es aclarar y
iluminar. En el libro de Ezdras (5:20) él es llamado como ​El fuego la luz de Dios​. En el siglo
XVII podemos encontrarlo en la pintura colombiana, como en la (​Imagen 9​), hoy en el
Museo Santa Clara donde sostiene la llama divina en su mano izquierda, así como en el
mosaico de finales del siglo XIX en la Iglesia de San Juan en el Reino Unido (​Imagen 10​),
donde sostiene en su mano derecha un libro con alas rojas y con mucha luz irradiando de su
cabeza.

Imagen 9: Anónimo. San Uriel, Siglo XVII. Óleo Imagen 10: Mosaico de San Uriel, 1888, de James
sobre tela. 138 x 89 cm. Museo Santa Clara, Powell e Hijos, en la iglesia de San Juan,
Bogotá, Colombia. Boreham, Wiltshire.

Barachiel
Baraquiel generalmente se representa con los pétalos de rosa esparcidos por su ropa,
particularmente en su capa. Conocido como el distribuidor de las bendiciones de Dios para
las buenas acciones, ruega la misericordia de Dios para las personas. Podemos ver en la
Galería Mattsies (​Imagen 11​) el arcángel sosteniendo flores en su mano y cargando otras
bajo su brazo, y en la pantalla de Bartolomé Román (​Imagen 12​), hoy en la colección del
Museo del Prado las esparce sobre el suelo y las almacena en el suelo su traje, representación
más común como en la pintura de Alonso Miguel Tovar (​Imagen 13​), en el Museo de Bellas
Artes de Sevilla.
Imagen 11: Barachiel. Galería Mattsies, 1680.

Imagen 12: Román, Bartolomé. El Imagen 13: Saint Barachiel the


Arcángel Baraquiel esparciendo Archangel, pintura de Alonso
flores. Primera mitad del siglo Miguel Tovar del siglo XVIII,
XVII. Óleo sobre Lienzo 207 x 141 Museo de Bellas Artes, Sevilla,
cm. Museo del Prado. España.

Durante el siglo XVIII hay innumerables representaciones en varias partes de


América del Sur, como en Bolivia (​Imagen 14) y Perú (​Imagen 15​), donde tiene flores en su
indumentaria y sobre la cabeza. Su mayor atributo entonces, son las flores que representan las
bendiciones de Dios, que esparce por donde pasa.
IImagen 14: Barachiel. La pintura Imagen 15: Barachiel. Cuzco, Peru.
original se encuentra en la iglesia
de Calamarca, Bolivia, ca. 1750..

Jehudiel
Jehudiel a su vez es el único ángel que no es citado ni en libros apócrifos, pero tienen
su existencia aceptada en la Iglesia Ortodoxa. Siendo representado en la iconografía
sosteniendo una corona y un azote, que representa la gloria de Dios, llamando la atención
sobre el tema de la gloria de los justos e intercediendo por la recompensa de los esfuerzos. En
la Galería Mattsies (​Imagen 16​) con una mano segura el azote recordando a los justos del
esfuerzo necesario para acompañar al señor y en la otra mano la corona, que los justos
recibieron al entrar en el reino de los cielos. Sus raras representaciones tienen también su
iconografía simplificada, como en el grabado del siglo XVI-XVII (​Imagen 17​), donde
aparece con el azote en una mano y el fuego divino en la otra, o incluso en la pintura del
Museo Regional de Querétaro (​Imagen 18​), donde sostiene el azote en ambas manos.
Jehudiel entonces trae un recuerdo, sobre autoflagelación, penitencia y recompensa,
reuniendo en sí elementos que dialogan con ese universo, pero apuntando hacia una
recompensa más allá de la vida, para los que persisten quedarse al lado de la palabra de Dios.
Imagen 16: Jehudiel. Galería Mattsies, 1680.

Imagen 17: Grabado del arcángel Jofiel, Imagen 18: Anónimo. Museo
ca. 1590-1637 Regional de Querétaro.
Sealtiel
Sealtiel es citado en el libro de Esdras (3 Ezdras 5:16). Representa la oración a Dios, y
siempre es representado rezando a Dios por la humanidad. Puede sostener el incensario como
en la Galería Mattsies (​Imagen 19​) y en la pintura de Bartolomé Román (​Imagen 20​), con
manos juntas en oración profunda, o con las manos en el pecho mirando al cielo (​Imagen 2​).
Los cristianos ortodoxos buscaban su ayuda para concentrarse en las oraciones, cuando
sufrían de distracciones en el momento de la oración.

Imagen 19: Sealtiel. Galería Mattsies, 1680. Imagen 20: Román, Bartolomé. El Arcángel
Seatiel con incensario. Primera mitad del
siglo XVII. Óleo sobre Lienzo. 207 x 142 cm.
Museo del Prado.

Grupos pictóricos
Un importante hecho en la iconografía de los arcángeles heterodoxos es su presencia
en España, pues después del Concilio de Trento se paraliza su creación es comienza a apagar
los nombres de las pinturas ya realizadas, pero la devoción de la corona española, como de
Carlos V, los mantuvo en la Iglesia del monasterio de San Jerónimo en Granada (​Imagen
21-24​). Donde la Iglesia lo permitió, controlando solamente el que no se le añadieran carteles
que los identificaran, tal como se paso en San Jerónimo, que se ve que ellos borrados y
sustituidos por los simpáticos versillos que hoy se encuentran a sus pies. Otra destacada
representación del grupo hoy está en Descalzas Reales de Madrid, una pintura de Massimo
Stanzione, Los siete arcángeles (​Imagen 25​), donde además de los atributos, los nombres
están presentes.

Imagen 21-24: Iglesia del monasterio de San Jerónimo en Granada.

Imagen 25: Massimo Stanzione, Los siete arcángeles, h.1629. Descalzas Reales de Madrid.
Como ya se ha dicho, en América del Sur, bajo la influencia de la corona española los
ángeles son muchos esplendidos en la producción imaginaria de la época colonial, para
algunos tal influencia se debe a la semejanza con otras figuras aladas que eran presentes en la
cultura prehispánica. En este sentido, la representación de los arcángeles es muy destacada, y
entre estas obras hay una famosa colección de pinturas al óleo del período colonial
colombiano, conocida como los Arcángeles de Sopó (​Imagen 26-29​) que se encuentra en la
Iglesia del Divino Salvador en el municipio de Sopó. Se cree que los Arcángeles fueron
pintados alrededor de 1650, pero el artista sigue siendo desconocido.

Imagen 26-29: Arcángeles de Sopó. Iglesia del Divino Salvador en Sopó.

Este breve trabajo sirve como un apunte sobre la complejidad de la iconografía de los
arcángeles heterodoxos, pues muchas veces pasan desapercibido en muchos análisis, pues
como no están presentes en escenas narrativas como los Miguel, Gabriel y Rafael, muchos no
los entienden como integrantes al grupo de los siete arcángeles. Creo que todavía son
necesarias muchas investigaciones que se orienten por una noción de grupo, y así localize y
divulgue mucho más obras que deben quedar olvidadas en colecciones de museos.
Bibliografia y Webgrafia:

Duchet-Suchaux, Gaston. Guía iconográfica de la Biblia y los santos. D. Editorial: Madrid:


Alianza Editorial, 1999.

Juan de Carmona Muela. Iconografía cristiana. Guía básica para estudiantes. ISTMO:
Madrid, 1998.

Réau, Louis. Iconografía del arte cristiano. Barcelona: Ediciones del Serbal, 1996.

______

Fonte: <http://www.bibliotecapleyades.net/esp_enoch.htm> Acceso al 10 de enero de 2018.

Fonte: <http://www.dionisy.com/museum/> Acceso al 10 de enero de 2018.

Fonte: <http://www.louvre.fr/en/oeuvre-notices/virgin-rocks> Acceso al 10 de enero de 2018.

Fonte:
<hhttp://www.mattsies.info/index.php/kirche-mattsies/kirche-gebaeude-bauten/innenraum-kir
che/36-kirche-ausstattung/empore> Acceso al 10 de enero de 2018.

Fonte: <http://ceres.mcu.es/pages/SimpleSearch?index=true> Acceso al 10 de enero de 2018.

Fonte:
<​http://saintandrewgoc.org/home/2016/11/7/archangels-and-angels-according-to-orthodox-christiani
ty​> Acceso al 10 de enero de 2018.

S-ar putea să vă placă și